Consejo Ciudadano: reformas a Ley Federal de Radio y TV Reyna Paz
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brir el debate para impulsar una reforma a la Ley Federal de Radio y Televisión que salvaguarde el derecho de las audiencias, contemple mecanismos de transparencia en el otorgamiento de concesiones y haga de carácter público las licitaciones, son temas que retomará el Consejo Ciudadano por la Equidad de Género en los Medios, ante las fracciones parlamentarias y de manera coyuntural, tras el cese a la periodista Carmen Aristegui. El Consejo Ciudadano es una red integrada por 13 organizaciones civiles y algunas diputadas federales y locales. Esta instancia surgió a raíz de la llamada Ley Televisa, por lo que desde 2006 han emitido varias recomendaciones a la Cámara de Diputados e instituciones del gobierno federal para que se piense en una ley de medios que considere a la ciudadanía y no beneficie sólo a determinados intereses. Por tanto, el grupo organizado de mujeres mantiene firme el llamado a los diputados para que legislen libres de intervencionismo y al presidente Felipe Calderón Hinojosa, exigen dé una explicación acerca de lo que entiende por libertad de expresión. Para el Consejo Ciudadano, el despido de Aristegui fue muestra de un acto misógino cometido por MVS y el gobierno federal, mismo que fue secundado por “periodistas” al referirse al posicionamiento de Carmen como un “lloriqueo”, “pataleo” y “arrebato de una niña histérica”. Por eso consideran urgente la promoción de espacios de expresión para las mujeres. La Organización de Estados Americanos (OEA) establece que la democracia de un país se mide por el nivel de participación de las mujeres en el ámbito público y si tomamos a los medios de comunicación como el ámbito publico por excelencia tendríamos concluimos que en nuestro país no hay democracia, refirió la diputada federal Leticia Quezada Contreras. El caso de Aristegui significó una evidente transgresión al derecho de información y también representó una muestra de violencia institucional contra las mujeres, tipificado en el artículo 18, capítulo IV de la Ley Federal de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia. En México la condición laboral de las periodistas no es alentadora, ya que según cifras de la Cámara Nacional de la Industria de la Radio y Televisión, siete por ciento de sus concesiones afiliadas, más de mil 300 con cobertura del 99 por ciento en territorio nacional, se encuentran a cargo de
Zócalo
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Lurdes Barbosa con las diputadas Leticia Quezada y Teresa Incháustegui
mujeres como concesionarias, directoras o gerentes. En radio la participación de las mujeres como locutoras equivale a una cuarta parte y en televisión la participación corresponde a una quinta parte. En 2008 la agencia Comunicación e Información de la Mujer (CIMAC) reveló en la encuesta nacional “Por todos los medios… Las mujeres”, hecha a 200 periodistas de los cuales 123 eras mujeres, que la mayoría de las profesionales féminas ignoraban la existencia del salario laboral de tres salarios mínimos decretados en 1990. En el mismo sentido, detalla que el 61 por ciento dijo contar con un ingreso mensual de entre uno y dos salarios mínimos, el cinco por ciento dijo que recibía ingresos de otras fuentes laborales y el 51 por ciento informó que trabaja entre diez y trece horas diarias con un pago por honorarios lo cual nunca les genera antigüedad.
Consejo Ciudadano Hoy la libertad de prensa en México nos regresa a los 60 y 70, a esa dictadura en donde no había posibilidades de expresarse ni difundir la información con una sociedad acallada y muy manipulada por los medios comerciales, señala Lurdes Barbosa Cárdenas, presidenta del Consejo Ciudadano por la Equidad de Género en los Medios de Comunicación, en entrevista a Zócalo. “No debemos esperar que el ámbito privado nos dé la oportunidad de informarnos ¿por qué pasar por un filtro comercial para acceder a la información”, añadió. “Si no tenemos acceso a estos medios de comunicación, cómo vamos a promover procesos democráticos reales. Me parece un buen momento y celebro la respuesta ciudadana (en apoyo a Aristegui)”, mencionó Lurdes Barbosa. Ante tal escenario la diputada Teresa Incháustegui, puntualizó como preocupante que vuelva a estar presente el ataque por parte de colegas con sus declaraciones de acusación, banalización y denigración refiriéndose a la periodista como “una niña histérica”. lucab_ass@yahoo.com.mx
| marzo 2011