4 minute read
MODA E INSPIRACIÓN EN CUBA
from Amano Magazine No.9
by amanoempire
BY / Por Evan Stanton Elkowitz PHOTOS / Fotos Daniel Mendoz y Eduardo Rawdríguez
Advertisement
Michel D’Zuarez es uno de los diseñadores cubanos de moda más interesantes e innovadores en la actualidad. Autodidacta, pues nunca pasó una escuela de esa especialidad, luego de estudiar música se decidió por el mundo de la moda en 2012. Comenzó ideando bolsos, pero con el tiempo se concentró en los trajes originales para profesionales del espectáculo, y después de los primeros años de labor decidió llamarse D’Zuarez en honor de su empresa y de su familia.
En 2014 empezó a diseñar con una idea distinta en mente: hasta ese momento lo había hecho, sobre todo, para artistas, pero su intención era pasar de la moda escénica a la que se lleva en la calle. El vacío que había en el mercado para los jóvenes cubanos modernos lo tentó a concebir ropa para hombres, piezas para personas atrevidas a quienes no las asusta llevar un vestuario «excéntrico».
D’Zuarez intenta investigar e informarse acerca de lo que ocurre en el mundo de la moda. Resultado de ello es su colección Tabaco, que incluye vestuario, calzado y bolsos destinados al mercado internacional. Su próximo plan es sorprender en su país con trajes de hombre. Hasta hoy, sus colecciones son vibrantes, llenas de colorido y con audaces combinaciones de brillo y texturas, por lo que sin dudas esos trajes reflejarán su talento creativo y representarán al hombre del siglo xxi que no teme romper barreras.
La ropa de Michel es andrógina y atrevida, y él tiene la esperanza de poder representar a los modistos cubanos a nivel mundial. Como estilista de moda que trabaja en New York, me impresionan su creatividad y pasión —ser creativo en Cuba significa vencer las limitaciones que desafortunadamente existen y asumir cualquier material que se pueda encontrar, dando rienda suelta a la imaginación.
Me encantan sus bolsos: los colores, las texturas y las formas son fabulosos. Sus prendas de vestir me recuerdan colecciones pasadas de maestros europeos como Libertine, Versace y Dolce & Gabbana. Admiro de él los diseños caprichosos y la actitud vanguardista. Sus piezas representan un cruce entre arte, moda, historia y cultura cubanas, de ahí que no resulte difícil entender por qué los artistas se decidieron por propuestas tan excéntricas y poderosas.
D’Zuarez nos ha comentado que sus expectativas para el futuro son trabajar más, diseñar nuevas colecciones, aumentar su clientela y ser reconocido más allá de las fronteras de la Isla. Le deseo toda la notoriedad y el éxito internacional que claramente se merece. ▪