ARGOS Nº18 2021 SEP

Page 1

ARGoS ARGoS -- nº nº 18 14 –– 33erer Trimestre 2021 2020

Pseudochromis fridmani su reproducción

Gambas de diseño / Enigmatochromis-lucanusi / Especies invasoras / Calor y frio en los acuarios


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 2

editorial editorial Con este número nos toca poner cinco velitas a la tarta de cumpleaños de esta querida revista. La tarta ideal para Argos tendría sabor dulce y salado, estaría realizada aprovechando innovaciones técnicas y tendría una esmerada presentación, para que entre por los ojos antes de paladearla. ¿A que ya te apetece probar un pedazo? Tranquilo, en seguida comenzamos.

Como decía, ha pasado ya un lustro desde que la Junta Directiva (la misma que aún hoy sigue al frente de la AEA) decidiese liarse la manta a la cabeza para dar el salto desde su boletín hacia una publicación que pudiese hacerse un nombre entre los aficionados, al lado de las más prestigiosas del sector. Estamos convencidos de que cada

uno de los números publicados en estos años refleja el esfuerzo y las horas de dedicación que llevan detrás. Todos los que trabajamos de forma altruista en Argos tenemos como objetivo ofreceros a los aficionados una revista de calidad creciente, atractiva y amena para todos los niveles. Estamos muy orgullosos del resultado y también muy agradecidos de todo el apoyo recibido desde todos los rincones del mundo. Así que, ¡soplemos juntos las velas deseando muchos más años de Argos!

Fernando Zamora Presidente de la AEA

Foto portada: Pseudochromis fridmani juvenil. ©José Mª Cid

Publicación trimestral de la Asociación Española de Acuaristas www.mundoacuariofilo.org

Director José María Cid Ruiz

Diseño y Maquetación Planeario

Comité de Redacción Miriam Falgueras (Coordinadora) Fernando Zamora Juan Artieda González-Granda

Depósito Legal M-27406-1976 Queda prohibida la reproducción total o parcial sin la autorización expresa del autor y de la revista Argos.

Contáctanos en: admin@aquaticnotes.com

Argos es una publicación para acuaristas hecha por acuaristas, anímate a colaborar.


Argos os ofrece en este nuevo número, una amplia variedad de contenidos. Todos ellos, experiencias prácticas de sus autores. Así, abrimos la revista, con un monográfico sobre la reproducción de Pseudochromis fridmani, una especie emblemática de los acuarios de arrecife. Seguidamente, encontraremos la segunda parte del artículo “Gambas de diseño”, donde su autor, Eduardo Alzola, prosigue describiendo los pormenores de mantenimiento de las principales especies de decápodos tropicales para acuarios marinos. Enigmatochromis lucanusi, es la especie objeto de estudio de nuestro siguiente trabajo. Carlos Diez, su autor, nos desvela todos los detalles de su mantenimiento y reproducción en acuario. “Peces catalogados como especies invasoras”, es el título de nuestro siguiente artículo, en el, y a través de un riguroso análisis, Jesús Dorda nos traslada los elementos necesarios para fijar criterio fiable en este tema tan controvertido. A continuación, y ya metidos en la sección de tecnología, encontramos un completísimo trabajo titulado “El calor y el frío en el acuario”. Su autor, Juan I. Artieda, nos va desgranando los conceptos necesarios para manejar estos parámetros con total solvencia teórica y práctica. Si avanzáis en la lectura, como así espero, encontrareis las secciones fijas: “Acuariofilia en la Red”, “Noticias” y “Contraportada”, las cuales, completan nuestra propuesta de contenidos para el presente número. ¡Todo vuestro. Que lo disfrutéis! José María Cid Ruiz Director Argos

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

contenidos

3


ARGoS - nº 17 – 2º Trimestre 2020 4

06 21 30 39

Pseudochromis fridmani José María Cid

Gambas de diseño (II) Eduardo Alzola

Enigmatochromis lucanus Carlos Diez

Especies invasoras Jesús Dorda

sumario 49 65

Calor y frio en los acuarios Juan Artieda

Acuarofilia en la Red Aquanotes

Xabier García

Noticias

Chelmon rostratus criada con éxito por Rising Tide Conservation (Universidad de Florida)

66 67

Xabier García

En contraportada

Tiburón blanco Juan José Saez


5

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021

Pseudochromis fridmani Acerca de su reproducción José María Cid Ruiz

6

Joven ejemplar de P. fridmani, perteneciente a una segunda generación del autor © J. Mª. Cid


Acerca de su reproducción INTRODUCCIÓN

El auge dentro de la acuariofilia marina, del mantenimiento de entornos coralinos, es un hecho incuestionable. Buena parte del colectivo de acuaristas dedicados a esta especialidad, son a estas alturas, plenamente consciente de los retos de sostenibilidad que su actividad tiene planteados (según datos FAO, no más del 10% de los ejemplares marinos proceden de la acuicultura ornamental). Escasez y responsabilidad, son dos potentes vectores, para que no solo ya, importantes empresas de acuicultura acometan el reto de la cría de especies marinas ornamentales, también se ha traducido en un creciente interés de los acuaristas marinos por la reproducción en cautividad. En las redes sociales, proliferan los grupos de esta índole, demandando información y protocolos de cría fiables y asequibles a sus posibilidades. No quieren alejarse de sus especies favoritas. P. fridmani, es sin duda alguna, una de ellas. Lo que viene escrito a continuación, es buena parte de lo que he aprendido sobre ella, intentando reproducirla una y otra vez.

P. fridmani, fotografiado en los Estrechos de Tirán (M. Rojo). ©J. Mª. Cid

Originaria del Mar Rojo, la “perca enana de fridman” (“orchid dottyback”), es una de esas especies denominadas “reef safe”, compatible con todo tipo de corales, dado que, no daña ni se alimenta de sus pólipos. Taxonómicamente, se encuadra dentro de la familia Pseudochromidae, la cual alberga 24 géneros y 154 especies, distribuidas en cuatro subfamilias8. Pseudochrominae, es la subfamilia a la que pertenece P. fridmani (Klausewitz, 1968). Los lectores interesados en la taxonomía de este grupo, pueden consultar las publicaciones del ictiólogo A. Gill1,2 (2004). Por otra parte, y dado que se trata, de una especie bien conocida por la mayoría de acuaristas marinos, no aburriré al lector con una descripción detallada de su morfología3. Confío que las imágenes incorporadas a este artículo, permitan apreciar en todo su esplendor, la belleza y singularidad de este pez. ¿CÓMO FORMAR Y MANTENER UN GRUPO REPRODUCTOR? Y ya entrando directamente, en el objetivo de este artículo, el primer aspecto a destacar es la naturaleza hermafrodita de P. fridmani. Se trata de una especie hermafrodita protógina; es decir, primero son todos hembras y posteriormente, algunos ejemplares se transforman en machos. Así tenemos que dentro de un conjunto de ejemplares juveniles, los más grandes, los más dominantes, casi siempre devienen en machos. En la bibliografía existente sobre la especie, se menciona algunas veces, la característica morfológica de la prolongación del borde inferior de la aleta caudal como una diferencia entre sexos, pero a mí no me lo ha parecido. Por otra parte, si solo se dispone de ejemplares adultos para formar parejas, hay que tener en cuenta que si han sido correctamente mantenidos, los tamaños de machos y hembras se igualan en la madurez, si bien estas últimas presentan un perfil más “rechoncho”. Con estos datos en mente, no es difícil seleccionar un grupo de cría con juveniles, apostando por las diferencias de tamaño y de comportamiento.

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Pseudochromis fridmani

7


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021

Pseudochromis fridmani Acerca de su reproducción

ese tipo de acuarios los peces no se “distraen”. No comparto esa corriente de opinión. Creo que una cierta “riqueza ambiental”, siempre ayuda a reducir el nivel de estrés de los reproductores y con ello, mejorar nuestras posibilidades de éxito. En este sentido, una fina capa de arena de coral, sobre la que disponer una mezcla suficiente de rocas que cubren tubos de PVC, ha sido la opción preferente. Los tubos de PVC, de longitudes no inferiores a los 8 cm, pueden ser “abiertos” o con un tapón en el fondo, siendo los de este tipo, los elegidos generalmente por las parejas para desovar. Los acuarios con ejemplares de P. fridmani, deben estar siempre tapados. Saltan fuera del acuario en raras ocasiones, lo hacen especialmente de jóvenes, pero saltan.

8

P. fridmani. Macho adulto. ©J. Mª. Cid

Se trata de una especie de pequeño tamaño que rara vez supera los 6,5 cm. Es marcadamente territorial, organizándose en grupos perfectamente jerarquizados. En la naturaleza o en acuarios de grandes dimensiones, estos grupos pueden contener un macho dominante y dos o tres machos más junto con un nutrido grupo de hembras, también jerarquizadas entre ellas. Para propósitos reproductores, los mejores resultados los hemos obtenido, optando por acuarios de 200 litros, albergando un harem formado por un macho dominante y dos o a lo sumo tres hembras (generalmente la tercera hembra, la de menor jerarquía rara vez se reproduce con el macho). Esta configuración en harem, es mucho menos estresante para las hembras que mantener parejas aisladas. En cuanto a la disposición interior, hay muchos criadores que consideran que un acuario “desnudo” es lo óptimo para fines reproductivos, argumentando que en P. fridmani. Hembra grávida. ©J. Mª. Cid


Acerca de su reproducción

Se trata de una especie diurna que habita determinadas áreas coralinas del Mar Rojo, donde se le puede observar formando grupos más o menos numerosos, los cuales se despliegan en las horas de luz frente a la pared coralina, corriendo a refugiarse en recovecos y pequeñas oquedades a la menor señal de peligro y también para pernoctar. En la naturaleza, se alimenta principalmente de pequeños crustáceos, gusanos poliquetos y zooplancton en general, es por ello que, como base de la alimentación de los grupos reproductores, se les proporciona una papilla de elaboración casera, la cual contiene una amplia variedad de alimentos de origen marino, equivalentes a su dieta natural. A lo largo de la semana, esta papilla viene complementada con Mysis y Artemia (viva y congelada), huevas de langosta y copépodos y anfípodos bentónicos. Como es bien sabido, además de la calidad genética de los reproductores, la dieta incidirá decisivamente no solo en la calidad del huevo sino también en la salud de la larva que eclosione posteriormente. CORTEJO Y DESOVE

9

El macho atrae la atención de las hembras grávidas hacia su refugio. ©J. Mª. Cid

Bajo las condiciones anteriormente descritas y a una temperatura de entre 25 y 27 ºC, P. fridmani, se ha venido reproduciendo con regularidad a lo largo de muchos meses, durante los cuales, se ha tenido la oportunidad de desarrollar varios cardúmenes pertenecientes a dos generaciones (f1 y f2).

del día, concretamente entre las 13 y las 16 horas. Las eclosiones han tenido lugar en las primeras horas del 5º día. Teniendo en cuenta ambos datos, el tiempo de desarrollo embrionario (TDE) ha oscilado entre los 4,2 y los 4,6 días (a 26ºC). Es decir, unas 108 horas pos fertilización.

En base a lo observado, he promediado algunos datos de carácter general. Así, por ejemplo, el tiempo entre desoves (TED) ha sido de un mínimo de 4 días a un máximo de 14 días, con un valor medio de 6 días. Además, se ha observado que el TED ha sido mayor, cuando el macho ha cuidado simultáneamente de dos puestas, correspondientes a dos hembras, respecto a cuándo ha atendido únicamente un desove.

La cantidad de huevos por desove, se va incrementando a medida que los reproductores van creciendo. Las hembras muy jóvenes empezaron depositando entre 50 y 70 huevos por freza. Dos meses después, los desoves ya contenían entre 100 y 150 huevos. Ya en la madurez, con buena salud y plenamente desarrolladas, las hembras desovan una media de 300-350 huevos, los cuales, una vez fecundados y moldeados por el macho, forman una masa esférica de 2-3 cm de diámetro.

Los desoves han tenido lugar preferentemente en las horas centrales

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Pseudochromis fridmani


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021

Pseudochromis fridmani Acerca de su reproducción

fecunda inmediatamente en movimientos circulares, los cuales, dan la impresión, que contribuyen a formar la característica “masa esférica de huevos”. A continuación, el macho invita no muy amablemente, a la hembra a abandonar el refugio. Los grupos reproductores, han exhibido una alta tasa de fertilización de los huevos, por encima del 90%. Por otra parte, no se ha observado en ninguna ocasión que alguno de los machos dominantes, devorara la puesta que protegía. Como ya se mencionó, un macho de la generación F2, ha incubado en varias ocasiones, dos puestas simultáneamente, correspondientes a las dos hembras de mayor jerarquía del harem, con las que habría desovado con una diferencia de apenas 24 horas.

10

Finalmente, una hembra grávida se decide a entrar precedida por el macho ©J. Mª. Cid

El cortejo se desencadena, cuando el macho percibe que una de las hembras ha madurado huevos y se encuentra lista para la freza. El hecho combinado de que la hembra presente un abdomen grávido y probablemente expulse feromonas, provoca que el macho centre su atención en ella. El epicentro del cortejo se sitúa en el refugio del macho. Cuando la hembra nada no lejos de allí, el macho se dirige rápidamente hacia ella e intenta atraer su atención y encaminarla hacia su nido- refugio, con unos movimientos característicos, después retorna rápido hacia el refugio, esperando que ella le siga. Esta parte del cortejo, tiene una duración variable, puede durar una o varias horas, aunque siempre culmina con los dos ejemplares introduciéndose en el refugio para desovar en la pared interior del fondo. Con los dos ejemplares pegados uno a otro lateralmente (ver fotos), la hembra va desovando una gran cantidad de huevos, que el macho

Dos secuencias de una pareja desovando. ©J. Mª. Cid


Acerca de su reproducción

CUIDADOS PARENTALES VS. INCUBACIÓN. DESARROLLO EMBRIONARIO

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Pseudochromis fridmani

11

Durante los días de cuidados parentales, el macho se alimenta irregularmente. ©J. Mª. Cid

Macho de P. fridmani, atendiendo a dos masas de huevos provenientes de dos desoves con dos hembras distintas. ©J. Mª. Cid

Tras producirse el desove, el macho se dedica a la defensa y cuidado de la puesta. Limpia y abanica los huevos con todas las aletas de su cuerpo. Los huevos se adhieren unos a otros mediante unos filamentos presentes en su corion (M.Scott, 2011)6. Estos filamentos, no solo mantienen cohesionados a los huevos entre sí, también permiten establecer una distancia mínima entre ellos, lo cual facilita el fluir del agua bien oxigenada. Con los cuidados parentales, la masa de huevos, puede deformarse un poco y también cambiar de posición en el interior del nido. A este respecto, se les ha proporcionado un segundo forro interior de fibras, al que, de alguna Un macho mantiene la posición frente a la cámara, en defensa del refugio donde protege una puesta en desarrollo. ©J. Mª. Cid


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 12

Pseudochromis fridmani Acerca de su reproducción

manera, quedan mejor adheridos los huevos.

