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CARTAS QUE PARTICIPARON EN EL CONCURSO:
Señorita Pilar
Inolvidable señorita:
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Rompo hoy mi corto silencio con el propósito de contestar su amable cartica que recibí en días pasados, de lo cual paso a puntualizarle someramente lo más importante.
Tu papá y yo tuvimos una pequeña conferencia con relación a mi divorcio y mi posible matrimonio con Ud., en la cual manifestó voluntariamente estar dispuesto pasar a Ciudad Bolívar para interesarse en finiquitar pronto, el asunto de mi divorcio. Pero, como del contenido de su carta se desprende una pequeña ironía que está muy lejos de ser una justa recriminación a mi conducta para con Ud., he de hacerse saber que jamás ha sido mi intención herir susceptibilidades y menos en quien tengo cifradas mis más amplias esperanzas para mi futura esposa.
Tiene Ud., sobrada razón cuando dice que sus padres la recibirán flaca, enferma, y todo lo que se le ocurrió decirme en su carta, pero también es cierto que después de esa paternal obligación de que Ud., habla, existe otra no menos importante en el lazo matrimonial, y así encontramos que después de unos buenos padres, nada más satisfactorio para las personas de sentido común, que un buen esposo o una buena esposa. La sensibilidad humana sufre en muchas oportunidades el dolor de la duda, pero esto se manifiesta cuando no se tiene confianza en las personas, que ha exteriorizado, como yo, todo el cariño y amor hacia un ideal sublime que habrá de ser objeto de la dicha. Yo no he tenido jamás guitarras ni muchachas que no sean aquellas forjadas en la nostalgia de mi ausencia con el calor de tu recuerdo, y si he estado bajo el influjo de quien no merece mi cariño, ello ha sido un lógico roce momentáneo que en nada ha roto la moralidad de mis sentimientos, ni el amor que siempre le he profesado.
Puede que Ud., pondere mi estado de ánimo, jamás había tomado la pluma con tanta tristeza, por tratarse de conservar la alegría de mi alma encumbrada en sentimientos de honestidad y con el deseo de hacer realidad un ideal que vive en mi corazón como una lámpara votiva.
No podemos desconocer, tanto Ud., como yo, que entre nuestros familiares ha existido siempre un buen entendimiento y una mutua comprensión, que es una clara manifestación de gentilicio y de la cual debemos estar agradecidos, más aún, puede estar segura que yo sabré y sé reverenciar su virtud, con el más regio orgullo de su esperanza. Cuando yo ofrezco una cosa la cumplo, por eso me duele que se dude de mi palabra, aun cuando yo sé que Ud. jamás ha creído que yo sea un hombre hecho para cometer errores.
Para su debido conocimiento, había resuelto invitar a su padre, para que fuéramos a Ciudad Bolívar a darle fin al asunto de que le hable anteriormente, pero en virtud de la decisión que Ud. manifiesta en su misiva, resolví guardar la invitación para otra oportunidad.
Alberto Rodríguez
Carta de amor escrita por mi padre, arreglada para concursar por Maritza Rodríguez. San Diego Carabobo Venezuela
Valencia 19 de enero de 2023
Amor ideal
Querido amor: Después de tratar de soñar e imaginarte, por años, me dirijo a ti, para confesarte mis inquietudes.
Para mí eres ese amor, que, sin medir palabras, rozas mi esencia y perfumas mi entorno, con dulce y agrio aroma de pasión, lujuria y ternura.
Eres esa sensación de ahogo y desespero, combinado a la vez con una dulce sensación de paz y quietud, que mina y se apodera de cada fibra de mi ser.
Y cuando penetras en mi alma y suspiras al oído esas dulces palabras que alimentan mi universo, siento el crepitar del fuego, que arde en mi corazón y se extiende por mi cuerpo, como rio que ha esperado por años, que nuestros causes se entrelacen.
Espero me entiendas y crucemos nuestras esencias, para compartir por siglos nuestras ondas de amor ideal.
Gracias amor ideal, nos encontramos.
Tuya por siempre
Querido Amor, Te nombro Caleidoscopio de emociones ya que me has ido mostrando tus facetas. Placebo, pasión, ternura… Fruta fresca recién cortada que aún mana la savia del tronco que le inyectó vida… Se ensancha mi alma sensible y descubre que, en tu presencia, el enorme y vasto Universo se cohesiona, gira, se expande. Eres el misterio más bonito de toda la creación. Ciertamente apareces y repentinamente vuelves a tu gaseoso estado ¡Quien te mantiene a su lado realmente te da por sentado! Arrastras hasta la locura y contraes cual caracol en su morada que oculta o pretende protegerse con su armadura.
Me entregué sublime desconociendo género y vagué libremente en los albores del alma. Fui despertar tardío al placer ignoto que desplaza sentidos y enmarca relaciones. Eres AMOR, esa fuerza buscada, que nos impulsa y enlaza. Eres AMOR, trocitos que Dios deja escapar sin propósito alguno, como si se quisieracual crisálida- desprender de una capa que abundantemente le cubre. Eres AMOR, ese beso inocente que un bebé estampa en su padre y silenciosamente murmura un Te Amo. Eres AMOR, colibrí que me visita cada mañana y embiste hacia una flor cercana y desde su prolongado pico le extrae su alma, liviano aleteo sostiene como ráfagas de fuerza que maravilla y encanta.
No pretendo apresarte ni siquiera conquistarte. Te he disfrutado, quizá brevemente, más tu dulzor sostiene mi existencia en el espectro de un visor que insiste en acompañarme. Sostengo la mirada hacia mundos de otras dimensiones que descubro de noche en mis caminatas, que cual magneto me fija y deslumbra por sus arabescos frisos. No he logrado sorprenderte en esos tus mundos, más persevero y lucho por descorrer el velo que transparente delimita tu dimensión de la mía. Sonrío al destello de tus formas indefinidas y me dejo abrazar cual amante furtivo que espera la noche para encontrarse contigo.
En el mar también te busco, de lejitos… persiste el miedo al azul profundo al que no me dejo sumergir de seguido. Amarillos y naranjas que el amanecer me brinda en copas que desbordan plenitud y olvido. Arenas blancas, en las noches, frías… el sol las va tornando tibias y abrasan los cuerpos de quienes osan contemplarte, desafiando el tiempo, obviando el clima. Tu fuerza avanza y sucumbo al hastío. Me arrojó a tus brazos y bendigo tu aliento que entibia mi alma y conforta mis sentidos. Te palpo y sin verte invoco tu caricia envolvente y llena de miedo ansío no perderte. Eres de las olas que vi en Isla Negra brutalmente chocar contra los riscos y volver temerosa al vaivén prohibido. Confieso que te he buscado incansablemente toda mi vida. A veces te encuentro en una mano amiga, en la risa de mi niño, en la dulce mirada de mi mascota querida. Creo que he buscado en erróneos lugares tu sentir en el mío.
Lejos de encontrarte pienso que te he perdido… más no descanso hasta verte conmigo.
Tuya,
Marlene Valbuena
De: PAPÁ
A: Mis hijos (Con copia a cada uno)
Hijitos míos, sangre de mi sangre. Si bien es cierto que desde tiempos inmemoriales soy el enemigo de cada historia que buscan narrar, hay una verdad que no se puede ocultar. Durante mucho tiempo fui, en aquel entonces, un Ángel con todas las de la ley. "Estrella de la mañana", me llamaban, día tras día resplandecía junto a mi Creador, pero un día el ego se me subió a la cabeza. Qué vergüenza... Recuerdo discutir, y al siguiente segundo ser arrojado a la inmensidad de mi nuevo reino, con tanto odio en mi ahora corrompido corazón. Lo que quiero que entiendan, es que, mi amor por ustedes es más grande que mi nombre, que mi reino, y que todo lo que conozco. Puedo amar como un ángel, pero a la hora de odiar a quienes les hacen daño, soy el demonio al que todos temen y buscan por todos los medios desterrar. Algo les digo, hijos míos, ustedes son mi Estrella de la Mañana ahora. Lo que un día fui, ustedes no lo serán jamás, lamentablemente mis decisiones fueron las peores, soy un rebelde, y pago por ello todos los días, y aunque no lo crean, me carcome la conciencia de saber que nunca podrían conocer algo más que el azufre y vientos incendiados de su hogar, nuestro hogar. Caelis ignis, era lo que merecía, todo por desear ser algo que no era. Mi nombre ahora es diferente, ya nadie sabe cómo llamarme, sin embargo, todo lo que soy ahora, lo soy y lo seré por y para ustedes. No soy un padre ejemplar, pero amo como solo un Ángel puede amar. Son ustedes, mis engendros, los que mantienen mi ser inmortal, aún con algún pobre rastro de amor en sus cavidades.
Sin más que agregar, criaturas mías, su padre les ama con todo el fuego de los 7 círculos. Firma,
Lucifer "Estrella de la Mañana".
Amor de Ángel, Odio de Demonio. Autora: Mariana Núñez.
Naguanagua Venezuela
Querido hijo:
Hoy de nuevo me dirijo a ti como cada año desde que te tocó mudarte a ese otro plano.
Hoy estaríamos celebrando un año más de tu nacimiento.
Y me pregunto: Qué estarías haciendo? ¿En qué lugar del mundo andarías? ¿Habrías alcanzado tus metas? ¿Cuál sería el balance a esta fecha?
Me ilusiona pensar que las respuestas a esas preguntas me llenarían de orgullo como ocurre hoy con tus hermanos. ¡Sin duda alguna sería así!
¿Pero, sabes? ¡A pesar de que tu tiempo de vida entre nosotros fue corto, también fue maravilloso!
Fuiste tan especial que hasta tu despedida de este plano fue también especial.
Y esa huella seguirá tatuada en nuestras vidas por siempre.
¿Y cuándo nos toque pasar a ese otro plano donde ahora te encuentras... nos reconocerás? ...nos abrazaremos de nuevo?
Por ahora eres ese otro ángel guardián que nos acompaña y protege.
Desde mi alma abrazo a tu alma con infinito amor y bendigo cada uno de los 6484 días que permaneciste entre nosotros
Te amo con la intensidad propia de una madre que sueña con el abrazo amoroso del hijo ausente.
¡Inmensamente agradecida por la dicha de tenerte!!y por haber escogido este hogar para cumplir tu misión.
No solo Dios bendice tu espíritu, también como alumno Salesiano estás bajo el amparo de María Auxiliadora y Don Bosco. Como guadalupano tienes la promesa de la Virgen de Guadalupe.
Pero en ese otro lado donde ahora te encuentras cambió el día de celebración porque es la fecha en que llegaste allá cuando se celebra la verdadera vida.
Así que, asumiendo esta realidad, sólo queda agradecer al Creador que un día como hoy llegaste a nuestro hogar a compartir un espacio de tiempo y experiencias como parte de tu Misión.
Mucho aprendizaje dejó tu estar aquí, no obstante, esto no es consuelo ante tu inesperada partida que nos sigue produciendo infinita tristeza.
Se nos arruga el corazón, nos flaquea el espíritu y el alma se entristece en cada fecha como ésta porque el tiempo no ha logrado su objetivo de ayudarnos a superar tu ausencia.
Y, si de asumir esta circunstancia se trata, lo hacemos con la serenidad que se impone ante lo irremediable, ante la firme convicción de que vives en nosotros a través del recuerdo permanente como el hijo que trascendió de plano pero que nos acompaña en cada instante de nuestras vidas; como el ser de luz que intercede ante el Creador para que ese nubarrón que significó tu ausencia se diluya haciendo nuestra cotidianidad más llevadera y continuemos aprendiendo a vivir con el corazón roto.
Continúa haciéndome saber que sigues allí tan cerca, acurrucado en un rinconcito de mi corazón, sin hacer mucha bulla, pero dejándote sentir, velando nuestros sueños, recibiendo todo nuestro amor. Allí seguirás por siempre amado hijo.
Papá y mamá te bendicen con mucho amor.
¡Eres nuestra historia de amor eterno!
Mamá
Cristina Grau.
Diego Carabobo Venezuela
Valencia, 30 de septiembre de 2022
Querido Javier:
Que dicha tener otro hijo extraordinario. Llenas nuestras vidas de momentos inolvidables, dejas huella con tus actuaciones...
Este día recordamos esa dicha que tocó nuevamente a nuestra puerta con un propósito claro: ayudarnos a entender que hubo una partida triste pero momentánea en el tiempo del Creador y que vino a decir "aquí estoy para ayudarles con esa ausencia no deseada,". .......
Ciertamente tu presencia contribuyó a mitigar un poco aquella tristeza.
Contigo aprendí realmente a ser mamá. Mi corazón se conmueve solo con recordar tantos momentos gratos vividos y sentidos que ahora me sirven de inspiración para continuar mejorando cada vez más en mi transitar por este plano.
Gracias por ser, por estar, por existir. Por ser quien eres.
Con esa personalidad única que te caracteriza. Por tu tesón al perseguir tus metas, por tu preocupación y cariño hacia nosotros...
Deseamos para ti una vida plena, una vida de aventuras incomparables para disfrutarlas como sabemos te gusta.
Cada día nuestro está lleno de bendiciones para Uds. y cada día agradecemos al Creador por el privilegio de tenerlos.
Alberto, Daniel y tú, llenan todos los espacios de nuestros corazones. Y cada uno, desde el lugar donde se encuentra, constituye fuente de inspiración en nuestro diario transitar.
Bendigo la decisión de recibir tu llegada a nuestras vidas.
Gracias por ser, por existir, por formar parte de esta familia.
Un hijo es lo más hermoso que ocurre a los padres y si se han cultivado con el abono adecuado surgen los frutos bendecidos por el Creador...
Eres un ser irrepetible, con una personalidad bien definida, de nobles sentimientos, preocupado, responsable, servicial, con criterios bien formados, independiente y con metas súper claras.
Estás en la edad en que la madurez se hace presente y muestra los cimientos que constituyen la base de nuestras acciones futuras.
Eres esa otra razón de vida que nos hace sentir bendecidos y orgullosos. Un punto de apoyo en momentos de preocupación, dudas, dificultades, pero también de motivación y estímulo permanente.
Dirige tu vida en la dirección correcta y mantén en tu corazón un espacio para papá y mamá que desde aquí te envían las mejores vibras por un futuro lleno de éxito continuado y paz infinita.
Celebra la vida, tu vida, que nosotros desde aquí te acompañamos, como lo sentimos: desde nuestro propio yo.
¡Te amamos con el alma, el corazón, la mente, el espíritu... y esperamos poder acortar la distancia física para sentir el cálido abrazo del hijo amado y celebrar juntos, como lo solíamos hacer... en familia!
Dios lo permitirá, en ello confiamos.
¡Feliz Cumpleaños y que el Creador te permita lograr todo lo que te has propuesto sin dejar de ser la persona tan hermosa y especial en que te has convertido!! Y recuerda que todos nacimos para ser felices, no para ser perfectos.
Besos, mimos, abrazos y larga y exitosa vida para ti.
Con inmenso amor,
Mamá
Valencia, 20 de septiembre de 2022
Querido hijo
Este día está lleno de agradecimientos al Creador por permitir tu llegada a nuestro hogar. Sé que en el mundo hay otros seres como tú que vinieron a alegrar la vida de sus seres queridos. Sin embargo, para nosotros, eres único e irrepetible...Celebrar un año más de vida de quien vino a llenar nuestros espacios es una gran bendición.
No existen palabras para expresar en su justa dimensión todo lo que papá y mamá sienten en lo más profundo de su corazón al tenerte como hijo.
Tu inteligencia, responsabilidad, sentido de compasión hacia los otros, verticalidad, preocupación por tu salud y la de los tuyos, consideración y respeto hacia jefes y subalternos, don de gente y esmero por superar cada día tus propias marcas, son atributos logrados por méritos propios y nos llenan de inmenso orgullo.
Y es que esos atributos minimizan las sombras que en cada ser humano coexisten con sus luces pues la perfección solo se encuentra en la Divinidad.
Además, tener un hijo responsable, preocupado, sensible, cariñoso y gentil supera todas las expectativas que cualquier madre tiene con respecto a sus hijos. Y aun cuando no esté al nivel esperado, como madre siempre estaré para tí.
Celebra la vida, tu vida, que ahora es cuando hay motivos para hacerlo.
