Aw 2016 1003 spanish by Adventist World Magazine

Publicación internacional de los adventistas del séptimo día

Vol. 12 No. 3

Llamados a

servir

Ferias comunitarias de salud

Pensar

al revés

Elías

en la profecía

Vol. 12 No. 3 N O TA

D E

TA P A

Llamados a servir

uando el Espíritu Santo nos da un C don, no podemos sino usarlo para gloria de Dios.

14 Un presente para el presente C R E E N C I A S F U N D A M E N T A L E S

Gaspar F. Colón

Los dones espirituales se multiplican cuando los compartimos.

22 Pensar al revés V I D A

A D V E N T I S T A

Merle Poirier

8 Compartamos nuestras riquezas

Una vez que entendemos el «porqué», el «cómo» y el «qué» se tornan más accesibles.

Los que tienen un gran mensaje que compartir no necesitan persuasión.

12 Ver a Dios cara a cara

Carl Chin es empresario, pero su prioridad es compartir el evangelio.

P A N O R A M A

M U N D I A L

Ted N. C. Wilson

D E V O C I O N A L

24 Mi ocupación es ganar almas T estimonio

Halsey Peat

S. Joseph Kidder y Kristy L. Hodson

Podemos usar nuestras conexiones para llevar a las personas a Cristo.

Alcanzar al mundo

D E PA R TA M E N T O S 3 I N F O R M E

M UNDIA L

26 R E S P U E S T A

A PR E G U N TA S B Í B L I C A S

6 Noticia destacada 10 Iglesia de un día

11 S alud M undial Ferias comunitarias de salud

27 E S T U D I O B Í B L I C O Moisés: una vida de confianza

ESPÍRITU 20 DE

Elías en la profecía

I N T E R C A M B I O 28

PROF ECÍA

D E

I D E A S

Nuestro prójimo aguarda

Participación Total de los Miembros

Durante los próximos cinco años, Adventist World ofrecerá artículos relacionados con tres puntos de énfasis mundial de la Iglesia Adventista: Cristo nuestra justicia, la fidelidad, y la participación total de los miembros. Este logotipo adjunto, que aparecerá de tanto en tanto, indica un énfasis en nuestro deseo de compartir el mensaje y alcanzar al mundo para Cristo.

spanish.adventistworld.org

www.adventistworld.org: Disponible en línea en diez idiomas

Publicado por la Asociación General de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.

Adventist World | Marzo 2016

I m a g e n

d e ta pa :

C a l e b

G e o r g e

M o r r i s

El poder de uno

INFORME MUNDIAL Andrew McChesney

Dieta vegana disminuye riesgos de sufrir

cáncer de próstata

Universidad de Loma Linda da a conocer nuevo estudio

Pi x a b a y

Naciones. Identidades étnicas. Tribus. Grupos lingüísticos. Partidos políticos. Fanáticos deportivos. Clubes. Y hasta congregaciones. Estamos acostumbrados a pensar la vida según nuestras conexiones con muchos grupos grandes, porque en casi todas las culturas, somos socializados de esa manera. Desde que nacemos, aprendemos nuestra identidad como ciudadanos de un país particular, relacionados con otros millones gracias a nuestra herencia genética. Hablamos un idioma común a muchos otros. En ocasiones, hasta «heredamos» lealtades a filosofías políticas o equipos deportivos. Esto de por sí no está mal. Nuestras conexiones con tantos grupos nos ayudan a comprender nuestro lugar en el mundo, y nos brindan apoyo cuando la vida diaria parece abrumadora o nos sentimos solos. Por cierto, fue intención de Jesús que recibiéramos amor y aliento de ese grupo por el cual dio su vida: la iglesia que se congrega para momentos de adoración, comunión y testificación. A pesar de ello, esas identidades grupales a veces nos llevan a pasar por alto la singularidad del llamado individual que nos hace Cristo para que nos unamos a su gran misión de alcanzar a los que aún no lo conocen. Cuando Jesús se dirigió a sus discípulos con la Gran Comisión –«Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones» (Mat. 28:19)– no estaba hablando a los doce, a los setenta o a los cientos que lo vieron después de su resurrección. Tampoco les estaba hablando tan solo como grupo. Su llamado a hacer discípulos aún es el deber y el privilegio de cada creyente que asume el nombre de Cristo. Veinte siglos después, es intención de Jesús que oigamos ese llamado y respondamos personalmente desde nuestro lugar de trabajo o de pasatiempos, desde donde estemos en familia o con amigos, o cuando caminamos en medio de las multitudes. Esta edición especial de Adventist World es la tercera de tres números que presentan los principales temas de la Iglesia Adventista para el quinquenio. Como tal, lo invita a hallar ese ámbito de la vida hacia el cual Cristo lo llama para que allí sea siervo, testigo, ayudante o amigo. Lo invito para que al leerla, permita que el Espíritu Santo lo motive y lo impulse.

Los adventistas veganos difieren de otros grupos dietarios debido a que consumen más frutas, verduras, nueces y soya.

os hombres que consumen una dieta vegana tienen un treinta por ciento menos de probabilidad de sufrir cáncer de próstata, según un nuevo estudio de la Universidad de Loma Linda. El estudio, publicado en el número de enero de la revista especializada American Journal of Clinical Nutrition, mostró un riesgo menor en los hombres de raza blanca y probablemente de raza negra que no consumen carne, lácteos ni huevos. «Si usted ya es vegano, agradezca de que tendrá un riesgo menor de sufrir cáncer de próstata –dijo el doctor Gary Fraser, director del estudio–. Si no lo es, sepa que las dietas ovolactovegetariana y pescovegetariana no mostraron beneficios en comparación a los adventistas no vegetarianos».

Vol. 12 No. 3 | Adventist World

INFORME MUNDIAL El Estudio Adventista de Salud-2 –que incluyó a 26.346 hombres– analizó la relación entre el cáncer de próstata y las dietas de los no vegetarianos, los semivegetarianos, los ovolactovegetariana, los pescovegetarianos y los veganos. Los veganos difieren de otros grupos porque consumen más frutas, verduras, nueces y soya. La otra gran diferencia es que se abstienen de los lácteos, los huevos y cualquier producto de origen animal. «Por ello, es razonable pensar en minimizar el uso de los lácteos y maximizar las frutas, verduras, nueces y soya, en particular si hay una historia familiar de cáncer de próstata», dijo Fraser. El investigador advirtió, sin embargo, que «esto es por el momento una deducción lógica y no un resultado comprobado». Fraser dijo que su equipo planea poner esto a prueba directamente y presentar un informe al respecto. El cáncer de próstata es el segundo tipo de cáncer más común entre los hombres, dado que alcanza el 27 por ciento de todos los casos de cáncer en los hombres, según la Sociedad Oncológica de los Estados Unidos. Los veganos del estudio adventista, sin embargo, experimentaron una incidencia más del treinta por ciento menor de sufrir cáncer de próstata, según la Universidad de Loma Linda, una institución adventista ubicada en el sur de California, Estados Unidos. «En total, se identificaron 1079 casos de cáncer de próstata. Alrededor del ocho por ciento de la población estudiada dijo adherir a una dieta vegana, que mostró una asociación protectora estadísticamente significativa respecto del riesgo de sufrir cáncer de próstata», expresó el resumen del estudio en la revista especializada American Journal of Clinical Nutrition. Aún no está clara la relación precisa entre la dieta y el cáncer de próstata

Adventist World | Marzo 2016

según se informó desde el Departamento de Salud de la Universidad de Loma Linda: «Dado que la gente no consume alimentos individuales sino en combinación, la evaluación de patrones dietarios podría ofrecer información valiosa a la hora de determinar las asociaciones entre la dieta y el riesgo de sufrir cáncer de próstata. Otros estudios recientes, sin embargo, han hallado un vínculo entre la carne y el cáncer. Un análisis del Estudio Adventista de Salud-2, publicado en la revista especializada JAMA Internal Medicine (marzo 2015), mostró que la dieta vegetariana puede reducir un 22 por ciento el riesgo de sufrir cáncer colorrectal. Ya el Estudio Adventista de Salud-1 había vinculado el consumo de carne con un mayor riesgo de sufrir ese tipo de cáncer. La Organización Mundial de la Salud estuvo en todos los titulares hace unos meses cuando declaró que las carnes rojas y procesadas aumentan los riesgos de sufrir cáncer. El doctor Peter N. Landless, director del departamento de Ministerios de Salud de la Iglesia Adventista mundial, dijo no estar sorprendido por el resultado de este último estudio: «Hay sólidas evidencias que apoyan los numerosos beneficios de una dieta vegetariana equilibrada. Es interesante y entusiasma ver las diversas propiedades protectoras de las diferentes dietas, aun entre las así llamadas vegetarianas (veganas, ovolactovegetarianas y pescovegetarianas). En el estudio AHS2, vemos estadísticamente una protección significativa contra el cáncer de próstata en el grupo vegano de raza blanca, con una tendencia no significativa entre los veganos de raza negra, aun cuando podría haber un beneficio protector del consumo de lácteos respecto del cáncer colorrectal. Los diversos estudios generan casi

tantas preguntas como respuestas a los epidemiólogos y estadísticos. No hay duda de que una dieta sin carne es más saludable. Hemos recomendado por mucho tiempo que los lácteos sean usados con moderación y como condimento, por así decirlo». Landless formuló entonces la pregunta lógica que muchos esperarían: «¿Por qué no recomendar una dieta vegana para todos?» «Los seres humanos dependen de fuentes de vitamina B12; en muchas partes del mundo, los lácteos son la única fuente de esa vitamina esencial para los vegetarianos –dijo Landless–. Donde se consigue fácilmente alimentos fortificados con vitamina B12 o equivalentes lácteos, la dieta vegana es muy saludable. Insto a que todas las categorías vegetarianas suplementen el consumo de vitamina B12, de manera aún más decidida a mayor edad, dado que el proceso de absorción de vitamina B12 se torna más lento. El estudio actual es un estudio norteamericano. Aunque los resultados pueden extrapolarse a la población global (hombres de raza blanca y negra, como se especifica más arriba), no sucede lo mismo con las circunstancias socioeconómicas». Landless resumió su respuesta al nuevo informe de la Universidad Loma Linda, expresando: «En lo que respecta a la recomendación general, creemos seguro y saludable consumir una dieta vegana equilibrada (con suplementos). Instamos a los que consumen lácteos a que lo hagan con moderación, y que usen las opciones descremadas. Enfatizamos que una dieta equilibrada de base vegetal es óptima. Instamos a que se usen suplementos de vitamina B12 según se menciona más arriba. Estas recomendaciones se aplican tanto a hombres como a mujeres. Aguardamos con ansias más respuestas a medida que continúen las investigaciones». n

Presidente de División

sucumbe a rara enfermedad Asoy había sido elegido para el cargo hace solo seis meses Andrew McChesney

Leonardo R. Asoy, fue por corto tiempo presidente de la División de Asia Pacífico Sur de la Iglesia Adventista. D av i d

B .

S h e r w i n

eonardo R. Asoy, presidente de la División de Asia Pacífico Sur de la Iglesia Adventista, falleció a los 56 años después de una lucha de varios meses contra una afección en la médula espinal. Asoy había sido elegido presidente del territorio en el Congreso de la Asociación General de San Antonio (Texas, EE.UU.) en julio de 2015, en reemplazo de Alberto C. Gulfan Jr., que padecía cáncer y falleció el 26 de septiembre de 2015. Asoy, que fue hospitalizado unos dos meses después del Congreso de la Asociación General, falleció el 12 de enero en el Centro Médico Adventista de Manila (Filipinas), de complicacio-

nes que derivaron del síndrome mielodisplásico, una rara enfermedad en la que la médula espinal deja de producir los glóbulos que el cuerpo necesita. Ted N. C. Wilson, presidente de la Iglesia Adventista mundial, expresó que Asoy fue «un dinámico promotor y partidario del evangelismo. Fue un valiente guardián de las eternas verdades de las Escrituras, y del maravilloso movimiento que Dios confió a los adventistas del séptimo día». Wilson ofreció sus condolencias a Elma Asoy, esposa del fallecido, y a sus dos hijos adultos, Elnardz y Shawnette. Samuel Saw, secretario ejecutivo de la División, será presidente interino hasta que se elija un nuevo presidente, según los Reglamentos de la Asociación General. Leonardo Remulta Asoy nació el 18 de noviembre de 1959 en Mindanao, en el sur de las Filipinas, y se graduó en el Colegio Terciario Adventista Mountain View en 1983 con un título de grado en teología. Comenzó trabajando como pastor distrital en la ciudad de Ozamis, en la Asociación de Mindanao Occidental, y entre 1988 a 1990 como director de jóvenes del territorio. En 1990, obtuvo una Maestría en Estudios Pastorales del Instituto Adventista Internacional de Estudios Avanzados (AIIAS) en Cavite (Filipinas). Según sus

amigos, los conocimientos que recibió Asoy de la educación adventista fueron devueltos pero multiplicados por cien. Felixian T. Felicitas, decano de la Facultad de Teología del Colegio Terciario Mountain View, recordó sus viajes con Asoy a numerosas reuniones de evangelización durante los quince años en que fueron amigos. «El pastor Asoy transformó muchos de nuestros largos viajes en sesiones donde hacía las veces de mentor –dijo Felicitas–. En ocasiones, estacionaba su camioneta y nos sentábamos a descansar en la parte de atrás. Allí compartía simplemente sus experiencias en el ministerio. Poco me daba cuenta de que esta era su sencilla manera de enseñarme; fue mi mentor». Asoy fue presidente de la Unión Asociación del Sur de Filipinas desde 2011 hasta el año pasado, convirtiéndola en un campo muy bien administrado, dijo G. T. Ng, secretario ejecutivo de la Iglesia Adventista mundial y amigo de Asoy por más de dos décadas. Ng dijo que recordará por mucho tiempo el pasado 6 de noviembre, en que Asoy dejó brevemente el hospital para asistir a la apertura de las reuniones de fin de año de la División de Asia Pacífico Sur. Asoy había estado confinado en el hospital durante 47 días, pero pidió que le dieran de alta para asistir al culto matutino de la sesión inaugural. «Habló con gran entusiasmo, diciendo cuán agradecido estaba de encontrarse presente en medio de los líderes de las Uniones –dijo Ng–. Estaba comprometido plenamente con el Señor y confiaba en la restauración de su salud. Su vida fue una celebración de piedad, humildad, celo y valor inquebrantable y al igual que el apóstol Pablo, pudo decir: “Una cosa hago” respecto de su compromiso constante con la misión de la iglesia. He aquí un valiente soldado de Cristo que aguarda ver pronto a su Maestro cara a cara». n

Vol. 12 No. 3 | Adventist World

INFORME MUNDIAL Jim Gilley, evangelista y expresidente de 3ABN

Bob Folkenberg,

un amigo con las mejores calificaciones

Robert S. Folkenberg en 1962, en su fotografía de graduación. A r c h i v o s

a d v e n t i s ta s

Así recuerdo al fallecido presidente de la Asociación General

ue un extraño lugar donde comenzar una amistad. Robert (Bob) Folkenberg y yo aguardábamos muy nerviosos las calificaciones finales antes de nuestra graduación en la Universidad Andrews en 1962. Bob me dijo por qué estaba preocupado. «Desde primer grado, siempre he obtenido calificaciones altas, pero me preocupa este último examen, porque creo que no me fue tan bien en Griego II con Blazen», dijo en referencia a Iván Blazen, profesor de griego y Nuevo Testamento. Sacudí la cabeza como compadeciéndome de él. En mi caso, estaba preocupado por saber si siquiera había aprobado. Mi objetivo era no reprobar. Cuando Bob recibió su calificación, dio un salto casi hasta el cielo raso, y gritó: «¡Bien! ¡Una buena nota». Y salió corriendo por el pasillo. ¡Qué bien! –pensé–. ¡Siempre con las máximas calificaciones! Un rato después, recibí mi calificación e irrumpí en una celebración similar, anunciando con aún mayor algarabía: «¡Bien! ¡Aprobé!» Ese fin de semana nos graduamos: Bob con honores, y yo… apenas, ¡pero lo logré! Ambos aguardábamos con ansias cumplir lo que el Señor nos había encomendado: compartir a Jesús con los perdidos.

