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Plantas que nos cuidan
E L A J O
y el tomillo grandes aliados�
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Si pensamos en el ajo y el tomillo, pensamos en cómo los usamos en nuestros platos de comida, en los sofritos, sopas, aderezos, salsas, tostadas, etc…Pero no solemos pensar en ellos como plantas medicinales.
el ajo (allium sativum)
El ajo es uno de los alimentos medicina que llevamos usando desde hace siglos, al igual que sus primos hermanos; la cebolla, el cebollino, la cebolleta y el puerro. Todas estas plantas son de la familia de las aliáceas, comparten muchos principios activos y a la vez muchas propiedades medicinales. Su principio activo estrella, que seguro que alguna vez habéis oído, es la alicina. La alicina no está, en principio, presente en el ajo tal cual. Se tiene que generar a través de la garlicina y la alisina. Al entrar en contacto con el aire y mediante dos enzimas (la aliinasa y la aliína), se combinan y generan la alicina, también llamada disulfuro de dialilo. Para facilitar que esto suceda, se recomienda pelar los ajos, machacarlos un poco y dejarlos reposar unos minutos. Después ya los podemos usar en la receta que estemos haciendo. El ajo, además de alicina, contiene más principios azufrados y vitaminas como la vitamina A, b y C. Es interesante saber que si no se produce la alicina, entonces tendremos un ajo rico en disulfuro de alilo. Está muy presente, por ejemplo, en el ajo molido.
Útil frente a enfermedades respiratorias y mucho más
Se ha demostrado que muchos de los componentes del ajo, incluidos los principios azufrados, son muy activos frente a virus como el virus b de la infl uenza (la gripe), el virus tipo 3 de la parainfl uenza, el virus tipo 1 del herpes simple, entre otros. Es muy útil como antibiótico natural, en caso de otitis, bronquitis, faringitis, pero también en catarro y gripe. Además de tener su acción antiséptica, es expectorante ayudándonos así a eliminar el exceso de fl ema. Es útil en caso de cándida, herpes labial, pie de atleta, en verrugas y en caso de gusanos intestinales. Tanto de forma interna como externa.
una joya para nuestro sistema circulatorio.
El ajo ayuda a que los niveles de colesterol sean los apropiados, previniendo la aterosclerosis. El ajo tiene actividad antiagregante plaquetaria, eso signifi ca que la sangre va más fl uida, además es un buen vasodilatador. Esto es debido a sus derivados azufrados, previniendo posibles trombos y trombosis. Además, ayuda a bajar la tensión arterial. Posee una acción antioxidante muy importante. Esto ayuda a ralentizar el envejecimiento. Es muy útil en caso de trombofl ebitis, varices, hemorroides, sabañones, etc... Ya hemos visto que el ajo es un gran aliado para tener una salud de hierro y pasar un invierno estupendo, pero ojo porque tiene ciertas contraindicaciones.
Contraindicaciones del ajo.
A dosis elevadas puede provocar irritación en el estómago. no se recomienda su ingesta en caso de acidez de estómago o gastritis. Cómo hemos dicho, al ser un excelente vasodilatador es mejor evitar tomar grandes cantidades en situaciones que puedan provocar una hemorragia. Por ejemplo, una semana antes o después de una operación. Si tomamos algún medicamento que anule la coagulación sanguínea (como Sintrom o Adiro), incluso algunos medicamentos que bajen la tensión, debemos consultarlo primero con nuestro médico o enfermera, ya que puede potenciar su efecto.. no deben consumir ajos las personas afectadas por porfi ria.
¿y como lo podemos tomar?
Se recomienda tomar dos dientes de ajo al día, crudos. Lo ideal es tomarlo crudo para tener todas sus propiedades intactas. Se puede combinar con perejil bien cortado para bajar su intenso sabor y aroma. Aquí os dejo dos de mis recetas preferidas con ajo, las más sencillas y más útiles, para que las tengáis en vuestro botiquín natural en casa.
