Crónicas de un SALTO desconocido Aporte para un Turismo, Cultural, Histórico y Patrimonial
Museo de Caballería Cuartel del Arapey Por Alberto J. Eguiluz
Fachada del Cuartel del Arapey
En el ejemplar de la Revista Quincenal “El Ejército Uruguayo”, correspondiente al 15 de diciembre de 1892, el Periodista Manuel Bernárdez presenta en la Sección “Notas de mi Cartera”; con el título “El 1º y 4º de Caballería” la descripción del Cuartel del Arapey, y las actividades del Regimiento, que a continuación se transcribe: “Está emplazado el cuartel sobre una superficie cuadrada de 20.000 varas (Vara: de Castilla – “Medida de longitud, dividida en tres pies o cuatro palmos y equivalente a 835 milímetros y 9 décimas”), en una cuchilla de espalda plana y extensa.
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
-1-
Crónicas de un SALTO desconocido El Ferrocarril del Salto a Santa Rosa pasa con su bandera de humo a cincuenta pasos. Del otro lado de la vía, el almacén de Ramón Llovet surte a la tropa; allí pasan las horas francas los soldados, comprando espaciosamente sus víveres – la yerba, el azúcar, el tabaco, alguna galleta y a veces masitas de chocolate para probar su galantería a las chinas, sus constantes compañeras, cuyo rancherío se enfila más abajo, donde empieza la cuchilla a declinar. Aquí y allí las viviendas de oficiales aumentan el caserío, enseñando al frente jardinillos floridos”. El Cuartel es de material, con un bonito frente, en cuyo lienzo están la Mayoría, habitaciones del Jefe, ayudantía, cuerpo de guardia, y la enfermería para pacientes de enfermedades leves. Es una sala que lleva el nombre de Sala de Villar en recuerdo al fundador del Regimiento. El Hospital y lazareto está más abajo, a diez cuadras del Cuartel, sobre la costa del río”. “Formando Norte y Sur ángulos con el frente se extienden dos grandes construcciones: en una están los depósitos del cuerpo: un admirable orden preside el almacenaje de monturas y correajes; todo allí su número, todo está pronto y a mano como para caer completo sobre el lomo del flete aunque sea sin luz y con apuro. Todo está casi nuevo, porque la tropa tiene además recado para el trabajo ordinario, y para las primeras ensilladas de la estación en que se hacen ejercicios a caballo, mientras los redomones están ariscos y los caballos mansos vienen con la saudade del potrero, sin entusiasmo alguno por el basto” “LA otra construcción está ocupada por las cuadras de la tropa: el mismo orden interior que en todos nuestros cuarteles, con ligeras -2-
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
Crónicas de un SALTO desconocido variantes: la misma tarima, la misma característicos del buen servicio mecánico”.
caja,
los
mismos
“Cierra el vasto rectángulo otro lienzo de construcciones: el calabozo, donde espera castigo desde hace año y medio un mal soldado que asesinó a su sargento. Sigue el depósito de vestuario, escrupulosamente registrado. El 1º por un milagro de economía, tiene una muda de Invierno sin estrenar. En este mismo lienzo sobre un extremo están bien servidos los talleres de talabartería y carpintería, donde se refacciona el equipo y correaje y se hacen las obras que en el cuartel se necesitan. En un ángulo hay una Atalaya elevada unos nueve metros sobre el plano del terreno, desde la que se domina con anteojo una extensión de 15 kilómetros. Desde aquella altura el paisaje es magnífico. Cerca del cuartel, en grandes manchas de tierra movida, se recoge la hortaliza para todo el Regimiento y para el vecindario. Hay 29 cuadras de generosa tierra cultivada”. La música del cuerpo es un pequeño modelo de organización en su género. Hace honor a su inteligente Maestro, el Capitán Don Antonio Chiappa, que desde hace más de 12 años sirve el mismo empleo, habiendo formado de pequeños bandidos, buenos muchachos y músicos excelentes. Tiene 25 criollos de robusto pulmón que constituyen su orgullo y el fuerte de su Banda, en cuya enseñanza le presta ayuda inteligente el 2º maestro, Francisco Franco, un soberbio pistón”. “Detalle interesante y que debe siempre preocupar la atención de todos los jefes de cuerpo, es la letrina del Cuartel. Está en un ángulo, y ofrece irreprochable garantía higiénica. Reconociendo el Coronel Leleu lo pernicioso de los excretas depositados y el desaseo que hay en servirse de los alrededores ha construido con su misma gente un caño maestro de doce cuadras de largo, a donde son empujados diariamente los residuos por enérgicos baldeos. El caño va a parar al Arapey, pero para no perjudicar la Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
