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CRECIENDO EN PAREJA
LA INTEGRIDAD DEL AMOR
Cuando de amor se trata, la integridad del mismo, es lo primero que muchas personas tienden a poner “a prueba”. En términos generales se nos ha enseñado que el amor hacia la persona amada debe ser íntegro, lo que para muchos significa, que “cuando se ama a una persona de verdad”, quien ama deberá estar dispuesta a “darlo todo” por el ser amado y que, de ser posible, deberá estar dispuesto o dispuesta a demostrar su gran amor.
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Desafortunadamente, esto tiende a ser reforzado por los medios de comunicación que explotan dicha creencia en aras de obtener la atención tan redituable de sus cotizados espectadores, ávidos de historias románticas sensacionalistas convencidas de que lo que ven es lo que ellos deberán, en una u otra medida, replicar para cumplir con el estándar establecido al cual requieren ajustarse para sentir que sus vidas son tan intensas como las de los actores y actrices que ven en la pantalla.
La glamorosa vida amorosa a la que aspiran tantas mujeres y hombres, pretendiendo resaltar el “íntegro y verdadero amor” dentro de sus vidas, sintiéndose que viven historias de amor, en algún sentido parecidas a las de sus ídolos de las películas o telenovelas que tanto admiran, van sin siquiera sospecharlo, sembrando sobre el camino distorsionadas ideas que sobre el amor, asumen como válidas, enfocándose en carencias que solo refuerzan la idea que valemos más en función del valor que nos otorgue el otro, que sobre el valor que nos demos a nosotros mismos.
Nada más alejado de la realidad, la integridad del amor, es algo natural, discreto que comienza justo en la posibilidad de cuidar de nosotros dentro y fuera de la relación con la pareja, a quien a su vez, le debemos respeto en la misma magnitud que nos lo procuramos a nosotros mismos. Es importante tener en cuenta que respecto a la integridad del amor nada hay que “demostrar”, el amor, cuando es auténtico, extiende su manifestación y protección a quien se resguarda bajo su manto.
A manera de expresar lo que la integridad en el amor significa, me encantaría compartir contigo un pequeño extracto del poeta Khalil Gibran que sobre el matrimonio sabiamente nos plantea:
“… Compartid vuestro pan, más no comáis de la misma hogaza.
Cantad y bailad juntos, alegraos, pero que cada uno de vosotros conserve la soledad para retirarse a ella a veces.
Hasta las cuerdas de un laúd están separadas, aunque vibren con la misma música.
Ofreced vuestro corazón, pero no para que se adueñen de él.
Porque solo la mano de la vida puede contener vuestros corazones.”
Comprender pues que ofrecer nuestro corazón, pero no para que se adueñen de él, parece la forma más sutil y bella para hablar y valorar en su real dimensión el verdadero sentido de la integridad del amor. Tenerlo presente y recordarlo, permitirá mantener la integridad, justamente, del amor que los une tanto en lo individual como en la unión que resguardan dentro de su relación, teniendo siempre en cuenta de apreciar, que la primera y básica integridad que hay que cuidar es la propia.