Recuerda que la magia de cada persona está en su corazón. Sigue siendo tú, genuino, único y especial porque como escribió alguien alguna vez " todos los hombres mueren, pero no todos realmente viven", así que piensa sueña, cree y atrévete como hasta hoy, como hasta ahora, porque " el mundo entero se aparta cuando ve pasar a un hombre que sabe a dónde va".
Sigue siendo tú... sigue haciendo lo que te hace feliz porque tu felicidad también es la nuestra. Que este nuevo cumple sientas el paso del tiempo como portador de grandes experiencias e incontables aprendizajes. Que vivas cada día con la ilusión de algo nuevo para disfrutar y recordar... con muchos proyectos a cumplir y con el éxito asegurado en cada uno de ellos.
Contigo aprendimos que "lo que da sentido a la vida es ser auténtico, humilde, fuerte y poder compartir lo mejor que hay en nosotros para tocar la vida de otros. "... Gracias por ello!! Recibe desde la distancia las mejores vibras por tu bienestar.
Te queremos mucho y te enviamos un fuerte y muy sentido abrazo con todo el amor de nuestro mundo, como lo mereces, porque la distancia física no impedirá que esta "buena vibra" arrope tu corazón.
¡Dios te bendiga y siga iluminando tus días, tu mente y tu corazón como hasta ahora para que continúes sintiendo la satisfacción del deber cumplido y de años bien vividos porque eres un Triunfador!!
Dios te bendiga, te cuide y te proteja porque con tus acciones has hecho méritos para ello.
Feliz Cumpleaños y que la magia de este día permanezca siempre en ti…
¡Bendiciones ilimitadas!! Te amamos.
Valencia, 14 de febrero de 2022
Querido mío:
Hoy celebramos un año más compartiendo nuestro andar por esto que llamamos VIDA.
Y en esta celebración nuestro agradecimiento, en primer lugar, al Creador por todas las vivencias que cada día fortalecen nuestra relación
Cada 14 de febrero revivo momentos, situaciones, experiencias inolvidables, de esta vida juntos.
Un viaje que emprendimos donde solo llevamos un Morral con mucho Amor, Comprensión y Respeto.
Un viaje que nos sorprendió con momentos, situaciones, experiencias inolvidables pero que llegaron para permitirnos valorar la solidez de nuestra unión. Luces y sombras han habido en esta relación que enriquecen este encuentro afortunado...o ancestralmente planeado???
Dicen que las almas que se reencuentran y se reconocen nunca se sueltan: ni con la distancia, ni con el silencio, ni con las vueltas que da la vida...
Más que envejecer juntos hemos encontrado espacio para disfrutar como niños!
Es la herencia que dejaremos a nuestros hijos.
¡Esos hijos maravillosos que nos llenan de orgullo y de quienes hemos aprendido tanto!
¿Podemos pedir algo más??
Solo agradecer, agradecer al Altísimo, porque la vida ha sido generosa con nosotros y esta unión nos ha proporcionado un aprendizaje único.
Un aprendizaje que está grabado en nuestros corazones y que nos indica que el SÍ de ese 14 de febrero fue la mejor decisión en nuestras vidas.
Por demás está decir que el balance ha sido positivo y que nos animaría a repetirlo si para nuestra próxima venida a este plano se nos presenta la oportunidad.
45 años desde que elegimos continuar juntos: Yo elegí continuar contigo.
También tu elegiste seguir conmigo. Entonces formamos nuestro hogar con un mismo ideal
Y llegaron los hijos que serían la prolongación de nuestra existencia. Así que hoy las gracias por estar cada día juntos surgen espontáneamente en cada uno de nosotros. Este "confinamiento" ha significado una verdadera prueba para nuestra relación. Has sido hasta mi cuidador, además, en momentos requeridos y, si de compañía se trata, es algo de lo que no carecemos. ¡Existe una verdadera compañía mutua!
No ha habido nada que descubrir cómo le ha sucedido a otras parejas quienes con el agite de la vida dejaron escapar momentos, situaciones, oportunidades que ya no pueden recuperar y en ese estar unos con otros han descubierto a la verdadera persona que les acompaña. Algunos lo celebran, a otros les decepciona.
En nuestro caso ha servido para confirmar que la elección hecha ha sido un acierto y aún queda mucho por disfrutar y seguir experimentando. Hay profundidad en los sentimientos, sigue habiendo camaradería, juegos, bromas, pero, por encima de todas las cosas, continúa presente el SI que un día selló nuestro compromiso de vida.
¡Elegimos estar juntos sin sospechar que sería para siempre y así continuaremos hasta que nos corresponda porque el tiempo pasa tan rápido como el viento, y aun cuando nos arropen los años, el entusiasmo por la vida juntos sigue presente!
De mí para ti y de ti para mí: ¡Feliz Aniversario!!
Guacara, 18 de enero de 2023
Querido Amor…
Te extrañará recibir esta carta. Solo léela y entenderás.
Mi afán por olvidarte ha sido infructuoso. Otro año ha pasado y continúas ahí, ceñido a mis huesos como el que pretende encontrar rastro de lo que un día fue. El olor a café sigue siendo la excusa para recordar esos momentos en ti, contigo, nosotros.
Pienso que hoy sería la ocasión exacta para tenerte deambulando en este ambiente. Ilusa de mí.
La “Dama de noche” volverá a darme una de sus flores, regalo que me hiciste unos días antes de nuestra despedida. Las veces que ha florecido he sentido tu inminente energía jugueteando con el móvil que me regalaste y que se mantiene en la ventana sonando cual jilguero juguetón. Hasta he llegado a pensar que estás aquí sin estarlo. Tu sola presencia alborotaba a los Duendes ya las Ondinas que dormían en la placidez de la quietud. Por eso pienso que jamás quisiste despedirte al darme ese obsequio, algo quedaría evocando la nostalgia de tu presencia en este recinto.
El tiempo pasa y no dejas de husmear dentro de mis pensamientos y de mi alma. Tus ojos se asoman a cada instante por el velo del silencio como cuando detrás de un árbol aparecías sonriendo. Tu aroma se mantiene intacto en el aire que respiro y en cada parte de mi cuerpo. No, no he podido olvidarte. Eres guardián de mis pasiones, cofre de mis anhelos y luz en los amaneceres.
La tranquilidad del lugar invita al reposo, la lectura yla meditación por lo estático de su estancia. La ventana por la que tanto te gustaba divisar las montañas siempre está en flor como esperando que algún día puedas asomarte por ella e inundarla de tu energía.
Estoy consciente que esto no puede ser, pero cómo le explico a mi cuerpo que aquel ser en el que podía descansar sus ansias de amar ya no volverá. No encuentro talanquera para detener este sentimiento que, como hoy, se escapa a sabanear.
Siempre tuya
Adelaida Contreras
PD: Sigues siendo la música que le da ritmo a mi corazón Carmen Pacheco. Guacara, Carabobo Venezuela
Hola amor
Sé que es muy pronto para hablarte. Disculpa mis ansias de saber de ti en estos momentos. La ausencia es tanta que siento a mi corazón arrugarse como manga de pobre buscando sacar una gota más de café por esta separación. Los amigos también te extrañan y bajan la mirada cuando me los encuentro.
En el trabajo no paran de preguntar cómo me siento al respecto, no entienden lo de tu partida. Por cierto, estuve en la empresa donde metí los papeles. Sé qué me vas a decir –Esa compañía no vale la pena debes aspirar a algo mejor- pero conversé con ellos y aumentaron unos ceros así que empiezo la semana que viene. Anoche cené con tu mamá. Anda taciturna extrañándote mucho, al igual que tus hermanos. El tema de La cena fuiste tú. Tu hermana nos contó de cuando se escaparon y que al regresar los esperaban tras la puerta correa en mano. Fue uno de mis predilectos porque siempre has sido muy inventor. Todos tenían una anécdota distinta contigo para contar. Reímos y también se nos salieron las lágrimas. No sé si sea beneficioso para ellos y para mí que los continúe visitando. Lo cierto fue que salí extrañándote más.
Se aproximan los Carnavales ¡Ah Mundo! Cuántos recuerdos me traen esos días cuando nos lanzábamos agua, harina, pintura (eso lo hacía el vecino de arriba, ¿recuerdas?), bastante cuero que llevó por acabar la harina de su mamá porque nosotros éramos más decenticos al jugar con agua nada más y terminamos rumbeando con comida, caña y baile. ¡Qué tiempos aquellos!
Algo que no entendí fue que te juntaras con aquellos muchachos a los que siempre les habíamos sacado el cuerpo. No quisiste contestarme aquel día que te pregunté para dónde ibas. Yo sabía que saldrías con uno de ellos, para ese momento estabas muy reservado. Una noche tu mamá me dijo en secreto que no veía futuro a esa relación nueva tuya, le dije - ya está grande y decide con quién estar.
Por cierto, antes de irme te comento que la semana pasada fui al médico. ¿Recuerdas los malestares que tenía y que no entendíamos qué era?, me confirmaron que estoy embarazada de tres meses. Tan flaquita que soy y la barriga no se notó. Espero que saques tus ojos. Quisiera que estuvieras para criarlo juntos.
No lo buscábamos, pero Dios nos lo mandó, quizás para ver si lo nuestro se solucionaba, pero lo vine a saber demasiado tarde, te habías ido.
Espero que desde el cielo lo cuides.
Está oscureciendo y me tengo que ir. Volveré muy pronto.
Sin firma Carmen Pacheco.
Guacara, Carabobo Venezuela
Querido Andrés
¿Cómo estás? ¿Sigues trabajando en la licorería, como te portas? Hoy releí tu última carta…
Por aquí en esta latitud, es medio día, yo, sigo sin entender mucho tu crítica, a mí me gusta contar cosas de vez en cuando, para mí, los días son todos diferentes, como los tuyos lo son, así es que, un día la energía desborda la piel, otros, la luna gotea su miel sobre mí y escribo, sin orden, sin reglas, quizás como tú lo insinúas, sin rumbo; luego otros días, estoy tan desesperada que tomaría el primer barco que pasara por este río y le pediría que me dejara viajar en su proa, hasta llegar al lugar donde no hubiese idiomas, ni límites, ni reglas, ni puntos, ni rayas como decía Aníbal Nazoa en su poema; pero, vuelvo en mí, y sé que no existe ese lugar más que en la imaginación. Yo te repito hasta la saciedad que a mí realmente no me fastidia nada, generalmente todo me gusta y todo me asombra con gratitud cada día en donde yo me encuentre, aquí, allá, yo te escribo mis cosas, reflexiones y sentimientos y aunque no espero respuesta, a veces siento levemente cómo se asoma un comentario indiferente o duro sobre el tema, lo que me indica sin dudas mi historia paso por tus ojos, un poco de mi locura, de mis letras y eso me gusta, me enseña, me guía.
¿Me vistes en esa foto? Yo, no recuerdo porque, pero quizás mis ojos estaban saliendo de una de esas depres que a mí me pasan, donde como dicen los franceses, te desinflas, te reduces a una gota, una gota parecida a la del poeta Rosales, una gota que asoma y que no sale, solo espera entre las pestañas, como quien espera detrás de la puerta, viéndose tímida en un espejo cómo se va quedando sin cuerpo, como va dejando de sentir, como detrás de ella otras empujan apresuradas por querer salir y ver el mundo, arriesgando su destino de gota al caer en este río, las pobres o se pierden, o simplemente son absorbidas en una servilleta de papel, para desaparecer en el primer depósito de basura del camino. Por aquí, hermano, te repito, yo paso todo el día entre trabajo y trenes, preguntándome cosas, que siempre tienen respuestas, en el aire, en la mente de los niños, de la vida, pero a veces no en la mía. También sé que la gente no tiene tiempo en estos momentos para detenerse en existencialismos pasados de moda, en fin, así yo y "mi absurda tristeza" dice un amigo, yo le respondo, como si yo, no tengo ese permiso de lo divino, de tener una tristeza…
No dejes de escribirme, aún faltan dos años para mi regreso, aunque sé que también el silencio es una manera de comunicar, tus comentarios siempre los espero, saluda a tu Elvira, yo, espero llegar para la boda sin falta.
Mi sincero afectuoso abrazo
Ligia Acuña. Anzoátegui Venezuela
¡Mis muy queridos todos!
Hoy primer día del año
Por medio de la presente, escribo a todos los amigos ocultos en esta lista.
Les pido disculpas si la adversidad me hizo cometer algún pecado, si me equivoque con mis pensamientos, si las cosas que me mostraban una cosa significaron otra, pido disculpas si me equivoque juzgando el amor de otros, pido disculpas si aun estando dentro me sentí fuera de todo, pido disculpas por querer sin preguntar, a quien no pedía ser querido fue solo la platónica Idea de la Idea en sí misma.
Pido disculpas por tratar de vivir, involucrando a quienes ya tenían su vida definida, pido disculpas si quise ayudar a quien no quería ser ayudado, pido disculpas cuando pedí auxilio sin saber pedirlo y nadie se dio cuenta de mi naufragio.
Pido disculpas sinceras por AMAR con torpeza y sin saber hacerlo, pido disculpas si perturbe la acción creadora de algún amigo. Y me despido como siempre soñando la paz.
Confesiones de una necia en el olvido: San Antonio del Golfo, 25 de enero de 2012
Mi querido Inocencio:
No sabes cuánto me encanta escribir esa frase: mí, mío, pronombre posesivo; querido, amante, mi hombre; Inocencio, tú, conmigo, aquí, allí, donde sea, por siempre…
Así escrita me perteneces, y nadie, nunca, podrá arrebatarme su significado, su valor para mí… Cuando la escribo puedo sentir tu susurro, allí, cerca, en mi oído.
Siento tu aliento, tu olor, tu tacto, todo al unísono. Sensaciones que quedaron grabadas en mi memoria, tatuadas sobre mi piel y no lamento decir que para siempre.
Ahora, pudiera cerrar los ojos y soñarte aquí, cerca, contra mí… Animar a tus dedos iniciar su recorrido; tus labios danzar exigentes sobre los míos; tus brazos cercándome, arrinconando mi cuerpo contra tus gemidos. Me alegra mucho sentir esto, ¡estoy viva y quiero seguir así! Cansada, pero viva; anhelante, pero viva; lejos de ti, pero viva; viva…
Te prometí en tu cumpleaños inventarte un cuento, y lo hice. Solo esperaba hacerte feliz. ¿Recuerdas…?” Hola, soy yo, Oriana”. No quiero que te desilusiones, pero ya te había dicho que no tengo historias ocultas, solo esta. No cobijo romances secretos, ni pasiones ilusorias con desconocidos. Como te dije, te inventé un cuento y mi intención fue hacerte vibrar, olvidar, anular la distancia que nos separaba y ser los amantes perfectos a través de las letras danzantes de mi oscura y pervertida imaginación.
¿No me crees? No, no es un invento, cuando tengas tiempo consulta Oriana1983 en Yahoo y la clave es 906090. Lamento desilusionarte, pero es una mentira que no me alegraba sostener, quería llegar a ti a través de mis letras escarlatas y hacerte sentir, pero confieso que esta mentira no me hacía feliz. Sí, me hacía suspirar, desearte más, pero por el mismo hecho de no tenerte cerca, mi esencia vital se encuentra a punto de expirar…
Te distraje por un tiempo… ¿no?, pero prefiero que me multipliques en tu imaginación, que seamos todas yo danzando a tu alrededor… no ella. Anda, recuerdas cuando te ronroneaba y te suplicaba “déjame masturbar tus oídos con mil suspiros locos de mis labios bandidos”. “Déjame esculpir con besos de fantasía el camino a tu gloria”. “Déjame cumplir tus deseos ocultos y descubrir los anhelos que escondes muy dentro de ti” … ¿Lo recuerdas?
¿Desilusionado?, ¿molesto…? ¡Perdóname!, ¿sí?, solo quería que la distancia se hiciera nada, y el tiempo y la misma distancia no importara… Solo soy yo, así, la de siempre, tu amante sin condiciones, la mujer que conociste en ese pueblo olvidado, sin memorias… Yo, tu amor incondicional… Por favor, vuelve a mí… ¡Oriana no existe!
