Venezuela
Año 7
21 de marzo 2012
Número 312
www.abcdelasemana.com
Precio Bs.F. 5,00
N U E S T R A
P A S I Ó N
E S
L A
V E R D A D
El ABC de Gustavo Tarre Briceño / Exparlamentario y constitucionalista
Muchos venezolanos piensan que votar por Nicolás Maduro es dar un salto al vacío • Es curioso que nadie diga que el presidente encargado es un hombre competente • El mayor irrespeto lo han protagonizado los partidarios de Chávez con la utilización con fines electorales de la muerte y el dolor • No estamos ante el mismo Capriles • Si hubiera pureza electoral, Capriles lo revolcaría /8 y 9
EDITORIAL
VOTO MATA TRAMPA
JESÚS HERAS Abstenerse es una soberana estupidez. Para nadie es secreto que el CNE no es un árbitro imparcial. Sólo Vicente Díaz, no sabemos realmente por qué, garantiza la equidad de un órgano dominado totalmente por el partido de gobierno, en el que nadie tiene acceso a la nómina de votantes (el padrón electoral) o a los cuadernos de votación, y existe control bidireccional de máquinas de votación que han sido prohibidas en otros países por no ofrecer garantía alguna al elector. Tras la muerte del Presidente, el CNE se ha convertido en una herramienta aún más crítica para la Revolución. No cuenta el oficialismo con el carisma de Chávez y están presentes los mismos intereses que lo llevaron a la muerte, incitándolo a competir. No vale la pena nombrar todos los factores que a la sombra se mueven para retener el poder… todo el mundo los conoce. Conformémonos con afirmar, en aras del espacio disponible, que Cuba no está sola. Por si hubiera dudas sobre la tendencia descaradamente dominante a lo interior del CNE, basta con recordar la imagen de su Presidente, Tibisay Lucena, en las exequias del primer Mandatario, portando en su brazo izquierdo el brazalete del 4-F. Tibisay no esconde su tendencia y por ello se le respeta. Tampoco la esconden 3 de los 4 rectores restantes. Lo que nada quita a lo que hemos dicho.
Aquí y en Tegusiapón, donde quiera que el árbitro no es imparcial, éste hará todo lo que sea necesario para que su candidato se imponga. En su Best Seller, Freakeconomics, su coautor, Steven D. Levitt, un destacado profesor de economía de la Universidad de Chicago, demuestra estadísticamente que el engaño se puede predecir. En uno de sus proyectos de investigación comprueba, basado en el registro de ganadores y perdedores entre los luchadores de Sumo, el deporte más respetado y respetable de Japón, que el fraude se llevó a cabo en muchos partidos. Otra historia interesante es acerca de un empresario que estaba en el negocio de rosquillas y se las arregló para discernir patrones consistentes en hacer trampas a sus clientes en función de sus registros financieros*. ¿Cuán predecible es que un árbitro parcializado fallara siempre en favor de “su” favorito? Es totalmente predecible. Solo la Mesa de la Unidad, diríase por incomprensibles razones “tácticas”, prefiere callar. Debería hacer todo lo contrario. Tendría que afirmar que SÍ HAY TRAMPA…. pero que tal como se demostró en 2004, 2007 y 2010, una concurrencia masiva de votantes, anula todo esfuerzo por alterar los resultados. Abstenerse es de estúpidos. La trampa existe, pero cuando muchos concurren a expresar su opinión, el voto mata la trampa. *Texto tomado parcialmente de un resumen de la obra.
Fernando Mires Eric Ekvall
Vivimos en una
“malandrocracia” en la que fabrican votos al antojo del régimen /6 y 7 Espantapájaros:
Capriles hizo lo que en la guerra hace un buen general: unificar a las tropas dispersas / 10 y 11 Francisco G. Basterra
Santiago O’Donnell
El cambio del papado a América es un adelanto a la sentida necesidad de un nuevo orden mundial / 12, 13, 21, 22 y 23
El Gobierno manipula su propia Constitución en un intento por afianzar al suyo / 14 y 15
Inmolación y muerte de Águila Uno / 5