Adventist World | Marzo 2016

Dedicado al evangelismo

Más tarde supe que Bob era evangelista musical para el equipo de Roger Holley en la Unión de Columbia; por mi parte como nadie más aceptó el cargo, terminé como evangelista en la Asociación Sur de Nueva Inglaterra. Bob aprendió de evangelismo gracias a Roger Holley, que había estudiado a los pies de Fordyce Detamore, quien sabía más que nadie sobre la «ciencia de la ganancia de almas», como la denomina el Espíritu de Profecía. Y durante los dos años que pasó con el equipo (1964-1966), Bob realmente aprendió muy bien. Cuando dejó al pastor Holley para aceptar un llamado de la División Interamericana, el conocimiento práctico que Dios le había dado mostró ser clave para el crecimiento sin precedentes en esa División. «Se bautizaron miles, porque Bob tenía fe y organizó grandes encuentros para el Señor», me dijo el evangelista Kenneth Cox. Cox trabajaba con el evangelista Benny Moore, y llevó a cabo reuniones de evangelización junto con Bob en Panamá, Costa Rica y Guatemala. «Cada vez que teníamos un hueco en la agenda, Bob nos pedía que fuéramos», recordó Moore.

Bob fue evangelista de la Asociación de Panamá; más tarde, presidente de la Misión de Honduras y presidente de la Unión Centroamericana. Pronto fue elegido asistente del presidente de la División Interamericana, desde donde enfatizó el evangelismo. En 1985, regresó a los Estados Unidos con su esposa Anita y dos hijos, Bob (h) y Kathi, para ser presidente de la Asociación de las Carolinas. El territorio pronto impulsó la ganancia de almas en la Unión del Sur. Bob me llamaba a menudo, y juntos analizábamos alguna de sus nuevas ideas para ganar almas, siempre a la vanguardia de la tecnología. Me sorprendía su gran energía personal y su compromiso total con la tarea de esparcir el evangelio. Milagro en el Congreso de la Asociación General 1990

En 1990, fui elegido delegado al Congreso de la Asociación General en Indianápolis (EE. UU.). Cuando llegué al aeropuerto, vi a Richard Barron, un gran líder de jóvenes que también había sido administrador en una Asociación y él me dijo: «Gilley, se huelen cambios». Tenía razón. Pronto vi lo que quería decir.

gran crecimiento, y Bob ayudó a abrir las puertas del evangelismo en la ex Unión Soviética y en la región conocida como la «Ventana 10/40». Durante el segundo período de Bob como presidente, surgieron problemas, y en 1999 presentó su renuncia. Fue un período oscuro de su vida, pero el Señor aún tenía muchos planes para él. Después de la Asociación General, un ministerio mejor

a d v e n t i s ta s

Bob regresó a la Asociación de las Carolinas, donde Ken Coonley, que había sido secretario durante la presidencia de Bob allí, era ahora presidente. Bob inició un proyecto que denominó Evangelismo Global, pero que más tarde rebautizó como ShareHim («Compártelo»). El proyecto organizó a los laicos y jóvenes para que dirigieran reuniones de evangelización en todo el mundo. ShareHim pertenece y es operado por la iglesia como departamento de la Asociación de las Carolinas, pero es financiado exclusivamente por medio de donaciones directas.

Hace unos días me puse en contacto con Benny Moore, quien se incorporó a ShareHim después de jubilarse, preguntándole cuáles fueron los resultados de ShareHim bajo el liderazgo de Bob durante los últimos diez años. No se tienen cifras totales, pero entre 2000 y 2011, ShareHim llevó a cabo casi seis mil campañas de evangelización que produjeron trescientos mil bautismos. Se bautizó a un promedio de cincuenta personas por campaña. El 24 de diciembre de 2015, Bob descansó en Jesús después de una larga lucha contra el cáncer. Cuando su hijo me llamó para contármelo, yo estaba llevando a mi hijo John en mi vehículo. Me detuve y reflexioné en la vida de mi amigo Bob. Pensé en ese día en la Universidad Andrews, cuando aguardábamos en fila las calificaciones finales. Llegará el día cuando estaremos otra vez en fila, y Bob escuchará las palabras: «¡Bien hecho, buen siervo y fiel!» Bob podría preocuparse de que no le haya ido tan bien, pero creo que, una vez más, obtendrá la máxima calificación. n

A r c h i v o s

Solo tres personas fueron elegidas de la Unión Asociación del Sudoeste para integrar la Comisión de Nombramientos y me tocó ser uno de los tres. En un principio, Bob no fue escogido para representar a la Unión Asociación del Sur, pero uno de los elegidos no pudo participar y Bob fue elegido para ocupar esa vacante. Ese fue otro milagro. Cuando se organizó la Comisión de Nombramientos, Bob pronto fue elegido, para sorpresa de todos, como su presidente. Al instante vimos su fortaleza en esa comisión, y de pronto se me ocurrió que podíamos nominarlo para ser presidente de la Asociación General. Señalé esto a varias personas y, a la mañana siguiente, le dije a Bob que creía que antes de que terminara el día, se lo nominaría para el cargo. Me miró atónito y dijo: «Jim, eres la segunda persona que me lo dice esta mañana». Y sin embargo, no fue así. La Comisión de Nombramientos terminó eligiendo a George Brown, presidente de la División Interamericana, como presidente de la Asociación General. Sin embargo, después de analizarlo en oración y preocupado por la salud de su esposa en ese momento, Brown rechazó el cargo. Cuando nos volvimos a reunir, Charles Dudley se levantó y nominó a Robert (Bob) Folkenberg (p). Los delegados concordaron y a los 49 años, se convirtió en presidente de la Asociación General de la Iglesia Adventista. Bob se dedicó entonces a poner en acción el programa Misión Global en todo el mundo, además de adoptar la sugerencia de Don Schneider, por entonces presidente de la Unión Asociación del Lago, y de su comisión, de lanzar el Evangelismo Satelital Mundial en sociedad con la red Three Angels Broadcasting (3ABN). La Iglesia Adventista comenzó un período de

Tomas de una sesión oficial de fotografías de Robert S. Folkenberg en 1996.

Vol. 12 No. 3 | Adventist World

P A N O R A M A

M U N D I A L

n 1996, el profesor universitario Thomas J. Stanley y su exalumno, William D. Danko, publicaron un libro titulado El millonario de al lado. Ya se han vendido más de tres millones de ejemplares y ha llegado a ser un clásico de las finanzas. En el libro, basado en investigaciones, los autores explican que la mayoría de los verdaderamente ricos no viven de la manera que los presentan la televisión o las películas: en casas enormes, conduciendo automóviles de lujo y vestidos de costosas ropas. Por el contrario, los verdaderamente ricos viven con mayor frugalidad, en casas comunes, y no se la pasan dando dinero a sus hijos ya crecidos. Es posible, dicen, que los que viven al lado de un millonario no sepan cuán acaudalado es en realidad ese vecino.

Ricos espiritualmente

No obstante, ¿qué decir de los ricos espirituales? ¿Qué decir de los hijos e hijas del Rey del universo, los que son dueños de «los millares de animales en los collados» (Sal. 50:10)? ¿Qué decir de los que tienen «este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios y no de nosotros» (2 Cor. 4:7)? ¿Podría ser que las personas con quienes entramos en contacto, los que viven junto a nosotros, son ajenos a los tesoros espirituales que Dios ha otorgado a su pueblo para estos últimos días, aunque son riquezas eternas que él espera, compartamos con los demás? Una responsabilidad de peso

«Tenemos que proclamar al mundo un mensaje del Señor, un mensaje que ha de ser dado en la rica plenitud del poder del Espíritu –escribió Elena White–.1 Sobre nosotros descansa la pesada responsabilidad de amonestar al mundo acerca de su destrucción inminente. Los pedidos de ayuda llegan de todas partes, de lejos y de cerca. Dios pide a su iglesia que se levante y que se vista de poder. Deben ganarse las coronas inmortales;

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Ted N. C. Wilson

Compartamos nuestras ¿Es usted el

vecino millonario?

el reino de los cielos se debe conquistar; y ha de iluminarse un mundo que perece en la ignorancia».2 Jesús desafió a sus discípulos, diciéndoles: «A la verdad la mies es mucha, pero los obreros pocos» (Mat. 9:37). Santiago amonesta a los creyentes para que sean «[hacedores] de la obra» (Sant. 1:25). Jesús mismo dijo: «Me es necesario hacer las obras del que me envió, mientras dura el día; la noche viene, cuando nadie puede trabajar» (Juan 9:4).

Adapten sus métodos, pero alcancen a los demás. ¡Hagan algo por Cristo! Bajo la conducción divina, todo esfuerzo de alcanzar los corazones de las personas dará su fruto. Que el Espíritu Santo revolucione la manera de pensar. Asuman la misión de evangelización de su iglesia de manera diaria, trabajando en estrecha colaboración con los líderes y pastores de la iglesia. Que haya una participación total, sin que nadie quede excluido. Todos tienen que ser misioneros.

Un desafío

Mensajeros de Dios

Los desafío a involucrarse mucho más que nunca antes, en la misión de la iglesia. Los pastores y los laicos, los jóvenes y los ancianos tienen que trabajar juntos en la ganancia de almas. ¡Contamos con ustedes! ¡Dios cuenta con ustedes! El evangelismo es la savia que da vida a la iglesia. Todos tenemos que participar, mediante la testificación personal, el evangelismo de grupos pequeños o el evangelismo público en sus diversas formas, aun si piensan que no funcionará en la zona donde viven.

No necesita ser un ministro para ganar a otros para Cristo. Elena White escribió: «Dios espera que todo el que invoca el nombre de Cristo participe de esta obra. Acaso no os hayan sido impuestas las manos de la ordenación, pero sois sin embargo los mensajeros de Dios. Si habéis probado que el Señor es bueno, si conocéis su poder de salvación, no podéis ya dejar de contárselo a otro, así como no podéis impedir que sople el viento. Tendréis una palabra oportuna para el cansado. Guiaréis los F o t o g r a f í a :

R e i t d i e p h av e n

G r o n i n g e n

pies de los perdidos de regreso al redil. Vuestros esfuerzos de ayudar a otros serán incansables, porque el Espíritu de Dios obrará en vosotros».3 Hagamos algo por Cristo y por otras personas. En lugar de mirar hacia adentro y criticar a la iglesia local y sus actividades, alcancemos a otros para Cristo. No permita que alguien le diga que usted no es necesario. Trabaje cerca de su pastor, iglesia local y Asociación. El Espíritu Santo lo capacitará como mensajero divino en su vecindario. Al trabajar junto con el Señor, el reavivamiento y la reforma llegarán a ser algo muy personal y real. En el maravilloso libro titulado Testimonios para la iglesia, tomo 9, leemos acerca de esta obra especial de Participación Total de los Miembros. Note estos urgentes recordatorios: «Las verdades que debemos proclamar al mundo son las más solemnes que jamás hayan sido confiadas a seres mortales».4 «No olvidemos que el argumento más poderoso en favor del cristianismo es una vida semejante a la de Cristo […]. La gente creerá, no lo que diga el predicador, sino lo que viva la iglesia».5 «La obra de Cristo debe servirnos de ejemplo […]. Su vida de servicio desinteresado debe servirnos de manual».6 «Si cada miembro de la iglesia fuese un misionero activo, el Evangelio sería anunciado en poco tiempo en todo país, pueblo, nación y lengua».7 «Cuando se trabaje con sinceridad y tesón, se verá la eficacia de la gracia de Cristo. Los centinelas colocados sobre los muros de Sion deben mantenerse

vigilantes y despertar a los demás. El pueblo de Dios debe ser tan ferviente y fiel en la obra del Maestro que todo egoísmo quede separado de su vida. Entonces todos trabajarán en perfecta armonía, y se manifestará el brazo del Señor, cuyo poder se revelará en la vida de Cristo. Entonces renacerá la confianza y habrá unidad en las filas de la iglesia».8 «La mayor necesidad actual no es tanto de predicadores sabios y elocuentes como de hombres y mujeres que hayan aprendido de Jesús de Nazaret a ser mansos y humildes, y que confiados en su poder, irán por los caminos y vallados para dar la invitación: “Venid, que ya está todo preparado” (Luc. 14:17)».9 Un ejemplo poderoso

