Esta técnica es positiva tanto para nuestra mente como para nuestro cuerpo y nuestra conducta. Desde el punto de vista psicológico sus beneficios radican en la reducción de la insatisfacción y, paralelamente del sufrimiento que suele estar asociado a ella. De igual forma su práctica nos ayuda a comprender lo que nos sucede en cada momento y a aceptarlo sin juicios actuando en consecuencia y favoreciendo la creatividad.
Físicamente, el mindfulness nos aporta mejoras que empezaremos a notar de inmediato. A través de la meditación, nuestro cuerpo se relaja y aprendemos a hacerlo con facilidad. Cabe recordar que el estrés mantenido repercute en nuestro cuerpo de forma muy negativa en nuestro sistema inmune, o manifestándose en forma de dolores musculares, trastornos digerstivos como úlceras, colon irritable