El pensamiento sociopolítico y pedagógico de Francisco Giner de los Ríos

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El pE nsami E nto sociopolítico y pEdagógico dE F rancisco gin Er dE los r íos

José Luis Monereo Pérez

Catedrático de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad de Granada.

Presidente de la Asociación Española de Salud y Seguridad Social

Colección: Atelier Laboral

Director:

José Ignacio García Ninet

Catedrático de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social

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7 í ndicE 1. pErspEctiva histórica. El hombr E y su obra ................ 9 2. FilosoFía social y r EFormismo: libEralismo orgánico y r Epublicanismo político ................................. 33 2.1. Liberalismo organicista: El organicismo social. El papel de las sociedades intermedias. Sociedad y Estado orgánico 33 2.2. La reforma educativa (pedagógica) como proyecto político de transformación del paradigma de modernización liberal restringida. Influencia de la antropología krausista 104 3. institucionismo social -libEral y r EFormismo social y jurídico En ginEr dE los r íos .......................... 159 4. bibliogra Fía 221 4.1. De Francisco Giner de los Ríos 221 4.2. Sobre Francisco Giner de los Ríos, su época y recepción actual 222

1. p ErspEctiva histórica . El hombr E y su obra

Francisco Giner de los Ríos (Ronda, 1839-Madrid, 1919) defendió un reformismo social que pretendía «corregir» las desviaciones del liberalismo individualista, sobre la base de un liberalismo social organicista. Ese nuevo liberalismo orgánico (de carácter ético-espiritualista y no biológico) sería el arma ideológica principal de la crítica krausista al régimen «liberal» autoritario de la Restauración. Para él la sociedad no es un simple agregado de individuos, sino un organismo social con entidad propia. La «solución» organicista y corporativa permitirá ampliar las bases del consenso y los resortes de la integración social, y con ello contribuiría a la preservación del orden y la paz social. El liberalismo orgánico krausista será un soporte ideológico-político para defender un doble principio interrelacionado: el principio de intervención estatal en las cuestiones socioeconómicas y el principio de autonomía de los grupos y organizaciones sociales. Uno de los puntos de interconexión entre dichos principios es la propuesta de instauración de un dualismo de la representación política (general y de intereses sectoriales), realizada desde la afirmación del carácter pluralista de la sociedad y desde la consideración de que la persona presenta una multiplicidad de formas de expresión en el tejido social. Es manifiesta la repercusión directa de ese modo de pensar en el largo y controvertido proceso de institucionalización de la reforma social en España.

Giner de los Ríos fue un impulsor de la cultura y de la regeneración política y cultural de nuestro país. Su influencia en los reformistas españoles ha sido directa y penetrante. El mismo fue un gran reformador social y renovador del sistema educativo e impulsor de un republicanismo social que afrontara la solución de la cuestión social. Se puede decir sin ninguna exageración que influyó en todas las corrientes de pensamiento —científicas, literarias, artísticas, políticas

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y sociales— donde se suman personalidades como Emilio Castelar1, Joaquín Costa2 , Manuel Azaña, Azorín, Canalejas, toda la escuela krausista de Oviedo —que contó nada menos que con Adolfo Posada, Adolfo Álvarez Buylla—, Luis Morote, Piernas Hurtado, Rafael María de Labra, Eugenio Montero Ríos, Alfredo Calderón, Federico de Castro, Tomás de Tapia, Segismundo Moret, Vicente Santamaría Paredes, Eduardo Pérez Pujol, José Ortega y Gasset, Miguel de Unamuno, Antonio Machado, Juan Ramón Jiménez, Pedro Salinas, C. Bernardo de Quirós, José Castillejo, Manuel García Morente, Julián Besteiro, Fernando de los Ríos, Alberto Jiménez Fraud, Juan Marichal, Pardo Bazán, Josep Pijoan, Luis de Zulueta, Manuel B. Cossío, y un largo etcétera. Por no hablar de su enorme influencia en Latinoamérica. Hubo una corriente krausista impulsada por él, al propio tiempo una influencia que va mucho más allá del krausismo como corriente específica de pensamiento cultural, social, político, sociológico y jurídico. Ello se plasmaría en respuestas innovadoras como la creación de la Institución Libre de Enseñanza (10 de marzo de 1876) y el impuso a las reformas sociales reflejando la influencia en la creación de la Comisión de Reformas Sociales, el Instituto de Reformas Sociales y el mismo Instituto Nacional de Previsión, entre muchas instituciones y organismos. Esto supone que su influencia se proyectó desde el último tercio del siglo x I x y el primer tercio del siglo xx . Luego no desaparecería, pues tuvo gran influencia en Latinoamérica3 y tras la recuperación de la democracia constitucional en nuestro país se retomarían muchas de sus ideas y propuestas para construir en nuevo orden democrático.

Su filosofía era conciliadora y armonizadora entre las diversas tendencias consideradas radicales (liberalismo individualista y socialismo revolucionario). Concebía las relaciones entre el Estado y la Sociedad como instancias orgánicamente estructuradas y dotadas de autonomía. Tenía una concepción que revalorizaba el papel del Derecho, pues éste era el instrumento que ordenaba al pro-

1. Figura importante dentro del republicanismo liberal clásico español, marcando diferencias nítidas con el republicanismo social. Véase, señaladamente, CASTELAR, E.: La fórmula del progreso-Discursos (1870/1892), edición y estudio preliminar, «El republicanismo liberal y la idea de progreso: Emilio Castelar» (pp. VII-LVI), a cargo de J.L. Monereo Pérez, Granada, Comares (Col. Crítica del Derecho), 2010.

2. COSTA, J.: Teoría del hecho jurídico individual y social, Prólogo de Nicolás María López Calera, edición al cuidado de J.L. Monereo Pérez, Granada, Comares (Col. Crítica del Derecho), 2000; COSTA, J.: La ignorancia del derecho y sus relaciones con el status individual, el referéndum y la costumbre, Barcelona, Manuel Soler, editor, s/f. Reedición: Buenos Aires, Ediciones Jurídicas Europa-América, 1957, con Prólogo de Santiago Sentís Melendo (Agosto de 1957). Véase ORTí, A.: En torno a Costa (Populismo agrario y regeneración democrática en la crisis del liberalismo español), Madrid, Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, 1996, espec., págs. 73 y sigs., y 473 y sigs.

3. Esa influencia destaca queda acreditada en VV.AA.: El krausismo y su influencia en América Latina, Prólogo de Teresa Rodríguez de Lecea (Instituto Fe y Secularidad) y Dieter Koniecki (Fundación Friedrich Ebert), Presentación de José Prat (Presidente del Ateneo de Madrid), Madrid, Edita Fundación Friedrich Ebert-Instituto Fe y Secularidad, Imprenta Calatrava, 1989. Se analiza globalmente esa influencia y se recogen estudios más detallados de esa influencia en países latinoamericanos: México, Brasil, Bolivia, Argentina, Puerto Rico, Cuba, Ecuador y Costa Rica. La influencia en Colombia se subraya en la Presentación de José Prat.

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