Andressa se convirtió en un poderoso ejemplo de la Participación Total de los Miembros a los trece años. Su primer contacto con la Iglesia Adventista se produjo gracias a su abuela y a un grupo pequeño de estudio de la Biblia. Lo disfrutó tanto que decidió iniciar un grupo pequeño ella misma. «Pero primero –dijo–, necesito ser bautizada y dar mi vida a Cristo, para que los niños a los que enseñe sigan mi ejemplo». Andressa fue bautizada, y el jueves siguiente comenzó un grupo pequeño. El grupo de niños que se acercaba a estudiar la Biblia siguió creciendo hasta tener cuarenta y cinco integrantes. Eran tantos que Andressa animó al grupo para que se subdividiera. Una joven dijo: «Andressa me mostró que podía formar mi propio grupo pequeño […]. Todos deberían hacerlo; es una extensión de la iglesia. Es una extensión que proviene de Dios». Además de su ministerio de grupos pequeños, Andressa comenzó a participar de muchas actividades misioneras. En una entrevista, describió su semana habitual: «Los domingos visito una radio y comienzo con un devocional. Hay un segmento para niños, donde cuento

historias de la Biblia. Los lunes voy a la escuela, y por la tarde hago obra misionera. Los martes visito un hogar de ancianos. Cantamos, jugamos y oramos. Algunos residentes se sienten muy solos y, en ocasiones, nos abren su corazón. Los miércoles nos reunimos [con un grupo] en mi casa para hacer manualidades que podemos vender, y esto es bueno, porque la gente de este grupo no tiene mucho dinero. Los jueves por la tarde predico a los niños en mi hogar. Por las noches, vamos a los hogares de algunos de los miembros de iglesia y les tocamos música. Los viernes tenemos un grupo pequeño de oración intercesora. La oración intercesora es realmente interesante porque muchos pedidos de oración reciben respuesta. La oración es poderosa. Los sábados, me levanto temprano e invito a algunos niños para que me acompañen a la iglesia. ¡Así es realmente mi semana!» ¡Andressa es realmente un ejemplo de la Participación Total de los Miembros! Su cronograma podría intimidar a muchos adultos. A pesar de su corta edad, parece que ya hace mucho más que otras personas mayores. «Cristo viene –dijo Andressa–. Nos está mostrando las señales. Las profecías se están cumpliendo. Si no hacemos ahora nuestra parte, quizá mañana será demasiado tarde». El tiempo se acaba

Triste es decirlo, el tiempo se acabó para Andressa. Un sábado por la mañana, cuando iba a predicar a su iglesia, el automóvil donde viajaba chocó con un camión. Cuatro mujeres perdieron la vida, entre ellas, Andressa, de solo catorce años. En su corta vida logró muchas cosas. Gracias a su testimonio se bautizaron más de cien personas, y muchas otras siguen siendo inspiradas por su ejemplo. ¿Qué decir de ustedes? ¿Están dispuestos a involucrarse totalmente por Cristo? ¿Están listos para compartir los tesoros que tienen? Como vemos, se aproxima el fin del tiempo. Por ello, renovemos nuestros esfuerzos de

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P A N O R A M A M U N D I A L

Pronto miraremos hacia el cielo y veremos que Jesús aparecerá en las nubes, así como lo prometió. Vendrá a llevarnos al hogar. Será la culminación de su obra redentora, en la que usará a todo seguidor dispuesto a compartir con otros el conocimiento de Cristo. Apelo a cada uno para que, mediante el poder del Espíritu Santo, sea parte de la Participación Total de los Miembros. La lluvia tardía del Espíritu Santo se aproxima, y con ella, la gran proclamación a cada habitante de la tierra, en anticipo del pronto regreso de Cristo. ¡Por la gracia de Dios, seamos parte de esa tarea! Si quiere saber más sobre el tema, lo invito a mirar un video de cinco minutos en el que Mark Finley, Duane McKey y yo explicamos cómo ser parte de la Participación Total de los Miembros. Se encuentra disponible en Vimeo, en https:// vimeo.com/144789637 y en YouTube, en www.youtube.com/watch?v=wxNfa JO-Hqk (únicamente en inglés) n 1 Elena

White, Testimonios para la iglesia, t. 7, p. 21.

2 Ibíd., p. 18. 3 En

Review and Herald, 24 de noviembre de 1904. t. 9, p. 17.

4 Testimonios, 5 Ibíd., p. 18. 6 Ibíd., p. 26. 7 Ibíd. 8 Ibíd., p. 27. 9 Ibíd., p. 29.

I n t e r n at i o n a l

Carrie Purkeypile

LISTO PARA SOPORTAR CUALQUIER ELEMENTO: El nuevo templo representa una gran mejora comparado con la iglesia anterior (recuadro).

V o l u n t e e r s

Alcancemos el mundo para Cristo

La iglesia imposible de quemar

M a r a n at h a

participar en todo lo que Dios desea que haga su iglesia remanente. Que cada miembro de involucre: que ensalce y comparta a Cristo, su Palabra, su justicia, el servicio del Santuario, su poder de salvación en el gran conflicto, los mensajes de los tres ángeles, el mensaje de salud, la misión al mundo para los últimos días y su pronta segunda venida.

Iglesias de un día

Hace diez años, Moisés Tolosi estableció una nueva iglesia en la aldea de Mukangu (Zambia). No fue tarea fácil. Desde el comienzo, miembros de otras dos congregaciones del pueblo trataron de interrumpir las reuniones con gritos y burlas. Un hombre llamado Juan* se mostró extremadamente hostil contra los adventistas. Las cosas empeoraron cuando el jefe comunal asignó un terreno a la iglesia. Después de meses de amenazas, Juan llevó un barril de gasolina, roció la pequeña iglesia, y le prendió fuego. Como la iglesia estaba hecha con postes de madera y cubierta de un techo de pastos secos y paredes de arcilla, fue sumamente fácil quemarla. El edificio se transformó en llamas y quedó reducido a brasas y cenizas. «¿Por qué sucedió esto? –se preguntaba Moisés desalentado–. ¿Dónde nos reuniremos ahora?» ¡No les había quedado nada! Si no se congregaban allí, el jefe comunal podía reclamarles el terreno. Por ello, durante meses se reunieron entre las ruinas del edificio, sin sombra, ni asientos ni resguardo alguno. Muchos miembros bautizados dejaron de acudir, y las visitas rechazaban las invitaciones. Más de un año después, sucedió algo más impactante aún que el fuego consumidor. Llegó un equipo de Maranatha para construir una «Iglesia de un día». Era impresionante ver los grandes camiones, en un lugar donde solo se suele viajar a pie o por canoa. ¡Moisés y otros feligreses estaban felices! ¡Qué gran bendición! Hasta Juan se acercó a mirar cómo en un solo día se levantaba la estructura de metal de la iglesia. ¡Era increíble! La iglesia de Mukangu está creciendo otra vez. Los miembros siguen orando por Juan, que está en prisión por incendiar la tienda de un miembro de iglesia. Quizá algún día se acercará a adorar a Dios en una nueva iglesia imposible de quemar. * Este nombre ha sido cambiado.

Ted N. C. Wilson es

presidente de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.

Adventist World | Marzo 2016

Maranatha Volunteers International es una organización sin fines de lucro que construye iglesias y escuelas adventistas en zonas de grandes necesidades. *No es su nombre real

S alud

Peter N. Landless y Allan R. Handysides

Ferıas comunitarias de salud

Se escucha hablar mucho de que los miembros de iglesia tienen que ser «médicos misioneros» y trabajar para satisfacer las necesidades de salud de la comunidad donde viven. ¿Cómo podemos llevar a la práctica ese enfoque?

odas las naciones y pueblos del mundo desean y buscan tener salud. Algunos territorios cuentan con programas de salud muy avanzados y, por lo general, la atención de salud está enfocada en sistemas diseñados para diagnosticar y curar enfermedades. Como la atención de la salud es costosa, en muchos lugares es un desafío ponerla a disposición de todos. Las medidas de salud pública, que incluyen la provisión de agua potable, cloacas y programas de vacunación, han contribuido marcadamente para disminuir las enfermedades infecciosas e incrementar la expectativa de vida. Pero aun estas medidas no se encuentran disponibles de igual manera en todo el mundo. Asimismo, aunque los gobiernos han dado mucho énfasis a las medidas de salud pública, las así llamadas enfermedades no transmisibles se han incrementado en forma dramática y se relacionan en su mayor parte con cuestiones de estilo de vida. Estas enfermedades incluyen principalmente las afecciones cardíacas, los accidentes cerebrovasculares, la diabetes y las afecciones respiratorias crónicas. Son enfermedades que afectan a todas las personas y comunidades. Los principales factores de riesgo son bien conocidos y similares en todo el mundo: n uso de tabaco n consumo de alimentos elevados en grasas saturadas y trans n excesivo consumo de sal n ingesta de alcohol F o t o g r a f í a : d e S a l u d d e

c o r t e s í a d e l D e pa r ta m e n t o l a A s o ci a ci ó n G e n e r a l

so excesivo de azúcar, en especial u en las bebidas n inactividad física n obesidad Las enfermedades no transmisibles se han convertido en tal desafío que la Organización Mundial de la Salud y las Naciones Unidas han llevado a cabo reuniones globales de alto nivel para crear conciencia sobre esas afecciones y tratar de eliminarlas o al menos disminuir su incidencia. Muchas de esas afecciones se pueden prevenir y es posible identificar fácilmente a los individuos en situaciones de riesgo. Es una oportunidad global para que cada iglesia local se convierta en un centro comunitario de salud y cada miembro de iglesia, un promotor de salud. ¿Qué podemos hacer para marcar una diferencia en la comunidad y ganar amigos? Podemos comenzar organizando caminatas y carreras; por ejemplo, la caminata o carrera de cinco kilómetros es un evento muy popular y es un buen lugar para comenzar. Junto con la caminata, se puede organizar una exhibición o feria de salud. En esos eventos, se suelen preparar varios puestos o estaciones que muestran diversos aspectos de la salud y miden la salud y el bienestar físicos. Allí se puede medir de manera eficiente y a muy bajo costo la presión arterial, el azúcar en sangre y aun el colesterol. El peso y el índice de masa corporal resultan muy informativos; entre esto y el nivel de azúcar en sangre, muchos que han pasado por ferias de salud han sido n

mundial

alertados sobre su diabetes o prediabetes. También pueden ofrecerse controles básicos de la visión sin necesidad de contar con equipos costosos. Tales eventos son excelentes oportunidades de educar al público sobre la alimentación sana, la importancia de dejar de fumar y de evitar el alcohol, el ejercicio, el uso del agua tanto por dentro como por fuera, la exposición responsable a la luz del sol, el equilibrio (la temperancia), la respiración profunda y la necesidad de pasar tiempo al aire libre. Como una buena parte de la población del mundo duerme menos de lo que debería y se pasa «engachada» en el uso casi incesante de los dispositivos electrónicos, la estación que enfatice el descanso y el sueño siempre será una parada necesaria y apreciada para la mayoría de los visitantes. Como seguimiento, pueden anunciarse y llevarse a cabo demostraciones de cocina y clases de cocina vegetariana. Nos impresionó profundamente una estación en Chitungwiza (Zimbabue), que era una escuela de cocina para sordos. ¡Fue una actividad muy bien recibida! En diversas partes del mundo ya se están llevando a cabo este tipo de emprendimientos, algo que nos ayuda a hacer amigos y compartir el mensaje lleno de gracia de la salud y la esperanza. Es algo que en verdad satisface las necesidades de la gente de manera práctica y que demuestra el amor y la compasión de Dios. ¿Qué resultado tendrá esto? No estamos seguros. Pero sabemos que aquellos con quienes nos encontremos y sirvamos sabrán que somos cristianos, por el amor que les brindamos. n

Peter N. Landless es cardiólogo nuclear certificado y director del Departamento de Ministerios de Salud de la Asociación General. Allan R. Handysides es ginecólogo certificado y exdirector del Departamento de Ministerios de Salud de la Asociación General.

Vol. 12 No. 3 | Adventist World

D evocional

Ver a Dios

a Biblia incluye historias de algunas personas que vieron a Dios cara a cara. Quizá el registro más claro de un encuentro tan transformador se encuentra en Isaías 6:1-8. El profeta vio una escena de adoración en el cielo. Seres angélicos rodeaban a Dios, dándole adoración y alabanza. Esos ángeles sobrevolaban el trono de Dios, cantando a su santidad y gloria. Abrumado, Isaías se sintió indigno de esta visión. Se sintió avergonzado y arruinado por sus pecados. Este, sin embargo, no fue el fin de la experiencia; uno de los ángeles tocó la boca de Isaías con un carbón encendido del altar, quitando su culpa y pronunciando el perdón. Dios ofreció entonces a Isaías la oportunidad de servir, al preguntarle: «¿A quién enviaré y quién irá por nosotros?» (vers. 8). El profeta no dudó. Este encuentro con la gloria de Dios fue una motivación para Isaías, que dijo: «Heme aquí, envíame a mí» (vers. 8).