El huevo de P. fridmani tiene un diámetro de entre 1 y 1,2 mm. Con 72 horas p.f., los embriones son apreciables en todos sus detalles morfológicos, el corazón ya bombea sangre y el saco vitelino se ha reducido notablemente. Como ya se indicó, el desarrollo embrionario se completa en aproximadamente 4,5 días para un rango de temperaturas de 25,5 a 27ºC.

la masa de huevos con los embriones ya perfectamente formados, a un incubador de dos cámaras, una dentro de la otra. La cámara interior contiene los huevos y una línea de aireación, su fondo es un enrejado que sujeta la masa de huevos, pero deja “caer” las larvas que vayan naciendo a la segunda cámara exterior, donde las larvas disponen de más espacio y se encuentran protegidas de las “turbulencias” de la línea de aireación de la primera cámara. En estas condiciones, aislando la masa de huevos pocas horas antes de la eclosión, no es necesario desinfectarla, verificándose ratios de eclosión muy altos. En caso de tener que aislar la puesta, al comienzo del desarrollo embrionario, funciona bien un breve baño desinfectante con formol, de 2 a 5 minutos a una concentración de 0,2 ml/L, con aireación vigorosa. Con posterioridad al baño desinfectante, la masa de huevos es trasladada al incubador con agua nueva.

Por regla general, la puesta se deja al cuidado del macho durante todo el desarrollo. En las horas previas a la noche prevista para la eclosión (atardecer del 4º día), se traslada

ECLOSIÓN. CARACTERÍSTICAS DEL LARVARIO. DIETA INICIAL

Durante este periodo, el macho permanece mucho tiempo en el interior del refugio, alimentándose irregularmente. En los acuarios específicos de cría, sin la presión de otras especies u otros machos, es frecuente que el macho dominante, seleccione más de un refugio donde desovar, usándolos alternativamente. No ha sido posible discriminar que le determina en la elección de uno u otro refugio.

En las primeras horas de oscuridad de la última noche, los huevos eclosionan, liberando multitud de larvas. En los muestreos realizados, Las larvas recién eclosionadas de P. fridmani, han presentado una variabilidad de tamaño de entre 2,5 y 2,8 mm. No presentan apenas Pseudochromis fridmani. Embriones con 90 hpf. ©J. Mª. Cid

P. fridmani. Aspecto general de la larva con 12 horas. ©J. Mª. Cid


Acerca de su reproducción

pigmentación, y de su cuerpo casi transparente, destacan la boca, los ojos, el intestino y una membrana precursora de las aletas dorsal y ventral. Su saco vitelino, se ha ido reduciendo proLarva con 14 dte, en típica postura de captura. ©J. Mª. Cid gresivamente durante el desarrollo embrionario, es ahora mínimo, pero suficiente para alimentarlas endógenamente durante la primera noche. La mañana posterior a la noche de la eclosión, se observa ya un gran número de larvas con 5 o 6 horas de vida, nadando vigorosamente en la “cámara exterior” del incubador, sin soportar las turbulencias de la línea de aireación de la cámara interior del mismo, donde ahora, apenas quedan sino los restos de los coriones de los huevos eclosionados. Dado que ambas cámaras son fácilmente separables, se efectúa el transvase de las larvas al acuario de desarrollo de forma rápida y segura. Allí, se sitúan en agua medias y empiezan a buscar y tratar de capturar las primeras presas vivas. Para esta especie, se han utilizado larvarios rectangulares, en vez de tipo kreisel, de unos doce litros. El diseño y disposición del larvario responde principalmente a dos conceptos bien conocidos: paredes oscuras con suave luz cenital y generación de una moderada corriente de agua, orientada hacia la zona del larvario mejor iluminada. Dado que, las larvas de P. fridmani presentan fototactismo positivo, se concentrarán en la zona mejor iluminada, a donde pre-

cisamente, la corriente de agua trasladará a la mayoría de las presas. El larvario se mantiene a 25ºC, pH:8.0 y S:35 ppt. Se establece un fotoperiodo de 16 horas de iluminación diurna (75% led luz blanca fría y 25% led azul) y 8 horas de iluminación nocturna, generando una “luz de luna” mediante filtros violeta aplicados a la pantalla de día. La dieta inicial ha consistido en una mezcla de Brachionus plicatilis y de B. rotundiformis enriquecidos con Easy Dry Selco®. Adicionalmente, se ha suministrado al larvario dos microalgas vivas: Isochrysis galbana y Nannochloropsis oculata. A partir de cultivos a una concentración de entre 6 y 8.106 células/ml, se aportan diariamente unos 30-40 ml de cada una de ellas. Los primeros días se caracterizan, por el nado vigoroso de las larvas en aguas medias y próximas a la superficie en la zona mejor iluminada. Dado que se da prioridad a la alimentación, no se recircula el agua todavía, pero se sifona el fondo diariamente, mediante una perilla de tubo largo y boquilla muy estrecha. Se controla la concentración de rotífero, manteniéndola en 15-20 rot. /ml. Tras los tres primeros días, las bajas pueden alcanzar de media el 25% del total de larvas nacidas. Las larvas supervivientes muestran un ligero c re c i m i e nto . El número de bajas va decreciendo a medida que la primera semana de vida avanza. Con 7 dte (“días tras eclosión”), Ejemplar con 25 dte. Primer plano donde se aprecia la ingestión de nauplios. ©J. Mª. Cid

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Pseudochromis fridmani

13


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 14

Pseudochromis fridmani Acerca de su reproducción

el crecimiento es muy apreciable, rondando los 6 mm Lt. El volumen de agua del larvario se va incrementando progresivamente hasta cerca de su capacidad total. Con 9 dte, se añade a la dieta inicial, cantidades moderadas de nauplios de menos de 8 horas de Artemia franciscana, los cuales ya constituyen presas de 500-600 µ. Se comprueba que son devorados. De hecho, P. fridmani es, entre las especies marinas reproducidas en cautividad, una de las más tempranas en aceptar nauplios de Artemia. Al principio, solo capturan nauplios las larvas más aventajadas, pero dos días después de comenzar a ofrecérselos, ya los capturan el 80% de las larvas. Durante la noche, bajo la “luz de luna” proporcionada, se mantienen próximas al fondo. En este periodo, los sifonados del fondo y los cambios parciales de agua son diarios. Al alcanzar las dos semanas de vida (14 dte) el crecimiento es notable, miden de media 9mm Lt. A estas alturas de su desarrollo, todas las larvas ya comen nauplios abun-

Alevín en fase ‘naranja’ con 30 dte. ©J. Mª. Cid

dantemente, por ello se suspende el aporte de rotífero y de microalgas. La tasa de mortalidad se reduce durante la segunda semana respecto a la primera, situándose de media en un 18%. A lo largo de la tercera semana de vida y, dependiendo del grado de evolución que muestre el cardumen de larvas, se introducen cambios importantes. Sobre el 16-17 dte se comienza a complementar los nauplios de A. franciscana con metanauplios de A. salina, enriquecidos durante 24 horas con Easy Dry Selco®, suministrados ambos a lo largo de tres tomas diarias. En las mismas fechas, se procede igualmente, a conectar el larvario a un potente “sump” en recirculación. De esta forma, las larvas disponen de un flujo constante de agua filtrada y limpia, suspendiéndose lógicamente, los aportes diarios de agua nueva. Generalmente, Con 17 dte, los ejemplares más avanzados ya han comenzado su metamorfosis y muestran una ligera pigmentación naranja. Al final de la tercera

P. fridmani en fase ‘naranja-violeta’ con 34 dte. ©J. Mª. Cid


Acerca de su reproducción

semana (21 dte), los ejemplares miden alrededor de los 1,2 cm Lt y la pigmentación se intensifica. De media, durante esta semana, la tasa de mortalidad se reduce hasta un 12%. METAMORFOSIS. DE LA LARVA AL ALEVÍN Antes de proseguir describiendo, los eventos más relevantes del desarrollo larvario de P. fridmani, me gustaría hacer un breve paréntesis, para enfatizar un par de ideas. Durante su desarrollo hasta alcanzar la metamorfosis, si descuidamos algún aspecto de su mantenimiento, puede que sometamos a las larvas de P. fridmani, a dos “riesgos potenciales”: los nitritos y las infecciones bacterianas (generalmente por Vibrio spp). Respecto del primer problema, los síntomas suelen ser, nataciones Alevines en distintas fases. ©J. Mª. Cid erráticas hacia la superficie y pérdidas de equilibrio. La causa suele estar, en un nivel tóxico de los nitritos (NO2-), provocado por una deficiente rutina del sifonado del fondo y/o en la escasa proporción de los cambios diarios del agua, que nunca deben ser inferiores al 50%.

He comprobado que las larvas de P. fridmani, y de otras especies también, soportan durante varios días, niveles de nitritos de hasta 0,8 mg/l (¡niveles letales en teoría!), pero que sigan vivas por un tiempo, no evita que su desarrollo se detenga y que su sistema inmunológico se deprima, entre otros efectos. Medir frecuentemente el nivel de nitritos en el larvario (el nivel de amoniaco NH3, suele estar bajo) y, tan pronto como la dieta nos lo permita, conectar el larvario en recirculación con un “sump”, son dos medidas imprescindibles. El segundo problema, las infecciones bacterianas, están íntimamente relacionadas con el primer problema. Estas infecciones, se pueden identificar a tiempo, mediante la detección de larvas que no se alimentan bien, muestran un abdomen plano y una debilidad creciente. Personalmente, he obtenido buenos resultados en fases tempranas de la enfermedad, utilizando enrofloxacino (3mg/L, dos dosis en 48 horas). También en tratamientos preventivos durante las semanas 2º, 3ª y 4ª del desarrollo. Retomando el relato de su desarrollo larvario, decir que, al alcanzar

Ejemplar con la metamorfosis completa a los 37 dte. ©J. Mª. Cid

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Pseudochromis fridmani

15


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 16

Pseudochromis fridmani Acerca de su reproducción

la 4ª semana de vida (28 dte), las larvas han evolucionado mucho y se encuentran culminando su metamorfosis hacia la fase alevín. Con todos sus órganos ya formados, presentan una pigmentación anaranjada en la mitad posterior del flanco y un tamaño medio de 1,4 cm Lt. Para entonces su alimentación ya se compone de metanauplios enriquecidos y alimento seco de 200-400 µ. Durante esta última semana, la tasa de mortalidad se sitúa próxima al 0%. A partir de aquí, en pocos días, los ejemplares van rápidamente pasando por diversas fases de pigmentación (ver fotos). Con 35 dte, el crecimiento vertical es muy notable, sus tallas medias son de unos 1,5 cm Lt. A la dieta ya descrita, se le incorporan ejemplares adultos de copépodos (Apocyclops panamensis y Tigriopus californicus). En esta

P. fridmani. Alevines con 40 dte y la metamorfosis ya completada. ©J. Mª. Cid

época, presentan un comportamiento singular, que consiste en “reposar” en el fondo sobre uno de los flancos por espacio de 20 a 30 segundos. Muchos ejemplares, presentan ya, una intensa pigmentación naranja-violeta. Las primeras metamorfosis completas se registran con 37-38 dte. Las últimas fases de la metamorfosis son rápidas, apenas duran 2 días. Los cambios más significativos, se producen durante la noche. Algunos ejemplares muestran ya una coloración completamente violácea y cambios de conducta también notables, pues exhiben un creciente comportamiento bentónico que trae aparejado, los primeros escarceos y amenazas entre ejemplares “violeta”.


Acerca de su reproducción

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Pseudochromis fridmani

17

P. fridmani. Juveniles de 48 dte. ©J. Mª. Cid

CRECIMIENTO DE JUVENILES Hacia el final de la sexta semana, con 41-42 dte, lo habitual si no ha habido percances en el desarrollo, es que el 80-90% del cardumen haya completado la metamorfosis. Sus tallas alcanzan los 1,8 cm Lt. Llegados a este punto, se procede a desplazar al conjunto de alevines a acuarios más amplios, dotados con buenos sistemas de filtración, lo cual permite potenciar y hacer más variada su dieta.

Los acuarios de desarrollo de alevines de P. fridmani, resultan siempre un gran espectáculo de derroche de energía. Allí, el lema es claro: “explorar y pelear”. En estos acuarios, se produce una cierta paradoja. Me explico. Yo soy dado a pensar: “Mucho espacio, muchos refugios y un número moderado de ejemplares por acuario, son las condiciones ideales”. ¿Resultado? Con frecuencia, en acuarios de esas características “hay cola para pelear”. Cuando, por el contrario, aumento la


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 18

Pseudochromis fridmani Acerca de su reproducción

población por acuario y disminuyo el número de refugios, se incrementa de tal manera el “trafico” de individuos en aguas medias que los ejemplares dominantes no parecen poder fijar sus agresiones en un individuo concreto. Las “eternas” escaramuzas, no salen gratis, y de vez en cuando, se observa, sobre todo en los ejemplares menos poderosos, ciertas erosiones en la mandíbula inferior, las cuales obligan a estar muy atento a posibles brotes de infecciones. En estos acuarios, la alimentación es intensiva. Se les suministran de

tres a cuatro tomas diarias. La variedad y tamaño de los alimentos va aumentando a medida que van creciendo. Por citar algunos: Artemia viva enriquecida, huevas de langosta, papillas diluidas, Mastic® tamizado, alimento en escamas de gama alta triturado, Mysis congelados troceados y así un largo etc. De esta forma, antes de los dos meses, con una media de 54 dte, alcanzan los 2 cm de longitud total. Si cuando alcanzan, tallas próximas a los 3,5 cm, se procede a separarles en pequeños grupos reproductores, aun crecen más rápido, presentando tamaños de entre 4 y 5 cm a los 5 meses de edad. Alcanzan la madurez sexual, relativamente pronto, entre el quinto y sexto mes de vida. Los primeros desoves, como ya quedó descrito, no exceden del medio centenar de huevos. EPILOGO. CONCLUSIONES La tasa de supervivencia global, con los procedimientos descritos, se ha situado generalmente, alrededor del 35%. Por mi experiencia con otras especies, creo que esa tasa de supervivencia, podría elevarse por encima del 50%, complementando la dieta descrita hasta los 10 dte, con nauplios pelágicos de copépodos calanoides. En definitiva, estos han sido los resultados prácticos alcanzados. En la abundante bibliografía sobre la especie, el lector podrá encontrar otras experiencias4,5 con otros métodos y así poder extrapolar lo que en su opinión considere “mejores prácticas”. De hecho, también encontrará ensayos de hibridación de P. fridmani con P. sankeyi 7. Cada “fridmani” criado en cautividad es un “fridmani” que no sale del mar.