Creo que dejé pasar mucho tiempo… Las cosas aquí siguen igual, no quiero decir que peor, pero la desesperación está haciendo presas fáciles en mis debilidades… Anda, déjame saber de ti y dime que me perdonas… Por favor, olvídala y vuelve a mí…
Desesperada y rota.
Anastasia
San Antonio de los Altos. Edo. Miranda-Venezuela
TEOTISTE:
Amada Teotiste... Imposible esconder este amor que tiene todos los colores, que rebasa el arco iris, que amaina la luz, sube el efluvio sanguíneo, la descomposición espectral luminosa de las fuentes, los haces solares casi atraviesan la no transparencia de los cuerpos, que esperan ser bañados de la claridad de tu sonrisa presente y que está en este corazón que imagina tu amorosa melancolía. Hoy no siento el congelante frío que produce, este irregular techo; que funge de cobijo... imbricadas cañas, donde apaciguo horas y trato de acercar el tiempo, para tenderlo a tus pies, sonreír atontado, feliz, dormitado. La distancia grosera, indiferente, que aleja tu presencia, juntada con esta montaña de amor, donde ahora vivo, es solamente una agreste mole, tiene la facultad de desnudar mi alma, mi espíritu; alocados, no sé si huyen o, adónde dirigen sus pasos. Imagino que van raudos a toparse con tu mirada, con tu cabellera de bucles azules, que caen desafiantes sobre tus hombros, resaltando el rubor de tus mejillas; y, ese rojo carmesí de tus temblorosos labios, donde escondes el arrojo de tu dilatado frenesí. Me abandono pensando en ti y termino cautivado por la espera, pues va creciendo esta pasión desmedida por ti, en un levitar sobre la tierra. No siento las zarzas el agreste terrenal y he perdido la fuerza de la gravedad, y sin ser pájaro, trato de volar, trinando hacia ti, para desenvainar las ganas, cual caballero andante, expandir mi amor y juntarlo con el tuyo, para hacer grande la conjunción... Santa Mujer, que estás en mis sueños diarios... tú, mi deseada veta de pasiones... Siento en mí, adorada Teotiste, que me has obsequiado el don de la ubicuidad, que me amarra más a tu lado y perseguir la sombra de tus pasos, amor; así, estaré arropándome de ansias, acortando la espera, hacer posible el abrazo infinito y que nos líe uno con el otro, para achicar los espacios que repelen el táctil acercamiento. Créeme, ardorosa ninfa: el cielo, solidario de nosotros, se cubre de gris, con ganas de opacar el brillo de la sentida necesidad de agrandar las solfataras por donde se colará la lava de tus besos, tu tersa y resplandeciente piel que esconde ese gemido tuyo y mío, de este amor que será eterno. Teotiste... Mujer... Oh... mujer, impetuosa, incontrolable arrebato... mujer de crecientes yfogosos impulsos, mi bella reverencia; tú, tierna, amorosa, sencilla, dulce y cariñosa mujer, adorada... Teotiste, no tardes, te suplico, quisiera deshacerme de este frío chocante, que tirita en mi ser, impiden que mi ruego llegue a ti y mi incontrolable deseo, logre izar tu mirada a media asta y este ruego delicado, se nos convierta en un hermoso ovillo enredado de nubes, tendido al infinito y que sea un indisoluble nudo, sin testigos, sin postas, distancias que tomar, que dejar, correos que esperar; y, si no percibo tu calor o una esperanza cerca de ti, ¡juro... solemnemente! Muero de ti, muero por ti, muero de angustia...
SEÑORITA DORILA:
Dirigirme a ti, en fríos términos apartados del sentir, es redactar un apático exequátur, oficializar quejas fronterizas, que no reconocen bardas, límites: Parece un legajo de asuntos militares obligantes, armisticios como cuñas sostenedoras de precaria paz, que en cualquier momento restalla guerra. Odio aniquilante; sentencia a muerte, dibujada en nuestras vidas, que borra hasta la invisible alma. Ese odio que sientes por mí, puede ser justo, no por eso me excluyo de las posibilidades, pues, aseguro no estar exento de ser parte, como tú, puesto que somos... Una calumnia inducida, basta para mi aniquilamiento, Sin embargo, razonable o no, concluyo tristemente, que expones tu aborrecimiento, desdeño, inquina, al rechazo total. Acudes con fanatismo, a una ira invertida; ¿será un antiguo enojo? ¿Tornóse en costumbre y fluye en los momentos inoportunos? Ahora mismo, recuerdo a un autor, escritor español: I. M. Altamirano, cuando apuntó: “No he amado a nadie, pero en cambio odiaba a todo el mundo”. Tu aversión, llevada al extremo, sostenido con fingida convicción, que no es más que animadversión, quizás más fuerte, insensible en los canales que conducen al odio. Indudablemente optas por la conducta de los saduceos, que abominan, sin más, los símbolos de la castidad; detestas con insidiosa maledicencia y, de pronto te adueñas de un sentimiento ciego, que solo anida en tu corazón y más parece una zaranda enloquecida, sin razón, que tataratea sin control, impulsando los males a quien creyó, en un momento, en que la antipatía, ligada a la enemistad, pudieran combinarse con la disposición, para activar un resultado contra determinado ser. Sin embargo, no había causa, motivo, secretos ignorados, que tal vez, pudieran incidir, en el devenir natural, comprensivo, entendido; y, uno sin saber; por qué, en qué medida, puede recaer ese veneno, como piedra en pozo, que se va al fondo y ser aplicado inmisericorde, en los sentimientos afectivos, en la pasión cierta. Tendrá, su origen en el temperamento incontrolable, en raro gusto natural, resultando un rechazo ipso facto, inconsulto, duro, cruel, de soliviantado desamor, de actitud colérica, en contrariedad entrambos, que habíamos llorado por los rencores y la enemistad de otros seres, que estuvieron al borde de la tragedia; en paralelo a la fea desunión, asumiendo esa invasión a nuestro espíritu, que entró en padecimiento, del mismo modo y consecuencia, de quien soporta una paliza injusta y ruega por más... Abatidos, podemos reconocer una acción baja y deprimido el ánimo, equivocamos la conducta. Pero, no creo que justifiques con ello tu mala acción; que también pudiera ser mía. Seguro estoy que: tu posición la envuelve la envidia, pero, te juro, no sé de qué; tal vez, juntada en alguna alterada emoción... Todo esto es odio; y, no puedo saber, si es mío, si lo originé o me llevaste nariceado a mi degüello, por tonto, insulso... Ya estoy seguro: se apuntaló nuestra guerra, sin regreso... y, doy fe que este texto, me delata en confesión y, sintiéndolo... Tu incontrolable capricho ha desbocado el acabose... ¡Y... ¡Así será...!
Maracay, 20 de enero de 2023
CARTA A TI, MI QUERIDA LIGIA ROMERO
De: Miguel Aquiles Lovera Romero
Para: Ligia Susana Romero de Lovera. (+)
Saludo mi tierna y adorada celestial Ligia Romero, un inmenso placer en darte la bendición exclusiva plasmada en esta carta viajera y eterna para ti con sublime AMOR.
Mis manos temblorosas en este momento se llenan de glorias a tu memoria una vez más, tal cual recojo desde que nací de tu tierno vientre olimpo, escribiéndote semejante al verme tus ojos a San Miguel Arcángel como protección en ti. ¡Sí! mi Ligia Romero tuvisteis la visión amorosa en mi serte feliz, aceptándome mis ocurrencias y así verte contenta hasta más allá de tu despedida.
En nombre de mis hermanos nos acobijasteis con toda humildad y rectitud, quedando tus bellas enseñanzas en cada uno de tus hijos, nietos y bisnietos como principios los valores. Convirtiéndome yo bajo tu herencia cautivadora plasmada ahora en este llanto de alegría sabiendo que la leerías con tanta alegría tomando café con torta todos los días. Por eso hoy es bendecido el día escribiéndote con valentía besando cada texto lleno de sentimientos y disfrutes…
Cancion Al Poema
Hoy desperté con todo el espejo de mi madre mi fuerza pura se la debo a ella
Sintiendo que son experiencia y no imponencia
Hoy desperté con fuerza del saber sin alzar mi voz mis manos extendidas besando el cielo mientras despertaba mi madre besaba las mías.
Letras con el gran extenso amor del universo tejiéndose al hilo de la telaraña infinita y seguir en familia amándonos en nuestros sagrados corazones. Amén madre Ligia Romero.
Quien te escribe tu hijo Miguel Aquiles Lovera Romero. Miguel Aquiles Lovera Romero. Maracay Venezuela
Hola ¿Me recuerdas? Se te olvido decir adiós. Ya han pasado años desde aquel día que te conocí...En esa época juvenil donde yo aún portaba mi camisa beige y me escapaba para verte.
En ese tiempo donde mi corazón estaba enmarañado y desgarrado por las aflicciones de vivir, Yo te conocí sentado solo en una banca de la plaza Bolívar, Ya hace tantos años que paso eso, a veces me arrepiento de haberme sentado a tu lado y preguntado la hora porque nunca imagine lo que te haría pasar.
Recuerdo que me escapaba todas las tardes para esperarte para hablar en esa banca, a veces tardábamos horas discutiendo por cualquier cosa y nunca quisiste preguntarme cual era mi edad.
Y poco a poco nos volvimos más íntimos y yo empecé a refugiarme más y más en ti de un momento a otro la plaza se nos tornó pequeña. Y empezamos a encontrarnos en otros lugares
Una vez caminando te encontraste a un colega que extrañado pregunto qué ¿quién era yo? y note como tu semblante se tornó pálido y dijiste que era tu media hermana, ese día al regresar a mi casa llore sin entender porque lo hacía ¿acaso pensaba que dirías otra cosa? lo único que sentía era que mi pecho estaba abierto y que zamuros comían mis heridas.
Yo no quería aceptar que lo que sentía estaba mal aun cuando desde el primer día vi tu fecha de nacimiento en tu cedula yo me quedé callada... Es que me gustaba oler el perfume de tus camisas ¿Recuerdas las largas horas que pasábamos abrazados? sintiendo como nuestros pechos se hinchaban por el oxígeno que entraba en nuestros pulmones y como te acariciaba con mi cabeza igual que un minino, deseaba que me dijeras Te amo, adoraba oír tus voces en esos momentos donde sentía que moría tu siempre me dabas consejo, una sonrisa y tu hombro para llorar.
Luego una tarde como todas las demás dejaste de ir a la plaza sin decir nada. Perdóname por escribirte luego de 4 años ya sé que te casaste y entiendo que lo nuestro nunca podría ser y fue por casualidad que te encontré me recomendaron un libro de un autor poco conocido una historia de romance imposible y encontré tu dirección Gmail.
Posdata; No me gusta el nombre Julieta yo siempre seré tu María.
Amado mío:
Tú me dices que, al despertar, tu mano va directo al celular, buscando algo que te haya escrito y solo hay una pantalla en negro que te duele.
Mi dolor es mayor, pues mi mano atiende a mi corazón y solo quiere escribirte, para decirte cuanto te ama, pero el frio cerebro controla el movimiento y la deja inerte y es cuando siento mil cuchillos que van desgarrando, hilo a hilo el musculo que forma mi corazón, que no quiere latir porque le faltas.
Pero son tantas las cosas que nos separan y no es precisamente el océano que debo cruzar para verte, es la edad que no combina el ardiente verano con el naciente otoño, es el saberte amante de un dios que no es el mío, que deba usar un traductor para que nos entendamos, sabiendo que esa computadora le quita la esencia al pensamiento, es saber que te amo tanto, que no quiero vivir de sueños, quiero una realidad donde viva mis últimos años de ardor pasional y no en una cama soñándote sino sobre una arena donde tu cuerpo me cubra del ardiente sol.
Quiero saber a qué hueles, a que sabe tu aliento, que sonido tiene tu gemir y sobre todo mirarme en tus ojos, cuando aún jadeante quiera decirte “Te amo”
Si no tengo eso prefiero el silencio de tu amado pensamiento y solo conformarme con mirar tu bello rostro en una foto de internet.
Siempre tuya, por el resto de mi vida en pensamiento y alma.
Elizabeth
Señorita Ilusión:
Quiero que al recibir estas letras no las mal intérpretes, por cuanto no es mi deseo escribirte, más lo hago solo para aclararte el porque te envió mis versos.
Quien te los escribe no es el Norberto que tú conoces pues no me conociste poeta, solo te recitaba lo que querías escuchar de otros poetas, hoy me muestro como ese poeta que siempre fui, inspirado en ti, en tu amor, en tus cosas, en las mías y todo lo que nos unía.
El que te idealizaba es el otro yo, ese que llevamos bien adentro, el que no se calla porque le cierren los labios, ni dice lo que otros quieren escuchar, solo exteriorizo mis sentimientos cuando y como quiero … ese otro es romántico, poeta y escribe para contar su amor.
Para ese otro eres todavía su “Gaviota de mar adentro” como te dice en sus versos, el que mientras te arrulla en sus brazos te promete “Y las estrellas poquito a poco, saldrán a verte mujer”.
Creo es un deber darte estos versos, por la sinceridad que brotan de ellos, sus estrofas encierran todo lo que uno puede pedir a un amor. Cuando las leas entenderás que estos versos no salen de verse con una mujer cualquiera, ellos salen por alguien especial y esa necesidad del espíritu de decir “Te amo” de la necesidad de algo que no tienes, que te falta del otro yo que te complementa; como la luz a la flor o el aire al cerebro. El otro yo, el de todos los días, el que lucha, trabaja, el que tiene pasado, hijos amados, el que necesita del presente para hacer un futuro, el que le gusta que bailes sobre sus pies para sentirte más mía, ese piensa que no mereces el amor te dio, ni el lugar donde te coloco y piensa que no mereces que te estiban versos, ni buenos ni malos.
¿Cometí el error de tratarte como a una mujer y no como a una niña sin criterio, que no sabía distinguir entre un capricho y el amor, más aún pretender hacer un futuro contigo sin darme cuenta que no tenías madera para ello, parece te gustan las cosas fáciles o solo te dio miedo luchar por un futuro juntos y me abandonas con cualquier pretexto, pero sabes? Las cosas fáciles no tienen valor, más aquellas que luchamos, nos honran y nos tiemplan como el acero para hacernos invencibles. Igual no fuiste inteligente para darte cuenta, no de lo que fui para ti, sino de lo que fuiste para mí.
A medida que pasan los días sin ti y siendo este dolor de la ausencia concluyo que no me amaste y eso destruye mi alma y todo lo que levante a mi alrededor, más te doy las gracias por lo que inconscientemente me distes y lo que fuiste para mí.
Norberto
NOTA: Te envió rosas blancas y no rojas a ver si descubres lo que eras para mí
Amparo García Sierra. Zulia Venezuela-EEUU
Cabudare, 21 de enero de 2023
A mi amada Niurka Rojas Ledezma
Te escribo está misiva, amada mía. Sé que tuve muchas oportunidades para hacerlo, no es momento de reproches. Será la primera de muchas que llegarán a tus manos. He tenido unas complicaciones de salud, ya en mejoría.
Ahora, encuentro las palabras no sé si correctas, pero si propicias, para desnudar mis sentimientos y hablarte mi amor. Veo ahora tantas cosas que antes por la inmadurez y las tantas vicisitudes del camino, no vi. Esta vez siento el mismo agobio de aquellos años, solo que con más resabio. ¡Cómo quisiera, oh! ¡Cómo quisiera haberme dado cuenta que mi antítesis era yo!
Que todo cuánto anhelé y por lo que luché con honrosa causa, sigue siendo lo mismo ahora, las necesidades son cíclicas. Pero el tiempo, ese tiempo implacable e irreversible me muestra que cómo antes y ahora, hay algo imprescindible y es el amor, el amor que te alcanza para todo, pero que falta muchas veces, sublimado en las responsabilidades y tareas que asumimos para amar.
Reitero amada mía, no te estoy haciendo reclamos. No voy a desaprovechar, esta oportunidad en tan vana actitud.
Veo desde mis ojos maduros y mi corazón crecido por el latir de los años, que la falla entre nosotras, estuvo cuando te distanciaste de mí, cuando indolente te alejabas, no en las equivocaciones, naturalmente justificadas en lo humano, sino en lo reiterado de ellas.
Ahora no puedes, no debes volcar en el presente lo que no te corresponde hacer, sigues teniendo una misión, ellos felices y victoriosos, aunado al placer inigualable de ver prolongado aún más tus días en esas caritas mágicas, que solo sonríen, para que tú existencia tenga más sentido.
Es muy noble lo que estás sintiendo y no sabes cómo te entiendo mi amor, que quieres hacerle ver qué esa bendición de su vientre fértil, es lo más grande y hermoso en toda su vida y cuidarles, protegerles yacompañarles, es el mejor tiempo empleado y la mayor felicidad.
¿Cómo lo digo amada? ¿Cómo lo hago? Si se nos va la vida amando, a nuestros padres, a nuestros hermanos, a nuestras parejas, los hijos tan amados, los nietos, ese regalo, los amigos, las mascotas, cómo las amamos, hasta las casas que se llenan de recuerdos, el trabajo, ¿Y nosotras amada?
Te entregaste al trabajo, con la idea de darles lo mejor, las mejores condiciones y resulta amada mía, que lo mejor para ellos eres tú.
Te amo Niurka, sigue viviendo para ti…
Cabudare, 22 de enero de 2023
A Lucrecia Paredes
No sé realmente, cómo comenzar esta carta, va fluyendo todo lo malo Sra. Lucrecia, muchas gracias.
Sale sin ningún esfuerzo, todo mi dolor y lo hago más por mí, que por ti; por un desahogo, para desbordar mi odio y no envenenar mi cuerpo con este miserable sentimiento que sembraste dentro.
Vienen a mi mente, justo ahora, recuerdos inocentes, un niño deseoso de cariño y encontrarte en mi camino fue una decisión del destino. Está bien, tienes razón, en decir todo lo que quieras en tu solapado amor.
Qué para este tierno corazón, se convirtió en su universo entero. Cómo es posible que ahora ni te eche de menos.
Al contrario, y lee bien, te odio y yo tal vez endemoniado y enfermo como tú dices, sigo y puedo evolucionar y hacer algo bueno, que podemos decir de ti, que hasta la vejez te tiene miedo.
No puedo entender, cómo después de tanto amor y cuidados, que debí esperar de mi madre, hayan llegado de tus manos, cuando ni siquiera llevaba tu sangre.
Tuviste que saberlo desde el mismo instante, porque solo cuando se quiere, como tú demostraste hacerlo conmigo, se puede conocer a fondo esos sentimientos, que afloran sin remordimiento.
¿Qué ha cambiado desde que me acurrucabas entre tus brazos? Cuando feliz me sentía de tener una abuela fingida.
Te confieso lo que soy, lo que llevo por dentro, más grande que el odio que estoy sintiendo y tú te avergüenzas, te alejas y te burlas como una persona extraña, borrando una huella.
¡Me fui de tu lado un tiempo y tú no pusiste impedimento, vivir en otro país descontento, lleno de temores, con un padrastro sin frenos y una madre hipócrita!!
Yo estudiaba en el liceo y era brillante, el mejor estudiante, y de repente ya no tenía nada enfrente, solo la tristeza que me consumía lentamente, irme a otro país y estar sometido a otras gentes.
Cuando aquí hablabas de mí, me sentía orgulloso porque me quería la mamá de un esposo que mi madre tenía. Y aunque otros hermanos corrían mi suerte, yo era tus ojos evidentemente.
Entonces, ahora que vuelvo a tu lado y decidí revelarte, lo que tanto he guardado, tu me matas con tus palabras hirientes, tu actitud indiferente para tu nieto adorado.
Me echas a la calle sin ningún dolor en tu mirada, al contrario, con ese ademán aventajado, porque en tu mismo techo, no va a vivir un afeminado.
Me lastimas, me haces miserable, porque ese es mi gusto, cómo hago para cambiarme y que vuelvas a abrazarme.
Hasta de un trabajo que conseguí con gran aplomo, fuiste a armarme líos, porque no estarás contenta hasta volverme polvo.
Me voy de nuevo a ese país, con mi madre indiferente, un padrastro delincuente y yo, abuela, odiándote hasta mi muerte.
Tu nieto Pablito
En Santa Cruz, un día cualquiera de 2023
Salúdote María, desde este corazón confundido.
Me toca escribirte este papel porque no quieres oír ya ni mi voz. Te confieso que no se escribir sobre el amor, ni de los sentimientos que afloran en mi después que te fuiste. El amor antes que escribirlo, hay que expresarlo a voz susurrante, en oídos que quieran oírlo.
Me gusta mucho cuando la claridad de la mañana entra por la ventana y reconozco en el lecho tu cuerpo, ese ente que ha estado a mi merced y que me ha procurado sensaciones sublimes, que también las ha recibido. Hoy no te he visto, está la claridad, pero no tu cuerpo.
Cómo explicar de los sentimientos que me impulsan a decir estas cosas.
Tendría que describir cómo circula el placer en mis arterias o acaso será que el amor tiene su propia vía por dónde circular para que tanto placer no las colapse.
Tienes las mismas cualidades que otras amantes, sin embargo, te concedo ser única como han sido únicas las que te han precedido y las que te seguirán.
Te gusta que recorra tu piel exhalando mi aliento, para luego mordisquearte, lamerte, succionarte… Ya lo había practicado en otros cuerpos, de allí mi experticia en lograr tus tantas explosiones de placer. Aun quiero hacerlo, pero te has ido
Siempre hay riesgos en el amor. Se anida en el corazón como un colibrí que produce el éxtasis cuando absorbe el néctar de la vida, y luego, por razones muchas, se convierte en una serpiente cuyo veneno paraliza el palpitar de esa misma vida, que antes se vivificaba con el néctar del amor.
Lo que me inquieta de tu partida, es que debo comenzar de nuevo a inventar otros motivos creíbles para enseñar a otra piel, a otro corazón, a otra alma, a ser un ente que solo viva para recibir mi amor, mis caricias, mi totalidad.
Hace mucho tiempo, después de una gran lucha, arrojé el odio de mi alma, así que no pienses que tu acción puede hacerlo volver. Te recordaré sí, pero en los tiempos de la felicidad en que nos conocimos y reconocimos en nuestros cuerpos sedientos de amor y placer.
Adiós pues, no te detendré en tu huida, solo te quiero decir que no hay retorno, este corazón no tiene replay.
Tuyo hasta ayer
José Posdata: En realidad lo que quería decirte después de todo, es que gracias por llevarte el loro. Ese animal hace mucha bulla.
Julio César Pérez
Santa Cruz de Aragua, Venezuela
Mi adorada Josarihta:
Sean estas líneas portadoras de mi amor y sincero afecto...
¿Sabes tú, ¿cómo se aman los ángeles del cielo?...
¿Sabes tú cómo amamos los fieles a mi Dios...?
Es así que te amo, tal mi amor incesante, tal el sol que ostenta, ha empezado a salir Más que puedo yo ofrecerte que mi amor por ti si en mi Joyel no existe, ni un oro ni un brillante y ahora es que comienzo hacer un porvenir...... Yo tengo el arca llena del oro que florece…En los azules predios de un noble corazón…pero me falta amada, tu brillo que ennoblece...estoy pensando en ti…tu amante ya no duerme...tu imagen de mi mente no se aparta.... Y tus ojitos negros de blancas miradas…que son como dos espadas...que hundieron sus puntas en mi corazón…son estrellas que vibran en mil llamaradas y tornan en cielo tu faz de ilusión...oh grandeza del amor…por esos ojos negros de diosa pagana. Por tus ojos negros de reina cristiana, que evocan leyenda de mito y de cruz.......por tus ojos negros de Reina y de Diosa....morirá tu enamorado como dulce mariposa que incendia sus alas buscando la luz......es tuyo mi pensamiento, tuyo mi aliento, tuyo mi ser.... Es porque lejos de tu presencia...tiene la ausencia sabor de hielo.
Mujer...tesoro mío. Mi dulce Bien...Flor de mi alma...mi amor. Mi Fe...... Ven que te espero; Ven que te llamo. Oye el lamento de mi gran pasión. ¿Seré yo tuyo?
¿Serás tú mía? Eterno el día de nuestro inmenso Amor De una época de Idilio de un amor Eterno........Hay voces que no callan...manan.... brotan para saturar el ambiente de un bello amor......y ese gran amor toca a tus puertas ama...... Arte
Querido Amor:
Escribo estas líneas, imaginando tu presencia frente a mí.
Sentirte cerca me produce las sensaciones, fantasías, sueños, de verte, sentir tu aroma, tocar tu piel, escuchar tu voz o disfrutar la suavidad de tu lengua en un beso.
La ternura de tu mirada, las alegrías de tu sonrisa ya forman parte de la evocación que también me inspiran en estas líneas. Quiero sentirte más cerca, quiero enlazar mis manos con las tuyas y celebrar la belleza del universo contigo. Abrazarte, besarte, sentir tu aliento y tu humor cerquita de mí.
Tu piel reaccionando a un beso y besarte con tus ojos cerrados. Espero pronto, tener la dicha de hacer esto realidad. MI GRAN AMOR.
Esta Carta me inspiro en tus recuerdos, pero estas presentes en cada uno de ellos. Siento acariciar tu cabello, sentir tu piel, besar tus pezones que turgentes me piden que los bese y la palma de mis manos la sientas en tus dos bellas elevaciones que me invitan a quedarse en mi boca. Y tu gemir de amor y un leve sudor que te brota lleno de pasión y entrega. Son mis imaginaciones lindas entre nosotros dos.
Sara Luisa Márquez Molina. Valencia Edo Carabobo
Sucursal del Cielo, 19 de enero de 2.023.-
Mi Adorada
Diosa de Ébano
Son sinceros mis deseos porque cuando tus hermosos ojos de lucero viajen por los senderos del país de mis pensamientos, representados en estas líneas, El Gran Espíritu te cubra con su manto de salud para que tu belleza irradie cuál el Astro Rey convirtiéndote en el centro de admiración de todos los que tienen la dicha de estar cerca de ti...
Cuando leí tu epístola de despedida, el cúmulo de sentimientos encontrados crearon un tsunami en mi mente que no entendió el motivo de tu escapada... Pasado un mes, puedo decirte que he aceptado la aceptación con la renuncia a una parte de mí encontrada en el camino y que aprendí a amar en cada centímetro de tu piel adorándote en tu propio altar.
Espero que tu decisión haya sido la más acertada y que tu espíritu viajero, ávido de nuevos horizontes con paisajes exóticos, mitigue tu sed de aventuras y que la vida te proporcione el doble de la felicidad que contigo conocí y disfruté...
Al despedirme con un "todavía te amo" hago votos para que la energía cósmica facilite la realización de tus más caros anhelos. Siempre te recordaré y si algún día deseas volver no lo hagas pues la puerta por donde entraste a mi corazón ya la cerré y boté la llave no sé dónde...
Recibe un fuerte apapacho, Diosa de Ébano
José Manuel Moreno
Caracas
- Distrito Capital
¡Querido Dios!
Aprovecho esta oportunidad para decirte cuanto te amo, que para mí eres lo único que existe realmente, todo lo demás es pura ilusión, tu eres lo único real y absoluto, que a veces no te entiendo, pero también sé que no tengo que entender todo lo que pasa o lo que permites, sé que es para bien, pero no lo entiendo, los niños con cáncer, las tragedias naturales, la muerte de mi mamá, algún día me lo explicaras.
Te cuento, por aquí todo bien, sé que lo sabes todo, pero en una carta hay que contar cosas, jejejejejej, estudio y trabajo para llenar mi tiempo, mi cabeza de cosas así no tener que andar pensando tanto, la salud bien, con sus altos y bajos, pero bien, el dinero como siempre unas veces hay, otras alcanza, la casa esta vuelta un desorden, bueno una casa con puros hombres tiene que estar así, desordená… La dieta, jajajajajaja a dieta, todos los lunes empiezo, al medio día del mismo lunes se me olvida y me lanzo un chocolate, dame fuerzas señor, ayúdame con la dieta, el azúcar bien, la glicemia siempre donde debe estar, pero hay que estar mosca
¿Verdad? Bueno te prometo voy a tratar, ya van 25 kilos rebajados ya falta menos. Cuídame a los muchachos, mándales la bendición, a Ro, a Chúbe, aunque él no me habla yo lo quiero, tu sabes cómo es él, ayúdalo para que no la pase tan mal, sabes que realmente lo adoro, a Ro bueno ella tiene su mundo, cuídala siempre, a To bendícelo todos los días, sé que tu nos cuidas especialmente a nosotros dos, tu sabes que amo a mis hermanos, el amor a nosotros nos sobro, eso es porque lo aprendimos de mi mamita… Sé que ella está bien porque ella está contigo, entonces esta perfecta… Aprovecha y le dices que la amo, no hay día que no la extrañe y que no me acostumbro a que no esté, yo sé que un día la voy a volver a tener y será para siempre, no se te olvide decirle que la amo, ese día se fue la mitad de mi con ella, yo sé que ella siempre lo supo. La amo y siempre será así…
Bueno, los gatos y los perritos están todos bien, La gorda estuvo enfermita tres días, pero ya está bien, la que está ya muy viejita es Bambi, no sé cuántos años tiene ya, pero come bien, creo que no ve bien y está un poquito sorda, los demás todos están chéveres. Del país no te voy hablar, sabes que la política no es mi tema preferido.
Cuídanos y es que cuando estamos contigo estamos bien, ¿Cómo es? “El que a Dios tiene, nada le falta” ...
Te amo, sé que tú lo sabes…
Tu hijo José Luis.
P.D. Prometo no volver pasar tanto tiempo sin escribirte…
Entrañable hermano
Hoy me he sentado ante la máquina de escribir, después de veinte años. Me fui orientando hasta caer en recuerdos de la infancia.
Hice un salto vertiginoso hasta tu lado, a medida que se aclaraban los álbumes en mi memoria la balanza se inclinó a tu favor. Reino la nostalgia, se congestionaron mis ojos ycomenzaron a resbalar cristalinas ydiminutas perlas salobres por mi cara. Mis cansados ojos perdieron visibilidad, esperé hasta que cesarán esas impertinentes lágrimas. Apareciste flaquito, sin camisa, con tu parrilla costal muy evidente, tus ojos grandes color café, cabello ensortijado castaño claro a los hombros, ochocientas pecas, nariz perfilada, dentadura perfecta, labios finos y rosados.
Recuerdo aquellas apuestas con niños más altos y fuertes, les ganabas. Celebrábamos con risas y abrazos.
En la reunión de la casa con piscina, cayó un bebé al agua sin más saltaste y la rescataste. Sentí orgullo de ser tu hermano, mi gran héroe.
Una vez el vecino llego en una moto todo terreno se paró a nuestro lado, sabía que no te resistirías. Dijiste, apostamos, si lo hago me la prestas. El asintió, corriste y de un salto te encaramaste la encendiste y te fuiste a dar una vuelta.
Sorprendente, no te habías montado nunca en esos caballos de hierro.
Defensor de los pequeños, te caracterizabas por respetar, hasta los enemigos declarados los tratabas con merecida distinción.
En los estudios eras el primero, recuerdo el examen de admisión para entrar a la universidad, matemáticas la materia que tocaba presentar y dijiste que te irías a dormir. Me dejaste sentado en la sala me quedé petrificado pensando, este loco lo van a reprobar.
Al día siguiente cuando te vi, entrando cómo el triunfador que eras, me dijiste al oído "la mayor".
No comprendo, no logro descifrar que trastornó ese formidable futuro tuyo.
Sería que te idealice.
Oía a la gente decir: me decepcionas.
Hoy digo: caramba hermano, mi héroe me decepcionó.
Como una persona cambia, por que hacer tal viraje de vida. Profesional a los veinte, un mes celebrando.
Tenías veinticinco cumplidos cuando nos reencontramos en la plaza, un veinticuatro de diciembre. Nos dimos un fuerte y caluroso abrazo, te sentí rígido. No quise darle importancia. Volvimos a vernos, ya eran pasadas las doce, me abrazaste y percibí un conocido aroma. Quise creer que era el olor de artemisa quemada. No podía aseverar lo que ahora se, supe que eso no iba bien.
Quiero que sepas te sigo esperando, no puedo creer que no me quieras ver.