Una vislumbre de Dios

Al igual que Isaías, antes de estar listos para servir a Dios, tenemos que captar una vislumbre de él. Dios tiene que ministrarnos; solo entonces podremos escuchar su voz diciéndonos qué quiere que hagamos. Tenemos que responder con una actitud de gratitud, no de obligación, porque él nos ha purificado mediante la sangre de Cristo. Hay en nuestra vida un sentido de sanación. Queremos servir a Dios por lo que es y lo que ha hecho por nosotros. La maravilla del sacrificio de Cristo tiene que ser el factor que impulse todo lo que hacemos. Cuando redescubrimos la grandeza de Dios, somos impulsados a ministrar a favor del Único que puede ofrecer expiación por el pecado. La experiencia con Dios afecta cómo vemos el mundo. Isaías escuchó el clamor de Dios por los perdidos y moribundos. También nosotros tenemos que escuchar el llamado divino de alcanzar a los quebrantados de la comunidad. Dios llamó; Isaías respondió. Esta respuesta incondicional proviene tan solo del corazón que ha visto la visión; del que ha conocido a Dios. Una vez que hemos visto al

S. Joseph Kidder y Kristy L. Hodson

Adventist World | Marzo 2016

cara

Señor, vamos donde nos mande. Isaías no dijo: «¿Y yo qué recibo a cambio?» Se comprometió para toda la vida porque había visto la naturaleza y el carácter de Dios. Isaías reacomodó sus prioridades; puso primero la misión divina, y terminó viendo el servicio a Dios como adoración. Vemos, y entonces servimos

Elena White también conectó la adoración con el servicio: «La verdadera adoración consiste en trabajar junto con Cristo. La oración, la exhortación y las palabras son frutos escasos, y con frecuencia están vinculados, pero los frutos que son manifestados en buenas obras, en atender a los necesitados, los huérfanos y las viudas, son frutos auténticos y crecen naturalmente en un buen árbol».* El servicio es resultado de sentirse abrumado de aprecio por aquel que sana el quebrantamiento con amor. El centro de la adoración implica estar a disposición de Dios todos los días, no solo los sábados por la mañana. Es una experiencia diaria. Por ello, para los cristianos no existe la división entre lo sagrado y lo secular. Todo le pertenece a Dios. Si comemos, o bebemos, jugamos o trabajamos, lo hacemos en presencia de Dios y para su gloria (1 Cor. 10:31). La adoración es un estilo de vida. Una vida de adoración nos pone a disposición del Espíritu Santo, y nos da ansias de verlo obrar en nosotros. Una vez que entendemos el evangelio, el sacrificio que Cristo hizo por nosotros, y la gracia de su amor duradero, nos daremos cuenta de que la renovación y la purificación vienen de lo alto. Seremos guiados hacia una respuesta de servicio. Como le sucedió a Ann.

cara Sobrecogida y a disposición de Dios

Cierto día, yo [Joseph] recibí una tarjeta por correo de una mujer que solicitaba estudios bíblicos. Cuando llamé a su puerta, dijo que no estaba interesada en estudiar la Biblia, y que no había enviado la tarjeta. Le pregunté si me permitía que orara por ella, algo que aceptó. Entonces me contó de su vecina del otro lado de la calle, y que acaso estaba interesada en estudiar la Biblia. Crucé la calle, y me abrió la puerta una anciana de setenta y tres años, que estaba bebiendo y fumando. Le pregunté si quería estudiar la Biblia. Como no tenía nada que hacer, aceptó. Comencé a estudiar la Biblia con Ann. Después de un tiempo, aceptó a Cristo como Señor y Salvador. Mientras estudiábamos la grandeza del poder de Dios, Ann se sintió sobrecogida. Comenzó a llorar y preguntó cómo podía experimentar ese poder para vencer la bebida y el cigarrillo. Acordamos un momento para visitarla con los ancianos, para un ungimiento. Luego de la ceremonia, Dios le dio la victoria sobre esos malos hábitos. Pocas semanas después fue bautizada. La visité al día siguiente. Quería que Ann pensara cómo podía incorporar la adoración y el servicio a su vida. ¿Cómo podía responder a la grandeza de Dios y su perdón? ¿Qué misión le estaba dando el Señor? –Ann, ¿tiene usted familiares? –le pregunté. –Tengo una familia inmensa –me contestó. –Dios tiene una misión para usted. Quiere que gane a su familia para él –le dije. –¿Cómo voy a hacer eso? –preguntó. –Ore y póngase a disposición de Dios –le contesté. Unos tres años y medio después, el director del Departamento de Comunicaciones de la Unión llegó un sábado

Cuando tenemos una experiencia con Dios, nos sobrecoge el deseo de compartirlo con los demás . de mañana a filmar un video sobre Ann. Imaginen la escena: Ann estaba en medio de la plataforma, rodeada por cincuenta y siete personas que había llevado al Señor, incluida Jena, la mujer que se había rehusado a estudiar la Biblia conmigo. El director de Comunicaciones fue de una persona a otra preguntándole: «¿Por qué usted es adventista hoy?» Y siempre recibió la misma respuesta: «Vimos el cambio en la vida de Ann, y quisimos experimentar lo mismo». Entonces se volvió a Ann: «¿Qué hizo para ganar a su familia y amigos para el Señor?» «Oré por ellos día y noche. Entonces el Señor me mostró muchas maneras de fortalecer mi relación con ellos y satisfacer sus necesidades. En el momento apropiado, los invité a la iglesia, a estudios bíblicos en mi casa, o a una reunión de evangelización. Cada vez que uno de ellos decidía entregarse a Cristo, se me sumaba para orar por el resto. Dios ha sido muy bueno». Ese es el poder de la oración en relación a un ministerio; el poder de un proceso continuado. Es el poder de la espiritualidad personal, y de ver a Dios. Cuando tenemos una experiencia con Dios, nos sobrecoge el deseo de compartirlo con los demás. Isaías y Ann se encontraron con Dios y tuvieron una revelación de su grandeza, y esto cambió sus vidas. El mismo Dios viviente está deseoso de encontrarse con nosotros. En la verdadera adoración, experimentamos la presencia de Dios, que nos transforma y nos impulsa al servicio. ¿Ha tenido usted una experiencia «frente al trono»? ¿Ha escuchado la voz de Dios? ¿Ha aceptado su llamado al servicio? Ábrale hoy su corazón. Adórelo con alabanzas y con su servicio. Conozca a Dios cara a cara, y pónganse siempre a disposición de él. n * Elena White, en Review and Herald, 16 de agosto de 1881.

donde Kristy

S. Joseph Kidder es profesor de Ministerio Cristiano en el Seminario Teológico Adventista de la Universidad Andrews, en Míchigan (EE. UU.), L. Hodson cursa una Maestría en Teología. Vol. 12 No. 3 | Adventist World

C reencias

fundamentales

na noche oscura, Jesús habla con Nicodemo a la luz de una lámpara. Jesús le explica que en su reino, la marca de la ciudadanía es un nuevo nacimiento. Ese nuevo nacimiento no es de la carne, sino del Espíritu. Ese Espíritu (o viento) sopla a los que son nacidos del Espíritu doquiera lo desee (Juan 3:3-8). Más tarde, hacia el fin de su ministerio terrenal, Jesús dedica tiempo a sus discípulos; quiere prepararlos para la siguiente fase de su ministerio, cuando ya no contarán con su presencia física. Les promete que tendrán otro Consolador. Ese Consolador, el Espíritu Santo, les enseñará todas las cosas. Recordará a los seguidores de Jesús todo lo que él ha dicho, y les dará paz (Juan 14:15-27). En 1 Corintios 12, el apóstol Pablo comparte su deseo de que los miembros del cuerpo de Cristo no sean ignorantes respecto de los dones espirituales: Enfatiza: «Ahora bien, hay diversos dones, pero un mismo Espíritu. Hay diversas maneras de servir, pero un mismo Señor. Hay diversas funciones, pero es un mismo Dios el que hace todas las cosas en todos. A cada uno se le da una manifestación especial del Espíritu para el bien de los demás» (vers. 4-7, NVI). En términos simples, el Espíritu Santo es el administrador de los dones espirituales en el cuerpo de Cristo, y cada don es dado para bien de ese cuerpo.

Usar los dones

Ahora bien, ¿qué significa esto para la vida práctica y diaria? En primer lugar, necesitamos reconocer que cada cristiano recibe dones espirituales. Cada uno de nosotros tiene un conjunto de dones, con uno principal y uno o dos secundarios. No obstante, aunque los dones nos son dados como individuos, nuestros dones espirituales en realidad son dados para la iglesia. El Espíritu Santo es el administrador de los dones

Adventist World | Marzo 2016

NÚMERO 17

Presente para elPresente Gaspar F. Colón

espirituales, pero los líderes de la iglesia local tienen la responsabilidad de combinar los dones espirituales de los miembros con el plan de usarlos para ministerios de la iglesia. Cada iglesia tiene la responsabilidad de depender de la conducción del Espíritu Santo para el desarrollo del plan de ministerios. En segundo lugar, no importa si nuestro don es el de la fe, la sanación, la profecía, la proclamación, la enseñanza, la administración, la reconciliación, la compasión, la comunicación o el servicio desinteresado; o que seamos llamados por Dios y reconocidos por la iglesia para los ministerios pastorales, de evangelización o enseñanza, nuestra motivación primordial para el servicio tiene que estar vinculada con nuestro compromiso con Cristo y el amor que él busca derramar por nuestro medio a otros en el ministerio por medio de la iglesia. Pablo nos recuerda en 1 Corintios 13

que, más allá de los dones que Dios nos da, esos dones de nada sirven si su ejecución no está cimentada en amor. En tercer lugar, parte de nuestras responsabilidades de mayordomía como miembros del cuerpo de Cristo implica cultivar pasión por el descubrimiento y el desarrollo del don otorgado. Debería reflexionar con oración sobre lo que más ocupa nuestro pensamiento respecto al ministerio de la iglesia. ¿Qué cuestiones o necesidades percibimos y sentimos que nos producen mayor entusiasmo? Al pensar en lo que nos apasiona de esa cuestión o necesidad particular ¿cómo creemos que se podrían usar nuestros dones espirituales para el ministerio de la iglesia? Algunos pastores ofrecen un cuestionario de dones espirituales que usted puede usar para establecer cuáles son los que usted ha recibido. Otros feligreses que lo conozcan bien pueden decirle qué

los

dones y ministerios

espirituales

Dios concede a los miembros de su iglesia en todas las edades dones espirituales para que cada uno los emplee para el ministerio amante por el bien común de la iglesia y de la humanidad. Concedidos mediante la operación del Espíritu Santo, quien los distribuye entre cada miembro según su voluntad, los dones proporcionan todos los ministerios y habilidades necesarias para que la iglesia cumpla la función ordenada por Dios. Las Escrituras afirman que estos dones incluyen ministerios tales como la fe, la sanidad, la profecía, la predicación, la enseñanza, la administración, la reconciliación, la compasión, el servicio abnegado y la caridad, de manera de ayudar y animar a nuestros semejantes. Algunos miembros son llamados por Dios y dotados por el Espíritu para cumplir funciones reconocidas por la iglesia en los ministerios pastoral, de evangelización, apostólico y de enseñanza, específicamente necesarios para equipar a los miembros para el servicio, edificar a la iglesia de modo que alcance la madurez espiritual y promover la unidad de la fe y el conocimiento de Dios. Cuando los miembros emplean estos dones espirituales como fieles mayordomos de las gracias de Dios, la iglesia es protegida de la influencia destructora de las falsas doctrinas, crece gracias a un desarrollo que procede de Dios, y es edificada en la fe y en el amor (Hech. 6:1-7; Rom. 12:4-8; 1 Cor. 12:7-11, 27, 28; Efe. 4:8, 11-16; 1 Tim. 3:1-13; 1 Ped. 4:10, 11).

dones perciben en usted, cuando lo observan participar de los ministerios de la iglesia. Piense en las experiencias de «ministerios» más memorables de su vida cristiana. ¿Qué es lo que más lo inspiró y entusiasmó? ¿Qué estaba sucediendo en ese entonces en su vida cristiana? ¿Qué sucedía en la iglesia? El resultado de estas reflexiones lo ayudará a comprender mejor qué lo motiva, y qué clase de ambiente facilita que usted se destaque. En cuarto lugar, los pastores o integrantes del equipo de líderes de una iglesia tienen que dedicarse a desarrollar un plan de ministerios que sea lo suficientemente abarcador como para destacar y emplear los dones espirituales de los miembros de la iglesia. Este plan debería tomar en cuenta la comunidad en la que una determinada iglesia está llamada a servir. Evalúe y descubra qué está sucediendo en esa zona; el equipo de líderes necesita descubrir las necesidades específicas del vecindario para orientar a la iglesia hacia ministerios que hagan una diferencia y ayuden a reflejar el método de ministrar de Cristo. La famosa cita de Elena White capta el método de Cristo de manera

maravillosa: «Solo el método de Cristo será el que dará éxito para llegar a la gente. El Salvador trataba con los hombres como quien deseaba hacerles bien. Les mostraba simpatía, atendía a sus necesidades y se ganaba su confianza. Entonces les decía: “Seguidme”» (Elena White, El ministerio de curación, p. 103). Comparta sus dones

El pastor Frank asistió a un seminario sobre dones espirituales al comienzo de su ministerio. Se entusiasmó tanto con el concepto y el proceso que inmediatamente regresó a su iglesia y predicó una serie de sermones sobre los dones espirituales. A esto le siguió una invitación a que los miembros de la iglesia llenaran un cuestionario sobre dones espirituales, y a esto le siguieron sesiones en grupos pequeños donde los miembros verificaron y experimentaron con los dones que habían descubierto. Los miembros de iglesia del pastor Frank se entusiasmaron tanto que le manifestaron que estaban deseosos de poner a trabajar sus dones espirituales. Lamentablemente, el pastor Frank no tenía idea cómo emplear los dones de sus feligreses porque no había guiado

a su iglesia en el desarrollo de un plan contextualizado para el ministerio en la comunidad circundante. El compromiso con la Palabra de Dios, junto con el descubrimiento de nuestros dones espirituales en el contexto del ministerio de nuestras iglesias, nos colocará en una relación con el Espíritu Santo que nos protegerá de las falsas doctrinas. Esto producirá resultados de Dios en nosotros, nuestras iglesias y comunidades. Nos transformará en agentes en este reino de gracia, usados por Dios para transformar el mundo mediante la fe y el amor. Nos permitirá ser parte de un esfuerzo global, administrado por el Espíritu Santo, de preparar a los que nos rodean para la llegada del reino de gloria en la segunda venida de Cristo. n

Gaspar F. Colón ha sido pastor, educador y administrador de la Iglesia Adventista en muchas regiones del mundo. Actualmente es coordinador de integración misionera de Adventist World. Vol. 12 No. 3 | Adventist World

N O TA D E TA PA

Llamados a

servir

ed Wilson, el presidente de la Asociación General, resumió hace no mucho el concepto de Participación Total de los Miembros en una publicación de Facebook: «Cada seguidor de Cristo tiene la responsabilidad de alcanzar a otras personas de manera individual, compartiendo la esperanza que nosotros mismos hemos hallado en ese Salvador próximo a venir». Ese es en efecto el punto crucial de la Participación Total de los

F l e u r

D u k e

Fleur Duke

Australia

unque no había tenido conexión alguna con las dificultades que enfrentan las mujeres que trabajan en la industria del sexo, sentí el llamado de alcanzar con el amor de Dios a la gente de mi región en la Costa Central de Nueva Gales del Sur», dice Fleur Duke.

