REFLEXIÓN El trabajar en la educación preescolar requiere de muchos elementos, como conocer la comunidad, tener conocimiento del tema a abordar en la clase, que es una estrategia y cuál es la más conveniente para nuestro grupo, como crear un ambiente de aprendizaje favorable, entre muchos otros y un factor que toda educadora debe conocer es el hacer una planeación didáctica pertinente en la que se diseñen situaciones con actividades destinadas para los alumnos, en cada grado, la educadora diseñará actividades con niveles distintos de complejidad en las que habrá de considerar los logros que cada alumno ha conseguido este proceso de planificación es un proceso fundamental en el ejercicio docente ya que contribuye a plantear acciones para orientar la intervención del maestro hacia el desarrollo de competencias, al realizarla tiene que tener presente que los aprendizajes esperados y los estándares curriculares son los referentes para llevarla a cabo. En el plan de estudios 2011 podemos encontrar la información que ayuda al maestro para la construcción de ambientes de aprendizaje; como lo son los campos formativos, aspectos y aprendizajes esperados, que se dirigen a la educación básica y su principal meta es organizar, regular y articular los espacios de forma interactiva para poder lograr la competencia a la que se desea alcanzar para la vida y los propósitos de perfil de egreso, podemos desarrollar en el niño las habilidades, actitudes y valores, mediante la movilización de saberes iniciando de las situaciones complejas de la vida cotidiana, a partir del momento que tiene el niño para resolver diferentes situaciones. Por otro lado, el currículo, la pedagogía y la competencia, son elementos que están relacionados entre sí. En el aula, el trabajo a realizarse tiene con base el currículo, ya que es un conjunto de estudios y prácticas para que el alumno pueda desarrollarse plenamente y lograr las competencias. Es utilizado en pocas palabras, como la organización de distintas oportunidades de aprendizaje con objetivos claros. Los planes y programas, así como las reformas educativas
pretenden y son un medio para la mejora buscando una autentica educación de calidad atendiendo las necesidades y pertinencia de los contendidos El currículo ha cambiado conforme el paso del tiempo, esto ayuda a la educación, tomando en cuenta las necesidades, intereses y habilidades de los niños; la idea principal del curriculum, es formar a los estudiantes, trabajar el contenido y buscar el desarrollo intelectual de los alumnos, y así desarrollar el plan de estudios. Una vez dicho lo que es el currículo es importante saber los fundamentos de la RIEB, en el cual viene inmenso lo que es el currículo, ya que se encarga de favorecer a la educación y a los aprendizajes de los niños. Pero ¿qué tiene que ver la RIEB con las actividades didácticas? En realidad, todo tiene que ver, ya que en estos tiempos todo lo que se diseña debe tener relación con lo que los alumnos aprenderán en el siguiente periodo (lo que mara el mapa curricular de la educación básica) en si el preescolar en la base de todos los niños. Los temas abordados durante el curso son de gran relevancia, ya que nos sirven como apoyo y base sobre lo que debemos retomar en nuestras prácticas docentes, así como los materiales son otro punto fundamental de la construcción del aprendizaje en el aula, ya que son actividades de importancia para el proceso de desarrollo del niño, estas actividades generan elementos donde los docentes pueden hacer secuencias didácticas, las cuales facilitan los contenidos a abordar. El PEP 2011 es un programa de carácter abierto que permite adaptarlo según las necesidades que presente el grupo, de tal forma que el docente adecue las situaciones o actividades que llevará a cabo en el aula. Se debe considerar también, el grado de desarrollo de los alumnos, las habilidades y posibilidades que presentan tanto individual y colectivamente, haciendo presencia de la inclusión a aquellos alumnos que presenten alguna discapacidad o capacidad diferente, el docente debe adecuar las actividades y hacer lo posible por que estas sean provechosas para el desarrollo de los estudiantes.