Todos los días rezo, porque consigas centrar tus pasos. Aprendí de ti a respetar y reír con tu desenfadada alegría de vivir.
Es funesto, jamás vi una razón para que desaparecieras.
Estoy abatido, desconsolado, presento fuertes crisis depresivas que me inducen a buscar refugio en sedantes.
Llevoveinte años esperando tu regreso triunfal, no creo que la salud me permita reencontrarnos.
Me despido, tu hermano que te ama y extraña.
Santa Cruz 24 de enero de 2023.
Queridos lectores, deseo escribir desde lo más profundo de mis vivencias, aquellas que han marcado las huellas del amor y el desamor.
Escribo, sobre aquella mujer huancaína con la que una vez sentí el elixir del deseo y el amor. Hoy, somos huellas del pasado, que en un abrir y cerrar de ojos, fuimos devorados por el buitre de la separación, marchitando nuestro amor.
Todo quedó en un adiós, y sin decir más, tuve que marchar como un soldado que va a la guerra y jamás regresa.
Ya en mi cuerpo fue borrado las marcas de sus besos, ya no siento el olor de su cuerpo. Ya murió aquel te amo que un día a orillas del rompe olas surgió de mis labios.
Un brindis a la vida, por lo que un día fuimos. Ahora, como un cadáver del tiempo, sin lágrimas y sin dolor en mi pecho, escribo estas líneas para compartir ante ustedes lo que una vez significó este amor. Ya el sello está roto, todo quedó guardado para siempre en el baúl de los recuerdos, cerrado bajo llave y enterrado para que jamás la llama de ese amor pueda reencarnar.
Como último aliento, ya me encuentro postrado a orillas de mi cama, a punto de morir. Pero, no sin antes dejar en evidencia lo que mis manos débiles puedan plasmar en esta carta moribunda cómo yo.
Quizás no tenga ningún sentido hacerlo, pues ya ella no me ama. No obstante, sé que, en lo más profundo de su ser, debe conservar la sombra del recuerdo, de quién a zapateos y cantos de huayno conquistó su corazón.
Adiós huancaína, solo los paisajes hablan de nosotros... Ya no me quedan fuerzas para seguir escribiendo, ahí viene el animal de carroña a terminar de consumir las sobras de nuestro extinto amor.
Querido lectores, me despido no sin antes agradecer, el que ustedes sean testigos de mis memorias.
Javier Arévalo
Francisco Quintana Navarro. Santa cruz de Aragua, Venezuela.
Stalingrado, 1942.
Cabo Heinrich Weitzel.
Hago gala de gran franqueza en mis palabras, quiero compartir con usted, lo vivido desde mi llegada a estas heladas tierras, alfombradas por la sangre y el sufrimiento.
Este es para usted, mi testimonio vivo sobre esta ciudad, a la que hemos sido forzados a venir. Stalingrado es el infierno en la tierra, el Verdún rojo con nuevo armamento.
Atacamos y somos atacados cada día, con pocos metros que avanzamos, los rusos nos hacen luego retroceder.
Cuando llegamos aquí, éramos ciento sesenta hombres, ahora solo quedamos cinco.
Sueño con que esto pronto termine y ponga fin a este tormento.
Cargo en mí, una profunda culpa que hace peso en mi conciencia, ante todo el mal causado.
Sé que sí perdemos está guerra, se hará justicia, la venganza será cruel para los que somos responsables de este horrible acontecimiento.
Miles de rusos y judíos fusilados, mujeres y niños violados y asesinados por puro placer y antojo.
Es algo increíble, cómo envueltos por el sadismo, hemos creado nuestro propio infierno; aunque ya existe la certeza que seremos derrotados, debemos resistir y dar nuestro último esfuerzo, por ganar esta batalla para el Führer.
El tiempo empeora, se acerca diciembre y la ropa no nos da cobijo ante estás heladas tierras.
Siento frío, mis manos débiles viven su propia batalla por escribir estas líneas.
Llevamos días sin comer y la agonía nos consume, hacemos a la idea de rendirnos, esperando la misericordia de nuestros enemigos. Pero más puede el orgullo, que rendirnos no es una opción.
Si tus ojos pudieran ver esto, todo lo que fuese majestuoso una vez, se ha convertido en un cementerio de escombros y hombres muertos.
Siento rabia y frustración. Anoche, un joven soldado murió de hipotermia, pienso en su madre que debe estar en casa orando, para que su hijo regrese; sin saber que este, yace entre estás ruinas.
Con poca munición y sin un oficial que nos dé instrucciones, solo esperando que, en cualquier momento, este breve instante de tranquilidad, sea interrumpido. Recuerdo los días en los que andaba por los campos cerca de la casa vieja de mis padres, pienso en Sasha, una joven rusa que un mes antes fue mi amante. Esto, mantiene mi cordura y le da fuerzas a mi cuerpo cansado y tembloroso, apaciguando mi constante miedo a la idea de morir.
Si Sasha estuviera aquí, haría de su cuerpo mi refugio, aunque no lograra entenderla, pues no hablo ruso, haríamos el amor hasta olvidarnos de esta maldita guerra, del Führer y de la constante culpa que abraza mi consciencia.
Es hora de despedirme, los rojos se acercan y debemos prepararnos para el contraataque, si perezco hoy, espero está carta llegué a ti, si es que sigues vivo, porque tú última carta fue, hace un año.
Hasta pronto mi amigo...
Quizás, nos veamos en casa o en el valle de los olvidados.
Biscucuy 18 de enero de 2023.
Mi Amada Abelina.
Hasta el cielo, el paraíso mismo.
Recibe todo mi amor y cariño, esperando que estés en paz en los brazos del Señor Todopoderoso, hacen ya 11 años de tu partida, hoy es tu aniversario luctuoso, como olvidar los últimos instantes a tu lado se reviven y se repiten en mi memoria cada vez que te recuerdo, dormías cuando ese lunes a las 4 am. te vi por última vez, apenas entendiste que me despedía y entre sueños me diste la bendición. Ese fue el doloroso adiós, un día antes de irte.
Te extraño cada día, a esa mujer dulce y tierna, que tiempo atrás desde la concepción al nacimiento fuimos una, compartimos el oxígeno, la sangre, el nutriente. A través de estas líneas quiero rendirte un homenaje a la dama que me dio el ser, que me cuido y vio en mí la esperanza, la que me mimo y me acuno en su regazo, la que fuerte por mi tuvo dolores y me pario en la casa, la que me enseño las primeras letras, sumas, restas y me insistía día a día ¡Estudia! me entregaste ese caudal de amor y de atenciones esmeradas y sembraste en mí la semilla de la pasión por la literatura, cuentos, canciones y poemas, me educaste, (cuanto te agradezco mamá), para hacer el bien y para amar a cada miembro de mi familia con devoción infinita, me enseñaste a rezar, a ser cristiana, a respetar a los mayores y a ser detallista, regalona y sensible. A agradar a los amigos y ayudarlos cuanto se pueda.
Tenías cosas extraordinarias como el amor por la naturaleza y esa constancia al sembrar en tu patio todas las frutas que te fue posible: guayabas, mangos, parchitas, limas, toronjas, coco, lechosa, limón, guanábanas, aguacates, fresas, manzanas, duraznos, cambur, caña, chayota, ají, tamarindo, papas de enredadera, tomatitos, lechuga, cilantro, orégano; junto a un montón de plantas medicinales y flores. Mi linda mamá con tanta fortaleza interior y física, criaste dos hijas, tres nietos, adicionalmente cinco niños hijos de tu hijastra; todos amados y cuidados con esmero y singular entrega, siempre risueña, inteligente, poetiza, noble, actualizada con el acontecer diario, laborando desde el alba hasta el ocaso, en los quehaceres y mimando a mi Papá y a todos
No me despido, porque vives en mí, un poco en mi apariencia, mucho en mi forma de ser comedida, en tu dulzura y generosidad, en lo ahorrativa, cuidadosa, en las actividades de cocina, cuando quieres me visitas y abrazas en sueños. Te amare toda la vida, mi corazón, mi fuerza, mi alegría. Me encargaré de hablarles a tus biznietos de ti, de tu vida, de tu historia, de nuestras largas tertulias, de que dabas pocos besos y abrazos; espero haberte mimado, besado, abrazado, cuidado todo lo posible y trasmitido todo lo que te amé, te amo y amare.
Con el amor, agradecimiento y adoración a ti Madre, un espectacular y gentil ser humano.
Santa Cruz 24 de enero de 2023.
Estimados lectores:
Deseo escribir mi carta sobre un amor viajero que como ave de paso cruzó el sendero de los afectos en veloz vuelo, dejando el destello de su luz y un sollozo contenido en mi pecho, como una pieza sentimental a la que el azar jugó el destino de los encuentros furtivos en relación de amantes.
Su luz irradiaba en mi constelación un universo de estrellas que amplió al infinito la prolongación del amor sentido por mí y que en ofrecimiento era fresco y esplendoroso en la madurez que me correspondía vivir.
El sentimiento de una mujer de más edad por un hombre más joven que floreció una pasión exaltada.
La vivencia estuvo marcada por prolongadas distancias de encuentros personales y fortalecida por el conjuro seductor de mi amante a través de la magia de los mensajes de textos de telefonía celular y a la par su indisposición para asumir el compromiso de profundizar una relación más allá de una amistad íntima.
Yo, solo estaba signada a estar en su harén junto a otras que, como yo, aspiraban el trofeo.
Los encuentros de alcoba forjados en experiencias fugaces y de intensos instantes nos identifican como historia allí, donde quedó sepultada.
Memoria de caricias en las sabanas que escribieron poesía en las geografías de nuestros cuerpos.
Lo nuestro tuvo la suerte de las migajas, no obstante, rindo homenaje a la historia de amor vivida, como un tiempo de delirio para mí.
Ahora que somos pasado y se ha pronunciado la distancia en las vidas paralelas que siempre fuimos, reinicio el metraje de mis recuerdos para reconocer en mí la experiencia de amar de manera digna, pues sucedió conmigo que, siendo mujer dispuesta para el amor, fui puesta a raya por mi amante.
Si de algo él fue culpable, es de haber sido un buen seductor. Siempre mostró las señales que no quise ver. La Descontextualizada fui yo, no supe cuidar mis estrellas como dice Pablo Milanés en su canción y lo que fue inspirador lo convertí en obsesión.
Me despido de ustedes, distinguidos lectores, agradeciendo la atención prestada a mi carta.
Atentamente:
Flor de Liz
San Mateo, enero 28 de 2023.
Mi querida Fanny.
Recibe mi saludo pleno de amor desde ésta hacienda de Aragua de la Venezuela del Siglo XXI.
Ya nada es lo mismo querida prima, es más, ya no existimos, pues yacemos fallecidos en la historia que nos tocó vivir, en nuestro ciclo vital; sin embargo, ésta carta nos revive hoypara andar a caballo estos Valles, en la libertad que los espíritus suelen tener sin prejuicios para amarse.
En nuestro tiempo vivido tuvimos un amor prohibido que nos gustaba y éramos cómplices para todo.
Quiero agradecerte todo tu apoyo para mi formación política en Europa.
¡Cómo no amarte querida Fanny!
Siempre cabalgabas conmigo en las batallas que emprendía, con tu hermosa sonrisa dando aliento a mi causa de independencia para derrotar el dominio español.
Muchas mujeres como tú, se hacen presentes en mi memoria de hombre atormentado por los rigores de la guerra pre independentista.
Mujeres, que me daban sus caricias y su olor de hembra para vivir sus ternuras.
Yo, mi querida Fanny tuve que aprender a darle su lugar a cada una, sin pertenecer a ninguna; porque sólo podía obedecer a lo que me había propuesto en aras de la consolidación de La Gran Colombia.
La eternidad me alberga en su recinto, pero en ocasiones salgo en galope para visitar los predios del Ingenio Bolívar y rememorar mis amores.
Se despide con amor, quien se confiesa ser suyo, de usted:
Simón Bolívar.
Hola Amor
Tu tan lejos y yo recordando todo lo que vivimos juntos, siempre llenos de amor, comprensión y respeto mutuo. En nuestro inicio sentía que algo estaba pasándome, tenía sentimientos y deseos contradictorios a los cuales no quería ponerle nombre. Quise hacer cosas y no las hice, otras que no debía hacer, terminé haciéndolas. Los pensamientos y fantasías me absorbían, me agradaban y al darme cuenta los frenaba. Quería evitar que los sentimientos florecieron y llegáramos a sentirnos necesarios el uno para el otro. Tratamos de reprimir este amor y lo guardamos muy dentro, cómo algo hermoso, bueno, puro y sabíamos que con el paso del tiempo el recuerdo sería intenso y muy grato. Sin embargo, dejamos a un lado los razonamientos lógicos y seguimos viviendo momentos placenteros, nos aprendimos a conocer, entendernos, identificarnos y querernos con mucha atracción y fantasía. Cada encuentro fue más intenso que el anterior, llenos de temor, angustias, deseos, contradicciones y a la vez con un gran amor del bueno. Sin planificarlo nos encontramos una hermosa tarde haciendo el amor, a partir de allí nuestra vida cambió. Juntos luchamos por este sentimiento, a tu lado no me cohibía, me sentía libre, natural y segura; el amor que sentimos nos ayudó a estar bien y hasta justificar lo que hacíamos. Segura estoy que el sexo no fue lo que nos unió, fueron muchas cosas gratas que vivimos: una salida, un baile, un paseo, una mirada, tu voz, una sonrisa, un gesto, un apretón, una llamada, un beso, una caricia. En fin, reconocimos que nos enamoramos cómo nunca. Aprendimos a conocer aspectos muy gratos de la vida que antes no disfrutamos, sentimos fuerza para seguir adelante, mucho aliento, esperanza y deseos de luchar por un presente y sobre todo un futuro mejor, porque ambos habíamos atravesado momentos difíciles y sentíamos como derecho ganado, el poder vivir en un mundo donde reinará la confianza, la sinceridad, la comunicación, la armonía, cubierto y protegido todo por el amor.
Recuerdo nuestra primera escapada larga, fueros tres días maravillosos, juntos las 24 horas, no tuvimos ninguna diferencia, el amor nos mantuvo en una nube de cordialidad, de felicidad, mi llama y mi fuego compartida con la tuya nos permitió vivir la experiencia más hermosa de nuestras vidas.
Finalmente, superados los obstáculos, formamos un hogar juntos, nos mudamos, buscamos nuevos trabajos, hicimos nuevos amigos, paseamos, viajamos, emprendimos grandes aventuras y riesgos, que nos trajo alegría, bienestar, realización personal, estabilidad y seguridad. Vivimos solos muchos años, lo cual generó un profundo acercamiento y dependencia mutua, los intereses afines contribuyeron a consolidarnos como pareja y decretamos "querernos por siempre", como dice la frase, hasta que la muerte nos separe. Segura estoy que pronto nos veremos.
Siempre tuya, Aura…
Valencia, 24 de enero de 2023.
A-mor:
Me encanta despertar todos los días a tu lado. Saber que, aunque no estés, siempre estás presente, y hoy como es de notar, me siento la persona más afortunada.
Hace 27 años comenzó nuestro amor, como una montaña rusa, jugamos a ganador.
Dimos el Sí ante Dios y la vida. Desde ese día nuestra relación ha sido toda una aventura, llena de besos, risas y mucha cordura.
Eres mi amor y te amo, eso lo siento profundo, tienes un alma muy noble, y un corazón de otro mundo.
Conversamos o callamos, como en toda relación, tiempos buenos han pasado, y yo te quiero “un montón”.
Con caídas y tropiezos, pero llena de mucho aderezo, construimos día a día nuestra querida familia, la cual ha crecido y eso me llena de orgullo y satisfacción.
El amor es nuestra bandera, ya no es como un capullo, aún sigue floreciendo y mi amor sigue siendo tuyo.
Eres esa persona que me hace vibrar de amor. En las buenas y en las malas, para mí eres el mejor.
De momentos y alegrías quiero llenarte la vida, compartirlas contigo es mi mayor osadía.
Somos especies cambiantes, eso lo siento contigo. Eres mi novio, esposo, amante, mi amigo...
Quiero amarte para siempre, hasta que la piel se desgaste...hasta que los años nos extrañen y la vida se acabe.
Te amo.