Adventist World | Marzo 2016

Miembros: la idea de que todos nosotros, no importa cuál sea nuestra vocación, podemos hacer algo para esparcir el evangelio de Cristo en el mundo. Nuestros esfuerzos no necesitan ser inmensos para ser eficaces, porque con la ayuda de Dios, podemos ser sus manos y pies en este mundo. Las siguientes historias ofrecen una vislumbre de las muchas maneras en las que adventistas de diferentes partes del mundo están haciendo exactamente eso. –Los editores

«Señor –le dije–, tengo poca experiencia y una mínima educación que me califique, pero estoy dispuesta a responder a tu llamado. Úsame». El primer paso de Duke para participar de ese ministerio fue unirse a los que ya estaban ministrando a las prostitutas de Kings Cross, en Sídney. «En febrero de 2012 comenzamos Ministerios Rahab, en sociedad con Rahab Australia Sur (una organización cristiana no denominacional). El equipo de unas treinta personas se reúne y ora antes y durante las visitas –dice Duke–. Una vez al mes, dos o tres mujeres del equipo visitamos cada prostíbulo. Les explicamos que somos cristianas y que estamos allí para ofrecer nuestro apoyo mediante la oración y el diálogo, estableciendo relaciones, ofreciendo estudios bíblicos y clases de inglés, y entonces les

dejamos una tarjeta de contacto». «Cada una de esas mujeres podría ser nuestra hermana, hija, amiga, tía o madre», añade. Muchas de ellas nos han dicho que extrañan sus hogares y familias en China o Tailandia. El Espíritu Santo habla a través de las barreras idiomáticas, y su amor alcanza a cada uno, aun en la oscuridad donde se encuentra. A todo esto se le suma un abrazo y una oración que muestra a ese estimado ser humano que Dios no lo ha olvidado. «Al comienzo, pensé que el objetivo era llevar a Dios a esos lugares, pero al poco tiempo me di cuenta de que él ya estaba allí. Mi parte en este viaje es hallar a Dios en esas mujeres que tienen sus luchas, así como yo wtambién tengo las mías», dice Duke. –Adaptado con permiso de la revista Record, de la Unión del Pacífico Sur F o t o g r a f í a :

C a l e b

G e o r g e

M o r r i s

SSD

La familia Navales Filipinas

ace dos años, Vincent, de solo tres años, se hizo amigo de otros cinco niños del vecindario y los invitó a su casa. Aireen, la madre de Vincent, no sabía qué hacer con los niños, pero ante la insistencia de su hijo, les ofreció el alimento que tenían, les enseñó una canción y les contó una historia. Aireen vio que algunos de los niños se trataban a los golpes, lo que le indicó que no tenían un ambiente hogareño muy propicio. «Decidí establecer unas

pocas reglas y muy simples», recuerda. Todos tenían que ser amables con sus palabras y gestos. «Como eran reglas fáciles de seguir, los niños obedecieron y esto hizo una gran diferencia, porque pudimos evitar arrebatos, gritos y palabras y conductas inaceptables». Al domingo siguiente, Aireen y Vincent hallaron un grupo mayor de niños en su puerta, y se dieron cuenta de que Dios estaba otorgando a su familia una oportunidad única. Del deseo de su hijito de ofrecer a otros niños desfavorecidos un lugar seguro,

nació «Jugar, aprender y servir». Después de un mes, el grupo se volvió muy grande para la sala de la familia. Rey, el padre de Vincent, transformó la sala de exposición de luz y sonido de la propiedad en un salón de clases. Una reunión típica tiene momentos de canto, la presentación del tema de la semana, momentos de oración, una lección en valores, una actividad de manualidades y momentos para comer algo. Con el tiempo, el programa ganó una reputación que ha atraído a escuelas y organizaciones sin fines de lucro, cuyos líderes quieren aprender cómo usar el programa en sus propios campos. Cuando el número de niños aumentó, la familia tuvo que registrar el programa como una ONG. Aunque aún no sepan cómo Dios continuará expandiendo su participación en el futuro, los Navales confían en la manera en que el Señor ha obrado mediante el deseo de un niño, para hacer realidad los sueños de los numerosos niños que los rodean. –Adaptado del original escrito por Gay Deles

Paolo Giametta I ta l i a

odo comenzó en 2008 en una Unidad de Acción de la Escuela Sabática en Bérgamo. Un joven anciano de iglesia llamado Paolo Giametta tuvo el sueño de iniciar un grupo filial, y entregó una lista de personas de la municipalidad de Merate por las cuales orar. Después de unas semanas, Judith, una joven de Merate, decidió abrir su casa al grupo para que estudiara la Biblia. El número de asistentes a los estudios bíblicos se incrementó semana tras semana. Pronto, se formó un segundo grupo filial en el pueblo cercano de Olgiate. En 2012, Judith fue bautizada. Al año siguiente, el grupo comenzó a llevar a cabo los cultos sabáticos en la casa de ella, y para 2013, se organizó oficialmente. Cada sábado, antes del comienzo

EUD

Vol. 12 No. 3 | Adventist World

N O TA D E TA PA del programa a las nueve de la mañana, los feligreses y sus invitados desayunan juntos. El culto es seguido de un almuerzo de camaradería, donde también se invita a amigos de la comunidad. Los domingos, el grupo suele salir a caminar por el campo. A menudo, se reúnen cerca de ochenta personas, y esto ha demostrado ser una excelente oportunidad de hacerse de nuevos amigos. Seis miembros de iglesia del grupo enseñan la Biblia a los interesados, en una demostración de evangelismo per-

sonal. Hace poco, y como resultado de la llegada de refugiados sirios a esa región, los miembros han ayudado a las autoridades para atender a cuarenta de ellos. Giametta, sin embargo, no se ha detenido allí. Él y un colega llamado Savino se hicieron amigos y comenzaron a estudiar juntos la Biblia después del trabajo. Como resultado, Savino decidió ser adventista. Dos meses antes de su bautismo, comenzó a estudiar la Biblia con un amigo que conoció en el gimnasio. Ahora Savino también está

al frente de un grupo filial a mitad de semana. Y también tiene una lista de personas por las cuales está orando, lo que incluye a su esposa y su hijo. Al igual que un efecto dominó, hay individuos ganados para Cristo en esta comunidad italiana, solo porque Giametta, un joven anciano de iglesia que sentía la responsabilidad de establecer una iglesia, hizo algo para cumplir su sueño. –Adaptado del original escrito por Paolo Benini

Un nuevo Jacob

Sa n t a C r u z ( I s l a s V í r g e n e s d e l o s E s t a d o s U n i d o s )

l nuevo Jacob fue bautizado como resultado de una reunión al aire libre. Desde entonces, ha sentido el impulso de compartir el amor de Dios. Comenzando con sus padres, Jacob invitó a su familia para que asistiera a una reunión de evangelización en el vecindario. Esto resultó en el bautismo de su padrastro y su hermana. «Fue un momento emocionante para mí, una gran experiencia. Sentí alegría al ver que

Dios me usó», recuerda. Jacob pronto se unió al grupo de oración de su iglesia y durante tres décadas, vio que Dios le fue abriendo las puertas de la oportunidad para que alcanzara a otras personas. Para alentar a los enfermos, se incorporó al grupo de visitas al hospital. «Soy como cualquier cristiano que desea hacer la voluntad de Dios», dijo. Sintiendo la necesidad de hacer aún

I AD

Adventist World | Marzo 2016

más, Jacob se unió a otro ministerio: el de visitar las prisiones. «Por medio del ministerio a las prisiones, ayudo a los olvidados por la sociedad», reflexionó. Al comienzo, Jacob dedicaba unos cuatro días por semana a la obra misionera, mientras seguía al frente de su empresa. Pero sintió que Dios le pedía más. «Me entusiasmé cuando recibí la invitación de incorporarme a ShareHim Internacional, y no dudé ni por un momento», dijo. El ministerio está afiliado a la División Norteamericana, y sus miembros viajan a otros países para compartir el mensaje de vida en Jesús. Jacob sigue participando de los ministerios de su iglesia, y es anciano ordenado. Cada año hace el sacrificio de viajar por sus propios medios para compartir esperanza. Gracias a sus esfuerzos, ya se han bautizado más de trescientas personas; este joven no teme poner en riesgo su vida y su empresa para satisfacer las necesidades de la gente. En momentos cuando muchos viven solo para sí, Jacob refleja el amor de Cristo en diversas partes del mundo. «Animo a cada miembro para que, si tiene que tomar decisiones, se ponga del lado del Señor. Es tan gratificante servirlo, que altera por completo nuestro camino». –Adaptado del original escrito por Royston Philbert

C i n dy T u t s c h

Cindy Tutsch

E s ta d o s U n i d o s

uando me jubilé, suponía que iba a “calentar mi asiento” en la iglesia –dice la pastora Cindy Tutsch, exdirectora asociada del Patrimonio White–. Ahora, dos años y medio después, he disfrutado de viajar un poco y de jugar con mis nietos. Pero también he disfrutado de participar con entusiasmo de la vida de mi iglesia». Primero se le pidió a Tutsch que coordinara la Escuela Sabática de

Jóvenes. «He disfrutado de conocer a los jóvenes de la iglesia –dice–. Nos hemos reunido en mi casa para una fiesta o sesión de planificación. Un par de adolescentes viene cada semana a casa para estudiar la Biblia». Pronto se le pidió a Tutsch que fuera anciana de iglesia. «He sido pastora de un par de iglesias, y sé que una “buena” anciana hace mucho más que ser líder de la plataforma. Dios finalmente me convenció de que aceptara», recuerda. Hace poco Tutsch fue a un centro local de jubilados, donde comenzó a dar estudios bíblicos a un grupo de ancianos. «Le dije a Dios que no quería esa tarea –dice–. “Dios, ya no quiero hacer esto”». Casi inmediatamente, fue

impresionada con un texto: «De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis» (Mat. 25:40). «En ese momento, Dios me dio un trasplante de corazón respecto de esos preciosos ancianos. Ahora, cuando voy a enseñarles, veo a Jesús. Y cuando me abrazan y me dicen lo felices que se sienten de que voy a orar y cantar con ellos cada semana, puedo responder honestamente: “¡Yo también me alegro!”», dice. Tutsch sabe que no puede satisfacer todas las necesidades de su comunidad, pero puede hacer algo. «Por la gracia de Dios, cuando él solicite mis servicios, seguiré diciendo: “Heme aquí, Señor. ¡Envíame a mí!”»

Matilda Radge Malasia

star en la industria del entretenimiento me ha ayudado a esparcir el evangelio –dice Matilda Radge–. Mi primera prioridad en la vida es hacer conocer el evangelio, y la segunda es mi música». Como productora y compositora, Radge compone canciones positivas que hablan de amor por los demás, la naturaleza y el amor en su forma más pura. «Cuando los clientes se acercan –añade–, confían en nosotros porque saben que amamos a Dios. Saben que les damos más de lo que ellos piden. Sacamos lo mejor de sus voces. Nuestra integridad es un testamento del Dios que adoramos, y nos aseguramos de que sepan eso a partir de nuestro carácter y ética de trabajo». «Malasia es un país musulmán, pero debido a los principios que sostenemos, tanto el personal de las radios, los clientes y aun los oyentes que nos siguen en los medios sociales, saben del sábado –dice Radge–. Cuando mi esposo y yo fuimos entrevistados para el Día de los Enamorados en una de las principales estaciones de radio, usamos esa opor-

M at i l d a

R a d g e

tunidad para hablar de los principios bíblicos que practicamos en nuestro matrimonio. Cada vez que somos llamados para entrevistas televisivas o radiales, damos el crédito a Dios. «Hay oyentes que nos siguen [en los medios sociales] y quieren saber más sobre nosotros –añade Radge–. Uso esto para compartir el evangelio. Publico actualizaciones y testimonios que glorifican a Dios. Muchos que comentan y ponen “Me gusta” no son cristianos. Pero cuando pasan por momentos

difíciles, me envían un mensaje, pidiéndome que ore por ellos». Antes de comenzar la producción de nuevos proyectos, Radge ora para escribir y producir canciones que den honra a Dios. «Le pedimos a Dios que bendiga nuestra labor. De comienzo a fin, oramos, oramos y oramos. Terminamos la producción con una oración de dedicación. ¡Y suele suceder que la canción es todo un éxito! Nos aseguramos de que nuestros clientes sepan que el éxito de la canción pertenece a Dios».

Vol. 12 No. 3 | Adventist World

E S P Í R I T U

D E

n un sentido muy especial, los adventistas del séptimo hemos sido colocados en el mundo como centinelas y transmisores de luz. Nos ha sido confiada la tarea de dirigir la última amonestación a un mundo que perece. La Palabra de Dios proyecta sobre nosotros una luz maravillosa. Una obra de la mayor importancia nos ha sido confiada: proclamar los mensajes del primero, segundo y tercer ángeles. Ninguna otra obra puede ser comparada con esta y nada debe desviar nuestra atención de ella.1

En servicio al prójimo

Dios espera un servicio personal de aquellos a quienes ha confiado el conocimiento de la verdad para este tiempo. No todos pueden ir como misioneros a países lejanos, pero todos pueden ser misioneros en el lugar donde viven, entre sus familiares y vecinos. Hay muchas maneras como los miembros de la iglesia pueden dar el mensaje a las personas con quienes se relacionan. Uno de los recursos que tiene más éxito es vivir en forma útil, desinteresada y cristiana. Los que luchan en la batalla de la vida con desventajas, pueden ser refrescados y fortalecidos por las pequeñas atenciones que nada cuestan. Las palabras bondadosas pronunciadas con sencillez, las pequeñas atenciones ofrecidas sinceramente, dispersarán las nubes de la tentación y la duda que se acumulan sobre el alma. La expresión sincera de una simpatía como la manifestada por Cristo, ofrecida con sencillez, tiene poder para abrir las puertas de los corazones que necesitan el toque sincero y delicado del espíritu de Cristo.2 Hermanos y hermanas, consagraos al servicio del Señor. No dejéis pasar ninguna ocasión favorable. Visitad a los enfermos y dolientes y manifestadles interés verdadero. Si es posible, haced algo para su mejoría. Así ganaréis sus corazones y podréis hablarles del Salvador.