Resumen gráfico del desarrollo larvario en P. fridmani. ©J. Mª. Cid


Acerca de su reproducción BIBLIOGRAFIA Y WEBGRAFÍA

Gill, A.C. 2004. “Revision of the Indo-Pacific Dottyback Fish Subfamily Pseudochrominae (Perciformes:Pseudochromidae)”. Aquatic biodiversity Volumen 1 de Smithiana Gill, A.C. and J.K.L. Mee, 1993. Notes on dottyback fishes of the genus Pseudochromis of Oman, with description of a new species (Perciformes: Pseudochromidae). Rev. fr. Aquariol. 20(2):5360. Baensch, H.A., 1994. Pseudochromidae. pp958 - 987. Baensch Marine Atlas, Volume 1. Microcosm. Shelburne. 1215 pp. Brons, R., 1996 Reproduction and captive breeding of two red sea dottybacks: Pseudochromis fridmani and P. flavivertex. Freshwat. Mar. Aquar. 19(6):48-62 Moe, M.A.Jr., 1997. Breeding the Orchid Dottyback; An Aquarist’s Journal. Green Turtle Publications. Plantation. 285 pp. Michael, S.W. 2011 “Dottybacks”. Marine Habitat nº7 Knop, D. 2013. “Indigo Dottyback (Hybrid)”. Coral Magaz.,2013 Eschmeyer’s Catalog of Fishes Para más información o contactar con el autor: www.aquaticnotes.com // info@aquaticnotes.com

José María Cid Ruiz José María Cid Ruiz, lleva varias décadas dedicado a investigar en reproducción de especies de peces e invertebrados marinos y de agua dulce. Fruto de sus trabajos y experiencias, viene publicando artículos en diversas revistas especializadas, nacionales (Argos, B.AEA, Especies, Rio Negro, Acuario Practico, Aquamar, etc.) e internacionales (Tropical Fish Hobbyist, Coral, FAMA en USA, Koralle en Alemania, Aquarama en Francia, etc.) y dando conferencias en asociaciones acuariófilas y centros de exhibición públicos y privados. Ha sido o sigue siendo, miembro activo de diversas organizaciones dedicadas al acuarismo: Vicepresidente de la Asociación Española de Acuaristas, miembro de la American Killifish Association. Relacionado con sus actividades acuariófilas, José María practica el vídeo y la fotografía submarina, disponiendo de una amplia base gráfica de muchas especies en su medio natural. Cursó estudios universitarios como Ingeniero T. Telecomunicaciones y ha desarrollado su actividad profesional en el sector TELCO, como directivo experto en análisis de procesos y sistemas de calidad. Libros publicados por el autor: “Blénidos del Mediterráneo” (Anarpa,1993). “El Agua del Acuario” (MJVT,2016). Para contactar con el autor o conocer más acerca de su trabajo: www.aquaticnotes.com // info@ aquaticnotes.com

Primer plano de un joven ejemplar de 52 días de vída. ©J. Mª. Cid

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Pseudochromis fridmani

19


20

ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021


Parte II

Eduardo Alzola Alzola Eduardo

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Gambas de diseño

21

Ancylocaris brevicarpalis. ©R.Alcacer


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021

Gambas de diseño Parte II

GAMBAS DE ANÉMONA Se trata de un grupo de gambas, llamadas así, porque establecen una relación simbiótica con las anémonas. Hasta hace poco, todas ellas estaban agrupadas en el género Periclimenes, pero recientemente se han repartido en varios géneros entre los cuales destacan Ancylocaris, Ancylomenes y Zenopontonia. Son pequeños camarones, en ocasiones muy coloridos, tremendamente atractivos y muy interesantes de observar en nuestros acuarios.

22

Ancylocaris brevicarpalis.

Ancylocaris brevicarpalis sobre Stychodactila haddoni. ©R.Alcacer

En el número anterior de Argos, hicimos un pequeño repaso a las especies de gambas y camarones más frecuentes en la acuariofilia marina. Espero que con él consiguiéramos despertar un poco el interés por esta familia de crustáceos que tantas alegrías me han dado y me siguen dando. En esta ocasión me gustaría hablar de algunas especies que, si bien son auténticas joyas, en acuariofilia son quizás un poco más desconocidas por diferentes razones. Algunas, siendo autóctonas y estando muy cerca de nosotros siguen siendo poco comunes en nuestros acuarios e incluso grandes desconocidas por la mayoría de nosotros y otras, son poco frecuentes en las tiendas y por ende en nuestro hobby.

Originaria de los océanos Pacífico e Índico, se encuentra a profundidades de entre 1 y 5 metros. Se trata de una especie relativamente pequeña (hasta 5 cm de longitud total). El cuerpo es transparente con manchas blancas. Las pinzas y patas azules y en la cola tiene unas manchas distintivas de color naranja. Las hembras son considerablemente mayores que los machos, aunque con frecuencia se importan ejemplares pequeños con apariencia de machos que posteriormente crecen y resultan ser hembras. En la naturaleza se asocian con varias especies de anémonas, algunos corales e incluso con medusas, pero en el acuario, yo veo que tienen una gran predilección por las anémonas del género Stichodactyla. Actualmente tengo una asociada con una S. haddoni y otra con una S. tapetum. También las he tenido alojadas en Entac-


Parte II

maea quadricolor, aunque cuando ha sido esta la anémona elegida, no han permanecido tan fieles a ella. Rarísimamente abandonan su anémona y la defienden con entusiasmo frente a otras gambas que pudieran intentar usurparles ese espacio. Solamente es posible tener dos gambas en una anémona, si se consigue una auténtica pareja. De lo contrario, una de ellas es inmediatamente desterrada. Mi experiencia en acuario es que, si bien la asociación con anémonas no es estrictamente necesaria, sí que es muy importante para que estas gambitas tengan una vida larga y sana. Cuando no he conseguido que se asocien con una anémona, en relativamente poco tiempo (semanas o pocos meses) su cuerpo pierde transparencia y cuando esto ocurre, en pocos días la gamba muere. Supongo que una parte importante de la dieta de la gamba procede de la propia anémona y también, la sensación de seguridad que probablemente reduce drásticamente el estrés al que está sometida en un acuario

Ancylocaris brevicarpalis. ©R.Alcacer

en el que se encuentra rodeada permanentemente de peces potencialmente peligrosos para ella. Ancylomenes pedersoni. Originaria del mar Caribe, donde la encontramos a una profundidad de entre 1 y 15 metros. Se trata de una pequeña gambita de hasta 3 cm. Presenta un cuerpo transparente y marcas azules tanto en la parte dorsal de todo el cuerpo como en las patas y pinzas. Las antenas son blancas y muy llamativas. Sin duda alguna, la anémona que ellas prefieren en el mar es la Barthlomea annulata aunque la encontramos también asociada con Condylactis gigantea y Sti-

Ancylomenes pedersoni. Fotografiada en el M.Caribe. ©JMªCid

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Gambas de diseño

23


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 24

Gambas de diseño Parte II

chodactyla helianthus. Personalmente tuve la suerte de poder observarlas en varias inmersiones en Bocas del Toro (Panamá), donde me sorprendió mucho encontrar varios ejemplares asociados también con grupos de almejas de la especie Ctenoides scaber. Sin duda alguna es mi favorita entre las gambas de anémona. Recuerdo la primera vez que la vi en un documental en televisión y ya en esos breves segundos me enamoré perdidamente de ellas. No paré de investigar hasta que por fin conseguí identificar la especie e inmediatamente comencé una ardua tarea de búsqueda durante varios años hasta que finalmente conseguí hacerme con algunos ejemplares. Es una especie que, si bien es muy común en el mar Caribe, por algún motivo no se importa con frecuencia. Es cierto que no son fáciles de manejar y que, cuando se reciben metidas en una bolsa, la primera impresión es que estamos locos por pagar dinero por un animal que cuesta trabajo encontrar en una bolsa de plástico. Pero cuando se les instala en el acuario y se consigue ver su comportamiento con su anémona, uno piensa que la auténtica locura hubiera sido perderse ese espectáculo. Esta especie sí que se mantiene en grupos siempre cerca de su anémona. Ejercen de desparasitadores para los peces, a los que intentan atraer y ofrecer sus servicios de limpieza manteniéndose suspendidas en el agua a unos centímetros de la anémona con la que conviven. Con este mismo fin, muchas veces se tambalean hacia los lados posadas en la anémona resultando un movimiento que al menos a mí me parece hipnótico. Zenopontonia rex: Antiguamente se la conocía como Periclimenes imperator. Es una pequeña gamba originaria de los océanos Indico y Pacífico, donde la encontramos haciendo simbiosis con diversas especies de holoturias, estrellas de mar e incluso con nudibranquios, particuPericlimenes imperator(Zenopontonia rex). Fotografiada en el O.Pacifico. ©JMªCid


Parte II

larmente con la bailarina española (Hexabranchus sanguineus). Su aspecto es muy llamativo. Su coloración es variable, pero normalmente son rojas con manchas blancas en el abdomen y cefalotorax y con las pinzas y patas moradas. Mi experiencia con esta especie no es muy positiva. Las he tenido varias veces (me parece una de las gambas más bonitas que se pueden tener en un acuario), pero solo una vez conseguí que se hermanara con una estrella de mar Protoreaster linckii. Sin duda alguna fue la vez que, más tiempo he mantenido esta especie, aunque lamentablemente tras poco más de un año de tenerlas juntas, la estrella murió y la gamba desapareció del acuario solo unos días después. En definitiva, en el acuario, si no hacen simbiosis con algún otro organismo, suelen permanecer quietas en alguna esquina, restringiendo mucho sus movimientos y lamentablemente no tienen una vida muy larga.

driguera a la puerta de la cual el gobio está de guardia. El camarón suele mantener una antena en contacto con el pez y si hay peligro, este avisa y ambos se refugian dentro de la madriguera excavada por el camarón. Es frecuente que tanto el pez como el camarón vivan en pareja en la misma cueva. Para excavar utilizan a veces las pinzas con las que arrastran grandes cantidades de arena como si de un buldócer se tratara, y en otras ocasiones, utilizan los pleópodos con los que hacen volar la arena en la dirección que ellos prefieren. Hay varias especies de camarones pistola que son importados con frecuencia. Entre ellas yo destacaría: A. bellulus. Sin duda alguna el más común de todos los camarones pistola. Procede del Indopacífico occidental. Esta especie se aso-

CAMARONES PISTOLA Los camarones pistola pertenecen al género Alpheus. Su nombre les viene dado del ruido que producen con una de sus pinzas que se oye realmente como un golpe muy fuerte “disparo” en el acuario. De hecho, a veces solo somos conscientes de su presencia por este sonido ya que con frecuencia viven enterrados en su cueva y no siempre resulta fácil verlos. La pinza con la que hacen el ruido está mucho más desarrollada que la otra siendo llamativo el hecho de que pueden alternar el desarrollo de las pinzas. Si pierden la pinza grande por algún accidente, en la siguiente muda, la pinza que no se perdió tendrá mayor tamaño que la pinza que se ha regenerado después de la pérdida. Estos camarones son ciegos o casi, pero viven en simbiosis con peces de la familia de los gobios, dando lugar a una de las relaciones más alucinantes que podemos llegar a disfrutar en nuestros acuarios. El Alpheus se dedica incansablemente a excavar una maAlpheus bellulus con Criptocentrus cinctus.©E.Alzola

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Gambas de diseño

25


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 26

Gambas de diseño Parte II

cia con la mayor parte de los gobios pero particularmente bien con Criptocentrus sp., Stonogobiops sp., y Amblyeleotris sp. Pueden alcanzar un tamaño relativamente grande (hasta 7 cm.) en comparación con otras especies y presentan un dibujo de manchas marrones y negruzcas sobre un fondo blanquecino. A. randalli. Es diminuto comparado con otras especies de camarón pistola, pero con un llamativo traje coloreado de rojo y blanco, sin duda es la especie que Alpheus soror. ©Reefs4Less.com debemos elegir si queremos disfrutar de un Stonogobiops yasha. Al menos en mi acuario, demuestran una gran tendencia a trabajar durante la noche permaneciendo en la cueva durante las horas de luz. A. armatus. De color principalmente rojo. Destaca la gran diferencia de tamaño que suelen tener sus dos pinzas. En cuanto a las asociaciones, puede aceptar en simbiosis muchas especies de gobios. A. soror. En mi opinión es quizás uno de los más bonitos y de mayor tamaño. De color naranja, con una gran mancha violeta en cada pinza y un punto negro en cada lado de la cola. Lamentablemente es una especie que no se deja ver mucho. Yo tengo uno en mi acuario desde hace más de dos años y creo que puedo contar con los dedos de una mano las veces que he podido verle y cuando lo consigo son siempre apariciones fugaces que no me permiten disfrutar de su belleza. Afor-

tunadamente los golpes que produce son claramente audibles y eso me hace saber que aún vive, pero verlo es francamente difícil. GAMBAS DE NUESTRAS COSTAS Palaemon elegans. Es la típica “quisquilla”. Probablemente la especie más común en nuestras playas. Se trata de un camarón desparasitador de peces que se adapta perfectamente a la vida en nuestros acuarios de agua caliente. De hecho, podemos encontrarlo en la mayoría de los charcos intermareales de nuestras costas, donde con frecuencia el agua alcanza temperaturas realmente altas que las quisquillas soportan estoicamente. En verano, lamentablemente es muy frecuen-


Parte II

fectamente posible salvar de su triste final a algunos ejemplares y alojarlos en nuestros acuarios.

Palaemon elegans. ©R.Alcacer

te que los niños se dediquen a capturarlos con pequeños salabres para jugar dejándolos muchas veces morir tras su captura. Es una pena que aún sigamos permitiendo este tipo de comportamientos. En el acuario se trata de una especie omnívora. Come tanto parásitos de los peces como cualquier resto animal y vegetal que encuentre incluyendo comida de peces o animales muertos. Su comportamiento es completamente pacífico y realmente no molesta a ningún otro habitante del acuario. En mi opinión constituyen una excelente adición a cualquier acuario de arrecife en el que no haya grandes peces devoradores de crustáceos. Hay una especie muy próxima a esta, a la que también tenemos acceso muy fácilmente por su amplia utilización como alimento vivo, como cebo de pesca e incluso como ingrediente de cocina (es el ingrediente principal de las famosísimas tortillitas de camarón gaditanas) e incluso de alimentos para peces tan extendidos como el “Masstick”®. Su nombre es Palaemonetes varians y también es per-

Periclimenes sagittifer. Es la gamba de anémona de nuestras costas. Esta especie es muy poco conocida a pesar de que es relativamente abundante. La encontramos en todas las costas de la península y también en Canarias viviendo siempre a la sombra de su “ortiguilla de mar” (Anemonia sulcata). Es una gamba de tamaño pequeño y como la mayoría de las gambas de anémona su cuerpo es transparente con manchas de color morado claro. Suelen vivir solitarias o en pareja en las anémonas, aunque es frecuente que las compartan con cangrejos araña. Durante el día pueden ser difíciles de ver ya que se camuflan muy bien entre los tentáculos de la anémona, pero muchas noches, cuando la anémona se cierra, las gambitas se muestran abiertamente paseando sobre ellas cerradas. Es entonces cuando nos damos cuenta de lo comunes que pueden llegar a ser en algunas zonas donde abundan las Anemonia. En el acuario, solo conozco a una persona que se ha propuesto seriamente mantenerlas junto con Anemonia sulcata, y realmente no supuso ningún problema. La gambita se adaptó a la vida cautiva sin ninguna dificultad al igual que la anémona y mi amigo pudo disfrutar de ellas durante mucho tiempo. Lamentablemente Anemonia sulcata es una cazadora poderosa y hay que pensarlo bien antes de incluirla en nuestro acuario a riesgo de que perdamos algunos de nuestros peces tropicales. Cuando empecé estos artículos, yo decía que uno de mis gritos favoritos al entrar en un bar era “¡Una de Gambas!”. Espero haber conseguido despertar la curiosidad de algunos lectores y que este grito se escuche también en las tiendas de acuariofilia. Desde luego, yo descubrí esta familia hace muchos años y están sin duda entre los habitantes predilectos de mis acuarios.

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Gambas de diseño

27


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021

Gambas de diseño Parte II

Eduardo Alzola Elizondo Aficionado a la acuariofilia marina desde el año 1983 en que montó su primer acuario marino de 350 l. En la actualidad mantiene tres acuarios marinos entre los cuales se cuenta un acuario de arrecife de 600 l con corales SPS, un acuario dedicado a las relaciones simbióticas de 350 l y un cubo de 120 l. dedicado a miniaturas de peces y crustáceos.

