El mínimo manual del candidato a infante

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mínimo manual del candidato a infante técnicas lúdicas anti madurez

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obertura, allegro non fingido Todos ustedes padecen de madurez. Condición por demás ordinaria que obliga a sus posesores –sino poseídos– a expulsar por la boca frivolidades escudadas tras una supuesta añosa erudición. Compañera no siempre transitoria de la hipertrofia dubitativa, les arranca hasta la nulidad la lujuria por la aventura. Ustedes, si tienen suerte, sólo viven de recuerdos. Se lamen los bigotes extrañando, intentando retener el sabor recién engullido que no supieron disfrutar. Se olvidaron del domicilio bien conocido del gozo y la esperanza. Les dijeron incontables ocasiones que sus males se irán del cuerpo cuando decidan dejar de reír. Los engañaron diciendo que el único éxito es el material y que algún día la vida comenzará repentinamente a vivirse bien... cuando llegue su buena fortuna, o la edad avanzada, o la interdependencia conyugal. Cualquier bla bla bla fue genérico bueno para envenenarles la ilusión de infancia. Puras farsas todas pero, casi seguro, les queda algún remedio. Verbigracia la cura venidera. Las carnes podrían no arrugarse, pero quien le tema al tiempo, quien no sea capaz de la embriaguez en la sinfonía de la vida, tiene la mitad de dicha vida derruida. Alegrarse sin fingidas sonrisas es la mínima exigencia para no morir muy pronto de viejo. Así nos alegramos aquí, mientras les sugerimos unírsenos. Les fuimos francos, piénsenlo antes de ir a dormitar o sigan leyendo buscándose a ustedes mismos.

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Configúrese Usted mismo.

I

Beneficios inalámbricos.

II

Seguridad elemental.

III

Jocosas relaciones sui géneris.

IV

Básicos usos gestuales.

V

Sobre el abuso del sistema.

VI

Revivir recuerdos ≠ vivir de recuerdos.

VII

Capturar ideas primarias.

VIII

Reinterpretando excesos.

IX

Reiniciar su equipo.

X

De las respectivas caducidades.

XI

Rubros e indicaciones finales.

XII

í n d i c e

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el mínimo manual del candidato a infante ¡Felicidades!, es Usted ahora el contento propietario de un Mínimo Manual del Candidato a Infante. Lo saludamos y celebramos su elección. Ha hallado la llave para ser niño de nuevo. Paséese los ojos por sus hojas y abra su corazón roto lleno de dudas a lo que tiene pa’ decirle. Usted, aunque no lo manifiesta, desea con firmeza volver sobre el camino y esconderse como antaño en el tibio regazo de su santa madre. Desea desde sus entrañas dejar atrás su falsa lucidez. Alégrese. Las páginas siguientes han sido diseñadas para llevar más allá esa condición en la que ahora se encuentra: es Usted, a partir de este instante, un

futuro infante, un aspirante a recuperar su niñez.

Que no le gane el nervio, no queremos asustarle, el lenguaje técnico que pudiera encontrar es pura máscara. El Mínimo Manual del Candidato a Infante le ofrece en pasos simples algún buen remedio para superar los diversos lapsus de esa condición rara que es envejecer temerosamente. No se nos desilusione cuando le enteremos de ciertas verdades. Este Manual únicamente ha sido formulado para enseñarle los tips concisos de

lo que la vida de niño tiene todavía para compartirle.

Encuentre buenas tretas para pasar desapercibido entre la chaviza de ocho a doce… años u horas, como mejor le plazca, que los trotes juveniles pasado el meridiano, después de esto, le van a venir holgados. Cuando Usted no sepa qué hacer, venga de vuelta y vea, pues seguro encontrará alguna buena respuesta.1 Ande y lea despacio, lo que no entienda pregunte sin pena que quienes lo hemos ideado estamos a la orden de sus mercedes.

Verá que no será puro intento en vano...

La información contenida en el presente Manual está sujeta a chascos sin previo aviso. Las únicas garantías para los servicios del M.M.d.C.I. están estipuladas en las declaraciones de esfuerzo y voluntad que se firman implícitamente al continuar la lectura. Búsquele bien. 4Haga el esfuerzo. El M.M.d.C.I. no se hace responsable por errores técnicos ni editoriales, por ningún post mortem ni por omisiones contenidas en el presente lector. Póngase creativo, no todo podemos hacerlo por Usted. 1


configúrese usted mismo Según dogmas básicos expedidos por la Secretaría de Adoctrinación Pública, Natura nos exige cumplirle cuatro pasos antes de llevarnos de nuevo a la tierra. Aseguran que ya que tuvimos la suerte de nacer, debemos cuidarnos para crecer fuertes y luego ir a regarnos por el mundo, a reproducirnos como vestidos todos con espejos. Luego sí, ya podemos morirnos quitados de la pena.