Nuestros propósitos deben hacerse con base a los principios que marca el currículo y sus niveles o fases, que nos permiten planificar actividades didácticas específicamente pensadas al grupo que se pretenden aplicar, estos niveles son: ¿Cómo enseñar? ¿Cuánto enseñar? Y ¿Qué, cómo y cuándo evaluar?; ya que actualmente, gracias a la tecnología se nos facilita encontrar infinidad de situaciones y material didáctico, pero en ocasiones los maestros o educadores olvidan adaptarlo o adecuarlo a las necesidades de sus alumnos, sin considerar si será entendible para los estudiantes y los aprendizajes esperados a los que se pretende favorecer. Vivimos en un mundo donde la tecnología tiene un papel fundamental en la sociedad no podemos dejarla de lado sino que utilizarla para nuestro beneficio, no es malo hacer uso del internet u otras alternativas que generen ideas, siempre y cuando el docente tenga la tarea de utilizar su intelecto y hacer uso del diagnóstico antes aplicado al grupo, para así adecuar las actividades a las respuestas obtenidas con la evaluación diagnostica. Para emplear una actividad en el aula es necesario conocer los requerimientos de los alumnos, una vez que seleccionamos la actividad debemos de tener en cuenta cada uno de estos detalles, de esta manera podremos adaptar la actividad a las condiciones del grupo, en ocasiones es necesaria realizar una transposición didáctica. Es necesario enfatizar el primer nivel del currículo que hace referencia a centrar el proceso de enseñanza-aprendizaje en el alumno. Ya que concluimos con este nivel, llegamos al segundo que hace alusión al momento, es decir nos hace preguntarnos ¿cuándo hay que enseñar? En el Programa de Educación Preescolar esto nos es dictado por los estándares curriculares que se favorecen de los 5 a los 6 años. Debido a que estos estándares curriculares de la educación básica se articulan en conjunto según al acuerdo 592.
En el tercer nivel del currículo nos enfocamos al cuestionamiento referido a lo procedimental, es decir ¿Cómo vamos a enseñar? En la educación preescolar es el docente quien analiza las diversas estrategias para que sus alumnos sean capaces de pasar por el trayecto del aprendizaje, una de estas formas de trabajo muy común en preescolar, es la lúdica. Usamos como estrategia el juego, puesto que es una estrategia que permite que el infante se divierta y aprenda, de esta manera el niño se apropia de los aprendizajes que las actividades llevan consigo de manera implícita, además es un mecanismo natural imprescindible para el aprendizaje desde los primeros años de vida, podría ser hasta una necesidad vital e indispensable para el desarrollo de ellos. Una vez que transitamos por estos niveles del currículo, no debemos dejar de lado una parte muy importante “la evaluación” llevando consigo la interrogación del qué y de qué manera se va a evaluar. Proceso que nos sirve para mejorar nuestra práctica para el alumnado, y de igual manera reconstruir nuestra formación profesional docente, llevando incluido la palabra retroalimentación. Durante este proceso surge otra interrogante ¿De qué manera puedo conocer si los alumnos lograron los aprendizajes esperados? Es por ello que los anteriores niveles dan pauta para la selección del instrumento de evaluación, tomando en cuenta los criterios de desempeño, así que desde un inicio debemos tener gran claridad en el currículo y el proceso de enseñanza aprendizaje trabajado. Como futuras educadoras jugamos un papel transcendental e ineludible en la formación para fomentar desde edades tempranas el pensamiento, ingenio, creatividad, reflexión y análisis de las actividades con las que trabajamos a diario. La acción de la educadora es un factor clave porque establece el ambiente, plantea las situaciones didácticas y busca motivos diversos para despertar el interés de los alumnos e involucrarlos en actividades que les permitan avanzar en el desarrollo de sus competencias. Es necesario que estas inviten a los niños a querer descubrir y realizar cosas por interés y que los motiven, que ellos mismos se apropien de conocimiento, siempre teniendo la intención de que aprendan cosas nuevas, cosas que verdaderamente ayuden al desarrollo íntegro del
individuo, según las necesidades del contexto y de la época que estamos viviendo, no tiene caso enseñar cosas del pasado si en la actualidad todo cambia constantemente en un abrir y cerrar de ojos, los niños deben estar a la par con el conocimiento, la teoría y la práctica.Debemos propiciar en todo momento la retroalimentación de los alumnos tomando en cuenta sus saberes y sus aportaciones, corrigiéndolos si es necesario y guiándolos por la correcta interpretación del conocimiento. Para nosotros, como para los alumnos, el currículo, planes y programas de estudio nos van guiando dando las pautas para el diseño de actividades y los contenidos a trabajar, nunca olvidando nuestro objetivo y la orientación a la que van dirigidas, a quienes van dirigidas, por qué y para que de su realización, deberán ser creativas, innovadoras, reflexivas, colaborativas, avivando valores, interes y sobre todo útiles para los niños. Nunca descuidando a quienes son el centro de la acción educativa, teniendo en cuenta sus características biológicas, cognitivas, aprendizajes, así como las habilidades o carencias que cada uno de ellos debe trabajar y lograr así, tener aprendizajes que sean significativos y de provecho en cada uno de ellos.