28

Administrativo de formación y profesional de la cría de aves exóticas retirado en la actualidad. Durante 20 años fue el propietario del criadero de aves Blue Macaws España en el que se reproducían diversas especies de aves principalmente psitácidas y frugívoras.

Periclimenes sagittifer sobre Anemonia sulcata. ©R.Alcacer


29

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021

Enigmatochromis lucanusi. “Blue Fin” Carlos Díez

30

Enigmatochromis lucanusi. ©Carlos Díez.


Un buen día, hace ya casi veinte años, fuimos muchos los acuaristas que, por medio de alguna red social, quedamos totalmente absortos al ver fotos de una nueva especie de cíclido fluvial del Oeste africano, importada por aquellos entonces a Europa y Norteamérica por primera vez. Especialmente los machos, recordaban en aspecto general al conocido, pero poco frecuente Pelvicachromis roloffi, así que, se les consideró parientes cercanos del mismo. Las hembras, eran incluso más coloridas y vistosas, en lugar del lila con amarillo de las hembras de P. roloffi, estas hembras presentaban un profundo morado con un verde-azul eléctrico impresionante. Por esta última característica, se empezaron a conocer y comercializar como Pelvicachromis sp. “Blue Fin”. Pronto, acuaristas y especialistas empezaron a detectar características, tanto morfológicas como comportamentales, que hacían pensar en que quizás este cíclido merecía ser clasificado Hembra adulta en librea nupcial. ©Carlos Díez en su propio género, distanciándose así de DESCRIPCIÓN los Pelvicachromis. Con machos de unos 6 cm y hembras algo menores, este pequeYa en el año 2009, Anton Lamboj los describió formalmente como ño cíclido tiene un aspecto más redondeado y menos grácil que los Enigmatochromis lucanusi. Enigma por enigmáticos, al tener caPelvicachromis. Los machos y las hembras se diferencian fácilmente racterísticas intermedias entre Pelvicachromis y Parananochromis. entre sí en cuanto a morfología general, no solo por su longitud, y Chromis por ser cíclidos africanos. Lucanusi en honor al importador es que los primeros cuentan con radios blandos alargados en las alecanadiense y acuarista de gran nivel, Oliver Lucanus, que tres años tas dorsal y anal, mientras que ellas cuentan con aletas más cortas. antes, había logrado localizar e importar esta especie desde un peAdemás, el primer radio de las pélvicas es siempre más largo en los queño arroyo cerca de la costa guineana. machos, alcanzando el inicio de la aleta anal.

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Enigmatochromis lucanusi. “Blue Fin”

31


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 32

Enigmatochromis lucanusi. “Blue Fin” En cuanto a su coloración, en general presentan tonos grisáceos, pardos y amarillentos a lo largo del cuerpo. Como es común en los peces, para pasar desapercibidos frente a depredadores tienen la zona dorsal más oscura que la ventral. Cuentan con una mancha oscura enmarcada en azul brillante en el borde del opérculo, en su porción central. La garganta y la mayor parte de las aletas son amarillas. En condiciones de estrés, sumisión o cuidado de huevos y alevines, los machos y las hembras muestran una banda longitudinal oscura a lo largo del cuerpo. En todo momento conservan el inicio de esta banda, desde el labio superior hasta los ojos.

A juego con el azul de su dorsal, encontramos zonas azules en la parte inferior del opérculo y el pecho. Gran parte de los flancos, las ventrales y toda la región ventral de la hembra son color vino, variable a morado intenso durante el cortejo. Los alevines y juveniles presentan un patrón de tres o cuatro hileras de manchas oscuras sobre el cuerpo, hasta que van creciendo y adquiriendo su coloración adulta. LOCALIZACIÓN Y BIOTOPO

El macho presenta un ribete rojiblanco en su aleta dorsal y, al final de esta, en la porción superior de la caudal, son numerosos los ocelos oscuros. Su aleta anal es violeta.

Esta especie parece ser endémica del Río Foto, un arroyo de sabana al norte de Conakry, cerca de la ciudad minera de bauxita de Fria, en la costa de Guinea.

La hembra cuenta con un muy llamativo azul o azul verdoso eléctrico, en los radios duros de su dorsal, que además tiene un ribete rojinegro y uno, dos o incluso tres ocelos oscuros al final de esta aleta. Su a. caudal es pálida, sin patrones destacables.

Según Oliver Lucanus, este pequeño río medía entre 3 y 6 metros de ancho, y durante la estación seca sólo 30 a 90 cm de profundidad, con una visibilidad del agua bastante limitada, quizás este sea el motivo de tan llamativa coloración. Macho adulto de Enigmatochromis lucanusi. ©Carlos Díez


El río, trascurriendo mayormente en la sombra, estaba rodeado por un denso bosque con ramas, raíces y árboles que a menudo caían al agua, formando una gran cantidad de refugios y potenciales lugares de cría para los cíclidos. A lo largo de los márgenes del río había una gran cantidad de Anubias lanceolata, Bolbitis heudelotii y otras plantas típicas de este ambiente. En algún área soleada, se encontraron parches de Vallisneria. Gravilla fina, cantos rodados y rocas ocupaban el fondo del río. Los parámetros del agua medidos durante la estación seca fueron: Dureza general 0, Dureza de carbonatos 0, pH 5.8, y temperatura 24°C.

Pareja en cortejo. ©Carlos Díez

Donde se recolectó, Enigmatochromis lucanusi se presentó sintópicamente con Pelvicachromis humilis. La principal causa de esta sintopía quizás sea la abundancia de recursos alimenticios para ambas especies durante el trascurso del año. ALIMENTACIÓN Los ejemplares en su medio natural, seguramente se alimentarán de diatomeas, algas verdes, algunos trozos de plantas e invertebrados. Ocupan la mayor parte del día buscando alimento por el fondo, cogiendo bocanadas de arena y rebuscando entre las plantas.

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Enigmatochromis lucanusi. “Blue Fin”

33


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 34

Enigmatochromis lucanusi. “Blue Fin” Les proporcionaremos alimentos de la mejor calidad posible, naturales, vivos o congelados; evitando los piensos y demás procesados, especialmente los generalistas, que, aunque fueran aceptados, podrían conllevar futuros problemas de salud y desarrollo, como obstrucciones intestinales, falta de vitalidad, fecundidad , etc. También se desaconseja cualquier alimento demasiado graso, como lo son algunos tipos de anélidos. Los alevines y juveniles deben ingerir una Pareja midiendo sus fuerzas durante el cortejo. ©Carlos Díez mayor proporción de contenido proteico que los adultos, aceptando nauplios de Artemia desde sus primeras horas de natación. Paramecios, integrantes del biofilm, larvas de Chironomus adecuadas a su tamaño, serán también aceptados de buen grado. Los Enigmatochromis lucanusi, al igual que todos los cíclidos de su tipo y gran parte de los peces en general, agradecen las comidas breves y regulares. Los empachos no le hacen bien a nadie, y es que ya se sabe; de grandes cenas están las sepulturas llenas.

MANTENIMIENTO Se trata de una especie razonablemente adaptable, que podemos mantener en parejas, en acuarios de unos 80 litros. Si queremos mantener dos parejas en un mismo acuario, este tendrá que tener un largo de un metro o más, de otra forma una de las parejas ocuparía la mayor parte del acuario y la otra se vería en una situación de estrés constante. Es adecuado mantenerlos en acuarios específicos o con la compañía de algún pez no territorial que ocupe la zona me-


dia y superior del acuario. En acuarios lo suficientemente grandes podemos buscar su combinación con un grupo de alguna especie mediana de tetra africano, del estilo de Phenacogrammus interruptus, Alestopetersius caudalis, Brycinus longipinnis, Arnoldichthys spilopterus o Micralestes stormsi. Peces territoriales o asociados al sustrato, deberían ser evitados. Las condiciones del agua deberían ser similares a las citadas en el apartado de Localización y biotopo, teniendo en cuenta que aquellas eran las propias de la estación seca. Debemos mantener agua blanda con un pH de 5.5-6.5 y una temperatura de entre 20 y 26°C. No es necesaria una potente filtración y el calentador es totalmente prescindible en la mayoría de los casos.

los machos de morfos rojos (P. pulcher “Nigeria Red”, por ejemplo) son más agresivos y más dados a formar harenes, mientras que, los ejemplares de morfos amarillos (P. pulcher “Nigeria Yellow”) crían en parejas estables. En el caso de los Enigmatochromis, normalmente es la hembra, cuando está preparada, la que lleva la iniciativa durante el cortejo, vibrando repetidamente al tiempo que arquea su cuerpo hacia el macho, extendiendo sus aletas ventrales a continuación del vientre, de modo que parece más llena de huevos, más redondeada, ya que, como hemos comentado, las ventrales y el vientre tienen el mismo color, entre vino y morado, impresionantemente intenso durante

Se les procurará un acuario no muy iluminado, con algunas plantas y diferentes refugios; con cuevas, hendiduras bajo raíces, huecos bajo plantas, etcétera. La pareja, en caso de ir todo bien, pronto elegirá su lugar favorito, que será el centro de su territorio. REPRODUCCIÓN En cautividad al menos, se consideran monógamos, ya que forman parejas estables. Como curiosidad, comentar que actualmente mantengo a un macho junto a dos hembras, una de las cuales es su pareja desde hace tiempo y con ella realiza puestas periódicamente. La otra hembra tiene su cueva predilecta y desde allí le corteja, él parece mostrar interés e incluso entra en la cueva y cambia de coloración al visitar a esta hembra (que nunca ha desovado, o eso creo, al menos hasta el día de hoy), para luego volver con su pareja y de nuevo rápidamente adquirir la librea de cuidado de huevos y alevines si corresponde. Este es un comportamiento muy interesante y que quizás nos permita recordar algunos informes sobre especies relacionadas (Pelvicachromis spp.), en las que algunos machos forman harenes, especialmente estando en libertad. Se dice incluso que, Hembra cuidando de los alevines, unos cinco días tras su nacimiento. ©Carlos Díez

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Enigmatochromis lucanusi. “Blue Fin”

35


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 36

Enigmatochromis lucanusi. “Blue Fin” esta fase de cortejo. Después el macho, también hace lo propio, nada hacia el vientre de la hembra, a veces llegando a golpearla, extiende las aletas mostrando su mejor librea y, repetidamente también hace vibrar su cuerpo, aunque en su caso más la zona de la cabeza, bajándola y adoptando mientras tanto una posición característica. A menudo la hembra guía al macho hacia su lugar predilecto para la puesta, y este, si están de acuerdo, parece consentir manteniendo esa postura, con la cabeza sobre la cueva escogida para el desove. Ambos, pero sobre todo la hembra, limpian el espacio de la cueva en el que colocarán los huevos. Un tiempo después, veremos que se introducen juntos en la cueva y que la puesta de los huevos y su fertilización tienen lugar, haciendo pasadas ambos progenitores repetidamente hasta que todos los huevos, de 40 a 60, han sido depositados y fertilizados. La hembra se mantiene junto a los huevos la mayor parte del tiempo, abanicándolos con las aletas y manteniéndolos limpios y a salvo de caracoles y demás amenazas potenciales. En ocasiones, el macho también entrará en la cueva para realizar este tipo de labores, aunque su cometido principal es el de defender el perímetro. Cualquier pez será expulsado de la zona sin miramientos, por lo que, de no estar en acuarios específicos, debemos asegurarnos de que, en caso de desove, todos tengan espacio suficiente como para Alevines de dos semanas de edad. ©Carlos Díez

estar tranquilos. Los huevos eclosionan a los tres días del desove, y los alevines nadarán aproximadamente a partir de una semana después. Pasando por lo tanto, a unos 25°C, aproximadamente diez días desde el desove hasta la natación de los alevines, los cuales, desde su nacimiento, son trasladados de un refugio a otro tantas veces como los progenitores consideren necesario. Una vez que el grupo de alevines nada libremente, se siguen manteniendo juntos, atendiendo a los movimientos e indicaciones de los padres, picoteando aquí y allá en su búsqueda constante de alimento, tomando y escupiendo partículas del fondo del mismo modo que hacen los adultos. Al principio comerán de acuerdo a lo indicado en el apartado de Alimentación, aceptando nauplios de Artemia desde el inicio. Siempre es aconsejable mantener a los alevines con sus progenitores tanto tiempo como sea posible. Les cuidarán durante mes y me-


dio aproximadamente. En este periodo, los padres exhiben libreas diferentes a las propias del cortejo, destacando la pronunciación de la franja longitudinal oscura en el cuerpo de ambos progenitores, especialmente en el macho. En esta característica también difiere Enigmatochromis lucanusi de otras especies relacionadas, como las de los géneros Pelvicachromis, Congochromis y Parananochromis, cuyas hembras son sobre todo las que muestran la línea longitudinal acentuada durante el cuidado y vigilancia de huevos y alevines. Cabe destacar que algunos criadores han tenido problemas con la eclosión de los huevos, especialmente con ejemplares salvajes, parecen no poder eclosionar con pH cercano a los límites superiores recomendados. También se han observado problemas de desarrollo, consistentes en bajos índices de crecimiento y desequilibrios en cuanto a la proporción de sexos en las puestas efectuadas en aguas con parámetros cercanos a los inferiores recomendados, dando las aguas más ácidas alevines pequeños y un mayor número de hembras. Como siempre con este tipo de cíclidos, es muy positivo conocer y replicar las condiciones en las que nacieron y se criaron los nuevos peces que adquirimos. CONCLUSIONES Enigmatochromis lucanusi, una vez conocido como Pelvicachromis sp. “Blue Fin”, es un cíclido que sin previo aviso apareció y causó sensación, cautivó, y dos décadas después sigue cautivando a los acuaristas con gusto por los peces bonitos y de comportamiento interesante. Una especie enigmática en muchos sentidos, recomendada a aquellos que, con cierta dosis de paciencia, quieran disfrutar observando cómo se forman las parejas, el cortejo, los padres guiando a los alevines, y otras visiones magníficas. Proceden de un pequeño río en una zona minera, y nosotros, de no mantener esta especie en cautividad, no sabríamos hasta cuándo podrían seguir brillando.

BIBLIOGRAFÍA Lamboj, Anton (2009): A new dwarf cichlid genus and species (Teleostei, Cichlidae) from Guinea, West Africa. Zootaxa 2173: 41-48.

Carlos Díez Heredó de su padre la afición junto con media docena de acuarios que pronto se multiplicarían y serían acompañados por estanques. A la temprana edad de 10 años ya había conseguido reproducir con éxito algunas especies entre las que destacan carácidos como el tetra neón, diversos killis, poecílidos y ciprínidos. Más adelante se centraría en el mantenimiento y reproducción de especies poco frecuentes. Ha formado y forma parte de diferentes asociaciones dedicadas al acuarismo. Actualmente forma parte de la directiva del Spain Betta Club. Tiene su propio canal de YouTube (“Carlos Díez”), en el que comparte vídeos de algunas de sus líneas de cría y de especies poco comunes.