-3-
Crónicas de un SALTO desconocido pureza de las aguas, sólo se abre en días de crecida, permaneciendo en las bajantes cerrado por una trampa de hierro”. “Creo que con esto he dado fin a la descripción del Cuartel del 1º. Ahora me tocaría hablar de su instrucción; pero no habiendo presenciado ejercicios, nada nuevo para agregar ala fama que tiene el 1º de gran maniobrero a pie y a caballo. Su disciplina es proverbial, como es notorio el influjo de este cuerpo en la moralidad de toda aquella zona, donde es cosa rarísima al comisión de un delito. Lo que si presencie fue un ejercicio de armas, a caballo, jinetes los soldados en los famosos tordillos, que recién llegaban de la invernada, gordos y lindos. A pesar de esto, era admirable su quietud en la formación, recta como tabla tanto para contornos como en altura, pues en el 1º hay además para el antropómetro para medir el hombre a pie, un cartabón especial para tallarlo a caballo”. “Se me olvidaba citar una buena caso que tiene el coronel Rodolfo Leleu en su cuartel: una oficina telegráfica y telefónica servida por un soldado del cuerpo que aprendió telegrafía expresamente. La positiva utilidad de este medio de comunicación puesto a la mano no necesita encomios”.
Construcción del Edificio Año 1885 A raíz de las inundaciones que se producían, cuando el Río Arapey y sus tributarios salían de cauce, el Regimiento 1º de Caballería debió cambiar el emplazamiento de su campamento en varias oportunidades. A efectos de solucionar el problema de local, en campos que habían pertenecido a Emerenciano Santana, “ al Norte del Río Arapey, sobre su margen derecha; teniendo por límites el camino nacional al Oeste, que pasa por el Paso de la Laguna y va hacia Artigas por Isla Cabellos; Al Norte están los campos de la sucesión -4-
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
Crónicas de un SALTO desconocido Don Jacinto Santana y al Sur del Río Arapey” se comienza a edificar el Cuartel del Regimiento 1º de Caballería. El edificio de este Cuartel fue diseñado por el Señor Jorge Buist, quién también dirigió las obras de construcción las que estuvieron a cargo del Señor Emilio Schianini. Los trabajos se llevan a cabo en el transcurso del año 1885. Mientras se adelantaban los edificios el 4 de marzo se produce el movimiento revolucionario encabezado por Juan F, Mena y el Mayor Máximo Lallera. A raíz de este pronunciamiento todo el Regimiento se pone en marcha, para destruir las fuerzas rebeldes. En el campamento del Regimiento, permanece el Sargento Mayor Francisco Latapie, quién al encontrarse en calidad de Agregado al Regimiento había quedado a cargo con la tropa que pertenecía a las Bandas Lisas y de Música, así como un destacamento. A estos efectivos por orden del Jefe Político del Departamento de Salto, Coronel Teófilo Córdoba, se le fue incorporando personal de las diversas comisarías de campaña. Una vez sofocada la Revolución regresan los efectivos al Arapey, haciéndolo primeramente Teniente Coronel Graduado Rodolfo Leleu, quién había estado destacado en la frontera del Cuareim con 70 hombres, con la misión de impedir el pasaje a través de los distintos pasos que posee dicho río. Una vez presente toda la unidad en Arapey, prosiguieron los trabajos, que hubieron de ser apresurados, por cuanto, en el mes de julio, una nueva inundación afectó las instalaciones del Regimiento. En ese sentido, una noticia publicada en el Diario “Tribuna Popular” el 17 de Julio, dice al respecto: “Una carta que hemos recibido del Salto, nos da cuenta de los estragos que ha empezado a causar la creciente del Río Uruguay.
