La labor de la educadora en preescolar

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La labor de preescolar.

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En el presente trabajo conformo el desarrollo sobre la educadora= mercancía femenina mi objetivo es dar un enfoque en la importancia acerca del labor de la educadora en Preescolar. Según mercado “La docente de preescolar ha sido agredida en su status profesional por sus condiciones histórico culturales. La educación preescolar únicamente ha sido un paliativo, para que la madre de familia tenga una niñera barata” (2008) pag.35 En la actualidad el labor de una educadora ha sido visto como el de una niñera así como ha sido catalogada como la persona tierna y sumisa de la cual su única función es la de cantar, cuidar y divertir a los niños. Incluso se piensa que cualquier persona sin estudios puede ejercer y cumplir con el cuidado y la enseñanza de un grupo de niños en el aula; jugando, realizando trabajos manuales y prestando sus servicios de “mama” “La docencia femenina relacionada con la maternidad, referida con la protección, la comprensión, el amor, el cariño, la paciencia, el orden y la disciplina, con el trato y cuidado de los niños, dejando de lado el fin o el propósito de la enseñanza que consiste en desarrollar una serie de habilidades y destrezas en los núcleos escolares respectivos”. Mercado (2008) pág. 42 Para la sociedad es común que el trabajo de una educadora se confunda o se asocie al de una madre, porque en lo general la docente es una persona cariñosa con los niños pero además de tratar bien a los niños y formar en ellos una infancia agradable es también quien debe proporcionar al niño el conocimiento para su vida escolar, y desarrollar en el ciertas habilidades y actitudes que vayan reforzando su formación como lo dice Ferry “La formación es un proceso individual en el cual cada persona va desarrollando y perfeccionando capacidades y habilidades” (1999, pág. 43). La necesidad de que la mujer ingresara al campo laboral, dio pauta a que se prepararan educadoras y se inició la educación preescolar. Para muchos es una tarea materna, ocupación solo de las mujeres, una profesión con poco reconocimiento social y además de eso la mujer que es una educadora es considerada una en algunas


ocasiones como “artesana” por pintar y realizar trabajos manuales bonitos para los niños. A partir del ciclo escolar 2005- 2006 la educación preescolar es oficialmente obligatoria para los niños de 4 y 5 años de edad al terminar su nivel preescolar podrá ingresar a la educación primaria. Como lo menciona mercado “Las maestra de preescolar para desarrollar una calidad educativa, durante este tiempo que le proporcione al niño los conocimientos necesarios para este momento y para los años posteriores en su vida en la escuela “Laura morales rodríguez pag.109 (2008). Por medio de juegos y actividades que le proporcione al alumno desarrollar cada una de sus habilidades y además perfeccionándolas; también es importante que las educadoras no cansen a los niños con un montón de trabajos manuales, dibujos para colorear y crear en ellos una rutina en su estancia en el jardín; es importante que la educadora se valla actualizando y además valla con ellos descubriendo conocimientos nuevos que representen en los niños aprendizajes significativos. La sociedad ha marcado que la educadora y su trabajo es una labor fácil de realizar por que muchas de las educadoras realizan su trabajo pero no salen de esa comodidad de poner a los niños a colorear sin salirse de la raya, solo a realizar rayones en la libreta, aprenderse los colores, y así no salir de las mismas actividades y la misma tradición; para muchas madres de familia y como ya se ha mencionado la educadora solo ha sido la “niñera” la persona que los cuida cuando no está mama o papa, la mujer que limpia su nariz cuándo está sucia o simplemente la persona que se ocupa que el niño se alimente bien y durante el trascurso del día no le pase nada malo en el plantel. Es de vital importancia que se valla profesionalizando esta labor la educadora no solo tiene la función de cuidar los niños sino también enseñar y crear en el los hábitos de estudio desde pequeños, proporcionar al niño las herramientas necesarias par su vida escolar y social, sembrar en ellos el interés por seguir sus estudios y tratándolos como alumnos que vienen aprender y no como “hijos” que tenemos que cuidar. Como lo dice mercado “Gran tarea tenemos las mujeres docentes: romper con esos mitos, volver a abrir caminos para las futuras generaciones, elevar la calidad de nuestra práctica tomando en cuenta que, no sólo implica cuidar niños y darles amor, sino una verdadera


profesionalización de la labor docente. pag.45 (2008). Micaela Ortega Solórzano Es necesario elevar la calidad de esta labor, que las educadoras no acepte la representación social que tiene tales como las de “madre”, “niñera” “la educadora bondadosa y bonita”. Esta labor necesita de educadoras comprometidas con su trabajo, una persona con ciertas competencias que permitan el desarrollo de aprendizajes en el niño, así como el desarrollo de habilidades y que reconozcan las necesidades de los pequeño, ser personas proveedoras es decir proporcionar al niño los conocimientos necesarios para el progreso del alumno y el descubrimiento del mundo en general. Es preciso que la educadora tenga clara su posición dentro de la sociedad. Que tenga compromiso y se actualicé para el bien y la buena educación de sus alumnos, la docente es una persona que no le tenga miedo a los retos y desafíos que su trabajo le implique. Motive a sus pequeños a la reflexión de lo aprendido, tenga un sentido ético en cualquier situación. Es así como concluyo que la labor de educadora en preescolar merece un reconocimiento de su labor, pues ella es la persona junto con el apoyo de los padres de familia la brindar al niño las herramientas que le permitan aprender del mundo que los rodea; así como servir de guía para el acompañamiento de su desarrollo y aprendizaje durante su estancia en el jardín de niños.


Bibliografía: Ferry, G. (1990). El trayecto de la formación. El enseñante entre la teoría y la práctica. México. Mercado cruz, E. (2008). El oficio de ser maestro: relatos y reflexiones breves. Estado de México.


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