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Enigmatochromis lucanusi. “Blue Fin”

37


38

ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021


y sus repercusiones en la Acuariofilia Jesús Dorda Dorda

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Los peces catalogados como especies invasoras

39

Perca sol. ©Jesús Dorda


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 40

Los peces catalogados como especies invasoras y sus repercusiones en la Acuariofilia

Como bien sabemos, las especies exóticas invasoras son una de las principales amenazas para la Biodiversidad. Este fenómeno se ve acentuado en los países que hemos llamado del “primer mundo”, debido a la facilidad que tienen en el transporte, el comercio y a las introducciones voluntarias promovidas desde la ignorancia de las instituciones y particulares. España no es una excepción y así tenemos plantas, mamíferos, aves, anfibios, reptiles, peces y un gran número de invertebrados procedentes de diversas partes del mundo adaptados a nuestros ecosistemas, con gran perjuicio de las especies propias y sus ecosistemas. En el medio acuático de la Península Ibérica esa situación podríamos decir que es verdaderamente trágica en lo que al medio acuático se refiere. Como comenté en un número anterior de esta revista sobre Pseudorasbora parva, hay lugares en los que las especies de peces autóctonos prácticamente han desaparecido desplazados por especies exóticas procedentes principalmente del continente americano, aunque también de Asia y otros lugares de Europa. Según la página

web del proyecto INVASAQUA, referido no solo a peces: “Se han identificado un total de 306 especies introducidas en las aguas continentales, de las que 200 están claramente establecidas o naturalizadas en sistemas acuáticos estuarinos o de agua dulce de la Península Ibérica.” Las razones de la introducción de especies acuáticas son muchas, principalmente los intereses en la pesca deportiva muy mal entendida, pero también hay introducciones accidentales y, no vamos a negarlo pero sí a matizarlo, introducciones debidas a los aficionados a los acuarios y a los estanques. Antes de continuar diré que este es un artículo de opinión, no puedo dar fuentes fidedignas y contrastadas de todas mis opiniones, pero creo que los listados, algunos libros y artículos científicos publicados carecen también de esa premisa. Sería excesivamente largo citar aquí toda la bibliografía relacionada con este tema, me centraré en lo que creo más importante y puede consultarse on line en los enlaces que pongo al final del artículo. Para buscar estas razones, su posible solución y para difundir los resultados intentando evitar nuevas introducciones surgió el citado proyecto LIFE INVASAQUA. El proyecto LIFE INVASAQUA, cuyo nombre completo es “Especies exóticas invasoras de agua dulce y sistemas estuarinos: sensibilización y prevención en la Península Ibérica” está cofinanciado por la Unión Europea dentro de la iniciativa LIFE y es coordinado por la universidad de Murcia, implicando tanto a España como a Portugal. Según sus pro-

Silurus glanis. Verdadero “monstruo de río”, el siluro alcanza los dos metros y medio de longitud y 100 kg de peso. Es peligroso para peces e incluso para aves acuáticas. Foto tomada en el Acuario de Zaragoza. ©Jesús Dorda.


y sus repercusiones en la Acuariofilia pios enunciados tiene por objeto contribuir a la reducción de los impactos perjudiciales de las ESPECIES EXÓTICAS INVASORAS (EEI) sobre la biodiversidad mediante el la sensibilización del público, el aumento de la formación en sectores involucrados y la creación de herramientas para un sistema eficiente de alerta temprana y respuesta rápida (Early Warning and Rapid Response, EWRR) para gestionar sus repercusiones en los ecosistemas de agua dulce y estuarios. Debido a mi trabajo en el Museo Nacional de Ciencias Naturales, donde varias investigadoras participan en este proyecto, me he visto implicado de alguna forma en él, especialmente al realizarse en el Museo una exposición titulada “¡Cuidado! ¡Invasoras Acuáticas!”, lo que me comprometía por ser parte de mis obligaciones en esa institución. Debido también a que las participantes conocían mi pasado como acuarista y naturalista implicado en temas de conservación, he sido consultado en diversas ocasiones, aunque no fuese integrante del equipo de investigación. En ese proceso supervisé textos, fotos y formas de exponer los contenidos. También he hecho lo mismo con otros productos divulgativos desarrollados por el proyecto. En las conclusiones y materiales escritos, no sólo en esta ocasión, me he podido percatar de que el peso de la responsabilidad cargada sobre los aficionados a los acuarios y estanques suele

ser mayor de lo que considero justo. Así, aparte de para informar sobre la importancia de las especies exóticas invasoras, me gustaría dejar constancia de ello en este artículo. No tiene mucho sentido que me extienda más en la descripción del proyecto aquí cuando existe una página web [1] que puede consultarse y lo desarrolla perfectamente. Veo más acorde con los objetivos de ARGOS centrarme en las especies en las que nuestra afición sí tienen responsabilidad y en las que pienso que se están cargando más culpas de la que merece. Antes de continuar, también quiero señalar que el proyecto y listado de especies invasoras no tiene relación directa con las temidas listas negras o blancas de las especies comercializables, no las hacen las mismas personas, aunque indudablemente los datos de las especies invasoras servirán para decidir aquellas que deben dejar de comercializarse. Sin embargo, creo que de la misma manera que las especies invasoras no suelen ser de interés acuariófilo, su retirada del mercado no debe preocuparnos. Son una excepción las carpas (incluidos koi) y carpines, de las que hablaré más adelante. En España no se ha detectado aún en libertad la especie Hypostomus plecostomus, aunque en algunos lugares se podría dar. Es una gran responsabilidad, esta vez sí, de los acuaristas, que esa especie nunca llegue a nuestros Esox lucius. Ejemplar capturado por pescadores. Esta imagen es la primera prueba testimonial de que la especie se encuen- ríos, pues en otros lugares del mundo está cautra en el embalse de Santillana, Manzanares El Real, Madrid. sando estragos [2]. ©Jesús Dorda.

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Los peces catalogados como especies invasoras

41


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 42

Los peces catalogados como especies invasoras y sus repercusiones en la Acuariofilia

PECES INCLUIDOS EN EL LISTADO Utilizaré el catálogo de especies invasoras publicado en 2013 por el Ministerio, ahora llamado Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, para empezar con la lista de especies [3]. Como decía más arriba, el origen y la expansión de la gran mayoría de las especies relacionadas con el medio acuático no tienen nada que ver con los peces e invertebrados de acuario ni con el mundo de las mascotas en general, sin embargo, los científicos que han desarrollado los listados no opinan lo mismo. Así, destacaré esos casos concretos sin tratar las especies de reconocido “interés” en la pesca deportiva. Es inaceptable que en ese siglo se sigan importando y se consienta la importación de peces con destino a “repoblaciones” para pesca y consumo humano. Así, se sabe que la especie Pseudorasbora parva en los ríos de Extremadura proceden de una importación de tencas en cuya piscifactoría tenían las pseudorasboras como pez pas-

to. Su aparición en el embalse de Santillana, en Madrid, seguro que procede de una importación similar, aunque no sea de tencas bien pudo ser cualquier otra especie utilizada en la pesca deportiva, entre las muchas otras que hay en el embalse. Y a la vez que entraron las pseudorasboras, muy posiblemente con el mismo origen, llegó la almeja china del cieno, Sinanodonta woodiana. Esta especie en su fase larvaria es parásita de las branquias de peces, especialmente ciprínidos, y con seguridad llegó a España justo a sus peces huésped. Especies introducidas sin implicar a la Acuariofilia Aquellas que no cabe, para nadie, la responsabilidad de los acuaristas y por lo tanto no voy a tratar en detalle son: Alburnus alburnus, Ameiurus melas, Esox lucius, Ictalurus punctatus, Micropterus salmoides, Onchorynchus mykiss, Perca fluviatilis, Pseudorasbora parva, Rutilus rutilus, Salvelinus fontinalis, Sander lucioperca, Scardinius erythrophthalmus, Silurus glanis. Especies con responsabilidad señalada hacia los acuaristas: De una manera o de otra en la lista de especies invasoras aparece la implicación de los acuaristas en algunas especies y creo que merece las matizaciones que están en las razones de este artículo. Lepomis gibbosus. La perca sol se introdujo en los inicios del siglo XX en España. Concretamente hay una referencia [4] que indica que se introdujo (junto a carpa y Scardinus), en el lago de Bañolas entre 1910 y 1916. Posiblemente ocurrió lo mismo en otros lugares. Puede leerse que en el mismo lago, durante todo el siglo XX, se fueron introduciendo algunas otras especies ahora consideradas invasoras. Quizás, alguna población haya sido extendida por algún aficionado a los acuarios pero no desde peces comercializados en tiendas de acuarios, ya que no se considera un pez de acuario puesto a la venta.

Lepomis gibbosus. Macho de perca sol en una charca de cantera en Alpedrete, Madrid Ejemplar en celo limpiando la zona de puesta, defendiéndola de otros machos e intentando atraer hembras. ©Jesús Dorda


y sus repercusiones en la Acuariofilia En cambio, sí es muy posible su uso como cebo vivo en la pesca. Australoheros facetus. El chanchito es un cíclido de origen sudamericano que crece hasta los 30 cm de longitud que se ha extendido por muchos países de temperaturas frescas, incluida España. El origen de su importación es desconocido, apareció en el sur de Portugal y muy posiblemente se deba su presencia a un aficionado a la acuariofilia que lo trajo desde alguno de sus lugares de origen o invasión. Se adaptó porque soporta bien las temperaturas invernales del sur ibérico. Nuevamente no es un pez comercializado en España, al menos que yo sepa. Gambusia holbrooki. Es sorprendente que en el catálogo del Ministerio aparezca esta frase: “Pez de aguas dulces, salobres e hipersalinas introducida por liberaciones ilegales de la acuariofilia, desde los años 70 en las marismas litorales de Andalucía y desde el 2005 en el Delta del Ebro”. Como en otras ocasiones no sé si se trata del fruto de la ignorancia o de las ganas de liberar de responsabilidades a los verdaderos causantes de su introducción, que no fueron otros que las autoridades de Medio Ambiente y sanitarias, como medida para el control del paludismo y otras enfermedades transmitidas por mosquitos o, simplemente, para librarse de los mosquitos y sus picaduras. Lamentablemente se ha demostrado con posterioridad que no fueron efectivas para esa función [5], entre otras cosas porque los mosquitos prefieren criar en pequeñas masas de agua temporales y libres de depredadores, incluyendo piscinas abandonadas durante el invierno, platillos de las macetas en balcones y jardines o zonas encharcadas tras las lluvias. La introducción de gambusias en nuestro país es mucho más antigua y en muchos lugares ha sido promovida por ayuntamientos y comunidades autónomas, aunque ya estuviese considerada como especie invasora. Nunca, que yo sepa, y menos aún a partir de los años 70 del pasado siglo, cuyo comercio acuariófilo conozco bien, ha sido considerada pez de acuario, ni ha estado presente en los comercios.

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Los peces catalogados como especies invasoras

43

Gambusia holbrooki. Dos especies invasoras en la misma imagen: La gambusia y el helecho acuático flotante, Azolla sp., procedente de América tropical. Río Manzanares su zona de entrada a Colmenar Viejo, Madrid. ©Jesús Dorda

Misgurnus anguillicaudatus. Sobre esta especie también podemos leer “Especie expandida generalmente a través de la acuariofilia o como cebo para la pesca fluvial con fuerte potencial invasor por su capacidad de adaptación”. Desconozco por completo que se haya vendido como pez de acuario, aunque es posible, Me resulta difícil creer que los aficionados que lo hayan tenido en acuario o estanque se hayan dedicado a soltarlo. Más bien creo que, como otras especies, que ha llegado junto a importaciones de peces de interés pesquero o en alimentación, al usarlo como pez pasto es decir, usado como alimento vivo de especies de mayor tamaño e interés.


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 44

Los peces catalogados como especies invasoras y sus repercusiones en la Acuariofilia

Cyprinus carpio. Creo que todos sabemos del desastre que ha supuesto para los comercios la inclusión de la carpa en esta lista y la supresión de los koi, su variedad de cría selectiva, de los comercios. Pero culpabilizar a los propietarios de estanque de su presencia en los ríos y embalses es un ejercido de irresponsabilidad. Sabemos los precios que pueden alcanzar los buenos ejemplares de koi y difícilmente un criador responsable se dedicaría a soltarlos, ni siquiera los de baja calidad, especialmente si existe el comercio. Pero es que aunque así fuera, comparado con los ejemplares que hay en la naturaleza procedentes de sueltas de las administraciones para fomentar la pesca deportiva, el peso de los peces de estanque en el monto total es sin duda irrisorio. A esa intención también hay que sumarle su uso, desde hace tiempo prohibido, como cebo vivo para la pesca de otros grandes peces depredadores. Un estudio reciente realizado por investigadores de la Estación Biológica de Doñana [6], indica que los huevos de carpa y de Carassius gibelio son capaces de resistir el paso por el tubo digestivo de las aves acuáticas, siendo estas potenciales dispersoras de esas especies. Se ha comprobado experimentalmente con ánades reales a los que se alimentó con huevos de esas especies. Es descubrimiento supone una razón de su extraordinaria dispersión por lugares muy aislados y alejados y también un problema más para la erradicación, casi imposible, de las carpas.

a la que llamaron Valencia lozanoi. Fue todo un acontecimiento entre los acuaristas que desde hacía tiempo nos habíamos preocupado por el futuro de nuestras Valencia hispanica y Aphanius Iberus. Pero lamentablemente no se trataba de una nueva especie. Pronto, los mismo autores publicaron la corrección llamando a la especie Fundulus lozanoi y no mucho después se constató que era una especie exótica que ahora llamamos en España fúndulo. En el catálogo de referencia aparece esta frase: “Pez de aguas dulces, salobres e hipersalinas introducido por liberaciones ilegales de la acuariofilia desde los años 70 en las marismas litorales de Andalucía y desde el 2005 en el Delta del Ebro”. Evidentemente no hay ninguna prueba de que esto haya sido así. En su momento llegó a plantearse que, dada la posibilidad de los huevos de resistencia de esta familia de peces, hubiese venido en el lastre de los barcos. En mi opinión, tan poco evidenciada como la del catálogo, pudo llegar por primera vez junto a los cangrejos rojos americanos, Procambarus clarkii, que fueron soltados con anterioridad a esas fechas y proceden de los mismos lugares, sureste de

Fundulus heteroclitus. En 1984 Gómez Caruana y colaboradores publicaron la existencia de una nueva especie de ciprinodóntido para la Península Ibérica Cyprinus carpio. Foto tomada en el Acuario de Zaragoza. ©Jesús Dorda.


y sus repercusiones en la Acuariofilia EEUU. Y así lo he comentado con algunos ictiólogos, aunque nunca me hicieron caso. Y lo mismo puedo decir de algunas plantas acuáticas que se han extendido por esas mismas zonas. El fúndulo no ha sido comercializado nunca como pez de acuario. A menos que yo y mis amigos acuaristas, incluso especialistas en ciprinodóntidos, sepamos. Creo que antes que soltar fúndulos, que no tienen especial belleza e interés, los acuaristas a los que con tanta ligereza se acusa habrían soltado especies más atractivas. Del salto de Andalucía al Delta del Ebro ya no puedo opinar lo mismo, lamentablemente. Especies no detectadas en España pero con peligro de llegada En los listados aparecen dos especies que nunca se han detectado en España, pero se incluyen por suponer un serio peligro: Channa spp. y Pterois volitans.

predadoras y algunas de ellas serían capaces de sobrevivir en nuestras aguas, pero la importación debería ser intencionada para que llegase hasta nosotros. Personalmente no tengo ningún problema en que no se comercialice nunca como pez de acuario. Especies incluidas en el listado de INVASAQUA Aparte del anterior listado del Ministerio, ya obsoleto, en la página web del proyecto INVASAQUA, evidentemente actualizado, aparecen unas cuantas especies más: Blicca bjoerkna, Carassius auratus, Carassius gibelio, Cobitis bilineata, Cynoscion regalis, Gobio occitaniae, Leuciscus aspius, Phoxinus septimaniae, Salvelinus umbla, Tinca tinca y Xiphophorus maculatus. Curiosamente no encuentro al guppy, Poecilia reticulata, que sí era citado en la exposición del Museo y, en cambio, aparece el plati. Desconozco las razones de la inclusión del Xiphophorus. Carassius auratus. Indudablemente en muchos lugares el carpín ha sido introducido por particulares, de hecho, yo mismo he podido asistir a la retirada de ejemplares en una laguna de la localidad de Alpedrete (Madrid) que el ayuntamiento quiere proteger a toda costa por ser zona de reproducción de diversas especies de anfibios. Tras su eliminación, no tardaron mucho en aparecer más “peces

El Pterois ya está en el Mediterráneo junto a otras especies, al haber sido capaces de atravesar el Canal de Suez desde el Mar Rojo. Con el cambio climático que padecemos no sería raro que llegase a nuestras costas con el peligro potencial que supone, no solo para el ecosistema sino para las personas. El género Channa incluye muchas especies muy deGobio lozanoi, a la izquierda, especie ibérica aunque traslocada en algunas cuencas hidrográficas, y dos catalogadas como invasoras: Carassius auratus y Tinca tinca. Foto tomada en el Acuario de Zaragoza. ©Jesús Dorda.