Pues aquí le negamos ese dato que tanto daño le hizo. Nos importa que se reinvente ayudado de los días de las menores angustias. Así que es de importancia que comience a pensarse de nuevo. Que se busque en el cráneo las ideas raras, las que nadie le entiende pero tienen mucho potencial. Las ideas que tiene cualquier muchachito inspirado rayando la pared. Deje de asumirse dentro de un ciclo vital ineludible. Sabemos de las jornadas de doce solemnes horas que Usted ha pasado sin reír. Eso no debería menos que preocuparle, a menos que pretenda cambiar. Necesitamos que quite ciertos vicios rancios de su rutina. Déjese, primero, de horarios laborales y demás excusas vanas y desenos, al menos, 20 ociosos minutos de cualquiera de sus días. Debe ir olvidando el papel monótono del señor o señora que se le hace tarde para llegar a dormir. Es fundamental este mood para seguir leyendo. Debe poner sus prisas en neutral y re contactar con el niño que está dentro intentando reavivarse. Ponga en marcha esta petición. Tome su tiempo, hágalo con prudencia, sabemos que pasó décadas esforzándose por ser parte del rebaño. Busque bien, luego, sus viejas cosas. Entre ellas debe esconderse alguna parte de su espíritu bohemio. Cualquier cosa que lo haga rebobinar es buena, mas tenga cuidado pues los recuerdos chupan el alma y no la dejan respirar. Ahí está como ejemplo el caso aquel tan sonado del buen hombre que encontraron muerto por asfixia melancólica, abrazado a su imagen veinte años más joven, con la sonrisa tiesa de papel mate enmarcada por la mayor condena: The Golden Years. Tenga cuidado, por ello, pues los primeros pasos siempre son delicados. De haber regalado sus reliquias le sugerimos adquirir nuevos viejos tesoros que le devuelvan al menos quince años en el reloj. Vaya a husmear entre chácharas y tianguis de antigüedades y llévese sus buenos pesos. No vuelva sin portar en sus manos un buen luchador con rebabas o una muñeca que le pida de comer. Por ahora no importa si son políticamente incorrectos. Por último, deje que sea menos su pudor y más su fisgoneo. Tápese menos la piel y ponga a andar sin sonrojo su interés por el riesgo y las hazañas nuevas.

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beneficios inalámbricos Le advertimos que durante su proceso estará poco disponible. Es necesario que asfixie un ratito su red social. Deje de twittear unos momentos y rememore aquellos bellos días donde podía perderse en las calles sin temor a no ser geo localizado. Nos han condenado a grilletes de respuesta táctil. Párele al juego en línea y salga a patear un bote o arme la rayuela con personal de confianza; en su defecto burgués, saque el balón oficial mundialero y rompa un vidrio echándose a correr ipso facto. Se dará cuenta que ya no recordaba lo que es la adrenalina ni el escapar hasta fatigarse corriendo bajo el sol. Igual y no lo aguanta, pero habrá hecho el intento.

seguridad básica La seguridad es detalle primario para el candidato a infante. El porte con que recorra los caminos es primordial. La manera en que se comporte le dirá a otros que Usted es el mero bueno. No le tema, entonces, al que se dice muy sabroso, le aseguramos que no lo es tanto. Atrévase a enfrentarse a la gente que le intimida, ellos sienten, muchas veces, mucho más temor que el que Usted experimenta. Le requerimos osadía y confianza en quien es Usted. Que las inermes ideas ajenas no le digan cómo actuar. Suelte la carcajada en medio de la muchedumbre. Lance una sonrisa al peatón desconocido que más le agrade, cante, baile sin música con su pareja y en el determinado caso de que carezca de pareja, invite a la pista a quien sea aún si la pieza que se escucha no es precisamente la que Usted acostumbra bailar. Si no sabe bailar, aprenderá en momentos ulteriores. Si no sabe de qué manera volverse osado, espere algunos pasos al que le insinuará el método efectivo.

