ARQUITECTURA COMO ACONTECIMIENTO Menci贸n en el Primer Concurso Internacional de Ensayos Acontecimientos Arquitect贸nicos
Autor: Andrea Castro
ARQUITECTURA COMO ACONTECIMIENTO
La arquitectura como una definición en evolución, en constante cambio, en un proceso infinito. Es una definición tan individual como el arquitecto mismo, y cada una en particular cambia a medida que el arquitecto vive, experimenta y descubre. En la contemporaneidad se busca una arquitectura que sea acontecimiento, una arquitectura más del tiempo que del espacio, que se desarrolle en la individualidad de la circunstancias y de la riqueza de la sustancia. Según lo expuesto por Jacques Derrida en su ensayo “Le Différance” la arquitectura debe buscar ser marca en el paisaje que no sea sólo diferencia, que marque dentro de un tiempo que le genere su circunstancia y de allí se expanda como un onda, sin saber cuando acaba, ya que, si la arquitectura es una diferencia sutil en el territorio se perderá en el recuerdo. Actualmente no se busca una arquitectura que se preserve en el tiempo como lo hicieron en la antigüedad, sino una arquitectura que manipule, influya, marque y determine el tiempo. El acontecimiento arquitectónico tiene implícita esa marca que es mayor a una diferencia, que hace particular su gesto, que le atribuye su sustancia. El acontecimiento no puede ser el punto de partida de la arquitectura, sino que la arquitectura en sí misma debe ser acontecimiento. Gilles Deleuze escribe sobre la forma en que deben presentarse los acontecimientos: “El modo del acontecimiento es los problemático. No debe decirse que hay acontecimientos problemáticos, sino que los acontecimientos conciernen exclusivamente a los problemas y definen sus condiciones” Cuando la arquitectura parte de la problemática del acontecimiento genera una respuesta con lo actual, con lo que acontece en el momento, pero puede actuar en contra de la historia, se basa en el presente pero puede actuar en contra de lo que aconteció, o de lo que acontecerá. Es una respuesta inmediata pero no determina que sea una marca en el tiempo, ni que será que
acontecerá. Es una respuesta inmediata pero no determina que sea una marca en el tiempo, ni que será un lugar en el paisaje de quien viva o habite el espacio. Es por ello que la arquitectura debe ser acontecimiento. Según Manuel Gausa “El acontecimiento forma parte de un proceso y a la vez, se revela como algo emocionante e imprevisto. Singular por particular, `proyectivo`. No tanto excepcional –único- como excitante, excitado y excitador. Como una onda expansiva y extensiva. Un evento local de repercusión global: Especial (específico) y general (genérico) y sintomático. Caso y clase a al vez” La arquitectura como acontecimiento implica un tiempo sin límite, una influencia indeterminada, una expansión que deviene del recuerdo que produce en quien la habita. Si bien el acontecimiento puede ser bueno o malo lo importante es esa expansión que deviene de su sustancia y que influencia de manera indeterminada. Mantiene una constante e interminable relación con el territorio que ocupa. Es un diálogo dentro de un campo de acción indetenible, que convierte paisajes en lugares, que es perceptible para quien habita o mora el espacio y lo hace lugar dentro de su paisaje. Por su marca implícita, por ser límite, por ser gesto, por ser individual, por ser singular, por ser expansivo. Es evidente que el tema de este evento ha superado su concepción, en el marco de referencia sólo se ha hablado de acontecimiento como hecho o suceso de cierta importancia, para lo cual podría haberse definido como “Sucesos Arquitectónicos”. Según Manuel Gausa “Suceso es lo que sucede, acontecimiento es lo que acontece […] el suceso es un resultado episódico, coyuntural” . Se ha restado importancia al papel que el tiempo y el proceso le otorgan al acontecimiento, que lo hace diferente del suceso y que lo define como algo mucho más complejo, en lo cual se puede enmarcar la arquitectura como un acontecimiento, como un devenir de circunstancias que se derivan de la sustancia del acontecimiento, como un interminable juego del tiempo y el paisaje.
1 DERRIDA, Jacques. Le Differeance. Conferencia pronunciada en la Sociedad Francesa de Filosofía, el 27 de enero de 1968, publicada simultáneamente en el Bulletin de la Societé française de philosophie (julio-septiembre, 1968) y en Theorie d’ensenble (col. Quel, Ed. de Seuil, 1968), por último en Marges de la philosophie, Collection Critique, Paris, Minuit, 1972. 2 GAUSA, Manuel y otros. cita en Metápolis, diccionario de arquitectura avanzada a DELEUZE, Jacques en: Confrontación Whitehead-Leibniz. 1987 3 DE SOLÁ-MORALES. Ignasi. Territorios. Editorial Gustavo Gili. Barcelona 2002 4 GAUSA, Manuel y otros. Diccionario metápolis de arquitectura avanzada. Editorial ACTAR. Barcelona 2000. 5 GAUSA, Manuel y otros. Diccionario metápolis de arquitectura avanzada. Editorial ACTAR. Barcelona 2000.
Mención en el Primer Concurso Internacional de Ensayos Acontecimientos Arquitectónicos Jurado del Concurso Miquel Adrià. Arquine. México Anabelí Vera. Acción Arte. Venezuela Jesús Yépez. Entre Rayas. Venezuela Autora: Andrea Castro País: Venezuela / Fecha del Veredicto: Junio 2006