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Los peces catalogados como especies invasoras

45


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 46

Los peces catalogados como especies invasoras y sus repercusiones en la Acuariofilia

de colores”, sin duda procedentes de un estanque o acuario, lo que obligó a los forestales de la zona a repetir sus labores de extracción. Lo mismo, posiblemente, se ha dado en muchos ríos y lagunas de nuestro país, pero me temo que, como la carpa, su introducción en nuestras aguas es mucho más antigua que su popularización como pez de acuario y estanque de particulares. Como en la época de introducción de la perca sol, no estaba el pueblo sencillo, entonces España, para esas distracciones. Carassius gibelio. Durante años se pensó que en España existía la especie Carassius carassius, hasta que Doadrio y Elvira descubrieron que todos los ejemplares de las colecciones identificados como tal, eran en realidad C. auratus de color pardo. Sin embargo, ya en este siglo se ha constatado que en la Península Ibérica habita esta segunda

especie de Carassius: la carpa prusiana. Lo curioso de C. gibelio, que también se da en otras especies autóctonas, es su origen evolutivo híbrido por lo que su genoma es triploide, es decir tiene tres juegos de cromosomas. Parece ser que todos los ejemplares europeos son hembras triploides. En el momento de la reproducción las hembras se aparean con machos de otras especies, el semen de esos machos entra en los óvulos y provoca su desarrollo, pero no participa en el genoma de los hijos. Es decir, que las hijas son clones de sus madres. A eso se le denomina parasitismo espermático. Los “no padres” puede ser especies de otros ciprínidos, como Cyprinus carpio, Carassius auratus y Rutilus rutilus. Con la introducción de cualquiera de esas especies en nuestra Península, pudo haber llegado C. gibelio. En sus ríos de origen, en Siberia, hay un 25% de ejemplares macho que son diploides y que sí participan en la fecundación contribuyendo a la diversidad genética de la especie, pero puede ser que en su introducción solo llegasen hembras o que los machos se hayan extinguido por la competencia con los machos de las otras especies. A pesar de su parecido con los C. auratus, sin duda nunca ha sido un pez de acuario o estanque, ni nadie lo ha planteado así, por la ausencia de colores atractivos. Poecilia reticulata. El gupi, según el Atlas y Libro Rojo de los Peces Continentales del 2001 [5], tenía en el río Mijares una población estable, supongo que el curso bajo porque es la zona más cálida. Hace mucho tiempo que me comentaron que se encontraba también en algunos pilones y charcas de las Islas Canarias. Evidentemente en este caso la responsabilidad es plenamente de acuaristas, sin duda.

El proyecto LIFE INVASAQUA persigue implicar sectores como acuarios públicos zoos comercios y ciudadanos. ©Jesús Dorda

Paramisgurnus dabryanus. No se encuentra en los listados anteriores, pero este cobítido se ha descubierto recientemente en el embalse de Vallividriera (Barcelona) y ha sido noticia porque habido que vaciarlo para erradicar esta especie [7]. No estoy seguro pero creo que sí he visto esta especie en los listados comerciales.


y sus repercusiones en la Acuariofilia Pero aparte de peces hay muchas especies más... Hasta aquí el panorama de las especies de peces exóticas invasoras. Lamentablemente hay muchas especies más de otros grupos zoológicos y botánicos en el medio acuático ibérico, con responsabilidad manifiesta de los particulares y sus mascotas. Destacamos los mapaches, las tortugas de Florida, los caracoles manzana, tritones y diversas especies de plantas de acuario, estanques y jardines. Y no solo es perjudicial la introducción de nuevas especies, también es un peligro trasladar ejemplares de un lugar a otro sin los debidos permisos y estudios, porque junto a los animales y plantas pueden transportarse organismos capaces de producir enfermedades e incluso otras especies que lleguen camufladas entre las que se pretende transportar. Pero no olvidemos que muchas otras especies han escapado de parques y zoológicos, como la oca egipcia y los cisnes, o de instalaciones peleteras, como el coipú y los visones americanos, pero no proceden de instalaciones de particulares. Seamos responsables y asumamos la parte que nos toca para evitar futuras introducciones, pero no más. BIBLIOGRAFÍA [1] http://www.lifeinvasaqua.com [2] https://www.portalambiental.com.mx/sabias-que/20200909/pez-diablo-la-especie-exotica-invasora-perfecta [3] https://www.miteco.gob.es/es/biodiversidad/temas/conservacion-de-especies/ especies-exoticas-invasoras/ce-eei-catalogo.aspx [4] https://web.archive.org/web/20070919021636/http://ciencies.udg.es/w3/EGarcia/papers/BICHN03.pdf [5] https://www.miteco.gob.es/es/biodiversidad/temas/inventarios-nacionales/inventario-especies-terrestres/inventario-nacional-de-biodiversidad/ieet_peces_atlas.aspx acionales/atlas_libro_rojo_peces_tcm30-98786.pdf [6] https://www.eldiario.es/andalucia/la-cuadratura-del-circulo/carpas-pueden-dispersarse-traves-acuaticas_132_6073803.html [7] http://www.lifeinvasaqua.com/vaciar-pantano-para-erradicar-especie-invasora/

Jesús Dorda Dorda Soy Biólogo, he trabajado 36 años como Conservador en el Museo Nacional de Ciencias Naturales (CSIC), del que he sido Vicedirector. Trabaje en el diseño y desarrollo las exposiciones permanentes y temporales del Museo y durante ocho años fui responsable de la Colección de Ictiología. Además de una veintena de trabajos científicos sobre zoología y museología, entre ellos mi participación en el Libro Rojo de los Vertebrados de España (1992), hago una intensa actividad divulgativa, con decenas de conferencias y cursos, más de 130 artículos publicados -95 sobre acuariofilia- y colaboraciones en varios libros, además de mis blogs. Actualmente estoy jubilado pero activo. He tocado muchos palos dentro de la acuariofilia, pero sobre todo de agua dulce. En la AEA ocupé diversos cargos directivos y asumí la presidencia en 1980, en un momento en que se encontraba al borde de su desaparición. Conseguí, junto con un pequeño grupo de jóvenes entusiastas, recuperarla y poner en marcha la revista Mundo Acuariófio, motivo por el cual se me concedió la categoría de socio honorífico. También tengo ese honor en la Asociación Herpetológica Española, ahora con prestigio internacional, de la cual soy fundador y socio número uno.

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

Los peces catalogados como especies invasoras

47


48

ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021


nociones básicas sobre la física del calor Juan Artieda

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

El calor y el frío en el acuario

49

©sid-balachandran-unsplash


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 50

El calor y el frío en el acuario nociones básicas sobre la física del calor

¡Vaya titulo pedante! Dirán Uds., sin faltarles razón. ¡Si esto es de párvulos de acuariofilia! Así es. Quizás desde los más remotos tiempos de nuestra afición se controla la temperatura de nuestros tanques. Eso sí, en un solo sentido. Es decir, los calentamos con facilidad. Si la cosa va de enfriar, el tema ya se dificulta. Aunque hay maneras de hacerlo, unas más eficientes y costosas y otras más rupestres, pero más ineficaces. La temperatura y su control es algo que, por habitual, parece que no existe. Nos hemos casi olvidado de ella. Sin embargo, esto del calentamiento global está haciendo, al menos en nuestro país, que, en los veranos, se alcancen temperaturas que hasta los más viejos del lugar no habíamos sufrido nunca. Hoy en las zonas de la meseta española es habitual que se superen los 30oC casi de continuo en los meses de julio y agosto y que en momentos puntuales se superen los 40oC.

1 de la acuariofilia. Es obvio que no todos los seres que mantenemos en nuestros acuarios necesitan las mismas temperaturas, ni sus rangos son de la misma extensión. Así, si dividimos la acuariofilia en sus dos grandes grupos de agua dulce y marina. Los primeros suelen ser más tolerantes que los segundos en cuanto a temperaturas, pues sus medios de origen, en función de los volúmenes de agua donde nuestros especímenes vivan, son más o menos estables. Volúmenes de agua, como los marinos, hacen que la estabilidad de las temperaturas sea total. Sin embargo, las pequeñas charcas de nuestros Killis están expuestas a toda la variabilidad de temperaturas atmosféricas del día y de la noche.

Sin ir más lejos este verano nos ha regalado días en las que la temperatura máxima superaba los 40oC y las mínimas no bajaban de 30oC Nuestros huéspedes, como todos los seres vivos del planeta, han evolucionado y ajustado su biología, a un estrecho rango de temperaturas. Fuera de este rango sus organismos se estresan y su sistema inmune se debilita, permitiendo que todos aquellos organismos patógenos medradores se aprovechen de su debilidad. Es algo a lo que el ser humano, en toda su magnificencia, y a pesar de ser un ser de sangre caliente y de todos los adelantos técnicos, sigue sufriendo. Es habitual que, en olas de calor o de frío extremo, perezcan nuestros congéneres más débiles. Bien por acción directa del frío o el calor, o bien por la exposición a microorganismos que hacen su agosto en estas temporadas. Por lo tanto, ajustar la temperatura a las necesidades de los especímenes mantenidos en nuestros tanques es el mandamiento numero Símil hidráulico Calor-Temperatura


nociones básicas sobre la física del calor En nuestros acuarios solamente podemos mantener pequeñas, en relación a la naturaleza, cantidades de agua. Habitualmente en urnas de cristal, rodeadas por el aire circundante, como islas en un mar. Esto hace que se encuentren expuestas a los cambios de la temperatura ambiente, intercambiando su calor con el mismo con facilidad.

CALOR ESPECIFICO Todos los cuerpos o sustancias contienen calor, salvo que estemos a temperaturas de 0oK (0 grados absolutos o Kelvin) que equivale a -273o C

Pero vamos a contar como funciona todo esto.

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

El calor y el frío en el acuario

¿QUÉ ES EL CALOR? 51

Cuando hablamos de calor, este es un término absoluto se refiere a la energía (no equivocar con la energía calorífica, por ejemplo, de un combustible) que contiene un cuerpo o sustancia. El calor está relacionado con el grado de excitación de las moléculas. El frío no existe, pues este concepto es un termino relativo, ¿frío en relación a quién? Un cuerpo está más frío o más caliente que otro, pero ambos tienen un calor determinado. Cuando nosotros sentimos frío es porque hay una transferencia de calor desde nuestro cuerpo hacia otro medio y cuando sentimos calor es, al contrario. Es decir, estamos a mayor o menor temperatura que el otro medio, pero siempre tenemos una cantidad de calor. ¿Es lo mismo temperatura y calor?, pues no. Vamos a intentar explicarlo con un símil hidráulico, que será fácil de entender. Imaginemos dos recipientes llenos de líquido con distintos volúmenes y situados a diferente altura. Si el recipiente A está a mayor altura que el B, el líquido fluirá desde A a B. Pues bien, con el calor pasa lo mismo. Asimilemos el calor al volumen y la temperatura a la altura. Si el cuerpo A está a mayor temperatura que el B transferirá calor al B hasta que las temperaturas se igualen. Disminuyendo el calor de un cuerpo para incrementarse el del otro.

Cuadro1. Tabla calores específicos

Todas las sustancias de nuestro entorno tienen la capacidad de almacenar calor, pero no todas lo hacen de la misma forma. Si medimos la cantidad de energía calorífica que hay que suministrar


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 52

El calor y el frío en el acuario nociones básicas sobre la física del calor

a una sustancia, cuya masa es un kilo, para que su temperatura suba un grado nos damos cuenta de que esta es una constante para cada sustancia y se llama CALOR ESPECIFICO. El Calor especifico de las sustancias puede diferir mucho de unas a otras. Por ejemplo, el calor especifico del agua es de 4,1813 julios/g/ o K. Sin embargo, el del hierro dulce es de 0,45 julio/g/oK, el del cobre es 0,385 julios/g/oK y el del aluminio 0,897 julios/g/oK. Quiere esto decir que se necesita mucha más energía para elevar la temperatura del agua que la de estos metales.

Llevado a nuestro terreno, la acuariofilia, el hecho de manejar agua supone que se tarda en calentar, o en enfriar. O sea, una ventaja, si de lo que se trata es de estabilizar el sistema, pero por el contrario, una desventaja, pues se requiere, también, un importante gasto energético si queremos elevar o reducir la temperatura. Aspecto a tener en cuenta hoy en día, al precio que está la electricidad. El calor necesario para incrementar la temperatura del agua de nuestro acuario viene definido por la formula siguiente: Q=Ce.m.∆t

Pero si hablásemos de otro líquido como es el etanol (alcohol corriente) el calor especifico es de 2,44 julios/g/oK, más bajo que el del agua. Con mucha menos energía subiríamos su temperatura.

Donde Ce es el calor especifico, m la masa en gramos e ∆t el incremento de temperaturas en grados centígrados o Kelvin

El vidrio, que es un componente fundamental de nuestros tanques, tiene un calor especifico de 0,84, aunque oscila, dependiendo del tipo de cristal entre 0,876 julio/g/oK y 0,503 julio/g/oK. Se necesita muy poca energía para elevar su temperatura.

TRANSMISION DEL CALOR

Para los que no estéis familiarizados con estas unidades os cuento que el Julio es una unidad de trabajo o energía, es decir, lo mismo que los kWh que nos cobran en la factura eléctrica (1 kWh=3.600.000 Julios, 1 Julio= 0,24 calorías). Y g. son gramos de masa de la sustancia y oK es un grado Kelvin.

El calor se puede transmitir de un cuerpo a otro de tres formas distintas:

Esta característica del agua es sumamente importante para la vida en nuestro planeta. El agua hace de amortiguador de las oscilaciones de la temperatura, entre el día y la noche y entre el invierno y el verano. Pero al mismo tiempo también amortigua las oscilaciones de temperatura de nuestros cuerpos que están básicamente constituidos por agua. El agua es de las sustancias que más calor requieren para subir su temperatura, de ahí que sea un buen refrigerante. Es capaz de evacuar una gran cantidad de calor sin un gran incremento de temperatura.

Otro factor importante en la termodinámica de los sistemas es la TRANSMISION DEL CALOR.