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
-5-
Crónicas de un SALTO desconocido El Arapey Grande salió de madre y se ha desbordado a causa de las frecuentes lluvias. El Reg. 1º de Caballería que está destacado en el Paso de la Laguna, tuvo que levantar nuevamente su campamento y establecerse en una colina próxima. Los galpones que servían de cuartel a ese cuerpo del ejército, han quedado casi derribados por completo, debido al ímpetu de las aguas desbordadas. Es tal la creciente del Arapey, que sus aguas han cubierto el puente de hiero que existe en ese paraje”. Los trabajos continuaron destinadas al Regimiento.
hasta
terminar
las
instalaciones
En el Oficio elevado por el Coronel Teófilo Córdoba, al Superior Gobierno, expresa: “recientemente se ha construido un magnífico cuartel de material, con espaciosas cuadras para las tropas y habitaciones para los Oficiales, Mayoría, Depósitos de Víveres, de Municiones, de equipos botica, Hospital, escuela, etc.”.
El Regimiento en el Nuevo Cuartel Si bien el edificio fue terminado en el año 1885, analizando las Listas de la Revista correspondiente, surge que las nuevas construcciones comenzaron a utilizarse en el mes de Enero de 1886, cuando los dos escuadrones (1º y 2º) al mando de los respectivos Comandantes, Capitán Juan J. Fernández y Teniente 2º Antonio Cippá ocupan los locales asignados en el nuevo cuartel. Mientras tanto la, Plana Mayor hace lo propio en el mes de Marzo. De acuerdo a lo expuesto procedentemente, con la instalación de la Plana Mayor, en Marzo de 1886, culmina la etapa del traslado del Regimiento a su nueva sede. -6-
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
Crónicas de un SALTO desconocido Bibliografía: Material extractado de: Revista “Historia del Cuartel del Arapey” Departamento de Estudios Históricos del Estado Mayor del Ejército División Historia - 1986.
Presentación Este museo depende del Ministerio de Defensa Nacional (Arma de Caballería, Batallón de Infantería nº 7). El mismo está ubicado próximo a las Termas del Arapey. Se trata de un antiguo cuartel de 1880 que desde sus orígenes albergó unidades del Arma de Caballería. El museo como tal, fue inaugurado en 1987 y recrea reambientaciones distintos aspectos de la vida de un Regimiento de Caballería hacia la década de 1940. Además, exhibe material iconográfico de las actuales unidades, así como uniformes y equipos típicos de este cuerpo de combate. http://www.ejercito.mil.uy/armas/caballeria/museos/Caballeria/muse ocab.htm
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
-7-
Crónicas de un SALTO desconocido
Museo de Caballería Cuartel del Arapey
En el transcurso del año 1879, el Piquete de Caballería, (única unidad del Arma), comandada por el entonces Capitán José Villar, se establece en el Paso de la Laguna, sobre el Río Arapey.
Luego de sucesivos aumentos de personal el piquete cambiará su nominación por la de 1er. Escuadrón de Caballería (Mayo,1880) y posteriormente Regimiento 1° de Caballería (14 de octubre de 1889). -8-
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
Crónicas de un SALTO desconocido A raíz de las inundaciones que se producían cuando el Río Arapey y sus tributarios salían de cauce, el Regimiento debió cambiar la ubicación de su campamento en varias oportunidades. En el año 1885, a efectos de solucionar el problema de local, en campo que había pertenecido a Don Encerenciano Santana, se inicia la construcción de un cuartel. El diseño del edificio y la dirección de las obras, estuvo a cargo del Sr. Jorge Emilio Schiarini.
El Nuevo cuartel, allí construido, era de material, teniendo alojamiento para el Cuerpo de Oficiales y el personal de tropa, Mayoría, depósito de víveres, municiones y equipos, botica y enfermería, etc. A partir del mes de enero de 1886, se comienza el traslado a las nuevas instalaciones. El mismo se completa en marzo, cuando se ubica en el edificio el Jefe del Regimiento, Sargento Mayor José Villar, con la Plana Mayor.