jocosas relaciones sui géneris Relacionarse y hacer equipos siempre es tarea complicada, pero es menester dejar en el olvido el complejo del-elegido-al-final. ¿No sabe cómo acercarse a esa dama que le parece interesante?, ¿no sabe qué decirle al guapo de la oficina de junto que parece tener buen paquete? No se nos angustie. El Mínimo Manual del Candidato a Infante le asegura que nada es imposible. Todo se fundamenta en dominar como los grandes el rubro anterior. ¿Ve cómo debe ir despacio paso a paso? La paciencia, si acaso se la enseñó el sistema, es lo único rescatable de su proceso de domesticación. Formar grupos de trabajo o relaciones comerciales muchas veces no va más allá de compartir un “hola” sincero, como quien quiere salir a jugar en la tarde después de clases. A Usted ya se le ha olvidado. Planea estrategias complejas para acercarse al sexo opuesto. Finge pedir la hora o busca la excusa del tema en común para preguntarle el nombre a esa persona que le atrae. Ya no la haga de emoción. Acérquese sin degenere, salude amigable, pregúntele de dónde viene y luego dígale que un día deberían salir a dar la vuelta. Cuando era chico(a), se acercaba a otros en medio del juego y no le importaba si a aquellos Usted podría gustarles. Nada más le pedimos que se acuerde.

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básicos usos gestuales Evidenciar la vulnerabilidad de un agresor como forma alternativa a la violencia es la respuesta adecuada. No todo en la vida se resuelve a madrazo pelado. Ciertas muecas, cuando se aprenden con maestría de niño, bastan para que la gente no sepa qué hacer. Porque los gestos y las señas son sobrias e inocentes cuando se ha vivido de un decenio para abajo. Así que, por ahora, no se exceda haciendo ademanes obscenos que aprendió en la pubertad, no se haga el chistosito con nosotros. Como infante valeroso, no permita ofensas de cualquiera, pero mantenga la calma, sea inteligente. La sonrisa altiva funciona en ocasiones. El arremede burlón es otra pacifista sugerencia. Si es Usted más sofisticado, el silencio bien llevado permite ver hasta dónde a alguien le sigue la verborrea de falacias y vituperios de barato intelecto. Eso sí, le sugerimos no recurrir al acuse y al chisme pues esas son opciones ramplonas que siempre salen de tiro por la culata y se echan encima hasta al que no estaba ni enterado. Conserve la dignidad y enfréntese a los problemas que se le vengan encima. De ser necesario, acuda a cualquier infante experto cercano para recibir lecciones extra. Si nada le resulta conveniente, junte bravura y entonces sí empiece a repartir patadones.

sobre el abuso del sistema

Este no es lugar para hacer reflexiones doloridas del dilema moral que es hostigar a otros chamacos. Ya suficiente tenemos con que el sistema ahora finja poner atención a un caso que tiene de viejo más años que los que tiene Usted o yo. Los ojetes llevan tanto existiendo que bien les ha dado tiempo de llegar a dirigir sus respectivas naciones. Nada más le prevenimos: aquel a quien moleste es casi seguro que con el tiempo se vuelva un genio y termine siendo su jefe. Sabemos de muchos casos, pero no necesita que le contemos. Ahí se lo dejamos para reflexiones nocturnas o cartas abiertas pidiendo perdón.

Dominando los pasos III y V, este problema debería ver disminución en su rutina. Es muy simple: si Usted es el atacado, aprenda a defenderse. Recuerde que no hay valiente que dure cien años… o como sea que diga la gente que sabe.

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revivir recuerdos ≠ vivir de recuerdos Quizá en este momento haya en Usted una inquietud. Adivinaremos su pregunta y la responderemos: no está mal revivir con dicha los buenos tiempos que partieron, mientras no se permita hundirse en el pozo profundo de lo que ya no será otra vez. Si pretendemos en este paso saciar al hambriento recordador interno suyo, es plan con maña. A través de las siguientes sugerencias lo invitamos a pensar la niñez reinventándola. Hasta ahora, suponemos, va haciendo Usted eso consigo mismo. Que sea esta una tregua en su tarea de introspección. Vaya, busque, mire, escuche… disfrute sin remordimientos:

