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Lucha contra la pandemia
from Militares del Bicentenario
by Alexander
Soldados del Perú:
Lucha contra el COVID-19
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Si bien es cierto que contamos con una privilegiada geografía, en la cual se destacan, las ocho regiones naturales, así como una extensa diversidad de microclimas, también debemos ser conscientes que constituyen un problema al momento de interconectarlos con los trabajos por realizar en cumplimiento de las políticas nacionales.
Dentro de ella, tenemos la política nacional multisectorial de salud, en la cual el gobierno busca establecer políticas de Estado para que la población ejerza su derecho a la protección de la salud, que a lo largo de nuestra historia siempre ha estado relegada, a pesar de ser una prioridad y, si le sumamos una epidemia como la del sarampión, viruela, etc., o una pandemia como la gripe española y ahora el COVID-19; entonces nos enfrentamos a un potencial desastre a gran escala y sin precedentes.
Hasta la fecha la pandemia cobró la vida de más de 190 000 personas a nivel nacional y ha desestabilizado la política, a sus gobernantes y a la propia economía, que antes de de la pandemia tenía un crecimiento sostenido y era ejemplo en la región.
La participación del Ejército La misión del Ejército del Perú es defender a la nación y los intereses nacionales de cualquier amenaza o agresión empleando el poder militar terrestre, participar en el desarrollo económico y social, control del orden interno, acciones de defensa civil y política exterior de acuerdo a ley, de manera permanente y eficaz, con el fin de contribuir a garantizar la independencia, soberanía, integridad territorial y bienestar general de la población (Ejército del Perú, 2020).
En este nuevo e incierto escenario, el Ejército del Perú reaccionó de manera inmediata, debido a su preparación, disciplina, flexibilidad y adaptabilidad; organizando grupos de planificación que incluyan al personal con capacidad en temas
de salud y enfermedades epidémicas. A medida que las acciones militares se fueron desarrollando, los grupos de planeamiento fueron adquiriendo mayor conocimiento sobre la pandemia; de igual manera sobre el comportamiento de los grupos poblacionales, los lugares más afectados y las formas más comunes de propagación del COVID-19. Esto permitió reajustar los planes con mayor precisión y así optimizar el empleo de los recursos humanos y materiales, en todo el territorio nacional.
Para este fin, se desarrolló dos tipos de acciones militares que servirían para contener y mitigar el avance de la mortal pandemia:
-La primera acción militar fue apoyar a la Policía Nacional del Perú en el control urbano del aislamiento social obligatorio, como también de fronteras y carreteras, evitando el tránsito no autorizado de personas para disminuir, de ese modo, el aumento de contagios y dar tiempo al sector salud para que se organice y se evite el colapso. Este trabajo fue bajo la dirección del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas.
-La segunda acción militar fue asegurando que los servicios públicos esenciales continúen trabajando de manera normal; además de brindar protección a los organismos del Estado que tienen injerencia en el control sanitario para que puedan contar con libertad de acción. De la misma forma, se apoyó con transporte y seguridad a las diversas actividades que realizaron entidades, públicas y privadas en beneficio de la población de menores recursos a nivel nacional.
El Ejército del Perú, comprometido con su misión Constitucional e inherente vocación de servicio, realizó varias acciones en provecho de la población de todo el territorio -Participación activa en el Plan te cuido Perú en apoyo a las poblaciones más vulnerables y golpeadas por esta pandemia. -Apoyo al Ministerio de Salud con nuestro personal para la habilitación de 2 350 habitaciones de aislamiento en la Villa Panamericana. -Apoyo al Ministerio de Salud con nuestro personal femenino del Instituto de Educación Superior Tecnológico Publico del Ejército – ETE, en la atención de llamadas a la línea 113 del call center, orientando a la población sobre los protocolos ante el COVID-19 y realizando el reporte de casos sospechosos. -Apoyo al Ministerio de Salud con aeronaves para el traslado de personal médico, medicinas, vacunas, personas en estado grave, etc. -Apoyo al Instituto Nacional de Defensa Civil con el armado de 50 mil canastas de víveres. -Apoyo al Instituto Nacional de Defensa Civil con el traslado e instalación de 254 carpas para personas migrantes y población vulnerable. -Apoyo al Gobierno central, dirigiendo las labores en tres Comandos COVID Regionales (Lambayeque, Arequipa y Yurimaguas).
Todas estas labores en apoyo a la población se realizan sin descuidar nuestra labor dentro de las Divisiones del Ejército, en especial en el VRAEM; teniendo una capacidad de despliegue con, aproximadamente 60 mil efectivos a nivel nacional, no dejando pasar el invaluable compromiso de nuestros reservistas que, a nivel nacional, fueron más de 7 mil efectivos que acudieron al llamamiento.
Pese a las dificultades referentes a presupuestos, como también el desconocimiento inicial sobre temas referentes a la pandemia del COVID-19, podemos decir que nuestro Ejército no dudó ni un momento y actuó de manera eficiente, siempre anteponiendo el bienestar de nuestra población y centrando la ayuda a las poblaciones más vulnerables logrando, de ese modo, una adecuada aprobación de la población a nivel nacional. Esto nos sirve de estímulo para continuar en esta labor a pesar del desgaste que se sufre, producto de los casi 15 meses de trabajo ininterrumpido; sin embargo, sabemos que la moral y temple del soldado del Perú es inquebrantable. ¡Viva el Perú!