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
-9-
Crónicas de un SALTO desconocido
El Regimiento 1° de Caballería permanece en el Cuartel del Arapey hasta el Año 1903. Durante cinco años el Cuartel permanece sin unidad de guarnición. A fines del año 1908, se organiza el Destacamento de Caballería del Arapey. Este destacamento será la base sobre la que 1° de Abril de 1910 se creará el Regimiento de Caballería N° 10. Este Regimiento, permanecerá en el Arapey con la denominación N° 10 hasta el 16 de Febrero de 1921, en que se modifica su nombre, pasando a ser Regimiento “Atanasildo Suárez “ de Caballería N° 6.
- 10 -
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
Crónicas de un SALTO desconocido
El Regimiento "Atanasildo Suárez" de Caballería N° 6, permanecerá en el Cuartel hasta el 23 de junio de 1930 en que se traslada para la ciudad de Artigas. Durante el período 1930-1934, el Cuartel queda sin unidad de guarnición. En el año 1935, regresa al Cuartel del Arapey el Regimiento "Atanasildo Suárez" de Caballería N° 6, ocupándolo por un período de tres años. El 22 de enero de 1938, el Regimiento de Caballería N° 9, releva al N° 6, permaneciendo en el Cuartel del Arapey hasta el 12 de julio de 1938, en que es relevada por el Regimiento “Atanasildo Suárez” de Caballería N° 6. En su tercera estadía en el Cuartel del Arapey, esta unidad permanece en el mismo hasta el 21 de marzo de 1947, en que se traslada a Montevideo. Atendiendo a que en ese Cuartel siempre estuvieron de guarnición unidades del Arma de Caballería, con fecha 15 de enero de 1987, se procedió a inaugurar en sus instalaciones el Museo del Arma de Caballería.
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
- 11 -
Crónicas de un SALTO desconocido
En el mismo se pueden apreciar reambientaciones a la usanza de la década de 1940 de distintos aspectos de la vida de un Regimiento de Caballería. También, se exhibe material iconográfico de las actuales unidades, así como, nuestros uniformes y equipos típicos del Arma de Caballería.
- 12 -
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
Crónicas de un SALTO desconocido
El 21 de Julio de 1995 el Señor Teniente Coronel Jaime Pacheco, Jefe del Regimiento “Guayabos” de Caballería N° 10, actuando como Delegado de la Brigada de Caballería N° 1, recibe mediante Acta: el Museo del Arma de Caballería ubicado en Termas del Arapey, haciendo entrega del mismo al Señor Jefe de la División Administrativa del Departamento de Estudios Históricos del Estado Mayor del Ejército, Teniente Coronel Don Miguel de Cuadro.
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
- 13 -
Crónicas de un SALTO desconocido
Como Encargado del Museo de referencia se desempeñó el Cabo de Primera (Reincorporado) José Ma. Castro, quien tiene como destino la Brigada de Infantería N° 3, estando a esa fecha en Comisión en el Centro Militar. El Museo de referencia funciona en la antigua casona del Cuartel del Arapey y al no haber comodidad para alojar a una familia, impedía en el momento de tomar posesión del mismo, destacar a un Personal Subalterno del Regimiento “Guayabos” de Caballería N° 10. Con fecha 26 de Julio de 1995 el Arquitecto Carlos Pisoni, eleva un informe técnico sobre el estado de las construcciones del complejo perteneciente al Centro Militar en Termas del Arapey, del cual se desprende que el techo de la casa habitación destinada al Encargado del Museo, se encuentra totalmente movido en algunas partes e inexistente en otros. El 16 de Noviembre de 1995 se recibe Nota del Centro Militar, mediante la cual se autoriza la construcción de la casa para el Encargado del Museo, la que comienza a ser construida con material y mano de obra de ésta, en el mes de febrero del año - 14 -
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
Crónicas de un SALTO desconocido 1996 el Soldado de Primera Roberto Alvez de esta Unidad, pasa a residir en la Casa destinada al Encargado del Museo cuyo techo había sido reparado, mientras se continuaba con la construcción destinada a esos efectos. A mediados del año 1996 quedó pronta la casa-habitación, la que se encuentra ocupada en la actualidad por el Personal Subalterno que cumple funciones como Encargado del Museo. En la actualidad se desempeña como Encargado del Museo de Caballería el Soldado de Primera de esta Unidad Esteban Andrés Muñiz
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
- 15 -
Crónicas de un SALTO desconocido
¿Quién lo ordeno y por qué?