Adventist World | Marzo 2016

P R O F E C Í A

Inversión para la eternidad

Solo la eternidad podrá revelar el alcance de una obra tal. Otros ramos de actividad se abrirán delante de aquellos que se muestren dispuestos a cumplir sus deberes inmediatos. La mayor necesidad actual no es tanto de predicadores sabios y elocuentes como de hombres y mujeres que hayan aprendido de Jesús de Nazaret a ser mansos y humildes, y que confiados en su poder, irán por los caminos y vallados para dar la invitación: «Venid, que ya está todo preparado» (Luc. 14:17).3 Hay para todo par de manos una obra que hacer […]. ¡Hay tantas personas necesitadas de ayuda! Tendrá el corazón desbordante de gozo aquel que, lejos de buscar su propia satisfacción, viva para beneficiar a los que son menos favorecidos. Despiértense los ociosos, y

Nuestro

arrostren las realidades de la vida. Tomad la Palabra de Dios y escudriñadla. Si la ponéis en práctica, la vida será para vosotros una realidad viviente, y recibiréis abundante recompensa. En su vasto plan, el Señor tiene un lugar para cada uno. No ha dado talento alguno que no sea necesario. ¿Es el talento pequeño? Dios tiene un lugar para él, y si es usado con fidelidad hará precisamente aquello para lo cual Dios lo dio.4 Miembros de la iglesia, haced brillar la luz. Haced oír vuestras voces en oración humilde, en testimonio contra la intemperancia, la insensatez y las diversiones mundanas, y en la proclamación de la verdad para esta época. Vuestra voz, influencia y tiempo, son dones de Dios y deben usarse en la ganancia de almas para Cristo. Visitad a vuestros vecinos y mostrad

Elena White

prójimo

aguarda

Z a f e r

A l i

interés en la salvación de sus almas. Despertad y poned en acción toda energía espiritual. Decid a las personas con quienes os relacionéis que el fin de todas las cosas está por sobrevenir. El Señor Jesucristo abrirá las puertas de sus corazones y realizará impresiones durables en sus mentes […]. Decidles cómo encontrasteis a Jesús y habladles de las bendiciones que habéis recibido mientras os ocupáis en su servicio. Habladles de las bendiciones que recibís al sentaros a los pies de Jesús para aprender preciosas lecciones de su palabra. Contadles acerca del gozo y alegría que la vida cristiana proporciona. Vuestras palabras afectuosas y fervientes los convencerán de que habéis encontrado la perla de gran precio. Que vuestras palabras gozosas y animadoras demues-

tren que realmente habéis encontrado un camino mejor.5 Muchos pueden y deben hacer la obra que acabo de mencionar. Hermano mío, hermana mía, ¿qué haces tú para Jesús? ¿Te esfuerzas por ser una bendición para otros? ¿Salen de tus labios palabras de simpatía y amor? ¿Estás realizando esfuerzos fervientes por ganar almas para el Salvador?6

podrá realizar la obra que debe hacerse. Los ángeles de Dios os acompañan a las casas que visitáis. Esta obra no puede hacerse mediante sustituto. El dinero prestado o dado no la llevará a cabo. Los sermones no la realizarán. Al visitar a la gente, al hablar, orar y simpatizar con ella, ganaréis sus corazones. Esta es la obra misionera más elevada que podéis hacer. Para realizarla, necesitaréis una fe resuelta y perseverante, una paciencia incansable y un profundo amor por las almas. Encontrad la manera de poneros en contacto con la gente de vuestro vecindario. Al hablarles de la verdad, emplead palabras revestidas de la simpatía manifestada por Cristo. Recordad que el Señor Jesús es el Obrero Maestro. El riega la semilla sembrada. Os pone en la mente palabras que llegarán a los corazones. Confiad que Dios sustentará al obrero consagrado y altruista. La obediencia, la fe como la de un niño y la confianza en Dios proporcionarán paz y gozo. Trabajad desinteresadamente, con amor y paciencia por todos los que se pongan a vuestro alcance. No manifestéis impaciencia. No pronunciéis ninguna palabra áspera. Dejad que el amor de Cristo more en vuestros corazones y que la ley de la bondad permanezca en vuestros labios.7 Los ángeles del cielo han esperado por mucho tiempo la colaboración de los agentes humanos, de los miembros de la iglesia, en la gran obra que debe hacerse. Ellos os están esperando.8 n 1 Testimonios

para la iglesia, t. 9, p. 17

2 Ibíd., p. 25 3 Ibíd., p. 29

Consagración plena

4 Ibíd., pp. 30, 31.

Consagraos totalmente a la obra de Dios. El es vuestra fortaleza y será vuestra mano derecha y os ayudará a llevar a cabo sus misericordiosos propósitos. Por medio de la obra personal poneos en contacto con quienes os rodean y estableced vínculos de amistad con ellos. La predicación no

6 Ibíd., p. 32

5 Ibíd., p. 31 7 Ibíd., p. 33 8 Ibíd., p. 38

Los adventistas del séptimo día creemos que Elena White (1827-1915) ejerció el don bíblico de profecía durante más de setenta años de ministerio público.

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V ida

adventista

Pensar L

al revés

a historia de Balaam (Núm. 23, 24) puede parecer un lugar extraño para comenzar un artículo sobre la Participación Total de los Miembros. Suele recordarse más que nada por el asna que habló, pero una lectura reflexiva revela mucho más. Balak, rey de Moab, está en problemas. Ofrece riquezas a Balaam si acepta maldecir a los israelitas. Balaam acepta con la advertencia de decir tan solo lo que Dios le dijese. Finalmente leemos que Balaam no maldice la nación, sino que pronuncia tres bendiciones. Enojado, el rey se rehúsa a pagarle por sus servicios. Antes de irse, Balaam ofrece una predicción adicional, en esta ocasión en forma gratuita: «Lo veo, pero no ahora; lo contemplo, pero no de cerca. Una estrella saldrá de Jacob; un rey surgirá en Israel» (Núm. 24:17). Aprender el porqué

El promotor Simon Sinek incorporó tres términos –qué, cómo, porqué– a un concepto de promoción comercial. Los colocó en un «Círculo dorado», en el que el círculo del centro es «porqué», el del medio es «cómo», y el exterior es «qué». Estos círculos, del más externo al interior, pasaron a conocerse como la teoría de Sineky trata sobre la manera de pensar que tienen las personas. En primer lugar, se preguntan «¿qué?», luego «¿cómo?», y finalmente «¿porqué?» Sinek trató de destacar que los líderes o las organizaciones inspiran, piensan, actúan y se comunican en forma

Merle Poirier

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diferente, es decir, al revés, o de adentro hacia afuera. Los líderes de éxito comienzan con «¿porqué?». Pensemos otra vez en Balaam y Balak. Juntos miran el «qué», desarrollan el «cómo», pero jamás razonan sobre el «porqué». Lo que querían era sacarse de encima a los israelitas. Cómo hacerlo implicaba maldecirlos. Jamás se preguntan en primer lugar la razón por la cual los israelitas estaban allí. Después de la frustración de Balak y la ambivalencia de Balaam, Dios da a Balaam una última profecía, y en ella revela el «porqué»: Los amo. Quiero pasar la eternidad con ellos. Tengo un plan. Aplicar este concepto a Dios se vuelve una experiencia reveladora. A lo largo de las Escrituras, Dios, desde una perspectiva humana, se comunica «al revés». Piense en Jesús y sus discípulos. Durante la mayor parte del ministerio de Cristo ellos estaban desorientados. Le hacían una pregunta (qué o cómo), y Jesús les respondía porqué. Nicodemo le preguntó a Jesús qué y cómo; Jesús le respondió porqué (Juan 3:16). La mujer samaritana le preguntó a Jesús qué, pero Jesús le respondió porqué (Juan 4:26). En camino a Emaús, Jesús reveló el «porqué», a lo largo de todas las Escrituras: Yo los creé. Los amo. Quiero vivir con ustedes para siempre. El «cómo» implica que envió a su Hijo a morir por nosotros. El «qué» es fácil: vivir con él por la eternidad. Los entusiasmados discípulos corrieron todo el camino de regreso a Jerusalén. Cuando entendemos el «porqué», los corazones

y la perspectiva se ven transformados. Pensar al revés cambia el mundo. Preguntarse el porqué puede cambiar todo

Las iglesias pueden ser culpables de pensar más en el «qué» que en el «porqué». Contamos a otros lo que somos, describimos cómo trabajamos, pero solemos no comunicar el «porqué». ¿Le suena familiar? «Debería conocer a Cristo como su Salvador» (qué). «Para conocerlo tiene que asistir a la iglesia, hacerse vegetariano, cambiar de estilo de vida, leer más la Biblia, etc.» (cómo). La implicación es: «Esto mejorará su vida» (qué). Algunos lo aceptarán, pero muchos no. No resulta muy inspirador. Sin embargo, ¿qué pasa si damos vuelta el orden? «Creo que Jesús es mi Creador, Salvador y Mejor Amigo» (porqué). «Creo que Jesús vendrá pronto; me está preparando un hogar para que pueda vivir con él para siempre, y me da abundantes bendiciones porque me ama» (cómo). «¿No te gustaría conocerlo?» (qué). Esto no indica que el otro método es incorrecto, sino que no necesariamente lleva a una conversión plena del corazón. Pensar al revés comunica entusiasmo, amor, misericordia y gracia, y la gente responde. Cuando leemos la Biblia pensando al revés, esto cambia todo lo que

¿Porqué? ¿Cómo?

¿Qué?

podríamos pensar respecto de Dios. El «porqué» de Dios se encuentra desde Génesis hasta Apocalipsis. El mensaje habla de que nos salva porque nos ama. Y cuando comprendemos eso, sentimos el deseo de contárselo a otros. Nos sentimos inspirados a cambiar el mundo. Participación Total de los Miembros

La Participación Total de los Miembros se refiere al evangelismo, a hablar con entusiasmo a otros acerca de Jesús. Debería ser fácil, pero no lo es; en su mayor parte, porque estamos atrapados por nuestro pensamiento. Cuando comprendemos el «porqué» de Jesús, comienzan a suceder cosas. Cuando comprendemos el «porqué» del sábado, ese día nos resulta sumamente gozoso. Cuando comprendemos el «porqué» de la adoración, queremos pasar tiempo con otros creyentes. Una iglesia en Maryland (EE. UU.) fue transformada por pensar el «porqué». Los de afuera consideraban que la iglesia era grande y antipática. Los miembros creían que no era problema de ellos, sino de los demás. Los pastores se esforzaban de tanto en tanto por solucionar la cuestión, pero nada F o t o g r a f í a :

P I XABAY / G e r d

A lt m a n n

resultaba duradero, y el apoyo de los miembros era deslucido. Sin embargo, un día cambió todo: pensar al revés. Durante la comisión de nombramientos, doce individuos fueron colocados en una habitación con el desafío de crear un plan para tener un ambiente más amigable. Se les mencionó repetidamente que debían descubrir el «porqué» de la hospitalidad. El grupo siguió respondiendo: ¿Qué es hospitalidad? ¿Cómo lograrla? Pero el pastor siguió animándolos a pensar el «porqué»: «¿Por qué ser amigables? ¿Por qué estamos aquí?» Tres semanas después, lo entendieron. Ese día se entusiasmaron. Doce miembros cambiaron toda la iglesia. En menos de tres meses, esos doce individuos, con apoyo del pastor, consiguieron que más de trescientos miembros se ofrecieran para participar en un nuevo programa denominado Equipo H.I.S (por sus siglas en inglés), cuyos miembros ayudan, orientan y apoyan a la iglesia y se asisten mutuamente porque Jesús los ama (porqué). Lo hacen de diversas maneras creativas, incorporando sus dones(cómo). ¿Y el qué? Los exmiembros están regresando; una campaña de evangelización produ-

jo bautismos; los jóvenes hablan de la iglesia con sus amigos; y pastores de otras congregaciones están preguntando cómo pueden incorporar el plan a su iglesia. El éxito es producto de pensar así como pensaba Jesús: al revés. Una iglesia en Massagno (Suiza), tuvo una experiencia similar. Solo quedaban seis miembros. Les faltaba visión, liderazgo y crecimiento. En mayo de 2010, uno de los miembros más jóvenes decidió, con la ayuda de Dios, hacerse cargo. No tenía experiencia como pastor, pero había estudiado los principios de los negocios, y decidió aplicarlos, junto con la oración, en pro del crecimiento de la iglesia. El joven líder colocó el bienestar de las personas por sobre los programas. Delegó responsabilidades a los miembros según sus dones. Incrementó la comunicación espiritual a través de los miembros que ofrecían aliento espiritual. Los sábados por la mañana todo parecía ser diferente y se comenzó a ofrecer una auténtica bienvenida a cada presente. En tres años, el grupo pasó de cinco a cuarenta asistentes; nueve personas fueron bautizadas y el grupo logró tener miembros de todas las edades. En marzo de 2015, el grupo pequeño fue establecido oficialmente como iglesia. Por cierto, el Señor ha bendecido a estas iglesias. Los miembros dejaron de pensar primero en el «qué» y el «cómo» para identificar el «porqué» antes de pasar al «cómo». Ambas tuvieron tanto éxito que no necesitaron definir el «qué», porque las personas se sintieron alentadas e inspiradas, y por ello se incorporaron y comprometieron con la iglesia. La Participación Total de los Miembros implica usar los dones que hemos recibido, para Cristo. Es, sin embargo, más que eso. Es identificar el «porqué» de nuestro cristianismo. Cuando lo hagamos, se producirá una transformación no solo de cada uno de nosotros sino de todo el mundo. n

Merle Poirier es gerente de operaciones de Adventist World. Vol. 12 No. 3 | Adventist World

T E S T I M O N I O

ocupación es Halsey Peat

ganar almas

Les presento a un agente de viajes para el cielo

arl Chin sigue tratando de convencer a las personas de que no es un pastor, pero a veces, su amor y servicio por el evangelio hacen que la gente dude de sus palabras.