Queridos hijos:
En la cercanía y en la distancia, quiero decirles cuánto los amo.
Cuándo sé de ustedes... de sus cansancios, frustraciones, desilusiones, decepciones, tristezas, desamores ...paso a sentir, e intensamente, como si me clavaran una daga, una lanza, en el corazón...
Cuándo sé de sus éxitos, sueños, ilusiones, amores, logros inmensos y pequeños, metas cumplidas, alegrías, descanso, diversión ...siento el corazón vibrando, lleno de gozo y pasión...
También sé, que este arte expresado, suena... ¡a un lugar muy común!, suena trillado.
Pero en la simpleza está la grandeza...por lo cual, solo me queda desearles: Qué con ustedes, la vida, siga siendo la vida, ...hermosa, grandiosa, avasallante...y que yo pueda, estar siempre, por ahí cerquita...en compañía, amor, amistad, besos, abrazos, palabras, pensamientos, ¡cómo huella imborrable...en la mente, en el alma y en el corazón!
Finalmente decirles, Ustedes son mi todo, mi musa, mi oda, mi inspiración ...ustedes son, hijos míos, mis mejores AMIGOS y mi más grande AMOR
De ustedes, su mami
Mariolga Urrieta López Valencia Venezuela
Valencia, 24 de enero de 2023
Maestra envidia: Te escribo esta carta con motivo de preocupación. He sabido, qué te adueñaste de mi amiga... haciéndola criticona, competitiva, despiadada, insegura, vil e infeliz.
Por mi parte, tengo la dicha, de rápidamente ubicarte y hábilmente ignorarte.
Decirte que me enseñas, a quererme y aceptarme. Que ya no pienso preocuparme más, sino ocuparme.
Ocuparme de mi amiga, demostrarle, que no hay nada que temer, qué no se sienta amenazada, qué no existo para tumbarla, qué existo para ser...ser muy libre, espontánea y qué ¡no requiere pretender opacar mi luz, para ella brillar!
Felizmente despedirme y honestamente decirte, te deseo un muy buen viaje...con solo boleto de ida, para que, a la vida de mi amiga, nunca más regreses...
Atentamente,
Valencia, 23 de enero 2023
Queridos ilusos:
Qué dolor que se encuentren allí..., creyeron que todos actuarían como ustedes, que habría coherencia de palabra, pensamiento y acción. Siento que fueron engañados, traicionados, qué fueron víctimas.
Qué dolor por sus valiosas vidas. Qué dolor por sus familias.
Qué dolor que los dejaron a un lado. Qué dolor que fueron olvidados.
Qué dolor mis palabras, mi discurso y apreciación. Qué dolor que los llamemos ilusos, incautos, inocentes.
Los pienso y elevo una oración...
Para despedirme les pregunto: ¿Podéis decirme qué otra cosa, puedo hacer por ustedes?
Yaracuy, 23 de enero de 2023
Amo: A través de estas líneas te hago llegar mi petición. Más que petición es un ruego, un grito desesperado. Cansada estoy de recorrer este mundo, de copular con sus habitantes, de vagar por sus rincones. Algunos me temen porque me vieron cual ángel caído y otros me aceptan y desean. ¡Pero han sido tantos y por tantos miles de años que estoy aburrida y al borde de la desesperación!
Caí de tu gracia cuando me rebelé. Yo quería mantener mi esencia, lo que siento, mi razón de ser. Pero fui expulsada de tu gloria; de ese lugar paradisíaco, donde había paz y calor. Mi caída fue violenta, fui como un rayo veloz. Conocí el frío que se cuela por los huesos, espantoso. La obscuridad absoluta, donde el dolor no tiene reposo. Destinada a ser errante, caminando entre las sombras eternas. Mirando la luna sangrienta. Mi noche interna, sin estrellas.
Ahora, mi historia está escrita en papiros negros. Describe funestos sucesos entre el cielo y el infierno. La vida que he vivido entre mortales e inmortales, todos quemándonos en pasiones de algún modo y esa seductora encarnación del placer que se observa en mi caída de ángel y en la transformación de un demonio. Por eso, mi amo, te ruego...
Mantenme entre tus brazos siempre fuerte, no me dejes ausente de tus firmes manos. Deseo probar tus caricias con sabor a muerte. Lávame esa fragancia que dejaron los humanos.
Jamás pensé en escapar de tu presencia ¿Que sería del infierno con mi ausencia? Entre bellos mortales a veces perezco, pero sólo a ti, Señor, te pertenezco.
Haces explotar mis más bajos instintos y los besos de ellos no son tan distintos. Son perversas bestias de deseos ardientes, con espasmos parecidos a los que tú sientes.
Es cierto, sus caricias a ti me transportan. Ante ti ninguna de sus almas ya me importa
Sólo son un juego del que se sienten aficionados. Mis deseos más íntimos sólo contigo se han saciado.
Distintas realidades de un mismo instante, sentir el cielo del infierno tan distante.
¡Con tus alas ensangrentadas intenta regresarme!
Absorbe vida de mis labios, no dejes de besarme.
Tu sierva eterna
Lilith
Erika Sánchez. Yaracuy-Venezuela
Yaracuy, 25 de enero de 2023
Diosa de ébano:
¡Qué sublime erotismo descubro al mirar tu cuerpo! me seduce, me extasía. Pasear mi mirada por la delicia de tu rostro, tu cuello, tu pecho… Para descubrir el cautivador vaivén de tus senos perfectos; ese deleite sagrado que mi pervertido ser ansía.
Me encuentro perdida en el crepúsculo vespertino, esperando cautivada, aguardando el oportuno momento; avizorando el estallar de mis sentidos, hechizada; codiciando saciar mi apetito, extraviada entre gemidos y lamentos.
Te alzas como diosa de ébano frente a mis ojos paganos, erigida en un altar sensual, bañada de plata y oro; postrada ante tu presencia espero, embriagada, el despertar de tu hambre salvaje que imploro.
¡Holocaustos de codicia!
La libación de mis labios bebes; en un ritual profano, voluptuoso, que los demonios del infierno quieren
Absorbo de tu piel el elixir que me embriaga, la dulzura de tu pócima secreta impregna mi lengua; olvidamos los temores, dejamos a la locura que sienta y haga; lujuria sedienta que crece y no mengua.
Las bajas pasiones de nuestra naturaleza humana, se adueñan de los sueños y consciencia. Ahora, hechizadas por el fulgor de fogosas miradas, obedecemos la voz de nuestra "indecencia".
Tu vientre plano me espera entusiasmado, ardiente; con el fuego quemando por dentro, abrasando. Mientras me doy gusto lamiendo, hincando mis dientes, en la suave piel perfumada del mejor de mis pecados.
Tu exquisita flor aguarda… No es tan diferente a la mía; mientras recorro tus piernas atrayentes, cayendo entre tus muslos, muriendo de agonía.
Diosa de ébano ¿cómo no desear entregarte mi vida?
Lilith
Erika Sánchez.
Yaracuy, 25 de enero de 2023
Sigiloso cazador:
¿Sabes? Por las noches tus mejillas se irán quemando como ácido de tus ojos, lágrimas derramando. ¿Crees que te consolarán como hicieron antes? Recuerda que son tus enemigas ya no tus amantes. Encerrado en tu dolor de la aflicción cautivo, buscando el querer vivir, pero ya no hay motivo; prisionero del terror esperas descanso sin premura, pero tu alma está atada a la obscuridad y a mi locura. Persecución continua de sus vivientes fantasmas alcanzando y torturando mientras te entusiasmas, no es el mismo valor ahora sin fuerzas y atado, castigado por quienes creías ya haber matado.
Depredador, sigiloso cazador de ataque sorpresa, que rapaz destrozó a ese cordero, pequeña presa. Ignoraste el dolor y sus lágrimas, piedad no aplica. Agonía, su inocente llanto nadie se lo explica.
Es momento de ver quien demanda más malicia: si el agua en tu rostro lleno de inmundicia o mi crueldad que en los gritos te acaricia. La redención se eleva de tu alma, te abandona. Me verás como un sólo dios pero que no perdona. Tus gritos por el infierno crearán distorsiones; con mi maldad y odio mutilaré tus diversiones.
Tupiel la abrirán como lo hiciste conmigo, ahorcado con tus vísceras no alcanza el castigo. Ellos comerán tus ojos y realizarán sus ritos; reiré en la noche porque retumbarán tus gritos.
Mi venganza jamás ha conocido los excesos. No siente como el frio se devora los huesos. Cual muñeca de trapo con fuerzas, pero pocas, estrellaré tus restos sobre las filosas rocas.
Sólo así se llenará en mi pecho este maldito hueco. Escuchando tu voz transformada en siniestro eco. Esas pequeñas lenguas que sientes tan extrañas serán de los perros peleándose por tus entrañas. Se comerán cada pedazo de ti, aunque no sangre, a través de ellos veré al fin calmada mi hambre. Un lago escarlata se expande, tu alma aún apesta...
Nada importa ya, será ¡¡¡MI DÍA DE FIESTA!!!
Tu muñeca de trapo
Lilith
Erika Sánchez. Yaracuy-Venezuela
Querida Luna
Entre albas y crepúsculos aguardo nuestro próximo encuentro. La impaciencia late en el rugido estruendoso de las manillas del reloj que en su avance interminable me aflige. Hoy te escribo esta carta para expresarte en letras lo que en mis adentros se agita en cada día de espera.
Desde la última vez que nos amamos, tu imagen, tu aroma, tu sonrisa y tu recuerdo los siento cercanos y cálidos, mucho más preciados que mi propia existencia.
Rememoro lo vivido en ese encuentro durante tu fase de luna llena, en esa entrega mutua hecha poesía, en complicidad con las estrellas que nos encubrieron apagando su luz para crear un ambiente íntimo. Me estremezco ante mi evocación al emerger la forma como extinguimos con besos la sed ardiente adormecida por la espera, al revivir tu pudor ante la entrega.
Una entrega que fue maravillosa porque además de corporal también lo fue de alma, en una mezcla de sonrisas, querencias, ansias; de todo lo que nos conforta en un beso, una caricia, una mirada, haciéndola una entrega genuina que trascendió nuestros cuerpos desnudos y el deseo de experimentar el placer físico.
Una ofrenda dónde las mariposas en su revoloteo abandonaron el vientre para emigrar en piruetas al alma, convirtiéndonos en un solo ente en explosión de sensaciones y sentimientos mutuos en el frenesí dónde buscamos refugio y en incandescente deseo nos fundimos en el embestir de la pasión que nos asaltaba, ahogando en las humedades las huellas de la ausencia.
A pesar del tiempo de nuestra existencia mis ojos te perciben más bella en cada acercamiento. Esa mirada, esas caricias que nos damos al aproximarnos activan las inmortales mariposas que solazan en tu hermosa elipse senil, en tu existencia maravillosamente eterna, en la juventud que te desborda, sin jactancia sino por aprobación del universo.
Agradezco seas surtidora de mi alegría, que hayas llenado el hoyo de la soledad antes sentida y que mantengas en mí el brillo de la esperanza de una nueva confluencia.
Gracias por velar mis sueños abrigándolos con tu tenue luz, también por los mensajes de amor que escritos con rocío dejas sobre los pétalos coloridos para que yo los lea al amanecer.
Gracias por enseñarme que la felicidad no es mantenerse juntos sino cercanos, aunque existan distancias geográficas.
Te extraño por todo lo que eres en integración. Me haces falta, te necesito. Por eso, cuando la desazón de la espera me asalta, busco la calma en el pensarte, en el desear del próximo eclipse total para volver a amarnos en los bordes silenciosos de su umbral.
Mientras tanto te seguiré enviando serenatas entre auroras y ocasos en cuitas de amor y nostalgia que en tu lejana presencia me ayuden a soportar tu falta. Me despido de ti con un beso en el oeste, deseando que en el horizonte toque tus bordes plateados en el halo iridiscente de mi ensoñación.
Te amo…El Sol
Despreciable Rafael
Hoy se cumple un año desde que cobardemente te marchaste dejándome sin explicaciones. Posteriormente me enteré por medio de nuestros amigos que te fuiste con otra con quién desde hacía tiempo mantenías una relación paralela a la mía. En todo este tiempo no he podido entender tu cinismo. ¡No sé cómo pudiste fingir amarme y compartir tu "supuesto amor" con otra mujer! ¿Cómo puede albergar tanta maldad una persona, como puede actuar con la frialdad de un témpano de hielo?
Lloré mucho tu desamor porque yo si había jugado limpio. Desde el instante en que descubrí tu afrenta el odio se fue apoderando de mi alma, a un extremo tal que hoy estoy convencida de que te odio en una medida desproporcionada, con un odio mucho más grande que el amor que te tuve alguna vez.
Aunque sé que esta carta no destejerá el tiempo para evitar lo inevitable quise escribirla para expresarte este sentimiento malsano que por el momento me ata a ti, sabes que siempre fui espontánea en cuanto a la expresión de mis sentimientos. Me da igual si al leerme tienes alguna reacción desagradable o de arrepentimiento, en verdad, lo que sientas o dejes de sentir al leer esta misiva me da igual, solo escribo para drenar un poco de este veneno que inoculaste en mí al marcharte de forma mísera.
Te odio por la falsa perfección que siempre me mostraste. Mi odio crece ante mi pretensión de desear tu regreso a pesar de haberme humillado. El odio se va insuflando con la impotencia de no poder odiarte cómo te lo mereces y ver como en el ocaso de mi locura brillas entre iridiscencias.
Te odio porque quedaste etéreo en medio de mis pedazos, porque en largas noches de insomnio añoro tus caricias y en los días al caminar por las calles creo verte venir hacia mí envuelto en tu falsa sonrisa.
Te odio porque mis sábanas aún tienen tu aroma aun después de lavarlas con cloro, te odio porque mi corazón se acelera al escuchar tu nombre.
Odio desear tu regreso en cada estrella fugaz que se consume en el firmamento. Odio que ocupes mi primer y último pensamiento en el día. Odio que te cueles por mis poemas haciéndolos tristes. Odio haberte idealizado caminando de la mano entre las canas y arrugas dejadas por el tiempo.
Odio ver cómo te llevaste lo hermoso que nacía en mi corazón. Odio saber que dejaste en mí la desconfianza de la entrega genuina. Odio saber que serás el último amor en mi vida.
No quiero volver a verte jamás, y si por casualidad el sádico destino nos cruza en el camino, sigamos adelante como dos desconocidos, hagamos como si nunca nos hubiéramos conocido.
Con todo el odio que brota de mi corazón
Valeria
Esmeralda Navarro Teuffel
El Consejo Estado Aragua Venezuela
Venezuela 25 enero 2023
Julia Mujica.
El Cielo - Plano Celestial.
La presente, mi querida mamá es para saludarte con un gran abrazo, con la intensidad de todo mi ser, con mi corazón, mente, alma y cuerpo; acompañado de un gran beso. Este saludo deseo que, se prolongue en tiempo y espacio.
Aprovecho esta misiva, lo cual es el motivo principal; para agradecerte infinitamente, por tanto amor demostrado, en todo momento que, estuviste conmigo, inclusive antes de nacer, o sea, me estaba formando en tu vientre; y aconteció una situación inesperada para ambas, como lo fue, que al darle la noticia a papaíto, él solo te preguntó, en su escaso español: “ Que es, niño o niña?.” y tú le respondiste:
“ Todavía no lo sé, sólo tengo un mes y medio de embarazo” y yo me pregunté: “Porque?, sería que mi padre fue algo cruel, con esa interrogación. Y tú me comentaste que, mi primer hermanito nació muerto, pero que, no lo creías hasta que, ese mismo día de su nacimiento y fallecimiento; te aclararon que, fue lo qué pasó, y lo aceptaste, con cierta resignación, más él, no tanto por lo cual, su deseo era que tuvieran un niño. Su anhelo se intensificó cuando lograste salir embarazada por segunda vez, con un nuevo entusiasmo para ambos, pero el resultado fue el nacimiento de una niña, mi hermana mayor.
Disculpa, amada mamá, que te recuerde todo esto, pero fue en base a ello, que desarrollé todo mi amor y consideración hacia ti.