Desmantelaron el Museo Militar de Termas del Arapey Miércoles, 16 Diciembre 2015 | Diario: “LA PRENSA”
Desde el sitio web del grupo cerrado de vecinos que impulsan el cuidar y alentar el estudio y documentación del ¡Salto del Ayer y del Hoy”, se denunció en la presente jornada que desde hace una semana, se ha venido desmantelando el museo militar que funcionaba en Termas del Arapey, erigiéndose por ello, como una atracción importante para ese centro turístico, tan visitado por el turismo interno y regional.
- 16 -
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
Crónicas de un SALTO desconocido La medida genero dolor y consternación entre la población fija y flotante del centro termal mas antiguo e importante del Uruguay. Según una versión no confirmada, la medida se debió a una orden del Ministerio de Defensa, apuntando a reducir gastos. Cabe señalar que junto al Museo, funciona una Colonia de Vacaciones del Ejercito Nacional, muy utilizada por sus miembros. También hay que recordar que el predio de Termas era propiedad del Ejercito Nacional y allí se realizo la primera perforación que apuntaba a ubicar una napa de petróleo, pero que alumbró una vertiente termal, que alentó así, el despertar de esa actividad en el medio.
Comentarios
+7horacio | 16-12-2015 17:39 Aca no se trata de cerrar porque genera gastos esto es un odio que tiene esta gente del gobierno hacia los militares ya fue dejen tranquilo muchachos gobernantes dejen de tanto resentimiento !!!!! Responder | Responder con una citación | Citar | Reportar al moderador
+1JUANCITO | 16-12-2015 18:27 Por eso seguimos como estamos vivimos de resentimientos y de odio y seguimos mirando hacia atras en ves de mirar hacia adelante mientras no cambiemos los de arriba seguiremos empeorando lamentable. Responder | Responder con una citación | Citar | Reportar al moderador
+1raúl | 16-12-2015 18:43 a no dudar que se lo entreguen al PIT CNT para que lo administre, porque ahora es lo que hacen estos sinvergüenzas, así roban otro poquito Responder | Responder con una citación | Citar | Reportar al moderador Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz
- 17 -
Crónicas de un SALTO desconocido
+1observador | 16-12-2015 18:49 hay que investigar e informarse bien, quien lo hizo y los argumentos. NO olvidar que altos cargos del Ministerio de Turismo están bajo la órbita de un Depto y vaya saber quien está metiendo zizaña en todo ésto. PRIMERO que Ministerio se está metiendo en ésto, y si fuera el MINTUR guarda !!! Responder | Responder con una citación | Citar | Reportar al moderador
-1anti-cholin | 16-12-2015 21:56 si seras retardado Horacito para decir lo que decís Un museo así sea de faloperos o ineptos focas de izquierda siempre es atractivo en un lugar de turismo el gran pecado es que sea de los militares: Anda y empeza a cultivarte que te la das de culto y sos no mas que chupamedias Responder | Responder con una citación | Citar | Reportar al moderador
-4Horacito | 16-12-2015 20:10 todos los nostàlgicos de "los verdes" estàn desorientados y llorosos.... Pero a quién le puede importar ese "museo ? Màs vale que aprovechen ese terreno para construir algo beneficioso para toda la colectividad !! Responder | Responder con una citación | Citar | Reportar al moderador
0Manuel Albisu | 16-12-2015 22:39 Con todo respeto le digo compañero que más allá de las subjetividades la consolidación de la cultura pasa siempre por una revalorización del pasado. Si no integramos a las FFAA al quehacer nacional, tarde o temprano tendremos otra dictadura. Atte Responder | Responder con una citación | Citar | Reportar al moderador
0jPairri de salto | 16-12-2015 20:32 Horacito,de acuerdo, un hogar para NiNi con maruja gratis,solo que sepan apedrear ómnibus en los accesos. Les queda poco,
- 18 -
Crónicas de un SALTO desconocido - Alberto J. Eguiluz