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Floyd Pepper – While my guitar gently weeps http://youtu.be/9IGkhBHsrPc Rowlf the Dog - Beethoven's "Pathétique" http://youtu.be/t9ApIbDlk9Y Bella Bartók - Piano pieces for children http://youtu.be/KvirmZoXzO8 Vince Guaraldi’s Trio – Linus & Lucy http://youtu.be/s1LUXQWzCno Gioacchino Rossini – El conejo de Sevilla http://youtu.be/XZxkRreeoWI?t=1m35s Leroy Anderson – La máquina de escribir http://youtu.be/G4nX0Xrn-wo?t=1m30s AndrewPlaysPiano – A Super Mario piano medley http://youtu.be/IkmqSoi4NDs

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capturar ideas primarias Cuando niño le decían que su letra era bella. Piense en ello. Seguido dijeron que escribía bonito aunque Usted pensara que sus frases estaban todas descuadradas. Olvídese que intentó imitar la letra de adulto nada más por admiración. No se niegue a sí mismo. Olvide la farsa que es el mito de la adultez. Si dejó la letra de niño, minúscula bien garabateada, retómela y juegue a escribir hasta cansarse, que escribir sirve como remedio del alma. No se niegue a Usted mismo, no se obligue a crecer. Recuerde con qué fluidez corrían sus letras y llenaban las planas de cuadernos cuadriculados en días de castigo por hablar en clase. No lo dude: sí se puede dejar una costumbre que le ha acompañado por largo tiempo. Funciona en muchos niveles. Destroce sus dedos escribiendo sin cesar sinsentidos. Cambie todos sus hábitos de escritura e intente recordar su primera infancia, cuando sus ideas, como su letra, eran inocentes y con formas surreales. Si este paso le entume el antebrazo, re inténtelo y de ser posible

mézclelo

armoniosamente con los pasos I, VII y IX, para mejores resultados. Escriba sin miedos de todo cuanto desee, pero sea honesto. La honestidad es factor importante, aunque le duela la mano y el pecho, no por fatiga sino por el esfuerzo de redactar memorias. No importa si le queda feo, poco a poco mejorará. ¿Ya se dio cuenta que las nubes son meros borregos pastando bajo el sol? Dibuje nubes de lana gruesa, correlonas y escandalosas que cambien de forma conforme las abrace el viento. Tome aire profundamente, calce su crayola favorita e intente pintarrajear sin miedo ideas azarosas. Figuras varias que aunque no le digan qué son, le hagan sentir algo. Describa su alrededor usando trazos más que ideas, hable de días cercanos, agarre otro color y siga dibujando. Recuerde cuando las flores podían ser azules y rojas y blancas a un tiempo y la gente se coloreaba del color que fuera sin prejuicios. No piense en perspectivas ni geometría ni otras fruslerías que los pintores expertos pretenden que aprendamos. Usted sólo dibuje, raye sus hojas blancas, sus brazos y las paredes con lo primero que le venga a la mente. Si aprende a destilar sus pensamientos de este modo, quizá esté cerca de volver sobre la calzada del tiempo.

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reinterpretando excesos No le podemos prohibir tomarse la copa que borra sus penas cada ciertos días. Más de un par de veces a la semana si es Usted de los atascados. No lo vamos a juzgar. Es más, si nosotros pudiéramos se la invitábamos y servíamos personalmente. El alcohol es un confite que marea de tan dulce, que lo empalaga confundiéndolo bonito. Por lo que le sugerimos vaya con confianza: parte de volver a ser niño es disfrutar sin vergüenzas vanas lo que nos gusta vitoreándole el favor a la vida. Porque a estas alturas nos hace un favor la vida dejándonos respirar. Así que bébase su vino sin baladí rubor. Si no cuenta con copa, no sienta pena de besar la botella justo en los vidriosos labios. Sólo le pedimos que no sea odioso y que vaya por la vida sin hacer el ridículo. Si se arriesga manejando a manoajena por los enmarañados caminos que terminan en barranco, hágalo con clase. Si ya de por sí su hígado se queja de tanto trago caliente que le erosiona las entrañas, al menos agregue peligros que le engalanen la aventura. Hasta para la malacopa se requiere estilo. No haga tampoco del viernes fiesta nacional: si Usted no celebra estar vivo cada día, el final de la semana no le sabrá con todo su jolgorio. No cifre sus días en las horas no laboradas. La vida se festeja a diario hasta en sobriedad. De otro modo, Usted es puro borracho soflamero. Bébase mi amigo su cerveza de a treinta el par medio frío con mucha espuma. Bébasela para que puedan abrirle otra. Por alcohol al 5% (más o menos) no paran las cantinas. Además es barata y no está tan mal. Bébase de a dos cada media hora para bajarse el calor. ¿Que no sabe bailar? Pues báilele. Los mejores pasos en el danzón vienen de dejar que el cuerpo seduzca sin seguir compases. Ya en la borrachera nadie se da cuenta de cuánto sabe y si se dan cuenta a Usted ni le va a importar. Mientras se divierta, pase el rato y se sienta vivo, da igual si le pisa los dedos a la chica o galán que está igual o más etílico(a) que Usted. Si se enfrenta sin victoria a la sobriedad pudorosa, acá le dejamos la santa estampa, siempre venerada, de nuestra sacra virgen del Wine. Acérquesele con fe a la afable Hianti si nada en las copas logra hacerlo sentir menos adulto.