• Conductividad • Convección • Radiación Transmisión por Conductividad.- Es un proceso similar Transmisión del calor por conducción


nociones básicas sobre la física del calor al de la electricidad, esta fluye de un objeto a otro cuando están en contacto. Lo mismo el calor, su velocidad de transmisión dependerá de la facilidad, conductividad, que cada material tiene para transmitir el calor.

Donde

La conducción del calor es muy diferente de unos materiales a otros. Todos somos conscientes que los metales conducen bastante bien el calor, cosa que no hacen los materiales cerámicos, el cristal, la madera y algunos plásticos que incluyen en su estructura cantidad de aire como el poliestireno expan- Cuadro 2. Conductividades de distintos materiales dido. Los gases, en general, son malos conductores del calor.

Transmisión de calor por convección. - Para que haya convección, el material a la que transmitimos el calor ha de ser susceptible de tener movimientos internos, es decir fluir, lo cual solo se da en líquidos y gases. La transmisión por convección es el transporte del calor por el mismo fluido que se desplaza y mezcla unas partes de más temperatura con otras más frías transmitiéndoles el calor. Todos hemos visto hervir el agua en una olla y, como, antes de que empiecen a generarse burbujas de vapor, se observa un movimiento en el agua que va aumentando al alcanzar temperatura. La evaporación podemos considerar, en cierta manera, una forma de convección, pues partículas del liquido se difunden en otro medio transmitiendo su calor.

Una regla bastante general, aunque no absoluta, es que los materiales que conducen bien la electricidad conducen también el calor. Sin embargo, el nitruro de boro por ejemplo, es mal conductor de la electricidad y conduce bastante bien el calor, aunque no será un material que nos encontremos con frecuencia en nuestra vida y es bastante excepcional.

Q/∆t es el calor transmitido por unidad de tiempo. K es la conductividad térmica A es el área de contacto x el espesor del material (T1-T2) es la diferencia de temperaturas entre el foco caliente y el frío

La convección tiene una importancia fundamental en nuestra atmosfera, siendo la generadora de nuestro clima y meteoros. El líquido de nuestro acuario, siempre en movimiento, transfiere calor al cristal y este, a su vez, al aire de la habitación que se calentará y elevará siendo sustituido por aire más frío.

Este sería el proceso de transmisión de calor que nos es más familiar.

Es un proceso muy complejo, pero que estamos usando continuamente en nuestra vida cotidiana, Sistema de enfriamiento de nuestros vehículos, sistemas de calefacción y aire acondicionado, etc.

La transmisión por conductividad se rige, de forma simplificada, por la siguiente fórmula:

Una fórmula, muy simplificada, que representa este proceso es la denominada Ley de enfriamiento de Newton:

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

El calor y el frío en el acuario

53


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021

El calor y el frío en el acuario nociones básicas sobre la física del calor

Transmisión por radiación.- Es en la manera que nos llega el calor del sol hasta nuestro planeta.

Donde: h= coeficiente de convección (en conocerlo es donde esta todo el secreto del cálculo). As=área del cuerpo en contacto con el fluido. Ts= temperatura de la superficie del cuerpo. Tinf= temperatura del fluido lejos del cuerpo.

54

Sin embargo la transmisión por convección depende de muchísimos factores: como si es natural o forzada la circulación del fluido, de la forma de las superficies , de la viscosidad del fluido , etc.

Todo cuerpo a una temperatura superior al cero absoluto (-273oC) emite radiación electromagnética como consecuencia del movimiento de sus partículas cargadas eléctricamente. La cantidad de radiación emitida por un cuerpo varía con la 4 potencia de la temperatura, es decir que, si un cuerpo emite una energía w a la temperatura T, si se duplica la temperatura, la radiación emitida se multiplica por 16 Los cuerpos emiten radiación en diferentes longitudes de onda con diferentes intensidades. A la temperatura ambiente suele tratarse de radiación infrarroja. A título de curiosidad os copio un dato obtenido de Wikipedia que dice que, a temperatura ambiente, una persona emite continuamente como radiación, una energía de unos mil vatios. Lo cual sería garantía de muerte segura si no captara energía de todos los objetos circundantes.

El coeficiente h se expresa en:

Donde W= Watios m2 = superficie en metros cuadrados K = diferencia de temperaturas en grados Kelvin (grados centígrados valdría). o

Y estaría en unos valores de:

Algo similar pasa con nuestros acuarios. A la temperatura de funcionamiento, aunque emitan mucha energía en forma de radiación, también la captan de todos los objetos circundantes, por lo que podemos pensar que la perdida de energía por esta forma de transmisión es pequeña y la podemos despreciar.

Convección libre de un gas

5 w/m2.oK

Convección forzada de un gas

50 w/m2.oK

LA CALEFACCIÓN DE NUESTRO ACUARIO.

Convección libre de un líquido

500 w/m2.oK

Convección forzada de un líquido

5000 w/m2.oK

Convección con cambio de fase

50000 w/m2.oK

Aunque el descubrimiento de la corriente eléctrica se remonta a 1801 no fue hasta finales de del siglo XIX que se empezó su uso industrial. Desde entonces disponemos de tecnología suficiente para calefactar un acuario y mantenerlo a la temperatura correcta. El sistema es sencillo y barato, todo consiste en hacer pasar corrien-


casos se halla recubierto de alguna película metálica) o dentro de un tubo metálico de algún metal resistente a la corrosión del agua de mar como puede ser el titanio. La conductividad eléctrica de los tubos metálicos supone ciertos riesgos para los aficionados y para los habitantes del acuario, por lo que el aislamiento interno de las partes con electricidad debe de ser muy eficiente y duradero, lo que les encarece considerablemente.

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

El calor y el frío en el acuario

Sin embargo la poca fragilidad de los metales hace que en algunos casos sean imprescindibles , para evitar que ciertos huéspedes rompan el cristal .

55

nociones básicas sobre la física del calor te eléctrica a través de una resistencia, que la convierte en calor. Pero para no estar permanentemente atentos a conectar y desconectar el calentador es necesario intercalar un termostato en el circuito.

Esquema de un calentador/termostato

En la figura adjunta represento un conjunto independiente de calentador+ termostato, como eran cuando yo empezaba en la afición. En la actualidad es raro verlos de forma independiente y se encuentran integrados dentro de un solo tubo.

Me imagino que los veteranos y los que tenéis una formación técnica, también, conocéis perfectamente el funcionamiento del conjunto, pero permitidme hacer una breve explicación para los que empiezan o no lo tengan tan claro. El calentador no es más que una resistencia eléctrica enrollada sobre un cuerpo de material cerámico refractario y aislante eléctricamente. Suele ir alojado dentro de un tubo de vidrio pírex (que en algunos

La conductividad térmica del metal también es una ventaja, pues asegura una mejor transmisión del calor al medio. Cuando la electricidad atraviesa un material resistente se produce calor. La cantidad de calor producido se rige por la Ley de Joule que relaciona: Q=I2.R.t Donde Q es el calor desprendido durante un tiempo t (segundos), expresado en Julios, al pasar una intensidad I (en amperios) a través de una resistencia R(ohmios). Este calor es teórico pues hay muchas perdidas de eficiencia en la transmisión de este calor al agua. La resistencia eléctrica ha de transmitir el calor al aire del interior del tubo de vidrio, muy mal conductor del calor, y el aire ha de transmitirlo al vidrio y este a su vez al agua. Por lo que respecta al termostato, se trata de una pequeña máquina electro mecánica basada en la diferente capacidad de dilatación de las sustancias. En este caso se usan dos metales cuyos coeficientes de dilatación sean diferentes. Estos metales, en forma de láminas, se unen entre sí, formando una sola lámina de mayor espesor. De esta forma, esta lámina se dilata de diferente manera en cada una de sus caras.


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 56

El calor y el frío en el acuario nociones básicas sobre la física del calor

Ante una subida de temperatura la lámina se curva de manera que la cara que más dilatación tiene se quedaría en la cara convexa y la de menos dilatación en la cara cóncava. La lámina se colocaría, en este caso, de manera que al subir la temperatura y curvarse, se separaran los contactos A y B. Al bajar la temperatura la lámina se curvaría de manera que los contactos se acercasen, llegando a tocarse, momento en el que el circuito eléctrico se cerraría y entraría en funcionamiento el calentador. El termostato permite la regulación de temperatura, mediante un tornillo que apretaría, más o menos, sobre el bucle de la lámina metálica, separándola o acercándola al otro contacto, de manera que se

necesite más o menos curvatura para que los contactos se junten. Puesto que toda la parte electromecánica nos la dan resuelta los fabricantes, la única tarea que le queda al acuariofilo es elegir la potencia eléctrica del calentador y su ubicación en el acuario. Desde mis comienzos en la afición, he oído, casi como un mantra, la regla de que había que disponer de un calentador de tantos watios de potencia como litros tuviera el acuario. Esta es una regla básica pero que es muy imprecisa, pues no es lo mismo una región que otra, o si el acuario está en una habitación calefactada o refrigerada, o cuales son los materiales de las paredes del mismo. Si analizamos un gran cambio de agua o el primer llenado, en el gráfico adjunto se han calculado los consumos energéticos (que no eléctricos que serian superiores, al tener que dividir estos por el rendimiento del sistema) para distintas temperaturas finales. Valdría el mismo gráfico si fijáramos una misma temperatura final e hiciéramos variar las temperaturas iniciales del agua, pues lo que importa es la diferencia de temperaturas. Si dotamos a los acuarios de calentadores que sigan la regla de oro de tener la misma potencia en watios que la capacidad del tanque en litros, como se ve en el grafico a continuación, el tiempo que tardaría en alcanzar la temperatura objetivo sería el mismo para cualquier tamaño, y solo dependería del salto térmico (todo ello en condiciones adecuadas de agitación y en un estado ideal sin perdidas). Quiere decir que parece que la regla de tantos watios como litros tiene sentido. Sin embargo, este tipo de calentamientos se hace en pocas ocasiones, solamente en momentos de renovación total del acuario y en estos casos no tenemos mucha prisa, pues el principal tiempo lo marcará el ciclado del acuario. Principalmente en acuarios marinos.

Grafico 1: consumo energetico


nociones básicas sobre la física del calor

Nuestro tanque transmitirá el calor de su agua a través del cristal por conducción al aire circundante y a la mesa que soporte el tanque. La transmisión al aire se hará por convección y a la mesa por conducción. Nos vamos a olvidar de la radiación por estimar que las perdidas por esta vía serán pequeñas en comparación con las otras dos. Pero en el caso de tanques abiertos hay otra vía de perdida de calor: La evaporación del agua de la que todavía no hemos hablado, pero de la que será necesario hablar si queremos evaluar las pérdidas de calor. Es habitual que los tanques descansen sobre una plancha de polietileno expandido, corcho, esponja o una madera y no directamente sobre la estructura que soporte el acuario. Esta placa, aparte de proteger el cristal del fondo y mantener un buen apoyo del mismo, supone un magnifico aislante, con unos coeficientes de conducción del calor bajísimo, por lo que, en una primera aproximación, y en este caso, podemos prescindir de las pérdidas por el cristal de fondo.

Grafico 2 : tiempo vs. diferencia Tinicial-Tfinal.

El verdadero trabajo cotidiano de nuestro calentador será el de mantener estable la temperatura del tanque, aunque la temperatura de la habitación que lo acoge sea baja.

Las perdidas serian, en una habitación en condiciones normales, del orden de un 13% de la potencia del calentador seleccionado, de acuerdo con la norma de un watio por litro. ¡Más que suficiente para compensarlas!. Los volúmenes escogidos corresponden a dimensiones internas estándar vendidas por un conocido fabricante de acuarios.

Para ello será necesaria una potencia que sea capaz de compensar las perdidas de temperatura del tanque.

A medida que la temperatura en el exterior del acuario baja, la potencia calorífica disipada (perdida) aumenta considerablemente.

Estas perdidas se producen por transmisión de calor desde el tanque hacia las estructuras y medios circundantes, mediante las vías de las que hablamos, al explicar las formas de transmisión del calor.

La forma del acuario influye en las perdidas. Toda forma que se acerque a la esfera (tiene la menor superficie por unidad de volumen), minimiza la superficie expuesta a perdidas

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

El calor y el frío en el acuario

57


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021

El calor y el frío en el acuario nociones básicas sobre la física del calor

58

Cuadro 3: comparativa efecto aislamiento

Grafico 3: abaco potencia perdida

La potencia del calentador nunca debería estar por debajo de las perdidas, pues no podría compensarlas. Se ha considerado una evaporación de 2 mm/m2.día, es decir 2litros/ m2.día , hasta 9 oC ,3 litros/ m2.día desde 10 a 19 oC y 4 litros/ m2.día desde 20 a 25 oC. Para que se disipe al medio esta potencia calorífica es necesario que las paredes del acuario sean capaces de transmitirla. En el caso de usar cristal este conduce lo suficiente como para permitir la disipación de todo el calor que anteriormente se ha calculado. Sin embargo si el acuario estuviera recubierto de polietileno expandido, las paredes no serian capaces de transmitir el calor que se podría disipar por convección y las perdidas sería muy inferiores.

Por lo tanto, un medio muy eficaz de no perder calor, o de no ganarlo en el verano, seria bajar la conductividad térmica de las paredes forrándolas, si no todas, sí las laterales y trasera, con panel de poliuretano expandido. No tiene que ser una instalación bonita sino de pasar lo mejor posible el verano, aunque su uso en continuo supondrá también un ahorro energético. LA REFRIGERACION DE NUESTROS ACUARIOS Cada vez es más frecuente que suframos temperaturas más extremas, principalmente altas. Se le achaca el problema al efecto invernadero consecuencia del exceso de emisiones de CO2 . No lo sé, ni entro en la discusión, la realidad es que en zonas continentales como es Madrid, las temperaturas entre el 15 de julio y el 15 de agosto tienden a superar muy ampliamente los 25oC ideales de nuestro acuario. Como ya hemos comentado, aunque algunos peces de agua dulce


nociones básicas sobre la física del calor son tolerantes con la temperatura, siempre que su variación sea lenta, los marinos, sobre todo los invertebrados, no lo son en absoluto. Con lo cual los acuariófilos nos hemos empezado a preocupar y a ocupar de enfriar el agua de nuestros acuarios. Los mecanismos de enfriamiento son los mismos que los de calentamiento, únicamente que en sentido contrario. Cuando la temperatura del acuario es superior a la del medio que le acoge, cede calor a este, pero, cuando el medio está a una temperatura mayor que el acuario, es el medio el que cede calor al acuario, hasta que este alcance su misma temperatura.

59

Las fórmulas son las mismas, solo cambia la dirección de flujo del calor. En este caso la fuente de calor es la atmosfera circundante, que es muy grande en comparación con nuestro acuario, por lo que podemos considerarla infinita. Esto quiere decir que, si solo actuamos de una forma pasiva, es decir, aislando el acuario, tarde o temprano este acabará a la misma temperatura del entorno. Por lo tanto, la única manera de que el acuario mantenga su temperatura es actuado de manera activa y en estos momentos solo existen, en mi conocimiento, cuatro formas. Aumentando la velocidad de evaporación del agua. Enfriando con una bomba de calor. Enfriando con células Peltier. Instalando aire acondicionado en la habitación Si utilizamos las fórmulas para determinar el calor que ha de absorber un líquido para pasar de una temperatura a otra, podemos determinar qué calor ha aportado el ambiente a un acuario.

