Tu Mística

Contemplación según la energía de las casas astrológicas

¿Alguna vez te has puesto a pensar en lo que sientes al contemplar algo?

Mi rol como colaboradora de esta revista, es hablar de los aspectos astrológicos del tema propuesto para la edición del momento. Sin embargo, y haciendo honor a mi energía de Luna en Virgo en mi Carta Natal, suelo empezar cada artículo con la etimología y el significado de la palabra clave que se nos propone desarrollar, y en esta oportunidad es “CONTEMPLACIÓN”.

La palabra “contemplación” viene del latín contemplatio y significa “acción y efecto de mirar con atención”. Sus componentes léxicos son: el prefijo con- (todo, junto), templum (templo, lugar sagrado para ver el cielo), más el sufijo -ción (acción y efecto). Tomado de http://etimologias.dechile.net/ tu mística

Wikipedia nos ilustra con esta definición, que para mí es la más clara y accesible:

Contemplación es la observación atenta y detenida de una realidad, especialmente cuando es tranquila y placentera. También es el estado espiritual que aparece en el ser humano cuando practica el silencio mental.

En mi mente analítica, de inmediato se me viene la imagen de los signos más reflexivos, los más sensitivos, quizás los más tranquilos, y hasta los más observadores del zodíaco, pero no queriendo caer en la generalización, siempre aclaro que, en algún área de nuestra vida (casa astrológica de la Carta Natal), puede manifestarse un aspecto reflexivo, atento y contemplativo.

Y es que la energía de los planetas en su transitar por el cielo, por la rueda zodiacal, también ejerce una influencia en algún momento dado de nuestra vida, porque toca un punto sensible de la Carta Natal, como por ejemplo la conjunción actual de Júpiter (el planeta de la expansión y la búsqueda de sentido) con Neptuno (el planeta de la espiritualidad y el misticismo), en Piscis, el signo de la hipersensibilidad, la percepción, la intuición, la imaginación y la magia, y que el 12 de abril tuvo su momento máximo, aunque su influencia se va a dar durante todo el año según expliqué en mi Instagram (https://www.instagram. com/tumistica/), confirmando que es una energía que nos influye a todos.

¿Y es que acaso todo lo antes descrito no necesita de la contemplación para poder ser percibido?

Particularmente, en mi carta natal, la sublime energía de esta conjunción se manifiesta en el escenario de la Casa 3, la de la comunicación, las ideas, el pensamiento, los viajes locales, los hermanos, el entorno… ¿Qué me toca contemplar en este escenario?

En una Carta Astral, que se divide en doce escenarios de vida o casas astrológicas, las que podrían proponer una energía contemplativa, según el concepto relacionado más arriba, serían las casas de agua (4, 8 y 12), implicando que desde sus raíces y en la intimidad de su hogar, el ser acciona sobre la base de sus sentimientos, luego comprende los sentimientos del otro y, por último, es capaz de vivir los de toda la humanidad.

Sin embargo, en las casas de aire (3,7 y 11), el individuo está sujeto a reajustes, gracias a la posibilidad de relacionar su realidad con la realidad de los demás. Y esto implica algo de contemplación ¿O no?

No obstante, si una conjunción como la descrita anteriormente, entre Júpiter y Neptuno en Piscis, se da en las casas de tierra (2,6 y 10), quizás toque practicar la contemplación en cuanto a la generación de recursos propios y acumulación de posesiones. Al igual que si esta energía se manifiesta en las casas de fuego (1,5 y 9), que habla de la liberación de la vitalidad.

Cierro el artículo con estas dos interesantes frases:

“La contemplación es un lujo, mientras que la acción es una necesidad.”

Henri Louis Bergson

“No se puede contemplar sin pasión. Quien contempla desapasionadamente, no contempla.”

Jorge Luis Borges

Lo dejo a tu criterio… ¡Adiós!

Reina Graciosi