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reiniciar su equipo Eso que llama su cuerpo ya está muy oxidado, no nos lo niegue. Las bisagras todas le hacen ruidos raros cuando por las mañanas se estira para callarle la boca al despertador. Pero no se acongoje, a todos nos ha pasado alguna vez. Es por ello que en el Manual del Candidato a Infante le sugerimos cambiar su condición. Vaya a dar la vuelta aunque no sepa ni a dónde ir. Agarre la bicicleta y sáquese a pasear sin correa por los callejones empinados de su comunidad. Piérdase una tarde entre los matorrales o cuélese a algún edificio exclusivo y cuente cuántos escalones aguanta a subir a pecho sofocado escapando de la autoridad. Lo importante es salir a gastarse la suela de la bota. A veces Usted parece hecho de hojalata y que tiene el petate instalado justo debajo del sereno. Atrévase a más. Que no le espante si el corazón le bombea a velocidades que nunca antes había alcanzado: es la vida que le está regresando a las venas, intentando construirse un hogar en ese bofo armatoste. Las indicaciones no pueden ser más simples, todo se resume en actitud. Si Usted acostumbra dormir temprano, desvélese un martes y salga a correr a medianoche. Le aseguramos que el vértigo y la sensación de aventura le plancharán algunas arrugas. Nada más no se exponga a lo tonto, no saque pertenencias caras pues nosotros no nos responsabilizamos por la inseguridad que reine en su ciudad, que a fin de cuentas reina en todas. Si esto último no lo convence y se siente expuesto, busque mejores opciones. No es que lo llamemos cobarde, pero solemos apostar que los futuros infantes sin remedio no lo intentarán por temor a soltar la bicicleta estable y el yoga mainstream de un ineficaz budismo malinterpretado. En fin, lo que nos interesa aquí es que se esfuerce físicamente a diario. Los chamacos pueden pasarse días enteros corriendo uno detrás de otro, Usted al menos corra detrás de su perdida -pero recuperable- juventud. No se permita ser una cifra más, una estadística de miocardios destrozados por rendirle demasiado tributo al sedentarismo.

Nosotros en verdad creemos que esos kilos en exceso suyos no son más que lonjas de olvido.

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α de las respectivas caducidades

Volver a los brazos de Natura no siempre es una tragedia. Dicen que morir es quietud y nunca castigo. Envejecer con vileza, renegando de los hilos plateados que tuvieron como semilla ideas brillantes, es el verdadero horror. Rayonear los años bien vividos con las tintas impuras del maquillaje o el bisturí es indicio del síndrome degenerativo de Narciso. Si es este su caso, (casi) lamentamos desahuciarlo. Usted ha de caducar en algún momento, no importa cuánto hagamos aquí para ayudarle. Llegará un grato día en que la calaca, fría como siempre es ella, le venga a pedir cuentas y Usted no tenga las facturas bien acomodadas. No es de preocuparse. Cuando ha vivido una existencia plena, la muerte le sabe a vino de cosecha buena y exacto fermento. Entregue el último sutil suspiro, no importa la edad. Poner el equipo en espera le garantiza que ha de volver algún día como ave o como perro casero que solo se preocupe por descansar y comer a la hora indicada, justo antes de volver a sus juegos. La vida de placeres le exige un sacrificio que muchas veces es únicamente dejar de respirar. La garantía es limitada, que no se le olvide. Seguro la tierra lo recibirá gustosa y los gusanos celebrarán el gran festín. Porque los días se cuentan en una hoja blanca que siempre se acaba o se pierde o se maltrata conforme el uso. Aún si ha vivido dos días o doscientos, cuando llegue el momento de volver a ser cenizas, su único mérito serán sus acciones. No importa cuántas oraciones rece sobre sus rodillas, cuando se venga el momento ¿qué pretende decir?, vaya con la cabeza alta, diga que ha vivido lo mejor que pudo y que si la muerte le ha alcanzado ha sido por distraerse un segundo y no por entregarse a la resignación. 13