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

El calor y el frío en el acuario

Cuadro 4: potencia de enfriamiento

Si la temperatura media exterior diaria es de 32 oC , nuestro acuario terminará poniéndose a esta temperatura. En la tabla adjunta se calcula la máxima potencia que el ambiente traspasaría al agua del acuario, si las paredes tuvieran un coeficiente de transmisión infinito, pero tenemos la suerte de que no tienen una transmisividad infinita. Calculamos la que el aire es capaz de transmitir a nuestro acuario a través de las paredes de cristal, columna azul, que es lo más normal. Esta sería la potencia que realmente tendríamos que evacuar, pues la potencia evacuada por evaporación natural es muy pequeña. Como se ve, las potencias son elevadas y hay que tener muy en cuenta estos consumos en la economía de nuestra afición. Si aislamos el acuario, al menos 4 de sus paredes con materiales de alta capacidad de aislamiento, se pueden reducir las potencias nece-


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 60

El calor y el frío en el acuario nociones básicas sobre la física del calor

sarias para reducir la potencia de enfriamiento. Nuestro enfriador, sea del sistema que sea, debería ser capaz de evacuar eficazmente esta potencia calorífica, para lo cual ha de tenerse en cuenta el rendimiento del aparato enfriador que consumirá algo más. Las células Peltier tienen unos rendimientos ínfimos y son más que nada una anécdota, reduciéndose su uso a casos muy especiales y principalmente a instalaciones muy pequeñas. Sin embargo, constituyen una esperanza de futuro.

cosa que hace en el segundo radiador, el azul. En este caso, calentado por el agua del acuario, a la que roba su calor, haciendo que su temperatura de salida (la del agua) sea inferior a la de entrada y en cambio el gas tendrá una temperatura superior a la salida. Y vuelta a empezar. Cuando el sistema es reversible se denomina bomba de calor y puede ser usado tanto para calentar como para enfriar.

La bomba de calor, tanto para generar frío como calor, es muy eficiente, pues la bomba de calor no crea calor ni frío. Solo lo mueve de un sitio a otro. Por eso se le asemeja a una bomba, pues estas mueven los líquidos de un sitio a otro sin generarlos. Mientras que las células Peltier, o los calentadores eléctricos, han de transformar la energía eléctrica en calor. En la figura pueden ver el esquema de funcionamiento de una bomba de calor, usada como enfriador de un acuario. El sistema consta básicamente de un compresor de gas y de dos radiadores o intercambiadores de calor. En uno, el de la izquierda, dibujado en rojo, entra el gas una vez comprimido. Los gases al comprimirse fuertemente se calientan. Para eliminar este calor se pasa por este radiador que los enfría mediante una circulación del aire ambiente, con ello se baja la temperatura y el gas se licua (hemos escogido el tipo de gas para que esto suceda con cierta facilidad). A la salida del radiador, el gas licuado tendrá una temperatura próxima a la del medio ambiente. Lo hacemos pasar por una tobera donde este pierde presión y el líquido hierve y se expande el gas. Durante este proceso de expansión el gas se enfría notablemente, pues necesita calor y trata de captarlo para acabar de evaporarse,

Ilustración 5.- Esquema de un enfriador basado en bomba de calor

Otra alternativa de enfriamiento de nuestro acuario es tenerlo en una habitación que cuente con un sistema de aire acondicionado, con lo cual, no solo los peces disfrutarán del frío artificial. No entro en el análisis de este método pues nos es familiar y el mer-


nociones básicas sobre la física del calor cado está lleno de maquinas que nos pueden satisfacer nuestras necesidades y muchos y buenos técnicos que nos pueden recomendar el aparato ideal para nuestra vivienda. Sin embargo, el actual coste de la electricidad requerirá una pensadita previa para que nuestra economía no se encuentre con dificultades. La otra posibilidad de enfriar algo nuestro acuario es recurrir a la gran necesidad de calor que tiene el mismo agua al evaporarse. Como es de público conocimiento, el agua hierve a 100oC (varia un poco en función de la presión atmosférica). Sin embargo, para pasar a estado gaseoso el agua o cualquier líquido, requiere se le suministre un calor denominado de latencia.

superficie de nuestro acuario llegue a la saturación y no sea capaz de admitir más agua. Para evitar esto, lo que hay que hacer es renovar continuamente el aire en contacto con la superficie de nuestro acuario. Para ello, si no hay corriente natural, lo que hay que hacer es destapar los acuarios y forzar la corriente de aire sobre la superficie, de manera que se asegure una cierta velocidad renovación del aire. No exageremos tampoco, pues si las renovaciones son suficientes, por más corriente de aire que pongamos no va a bajar más la temperatura.

A temperaturas normales, el agua intercambia moléculas con el aire en su superficie, Así este se disuelve en el agua y el agua en el aire. Sabemos que las aguas frías son capaces de contener más aire en disolución que las calientes. Pero en cambio el aire caliente es capaz de contener mucha más agua que el aire frío. Todos hemos oído hablar acerca de la humedad del aire, que se suele expresar de manera relativa, en % de su máxima capacidad de saturación. Esta capacidad de saturación es muy dependiente de la temperatura. A más temperatura más capacidad de saturación. En el caso de nuestros acuarios, en Madrid, cuando hace calor, tenemos la suerte de que la capacidad de evaporación es muy grande, pues cuanto menor sea la humedad ambiente más evaporación tendremos. Pero no en todos los lugares es así y en lugares próximos a la costa, o en el trópico, la humedad ambiente es elevada y por lo tanto la capacidad de evaporación del agua disminuye, o incluso llega a ser nula. No obstante, en la quietud de nuestra habitación, donde no hay grandes corrientes de aire y mucho más si el acuario se encuentra tapado con un cristal, puede suceder que el aire en contacto con la

Gráfico4. Disminución temperatura vs. evaporación.

Una manera fácil de medir la evaporación en nuestro acuario es en mm de descenso diario de la superficie de nuestro acuario (en caso de tener filtros seco-húmedo o sump no se puede medir directamente este factor).

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

El calor y el frío en el acuario

61


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 62

El calor y el frío en el acuario nociones básicas sobre la física del calor

En mi caso, en el mes de julio de 2021, en Madrid, he medido, una evaporación de 7mm/día en mi acuario principal de agua dulce, sin ventilación forzada y destapado. Sabiendo la superficie de nuestro acuario sabremos la cantidad de agua evaporada en un día en nuestro tanque. Con el calor latente y la masa de agua evaporada podemos conocer el decremento teórico de temperaturas que se conseguiría si el acuario estuviera perfectamente aislado y, como veis en el ábaco adjunto, son de cierta consideración, aunque por desgracia son compensadas por el calor transmitido por convección. Si la superficie del acuario o del sump se someten a una ventilación forzada que barra esta, podremos subir de los 7mm/día y por consiguiente robarle calor al sistema y por lo tanto conseguir que la temperatura de equilibrio sea unos grados más bajos de la que obtendríamos de no poner ventilación forzada. Si además aislamos térmicamente las paredes del acuario, que no están a la vista del público, disminuiremos la transmisión del calor por estas y lograremos algún grado más. Sin embargo, la ventilación forzada presenta algunos problemas. El primero es que tenemos que situar unos ventiladores de manera estratégica para que soplen sobre la superficie libre del acuario. Lo cual no es fácil, pues los equipos convencionales no están tan preparados, como debieran, para ambientes húmedos, y menos para ambientes marinos corrosivos. Los existentes en el mercado de la acuariofilia, si bien más preparados para su colocación en el borde del acuario, están poco preparados para acuarios marinos y al cabo de un par de temporadas están perdidos. Existen diversos modelos. A mi los que más me gustan son los que tienen la soplante, normalmente de tipo centrifugo, en un lugar pro-

tegido de las salpicaduras y del vapor de agua y conducen el flujo de aire hasta el borde del acuario mediante conductos de plástico, que obviamente produjeran perdidas de carga, pero que aseguran una mayor durabilidad del equipo, ya de por si caro. Estos, además dirigen su flujo de aire paralelo a la superficie del acuario asegurando una permanente renovación del aire en n con el agua Estos equipos tratan de ser silenciosos, pero al cabo de un tiempo no lo consiguen, pues cualquier deposito irregular de polvo, o alguna corrosión puntual, hace que el conjunto que gira se desequilibre y produzca vibraciones. Por ello requieren un mantenimiento cuidadoso si queremos que nos presten servicio muchos años Aunque, para mi gusto, el principal problema de este sistema es la necesidad de instalar un sistema automático de reposición del agua evaporada. Este nos asegurará una reposición periódica frecuente y evitará que la salinidad de nuestro tanque oscile más de lo que conviene a nuestro tanque. Estos equipos de reposición están bastante desarrollados y son bastante eficaces. Si bien yo recomendaría que el detector de nivel se duplique, de manera que solo rellenará en el caso de que los dos niveles detecten la necesidad. Ello evita que el fallo del detector de nivel, cosa que pasa con más frecuencia de lo que parece, nos rellene más de la cuenta o al contrario. En la red se pueden encontrar otros consejos para afrontar el verano, como reducir la salinidad, pero en mi opinión no son eficaces y pueden someter a nuestro tanque a condiciones no idóneas. CONCLUSIONES.Hemos pasado revista a la física que gobierna el calentamiento y enfriamiento de nuestro tanque y los cálculos confirman las reglas empíricas de dimensionamiento del calentador calentador eléctri-


nociones básicas sobre la física del calor co que es un buen sistema de mantener la temperatura en nuestro tanque en invierno, aunque la potencia de los aparatos ha de supeditarse a las condiciones de nuestro acuario. Si nuestro acuario no es visible por todas sus caras, una buena alternativa para evitar las perdidas de calor es aislar térmicamente las paredes que no son usadas para la observación. En cuanto al enfriamiento de nuestro acuario, las dos alternativas viables son recurrir a un enfriador basado en una bomba de calor, solución cara pero muy eficaz y segura, o recurrir a la evaporación del agua en su superficie. Para ello es conveniente que la forma del tanque asegure una buena relación superficie/volumen, aislar las paredes no usadas para la observación y tener un sistema fiable de reposición del agua evaporada. La tercera solución, tanto para el frío como el calor, seria ubicar el tanque en una habitación que estuviera convenientemente climatizada. Opción que cada vez más aficionados eligen, pues además de sus acuarios también ellos pueden disfrutar de una buena temperatura. Un acuario es un consumidor importante de corriente eléctrica. Aunque sus elementos, uno a uno, no son grandes consumidores todos juntos lo son y principalmente su funcionamiento continuo hace que tengan su importancia en nuestra factura eléctrica. Creo que los grandes aficionados deberían estudiar energéticamente sus instalaciones.

Juan I. Artieda G-Granda Ingeniero Superior de Minas y Graduado PDA Dirección de Empresas por el IESE. Ha sido Vicepresidente de la Asociación Española para la Calidad y Director del Proyecto hidrometalurgico “Quercus”, Director Financiero y de Participadas de una empresa publica del sector energetico. Actualmente es Vicedecano del Consejo Superior de Colegios de Ingenieros de Minas y Presidente de la Asociación Nacional de Ingenieros de Minas . Aficionado a la Acuariofilia desde el año 1964, fecha en la que se asoció, con 10 años, por primera vez a la Asociación Española de Acuariófilos con el número de asociado 220. Autor de algunos artículos sobre Acuariofilia de agua dulce y sobre todo acuariófilo de base de gran experiencia en esta disciplina. Desde hace dos años comparte la tenencia de acuarios de agua dulce con la acuariofilia marina Vocal de la Junta directiva de la AEA

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

El calor y el frío en el acuario

63


64

ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021


Aquanotes Xabier García

En este número, os queremos acercar una aplicación que hemos probado durante cierto tiempo y que creemos que es digna de mencionar, no es otra que Aquanotes, una aplicación de gestión de acuarios disponibles en las plataformas de iOS y Android. Esta utilidad, permite la gestión de todo tipo de acuarios: marinos, agua dulce, tropicales y de agua fría. En la misma, podremos guardar en nuestro perfil, diferentes acuarios cada uno con su descripción, volumen y diferentes datos de interés para el usuario. Es una aplicación intuitiva y de fácil manejo, la cual, además, nos trasmite información relevante sobre aspectos de paramétrica del agua preestablecidos en la propia App y opciones como la de añadir nosotros mismos más parámetros y notas. Adicionalmente, dispone de un atlas de peces y plantas con sus requerimientos, los cuales dan al usuario una información valiosa a la hora de estudiar su pequeño biotopo. Una de las cosas mas interesantes es que permite hacer casi cada función que podamos imaginarnos, como introducir los valores de los parámetros y crear automáticamente gráficos con estos, introducir las medidas de nuestro

acuario en la “calculadora de acuarios” para saber cuantos litros brutos tenemos, añadir recordatorios, etc. Dispone igualmente, de un buzón de sugerencias en el cual podemos escribir posibles mejoras que hayamos apreciado que se puedan implementar. Sin duda se trata de una “App” con mucho potencial que merecía ser nombrada.

ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021

La Acuariofilia en la Red

65


ARGoS - nº 18 –3er Trimestre 2021 66

noticias

Chelmon rostratus criada con éxito por Rising Tide Conservation (Universidad de Florida) Xabier García En este nuevo número, os traemos una noticia de lo mas reconfortante y es que, por todos es bien sabido, el pequeño expolio que llevamos a cabo en el mar con nuestros pequeños ecosistemas marinos encerrados en un cubo de cristal. A lo largo de los años, la cría en cautividad en la acuariofilia marina ha ido haciendo eco y tomando mas protagonismo en el día a día de los aficionados noveles y de cierto nivel, los cuales, pretenden aportar a la afición, a modo de recompensa, ejemplares criados en cautividad. Es por ello que, hoy os transmitimos esta noticia de interés general. Chelmon rostratus, una de las especies mas delicadas de nuestros sistemas de arrecife, ha sido criada con éxito en las instalaciones de los ya conocidos mundialmente en el sector, Rising Tide ConserChelmon rostratus. ©Rising Tide Conservation vation (Universidad de Florida).

A lo largo de los años, Chelmon rostratus ha sido y es, una de las especies, con mayor dificultad de criar en cautividad. Este proyecto, comenzó en 2017 en las instalaciones de investigación de acuicultura de la Universidad de Florida, cuando por primera vez consiguieron la primera pareja reproductora de esta especie. En los años sucesivos, consiguieron más parejas potencialmente reproductoras. Sin embargo, no ha sido hasta este año 2021, 4 años después de iniciar el proyecto, cuando en un desove realizado el 27 de febrero, consiguieron llevar a cabo la cría exitosa de la especie. El proceso ha sido lento, pero da un atisbo de luz y esperanza por un hobby, en el futuro responsable, nutrido por estas especies criadas en cautividad.


ARGoS - nº 18 – 3er Trimestre 2021 67

Contraportada

El gran tiburón blanco (Carcharodon carcharias) ha habitado en las aguas cálidas y templadas de todos los océanos desde el Mioceno. Sin embargo, y a pesar de su condición de superdepredador, figura desde 1996 en la Lista Roja de la UICN de especies amenazadas. Ni su portentosa anatomía, con tallas de hasta 6,5 metros y 2600 kg, ni el hecho de no tener predadores naturales, ha evitado el deterioro de esta especie. La pesca y el cambio climático se encuentran entre las principales causas de su actual vulnerabilidad. A diferencia de otros grandes tiburones, no es una especie que se adapte a la vida en grandes acuarios públicos. El Acuario de la bahía de Monterey, mediante el diseño de un recinto especial, logro mantenerlos por espacio de varios meses. Fotografía tomada en la Isla de Guadalupe (México).


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.