El compromiso de Chin

La comparación constante con un pastor le resulta decepcionante. «Estoy haciendo simplemente lo que un laico es llamado a hacer –dice–. Ganar almas no tiene que ser tarea particular de los pastores. Como iglesia, creemos en el sacerdocio de todos los creyentes, por lo que tenemos que salir y contar a otros cuán bueno ha sido Dios con nosotros». Chin se sintió imbuido por la convicción de hablar de Cristo cuando comenzó a aprender sobre la salvación, hace casi cuarenta años. «Esto es demasiado bueno como para guardármelo». Con esto en mente, le pidió a su pastor (Rick Bacchus) si le permitía acompañarlo cuando daba estudios bíblicos. Quería aprender. Pronto, Chin estaba preguntando a las visitas que llegaban a la iglesia, si querían estudiar la Biblia. «Una de ellas –recuerda– era una prostituta, y mi esposa Cindy y yo estudiamos con ella. Imaginen nuestro gozo al presenciar su bautismo. Mientras tanto, ella nos presentó varias de sus amigas, y durante casi dos años estudiamos la Biblia con un grupo de prostitutas. Fui testigo de vidas transformadas, y sabía que este era solo el comienzo. Nadie es tan pecador que Dios no pueda salvarlo». Internacional en Canadá

En su iglesia actual, la iglesia adventista de Willowdale, en Toronto (Canadá), Chin contribuyó para que los creyentes camboyanos transformaran un grupo pequeño en una congregación con pastor propio. Después de veinte años, la congregación aún no quiere que Chin los deje. Él asiste a dos cultos todos los sábados: con su propia congregación, y con el grupo camboyano los sábados por la tarde, durante tres horas. Mediante un intérprete, dirige estudios bíblicos periódicos y a menudo también predica. «Mis momentos con el grupo son preciosos –dice–. Dicen que los ayudo, pero creo que yo soy el más bendecido al escuchar de sus luchas del pasado en Camboya bajo el

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El grupo camboyano fue creciendo con la ayuda de Chin.

gobierno despótico». Al grupo se agregan al menos tres nuevos conversos por año. Chin también posee una relación cercana con la iglesia adventista china de Toronto, que nació hace más de treinta años cuando un grupo de diez personas comenzó a reunirse en un salón de clases del Colegio Adventista Crawford, adyacente a la iglesia a la que asistía Chin. Él los acompañó cada semana, hasta que erigieron su propio templo. Chin es el orador invitado para el culto del año nuevo chino, y suele ser presentado como uno de los que ayudó a desarrollar esa iglesia. Chin siempre parece estar involucrado en un nuevo proyecto de evangelización. Ahora que las iglesias camboyana y china están consolidadas y creciendo, comenzó a estimular a los asistentes a su propia iglesia con la obra misionera. Su pastor comparte su visión, por lo que en pocas semanas, Chin fue designado presidente de una comisión de establecimiento de iglesias. «Pronto descubrimos el núcleo de un grupo pequeño que buscaba una iglesia patrocinadora –explica Chin–. Comenzamos a trabajar con ellos, de manera que se convirtieron en

El grupo camboyano disfruta de compartir los alimentos. En primer plano aparece Chin.

nuestro plan oficial de establecimiento de iglesias». Llegaron a ser la primera congregación sudasiática adventista de Ontario. El pastor Rick Bacchus, quien muchos años antes había dado a Chin la oportunidad de aprender a dar estudios bíblicos, trabajó muy cerca del grupo y, aunque ya jubilado, sigue acompañando y supervisando a esta congregación. Uno a uno

Chin ora todos los días para que Dios siga usándolo y el Señor le respondió llevándolo hasta Susan, una nueva inmigrante a Canadá proveniente de la China, que visitaba por primera vez en su vida una iglesia cristiana. Chin relata lo que sucedió: «Como de costumbre, al ver entrar a una visita me acerqué a saludar y presentarme. Su inglés era muy básico, pero logró entenderme y, cuando supe que era su primera visita a una iglesia cristiana, le pregunté si quería que Cindy y yo le compartiéramos enseñanzas acerca de la Biblia. Se alegró por la invitación y aceptó que la visitáramos. La primera visita fue un gran desafío, porque jamás habíamos estado con alguien que no tenía idea alguna de la Biblia. Tuvimos que cambiar nuestro enfoque usual. En la tercera visita, le sugerí que aprendiera el orden de los libros de la Biblia. La orienté para que tratara de aprender de a tres. Para la siguiente visita, Susan logró recitar sin equivocarse desde el Génesis hasta Salmos. Muy pronto pudo repetir todos los libros en perfecto orden, mostrando así el hambre voraz que sentía por el mensaje de la Biblia. »Susan leyó El Deseado de todas las gentes en solo dos semanas. Le dimos toda la serie de libros de El conflicto de los siglos, que leyó en tres o cuatro meses. Al finalizar los estudios, dijo que quería ser bautizada, pero que tenía dudas. Pronto supimos que su hermana en China estaba cuestionando su deseo de aceptar el cristianismo y el adventismo en particular. Susan había estado compartiéndole todo lo que había f o t o g r a f í a s

c o r t e s í a

d e l

a u t o r

aprendido de Jesús. Seguimos orando por ella. También estaba preocupada por otra hermana a la que le habían diagnosticado cáncer. Comenzamos a orar con fervor por su hermana enferma, y la animamos a que hiciera lo mismo. Cuando le llegaron noticias de la China de que su hermana se estaba recuperando, Susan atribuyó este hecho al poder de Dios y así se lo contó entusiasmada a su hermana escéptica. Esta última se volvió más receptiva, y poco después, su hija comenzó a asistir a una iglesia en la China. Nos dio una enorme alegría ser testigos del bautismo de Susan en nuestra iglesia local. Ahora es parte de nuestra familia». Al reflexionar en el impacto tan abarcador de su trabajo por Susan, Chin se apresura a decir: «Me di cuenta de que si nos permitimos ver la obra que puede hacer el Espíritu por nuestro medio, veremos que los resultados de nuestros esfuerzos florecerán. Aunque lo sé y he visto cómo obra el Señor, de alguna manera, me sigue sorprendiendo con personas como Susan». La ética de su testificación

Aunque algunos insisten en que la fe religiosa tiene que ser privada, Chin advierte que los adventistas del séptimo día no tenemos que ser víctimas de esa mentira. La fe no tiene nada que ver con privacidad. La vida de Jesús implicó salir a alcanzar a otras personas, y deberíamos vivir como él lo hizo, demostrándoles amor dentro de sus situaciones y circunstancias, no simplemente orando por ellos desde la comodidad de nuestro hogar. Él nos dice: «Solo cuando nos involucramos con las personas allí donde están, podemos llegar a hablarles del amor de Cristo e invitarlas a conocerlo». Chin, que es dueño de una agencia de viajes, está comprometido con el privilegio de testificar por Cristo mientras pueda hacerlo. Tiene una motivación misionera profunda: «¡Ser agente de viajes es mi trabajo, pero mi ocupación es la de ganar almas!» n

Halsey Peat es director de comunicaciones de la Asociación de Ontario de la Iglesia Adventista (Canadá).

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R espuestas

¿Quién es el Elías que se menciona en Malaquías 4:5?

preguntas

Elías en la profecía

Como parte de la respuesta a su pregunta, comentaré sobre el contexto del pasaje, examinaré cómo se interpreta en los Evangelios en referencia a Cristo, y analizaré qué cumplimiento podría tener en los últimos días. 1. Consideraciones contextuales: Malaquías 4 comienza con un anuncio del juicio divino y sus efectos sobre la suerte de los malvados (exterminación total) y los que reverencian/temen al Señor (victoria, salvación y gozo [vers. 1-3]). A esto le sigue un llamado a recordar [es decir, guardar] la ley que Dios dio a Israel en el Sinaí (vers. 4). En ese contexto, se anuncia y se fecha la venida de Elías (vers. 5): Vendrá antes del «día de Jehová, grande y terrible» (vers. 5; 1-3; Joel 2:31). La misión del profeta será la de hacer volver «el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres» (vers. 6). Puede leerse el texto literalmente, pero el contexto sugiere la necesidad de que la nueva generación tenía que ser fiel a la ley y al pacto de Dios como lo fueron los antepasados fieles. En otras palabras, Elías debía preparar al pueblo de Dios para la venida del Señor, llamándolos a regresar a la fe de sus padres. 2. Interpretación cristológica: El reino de Dios interrumpió con fuerza la historia humana en la persona y el ministerio de Cristo. Él fue el Mesías. Los judíos afirmaban que no podía ser el Mesías porque Elías aún no había venido (Mat. 17:10). Al afirmar que él era el Mesías, Jesús respondió que Elías ya había venido en el ministerio de Juan el Bautista (vers. 11-13). Juan negó ser el Elías encarnado (Juan 1:21), si bien vino «lleno del Espíritu Santo» (Luc. 1:15), y «el espíritu y el poder de Elías, para hacer volver los corazones de los padres a los hijos y de los rebeldes a la prudencia de los justos» (vers. 17). Mediante su ministerio, Juan haría que «muchos de Israel se [convirtieran] al Señor» (vers. 16), para así «preparar al Señor un pueblo bien dispuesto» (vers. 17). Su tarea profética era preparar el camino del Señor (Mat. 3:3). 3. Interpretación para el tiempo del fin: El cumplimiento parcial de la profecía de Malaquías en el ministerio de Juan el Bautista hallará su cumplimiento final antes de la segunda

bíblicas

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venida de Cristo. Una breve mirada al libro de Apocalipsis señala, en primer lugar, la venida de un falso Elías que hará «descender fuego del cielo» (Apoc. 13:13; 1 Rey. 18:36-38) para reunir a los reyes de la tierra en preparación para «la batalla de aquel gran día del Dios Todopoderoso» (Apoc. 16:14). En segundo lugar, ese falso Elías no es un individuo sino un movimiento apóstata que afirma tener el espíritu de Elías, cuando en realidad, lleva a cabo milagros engañosos gracias al poder de los espíritus demoníacos (Apoc. 16:13, 14). En tercer lugar, la obra de un falso Elías señala la misión del tiempo del fin del verdadero Elías, según se resume en los mensajes de los tres ángeles (Apoc. 14:6-12). Se refiere a un movimiento levantado por Dios para invitar a su pueblo a salir de Babilonia (Apoc. 18:4). Este movimiento es llamado el remanente del tiempo del fin (Apoc. 12:17), y son seguidores fieles del Cordero (Apoc. 17:14). En cuarto lugar, su mensaje, de conformidad con el mensaje de Malaquías, anuncia el juicio de Dios que traerá salvación mediante el evangelio eterno a aquellos que temen a Dios (Apoc. 14:7), y la destrucción de los malvados (vers. 10, 11). Los que temen al Señor obedecen/guardan los mandamientos de Dios (vers. 12). Restauran la fe de sus padres apostólicos según lo registra el Nuevo Testamento, llamando al pueblo de Dios para que regrese a él. En quinto lugar, están, al igual que Elías y Juan el Bautista, llenos del poder del Espíritu. Escuchan lo que el Espíritu dijo a las iglesias (Apoc. 3:14-22) y, con el poder que les da el ángel de Apocalipsis 18:1, iluminarán la tierra con la gloria de Dios en un último intento de preparar el mundo para la venida del Señor. Reciben el derramamiento del Espíritu del Señor, anunciado en Joel 2:28, 29, y eso se producirá «antes que llegue el día del Señor, día grande y terrible» (Joel 2:31). Deberíamos hacer nuestra la obra de Elías. n

Ángel Manuel Rodríguez se ha jubilado

después de trabajar como director del Instituto de Investigaciones Bíblicas de la Asociación General.

E studio

bíblico

Mark A. Finley

oisés M Una vida de confianza E

ste mes continuaremos analizando la vida de Moisés. En el último estudio nos enfocamos en la relación de Moisés con Dios como su amigo cercano. En esta lección, exploraremos el compromiso de Moisés de confiar en Dios ante los desafíos y las dificultades de la vida. Descubriremos a un Dios que honra las elecciones positivas que hace su pueblo y glorifica su nombre al obrar milagros en beneficio de los que confían en él. Esos milagros acaso no siempre son maravillas espectaculares y sobrenaturales (salvo excepciones), pero Dios siempre nos da el milagro de la gracia divina para que, fortalecidos, enfrentemos los desafíos que nos son comunes a todos.

1 ¿Qué decisión transformadora tomó Moisés en las cortes de Egipto? Lea Hebreos 11:24-27 y describa lo que Moisés escogió, y lo que dejó de lado. Moisés escogió «ser maltratado con el pueblo de Dios», antes que gozar de los deleites y la riqueza de Egipto. Por la fe captó la realidad divina de que esta vida tiene poco que ofrecer a la luz de la eternidad. Los placeres pasajeros de este mundo se tornan insignificantes en comparación con los tesoros eternos de Cristo.

4 ¿Cómo respondió Israel a la liberación milagrosa frente al Mar Rojo? Compare el Cántico de Moisés de Éxodo 15:1, 2 con Apocalipsis 15:3, 4. ¿Qué lección espiritual aprendemos en cada uno de estos cánticos? Cuando los israelitas atravesaron el Mar Rojo, y sus opresores, los egipcios, se ahogaron en sus embravecidas aguas, el pueblo de Dios explotó en un cántico de liberación. Su melodía victoriosa de alabanza recorrió el campamento. Al fin de los tiempos, cuando el pueblo de Dios esté de pie sobre el mar de cristal, también entonaremos un cántico de alabanza y victoria. El Cántico de Moisés, el cántico de la poderosa mano de liberación de Dios, resonará en todo el universo.

5 Aunque Dios obró milagros en repetidas ocasiones por su pueblo mientras vagaban por el desierto, este a menudo se quejó amargamente de las dificultades que tuvo que enfrentar. Cuando los israelitas tuvieron poco para comer, murmuraron contra Dios. No obstante, Moisés mostró otra vez su confianza en Dios. ¿Qué consejo dio? Lea Éxodo 16:6, 7.

¿De qué manera recompensó Dios la fidelidad de Moisés? ¿Qué promesa maravillosa hizo el Señor a Moisés y a los hijos de Israel? Descubra la respuesta en Éxodo 6:5-7.

6 En Éxodo 20, Dios dio a su pueblo los Diez Mandamientos; los principios de su gobierno divino. ¿Qué promesa hizo también a los que con amor obedecen sus mandamientos mediante su poder? Lea Éxodo 34:1, 6, 7, 10.

