Músico, compositor, productor, bailarín y poeta. Robi Draco Rosa, hijo de inmigrantes puertorriqueños, nace en Nueva York en 1969. En los años 80 forma parte del grupo Menudo que abandona en 1987 para lanzarse como solista con la publicación de Frío, un álbum que recibe buenas críticas por la fuerza de sus letras pero que no alcanza el éxito comercial por su estética oscura y poco convencional para la época. En 1995 Draco Rosa compone y produce para Ricky Martin A medio vivir y al año siguiente lanza su segundo disco en solitario: Vagabundo, álbum de rock experimental y psicodélico cargado de una energía oscura, con letras que recuerdan a los poetas malditos Baudelaire y Rimbaud. Gracias a este trabajo y a canciones como vagabundo, Penélope y blanca mujer; Draco Rosa empieza a ganarse un espacio en la escena del rock en español. En 1998 Robi vuelve a trabajar con Ricky Martin como productor y compositor del álbum Vuelve, uno de los más importantes discos pop en español. Luego compone Living la vida loca y La copa de la vida. En el año 2004 lanza el disco en inglés Mad love, donde la canción Más se convierte en un éxito en Latinoamérica. Su último trabajo discográfico titulado Vida sale en 2013 y es una recopilación de canciones a dueto con artistas como Juan Luis Guerra, Rubén Blades, Calle 13 y Andrés Calamaro con quien canta la canción vagabundo. Para muchos, Draco Rosa no es un artista tan representativo del rock en español pues la forma en que este artista concibe la música tiene que ver mucho más con un viaje personal no siempre cargado de emociones gratas, pero sin duda, la genialidad de este puertorriqueño a nivel musical está en el amplio espectro estético en que es capaz de moverse: componiendo canciones que son éxito comercial a nivel mundial como Living la vida loca y entregando discos que se pueden disfrutar en completa soledad. Así, quienes pudieron estar presentes en el estéreo picnic 2015, se dieron el lujo de presenciar dos muestras de la versatilidad del rock en español a través de dos genios: un Calamaro enorme cantando clásicos como mil horas, sin documentos, flaca; y un Draco Rosa más cercano, con una puesta en escena parecida a una sesión unplugged, un cierre de primera para un festival que se ha convertido en el más importante de Colombia y uno de los mejores en Latinoamérica. Por: Laura Rodriguez @aem_tendencias
ROBI DRACO ROSA
EL POETA OSCURO DEL ROCK EN ESPAÑOL