5-Perdon

Page 1

BASADO EN LA OBRA DE D.L.MOODY

ESTUDIO “LA ORACIÓN QUE PREVALECE” CAPÍTULO 5: EL PERDÓN Lo siguiente es quizá la parte más difícil de todas: el perdón. Creo que esto es lo que impide a muchas personas que puedan recibir el poder de Dios, más que cualquier otra cosa: el que no estén dispuestos a cultivar el espíritu de perdón. Si dejamos que la raíz de amargura contra alguno siga penetrando en nuestro corazón, nuestra oración no puede recibir respuesta. Mateo 6:12 Perdónanos nuestras deudas como nosotros perdonamos a nuestros deudores, Mateo 6:14,15 porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial, pero si no perdonáis a los hombres sus ofensas tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas» • Ésta es la única parte de la oración del Padre Nuestro que Cristo explicó. • Notemos que cuando entramos por la puerta del reino de Dios, cruzamos la puerta del perdón. • Nunca conocí a nadie que consiguiera una bendición para su alma que no estuviera dispuesto a perdonar a los otros. • Si no queremos perdonar, Dios no nos perdona tampoco. • Creo firmemente que una gran parte de las oraciones que no son contestadas, no lo son porque los que las pronuncian no perdonan a alguien. • Vuelve tu mente al pasado, por el círculo de tus amigos y conocidos. ;Hav algunos contra quienes guardas algún rencor? ¿Hay alguna raíz de amargura contra alguien que te haya injuriado? • Si no estoy dispuesto a perdonar a alguno que ha cometido una sola ofensa contra mí, ¡qué cosa tan mezquina y ruin es que yo pida a Dios que me perdone a mí los diez mil pecados de que soy culpable! UN TESTIMONIO DE PERDON Hace años, la iglesia de Inglaterra envió a un devoto misionero a Nueva Zelanda. Después de años de trabajo y de fruto, estaba un domingo celebrando un servicio de comunión en un distrito en que los convertidos habían sido salvajes no hacía mucho tiempo. Cuando el misionero estaba dirigiendo el servicio, observó a un indígena que estaba a punto de arrodillarse para tomar la comunión que, de repente, se levantó y se fue apresuradamente al otro lado de la iglesia. Luego regresó y con calma ocupó su lugar. Después del servicio el misionero le tomó aparte y le preguntó cuál era el motivo de su extraña conducta. El hombre replicó: «¡Ah!, estaba

Adaptado por @JonathanHedz

1


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.