ÁREA EMOCIONAL
tiempo de terapia Texto: Psic. Marlen Ayala.
MABEL Mujer Amada
¿Cuándo identificamos el momento perfecto para tomar ese primer paso?
A
lo largo de nuestra vida vamos enfrentando diversas situaciones que nos generar inestabilidad, algunas se van acomodando con el tiempo y otras se pueden ir agravando, cuando nos encontramos en este punto, llega el primer cuestionamiento, ¿debo de ir a terapia? Y es justamente cuando empezamos una lucha interna, sumado de la vergüenza o el miedo ante muchas opiniones respecto a que ir con un psicólogo es cosa de “locos”. A pesar de que se ha avanzado bastante en el mito del papel de los psicólogos, todavía existen pensamientos de que esta profesión está relacionada con la locura. Aunque realmente solo podría ser el miedo de enfrentar todo lo que implica ir a terapia. Ir a terapia suena sencillo, pero realmente, no lo es, porque hay una gran diferencia entre “querer ir” y “estar listo para ir”, te explico, muchas veces creemos que ir solo implica dar una parte de nuestro tiempo, nuestro dinero y esperar a que el psicólogo haga todo el trabajo, pero realmente estar listo implica abrir tu vida de par en par, tomar tú responsabilidad, soltar lo que no te corresponde, enfrentar la mejor y la peor versión de ti mismo, y mejor aún, tomar las riendas de tu situación y buscar un equilibrio en la vida. Déjame decirte algo, para esto, se necesita mucha valentía.
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Esto me remonta a la frase “todo llega en su momento”, y es cierto, llegaras a terapia y encontraras lo que realmente necesitas, pero después de un largo y trabajoso camino, y no lo digo como sufrimiento, al contrario, como un descubrimiento de esa nueva persona en la que te quieres convertir, en esa nueva compañía que quieres ser, pero para ti mismo. Esto no habla de perfección, habla de un trabajo día a día, para poder mostrarte que eres un cofre de maravillosas sorpresas. No te desesperes, encuentra tus verdaderos motivos para dar ese paso, es normal que tengas miedo, dudas y muchas expectativas, pero tranquilo, todo ese se ira acomodando. Antes de ir a terapia cuestiónate estas preguntas: ¿Por qué quiero ir?, ¿Qué es lo que quiero lograr? Y ¿Qué estoy dispuesto a hacer para obtenerlo? Recuerda que ir a terapia es un encuentro contigo mismo, así que dale el tiempo y la importancia que requiere. El día que te des la oportunidad de dar ese primer paso, de ya no responsabilizar a los demás o simplemente decidas dejar de sobrevivir, para realmente aprender a vivir, será el primer gran acto de amor para ti mismo.