Retomando, lo relativo, posterior al conocimiento de la noticia de tú embarazo a mi padre, el tercero por lo cual él, no se mostró muy entusiasmado al ver que tú, no tenías respuesta del género del bebé. En consecuencia, asumió que, sería un niño, por lo cual compró toda la lencería, ropa, e inclusive la cuna de color azul. Y Seguidamente se fue, para su país natal, sin darte mucha explicación. Tu reacción fue, de valientes, lo esperaste pacientemente, quince días, ya después decidiste ir a buscarlo, a sabiendas del riesgo, que significaba, tanto para tu salud como para la mía; te fuiste dejando a cargo de mi hermanita a tu hermana, mi tía. Al llegar allá, como realmente no sabía mi sexo, lograste traerlo rogándole a Dios que, yo fuese un niño.
Por supuesto al no ser así, papaíto me aceptó, con mucha alegría. Quizás en base a lo acontecido y reflexionar de que, no tendría sentido dejarme sin padre por cierto tiempo.
Amada, querida, recordada e inolvidable Madre, mi querida mamá, como siempre te lo expresé con gran orgullo; mi héroe femenino, favorita, que mujer maravilla, ni que gatubela, tu eres: ¡Mi Mujer Maravilla! ¡Gracias! gracias!
¡muchísimas gracias! querida mamá por tanto amor: ¡GRACIAS!
Me despido con la alegría de saber, que al igual que yo, tu también estás muy orgullosa de mi. Un fuerte abrazo y besos. Te quiero mucho.
Atentamente, tu hija: Lenny Julia.
Hermi Julia Rodríguez M. Naguanagua Venezuela
Fecha: 31/01/2023
Para ti con sincero aprecio.
Desde que te tenía en mi mente, te amé. Desde ese mismo momento en que te idealicé, surgió en mí un sentimiento inmenso de alegría, de compromiso y estabilidad. Mi cómplice puso su parte y así has crecido con sabiduría y regocijo. Sé que me escuchabas hablarte, sé que sentías mis latidos como yo sentía los tuyos. Nueve meses pasaron para tenerte conmigo, y aquel día de octubre en que llegaste inesperadamente, aunque nos diste un gran susto casi hasta el infarto, fue el día más jubiloso que hasta el sol de hoy recuerde. Te llenamos de mimos y amapuches, te dimos calor de hogar, te dimos una familia y preciosas mascotas. Jugaste, conociste, lloraste, reíste, amaste, viviste y hoy que te has convertido en un hombrecillo, solo puedo darte las gracias por existir y darte la palmada de la suerte para la vida que como adulto habrás de empezar ahora. Por último, nunca olvides, que estuviste dentro de mí y a dónde quiera que vayas, seguiré sintiendo tus latidos dentro mí.
Con amor, tu mami.
Valles del Tuy, 20 de enero 2023
A mi amor eterno.
Aquí en la habitación, con su azul de mar y su amarillo de primavera, inmersa en mi ocurrente soledad como testigo, quiero dedicarte estas líneas que me han llevado años escribirlas, pero que al final, entenderás lo grande de este corazón enamorado.
Jardinero de mi amor eterno, he llenado mi alma con tantos recuerdos hermosos que no sé cuándo parar de vivir ésta realidad, no quiero despertar, ¿a quién le gustaría dejar lo dulce del amor?
No es fácil definir un sueño, menos si es la raíz de tantos suspiros, risas y besos. Amor de mi alma, me has dado una vida placentera, apasionante, embriagante. Me has dado alas y volé por lo imposible, desafié costumbres, conquisté mi esencia sin reprimir sentimientos.
Ante ti, escaparon mis deseos como aves ante un trueno, con energía infinita de alma quinceañera. Sin límites ni razón, consumí el néctar del amor, mientras tú abejorro, borracho de miel, te rendías debajo de la tormenta sobre mi pecho, donde mi corazón relampagueaba como el Catatumbo en pleno abril.
He sido feliz en este espacio de tiempo, no me arrepiento de nada, me perdí en el amor y que divino, cielo de mi vida. Como una vieja canción, repito que no importa los años mientras la vida te sonría. He vivido este sueño con más tiempo reflejado en mis canas y lo divino es que me acompañan por el camino, mis sueños, mis anhelos, mis esperanzas y mis letras. En mi alma llevo, tu olor, tu aliento, tu respirar y en mi cuerpo, donde mis jóvenes años ya han pasado, el regalo de tus manos. Hoy amor eterno, toco el cielo, donde la distancia física es tan solo un recuerdo, permaneces en mí y no quiero lo contrario. Y si de futuro se trata, te llevaré por siempre en lo más profundo de mi ser, cambiaré el dolor de mis huesos por cada palabra bella que de tu boca emerja, cada desesperación por un beso y cada pensamiento lo dejaré en tus acogedores brazos, en los cuales me acurruco sintiendo los latidos de tu corazón inquieto, ardiendo en ellos cual fogata de sensaciones, llegando a una hipotermia, donde reinan las miradas y sobran las palabras.
Este amor por ti, es eterno. Prometo no olvidarte, no por mártir, es que no quiero amar así otra vez, sería como renunciar a tus labios, o perder la divina sensación de ellos en los míos.
Confieso con fe que he vivido, porque así lo decidí, pero tú me has aportado grandes y espectaculares momentos. Bailamos, cantamos, mientras tus chistes y ocurrencias me mataban de la risa, luego inerte y rendida me despertabas con tus besos. Me has dado lo mejor de ti, tú verdad.
Antes de cerrar mis ojos, espero que me tomes de la mano, me des el último adiós y me digas “lo sé, lo sé”, cómo respuesta a mi confesión eterna. Te amo y mucho, por siempre.
Mirtha Hernández Barraez.
Valles del Tuy Miranda Venezuela
A mi soledad.
Soledad, llegaste sin ser invitada, como intrusa fantasmal recorrías el espacio. Un buen día el universo se encargó de cambiar todo lo que era mi existencia. Caminaba como sonámbula sin saber a dónde ir o que hacer. Y las letras me dieron refugio, el lápiz y el papel fueron la ventana de grafito donde escribí canciones, versos, poemas enteros, cuentos, recopilé viejos escritos, dibuje, pinte y empecé a soñar.
Soledad, te puedo decir que cuanto más te vivo más te siento. La ausencia en la habitación me confundía, te odié tanto por haberme quitado parte de la vida. Pero como un acto de amor, desde la esperanza, escribí unas letras de despedida a ese gran ser y padre de mi hijo. Al hombre que me dio el más maravilloso regalo, ser madre. Abriendo así, un pedacito de cielo claro en la noche más oscura, donde pude ver la claridad y llenar de luz el alma. ¿Acaso necesitaba esa soledad para volver a escuchar las palabras que tiempo atrás resonaban en mi cabeza?, saludé con vehemencia las blancas hojas, abracé lápices y colores.
Soledad te convertiste en lámpara y alumbraste con fe los días más amargos. Como intrusa positiva me llevaste a descubrir lo importante de cada día. A aceptar el tiempo bueno y no tan bueno. A pesar de que me inundé en pena, dolor y llanto, por la partida de quien por muchos años me ofreció su compañía, con un hueco en lo cotidiano empecé a caminar, pero ahora como viuda.
Este corazón roto tiempo después de la turbulencia, recibió del universo el sentido de la soledad. Refugio y grandeza del alma, recuerdos, aquellos que dieron a mi existencia pasión, risas y deseos. Aquellos que me brindaron aromas, besos y abrazos. Aquellos que ofrecieron color y esperanza a mi vida. Recuerdos, donde tú, hombre, amigo y amante, me llevaste de la mano por caminos de ésta hermosa tierra.
Soledad, ofreciste a mi alma un espacio de profundo reposo, paz, tranquilidad y la oportunidad de aceptarme y amarme, a tomar decisiones sin temor a mí esencia, a la vida, al que dirán y al mundo entero. Hoy frente a ti, te puedo decir que otorgaste valentía a mi vida. Fuente de creación, centro de mi propio ser, como acuarela en el papel dibujé paisajes y pinté de color la vida.
Con la fe en la palabra del padre celestial le pido, que llegue al cielo un profundo agradecimiento por lo vivido. Me despido aceptando tu ausencia y un nuevo comienzo. El universo aplaude mi espíritu y fortaleza para aceptar el destino. A recordar con amor y sensatez a quien siempre permanecerá en mi pensamiento y abriendo mi corazón a un nuevo camino, donde levito extasiada de felicidad digna y dueña de mí soledad.
Hoy las letras danzan en mi cabeza, me permiten escribir a tu alma callada, esta carta. Abrazando el amor y la vida, te envió un beso.
Venezuela; enero de 2023
Estimada: Isabel Mebarak
He pensado en unas mil trescientas cincuenta formas de escribirte, como todos sólo sé la superficie de lo que te acontece y aunque probablemente nunca lo sepa y al decir verdad, creo que no podré con esa verdad, quiero dedicarte éstas líneas porque me has hecho soñar, al ser el sueño que me quita el sueño, te he querido desde que te vi en un programa matutino de tv en Venezuela bailaste y dijiste que “ya no lo harías más porque te avergonzaba” sin embargo; esa forma de bailar llenó de alegría por la gracia y expectación que provocabas, con tu talento, voz y baile llegó la fama y con ella los amores, nada es casualidad.
Estar solo o acompañado no es casualidad, son altibajos que nos conducen a un camino creado con manos algunas veces y otras con las ilusiones y el corazón, aún no te hablo de muchos sueños, los rotos y los remendados, sé cuán difícil es encontrar el sol en una mirada y por eso hay días nublados y aunque sean muchos no permitas como dijo Rabindranath Tagore (parafraseo) “si lloras por haber perdido el sol, que las lágrimas no te impidan ver el brillo de las estrellas” hay estrellas que pueden iluminar tus pasos, principalmente tienes dos soles que te enternecen, enfurecen y enloquecen, a esos soles yo les digo “Hijos”.
Estimada… solicito tu atención en éste particular, muchas veces el resentimiento nos lleva por caminos escabrosos, el corazón se llena de raíces que dan frutos amargos y la vida, así no es vida, es hundirse, perderse, dormirse, ver pasar las horas y despertarse a reaccionar no en pensar, te conozco como alguien cuya inteligencia le lleva a hablar más de un idioma, que ese idioma no sea el rencor, que creas la música de lo que vives y sueñas…Creas, no destruyes, que nuestros pasos dejen huellas en la mente y los corazones, no cicatrices y como dice una canción de una de mis artistas femeninas más completas en la historia de la música latina “pesa más la rabia que el cemento”.
Lo sé…supongo que escribir sobre el amor y otras viejas costumbres de la humanidad te deja entre amor y odio, debo agregar la forma inexorable del tiempo que no solo te hace existir un poco más, sino más sabio, aprendí que tiene más sentido un abrazo y caricias que trescientas palabras…sigo aprendiendo que los afectos no tienen precio y hacerte sonreír tampoco…si, aquí estoy dejando que mis líneas hablen, griten, lloren y lleguen hasta los abismos del corazón, a esas distancias que no se pueden caminar, volar, ni navegar, me sumerjo en un océano desconocido, entendiendo que jamás comprenderé lo que hay en el corazón de una fémina, y allí en el borde de la razón quiero llegar hasta el borde del corazón para que comprendas al fin, que muchos te queremos…de un modo “inevitable”.
Con gran afecto, su amigo de las líneas:
Alexander Walkers.
Lino Alexander.
Estimado amor:
Te escribo esta carta porque tengo roto el corazón. Quisiera hacer contigo mis pasantías de amor, soy un fracaso en eso y tú un maestro de honor.
Perdí lo más preciado, hoy como lo lamento.
Empezaré desde cero y obtendré un ciento por ciento.
Me graduaré cumlaude en materia del amor y con la frente en alto sembraré de nuevo una flor.
Quiero que nutras mi alma de fantasía y color para que toqué mis sentidos y broten a flor de piel.
Donde mi jardín lleno de amores se extienda a otros corazones y así formar un paraíso repleto de bendiciones
Te espero con ansias
Bergeny Pérez.
Santa Cruz Aragua Venezuela
Muy apreciado: Ausente
Hoy te escribo estas líneas que estoy seguro leerás o escucharás dónde quiera que te encuentres; porque lo hago con mucho cariño, hoy en tu día papá. Aunque no crecí a tu lado físicamente claro está, espiritualmente te he tenido presente, gracias a mi mamá; quien me contó las maravillas que hubieras hecho como papá.
Siempre te agradeceré aquel día bendito en el que ardió la llama de la pasión y el amor y se formó un embrión que hoy en día soy yo. Tranquilo papá no temas, yo soy muy feliz de verdad, por eso no albergo rencores y para mí la vida es felicidad.
Dios ha sido mi fuente de luz al igual que mi mamá; quién me ha enseñado lo bueno y lo malo que me puede pasar, ha cuidado de mí cuando mi salud se pudo quebrantar, salir a la calle a trabajar para que el sustento no me vaya a faltar.
Siempre ella me decía: esto también lo haría tu papá, que por cosas del destino está ausente nada más.
¡Sabes ya eres abuelo! Tengo dos preciosos hijos quienes te adoran y te piensan al igual que yo papá.
Feliz día papá siempre te voy a recordar
14 de febrero de 2023
Para: Joaquín.
Hola Joaquín. En este San Valentín, te escribo con un único y puntual objetivo. Expresarte sin tabú que te odio. Sí, te odio por hacer de mí la mujer que no quería ser. Por hacerme conocer eso que llaman amor y que ahora se ha transformado en un horrible desamor. ¿Quién te dijo a ti que yo quería enamorarme?, ¿Quién te dijo a ti que yo quería ser tu amante?, has entrado en mi sin permiso y no vengas con aquella sentencia de autoayuda que para amar no se pide permiso, porque el permiso es la misma prudencia que no has tenido, en un acto vil y cobarde hacia a mí. ¿A dónde iré yo ahora con este pecho roto?, ¿A dónde iré yo con mis ganas horribles de estrujarte?, mi rencor es quizá tan grande, que no alcanzan las palabras para expresarlo.
Con amor y odio: Ariana Varela
Posdata: Es un ejercicio que me indicó mi terapeuta. A ver si algún día te supero.
Ariana Varela, desde Mérida, Venezuela.
Valencia; 9 de marzo de 2017
Mi muy amada fugitiva: Esperando estés al alcance de mis pensamientos, en los cuales solo existe para ti un amplio espacio/tiempo de extremo bienestar, tranquilidad y éxito como solo tú mereces.
Me dirijo a ti, tras sofocar el fuego de mis desvelos producto de tu partida, apaciguando mi alma atormentada por tu ausencia presente y buscando el sosiego que tan solo nos otorgan las emociones en forma de palabras escritas.
No recuerdo antes haber escrito una carta de amor, sino llevar muchos años expresando tan solo “palabras”, todas ellas dirigidas a ti, ya fuera que te llegaran o no. En todo caso, haré este (quizá inútil) intento en momentos cuando tal vez el sentir ya no importa. Espero, mi elocuencia sea suficiente para articular frases que como antes, se siembren en tu alma, pero te aseguro que lo que leas, será la fiel expresión del más profundo y desnudo amor que soy capaz de brindar.
No sé por qué, siempre creí que lo nuestro nunca acabaría, tampoco entiendo por qué tengo la sensación de que aún no ha terminado, quizás; me resisto a creer algo diferente, o tal vez siempre viví como “Alicia” que, aunque no era una maravilla, era mi maravilla.
Nunca viví con la intención de hacerte notar mi presencia, pero sí con el propósito de que sintieras mi ausencia, siempre pensé que, en el amor, el mayor anhelo de una mujer era ser amada como yo a ti, al extremo de prácticamente autovetarme para otras pasiones femeninas.
Constantemente creí que, un amor como el nuestro, era suficiente para vencer cualquier barrera, pero definitivamente aún queda mucho por aprender y comprender que puro amor, por infinito que sea, no basta.
Por ello, te juro por lo que no me gusta jurar, que estaba dispuesto a compartir el resto de mi vida contigo, pues no me veo, no me siento, no me hallo, no me quiero, no me da la real gana de estar con nadie más. Mi corazón y mi amor es rebelde, no es de quien me quiere sino de quien me puede y de quien yo quiero. Pero ahora comprendo, que las realidades humanas son otras y cuando uno se resiste a ellas, se muere de desengaño como todo aquel quien vive de ilusiones.