ACEITE DE AJO
Este macerado de ajo nos ayudará a aliviar la infección en caso de otitis, dolor de oídos y las molestias que suelen aparecer durante la gripe o catarro. IngREDIEnTES • 7 dientes de ajo. • 125 ml de aceite de oliva virgen o de girasol. • bote de cristal con gotero. ELAbORACIón En un frasco de cristal añade varios dientes de ajo machacados bien y cúbrelo con aceite de oliva virgen o de girasol. Cierra la tapa y deja al sol. Déjalo macerar varios días, incluso puedes hacerlo por 15 días. Recuerda que debes agitar el envase todos los días. Pasado este tiempo, fi ltra bien y guarda el aceite macerado en un bote de cristal con un gotero o cuentagotas. DOSIS La dosis dependerá de la infección que tengamos. Puedes usarlo varias veces al día. Lo normal, son dos o tres veces si estamos en fase aguda. Lo ideal es usarlo de manera preventiva o en cuanto sintamos los primeros síntomas. Si los síntomas empeoran debemos acudir a nuestro médico de forma urgente. ¿CóMO LO USAMOS? Calienta el aceite hasta que esté tibio (37-40º máximo), nunca caliente, y echa 2 o 3 gotas en un algodón y pontelo en la zona afectada. Si lo va a usar un niño, empapamos un algodón con un poco de aceite (esto dependerá de la edad del pequeño) y se lo pondremos con cuidado en el oído, o mejor, aplicamos el aceite mediante un suave masaje alrededor del oído. Si el niño es un bebé, solo le daremos un masaje con el aceite alrededor del oído.
JARABE DE AJO
IngREDIEnTES • 2 cabezas de ajo. • 250 ml de agua. • 100 gr de azúcar moreno o miel. El endulzante que prefi eras. ELAbORACIón Echa las cabezas de ajo bien ralladas en un cazo junto al agua (primero recuerda machacarlas antes de cortarlas). Deja a fuego medio-bajo durante al menos 15 minutos. Pasado este tiempo, fi ltra bien dejando solo la infusión. Echa el líquido obtenido (la tisana) en el cazo a fuego bajo y añade el endulzante, remueve hasta que se disuelva todo bien y cree una mezcla espesa. Cuando el endulzante esté bien disuelto, aparta del fuego y envasa en un recipiente de cristal adecuado. Cuando el jarabe esté templado, guárdalo en la nevera. Si está bien refrigerado nos durará en perfecto estado de seis meses a un año. ¿CóMO LO TOMO? Se puede tomar dos cucharadas al día, en dos tomas. Se toma mezclado con un poco de agua o zumo. Si lo va a tomar un niño, se le puede dar una cucharada al día (darle una cucharadita de postre en una toma y otra en otra toma), mezclado en agua o zumo.
TOmIllO (Thymus vulgaris)
El tomillo es muy rico en aceites esenciales, sobre todo, en timol y carvacrol. Estas esencias le confi eren muchas de sus propiedades medicinales, por ejemplo, ser un estimulante del tono vital, o ser un buen expectorante. Es muy útil en problemas digestivos y es un estupendo tónico del apetito, además de ser un buen carminativo (ayuda a eliminar los gases). Se usa especialmente para mejorar digestiones pesadas, disminuir los gases y tratar la gastritis crónica. También se recomienda como antidiarreico. Además, sirve para eliminar parásitos como lombrices y tenias, gracias a su propiedad vermífuga. Ojo, no podemos usarlo en grandes dosis ya que puede tener efectos estupefacientes.
para molestias bucales
Por sus propiedades antisépticas es muy útil en casos de dolores dentales e infecciones de encías. También en halitosis y gingivitis. En estos casos se suele usar en gargarismos, enjuagues, pasta de dientes casera, etc...
para patologías de la piel
Al ser un excelente antiséptico se usaba mucho para limpiar y tratar heridas y úlceras, en casos de dermatitis, en infecciones cutáneas y hongos. En casi todos estos casos se usa de forma externa.
para trastornos del aparato respiratorio
Por sus propiedades como expectorante, bactericida, antivírico, antifúngico y antitusivo, lo usamos de manera habitual en casos como asma, neumonía o sinusitis. También es estupendo para eliminar la tos, el catarro y la gripe.
para casos de inapetencia
Al ser un buen tónico vital podemos usarlo cuando padecemos de cansancio, astenia o fatiga. Tanto en infusiones como en aromaterapia.
para problemas del aparato locomotor
En caso de dolores reumáticos y en gota, podemos usar de manera externa alcohol de tomillo. Es un preparado alcohólico similar al alcohol de romero, pero en este caso se elabora con tomillo.
INfUSIÓN DE TOMILLO
Para tratar y prevenir el resfriado IngREDIEnTES • 30 gr de hojas de llantén. • 20 gr de yemas de pino. • 20 gr de fl ores de malva. • 10 gr de raíz de malvavisco. • 20 gr de hojas de tomillo. ELAbORACIón Y USO Ponemos agua a calentar, cuando rompa a hervir echamos tres cucharadas de esta mezcla por taza. Lo dejaremos hervir unos cinco minutos y retiraremos del fuego. Dejamos reposar de cinco a diez minutos. Pasado este tiempo, fi ltramos y nos lo bebemos poco a poco. Podemos beber de dos a tres tisanas al día. Si queremos, podemos endulzarlas con un poco de miel e incluir unas gotas de tintura de propóleo o equinácea.