Hacia el nuevo sistema educativo: formación e innovación educativas en el IES El Fontanal
Tomás Rodríguez Reyes Elena González Guerrero
Formación e innovación en el IES El Fontanal
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Introducción Objetivos de la formación De la LOE a la LOMCE De las competencias básicas a las competencias clave 5. Evaluación de las competencias 6. Metodologías: por tareas, por proyectos, cooperativo. 7. Tareas del curso.
©Elena González Guerrero-Tomás Rodríguez Reyes
Formación e innovación en el IES El Fontanal INTRODUCCIÓN
En primer término, partimos de una convicción personal: la educación en 2015 no puede ser igual que hace décadas. En esta reflexión es evidente que el perfil del alumno con que trabajamos ha cambiado en muchos aspectos. ¿Lo hemos hecho nosotros? ¿Lo estamos haciendo? En este cambio, la formación del profesorado se ha convertido en una de la actuaciones fundamentales para poder aclimatarse a los nuevos resortes del sistema educativo del que formamos parte. Esos cambios, cada vez, son más intensos, objetivos y, sobre todo, acelerados. De esta forma, estas circunstancias conducen a tener que desarrollar destrezas múltiples, dispares, personales y académicas que evolucionan, igualmente, de forma rauda y cambiante. Es lo que ahora se conoce como sociedad líquida, en términos de Zygmunt Bauman. Es por ello por lo que quizás debiéramos extraer los fundamentos o resortes fundamentales de las legislaciones que van articulando el sistema educativo. Queremos decir que esta propuesta formativa no nace tan solo al calor de la implantación de la LOMCE, sino de un cambio general y sistemático en los procesos de enseñanza y aprendizaje que quede fijado más allá de las futuras leyes. Parece que, en este sentido, algunos elementos han ido quedando en los currículos como “permanentes”. Uno de ellos es la educación orientada hacia la adquisición de competencias individuales, académicas, integrales del individuo. Este elemento supone un cambio no solo en la distribución de los elementos curriculares sino en los métodos de enseñanza. La LOMCE los toma como elemento decididamente sustancial, más incluso que la LOE. No podemos olvidar que la formulación de los sistemas educativos nacionales tratan de responder a las exigencias europeas que tienen en organismos como el Consejo de Europa de Lisboa en el 2000, el Consejo Europeo de Lisboa en 2009 y su Marco estratégico de cooperación hasta 2020, el Consejo Europeo de Educación y Formación de 2010, la UNESCO (1996), la OCDE, el proyecto DeSeCo (2003) o la Recomendación 2006/962/EC del Parlamento Europeo y del Consejo Europeo sus paradigmas de referencia. Todas estas propuestas y orientaciones educativas que proceden de Europa estarán insertas en esta nueva Ley o en cualquier otra que la suplantara. Es así como se explica la inclusión, por ejemplo, de pruebas externas de igual calado que las pruebas PISA.
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Por tanto, partimos de tres convicciones para comenzar esta transición: 1. La legislación, aun siendo cambiante, mantiene unas constantes basadas en las competencias (básicas, clave) y el uso de las TIC. 2. Esta circunstancia conlleva un cambio gradual en la metodología y la evaluación. → Una metodología centrada en la acción del alumno y en la aplicación de los conocimientos en diversos contextos (tareas). → Una evaluación adecuada al sistema de trabajo en el aula, que integre el mayor número de competencias clave y que las evalúe en porcentaje, no solo el profesor sino el propio alumno en una autoevaluación de su aprendizaje. 3. La necesidad del trabajo en equipo, por departamentos didácticos, que aúnen las iniciativas personales y los métodos de enseñanza, que dinamicen la creación de recursos compartidos y ajustables a distintos niveles.
OBJETIVOS Esta actividad nace como respuesta a las necesidades de formación que ha manifestado el claustro que conforma el centro. 1. Conocer las novedades en el nuevo sistema educativo a partir del curso 2015/ 2016 y reflexionar sobre las mismas. 2. Analizar los cambios curriculares en la disposición de los contenidos, criterios y estándares de las distintas materias. 3. Profundizar en el concepto de competencia clave, su concepto, evaluación y enseñanza. 4. Conocer métodos de trabajo en equipo, cooperativo, en grupo para el mejor desarrollo de las sesiones en el aula y la gestión de la misma. 5. Poder diseñar tareas concretas, contextualizadas, con los nuevos elementos curriculares y haciendo uso de las TIC.
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Formación e innovación en el IES El Fontanal DE LA LOE A LA LOMCE En el primer bloque de contenidos trataremos de abordar cuestiones estructurales que la LOMCE implantará para el curso siguiente. Cómo se disponen los ciclos, las etapas, en definitiva, cuál será el horizonte de expectativas en que nos moveremos como docentes y qué relaciones existen entre sus partes. En esquema: -
Ordenación de las enseñanzas en ciclos. Nuevo concepto de currículo incluyendo los estándares de evaluación. Evaluaciones externas a final de cada ciclo. Programas de Mejora del Aprendizaje (PMA) que sustituyen a la Diversificación Curricular. El desarrollo curricular de cada materia por ciclos, en la ESO, y cursos en bachillerato: contenidos, criterios y estándares de aprendizaje evaluables.
Con estas premisas, comenzamos a tener una idea general de las pretensiones del sistema en su conjunto. DE COMPETENCIAS BÁSICAS A CLAVE Una de las novedades más sugerentes y notorias es el cambio de nominación de las competencias básicas a competencias clave. No solo existe un cambio de tabulación sino de número de competencias que tendremos que desarrollar. Trataremos de conocer las características conceptuales de cada competencia, en qué se ha renovado, qué tipo de dimensiones ofrece, cómo se orienta en tres dimensiones del conocimiento (saber, saber hacer y saber ser) y de qué forma se vincula con los contenidos, criterios, estándares y objetivos de las unidades didácticas y programaciones. Por lo demás, debemos tener en cuenta que las competencias atraviesan todas las etapas educativas, desde las edades iniciales hasta las de bachillerato. La LOE no había sido muy precisa en este cometido, sin embargo, ahora se manifiesta abiertamente que las competencias clave son aquellas que no se abandonan a lo largo de la vida y que, por tanto, deben estar presentes en todas las etapas del sistema educativo. Tanto la LOMCE como el Real Decreto 1105/2014 establecen el tipo de competencias; sin embargo, es en la Orden ECD/65/2015, en el anexo I, “Descripción de las competencias clave en el sistema educativo español”, el documento en el que podremos extraer mayor información al respecto.
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Formación e innovación en el IES El Fontanal EVALUACIÓN DE LAS COMPETENCIAS Para poder evaluar las competencias clave tendremos que utilizar los procedimientos adecuados y los instrumentos que mejor nos ofrezcan datos objetivos y evaluables. Por tanto, cuando la acción educativa cambia de método esto implica nuevas formas de evaluación sustentadas por instrumentos acordes. En la Orden mencionada, exactamente en el Artículo 7. La evaluación de las competencias clave, encontraremos las primeras orientaciones metodológicas como paradigma para el desarrollo de este módulo. De un tiempo a esta parte, y teniendo en cuenta el criterio de evaluación continua e integral, se ha ido imponiendo la rúbrica como el instrumento más versátil para poder evaluar, en cantidad y cualidad y de forma objetiva, las competencias clave. Por la facilidad tanto para elaborarlas como para relacionarlas con los indicadores evaluables, trataremos de centrarnos en la elaboración y utilidad de este instrumento que, junto a la tarea de casa, las pruebas escritas y orales puede convertirse en un elemento habitual de nuestra tarea diaria.
METODOLOGÍAS El trabajo por tareas o proyectos y el trabajo cooperativo en el aula se nombran literalmente en las disposiciones normativas como soluciones validadas para desarrollar la enseñanza por competencias clave. Sin duda, todas estas estrategias se están imponiendo por las posibilidades que ofrecen de atención a la diversidad y de mejor gestión de las conductas en el aula. La competencia aprender a aprender así lo dicta: “Aprender a aprender se manifiesta tanto individualmente como en grupo. […] De ahí que la competencia de aprender a aprender se adquiera también en el contexto del trabajo en equipo. […] se ponen de manifiesto cuando se trata de averiguar qué es lo que hacen los demás en situaciones de trabajo cooperativo”.
Iniciaremos la reflexión utilizando el Anexo II de la citada Orden, esto es, las Orientaciones para facilitar el desarrollo de estrategias metodológicas que permitan trabajar por competencias clave y podremos, en este punto, comenzar a establecer vínculos con los contenidos ya asimilados de los bloques anteriores.
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Formación e innovación en el IES El Fontanal TAREAS El curso presenta dos sesiones presenciales; una de presentación de la Guía del curso y de la plataforma del Aula Virtual del CEP de Lebrija y otra, al término del curso, en que tendremos una sesión de reflexión y puesta en común de los materiales, las lecturas, las tareas y cualquier otra cuestión que haya suscitado el desarrollo del curso. Por otro lado, el grueso del tiempo de trabajo se realizará en la plataforma virtual del CEP de Lebrija, en un curso diseñado por módulos en los que los alumnos irán respondiendo a los foros de trabajo y a las tareas que, en cada módulo se propongan. La tarea final consistirá en el diseño de una tarea que incluya los nuevos elementos curriculares y que demuestre que el alumno ha aprehendido y sabe poner en práctica los aspectos fundamentales del curso.
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