Cuando lo extraordinario se hace cotidiano, como en nosotros el decir “te amo”; lo asumí como inequívoca muestra de amor que ya sembrado, creció, floreció y cosechó dando los frutos y haciéndonos vencedores en momentos que pusieron a prueba nuestra lealtad. Hoy, me resisto a creer que fue la mentira dicha mil veces, convertida en verdad.
No me quiero despedir, pues no imagino tu espíritu y esencia abandonando mi cuerpo, lo que sería equivalente a quedarme sin alma. No sé cuándo leerás estas líneas, ni siquiera si las leerás.
Más… por ahora y para siempre, ten la certeza de que, en la incertidumbre, seguirás siendo lo más cierto e incierto de mi vida.
Irremediablemente tuyo:
Giovamador
Giovanni Amador
Valencia Venezuela
Valencia; 20 de enero de 2023
Mi muy amada señora, dueña de mis días:
Recibe, ante todo, la más fervorosa manifestación de afecto, profundo y amoroso sentimiento como nunca antes he sido capaz de expresarte.
Después de tantos años de conocerte y compartir a tu lado, hoy quiero desnudar mi alma ante ti, y develar mi más profunda conciencia, para mostrarte los pensamientos y sentimientos que me han acompañado a tu paso como parte de nuestra larga y estrecha relación. Relación, que pasó por tantos altos y bajos, que marcó distancias muy cortas como otras largas en nuestras vivencias, en nuestros afectos, en nuestros momentos, que fueron una verdadera montaña rusa de emociones, de alegrías, de llantos, de profundas tristezas, de exaltaciones efímeras, pero al final, indefectiblemente siempre juntos, como solo pueden estar dos personas que se aman sin la más mínima excusa para no hacerlo.
Quisiera comenzar por ofrecerte una disculpa, ¡qué digo disculpas!; solicitar de rodillas tu perdón que, como hombre, y por todos los hombres del mundo (quienes deberían pedir a todas las mujeres del universo), por cualquier malestar, lágrima, ofensa, maltrato, vejamen o humillación que les hayan causado.
Hoy, acudo avergonzado ante ti, por cualquier mal pensamiento que sobre tu persona haya atravesado mi mente, por ínfimos rencores que tus tratos me hayan provocado, por los tonos desentonados en nuestras cortas, inútiles e innecesarias discusiones, por no haber callado cuando debí, y no haberte escuchado atentamente cuando aún la madurez, no era suficiente para entender finalmente que, todo se debía a un amor inconmensurable que solo puede brotar del corazón de una mujer como tú.
Sé que antes de mí, fuiste objeto de uso y abuso de hombres que nunca valoraron la inmensa, extraordinaria e infinita mujer que eres y, aun así, tu sobrenatural fortaleza te permitió sobrevivir, vencer y continuar para seguir repartiendo ejemplo y dignidad por doquier. A pesar de ello, desplegaste en tus hombres posteriores la sabiduría que te ha dejado la vida para hacer reminiscencia de tu pasado en los hombres del futuro.
Ahora, cuando nuestro tiempo juntos pareciera acortarse, solo quiero amarte como nunca antes, rindiéndote tributo para pagar la deuda que la vida, la inconciencia y las circunstancias me ha dejado, y la cual sé que nunca lograré saldar. Por eso, te quiero decir que mi amor por ti, no está supeditado a que tú me quieras, sino que es una muy pequeña retribución al tuyo y que este hombre, arrodillado a tus pies, te brinda con el corazón abierto, para que veas en su interior como está inundado de tu nombre y tu figura.
Por todo lo dicho, por los tiempos pasados, por los que nos quedan juntos y por la existencia que espero sigamos compartiendo; manifiesto sin la más mínima duda, que, si tengo la oportunidad de escoger una mujer en tu rol con quien compartir otra vida, solo tu puedes ocupar como hasta ahora, el lugar de mi madre.
Hasta siempre madre amada
Tu hijo.
Giovanni Amador Valencia Venezuela
Escocia 20 de enero de 1940
Mi querida Yolanda...
Dejo esta carta junto a mi cuerpo, porque no sé, si te volveré a ver, estoy atrapando en un acantilado y gravemente herido, mis últimas fuerzas son para decirte, cuánto te quiero y te amo, no creo que sea rescatado y mis fuerzas se agotan, lamento tanto las veces que te he faltado, pero no olvido los bellos momentos que la pasamos bien, y nos divertimos, los ramos de flores que nunca faltaron y te llevaba con tanto amor, recuerdo como las conservabas, así estuvieran secas, vivimos bellos momentos, pero ya no estaré a tu lado.
¡Oh Dios ¡¿Porque tiene uno que ser separado de alguien que se ama tanto?
Tu amor me mantiene con vida y lucho por volver a tu lado, pero ya no tengo que comer y no tengo energías...
Recuerda siempre, que te amo...
Siempre tuyo.
TOI 700 e, año alfa omega
Al cuerpo que lo encuentre o a las venideras voces envueltas en cuerpo que hoy desconozco, Galáctica AC:
En el principio era la voz de los amantes moviéndose en espiral una en torno a la otra, sin tocarse y la nada les hacía eco. La expansión de las palabras de Ella creaba lunas, de las de Él nacían estrellas, las voces bailaban en un piso de soles y los amantes estuvieron satisfechos.
De una promesa formaron días y noches, susurraron mundos, habitaron uno por vuelta. Ella suspiró el aire, Él murmuró mareas y del canto de los amantes el mundo tembló de vida, se llenó de movimientos y las voces vibraban de emoción pues les gustaba cuanto habían hecho. Su vibrar se hizo grito que fragmentó los suelos y el mundo se cubrió de rocas. El grito de los amantes les dio cuerpo y el cuerpo limitó a las voces.
En el principio era el amor y su voz y la mía.
Y fue el final del principio y los cuerpos no encontraban la voz de los amantes que creara lo necesario para sostener la vida en su mundo inventado.
Desde después de la hecatombe uncronopiovivo
Los Guayos, 26 de enero de 2023
Ángel mío:
Las guirnaldas del tiempo golpean mi ventana, afuera se oye la algarabía por el cadavérico vestigio de un año que culmina. Dime, cómo se llena la ausencia cuando te inunda el vacío.
A la llegada del conticinio, los demonios del pasado se apoderan de mi ser, nublando mi entendimiento; a dónde has ido. La oquedad se apodera de mi esencia y dejas muchas interrogantes sin respuestas.
La cotidianidad nos envolvía en su plácido estar, el despertar y mirarte a mi lado me llenaban de mucho gozo. Ésos días ya no volverán.
Decir que el amor es un espejismo es una vil hipocresía, como no apreciarlo si en cada rincón aparece; en el aroma de una rosa en flor, en el cielo azul que nos cubre con su manto, en el calor de tu piel que me daba cobijo. Aunque el vil destino juegue con nuestras almas y, nos lleve por sendas distintas siempre ocuparás un sitial privilegiado dentro de mí.
Sólo resta elevar una súplica a Lete, para que me libere de tus recuerdos y circundar por los senderos que designe la gran Tetis en la finitud de mi vida.
Hasta siempre, Ángel mío.
Perpetuamente tuya: "cara guapa".
Liliana
De Toma Jiménez
Los Guayos Carabobo Venezuela
Noe.
Escribo esta carta pensando en ti, pero no la recibirás, lo hago porque formaste parte de mi vida y es algo que nunca cambiaré, viviré con ello, aprenderé a hacerlo. Te conocí, nos llevamos muy bien, tanto que comenzamos a frecuentar, me encantaba que me hablaras, que buscaras cualquier excusa para entablar una conversación, que te interesaras en saber de mí, sentía que comenzaba a surgir algo especial, algo que nunca había sentido.
Ese día, que por fin nos sinceramos, se notaba el miedo que teníamos, no era un misterio, ya conocía tu historia, te abriste a mí y me la contaste, sabía que tenías malas experiencias, y yo también te conté las mías, a pesar de eso lo intentamos. Comenzaste a ser parte de mi vida, aunque ahora que lo pienso mejor fuiste mi vida entera, compartíamos mucho, mucho, mucho, y yo amaba eso, todo parecía marchar bien, hasta que me di cuenta el error que eso conllevaba.
Cada vez las diferencias entre nosotros eran más frecuentes, siempre había hecho algo malo, y yo me disculpaba, lo hacía, aunque no sentía que debía hacerlo, porque de esa manera todo estaría bien, pero no era así, siempre había un problema conmigo, y en el proceso decías cosas horribles que nunca creí que alguien me diría.
Solía amar que cuando despertaba ya hubiese un mensaje tuyo, pero detestaba cuando ahora este era uno en donde terminabas conmigo, o uno en donde te disculpabas por una discusión estúpida que tuvimos la noche anterior.
Estábamos siempre juntos, pero cuando no lo estábamos, algo estaba pasando, decías que había cambiado, el ser comparado con tu yo del pasado es una sensación extraña, no siento que cambiara, solo que había renunciado a todo lo demás para poder estar disponible, me alejé de mucha gente, descuidé amistades, me descuidé a mí mismo, y comencé a hartarme de eso, había perdido parte de mí, y necesitaba recuperarlo, pero para eso, debía arrebatártelo a ti.
Mi propia madre ya no te quería, pero yo aún te defendía, entre lágrimas me negaba a dejarte ir, porque creía que podríamos arreglarlo, y así continuó, hasta que dije que ya no más, cambiaron los roles.
Nuestra rutina enfermiza de terminar y regresar duró mucho, ya no me sentía a gusto, y cuando eso pasó, tú comenzaste a ser la que lloraba, me echabas la culpa de ser el que había cambiado, te llamé de muchas formas de las cuales no estoy orgulloso, nunca pensé hablarle a alguien de la manera en la que te hablé, y por eso es que ya se acabó, porque al final solo sacamos lo peor del otro.
Tengo que agradecer algunas cosas, aprendí mucho, quién soy, lo que quiero, y cuánto puedo y debo tolerar, pero no siempre se aprovechan estas cosas, ahora tengo un montón de nuevas inseguridades, y temo porque cuando la siguiente persona llegue, ella pueda ver a ese monstruo que fui durante esos dos años, y por eso te odio.
Simón Silva Caracas Venezuela
Para Gaby.
Te conocí por internet, hace ya más de una década, cuando aún no sabía todo lo que podía encontrarme detrás de la pantalla, creía saberlo. Comenzamos una relación en línea, porque pensábamos que lo nuestro era lo más romántico que jamás haya existido.
Recuerdo que cuando me pediste ir más allá, tuve miedo, ¿cómo podría funcionar tal cosa...? ni siquiera te había visto, solo fragmentos de tu rostro, usábamos un avatar en aquel entonces.
En un principio te rechacé, y supongo que esto fue lo que me sentenciaría más adelante, lo hice porque había alguien en persona que me gustaba, y aún no creía en ese tipo de relaciones, así que renuncié a ti para intentar algo con ella, no se dio, te busqué… y te rogué, sabía que no merecía otra oportunidad, pero estaba arrepentido de no haber visto que tú siempre estuviste allí.
Finalmente me perdonaste, pero siempre había comentarios de cómo te consideré un segundo plato…
Me atreví a contarle a mis padres, y mi padre me acompañó, pero ese primer viaje salió muy mal, nos vimos muy poco, y fue a escondidas, al final tu familia pensó que te viste con un adulto, me terminaste cuando se puso feo…
Pasaron dos años, me buscaste, te disculpaste por todo… me planteaste el volverlo a intentar, insististe en que sería diferente, y yo te creí. Mi padre aceptó, así que repetiríamos el viaje, no recuerdo por qué, solo sé que estaba complicado conseguir un boleto para ir, así que te quedé mal un par de veces, hubo una vez, cuando sentí que lograría ir, me quedé esa mañana en la larga fila desde bien temprano, intentando conseguir un boleto, cuando me di cuenta de que no podría llegar… comencé a llorar. Fue la primera vez que lloré así por alguien.
No te volví a decir nada, hasta que fuese algo seguro, te lo comenté, pero ya no me creías, sin embargo, fui, en autobús durante 6 horas, planeaba lo que haría, mientras miraba la larga carretera que parecía no acabar.
Al llegar, te llamé y te hice asomarte por la ventana, como prueba de que iba en serio, me recibiste, pero al abrazarme, lo sentí diferente a la primera vez, sentía que no me querías allí.
Nunca estuvimos de acuerdo en cómo llevaríamos todo, subí al departamento, en donde estaba tu madre, y allí comenzaron las preguntas, yo decidí contar todo… admití que había sido yo el de hace años, y no un hombre mayor como pensaban.
Todo parecía ir bien, hasta que me di cuenta que no lo estaba, tu familia no estaba de acuerdo, y cuando, nuevamente te pedí que hiciéramos algo, no hiciste nada.
Pasaron los años y un día te escribí para saber lo que ocurrió, me preguntaste si te guardé rencor todo este tiempo, dije que no, mentí, para liberarte de esa culpa, porque sabía que solo por eso te importaba, es lo último que pude hacer por ti.
Simón Silva
Caracas Venezuela
Barcelona, 27 de enero de 2023.
ROJO ROJITO, mi gran amor:
Compañero de toda mi vida, el dueño de mi existir, el que no me ha fallado nunca, ni un trazo. Nunca he sabido, ni sabré lo que tú ya sabes.
Ahora mismo late que late. Mi cómplice, el que salta de alegría cuando se enamora, por eso te he dicho «eres un delator». Bajo mi camisa, más de una vez quieres saltar de mi pecho y gritar desenfrenado ¡me he enamorado! y ahí te he detenido, porque me avergüenzas y te he susurrado al oído… por favor, tranquilízate, loco del carrizo. Eres un apasionado, igualito a tu color.
Has vivido todas mis historias. Has echado tus brazos sobre mis emociones, soltado lágrimas, reído. Te elevas por encima de la montaña de las emociones; en otras caes al fondo, al laberinto del «no sé qué pasa».
Tienes el mando, así y todo, me pregunto: «¿Quién soy yo sin ti?» Segura estoy: «Tú conmigo, yo contigo».
Rojo has amado con todo el corazón, has sido correspondido, sufrido desengaños, latido con la fuerza de un caballo a galopes.
Ja, Ja, Ja, corazón, amor, ¿recuerdas nuestras visitas al cardiólogo para atender tus demandas de cuidado? Un día le pregunté al doctor: «¿Cómo salió el electrocardiograma?» Y me contestó riéndose: «Rayado, full rayitas, parece un crucigrama». Le contesté: «¿Cómo así?» Él respondió: «Tu corazón es un campeón. Sigue sano, fuerte, vigoroso. Claaaaro, con sus achaques, propios de la edad. Ya no tienes 15 años. Felicitaciones».
Sin embargo, de esas cosas que asustan, donde trabajaba ordenaron exámenes a todo el personal. En el control cardiológico, recuerdo Rojo «paraste las orejas, prestando atención». La doctora especialista que nos tocó empezó a examinarme. Una vez, con el electrocardiograma en la mano, me preguntó: «¿Tú te sientes bien?», a lo que le contesté: «SÍ». Insistió: «¿No te cansas cuando caminas?». Le dije: «No, incluso yo troto con regularidad». Ella se quedó pensando y salió del consultorio. Regresó con otros médicos y les consultó mi caso. Oímos que les dijo: «No puede ser». Ellos dijeron: «Es bien raro» y se fueron. Ella se subió a la camilla y se sentó a mi lado: «Estoy alerta, pero positivamente asombrada de tu situación cardíaca. Me alegro por ti, tienes un corazón único».
Rojo recuerdas… al salir de esta consulta enfilamos rumbo a la clínica donde mi médico de siempre. Le expliqué al doctor lo que había pasado y me pidió el examen, pero no lo traje. Dijo: «Es una lástima». Inmediatamente me practicó un electro... con resultado excelente. «Todo está bien». La angustia desapareció.
Rojo amado, en la línea horizontal de la vida con su principio y final, has participado dentro de mí en el nacimiento de otros rojitos y esos rojitos, a su vez, con otros rojitos; en un sinfín...
Rojo eres letra, canción, música, color. El tun tun que suena en mi pecho, sin parar. Dueño de la frontera Amor/Odio. Te amo.
Siempre tuya,
Barcelona. España