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Estreñimiento en niños

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Por qué enderezar

Por qué enderezar

PARA UNA BUENA DIGESTIÓN: FIBRA Y AGUA Por lo regular, se asocia a hábitos alimenticios inadecuados, como una dieta pobre en agua y fibra, aunque también puede deberse a otras causas ESTREÑIMIENTO

Dr. Enrique Prieto Hernández MÉDICO CIRUJANO Y PEDIATRA doctoreprieto@yahoo.com.mx

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Estreñimiento se considera cuando las evacuaciones son secas. No hay que confundir la disminución de la frecuencia con el estreñimiento porque en ocasiones a los niños no se les facilita abrir el esfínter anal y por eso pueden tardar hasta dos días en evacuar. Causas del estreñimiento en los bebés Las causas del estreñimiento en los bebés son diferentes a las del niño mayor de dos años, ya que en este caso la alimentación es predominantemente láctea. Los bebés alimentados con leche materna suelen deponer varias veces al día.

La leche materna se asimila muy fácilmente y apenas genera residuo, por lo que puede ser normal en ellos que estén varios días sin evacuar. En estos casos, cuando lo hacen, no es dura, sino que tiene las mismas características que las deposiciones habituales. Esta es otra ventaja más que posee la leche materna, ya que rara vez un lactante que se alimente de ella estará estreñido. En un bebé alimentado con leche artificial el estreñimiento es más frecuente ya que genera más residuos. Consideraremos que el bebé está estreñido si su evacuación se tarda más de 48 horas.

La ablactación en los lactantes también da lugar a un cambio en las evacuaciones, por lo que provoca un estreñimiento temporal. La lactasa presente en la leche materna facilita la expulsión de las heces, cuando se introducen otros alimentos en la dieta del bebé da lugar a heces más compactas y voluminosas, que son más difíciles de expulsar. Causas del estreñimiento infantil Las causas orgánicas del estreñimiento infantil, como puede ser la alteración anatómica de colon y recto como un intestino más largo de lo normal, son algo infrecuentes (estenosis anal, megacolon, oclusión intestinal).

Por lo regular, el estreñimiento se asocia a hábitos alimenticios inadecuados, como una dieta pobre en agua y fibra, aunque también puede deberse a otras causas.

El último tramo del aparato digestivo está formado por el colon, donde los restos alimentarios procedentes del estómago e intestino delgado van perdiendo su contenido en agua, para transformarse en el residuo final, las heces.

Cuando la dieta es rica en agua y fibra, las heces son más blandas y su tránsito a través del colon y recto es ¿QUÉ PUEDE HACERSE? • Evitar los jugos. • Prolongar la lactancia materna. • Iniciar la ablactación a los seis meses. • Dar masajes abdominales suaves. • Dar un baño con agua templada.

PAUTAS DE AYUDA

• Practicar deportes. • Aumentar la ingesta de agua. • Aumentar la cantidad de alimentos con fibra: frutas con piel, verduras enteras, legumbres. • Tomar entre tres y cinco raciones de fruta y verdura al día. • Cocinar con aceite vegetal. • Evitar exceso de alimentos astringentes: papa, zanahoria, manzana, arroz. • Incluir alimentos laxantes: ciruelas y kiwi (no dar a menores de un año). • Establecer una conducta regular para ir al baño.

ACCIONES A EVITAR

• Presión excesiva por dejar el pañal: algunos padres son muy obsesivos al entrenar al niño, lo cual puede dar lugar a oposición o rechazo al hecho de ir al baño. • Falta de disciplina para las comidas: muchos niños comen poco en las comidas principales del día y se dedican a comer entre horas, lo que da lugar a un tránsito digestivo inadecuado. • Alimentación pobre en agua y líquidos: con exceso de jugos y bebidas azucaradas o energéticas con bajo contenido en agua. • Falta de fibra: ingesta deficiente de frutas y verduras. • Abuso de alimentos astringentes: plátano, papa, arroz, manzana, chocolate y azúcares refinados, como golosinas y frituras. • Factores psicosociales: inicio del colegio o de la guardería, acontecimientos familiares traumáticos (fallecimiento, separación, cambio de casa o de ciudad).

más fácil y poco doloroso. En cambio, una dieta pobre en líquidos y en fibra (obtenida fundamentalmente a partir de frutas y verduras) tendrá como consecuencia unas heces duras y compactas que serán difíciles de eliminar. Por ello la masa fecal queda retenida en el recto más tiempo, perdiendo cada vez más agua y endureciéndose cada vez más.

Si las heces son muy duras, su evacuación puede producir pequeñas fisuras, que son muy dolorosas. En los niños puede provocar miedo, entonces retiene y vuelve a tener dolor, entra en un círculo vicioso que, a veces, es muy difícil de romper, por lo que hay que remediarlo lo antes posible con el pediatra.

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