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ESTACIONA Y JUEGA : DE L EQUIPAMIENTO URBANO QUE OCUPA ESPACIO EN LA CIUDAD A UNO QUE LE DEVUELVE ESPACIOS LÚDICOS
por Karina Izquierdo
Esta aproximación danesa al urbanismo, en la que un elemento de infraestructura urbana es reinterpretado como un espacio comunitario y verde, resulta inspirador para transformar y repensar el diseño de las ciudades de nuestro país y devolver el valor social y ambiental al entorno.
¿Qué y dónde?
En 2016 el grupo de arquitectos daneses, JAJA Architects, replanteó el uso de los edificios de estacionamiento público al cuestionar cómo podemos desafiar el uso monofuncional del espacio convencional y hacer que la estructura sea un espacio público atractivo.
Las respuestas a estos cuestionamientos se ven plasmadas en la intervención arquitectónica que realizaron al edificio de estacionamiento, parte de un importante plan de desarrollo para Nordhavn, en una zona nueva de Copenhague. Revistieron el edificio de concreto con una capa roja de placa perforada. En algunas partes de la fachada las placas forman imágenes, obra en colaboración con Rama Studio. Las perforaciones crean un ritmo de aperturas y cierres, alineados con intervenciones de jardineras de distintos espesores y disposiciones. Dos grandes escaleras con una barandilla roja continua atraviesan la fachada, que sirve como hilo conductor para guiar al usuario desde el nivel de calle, hasta el fantástico patio de juegos en la azotea. La azotea es a la vez un mirador con áreas de descanso y un espacio dinámico de juego con trampolines y áreas de entrenamiento.
El edificio rojo ladrillo resalta dentro de su entorno, rompiendo con la rigidez estructural de las cajas de estacionamiento tradicionales. El concepto de estacionar y jugar crea una curiosidad en los usuarios que invita a explorar el espacio, dándole una nueva materialidad al paisaje portuario.
¿Cómo?
En México, como en muchas ciudades del mundo, los espacios para el automóvil ocupan grandes superficies de la ciudad, suelen ser cajones grises, muchas veces descuidados y sin valor estético ni social. El paradigma danés plantea revertir el uso único para transformarlo en espacios que devuelvan otro tipo de experiencias a la ciudad. Quizás el aporte social a destacar es que el espacio no está prescrito, los elementos aluden al juego, pero es la curiosidad del usuario —adultos o infantes— la que adecua el espacio acorde a sus necesidades de contemplación, descanso, socialización o juego.
La cantidad existente de estacionamientos públicos en nuestras ciudades, aunado a la falta de espacio y poca sostenibilidad de la construcción nueva, nos lleva a imaginar las posibilidades que puedan dar las estructuras híbridas. Estas soluciones arquitectónicas ilustran la importancia de que las futuras tipologías devuelvan valor social y ambiental al entorno en el que están emplazadas.
Karina Izquierdo es arquitecta por la UNAM, con experiencia internacional en proyectos urbanos y estrategias territoriales, así como consultora en soluciones metropolitanas para la implementación de la Agenda 2030 desde las políticas públicas, el desarrollo urbano sostenible y la participación ciudadana. Twitter @karina_izq