La confianza de Moisés en Dios abrió la puerta para que Dios obrara milagros extraordinarios en beneficio de los hijos de Israel. Los milagros más grandes de Dios están reservados para sus amigos, los que confían explícitamente en él.

Una de las cosas que Dios anhelaba enseñar a su pueblo en el Antiguo Testamento era que la obediencia trae bendiciones, pero la desobediencia nos lleva a perderlas. Dios obra de manera especial por los que confían en él y le obedecen.

¿Qué crisis enfrentó Israel frente al Mar Rojo, y qué consejo dio Dios a Israel, que reveló la confianza de Moisés en Dios? Lea Éxodo 14:13, 14.

7 Cuando Moisés descendió del Monte Sinaí, ¿qué condición indicó claramente que había estado en la presencia de Dios? Lea Éxodo 34:29. Dios revela su presencia de maneras maravillosas a los que confían en él. No importa qué desafíos enfrentemos hoy, si vivimos confiando en Dios, veremos que el Señor obrará milagros, y nosotros podremos revelar la gloria de Dios a los que nos rodean. n

I m a g e n :

M o o dy

P u b l i s h e r s

f r e e b i b l e i m a g e s . o r g

Vol. 12 No. 3 | Adventist World

I N T E R C A M B I O D E ID E AS

Las especies que Dios no creó y que fueron resultado de amalgamas, fueron destruidas por el diluvio . –Fred Herzel, Carolina del Norte, Estados Unidos

¿Creó Dios los dinosaurios? (Noviembre 2015)

Cartas

Buscamos legalismo… hallamos hipocresía (Noviembre 2015)

En respuesta a este artículo, recordemos por favor las siguientes verdades de la Palabra de Dios: «Antes de recibir esa circuncisión, ustedes estaban muertos en sus pecados. Sin embargo, Dios nos dio vida en unión con Cristo, al perdonarnos todos los pecados y anular la deuda que teníamos pendiente por los requisitos de la ley. Él anuló esa deuda que nos era adversa, clavándola en la cruz» (Col. 2:13, 14, NVI). «En consecuencia, ya que hemos sido justificados mediante la fe, tenemos paz con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo. También por medio de él, y mediante la fe, tenemos acceso a esta gracia en la cual nos mantenemos firmes. Así que nos regocijamos en la esperanza de alcanzar la gloria de Dios» (Rom. 5:1, 2, NVI). Ese es el maravilloso don de Dios. ¡Alabado sea su nombre! Nancy Reed por vía electrónica

Adventist World | Marzo 2016

Leí este artículo con interés, y me di cuenta de que la pregunta ya fue respondida en un libro de Elena White. Se encuentra en Dones espirituales, tomo 3, en el capítulo sobre el diluvio. La señora White expresa que todas las especies de animales creadas por Dios fueron preservadas en el arca. Las especies que Dios no creó y que fueron resultado de amalgamas, fueron destruidas por el diluvio. Tan solo un pensamiento para compartir con los lectores. Fred Herzel C arolina del Norte, Estados Unidos Más información sobre el tratamiento del Parkinson

Me gustó ver el artículo sobre la enfermedad del Parkinson (Noviembre 2015) pero me decepcionó la falta de información específica sobre la estimulación cerebral profunda (DBS). Me diagnosticaron Parkinson hace más de veinte años, de manera que sé de primera mano por lo que hay que pasar. Fui revisado en el Centro Médico de la Universidad de Stanford (California, EE. UU.), y aprobado para la DBS. Opté no ser sometido al procedimiento por dos razones: (1) no me gustaba la idea de tener tubos y cables que me atravesaran el cerebro; y (2) un amigo fue sometido a esa cirugía, y mejoró durante solo dos o tres meses antes

de sufrir un rápido deterioro del cual nunca se recuperó. No soy médico, pero si un enfermo piensa en someterse a la DBS, necesita ir a una clínica respetable con un médico experimentado en el tema. Don Blum por vía electrónica Adventist World para otras personas

No soy adventista, pero leí el número de Julio 2015 de la revista. Corté cuidadosamente el folleto de GLOW sobre salud mental y se lo di a un paciente que estaba en su lecho de muerte. Después de leerlo, decidió entregar su vida a Cristo. Quiero más de estas revistas en el futuro. Moses Auma Kenia Me gustaría que llegara a tiempo

La edición de Octubre 2015 de Adventist World me llegó el 6 de noviembre. Espero que el próximo número no llegue tan tarde, porque me gusta recibirlos a tiempo. Lova McLeod por vía electrónica

Pautas para las cartas: Envíelas por favor a letters@adventistworld.org. Las cartas tienen que ser claras, con una extensión máxima de cien palabras. Incluya el nombre del artículo y la fecha de publicación. Coloque también su nombre, el pueblo o ciudad, el estado o provincia y el país desde donde nos escribe. Los envíos serán editados por razones de espacio y claridad. No todas las cartas serán publicadas.

Pedidos y

agradecimientos Me gusta servir a Dios y hace mucho anhelaba trabajar como evangelista. Finalmente se me ha abierto una puerta. Oren por mí. Gerard Costa de Marfil Oren por favor por mí, porque estoy en verdad perdido sin el Señor. Felix Kenia Enfrento dificultades financieras, y mis dos hijos asisten a una escuela adventista. Oren por favor por nosotros. NgaihThang Birmania Quiero escuchar la voz de Dios y ver su manera destacada de actuar. Kwame Libia Gracias por orar por mi cirugía cardíaca. Todo salió bien. Mónica Argentina He visto que las fuerzas del mal están luchando contra mis finanzas. Ayúdenme por favor con sus oraciones. Isaac Ghana Estoy desempleado y necesito dinero para la universidad. Oren por favor por mí. Kevin Kenia Por favor oren por mí. Terminé la escuela secundaria en 2014 y ahora quisiera ir a la universidad pero no tengo dinero. He estado buscando trabajo desde entonces, sin resultado. Brighton Zimbabue Oraciones y alabanzas: Envíe sus pedidos de oración y agradecimientos por las oraciones contestadas a prayer@adventistworld.org. Sea breve y conciso; dígalo en cincuenta palabras o menos. Los envíos serán editados por razones de espacio y claridad. No todos serán publicados. Incluya por favor su nombre y su país. También puede enviar sus pedidos por fax a: 1-301-680-6638; o por correo a Adventist World, 12501 Old Columbia Pike, Silver Spring, MD 209046600 U.S.A.

Hace

67años

El 3 de marzo de 1949, el Sanatorio y Hospital de Manila reabrió sus puertas después de reparar los daños que sufrió durante la Segunda Guerra Mundial. La obra médica adventista en las Filipinas comenzó en 1928, cuando el doctor H. A. Hall, y tres enfermeras, abrieron un dispensario en el barrio de Malate, en el primer piso de uno de los edificios de la Misión. Cuando se incrementó la demanda, otro edificio fue transformado en un pequeño hospital de dos alas, una sala de cirugía/partos, y diez camas. En 1929 se levantó un nuevo edificio de tres pisos, y al año siguiente se estableció una escuela de enfermería. En 1931 se construyó un segundo edificio de tres pisos. En 1940, se construyó un edificio de cuatro pisos en Pásay. Durante la Segunda Guerra Mundial, los japoneses usaron el edificio como hospital de la armada. En junio de 1946, en medio de las ruinas causadas por la guerra, los líderes de la Iglesia Adventista abrieron una clínica temporaria en el primer piso, para servir a la comunidad. La institución es ahora parte de Servicios Adventistas de Salud/Asia, en la División de Asia Pacífico Sur.

os i van a la iglesia

Cuando los

Un sábado, cuando nos visitaba nuestra hija, la Escuela Sabática de los niños terminó antes, por lo que ella y sus hijitos ingresaron a la Escuela Sabática de adultos, donde yo enseñaba una lección sobre el libro de Santiago. Después de unos minutos de escuchar «Santiago dice claramente», y «según Santiago», nuestra nieta de cuatro años se volvió a su madre y le preguntó: –Mei-mei, ¿qué está haciendo Paieit (el abuelo)?» –¡Silencio! ¡Está hablando! –le replicó su madre. Pocos momentos después, mi nieta musitó: –Pero Mei-mei, ¿por qué se la pasa hablando de él? –James (Santiago) Warjri, Iglesia Adventista Internacional de Hong Kong

Vol. 12 No. 3 | Adventist World

I N T E R C A M B I O D E ID E AS

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RESPUESTA: En la Escuela Adventista para Pupilos de Manipur en el noreste de la India, los estudiantes disfrutan de los últimos minutos de juego antes del inicio de las clases del día. La organización Maranatha Volunteers International construyó un edificio con múltiples salones de clase (que aparece en el fondo) para remplazar las deterioradas construcciones del campus. La institución, que fue establecida en la década de 1960, cuenta con más de ochocientos alumnos de nivel primario y secundario.

Sea Parte del

INTERCAMBIO

La sección «Intercambio de ideas» de Adventist World está buscando contribuciones. Para reflejar el amplio mundo adventista, lo invitamos a enviar: n Fotografías de alta resolución (con sus respectivas leyendas e información del crédito correspondiente) n Experiencias profundas o humorísticas n Breves lecciones espirituales n Poemas breves n Citas citables Envíelos a Letters@AdventistWorld.org. En la línea de «Asunto», coloque: «Intercambio de ideas».

Adventist World | Marzo 2016

cerebro El ejercicio estimula los latidos del corazón, lo que incrementa el flujo de sangre a todo el cuerpo, incluido el cerebro. Más sangre significa más nutrientes y oxígeno, lo que ayuda a que el cerebro se mantenga sano. El ejercicio beneficia al cerebro porque: n Mejora el aprendizaje n Estimula la memoria n Lo protege de enfermedades (reduce el riesgo de sufrir Alzheimer y otras formas de demencia) n Funciona como antidepresivo Los mejores son los ejercicios aeróbicos tales como correr, trotar, andar en bicicleta, nadar, caminar, patinar o esquiar. Fuente: Women’s Health

Oportuno

consejo

El estadista y filósofo estadounidense Benjamín Franklin dijo en cierta ocasión: «¿Ama usted la vida? Entonces no derroche el tiempo, porque la vida está hecha de tiempo». No importa dónde vivamos o cómo nos ganemos la vida, todos tenemos la misma cantidad de tiempo: 24 horas al día, 7 días a la semana, 365 días al año (este año, 366). He aquí cinco consejos para sacar mejor provecho del tiempo: pague la TV: es muy fácil perder noción del tiempo cuando miramos A televisión. Póngase un límite diario o semanal. n Tenga un plan: sepa lo que tiene que hacer cada día y por semana. n Establezca prioridades: haga las cosas más importantes primero. n Sea disciplinado: no permita que un descanso de 5 minutos se transforme en uno de 15 o 20. n Levántese más temprano: comience despertándose 15 minutos antes y alístese para el día sin necesidad de andar agitado y a las corridas. n

Fuente: Men’s Health

Mucho que

levantar

La trompa del elefante tiene unos cien mil músculos, y puede levantar casi 350 kilogramos. Fuente: The Rotarian

«He aquí, vengo pronto . . .» Nuestra misión es elevar a Cristo, uniendo a los adventistas de todo el mundo en creencias, misión, vida y esperanza.

Editor ADVENTIST WORLD es una publicación internacional de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, editada por la Asociación General y la División de Asia-Pacífico Norte de la Iglesia Adventista. Editor ejecutivo Bill Knott Editor asociado Gerente editor internacional Pyung Duk Chun Junta editora Ted N. C. Wilson, presidente; Benjamin D. Schoun, vice- presidente; Bill Knott, secretario; Lisa Beardsley-Hardy; Daniel R. Jackson; Robert Lemon; Geoffrey Mbwana; G. T. Ng; Daisy Orion; Juan Prestol; Michael Ryan; Ella S. Simmons; Mark Thomas; Karnik Doukmetzian, asesor legal. Comisión coordinadora de ADVENTIST WORLD Jairyong Lee, chair; Yutaka Inada, German Lust, Pyung Duk Chun, Suk Hee Han, Gui Mo Sung Editores de Silver Spring, Maryland, EE.UU. André Brink, Lael Caesar, Gerald A. Klingbeil (editores asociados), Sandra Blackmer, Stephen Chavez, Wilona Karimabadi, Andrew McChesney Editores de Seúl, Corea Pyung Duk Chun, Jae Man Park, Hyo Jun Kim Directora de operaciones Merle Poirier Director de asociaciones estratégicas Jared Thurmon Editores invitados Mark A. Finley, John M. Fowler Consultor E. Edward Zinke Gerente financiera Kimberly Brown Asistente administrativa Marvene Thorpe-Baptiste Junta administrativa Jayriong Lee, presidente; Bill Knott, secretario; P. D. Chun, Karnik Doukmetzian, Suk Hee Han, Yutaka Inada, German Lust, Ray Wahlen, Exoficio: Juan Prestol-Puesán, G. T. Ng, Ted N. C. Wilson Dirección y diseño gráfico Jeff Dever, Brett Meliti Consultores Ted N. C. Wilson, Juan Prestol-Puesán, G. T. Ng, Guillermo E. Biaggi, Mario Brito, Abner De Los Santos, Dan Jackson, Raafat A. Kamal, Michael F. Kaminskiy, Erton C. Köhler, Ezras Lakra, Jairyong Lee, Israel Leito, Thomas L. Lemon, Geoffrey G. Mbwana, Paul S. Ratsara, Blasious M. Ruguri, Ella Simmons, Artur A. Stele, Glenn Townend, Elie Weick-Dido A los colaboradores: Aceptamos el envío de manuscritos no solicitados. Dirija toda correspondencia a 12501 Old Columbia Pike, Silver Spring, MD 20904-6600, EE.UU. Número de fax de la oficina editorial: 1 (301) 680-6638 E-mail: worldeditor@gc.adventist.org Sitio Web: http://www.adventistworld.org/ A menos que se indique lo contrario, todas las referencias bíblicas pertenecen a la versión Reina Valera. Revisión 1995. ADVENTIST WORLD es publicada todos los meses e impresa simultáneamente en Alemania, Argentina, Australia, Austria, Brasil, Corea, Estados Unidos, Indonesia y México.

Vol. 12, No. 3

f o t o g r a f í a : D a v i d MARK

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