rubros e indicaciones finales Para estas alturas Usted ya debe haber notado algunos cambios. No se lo aseguramos y sin embargo estamos confiados en que su trabajo le ha rendido jugosos frutos. Sabe Usted si es así. Reconózcase, compare el antes y el después de esta jornada. Sólo le recordamos que los resultados no siempre son prestos. El Mínimo Manual…, con su presencia en varias naciones alrededor de la esfera, ha logrado encontrar al infante oculto hasta en el más amargoso viejo que ya no sabe cuántos años cumple cada que vuelve sobre sí el calendario. Confíe en nosotros.

En apoyo a su odisea, le dejamos unos cuantos consejos extra que podrían ayudarlo a no claudicar. Mírelos y atiéndalos si no pretende regresar hasta el punto uno, pues no sabemos si pueda costear los gastos anímicos de un retroceso de tales dimensiones: 

No se tome muy en serio el amor. Cada día le repiten que la oveja que corre sola por los prados no es un animalillo entero. Le mienten. Mientras Usted no se encuentre de nuevo en una paz calma que le recuerde lo favorable que es vivir, nadie va a acercársele a darle sus buenos besos. No todo en la vida es cumplir el tercer paso. No todos fueron hechos para envejecer en par. No todos miran sus futuros días viviendo a través de su descendencia. Se puede hallar placeres mayores creando sin envejecer criando.

Invítese al chiste simple que siempre le arranca sonrisas a los niños que lo son de verdad. Una broma inocente tiene valía cuando hace feliz a otros y a Usted le permite recordar que vivió una era en que existían cosas más importantes que escapársele al fisco. Pero no nos malentienda: siga escapando del fisco pero invierta carcajadas al hacerlo.

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Que no le importe la hora, siempre es buen momento para organizar un juego creativo que le exija un esfuerzo demás a la imaginación. Busque entre los triques o las herramientas un juguete de oficina; escápese del trabajo o toque lo que las reglas del museo le exijan no tocar. Que no se le vaya el día con videos virales de panditas cayendo de un árbol. Dese cuenta de una vez que la vida es posibilidades y si no experimenta, el tiempo se le esfumará fingiendo que es Usted un individuo exitoso o popular.

Búsquese nuevas formas de saborear lo bueno que ha logrado, aún cuando el cielo se le esté viniendo encima en piezas filosas. La realidad es que cuando la edad viene siempre se trae su carga pesada de desilusiones. No sabemos cómo consolarle, pero si está vivo, siempre habrá alguna nueva perspectiva que lo haga olvidarse de los números, el dinero, los horarios y esas deudas que generalmente no lo dejan descansar. Si no halla alivio, no piense que es Usted uno de esos enfermos de virus raros sin cura que va vagando por ahí. Siempre hay un modo. Cada uno encuentra o se deja encontrar. Este complemento promete que puede recuperar un poco de la energía que el capital y la plusvalía le arrebatan a diario con chantajes y mentiras. Nosotros nos seguimos buscando y le invitamos a seguirnos en el viaje. Prepárese porque cada desenlace es siempre otro inicio. Nunca terminará su camino errante por la existencia, pero le hemos compartido buenos modos de encontrar algunos oasis. Llegar a ser lo que se era jamás sucederá, pero rescatarse a sí mismo del abandono sólo requiere de jugar con lo que queda de buena vida. Descúbrase, búrlese de todo cuanto pueda y llénese de placeres exquisitos hasta que de adulto no le quede más que lo bueno de no serlo de ahora en adelante.

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GACETILLAS INDEPENDIENTES NO INFORMATIVAS #2 Enero 2015 A todos aquellos doctos pinceles cuyo arte ripeado fue germen esencial para esta obra. Que sus trazos e ideas tributen siempre a las musas, jamĂĄs al Rights Reserved. â—? Texto y trabajo de collage: Adrian R Nava Twitter: @_elsofista

Literatura andrajosa no lucrativa: lea, distribuya, comparta, abdique del pecado de plagiar.

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