3 minute read

TALENTO EN ABUNDANCIA

POR QUÉ LA INTEGRIDAD ES PARA “VALIENTES”

Hace muchos años trabajaba en un proyecto grande para reformular algunos de los ingredientes de una de las marcas líderes de snacks en los Estados Unidos. Después de hacer varias pruebas usando diferentes componentes para recortar el precio, y evaluando las respuestas que las personas dieron a las preguntas, teníamos un completo reporte para presentar a la directora de aquel famoso snack.

Advertisement

Sin exagerar, millones de americanos estarían llevando a sus casas este producto que compartirían con sus hijos, probablemente convencidos de haber tomado una excelente decisión. Al final de cuentas, estos paquetes tan bonitos y bien diseñados estaban en los mejores supermercados del país, situados nada más y nada menos, al nivel de los ojos del comprador. Un posicionamiento en el anaquel que le aseguraba a aquella compañía una gran ventaja a la hora de vender su producto, sin importar cual fuere o qué contenía. TALENTO EN ABUNDANCIA

“Son tus valores los que te guían y por eso cuando hay que decir no, lo puedes hacer sin tener sentimientos de culpa o avergonzarte”.

Se llegó el momento de presentar los resultados de la investigación de mercados, y temprano viajamos a New Jersey a las oficinas de tan afamada compañía. Después de felicitarnos por los resultados de la presentación, una de las ejecutivas más influyentes nos invitó a tomar un té en su despacho. Tras haber conversado por un rato, y cuando estábamos en confianza, cuál no sería mi sorpresa al oírla decir cándidamente que con esos ingredientes ella no le daría nunca ninguno de estos snacks ni a su perro. Para su familia y mascota, ella consideraba estos snacks basura, pero para el resto del mundo estaba dispuesta a decirles que eran los mejores y más saludables, aunque fueran hechos con ingredientes de baja calidad, lo que inevitablemente sucedería al cortar los costos y cambiar las materias primas. Este era el objetivo del estudio. ¿Estaba esta ejecutiva siendo íntegra? Tú qué crees…

Esta lección nunca la olvidaría, ya que sería una de las primeras señales del sin sabor que seguiría ocurriendo en mi vida, y que tomaría años en descubrir por qué se presentaba.

Mirando hacia atrás ahora comprendo claramente el significado de integridad. La defino como un estado de estar completo, entero. Es más, diría que es ser uno, sin diferentes personajes dependiendo de la situación. Es decir, no hay un personaje para la familia, otro para el trabajo, otro para ciertos amigos, otro para los clientes de tu producto… ¿Y esto qué significa? Ser valientes, porque no hay chance de mentir, más difícil aún, hay que ser congruente en todas las situaciones. Esto implica ser honesto contigo mismo, a tus valores y con los demás, porque son tus valores los que te guían y por eso cuando hay que decir no, lo puedes hacer sin tener sentimientos de culpa o avergonzarte.

Esta gran verdad la descubriría años después cuando me vería enfrentada a situaciones que no se sentían bien en ese momento, pero que tenía que pretender que estaba “de acuerdo”. En esa época la falta de integridad no se registraba en mi radar, simplemente estaba trabajando y lo estaba haciendo muy bien. Estaba jugando el papel perfecto y esto se reflejaba en mi salario y en mis ascensos.

Hoy después de muchos años comprendo que la integridad requiere ante todo tener claros los valores que le dan fundamento a tu vida, y ser “valiente” para ser fiel a ellos. Requiere madurez porque hay que elegir con conciencia y tener consistencia.

La invitación hoy es a definir primero tus valores, para que conscientemente actúes acorde a ellos. Así verás como al intentar ser íntegro te conviertes en una persona honesta, sabia, confiable y que vive en armonía.

This article is from: