A •U
Diciembre de 2021
7
L •A
Nº 33, Nueva Época
HOMO APOCALIPTICUS
07
Isaac Martín
ECLESIOLOGÍA PANDÉMICA: CÓMO UN VIRUS NOS OBLIGÓ A MEJORAR 11 Daniel Bosqued
PANDEMIA, IGLESIA Y LOS MOKEN 16 Stefan Albu
IGLESIA HÍBRIDA 25 Samuel Gil Soldevilla
«I’M NOT A VIRUS»... 29 José Álvaro Martín
EL LAODICENSE QUE LO TENÍA TODO 35 Sarai de la Fuente Gelabert
LEER LA BIBLIA CON PAUL RICOEUR 41 José Álvaro Martín
A •U
7L
•A
SUMARIO página
página
05
06
Editorial Manel López Ariza
página
16
Pandemia, iglesia y los moken Stefan Albu
página
página
Novedades de Aula7activa.org
Homo Apocalipticus Isaac Martín
Eclesiología pandémica: Cómo un virus nos obligó a mejorar Daniel Bosqued
página
página
página
«I'm not a virus», la pandemia analizada desde la filosofía por Agamben, Zizek, y Han José Álvaro Martín
El laodicense que lo tenía todo Sarai de la Fuente Gelabert
25
Iglesia híbrida Samuel Gil Soldevilla
07
29
11
35
página
41
Leer la Biblia con Paul Ricoeur José Álvaro Martín
Aula7 está abierta a todo tipo de colaboraciones. Los artículos publicados expresan exclusivamente las opiniones de sus autores.
Revista Aula7, Nº 33, Nueva Época – Diciembre de 2021 PUBLICACIÓN DE LA ASOCIACIÓN DE ESTUDIANTES Y GRADUADOS UNIVERSITARIOS ADVENTISTAS DE ESPAÑA Edita Aula7activa editora digital de AEGUAE // Depósito Legal B-6934-2004 Consejo Directivo de AEGUAE PRESIDENCIA Manel López Arias // VICEPRESIDENCIA Aarón Morán, Samuel Prieto // SECRETARÍA Isabel Rodríguez // TESORERÍA Rocío Orellana // VOCALES Paula Orellana, Narcis Dragomir, Isaac Martín, Isaac Llopis, Sarai de la Fuente, Ramon Gelabert // VOCALES UAE // Víctor Armenteros, Jonatán Bosqued REDACCIÓN Ramon-Carles Gelabert // MAQUETACIÓN Alexandra Mora e Isaac Chía // CARTEL DE PORTADA Narcis Dragomir // EMAIL aula7activa@gmail.com // WEBS www.aeguae.org · https://aula7activa.adventista.es/
Tu biblioteca digital cristiana con descargas gratuitas
ESTUDIOS DE ECLESIOLOGÍA ADVENTISTA · VOLUMEN II
SOBRE EL SUFRIMIENTO, LA MUERTE Y LA FELICIDAD
LA IGLESIA DE CRISTO
ESTUDIOS DE ECLESIOLOGÍA ADVENTISTA · VOLUMEN III
Su misión y su ministerio en el mundo
Comité de Investigación Bíblica · División Intereuropea · IASD
LA TEOLOGÍA Y LA PRÁCTICA DEL BAUTISMO
Josep Antoni Álvarez
Comité de Investigación Bíblica · División Intereuropea · IASD
EL VALOR RELIGIOSO DEL AYUNO A LA LUZ DEL NUEVO TESTAMENTO
MODERNIDAD, POSMODERNIDAD Y MORAL
Juan Ramón Junqueras Vitas
Vittorio Fantoni
PROCESO Y REHABILITACIÓN DE MIGUEL SERVET José Antonio Valtueña
rAula7
4
EDITORIAL Manel López Ariza Presidente de AEGUAE
E
n otros tiempos, en otros países, pero nosotros no podíamos pensar que aquí y ahora fuéramos a vivir una situación como la que estamos viviendo en este año 2020. El orgullo de los países occidentales capitalistas del primer mundo se ha visto herido y asistimos con cierta dosis de incredulidad y sorpresa a una pandemia que parecía reservada a otros o a la pantalla del cine y la televisión.
Atlántico y una proporción elevada de jóvenes han enriquecido sin duda este encuentro virtual. Tenéis en vuestras manos diferentes artículos que giran en torno a este tema. Varios de ellos son la base de las ponencias que se pudieron seguir en directo y ahora en diferido en la página de JAE online (https://bit.ly/aeguae2020).
Sin apenas avisar nos hemos tenido que adaptar a esta realidad que se ha instalado en nuestra cotidianeidad. Las implicaciones que está teniendo sobre la economía, la política y las relaciones sociales están siendo más profundas y trascendentes de lo que podíamos prever cuando empezó el confinamiento.
Esperamos que esta primera Convención transmitida online, la visión de sus ponencias en diferido o la lectura de esta revista sirva para lo que esta Asociación siempre ha pretendido, aportar debate, ideas y propuestas con el fin, en este caso, de convertir esta crisis en una oportunidad para renovar y actualizar la misión que la iglesia siempre ha tenido, proclamar el evangelio para el presente y para un futuro lleno de esperanza, sin dolor ni sufrimiento. //
Desde la religión siempre ha existido la tendencia a ofrecer explicaciones y soluciones a fenómenos que como este rompen con lo previsto y esperado y nos sitúan ante escenarios desconocidos que generan dolor e incertidumbre. Y nuestra Iglesia por su vocación profética tiene una sensibilidad especial con estos temas. Abordarlos con una visión amplia y teológicamente acertada es una necesidad a tener presente en estos tiempos. Es por ello que desde AEGUAE y pese a las limitaciones impuestas por la situación sociosanitaria de nuestro país, hemos decidido convocar la XLVI Convención y abordar esta problemática. Ha sido una Convención reducida en presencialidad, pero amplia en alcance y diversidad. Hermanos en la fe del otro lado del
5
rAula7
NOVEDADES UNA CELEBRIDAD EN EL OLVIDO Alfred-Félix Vaucher 722 páginas La Venida del Mesías en gloria y majestad al decir de Francisco Antonio Encina Armanet, filósofo e historiador chileno es: «…el libro chileno que ha alcanzado la más alta cumbre como esfuerzo de inteligencia, o sea como trabajo de pensamiento encaminado a ahondar una concepción, y a exponerla al mundo con la fuerza espiritual necesaria para herir su atención y penetrar profundamente en el alma humana, con independencia del tema. Es el que ha alcanzado mayor celebridad y el único que ha repercutido en el pensamiento universal hasta el instante en que escribimos [1917].» Manuel de Lacunza jesuita chileno es, sin lugar a dudas, el antecedente intelectual más señero del adventismo contemporáneo. Es por ello que Alfred-Félix Vaucher dedicó toda una vida a estudiar la obra de Lacunza. Vaucher fue un pionero en la labor de documentar exhaustivamente los orígenes y puntos de convergencia de las doctrinas adventistas con los escritos de numerosos autores cristianos y judíos, y entre ellos sobresale Manuel de Lacunza y Díaz, y su magna obra La Venida del Mesías en gloria y majestad. Une célébrité oubliée: Le P. Manuel de Lacunza y Díaz (1731-1801) es la obra publicada de un erudito adventista más citada en el mundo académico, sin duda una obra de referencia para todos los expertos en la obra de Lacunza. En la segunda edición española los editores han añadido más de 900 pies de página con las obras citadas por el autor que se pueden consultar en línea por Internet, de esta manera el lector puede consultar de primera mano muchas de las fuentes que el autor, A.-F. Vaucher, cita a lo largo del libro y que encontró en sus casi cuarenta años de investigación en los fondos bibliográficos de bibliotecas y archivos, tanto públicos como privados, de Europa y América.
Disponible en aula7activa.org rAula7
6
HOMO APOCALIPTICUS Isaac Martín Estudiante de Filología Hispánica
H
3. Fase de negociación. Negociar consigo mismo o con el entorno, entendiendo los pros y contras de la pérdida. Se intenta buscar una solución a la pérdida a pesar de conocerse la imposibilidad de que suceda. 4. Fase de dolor emocional (o depresión). Se experimenta tristeza por la pérdida. Pueden llegar a sucederse episodios depresivos que deberían ceder con el tiempo. 5. Fase de aceptación. Se asume que la pérdida es inevitable. Supone un cambio de visión de la situación sin la pérdida; siempre teniendo en cuenta que no es lo mismo aceptar que olvidar.
emos hecho de la inestabilidad nuestro hábitat, hemos construido nuestra vida entre crisis económicas y hemos luchado por un futuro cuando todo parece indicar que no lo habrá. Somos el Homo Apocalipticus, aquellos que tenemos que convivir con las catástrofes como forma de vida.
Vivimos en un ambiente distópico, donde la percepción de que algo acabará con la civilización humana, ya sea la nanotecnología, la robótica, el cambio climático o las armas nucleares está presente a cada segundo, en cada telediario, videojuego, novela, película o canción.
Esta evolución se aplica de lleno a la mayoría de problemáticas con las que convivimos. La propia iglesia lleva una deriva preocupante que nos obliga a enfrentarnos a estas fases. De forma casi imperceptible, se ha instalado una apatía generalizada en los creyentes y un desarraigo progresivo. La secularización es ese proceso que lleva a una sociedad a un proceso de desreligiosización. España es uno de los países donde más rápido ha avanzado este cambio. Un ejemplo, que sirve de barómetro, es que sobre el año 2000 el 75% de las bodas eran por la vía católica, mientras que en 2018 no llegaban al 22%. Este caso no es aislado, la mayoría de países de Europa viven una tendencia similar. En Francia, tal y como recoge Guillaume Couchet en su libro Cómo nuestro mundo ha dejado de ser cristiano: Anatomía de un derrumbe (Seuil, 2018), en 1965 el 94% de la población francesa estaba bautizada, mientras que ahora no supera el 30%.
En medio de una situación repleta de incertidumbre, ¿cuál es la actitud correcta para afrontar el Apocalipsis? Nuestra realidad está continuamente alterada por procesos que nos obligan a hacer un esfuerzo por asimilar. La presencia continua de la muerte, las restricciones, el confinamiento, el calentamiento global, la violencia de género son algunos de los casos de situaciones que perturban nuestra paz y nos obligan a realizar un intenso ejercicio de asimilación. Este proceso, que podríamos llamar las fases del duelo según el modelo descrito por el libro de la doctora Elisabeth Kübler-Ross (1926-2004) On death and dying, se manifiesta en cinco fases: 1. Fase de negación. Negarse a sí mismo o al entorno que ha ocurrido la pérdida 2. Fase de enfado, indiferencia o ira. Estado de descontento por no poder evitar la pérdida que sucede. Se buscan razones causales y culpabilidad.
En las iglesias, la percepción de este cambio ha sido gradual. Primero llegó la dificultad de bautizar a nuevos miembros, ya que la sociedad posmoderna no tenía una base cristiana sobre
7
rAula7
PHOTO BY JASPER GARRATT ON UNSPLASH
HOMO APOCALIPTICUS
la que lanzar el mensaje adventista. Sin nuevos miembros la misión de la iglesia de crecer y compartir el evangelio se estancó. El mecanismo de crecimiento orgánico de las iglesias tuvo que adaptarse a una sociedad donde compartir el evangelio era hacer proselitismo. La brecha entre la “iglesia” y el “mundo” se fue ampliando hasta convertirse en un abismo. Pronto el reto no fue ya cómo hacer que la gente viniese a la iglesia, sino cómo evitar que los jóvenes que habían nacido en ella huyesen. ¿Puede la pandemia profundizar esta crisis o ser una oportunidad para invertir la dinámica? ¿Cómo podemos convertir esta tendencia a la irrelevancia en un trampolín hacia el redescubrimiento de nuestra identidad y propósito? Muchos no lo sabéis, pero ATV, siglas de Alza tu voz, nació hace tres años en un autobús de vuelta de un campamento. Muchos de nuestros amigos habían dejado de venir a las actividades de la iglesia y pesaba sobre el ambiente un ambiente de depresión y decadencia. En grupos, de forma individual, nos dedicábamos a
«¿Cómo podemos convertir esta tendencia a la irrelevancia en un trampolín hacia el redescubrimiento de nuestra identidad y propósito?». rAula7
8
ISAAC MARTÍN
ad- y el verbo venire. Y significa llegada o llegar. La raíz de nuestra esencia denominacional se encuentra en la segunda venida (adventus) de Cristo.
expresar nuestro desánimo, a criticar a todo y a todos. Nos retroalimentábamos con nuestra propia tristeza y llegó un punto en el que toqué fondo. Llegué a la conclusión de que necesitábamos canalizar esa frustración hacia algo constructivo. Lo hablé con personas de confianza y así surgió Alza tu voz, un espacio no solo para que salgan jóvenes al escenario, sino para que se desahoguen con todo aquello que les chirría y desanima de su experiencia cristiana, generando un debate constructivo y conectándonos con la idea de iglesia y comunidad.
Durante años hemos predicado el mensaje de los tres ángeles bajo la premisa de que existía un mundo pecador que vivía tranquilo en sus quehaceres y al que nosotros exhortábamos a arrepentirse, dada la inminencia del retorno del Mesías. Sin embargo, ¿qué sentido tiene esto en una sociedad pandémico-apocalíptica? Hoy en día, salir a la calle y gritar que el mundo se va acabar tiene el mismo sentido que gritar que uno más uno son dos. ¿Por qué? Porque la misma ciencia nos dice que o cambiamos o nos quedan cincuenta años de vida en el planeta. El mensaje de arrepentíos o moriréis no tienen ningún efecto cuando todo el mundo va a morir y lo sabe. Con lo cual, se vuelve imprescindible reflexionar sobre el mensaje del libro de Apocalipsis para devolverle su sentido.
Sin saberlo, lo que hicimos fue atravesar las fases del duelo, pero añadiendo una última que fue la clave de todo: la proposición. Necesitamos llevar a cabo un profundo duelo como iglesia, como comunidad y como personas individuales, para poder reconectarnos aceptando la realidad tan decadente como es, para poder emplear todas nuestras fuerzas en volvernos propositivos y dialogantes. Negar que la iglesia está en una situación preocupante, fingir que todo está perfecto, no hará sino lastrarnos en nuestra misión de reencontrar un sentido. Quedarnos en la fase de la ira tampoco nos ayudará, a veces los duelos se expresan a través de la rabia, pero no debe ser el fin, sino el medio hacia una nueva etapa. Por último, tampoco podemos enquistarnos en la depresión, en que la iglesia está mal, en que nada funciona, en que los jóvenes se van, porque mantenernos en ese estado es destructivo para nosotros mismos.
No es la primera vez que se hace un ejercicio para rescatar de la irrelevancia este libro y dotarlo de un significado contemporáneo. En el siglo XIX hubo un gran interés por libros como Daniel y Apocalipsis, que tradicionalmente estaban relegados a un segundo plano por sus crípticas palabras. Este interés por las profecías coincidió con un siglo de cambios, donde autores como Marx y Darwin habían cuestionado la cosmovisión cristiana y donde las ideas ilustradas de progreso mantenían que un mundo mejor era posible mediante la tecnología, la ética y la secularización.
Este esquema que tanto aparece hoy, se puede aplicar a cada concepto en debate. El apocalipsis, el veganismo, la vida sana, la nocividad de las adicciones, hoy en día la sociedad ha adoptado todos nuestros mensajes. ¿Ha acabado ya nuestra misión? ¿Tenemos algo que decir aún?
Frente al orgullo y optimismo de una sociedad por rescatarse a sí misma y evolucionar, el adventismo hizo una relectura de Apocalipsis totalmente opuesta al paradigma dominante. El mundo no solo no iba a mejorar, sino que iba a ir progresivamente a peor hasta que llegase el fin del mundo.
Yo hoy os propongo aplicarlo al concepto del Apocalipsis para ver cómo podemos convertirlo en un mensaje relevante y necesario.
¿Pero qué hay de revolucionario hoy en día en gritar y excitar los miedos de la gente? Solo con encender el telediario cualquier persona tendrá suficientes motivos para sentir ansiedad.
El adventismo lleva predicando casi doscientos años la llegada del fin del mundo, prestando una gran atención a todos los sucesos y dedicando cientos de cultos a tratar de poner nombre a los símbolos apocalípticos. La propia palabra adventista viene del latín adventus, del verbo advenire, una suma de la preposición
¿Qué alternativas nos ofrece nuestra situación para poder convertir el mensaje de los tres ángeles en algo relevante y necesario en un mundo pandémico?
9
rAula7
HOMO APOCALIPTICUS
Para empezar, busquemos el paradigma hegemónico, es decir, la reacción natural de la gente. Esta no es otra que el miedo. El miedo y las teorías de la conspiración, que actúan como tiritas para tratar de dar un orden lógico a fenómenos inexplicables como la muerte, la pérdida o la soledad.
Y aquí tenemos nuestra gran aportación a la sociedad y nuestra ventana a la relevancia. Tenemos más experiencia que nadie en convivir con personas que reciben las noticias catastróficas con gozo cínico, aquellos que ponen fechas, o quienes viven en ese éxtasis autodestructivo de querer acelerar el fin del mundo.
Frente a este cóctel de miedo, alarmismo, conspiranoia y fanatismo, podemos convertir el mensaje de los tres ángeles en un medio de traer paz. En un antídoto a la ansiedad y a la inseguridad. La confianza en Dios a pesar del mal, la promesa de un mundo sin dolor y la seguridad de que Dios nos acompaña a través de los sucesos de los últimos tiempos, podemos convertir la paranoia en fe, el miedo en paz, el alarmismo en calma.
Un mensaje de calma frente al apocalipsis y aprender a adoptar una actitud apropiada frente a las catástrofes es algo que el mundo está pidiendo y que nosotros podemos aportar. Sin embargo, también podemos caer en la actitud contraria. Convertir los eventos del fin en un show, en un clickbait, en tergiversar la realidad para jugar con las esperanzas de la gente. En abonarnos a las teorías conspirativas y convertir la salvación en un negocio.
«Donde hay amor no hay miedo. Al contrario, el amor perfecto echa fuera el miedo, pues el miedo supone el castigo. Por eso, si alguien tiene miedo, es que no ha llegado a amar perfectamente» (1 Juan 4:18).
Yo he vivido en mi propia carne cómo personas queridas venían emocionadas por un video de Obama que anunciaba la ley dominical, cuando en realidad era una traducción tendenciosa. También he visto videos que mezclaban opiniones políticas con las profecías.
«Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo» (Romanos 15:13).
Por eso es tan importante acceder a la Biblia con una actitud confiada, de calma, en una actitud de permanente vigilia, no de histeria.
«No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús» (Filipenses 4:6,7).
No solo necesitamos reencontrar el sentido al mensaje apocalíptico, sino que tenemos el reto de, con la ayuda del Espíritu Santo, abrir la Biblia buscando respuestas a los problemas de nuestro siglo. Como en 1844, se presenta ante nosotros una época de cambios radicales y retos que solo podremos superar a través de un diálogo intercultural, la autocrítica y una relectura bíblica de nuestra identidad. El futuro de la iglesia y nuestra relevancia en el mundo depende de ello. ¿Lo lograremos? //
Zizek, un filósofo contemporáneo clave para analizar la actualidad, propone que adoptar una postura apocalíptica adecuada es imprescindible. Para ello, bucea en la Biblia en busca del sentido del apocalipsis y rescata el texto en el que Jesús predice que no quedará piedra sobre piedra en el templo, pero inmediatamente después recuerda que «cuando oigáis estruendo de batallas y noticias de guerra, no os alarméis, eso tiene que suceder, pero no es todavía el final». A lo que él comenta: «Estas palabras revelan una sabiduría extraordinaria [...]. Su mensaje es: sí, por supuesto, se producirá una catástrofe, pero vigilemos con paciencia, no creamos en ello, no nos dejemos atrapar por extrapolaciones precipitadas, no nos entreguemos al placer realmente perverso de pensar “¡Ha llegado el momento!” [...] En lugar de llevarnos a un éxtasis autodestructivo, adoptar la postura apocalíptica apropiada es, hoy más que nunca, el único modo de mantener la calma.»
rAula7
10
ECLESIOLOGÍA PANDÉMICA:
CÓMO UN VIRUS NOS OBLIGÓ A MEJORAR Daniel Bosqued Doctor en Teología. Rector del Campus Adventista de Sagunto
E
ste año elegir el tema era fácil. ¿De qué hablar hoy en la iglesia, pues precisamente sobre qué nos está ocurriendo fruto de la pandemia?
tienen tantas muertes por genocidios, hambrunas o pobreza extrema que el virus es literalmente lo de menos. Por otro lado, es una obviedad reconocer que en el mundo han pasado cosas muchísimo más graves. En España antes de ayer se vivió una atroz guerra civil con cientos de miles de muertes. La Segunda Guerra Mundial acabó con la vida de unos 60 millones de personas. Cuando muchos de nuestros padres nacieron media Europa estaba destruida.
Sin embargo, la metarreflexión en sí es complicada porque no es fácil saber lo que nos está pasando. Hace un tiempo que se viene diciendo que vivimos en un entorno VICA (volátil, incierto, cambiante y ambiguo). Eso implica que no es sencillo leer en tiempo real lo que ocurre a la iglesia en medio de esta pandemia mundial. O hacia dónde vamos. Solo el tiempo nos dará la perspectiva real para analizar nuestro presente.
Así que sí, es un fenómeno global. Ha trastocado rotundamente todos los planes del 2020. Para el que ha perdido un ser querido, ha tenido que cerrar su negocio, ha perdido ahorros o el trabajo esta pandemia ha sido desastrosa. Pero es bueno que tengamos esto en mente a la hora de hacer disquisiciones proféticas tremendistas o llegar a conclusiones precipitadas sobre un virus y su impacto en la humanidad.
Para empezar, creo que resulta útil relativizar la pandemia, o ponerla en perspectiva. No se trata de conspirar sobre el control mundial, el 5G o hablar de Bill Gates. Tampoco se trata de negar su realidad, sus consecuencias nefastas, sus muertes, ni todos los planes que ha truncado en este 2020. Este año han muerto en el mundo aproximadamente 1,5 millones de personas por covid. Se dice pronto, pero cada una de ellas tiene un valor infinito.
¿Y a nivel eclesiástico? Todavía tendremos que analizar los daños o los efectos. No solo económicos, sino la realidad de iglesias vacías durante meses. Pronto hará un año y hay iglesias que aún no se han abierto. Hay miembros que pasarán un año sin congregarse, y algunos que quizá ya no vuelvan. ¿Qué realidad nos encontraremos?
¿Por qué hablamos de relativizar la pandemia entonces? Pues porque si ampliamos la realidad a otros lugares de la tierra actualmente hay más de 80 millones de refugiados y desplazados por diferentes causas. Y cada año mueren al año por hambre 10 millones de personas.
Esto también hay que ponerlo en perspectiva. La Iglesia como tal ha experimentado muchas dificultades a lo largo de la historia. Muy pronto comenzaron los problemas para los creyentes. Comenzando por los apóstoles, pocos murieron por causas naturales.
Estos datos no hunden las bolsas ni los mercados. No llena los periódicos, pero el hambre mata ocho veces más personas al año. Y la vacuna ya está inventada: es un simple plato de arroz. Es triste, pero hay lugares del mundo donde no se han enterado de la pandemia, no porque no haya llegado el virus, sino porque
11
rAula7
ECLESIOLOGÍA PANDÉMICA: CÓMO UN VIRUS NOS OBLIGÓ A MEJORAR
Si tomamos los mensajes a las siete iglesias de Apocalipsis, como un vistazo global de la historia de la iglesia tenemos por ejemplo la iglesia de Esmirna, es la de las persecuciones. Hubo derramamiento de sangre por miles y decenas de miles. El mensaje lo anunciaba: «No temas lo que estas por sufrir» (Apocalipsis 2:10). La persecución de Trajano a comienzos del s. II. La de Diocleciano a comienzos del s. IV. Siglos después Tiatira: la iglesia perseguida y torturada durante toda la Edad Media. Sin embargo, la iglesia sobrevivió a las persecuciones. Incluso salió reforzada: «Atormentadnos, condenadnos, desmenuzadnos, que vuestra maldad es la prueba de nuestra inocencia. [...] De nada os vale [...] vuestra crueldad.» No era más que una instigación más poderosa para traer a otros a su fe. «Más somos cuanto derramáis más sangre; que la sangre de los cristianos es semilla» (Tertuliano, Apología, párr. 50, citado en El conflicto de los siglos, p. 39)
Si no fuese por ellos, probablemente hoy seríamos menos adventistas en España que hace 20 años. Esto no es ningún secreto. Eso, para la iglesia, es más grave que la pandemia. Por otro lado, hay mucha gente insistiendo en que después de esto el mundo nunca será igual. Yo no soy experto en nada, y no tengo ni idea de lo que va a pasar. Pero hay una realidad empírica: el ser humano olvida muy pronto y se adapta muy rápido.
«Pero hay una realidad empírica: el ser humano olvida muy pronto y se adapta muy rápido».
¿Por qué lo creo? Ya ha ocurrido antes. En 2001 el atentado contra las Torres Gemelas generó el pensamiento generalizado de que el mundo nunca volvería a ser igual. Sin embargo, aunque no sea igual, se parece bastante. ¿Qué ha cambiado en el día a día? No poder llevar líquidos en los aviones y nos tenemos que quitar los zapatos. ¿Pero lo demás?
PHOTO BY DAVID CLODE ON UNSPLASH
Esta realidad representa un principio que se ha mantenido a lo largo de la historia. Y es que siempre que la iglesia pasa por dificultades externas, crece. Nosotros lo hemos vivido en nuestro país. ¿Cuándo se sentaron las bases de nuestra iglesia? Cuando la iglesia estaba prohibida, o cuando no había dinero, o las cosas eran difíciles. Los más veteranos saben perfectamente lo que es tener complicaciones de verdad (más allá de tomarse la temperatura y tener aforo limitado).
En 2008 vivimos una terrible crisis financiera. Fue un terremoto económico mundial. El estallido de la burbuja inmobiliaria fue tremendo. Muchos expresaron: «Nunca más haremos este tipo de negocios.» Se crearon nuevas regulaciones internacionales. Pues bien, ¿sabéis de qué se hablaba el año pasado? De otra burbuja inmobiliaria, algo iba a pasar. El mundo de nuevo cayó en la especulación con precios de viviendas disparados e inversiones arriesgadas.
Desde que las cosas nos van mejor, hemos empezado a perder miembros nacionales. Nuestros hermanos inmigrantes lo saben:
rAula7
Puede ser que el 2021 siga siendo difícil, tengamos que adaptar reuniones, congresos, aforos, haya apreturas económicas, ocurra un desarrollo exponencial de la educación a distancia. Pero cuando se alcance una nueva normalidad –la que sea– probablemente olvidaremos esto que hemos vivido y volveremos a llenar estadios y a llenar bares y restaurantes
12
DANIEL BOSQUED
¿Qué ha cambiado en el día a día?: límites en hipotecas, ampliaciones de capital, fusiones bancarias. Algún resto queda. Pero el ser humano en seguida se apunta a nuevos proyectos de corrupción y especulación.
para un mundo en el que las cartas tardaban tres meses en ir y tres meses en volver. Esta pandemia quizá ayude a reconsiderar los niveles administrativos, los cargos, las funciones, los eventos y así conseguir supeditar siempre la estructura a la misión.
En 2020 hemos vivido la pandemia. Probablemente de esto también nos dejé algún cambio permanente. Se habla de mayor teletrabajo, menos viajes interoceánicos, más lavado de manos. Más respeto por los orientales cuando alguien se ponga mascarilla. Pero en cuanto el virus dé algo de tregua, probablemente una vez más la memoria del ser humano sea muy corta.
Sin embargo, no hace falta mirar hacia arriba para criticar. El problema de fondo siempre ocurre en la iglesia local. En algún momento la iglesia dejó de ser iglesia, y se convirtió en un evento. El mismo evento que este año nos han impedido celebrar. Por eso quizá la pandemia no ha puesto en riesgo la iglesia, sino lo que nosotros hemos hecho de la iglesia. Eso es lo que ha quedado en entredicho.
Entonces… ¿Qué nos va a quedar de todo esto en la iglesia? ¿De qué forma habrá afectado esta pandemia a nuestro día a día? ¿Seguiremos con iglesias vacías? ¿Hay cambios que han llegado para quedarse? Una forma de enfocarlo en positivo para mejorar pasa por aceptar que hay elementos de la iglesia que han quedado en entredicho.
¿Y qué es la iglesia? Hay muchas definiciones teológicas. El término deriva de ekklesía y tiene que ver con un grupo de personas llamadas de un lugar a otro. Originalmente designaba una asamblea o una congregación. Básicamente es la asamblea de creyentes tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo Testamento.
ESTRUCTURA Y ADMINISTRACIÓN Tenemos una organización a nivel mundial que nos ha traído hasta aquí. Ha funcionado para un tiempo y un espacio. Pero probablemente hoy es demasiado cara. Demasiado lenta. Y muy poco eficiente.
¿Cómo se forma una iglesia? Según la Biblia la iglesia es una realidad sobrenatural que emerge cuando hay dos o más personas congregadas en el nombre de Jesús. «Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos» (Mateo 18:20).
Nuestra iglesia tardó meses en reaccionar ante una realidad, que es cierto, nos pilló a todos por sorpresa. Pero con otro tipo de estructuras/departamento/funciones quizá se hubiese reaccionado antes. Gran parte de la respuesta dependió de los pastores locales, y algunos me consta que fueron rápidos y eficientes en la atención a los miembros.
Es una realidad sobrenatural, porque es algo mayor que la suma de sus partes. De alguna forma se parece al matrimonio. El matrimonio es la unión de un hombre y una mujer en un pacto con vocación eterna. Pero lo que se forma en una boda es algo más que uno más uno. Se forma una nueva realidad que trasciende a las dos personas que lo componen.
La paradoja es que algún tipo de administración es imprescindible para llevar los planes a la realidad. El riesgo es que acabe siendo un fin en sí mismo porque cuando ocurre eso la misión queda supeditada a la administración.
La iglesia, por tanto, revela el proyecto divino en el que el hombre alaba, adora y sirve a Dios en grupo. Y esto es así en la tierra como en el cielo.
Siempre habrá ese debate entre el equilibro administrativo. Y este planteamiento no es una enmienda a la totalidad de nuestra iglesia. Pero la pandemia ha puesto de manifiesto que la maquinaria administrativa de la iglesia está diseñada para otra realidad.
Por algún motivo especial, Dios no concibe la profesión de fe en solitario, y por ello diseñó un pueblo en la Tierra, que congregara a los creyentes y así se pudiesen organizar para cumplir una misión.
George Knight hace unos años, ya hizo un certero análisis al respecto y pone numerosos ejemplos en el libro Nuestra administración. Llega a decir que nuestra estructura está pensada
¿Entonces una persona sola no es iglesia? No.
13
rAula7
ECLESIOLOGÍA PANDÉMICA: CÓMO UN VIRUS NOS OBLIGÓ A MEJORAR
¿Y dos o más congregados en el nombre de Jesús son iglesia? Sí.
porque su cámara se vea en 4K, sino porque es mi pastor. Me conoce, ha preparado un mensaje especial para mi familia de la iglesia. Es para mi iglesia y para mí.
¿Y dos o más reunidos por Zoom? ¿Son iglesia? Como escuché recientemente: La distancia no rompe una familia. Yo no dejo de ser familia, aunque hable por FaceTime o por Zoom. Por eso, no hay pandemia que pueda romper la iglesia. No hay distancia social que pueda desintegrar la iglesia. La iglesia está unida por lazos de sangre espiritual mucho más fuertes que la distancia o la virtualidad.
ADORACIÓN
Sin embargo, con nuestro modelo de iglesia reducida a evento en estos meses nos han surgido muchos interrogantes:
Esto no debe ser excusa para que haya música de mala calidad, o que no se invierta en medios, en ensayos, en crear grupos. Al contrario, hay que adorar a Dios con la mejor música que podamos producir. Cada uno con sus limitaciones. La mejor música que podamos producir JUNTOS como familia de la iglesia.
Si la adoración se tratara de escuchar buena música de alabanza cristiana, ¿por qué tengo que soportar al vecino de banco que suena desafinado? ¿No es mejor poner una lista de reproducción de Youtube o Spotify mientras canto solo en mi habitación? ¿Por qué entonces tengo que cantar en mi iglesia?
¿Qué sentido tiene un sábado arreglarse, coger el coche hasta la iglesia más cercana si puedo simplemente conectarme? Todos nos hemos planteado ese atajo mental estos meses. Incluso hemos disfrutado de la paz de un sábado sin las prisas, disfrutando un culto en familia, en el campo.
Y es que adorar con la música, no es escuchar una canción preciosa, es compartir a pleno pulmón con la familia de la iglesia la felicidad de la salvación.
¿En qué hemos convertido la iglesia si para disfrutarla es mejor no ir? Dejadme que os presente una propuesta: la pandemia nos ha revelado más que nunca que el sentido de la Iglesia no es recibir, sino compartir.
Si vengo a la iglesia solo a recibir, mejor que no venga. La iglesia fue diseñada para compartir entre todos una misión. Para poner cada uno aquello que le falta al otro. Para desafinar juntos. Para abrazarnos. Para reducir la distancia social hasta estar hombro con hombro.
CULTOS Si el sentido de la iglesia fuese recibir un mensaje bueno (nutrirnos espiritualmente), estos meses se ha abierto el supermercado espiritual como nunca, con un sinfín de predicadores. Hay iglesias con producciones audiovisuales envidiables.
VIRTUALIDAD ¿Entonces qué hacemos con lo virtual? ¿No es iglesia? ¿Cómo nos relacionamos con Jesús? De forma virtual. No lo vemos. No siempre lo percibimos. No por ello somos menos iglesia, aunque nuestra relación con Jesús sea por «videollamada» con la oración.
Si la iglesia se trata de escuchar un culto, ¿por qué no escuchar uno especialmente bueno?
El concepto de iglesia siempre ha abarcado mucho más que la presencialidad. Las cartas de Pablo eran los correos de hoy en día, o reuniones de Zoom. La gente se reunía y leían en voz alta los mensajes de los discípulos. Pablo estaba lejos, pero se sentía muy cerca de los hermanos: «Pero nosotros, hermanos, separados de vosotros por un poco de tiempo, de vista pero no de corazón, tanto más procuramos con mucho deseo ver vuestro rostro» (1 Tesalonicenses 2:17).
Eso se ha magnificado con internet generando un dilema: ¿Por qué escuchar a mi pastor transmitiendo con el Zoom en su habitación… si puedo escuchar un gran sermón, o música, o despliegue audiovisual en otra iglesia cualquiera? ¿Por qué no hacemos un culto bueno para todos y que lo vean todos desde sus casas tumbados en la cama? Permitidme una propuesta que debe servir para cuando termine la pandemia. Una respuesta que implica una reflexión y compromiso también por parte de nuestros pastores. Yo escucho a mi pastor, no porque sea el mejor. No porque predique mejor. No
rAula7
Por eso cada vez que nos hemos reunido por Zoom para estudiar la Biblia, para predicar, para compartir palabras de aliento, hemos sido tan iglesia como estando aquí.
14
DANIEL BOSQUED
Sí que ha podido ocurrir que el que venía a la iglesia por rutina directamente ha desconectado del todo de la iglesia. Pero esto no ha sido efecto de la pandemia, simplemente ha revelado la realidad que había dentro de cada uno.
revisarlo y mejorarlo. Pero quizá la mayor área de mejora sea en nuestra comprensión sobre lo que es la iglesia, que es casi más importante. La esencia misma de la iglesia no es RECIBIR sino COMPARTIR. Ese principio puede guiarnos a la hora de encontrar el equilibro entre lo virtual y lo presencial en el futuro. Mientras tanto, sigamos haciendo iglesia como sea. Por Zoom, por Whatsapp, con aforo reducido o al aire libre.
CONCLUSIÓN Creer que Dios ha enviado la pandemia para que aprendamos a usar las redes sería una aberración. Sin embargo, y con la ayuda de Dios, podemos tratar de mejorar y sacar algo bueno de todo esto. El principio de Romanos: «Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados» (Romanos 8:28), también se aplica a la iglesia.
Estoy seguro de que este empuje hacia la digitalización, va a ser usado por Dios para ayudarnos a cumplir mejor nuestra misión.
Si algo ha tenido esta situación es que nos ha empujado al uso de las nuevas tecnologías como nunca. Y eso, amigos, va a facilitar como nunca la predicación del mensaje. El último pregón será sin duda digital.
Ojalá, cuando pase el tiempo y podamos ver esta época en perspectiva, podamos reconocer que a pesar de las dificultades (o incluso gracias a ellas) este virus nos obligó a mejorar nuestro concepto de iglesia y nos ayudó a cumplir nuestra misión de llevar el mensaje hasta lo último de la tierra. Porque un día… «Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin» (Mateo 24:14). Entonces volveremos a casa. Amén. // PHOTO BY TERREN HURST ON UNSPLASH
No sabemos lo que pasará a corto plazo. Quizá volvamos pronto a otra normalidad. Esta pandemia ha puesto de manifiesto potenciales áreas de mejora en la iglesia, sin duda. Habrá que
15
rAula7
PANDEMIA, IGLESIA Y LOS MOKEN Stefan Albu Pastor
A
unque fuimos advertidos que una pandemia era cada vez más posible, no nos imaginamos que nos convertiríamos en contemporáneos con ella. La veíamos como una posibilidad lejana, como algo posible pero en un futuro no tan cercano.
Y de repente, el rumor de que en Wuhan ha pasado algo, nos llegaba pero..., bueno eso estaba ocurriendo a miles de kilómetros. Y de un día para otro, la pandemia alcanzó Europa, Italia… y España. Nos desconcertó a todos. Nos confinó a todos. Nos amenazó a todos. Nos afectó a todos. Trabajo, escuela, ocio, iglesia, todo se quedó paralizado. Como si un boxeador golpea fuertemente al otro cuando menos lo espera y queda paralizado por el impacto. No voy a entrar en más detalles porque los conocemos. Todos los días estamos bombardeados con el número de contagios y de las víctimas mortales de esta pandemia. ¿Cómo nos afectó esta pandemia? ¿Cómo afectó la iglesia? ¿Qué huella dejó a nivel eclesiástico? Como la iglesia es parte de la sociedad, no podemos obviar que los cambios que el intruso Covid-19 produjo en la sociedad, han conocido repercusiones también en la iglesia. No voy a mencionar todos los cambios que el corona ha producido en la sociedad, sino solo a los que están relacionados con la iglesia. Por esta razón, primero mencionaré los cambios que he observado en la sociedad y, en la segunda parte, veremos cómo esta pandemia ha afectado a la iglesia.
1. LA PANDEMIA Y LA SOCIEDAD Esta pandemia puso en evidencia la vulnerabilidad y la fragilidad del estilo de vida occidental: el sistema económico actual (sobre todo el capitalista), los viajes, la educación, las vacaciones, la convivencia, las reuniones culturales, la religión. Como es un estilo de vida construido sobre el capital, en este caso cuando los cimientos están afectados, todo el edificio tiembla. Somos más vulnerables de lo que creíamos y vivimos en una sociedad muy frágil. Un virus, sea creado en un laboratorio o sea que ha mutado, nos
rAula7
16
STEFAN ALBU
ha doblegado a todos. Y si piensas que esto pasó solo con el capitalismo, piensa en las medidas que tomó China para vencer el virus y verás que no es así. Todos los sistemas económicos actuales fueron afectados. Pero, sobre todo, en la economía capitalista, que se construye sobre el tándem de la confianza y el consumo, el impacto fue brutal. Queramos reconocerlo o no, la pandemia reveló que la iglesia como institución también es vulnerable ante las turbulencias económicas que generó la pandemia. O, puso en evidencia que necesitamos reestructurarnos para poder avanzar y no depender tanto de nuestros lugares de culto y de nuestra liturgia.
Para entender esta pandemia en perspectiva, coincidimos con el análisis que hace Harari: «Como ahora estamos en mitad de ella, nos parece que es lo más importante que ha sucedido jamás. Pero la peste negra fue mucho peor. También lo fue la gran epidemia de gripe de 1918 y 1919. Y el sida en la década de 1980, con una mortalidad de casi el 100%. Deberíamos tener una perspectiva histórica de lo que está pasando. Por lo que respecta al virus, la posición de la humanidad nunca ha sido más fuerte. Ahora contamos con el conocimiento científico para comprender y superar esta epidemia más fácilmente que cualquier gran pandemia anterior en la historia humana. Cuando la peste negra mató a tal vez la mitad de la población europea, nadie sabía siquiera lo que causaba esa mortalidad.»1
La libertad también se volvió un concepto frágil. En cuestión de semanas se restringieron las libertades de millones de individuos: Libertad de movimiento, de reuniones, de culto, etc. Sabemos ser libres cuando todo va bien. Nos cuesta saber ser libres cuando nuestra vida está en peligro. Nos cuesta distinguir hasta qué punto este concepto de control puede poner en jaque nuestra fidelidad a Dios.
1
GONZÁLEZ FÉRRIZ, Ramón. «Yuval Noah Harari: El covid puede originar el peor sistema totalitario que haya existido». El Confidencial, 27 octubre 2020. En línea: https://www.elconfidencial.com/cultu-
PHOTO BY ANNIE SPRATT ON UNSPLASH
ra/2020-10-27/yuval-noah-harari-sapiens-entrevista_2806276/
17
rAula7
PANDEMIA, IGLESIA Y LOS MOKEN
He identificado tres categorías de respuestas a esta pandemia.
En la tercera categoría encontramos países con un alto sentido de irresponsabilidad (los ejemplos sobran) y donde priorizaron las ideologías y los intereses políticos ante los intereses colectivos. Es interesante como en esta categoría abundan los países con una tradición judeocristiana.
En la primera categoría encontramos países democráticos como Corea del Sur, Taiwán y Singapur, con una disciplina y alto sentido de responsabilidad social. Esos países tomaron medidas rápidamente, haciendo uso de aplicaciones de seguimiento, pruebas exhaustivas, y acompañaron estas medidas con una buena información veraz, apelaron a la cooperación voluntaria de su población bien informada.
Ante esta realidad se impone la pregunta: si el evangelio en su esencia crea ciudadanos responsables, respetuosos con sus vidas y con las de los demás, compasivos y sensibles a las necesidades de los que sufren, ¿en qué nos equivocamos si el evangelio no ha conseguido transformarnos en tales creyentes?, ¿dónde está la sociedad disciplinaria cristiana que se manifestó en las pandemias de los primeros siglos?
En la segunda categoría encontramos a China, que centró su respuesta en el control de la información que se ofrecía a la población, en una cuarentena muy estricta, en la vigilancia centralizada y en castigos severos a los que no cumplían con las medidas decididas. De alguna forma descubrimos que «cuando a la gente se le da a elegir entre la intimidad y la salud, suele elegir la salud».2 China se puso como ejemplo del control de la pandemia, diciendo entre líneas: los estados totalitarios son más eficientes ante el auge de la pandemia que los países democráticos, la democracia es muy frágil e ineficiente ante crisis como una pandemia, la disciplina social de la democracia es un mito y en los países occidentales la responsabilidad ciudadana es muy precaria.
¿Será que la falta de una sociedad disciplinaria requiera la aparición de un sistema político autocrático, que derive más tarde en uno totalitario y dictatorial? En la historia todos los poderes totalitarios han justificado su razón de ser en la necesidad de construir sociedades disciplinadas que superasen la miseria y que consiguiesen la gloria. Ahí comenzó todo. Con respecto a esto, el escritor Yuval Noah Harari afirma: «La vigilancia centralizada y los castigos severos no son la única forma de hacer cumplir unas pautas beneficiosas. Cuando se comunica hechos científicos a la población y ésta confía en que las autoridades públicas les transmitirán esos hechos, los ciudadanos pueden hacer lo correcto sin necesidad de la vigilancia de un Gran Hermano. Una población automotivada y bien informada suele ser mucho más poderosa y eficaz que una población controlada e ignorante.»4
En relación con las primeras dos categorías, el filósofo surcoreano Byung-Chul Han, de la Universidad de Berlín, afirma que, los países asiáticos han sabido controlar muy rápida y eficazmente la pandemia gracias a la disciplina colectiva de una sociedad disciplinaria. El secreto de Asia se encontró en el civismo y en la responsabilidad ciudadana. En este tipo de sociedades disciplinarias, los deberes colectivos eclipsaron los derechos individuales y la disciplina colectiva facilitó imponer medidas disciplinarias radicales. Por esta razón Han afirma que Europa ha perdido todo su carisma y mira hacia Asia con asombro y envidia.3
2
¿Cómo tener una población automotivada y bien informada en un mundo infoxicado por fake news y dirigido por políticos interesados más en hacer prevalecer sus ideologías que el bien ciudadano? Ante esta realidad, ¿tendremos que apelar a la vigilancia centralizada y a los castigos severos para superar crisis como esta pandemia? Estando en Europa nos preguntamos: ¿cómo superamos la epidemia de la peste negra?
HARARI, Youval Noah. «El mundo después del coronavirus». La Vanguardia, 5 abril 2020. En línea: https://www.lavanguardia.com/ internacional/20200405/48285133216/yuval-harari-mundo-des-
En su análisis de la sociedad disciplinaria, Michel Foucault hizo una impactante descripción de las medidas que se adoptaron en Europa, en el siglo XVII a raíz de la epidemia de peste.
pues-coronavirus.html 3
HAN, Byung-Chul. «La pandemia y el regreso a la sociedad disciplinaria». La Vanguardia, 3 abril 2020. En línea: https://www. lavanguardia.com/internacional/20200403/48287439354/lapandemia-y-el-regreso-a-la-sociedad-disciplinaria.html
rAula7
4
18
HARARI, Youval Noah. «El mundo después del coronavirus», op. cit.
PHOTO BY TETIANA SHYSHKINA ON UNSPLASH
STEFAN ALBU
¿En qué consistían aquellas medidas? Las casas se cerraban con llave desde fuera. Las llaves tenían que ser entregadas a las autoridades. Las personas que rompían clandestinamente la cuarentena eran condenadas a muerte. Se mataba a los animales que corrían sueltos. La vigilancia era total. Se exigía una obediencia incondicional. Se vigilaba cada casa. Durante los controles todos los habitantes de la casa tenían que asomarse a las ventanas. A quienes vivían en patios traseros se les asignaba una ventana que daba a la calle. Llamaban a cada uno por su nombre personal y les preguntaban cómo se encontraban. Quien mentía se exponía a la pena de muerte. Se estableció un sistema de registro exhaustivo. El espacio se anquilosó en una red de células impermeables. Cada uno estaba encadenado a su sitio. Quien se movía arriesgaba su vida. El poder penetró hasta en los detalles más nimios de la existencia. Toda la sociedad se transformó en un panóptico y fue penetrada por completo por la mirada panóptica.5 Afortunadamente no experimentamos tales medidas en la Europa del COVID-19 pero, se parecen muchísimo a las medidas que tomó China en el siglo XXI. Ante los desafíos de esta pandemia Youval Harari cree que «nos enfrentamos a dos elecciones particularmente importantes. La primera es entre vigilancia totalitaria y empoderamiento ciudadano. La segunda es entre aislamiento nacionalista y solidaridad mundial.»6 La realidad es que nos alejamos del empoderamiento ciudadano y de la solidaridad mundial y nos acercamos cada vez más hacía la vigilancia totalitaria global. La tecnología se volvió aliada tanto de los poderes democráticos como de los totalitarios para controlar al ciudadano. En el contexto de la amenaza de esta vigilancia totalitaria, nació el concepto de crédito social. Hablamos de una especie de control del individuo basado en los algoritmos de la inteligencia artificial. Este crédito se construye con la ayuda del sistema de vigilancia pública y con los datos recopilados de nuestros gadgets inteligentes, que aparentemente están simplificando nuestra vida pero, en realidad, revelan todo sobre nosotros: la ubicación en donde has estado, las conversaciones que tienes, los restaurantes donde comes, las tiendas donde compras, lo que publicas en las redes sociales, las páginas 5
HAN, Byung-Chul. «La pandemia y el regreso a la sociedad disci-
6
HARARI, Youval Noah. «El mundo después del coronavirus», op. cit.
plinaria», op. cit.
19
rAula7
PANDEMIA, IGLESIA Y LOS MOKEN
web que visitas, los vídeos que ves… En función de tu aceptación y obediencia al sistema se te permite ciertas libertades o no. Aunque no es un sistema generalizado en toda China, se ha implementado en ciertas ciudades como prueba piloto y parece que el mundo se dirige hacía esta forma de control social. Estamos ante una seria amenaza. En este sentido Harari advierte: «En los últimos años, los gobiernos y las empresas han recurrido a tecnologías cada vez más sofisticadas para rastrear, vigilar y manipular a las personas”7. “Es la primera vez en la historia de la humanidad que puedes seguir a todo el mundo todo el tiempo y reunir y analizar tantos datos de cada individuo que entiendes a esa persona mejor de lo que ella se comprende a sí misma. Con la epidemia, la excusa es la necesidad de interrumpir el contagio. Pero, si no vamos con cuidado, esto puede ser el origen del peor sistema totalitario que haya existido jamás. Nuestra libertad está seriamente amenazada.»8
Considero que es peligroso porque depende de quién controla este «Ministerio de la Verdad». Aunque la motivación parezca correcta, ¿cómo sabemos que un día llegarán a censurar cualquier mensaje que no coincida con la cosmovisión o la ideología del «Ministerio de la Verdad»? En este contexto, proclamar que cualquier sistema que ponga a Dios al lado está condenado al fracaso o ha caído la Babilonia, inicialmente será considerado fake news, después será censurado y, por último, perseguido. Puede parecer conspirativo pero estamos a unos pocos pasos de un control cada vez más absoluto. Somos testigos del nacimiento de una sociedad panóptica postpandemica,9 emerge de la manipulación informativa ( fake news y part news) y de la vigilancia digital. De hecho, la profecía habla sobre este tipo de control absoluto. Según Apocalipsis 13:16-18, nos dirigimos hacia un control totalitario global, donde la libertad dependerá de tu sometimiento al sistema, a un sistema antagónico al reino de Dios. Quizás el cumplimiento de esta profecía de Juan está más cerca de lo que nos imaginamos. Vivimos en un contexto donde la mentira abunda y se esparce a una tremenda velocidad. Y todo eso para crear confusión en la mente de las personas. Y no me refiero a la difusión de noticias falsas en el mundo político, social o económico. Incluimos aquí también a la difusión de todo tipo de mensajes religiosos cuyo sistema de interpretación de la Biblia no coincide con el sistema de interpretación de los apóstoles de Jesús. La Biblia advierte que en los últimos días habrá una abundancia de noticias falsas que procurarán encubrir las buenas y verdaderas noticias del Evangelio. En este contexto la iglesia de Cristo está llamada a presentar la verdad que se encuentra en la persona y la misión de Jesús. ¿Cómo afectó esta pandemia a la iglesia? ¿Qué huella dejó en ella?
Junto con esta amenaza y a raíz de auge de las fake news, Google, Facebook, Twitter… deciden crear mecanismos para decidir que noticia es verdadera y que noticia es falsa. La Unión Europea y España votan mecanismos para controlar la veracidad de lo que se publica.
2. LA PANDEMIA Y LA IGLESIA Esta pandemia es el evento reciente que más ha impactado la iglesia en el ámbito de las reuniones, de la liturgia, de las relaciones entre los miembros, de la implicación social… ¿Cómo ha dejado esta pandemia a la iglesia?
9
La sociedad panóptica que mencionó Foucault, es una idea que se construye sobre concepto del panóptico, ideado por Jeremy Bentham. Este propuso un sistema de cárceles construi-
7
Ibidem.
das en círculo alrededor de una torre de vigilancia donde, por el juego de luces, espejos y
8
GONZÁLEZ FÉRRIZ, Ramón. «Yuval Noah
sombras, dos o tres guardianes controlan de forma eficaz a cientos de delincuentes. ¿Cómo?
Harari: El covid puede originar el peor
No se revela si el guardián está o no está en la torre de vigilancia, creando de esta forma
sistema totalitario que haya existido»,
inseguridad en el preso. Sigilosamente el guardián que estaba en la torre se traslada en la
op. cit.
mente del preso.
rAula7
20
STEFAN ALBU
> Muchas iglesias entendieron que esta es una oportunidad de oro para multiplicar la iglesia en iglesias hogar.
En una primera fase paralizada. Consternada. No nos esperábamos que algo así ocurriera. De hecho, no estábamos preparados para algo así. Por eso nos resistimos a suspender las reuniones presenciales, a aceptar esta realidad. Algunos vieron esta decisión como falta de fe, otros como un acto de responsabilidad hacia los más vulnerables, otros como una señal del fin, otros como un acto orquestado por una élite mundial. Pero hay una reflexión que he escuchado a muchos creyentes que no son ni extremistas ni radicales: ¿será posible que los eventos finales se pudieran desencadenar en cuestión de semanas? No tengo ni la menor duda.
EFECTOS NEGATIVOS: > Esta pandemia puso en evidencia la vulnerabilidad y fragilidad de la estructura de la iglesia que depende de la presencia en la iglesia y del sistema de ofrendas y diezmos. > Otra cosa que nos reveló es el hecho de que no sabemos ser iglesia fuera de nuestros lugares de culto. Incluso dependemos psicológicamente de nuestras formas litúrgicas. > La pandemia se convirtió en la mejor excusa para dejar de congregarse. > Puso en evidencia la ridiculez de la espiritualidad capitalista: si yo invierto en ejercicios espirituales, Dios no permitirá que me enferme y Él me protegerá. Muchos de los creyentes que construyeron su fe sobre estos pensamientos, se vieron chasqueados cuando ellos mismos fueron contagiados. > Probablemente el mayor impacto negativo se ve en los niños y los adolescentes que fueron los menos atendidos durante el confinamiento y fueron abandonados al mundo del entretenimiento virtual, revelando también que no sabemos divertirnos en familia, más allá del fin de semana. > Creo que también podemos hablar de la digitalización o virtualización de la fe. No es algo malo en sí. Puede ser una gran oportunidad evangelística, pero, si se limita solo al mundo virtual, deja de ser fe para convertirse en mero exhibicionismo religioso en las redes sociales. > He leído al pastor Oscar López que hablaba de la despersonalización del trabajo pastoral: limitado al uso de teléfono, a las redes sociales y a las plataformas como Zoom. Es una realidad pero se puede convertir también en una gran oportunidad. Conozco iglesias donde la pandemia ha motivado a los ancianos de iglesia a llamar a todos los miembros y a dar visibilidad a todos los que forman la iglesia. > Observamos un auge de todo tipo de teorías que intentan interpretar esta pandemia. En realidad ponen en evidencia que hay poco discernimiento cultural, hay una falta de formación bíblica saludable, también pone en evidencia que en muchos lugares la iglesia no da respuestas convincentes y que muchos creyentes se han convertido en víctimas de todo tipo de vientos de doctrina.
Política, tecnológica, social y espiritualmente el mundo avanza a pasos agigantados hacia el cumplimiento de Apocalipsis 13:13-16. Pero, más allá de los intentos de interpretar el origen y el propósito de la pandemia, esta está dejando una huella en la existencia de la iglesia. ¿Qué efectos positivos y negativos está produciendo esta pandemia en la iglesia?
EFECTOS POSITIVOS: > Más presencia del mensaje adventista en las redes sociales y en internet. La pandemia nos obligó en cierta manera a atender a los miembros y a evangelizar a través de internet. > Activó el civismo entre los miembros de la iglesia, la responsabilidad ciudadana del creyente, una sociedad eclesiástica disciplinada. Nuestras iglesias de momento no se han transformado en focos de contagio. > Implicación de los responsables de la iglesia en el cuidado de los miembros: llamarlos, preocuparse por ellos, llevarles alimentos u otro tipo de ayuda. > Los grupos naturales se tornaron fundamentales para la supervivencia de la iglesia. Muchos grupos de amigos se convirtieron en grupos pequeños. > Hay una implicación evidente de la iglesia en la comunidad a través de la ayuda social. De hecho, las organizaciones religiosas estuvieron entre las primeras en preocuparse por los más vulnerables. > Se ha buscado y se buscan constantemente soluciones para atender espiritualmente a los hermanos. Conozco líderes de iglesia, jóvenes y pioneros que hacen un trabajo estupendo en sus iglesias. La red de soporte social de la iglesia, o la hermandad tiene ahora más sentido que nunca. > En algunos casos desencadenó un despertar espiritual, interés en conocer la Biblia, en volver a la iglesia, en buscar a Dios.
Últimamente recibo de muchos hermanos todo tipo de vídeos, preguntándome cual es mi opinión sobre ello. ¿Es esta la última crisis que enfrenta la iglesia? ¿Hay algo más que un problema
21
rAula7
PHOTO BY ETIENNE GIRARDET ON UNSPLASH
PANDEMIA, IGLESIA Y LOS MOKEN
rAula7
22
STEFAN ALBU
médico detrás de esta crisis? ¿Se ha creado esta pandemia para que el Papa envíe su encíclica Tutti Fratelli? Y muchas más preguntas. Estoy asombrado de cuantas teorías y aplicaciones apocalípticas se dan a esta pandemia incluso en nuestra iglesia. No soy profeta y no voy a responder a tales preguntas pero, tal como entiendo yo la Biblia, no creo que esta sea la última crisis, pero sí creo que es una señal del tiempo que pone en evidencia cuán cerca estamos como sociedad del cumplimiento de la profecía que se encuentra en Apocalipsis 13:16-18.
LA PANDEMIA Y EL FUTURO DE LA IGLESIA En primer lugar, una iglesia, solidaria con los que están en necesidad, es el buen samaritano para este mundo que cayó en manos de la pandemia. Estoy feliz al ver que la iglesia eligió el camino de la solidaridad del que habla Youval Harari: «Debemos tomar una decisión. ¿Viajaremos por la senda de la desunión o tomaremos el camino de la solidaridad mundial? Elegir la desunión no sólo prolongará la crisis, sino que probablemente dará lugar a catástrofes aún peores en el futuro. Elegir la solidaridad mundial no sólo será una victoria contra el coronavirus, sino también contra todas las futuras crisis y epidemias que puedan asolar a la humanidad en el siglo XXI.»10
La solidaridad es la única forma que hace que la gente sea sensible para el mensaje que la iglesia ha de presentar al mundo.
parte del tiempo viven y se mueven en barcas que se construyen ellos mismos y que llaman kabang.
En segundo lugar, esta crisis genera una gran oportunidad. Cuando la invasión babilónica destruyó el templo y llevó al pueblo de Israel en cautividad, aquello impactó de lleno la vida espiritual de los israelitas. De repente ya no podían adorar en el templo, no podían celebrar sus fiestas y rituales, su liturgia. Pero de aquella desgracia nació la sinagoga, como un lugar muchísimo más accesible a los adoradores que lo era el templo. En la sinagoga el centro de todo era el estudio de la Torá. De esta forma la sinagoga aseguró la supervivencia del pueblo judío durante la cautividad y hasta ahora. La religión judía pasó de ser una experiencia religiosa contemplativa a una experiencia religiosa dinámica. Como podemos ver, la crisis de la cautividad babilónica produjo una gran bendición.
Son cazadores y recolectores pero casi todo lo que comen procede del mar –y lo que no comen lo secan y lo venden en los mercados que inundan esas tierras–. Pescan con redes o arpones primarios, han desarrollado la capacidad de «andar» por el fondo marino y aguantan varios minutos debajo del agua; también ven mejor que el resto si abren los ojos cuando están sumergidos. Son una tribu que tiene un excelente dominio del mar.
¿Cuál es la bendición que produjo esta pandemia? La crisis de la pandemia nos puso ante la necesidad de reestructurar el concepto de la iglesia como institución. Me gusta creer que estamos ante el nacimiento de un nuevo concepto de iglesia: célula, grupo pequeño o iglesia de hogar, que es mucho más funcional y efectiva en tiempos complicados como los de esta pandemia. De esta forma pasamos de una experiencia religiosa con una fuerte tendencia contemplativa a una experiencia religiosa dinámica, que involucra a todos. Quisiera concluir con una historia relacionada con la tribu moken, o los gitanos del mar.
10 HARARI, Youval Noah. «El mundo después del coronavirus», op. cit.
Fue precisamente este dominio del mar y su tradición lo que les hizo «adivinar» lo que iba a suceder en diciembre del 2004. Aunque tienen una alta tasa de analfabetismo, una de las historias que han transmitido de generación en generación habla sobre «la ola que se traga a la gente». Los moken supieron leer el agua y al observar cambios en la marea, huyeron hacia el interior, a lo más alto que pudieron. Así sobrevivieron y lo único que perdieron fueron sus pertenencias, arrasadas por la gran ola que dejó 230.000 muertos el 26 de diciembre del 2004. Fueron los únicos nativos que se salvaron integralmente en el maremoto del Pacífico. Los otros pescadores de la zona no se salvaron pero los moken sí, porque entendían las señales del mar. En lenguaje bíblico podríamos afirmar que entendieron las señales del cielo. ¿Entiende la iglesia la señal de esta pandemia? ¿Entendemos la señal de esta pandemia con todo lo que ha transmitido ella en su conjunto? //
Ellos establecen sus casas sobre las aguas tailandesas y birmanas, aunque la mayor
23
rAula7
Tu biblioteca digital cristiana con descargas gratuitas
SECCIÓN INFANTIL • Promueve el estudio de la Biblia en los niños hispanoparlantes de 3 a 12 años. • Facilita la enseñanza de la asignatura de religión o Biblia en las escuelas. • Crea un espacio de participación y encuentro intercultural donde los niños pueden colaborar mediante sus dibujos, historias, juegos, fotografías... y donde los educadores aportan sus experiencias.
RELATOS BÍBLICOS • 9 volúmenes dirigidos a niños de 3 a 6 años. • Relatos de ficción de animales situados en el contexto de una historia bíblica. • Se acompañan de una guía didáctica de actividades. • Material de soporte didáctico para docentes maestros de escuela sabática infantil y padres.
MI BIBLIA MI TESORO • Guía de estudio sistematizado de la Biblia para niños de 9 a 12 años. • Ciclo de 3 años completo. • 12 volúmenes disponibles para su descarga.
SEMBRADORES DE FE ¡NOVEDAD! • Guía para maestros de escuela sabática infantil. • ¿Qué puedo hacer para transmitir la fe de forma divertida y eficaz a un grupo de niños en mi iglesia?
CREZCO CON LA BIBLIA ¡NOVEDAD! • Guía de estudio de la Biblia sistematizado para niños de 3 a 6 años • Ciclo de un año. Disponible el primer volumen.
rAula7
24
IGLESIA HÍBRIDA Samuel Gil Soldevilla Doctor en Ciencias de la Comunicación, Universidad Jaime I
H
Las personas, tanto en el mundo físico como en el online, pueden sentirse inicialmente atraídas por una iglesia por el estilo de predicación, música o colores, pero se quedan debido a las relaciones que forman y la comunidad que experimentan.
LA PREGUNTA MÁS IMPORTANTE
Te pregunto: este tiempo de distanciamiento físico ¿podría alimentar una nueva reforma en la iglesia? Las crisis pueden convertirse en «ventanas de oportunidad» para resolver problemas enquistados, introducir reformas imposibles de implementar en tiempos normales o empujar determinadas ideas. ¿Qué clase de ventana de oportunidad se está abriendo ahora en tu iglesia local?
oy en día la práctica de nuestra fe involucra tanto espacios físicos como digitales, tanto comunicación presencial como mediada. Este tiempo de distanciamiento físico por la pandemia, ¿podría alimentar una nueva reforma en la iglesia? «La iglesia es más que un edificio», pero ¿puede el ministerio digital convertirse en más que un programa online? ¿Qué clase de «ventana de oportunidad» se está abriendo ahora, en tu iglesia local? Hablemos sobre Hogar, Familia, Tecnología, Descentralización, Creatividad, Espacio Abierto, Grupos Pequeños, Movimiento Profético, Brújula, Resistencia.
La pandemia de la COVID-19 nos ha enfrentado a la pregunta: «Ahora tenemos los templos cerrados: ¿cómo hacemos una iglesia online con cada miembro en su casa?». Pero creo que la cuestión de «¿cómo hacemos una iglesia online?» no es la pregunta más difícil que afrontamos. La pregunta no es meramente tecnológica, ¡es eclesiológica!
Las iglesias que prosperarán serán aquellas que se adapten y aprovechen las nuevas realidades; no las que se queden en la realidad antigua. Comunidades basadas en las relaciones, en la conexión entre sus miembros, en sentirse atendidos y valorados, que pueden crecer en comunión. Comunidades que abrazan el sacerdocio universal de los creyentes donde cada miembro es un ministro, no un consumidor de productos religiosos. Sino corremos el riesgo de tener espectadores dependientes en vez de discípulos que hacen más discípulos.
Muchas personas buscan cómo hacer transmisiones en vivo, reuniones online, qué herramientas usar…, pero pocos se hacen la pregunta más importante: ¿Qué necesitan las personas en este momento de las iglesias? El desafío clave como comunidad es pasar del «cómo» tecnológico al «cómo» eclesiológico. ¿En qué puede servir la iglesia ahora, para qué somos iglesia?
IGLESIA HÍBRIDA: TRES FORMAS Las personas se mueven con fluidez entre «entornos en línea y fuera de línea» durante la semana, y se mueven entre diferentes redes o contextos, muchos de los cuales están fuera de su congregación local. Es decir, iglesia no es solo lo que ocurre física o digitalmente el sábado por la mañana. La iglesia también son las conversaciones que ocurren antes, después e incluso durante un servicio de culto, y las que continúan después a través de llamadas, mensajes, memes, correos electrónicos, redes sociales…
Las personas buscan sentido de relación; sentirse atendidas y valoradas, un espacio en el que compartir sus inquietudes de manera abierta; y donde puedan compartir su fe. Las comunidades digitales o las experiencias de iglesia exitosas son aquellas que cultivan las relaciones y la inversión de sus miembros no en un nivel superficial, como espectadores, sino en un nivel profundo, que buscan la intimidad.
25
rAula7
IGLESIA HÍBRIDA
Hoy en día, la práctica de la fe cristiana, de nuestra fe adventista, involucra tanto espacios físicos como digitales, tanto comunicación presencial como mediada. Debemos entender que nuestra iglesia, nuestro proyecto, nuestra vida, es un ministerio híbrido: vivimos, experimentamos una fe que ocurre en los edificios y que también ocurre online.
cobertura, me extiendo en otros canales pero nada más. Lo que ocurre en el templo offline te lo reproduzco en un canal online. 2. IGLESIA ADAPTADA (conexión o traducción): un segundo paso implica utilizar una estrategia de traducción, es decir, intentar modificar los rituales de adoración y espacio para que quepa en una pantalla. Se traducen o adaptan las formas, el lenguaje, los tiempos, la liturgia…
En este tiempo, cuando se cierran muchas «iglesias de ladrillo» pero se abren otras digitales, el objetivo principal de un ministerio en el entorno online es precisamente fortalecer las relaciones con personas de carne y hueso. La idea no es que la iglesia digital reemplace a la iglesia física, necesitamos complementarlas para ser comunidad viva.
3. IGLESIA CREATIVA (creatividad): en la tercera fase surgen signos de creatividad, de empoderamiento de diferentes miembros de estas comunidades. Hay un compromiso imaginativo con nuevas habilidades, se exploran nuevos métodos de adoración para agrupar a las personas y empoderar a varias personas para liderar y fomentar una interacción significativa. Esta última estrategia de hacer iglesia comprende más plenamente las posibilidades únicas que ofrece la tecnología digital para la construcción de la comunidad y la comunicación, así como la oportunidad de reimaginar lo que significa ser una iglesia en la era digital.
Podemos categorizar tres formas de hacer iglesia digital:
PHOTO BY EDWIN HOOPER ON UNSPLASH
1. IGLESIA AMPLIFICADA (pragmatismo, amplificación, réplica, reproducción): suele ser la primera fase, el primer paso. Las instituciones religiosas existentes proyectan su vida física y tradición directamente en el espacio en línea, retransmitido en las redes sociales. Es decir, amplifico mi señal, mi
rAula7
26
SAMUEL GIL SOLDEVILLA
UNA IGLESIA REFORMADA
nidades de servir, el horizonte de esperanza que nos une. Una iglesia que favorece los grupos pequeños, que evita los lugares cerrados y busca espacios abiertos, actividades al aire libre siempre que puede (parques, campo, montaña…).
Como individuo y como iglesia, necesitamos reavivamiento y reforma constantes. Las campañas publicitarias y programas eclesiásticos son insuficientes para que esto se produzca, por eso Dios aprovecha las circunstancias y crisoles que vivimos para que el Espíritu trabaje en nosotros y la reforma ocurra (lee los siguientes textos: 2 Corintios 4:17; Santiago 1:2,3; 1 Pedro 1:6,7).
> Las oportunidades que tengamos de estar juntos serán mejor aprovechadas… • Una iglesia que cuando se reúne tiene una liturgia más concisa, al punto, menos teatral y pomposa, más directa. Sábados menos estresantes, más Sábados. Donde la misión no depende de unos pocos, sino que cada creyente –no mires para otro lado– acepta su sacerdocio, su llamado (1 Pedro 2:9).
¿Y si Dios quiere usar el momento actual para que repensemos la iglesia? Reflexionar, Reavivar, Reformar. ¿Qué iglesia nos vamos a encontrar? ¿Qué iglesia vamos a ser? ¿Cómo podemos adaptarnos y prepararnos para que la voluntad de Dios se cumpla en nosotros?
> Una economía más variable, sometida a presión... • Una iglesia de estructura ligera, pragmática, que vuelve a ser más movimiento y menos institución. Que no se pregunta «¿cómo puedo mantenerme?», sino «¿cómo puedo ser relevante para la gente que me rodea?». Que, en vez de conformarse con una mentalidad estable y cómoda, fomenta una comunidad dinámica y entusiasta, abierta al cambio para satisfacer las necesidades actuales.
Los pronósticos sociales, aunque cambiantes, nos dan pistas de lo que seremos [o de lo que podemos llegar a ser si dependemos de Dios y no de nuestras fuerzas]: > Puede que haya más confinamientos; tendremos que aprender a vivir más en el hogar… • Una iglesia cuyo núcleo es la familia. Esto “eleva la norma” de exigencia para cada hogar, el cual potencia su culto personal y familiar, siendo nuclear para la vida espiritual.
> Un entorno inestable, un contexto de crisis, más tiempo del fin… • Una iglesia que no tiene miedo, que reconoce su llamado profético, que está preparada para ser brújula ante cualquier despertar espiritual, al mismo tiempo que soporta con fe y paciencia la mofa de la gente burlona (2 Pedro 3:3-9).
> La interacción a través de la tecnología incrementará… • Una iglesia más digital, que aprovechará más y mejor la tecnología, que viajará menos, y será más creativa y adaptativa. La iglesia primitiva fue perseguida, y esto le «obligó» a huir, llevando así el evangelio a nuevas regiones por necesidad. Hoy se abren nuevos canales a través de los cuales ser comunidad y compartir el evangelio –mientras estamos confinados, Dios está en movimiento–. Esto también exigirá formación en el uso de las herramientas digitales en la administración, el pastorado y la membresía –y una reflexión autocrítica sobre la querencia de estas redes que nos evite una experiencia religiosa superficial o dependiente–.
UNA IGLESIA DE ESPERANZA El movimiento adventista nació tras una crisis, y no es que estuviesen confinados o las tiendas estuviesen cerradas, sino que esperaban que el mundo entero terminara. Lo habían predicado y no ocurrió. Habían vendido todo, entregado todo, material y emocionalmente, pero no pasó. Incluso tras aquella fatídica noche del otoño de 1844, aquel grupo de personas evolucionaron, volvieron a la Palabra, estudiaron, repensaron, crecieron, entendieron, fueron reavivados y reformados… ¡El movimiento adventista fue inspirado para un tiempo como este!
> Un desconfinamiento por fases, lento... • Una iglesia menos multitudinaria, menos concentrada y menos localizada en las paredes del templo; cuyo centro no es el local sino la conexión entre personas, las oportu-
Una iglesia cuyo énfasis no es predicar con angustia sobre las señales del tiempo del fin, ni fecharlas, sino presentar a Aquel que viene a nuestro encuentro por fin.
27
rAula7
PHOTO BY RON SMITH ON UNSPLASH
IGLESIA HÍBRIDA
Una iglesia que no lleva la condenación al mundo, sino el evangelio al mundo (Juan 3:17; 12:47). Una iglesia enraizada en un triple mensaje: la fe y la adoración al Dios creador, la confianza de que su juicio es justo y verdadero (Apocalipsis 14:6-7); ser brújula en medio de la confusión de Babilonia, no ser participantes de su tragedia (14:8); y el abandono de los falsos sistemas religiosos y seculares fallidos para mantenerse fiel a Jesús, en obediencia, por amor, a sus mandamientos (14:9-12). «Dios, quien dijo: “Que haya luz en la oscuridad”, hizo que esta luz brille en nuestro corazón para que podamos conocer la gloria de Dios que se ve en el rostro de Jesucristo. Ahora tenemos esta luz que brilla en nuestro corazón, pero nosotros mismos somos como frágiles vasijas de barro que contienen este gran tesoro. Esto deja bien claro que nuestro gran poder proviene de Dios, no de nosotros mismos. Nos vemos atribulados en todo, pero no abatidos; perplejos, pero no desesperados; perseguidos, pero no abandonados; derribados, pero no destruidos. […] Por tanto, no nos desanimamos. Al contrario, aunque por fuera nos vamos desgastando, por dentro nos vamos renovando día tras día. […] Así que no nos fijamos en lo visible, sino en lo invisible, ya que lo que se ve es pasajero, mientras que lo que no se ve es eterno. De hecho, sabemos que, si esta tienda de campaña en que vivimos se deshace, tenemos de Dios un edificio, una casa eterna en el cielo, no construida por manos humanas» (2 Corintios 4:6-13).
Sí. Nos quedan unas cuantas citas con el caos, pero resistiremos. En nuestra fragilidad, vulnerabilidad y delicadeza, Dios se hace grande (2 Corintios 12:9,10). Puedo ver el plan de Dios cumplirse. Cada vez más claro. Cada vez más cerca. Y tengo esperanza. //
rAula7
28
«I’M NOT A VIRUS», LA PANDEMIA ANALIZADA DESDE LA FILOSOFÍA POR AGAMBEN, ZIZEK, Y HAN José Álvaro Martín Profesor de Filosofía en Secundaria
L
o dice el pensador Slavoj Zizek (Liubliana, Eslovenia, 1949). Vivimos con una ira crónica que nos lleva a excluir o estigmatizar al enfermo, al oriental, al anciano, al débil. Y es una cólera que no soporta la supuesta falta de eficiencia mostrada por los Estados ante el corrosivo virus. Lo peor es que se ha hecho permanente y nos instala en un odio «racista o antiestatal: los chinos tienen la culpa, nuestro Estado no es eficaz».1 Su pulsión asesina radica en que esta cólera se alimenta del miedo: nuestra existencia está siempre en riesgo y es inevitablemente frágil: «la amenaza ha venido para quedarse… infundiendo un miedo y fragilidad permanentes en nuestras vidas.»2 Ante este peligro que nos habita e iguala, cabe reflexionar sobre las consecuencias a las que nos ha conducido nuestro sistema económico y puede resultar posible descubrir nuevas formas de coordinación, solidaridad e interdependencia entre los distintos países: «la epidemia de coronavirus es… una señal de que no podemos seguir como hasta ahora, de que hace falta un cambio radical… pensar en una sociedad alternativa, una sociedad que vaya más allá del Estado-nación, una sociedad que se actualice en forma de solidaridad y cooperación global.»3 Frecuentemente las grandes catástrofes nos ayudan a abandonar la ley del más fuerte y redescubrir que la propia supervivencia depende de otros: «Dicha amenaza universal origina una solidaridad global, nuestras mezquinas diferencias se vuelven insignificantes todos trabajamos juntos para encontrar una solución.»4 Zizek no confía en que nuestros incapacitantes egoísmos se evaporen mágicamente, sino que serán precisamente esos intereses individualistas, quienes nos empujen a la colaboración: «No estoy hablando de ninguna utopía, no apelo a una solidaridad idealizada entre la gente. Por el contrario, la crisis actual demuestra claramente que la solidaridad y cooperación global tienen como finalidad la supervivencia de todos y cada uno de 1
ZIZEK, Slavoj, Pandemia: La covid-19 estremece al mundo. Trad. Damià Alou. Barcelona: Anagrama, 2020, p. 58.
2
Ibidem, pp. 50, 59.
3
Ibidem, pp.45-47 (la cursiva es nuestra).
4
Ibidem, p. 48 (la cursiva es nuestra). PHOTO BY MARJAN BLAN | @MARJANBLAN ON UNSPLASH
29
rAula7
«I’M NOT A VIRUS»...
nosotros, y que obedecen a una pura motivación racional y egoísta… la solución no será el aislamiento y la construcción de nuevos muros y posteriores cuarentenas. Hace falta una plena solidaridad incondicional y una respuesta coordinada a nivel global, una nueva forma de lo que antaño se llamó comunismo…»5
bre y la miseria, y la defensa cierta de los derechos humanos elementales.»7
Aunque el planteamiento de Zizek consistente en buscar ayudas mutuas para gestionar la interdependencia en la que vivimos (denominada por él como nuevo comunismo),8 ha sido ferozmente criticado, parece tener evidentes similitudes con lo apuntado por el Papa. Y es que, si los problemas ecológicos o económicos nos carcomen a todos, la pandemia subraya que recibimos sus golpes quienes vamos en un mismo barco.9 Por ello, estas concepciones parecen plantear muchas dudas sobre el papel de ese Estado Mundial y sobre el alcance y moralidad de las medidas disciplinarias globales que, desde dicha estructura, se puedan
Ante el escándalo de que no preocupen tanto las víctimas mortales de la pandemia, como la recuperación de los mercados, Zizek llega a proponer la necesidad de un gobierno mundial: «No estamos hablando aquí de comunismo a la vieja usanza, desde luego, sino de algún tipo de organización global que pueda controlar y regular la economía y limitar la soberanía de los Estados-nación cuando haga falta.»6 Llegados a este punto convendría comparar la propuesta de Zizek, con la contenida por la carta-encíclica de Francisco, titulada Fratelli Tutti:
7 FRANCISCO, Fratelli tutti. Sobre la fraternidad y la amistad social. Estella: Verbo Divino, 2020, párrafos nº 7, 8, 172, pp 7, 115 (la cursiva es nuestra). Planteamientos similares aparecen también en la Carta-Encíclica publicada por Benedicto XVI, titulada Caritas in
«Asimismo, cuando estaba redactando esta carta, irrumpió de manera inesperada la pandemia de Covid-19 que dejó al descubierto nuestras falsas seguridades. Más allá de las diversas respuestas que dieron los distintos países, se evidenció la incapacidad de actuar conjuntamente. A pesar de estar hiperconectados, existía una fragmentación que volvía más difícil resolver los problemas que nos afectan a todos. [...]
veritate (fragmento nº 67): «Para gobernar la economía mundial, para sanear las economías afectadas por la crisis, para prevenir su empeoramiento y mayores desequilibrios consiguientes, para lograr un oportuno desarme integral, la seguridad alimenticia y la paz, para garantizar la salvaguardia del ambiente y regular los flujos migratorios, urge la presencia de una verdadera Autoridad política mundial…» 8
»Anhelo que en esta época que nos toca vivir, reconociendo la dignidad de cada persona humana, podamos hacer renacer entre todos un deseo mundial de hermandad… Nadie puede pelear la vida aisladamente. […] Se necesita una comunidad que nos sostenga, que nos ayude y en la que nos ayudemos unos a otros a mirar hacia delante. [...]
El término obedece a que Zizek le atribuye al Estado una regulación más activa de la economía: «A medida que evoluciona la pandemia mundial, hemos de ser conscientes de que los mecanismos de mercado no serán suficientes para evitar el caos y el hambre. Tendrán que considerarse a nivel global medidas que hoy en día a casi todos nos parecen “comunistas”: la coordinación de la producción y distribución tendrá que realizarse fuera de las coordenadas del mercado.» (ZIZEK, Slavoj, Pandemia, op. cit., p. 19).
»El siglo XXI “es escenario de un debilitamiento de poder de los Estados nacionales, sobre todo porque la dimensión económicofinanciera, de características transnacionales, tiende a predominar sobre la política. En este contexto…” Cuando se habla de la posibilidad de alguna forma de autoridad mundial regulada por el derecho no necesariamente debe pensarse en una autoridad personal. Sin embargo, al menos debería incluir la gestación de organizaciones mundiales más eficaces, dotadas de autoridad para asegurar el bien común mundial, la erradicación del ham-
9
«En respuesta a la amenaza planteada por la epidemia de coronavirus, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu ofreció ayuda y coordinación a la Autoridad Palestina de inmediato, no por bondad ni consideración humana, sino por el simple hecho de que allí resulta imposible separar a los judíos de los palestinos, por lo que si un grupo se ve afectado, inevitablemente el otro sufrirá. Esta es la realidad que deberíamos trasladar a la política. Ha llegado el momento de abandonar el lema de “Estados Unidos (o el país que sea) primero”. Tal como lo expresó Martin Luther King hace más de medio siglo: “Puede que todos hayamos llegado
5
Ibidem, pp. 62-74 (la cursiva es nuestra).
en diferentes embarcaciones, pero ahora estamos todos en el
6
Ibidem, p. 62 (la cursiva es nuestra).
mismo barco”» (ibidem, pp. 22, 23).
rAula7
30
JOSÉ ÁLVARO MARTÍN
implementar. Con palabras del propio Zizek: «En tiempos de epidemia se necesita un Estado fuerte, puesto que las medidas a largo plazo, como las cuarentenas, tienen que llevarse a cabo con disciplina militar. China fue capaz de poner en cuarentena a millones de personas. Parece improbable que, enfrentados a una epidemia de esa misma escala, los Estados Unidos sean capaces de hacer cumplir las mismas medidas.»10
identificamos con soldados que solo deben cumplir órdenes. Los demás seres humanos se convierten en enemigos por convertirse en posibles fuentes de contagio. En lugar de la nueva solidaridad entrevista por Zizek, Agamben sostiene que el virus nos «ciega y separa».13 Debemos evitar a los otros en toda circunstancia: «Quienquiera que sea el otro, incluso un ser querido, no debemos acercarnos a él o tocarlo, y de hecho hay que poner distancia entre nosotros y él… Incluso los muertos –esto es verdaderamente bárbaro– ya no tienen derecho a un funeral y no está claro qué sucederá con sus cadáveres. Nuestro prójimo ya no existe.»14
Esta preocupación por la efectiva defensa del ciudadano frente al poder político y por la protección de la legalidad, ante toda extralimitación estatal, ha sido constante en la reflexión del italiano Giorgio Agamben (Roma, 1942). Su propuesta filosófica intenta evitar que se renuncie a las propias libertades (privacidad), en situaciones excepcionales, para favorecer un bien mayor relacionado, por ejemplo, con la salud: «Es así que, en un perverso círculo vicioso, la limitación de la libertad impuesta por los gobiernos se acepta en nombre del deseo de seguridad que ha sido inducido por los mimos gobiernos… condenando a vivir en un perpetuo estado de miedo.»11 Desde su perspectiva, la apelación a la presencia de circunstancias extraordinarias, y la instrumentalización del temor, podrían llevar a suspender la vigencia de toda ley reguladora. Se generaría, así, un ejercicio ilimitado del poder, para el que todo estaría permitido (es lo que llama estado de excepción pues regiría una ausencia completa de derecho).
La pandemia supone igualmente una utilización decisiva de las tecnologías que permiten la comunicación. Pero al precio de que desaparezca la presencia física directa de los interlocutores en el diálogo, de que se empobrezca la experiencia corporal y afectiva de intercambio, de que se reduzca toda la información a aquello que puede observarse en una pantalla: «que…se cierren las universidades y las escuelas, que las clases sólo se dicten “online”, que dejemos de reunirnos y hablar…, que únicamente intercambiemos mensajes digitales y que, donde sea posible, las máquinas sustituyan todo contacto –todo contagio– entre los seres humanos.»15 Finalmente, la enfermedad ha abierto nuevas formas de control digital de la población que podrían ser utilizadas de manera perversa. Citando la biopolítica de Foucault, donde el autor francés describe cómo el Estado moderno controla aspectos relacionados con la natalidad, la vacunación preventiva, los consejos alimenticios, el análisis estadístico de la mortalidad y otros factores vinculados a la salud corporal (que permiten una vigilancia amplia sobre la población), Agamben avisa del peligro que esos instrumentos esconden. La supervisión mediante cámaras y móviles puede utilizarse para privar a los ciudadanos de sus libertades y conculcar todos sus espacios de privacidad. Estamos ante una posibilidad real:
Aunque, Agamben minimiza inicialmente el alcance de la epidemia basándose en un informe del Consejo Nacional de Investigación italiano, que la identifica con una simple gripe, nuestro autor profundiza en cómo cualquier circunstancia excepcional puede ser utilizada por cualquier Estado para limitar libertades. Así, este contagio demuestra que, últimamente, la suspensión de derechos ya operada contra los inmigrantes, por ejemplo, acaba siendo habitual para el conjunto de la población: «El estado de excepción, al cual los gobiernos nos han acostumbrado desde hace muchos años, se ha convertido de veras en la condición normal.»12 También analiza las consecuencias vitales implicadas en las medidas adoptadas por los gobiernos contra el Covid-19. Le preocupa la comparación de la epidemia con la guerra, donde nos
“No soy el único en pensar que para un gobierno totalitario como el de China la epidemia ha sido el instrumento ideal para verificar la posibilidad de aislar y controlar a una región entera. Y el hecho de que en Europa podamos referirnos a China
10 Ibidem, p. 17. 11
AGAMBEN, Giorgio. ¿En qué punto estamos? La epidemia como política. Trad. Mª Teresa D’Meza y Rodrigo Molina-Zavalía. Buenos Aires:
13 Idem.
Adriana Hidalgo editora, 2020, pp. 17, 25.
14 Ibidem, pp. 21, 39 (la cursiva es nuestra).
12 Ibidem, p. 24.
15 Ibidem, p. 21 (la cursiva es nuestra).
31
rAula7
«I’M NOT A VIRUS»...
como modelo muestra sólo el grado de irresponsabilidad política al que nos ha arrojado el miedo.”16
También preocupado se muestra ByungChul Han (Seúl, Corea del Sur, 1959). Pero no tanto por el uso dictatorial que los Estados puedan hacer de la vigilancia digital, sino por la paulatina aceptación del ciudadano respecto a estos mecanismos presentados como únicos medios para garantizar la supervivencia frente al virus. Y es que vivimos en una sociedad sin enemigos exteriores (caído el muro de Berlín, con un terrorismo actuando en zonas lejanas al Occidente autosatisfecho y una globalización económica que permite la libre circulación del dinero), ha desaparecido todo adversario y toda frontera.17 El capitalismo reinante también consigue que cualquier trabajador se autoexija una siempre mayor eficacia/rendimiento en el desempeño laboral, asumiendo unas megaimposiciones tan exageradas, que acaban, frecuentemente, en sensación de agotamiento o depresión.18 Y, lo peor, el mencionado empleado cree ser libre al re16 Ibidem, p. 36. 17 HAN, Byung-Chul. La sociedad del cansancio. Trad. Aranzazu Sartxaga y Alberto
correr este proceso autodestructivo: «El exceso de trabajo y rendimiento se agudiza y se convierte en autoexplotación. Esta es mucho más eficaz que la explotación por otros, pues va acompañada de un sentimiento de libertad. El explotador es al mismo tiempo el explotado. Víctima y verdugo ya no pueden diferenciarse.»19 Las redes sociales permiten, igualmente, un autodesnudarse del individuo que publica obsesivamente su Facebook-life-dale-al-like; comunica sus compras, pensamientos y deseos en su Twitter-life-dale-al-like; transmite sus localizaciones, contactos y sentimientos en su Instagram-life-dale-al-like o consume ocio, gastronomía, ropa y viajes, gracias a lo recomendado por Whatsapp. Cada click del ratón, resulta registrado. Pero, aun sabiéndolo, el propio sujeto continúa este autoespionaje, divulgando toda su privacidad: «En el panóptico digital no existe ese ‘Big Brother’ que nos extrae informaciones contra nuestra voluntad. Por el contrario, nos revelamos, incluso nos ponemos al desnudo por propia iniciativa.»20 Exhibiendo nuestros recovecos más íntimos acabamos convirtiéndonos en víctimas de empresas que consiguen enriquecerse vendiendo nuestra información personal: «Los datos… se capitalizan y comercializan por completo. Hoy se trata a los hombres y se comercia con ellos como paquetes de datos susceptibles de ser explotados económicamente. Ellos mismos devienen mercancía.»21 Pero, en estas circunstancias, llega el virus… Y con él, regresa un adversario exterior imperceptible… Y el pavor desproporcionado… Y nuevas fronteras confinadas… Y un espanto permanente aislante e individualizante, llevándonos a buscar únicamente nuestra exclusiva y propia conservación individual: «El enemigo ha vuelto. Ya no guerreamos contra nosotros mismos, sino contra el enemigo invisible que viene de fuera. El pánico desmedido en vista del virus es una reacción inmunitaria social, e incluso global, al nuevo enemigo. La reacción inmunitaria es tan violenta porque hemos vivido durante mucho tiempo en una sociedad sin enemigos, en una sociedad de la positividad, y ahora el virus se percibe como un terror permanente… [Además], el virus nos aísla e individualiza. No genera ningún sentimiento colectivo fuerte. De algún modo, cada uno se preocupa solo de su propia supervivencia.»22
Ciria. Barcelona: Herder, 2019 (2ª ed., 8ª impresión), p. 14. Incluso los inmigrantes son considerados más como una carga que como una amenaza (ibidem, p. 17).
Contra Zizek no queda espacio para nuevas solidaridades. La comprensión de nuestra nueva interdependencia, no va a alumbrar una corrección del capitalismo, hacia formas de economía más colaborativas. No aparecerá, así, ningún nuevo comunismo.
18 «La sociedad del rendimiento se caracteriza por el verbo modal positivo ‘poder’(könen) sin límites… ‘Yes, we can’
Lo que sí va a permanecer es esa lucha por la supervivencia económica del más apto: «La solidaridad consistente en guardar distancias mutuas no es una solidaridad que
expresa precisamente su carácter de positividad. Los proyectos, las iniciativas y
19 Ibidem, p. 31.
la motivación reemplazan la prohibición,
20 HAN, Byung-Chul. Psicopolítica: Neoliberalismo y nuevas técnicas de poder. Trad. Alfredo Bergés.
el mandato y la ley… [Cuando esas auto-
Barcelona: Herder, 2016 (1ª ed., 6ª impresión), p. 62.
exigencias no se alcanzan] la sociedad
21 Ibidem, p. 98.
del rendimiento produce depresivos y
22 HAN, Byung-Chul. «La emergencia viral y el mundo de mañana». El País, 22 marzo 2020 (la
fracasados» (ibidem, p. 26).
rAula7
cursiva es nuestra).
32
PHOTO BY MELISSA ASKEW ON UNSPLASH
JOSÉ ÁLVARO MARTÍN
permita soñar con una sociedad distinta, más pacífica, más justa.»23 Además, como hemos visto, el control digital ya existente en Occidente (y no solo en Asia) ha sido asimilado interiormente por un sujeto que se exhibe digitalmente: «También en Occidente olvidamos enseguida la preocupación por la esfera privada en cuanto empezamos a movernos por las redes sociales. Todo el mundo se desnuda impúdicamente. Plataformas digitales como Google o Facebook tienen un acceso irrestricto a la esfera privada. Google lee y analiza correos electrónicos sin que nadie se queje de ello. China no es el único país que recaba datos de sus ciudadanos con el objetivo de controlarlos y disciplinarlos… Mirándolo así, la vigilancia panóptica no es un fenómeno exclusivamente chino.»24
En este proceso de interiorización, donde se asumen como propios todos los controles externos (incluida la necesidad de una mayor vigilancia digital), aumenta la conciencia de que se necesita un nuevo civismo: «La pandemia nos enseña qué es la solidaridad. La sociedad liberal necesita un nosotros fuerte. De lo contrario se desintegra en una colección de egoístas. Y ahí el virus lo tiene muy fácil. Si quisiéramos hablar también en Occidente de un “factor X” que la medicina no puede explicar y que dificulta la propagación del virus, este no sería otra cosa que el civismo, la acción conjunta y la responsabilidad con el prójimo.»25
Finalmente, Han coloca la posibilidad de abandonar nuestros egoísmos disgregadores en nuestras propias manos: «Confiemos en que tras el virus venga una revolución humana. Somos NOSOTROS, PERSONAS dotadas de RAZÓN, quienes tenemos que repensar y restringir radicalmente el capitalismo destructivo, y también nuestra ilimitada y destructiva movilidad, para salvarnos a nosotros, para salvar el clima y nuestro bello planeta.»26
Lo que parece decisivo es valorar si esa solidaridad propuesta por Zizek, Agamben, Han y el papa Francisco, puede funcionar realmente en el contexto contemporáneo. Durante un conocido debate con Ratzinger (mantenido en 2004), el filósofo Jürgen Habermas (Düsseldorf, 1929) admitía que las sociedades secularizadas habían perdido valores como la compasión y el altruismo, debido al individualismo y a la búsqueda del beneficio económico personal.27 En el plano motivacional, esos mismos ciudadanos parecían remisos a cooperar con otros (piénsese en los infinitos incumplimientos diarios que registran las medidas de prevención anticovid: fiestas privadas, botellones, bailes…). Si finalmente fracasa esa posibilidad solidaria de coordinar esfuerzos ante un enemigo común y confiamos la gestión de nuestros persistentes egoísmos a una nueva autoridad mundial que implante vigilancias digitales estrictas, nuestras pesadillas más persistentes, pueden hacerse realidad, en un abrir y cerrar de ojos… //
27 «Cada vez más aspectos privados se orientan por el propio beneficio… [transformándose] los ciudadanos de las sociedades liberales prósperas […] en mónadas
23 Idem.
aisladas, guiados por su propio interés…
24 HAN, Byung-Chul. «Por qué a Asia le va mejor que a Europa en la pandemia: El secreto está
[desmoronándose] la solidaridad ciuda-
en el civismo». El País, 26 octubre 2020.
dana» (RATZINGER, Joseph y HABERMAS,
25 Idem (la cursiva es nuestra).
Jürgen. Dialéctica de la secularización:
26 HAN, Byung-Chul. «La emergencia viral y el mundo de mañana». El País, 22 marzo 2020. Los
Sobre la razón y la religión. Trad. Isabel
ecologistas hablan ya de colapso, ver SERVIGNE, Pablo y STEVENS, Rafael. Colapsología. Trad.
Blanco. Madrid: Ediciones Encuentro,
Marta Suárez. MADRID: Arpa Editores, 2020.
2006, pp. 35, 36).
33
rAula7
Asociación de Estudiantes y Graduados Universitarios Adventistas de España
¿Qué es AEGUAE? Es la Asociación de Estudiantes y Graduados Universitarios Adventistas de España. Fue fundada en 1974 con el propósito de ofrecer a este colectivo de cristianos un espacio de diálogo y reflexión sobre los retos actuales de la integración entre ciencia y fe, promoviendo el intercambio de nuestras vivencias como cristianos con la sociedad contemporánea y el entorno intelectual, siempre con el objetivo del servicio al Señor y a la iglesia.
¿Qué hace AEGUAE? • • • • • • • • • • •
Organiza encuentros anuales de universitarios cristianos. Organiza las Jornadas de Estudiantes Adventistas anualmente. Realiza seminarios y cursos monográficos de ciencia y religión. Edita la revista Aula 7. Publica periódicamente el Boletín AEGUAE. Impulsa el proyecto editorial on-line de Aula7activa.org. Publica libros, revistas y monografías, disponibles de forma gratuita a través de la biblioteca digital de internet de Aula7activa.org. Publica libros y material didáctico para niños en la Sección Infantil de Aula7activa.org. Gestiona becas para estudiantes de teología. Promueve la educación adventista, apoyando a sus instituciones y programas. Busca el intercambio de ideas y personas a través de proyectos puntuales de cooperación.
NOTIC IA S CAFÉ HISPANO
Cómo participar...
una publicación de Adventist de www.spectrummagazine.org, Café Hispano es la sección en español en Estados Unidos. Forums, el equivalente de AEGUAE Ruben Sánchez Sabaté. de Café Hispano corre a cargo de Desde enero de 2010, la edición
“Proclamando la gracia de Dios”, como
La enseñanza cínica del Templo
• • • • • • • •
Escribiendo artículos en nuestra revista Aula 7 y el Boletín AEGUAE. Dialogando en los foros de debate por internet. Enviando noticias y/o reportajes de actualidad. Difundiendo las direcciones de internet vinculadas a AEGUAE. Compartiendo las publicaciones. Colaborando en los proyectos de cooperación. Suscitando temas de debate en el marco de seminarios o convenciones. En todo aquello que se os ocurra que pueda aportar algo positivo.
Eduardo Kahl
José Manuel López-Yuste
aportación de José Manuel Juan Ramón Junqueras dijo sobre esta a los locales de nuestras iglesias, López-Yuste: “Y nosotros llamando aún contenido, paredes con carne y templos; confundiendo continente y sangre. [..] placer leerte.” Gracias, José Manuel. Es siempre un enriquecedor
que asistió al último Crónica de un joven de la División Sudamericana la Iglesia Adventista del Séptimo congreso de la Asociación General de julio de 2010. Día celebrado en Atlanta entre junio y
La Iglesia Adventista y los derechos
los Corintios La Creación en la correspondencia a/2010/09/09/ http://www.spectrummagazine.org/cafe_hispano s la_creacion_en_la_correspondencia_los_corintio Herold Weiss
que la carta a los Corintios Te apuesto un guisante a que no sabías también habla de la creación.
Sauna Espiritual (6): Hoy hablamos de
yo lo vi
http://www.spectrummagazine.org/node/2657
/2010/09/02/ http://www.spectrummagazine.org/cafe_hispano la_ensenanza_c%C3%ADnica_del_templo
personas
humanos
http://www.spectrummagazine.org/node/2679 Jonás Berea
respecto a otro comentario Víctor Armenteros comentó lo siguiente “Juan Ramón: Suscribo todas y sobre dicho artículo de Jonás Berea: la voz y decir que vivimos cada una de tus palabras. Es hora de levantar del décimo mandamiento. Y, lo inmersos en la transgresión constante huelga a la japonesa: más cariño, que es peor, nos gusta. Hagamos una más asertividad, más cercamás afecto, mas sensibilidad, más empatía, reflexión lo expresado en este nía. Agradezco desde lo profundo de mi artículo. GRACIAS.”
http://www.spectrummagazine.org/node/2670 Víctor Armenteros
Víctor Armenteros, marca de la casa.
Recuerda En http://www.aula7activa.org
puedes encontrar una biblioteca
A continuación te presentamos
SEMINARY STUDIES 2009
Volumen 1
digital cristiana con descargas
gratuitas.
las revistas que puedes consultar:
A
Andrews University
L
U
Nº 22 Nueva Época – Diciembre
A 2009
Número 2
Versión digital editada por:
Editada por:
inglés originalmente por el Seminario Teológico de la Universi-
Convención AEGUAE y tratando la temática
dad Andrews.
propuesta.
Revista editada en 9 idiomas por la Aso-
Revista editada en
Publicación anual coincidiendo con la
Revista editada en
inglés originalmente por el Geoscience Re-
ciación Internacional para la Defensa de la
search Institute (GRI)
Asociación
Libertad Religiosa. s y Graduados de Estudiante
Universitarios
s de España
Adventista
de 2010 Septiembre
UniDivers
... y colaborar en
ia...
s de España nos de distintos punto n, estudiantes En esta ocasió una perspectiva cristiana. educativo desde MARTA ORTEGA
• • • • • • •
Organización y logística de congresos. Soporte técnico en audio y vídeo. Asesoría informática. Creación gráfica. Autoedición. Traducción de textos del inglés, francés, alemán, etcétera al español. Y mucho más...
made in
CREATIVO Texto: Amador Martín.
E
Estudiante de Medicina.
facebook.com/aeguae
En este número
En la Biblia aparece más de 170 veces la palabra oído, oír o sus derivados.
ero
En este núm
leza caída • La natura no Café Hispa nismo • Noticias Mero Cristia • Has leído:
34
OA NDEZ ALDEK
una vez?
n la cima de una montaña, siento la gélida brisa de un viento ría de tal modo que invernal rozar mi un cara. Oigo a mi compañero te resultaría apenas nivel intermedio de voz perceptible. ¡Menos cendamos. Un movimientodecirme: vamos, desque Dios no se olvidó mal y siento cómo los de estos tres huesecillos esquís se deslizan y la membrana! sobre la nieve, cogen Añadiré que el estribo dad, comienzo a hueso más pequeño es el descender la montaña velocide todo tu cuerpo. comienza: el sentido y aquí eso cuánto es? ¡3 ¿Y de mm! Al hablar de sentidos la Trinidad. Nuestra onda finalmente estudiantes decimos: tacto, olfato, gusto… llega al estribo. Experiencia de los ¿Has pensado cómo Esta es la puerta tas de España ersia: sería vivir sin uno al compartim • UniDiv arios Adventis de ellos? ¿Cuál refleja o ento más espectacular de todos: s Universit a la Trinidad? s: Café Hispan tes y Graduado el oído interno Noticia ¿Trinidad? La Biblia • (dividido n de Estudian en tres partes). nos Asociació Dios Hijo y Dios Espíritu habla de Dios Padre, En él se aloja el conocido Santo. Son tres, “caracol”. Esta mauno. Teniendo esto son ravilla arquitectón claro podemos iniciar ica transforma las búsqueda… ¿alguna la ondas impulsos nerviosos pista? Te lo pondré que posteriormente en se encuentra en Abril de 2011 procesados por tu serán la cabeza. Supongo fácil, cerebro. te habrá ayudado que no A nivel básico, el caracol está compuesto mucho, pero me te quiero; gritar sirve para recalcar la importanci el gol cias a las 3.500 células por tres rampas. Gramundial; una melodía de Iniesta en la final del ciliadas internas excepción del tacto a de que los sentidos (a Sistemática. 12.000 externas y las que momento especial…m que te transporta a un ndo en Teología (que forman 3 filas), cuerpo) solo se encuentrense sitúa por todo el N. T., Doctora acciones hoy me habría mecánicas complejas Dios? «Si dieres oído il cosas….¿qué nos dice Exégesis de situados en todo y miles de reacciones cefálica, : de haber muerto a mi , Maestría en percibimos ondas tiene su orden como en la zona en Teología no pocos, entiend serás mi especial tesoro voz y guardas mi pacto, lleva a afirmar con observamos Licenciado en la naturaleza, en sobre todos los pueblos, ser, lo que los e a ser temerosos. Otros, cambiamos de estado Qué bonito es poder diferentes frecuencias. López Postigo. la arquitectura, en porque mía es toda estado del distinguir sonidos Texto: Antonio la músilo que la tierra.» (Exódo lo tanto si ¿en la qué? ¡Música! res,ca…. graves, medios y agudos, Esta frase es ; esto nos conduc 19: 5). , y que por «Amo al Señor. Porque ¿no? de los pecado ¡porque s pecadores”. “pecador” salvado fruto vamos a hablar Esa es la palabra clave, r es un estado ha escuchado mi s por encima sabe pecador, el En íntima relación Sí, es, no estamo ser pecado mis súplicas, porque voz y res, estamo con el caracol se uno se título la ayudó? Pero… del oído! ¿El centro del somos pecador la realidad que somos. al que no se que ha inclinado a mí los tres conductos sitúan s de ser pecado ficientes. Cuando os hombres de uno mismo, te su oído, ¿en por qué eso enuncia hombre dejamo se semicircula lo horror parece invocaré un la o el a la de porque el oído ha res orientados mientras yo viva.» Trinidad? sión según los tres ejes e a ser autosu o, la humillación, import ante humano. Sólo ha existid Jesús de Nazaret. Y 116: 1-2). ¿No merece (Salmo y la compre Recurrirem nos conduc espaciales. ¡3D! Estos o nuestro amigo Dios ntido el nales, junto con el arrepentimient el ansia de perdón la voluntad: la naturaleza caída os a la anatomía caes un atribut r arrepe nuestra alabanza? toda utrículo y el sáculo, otro, y fisiología del debe ser el nosidad de pecado ido del la mismo: a En sabe pecami la El la entend se r Cristo, oído se divide en túan a nivel espacial, nos sipatétic ha ha tratado 170 veces las palabras Biblia aparece más de tres partes, que, compresión la muerte. Cuando uno la identificación condesde con detectan cualquier le puede atribui hombre el que mejor el que con más acierto oído, oír o sus derivados. de movimiento en ad, de tación fuera hacia dentro, son: el camino , ¿Queda algo más? cualquier dirección, tipo de la humild solidar idad oído extersido este mismo, el que mejor la explica de indicarnos no,lamedio tidos, la confronen ¡Pues si! “El primero iento nto convicapaz e sentido, interno. arrepen crecim sido nacimie ángulo… ¿Ves el diseño Tres, ¡qué casualidad! dos el último y el último será los no fruto es el del ser humano de tal manera, que ha en un nuevo de rescate de Si el primero.” ¿Qué la mano de Dios los otros expresa fueses una onda sonora que viaja s, superación atribuirse ación en el hace en él? Hasta aquí esta frase? Está el amor por por el aire y entrasson a los hombre rmación del ser, para la aquel a quien no puede pe-el oído de un por ahora hemos “teorizado te en colabormundo, el respeto y científicamente , convier cuanto ser se transfo humano en el r” demostrado que iva. verías ”, otro hombre siguiente: para la , s, en tanto a medida vamos a la práctica. el último sentido mienta io que te vas aproximand lo vencia compas ser otra cosa, Así, en Jesucristo, “pecado de los hombre el hombre que se pierde es el la cabeza, que implica er que lo contrar oa el orificio del oído ¿Qué espero yo? ¿Es extraño que En nuestro día oído. Cuantas Cristo Jesús. relacionarse para entend expresión cada vez se hace a día, personas habrán Ser o desdeñemás grande pecado alguno: antes. Ésta es la clave s el oído es algo clave. cadores como aceptado a y que esta a los hombrehasta que al entrar en él te sienadultere, envidieeligió amartes Nos Jesús en este último como en un túnel. lo que éramos “pecador arrepentido” r “a secas”. Ser permite disfrutar robe, mate, momenes Pero al llegar a lo pecado un mundo donCuando Cristo que vino aparece de la “pecador” to, cuando alguien s del que de “pecador” alguien que antes era el final ves que no con su Dios? buena música … hablando le recordó pecadores, donde todos a no son estado hay salida. ¿Cómo puede en forma de susurro: sólo signific ser eso? arrepentido” tas de la volunsabía que somos ni aún uno, a un lugar de la buena música, com“Dios o “pecador o “pecador ¿se te Dios. Pablo conquis te ama, acéptalo.” “pecador” s la ha ocurrido lo importante de no hay bueno idos de la gloria de Te encuentras En del ser, no son en nosotro ra del hombre delante de la membrana del no son tímpano; los oídos de aquellos breve ser sino formas del Espíritu que recrea humana de es una maravillosa a que es este sentido estamos destitu la naturaleza pecado que se ón obra de s 7. Nuestr arrepentido” sino bien fueron al descanso El estado en Romano es la expresi tad propia de lla un/a músico/a. ¿Qué para en que posee ingeniería. tensión prendió muy y Éste , dejando su Cristo amente sino Dios. desarro Espíritu ser puede transmite la se e perfect esperanza en la segunda ser vibración ando con el de la voluntad de da mejor que preguntárs y la describ onda a la cadena a uno estados del verdadera luchase hace uno venida divina cooper voluntad humana que elo? Este es de huesecide Cristo junto con llos. ¿Huesecillos?en externa, la el testimonio de una la voluntad aquellos vivos en la ser lucha no es del acto irse ¿Adivinas cuántos son? preguntas que del divina las fruto que as magnífica cia en convert hayan ser, pensado ser, Si por permanecidos fieles violinishas form 3, has ta, Silvia Bazantova: es la presen hombre, un nuevo que el interior del desea luchar hasta delacertado: el final oirán las martillo, yunque “La verdad es que tido. estribo. r “a secas”, trompetas de las y mente del que ser pecado Éstos se estando completamente enamorada una a luz un nuevo el pecador arrepen encuentran en el [...] tes celestiales y huesmismo, en la que puede as, implican rpero Dios: oído medio. dejar de de y de al la Bueno, o Hijo música acepta dinámic tido del cial ginándome son e hombre imacreativ todo esto, ¿para qué y debe decirle: “Sal de la tumba, que no pudiera del ser llo existen mencionado pecador arrepen sirve? Para para vencer darte vuelve a casa junto un ajuste hemos la capacidad de crearla oír o que no tuviera Todas las formas o negativa, un desarro o hacia la nedeque s ni fuerzas impedancia. ¿Un ¿Puedes siquiera a mí.” de fe. Como mo lo agradezco a Dios del ser ajuste de positiva qué….? Para que intentar imaginar no tiene recurso la victoria un acto día el gran regalo cada progresión na hacia la afirmación muy mal comprendido nos entendamos, o es ese dinamis eso? Mi mayor deseo es o de de poder oír y sobre En viene a ser siente libre algo dinámic ntido que: sino el oírte gritar de tese faltan todo por la música en sí, ya estosno que se encami Este dinamismo ha sido confundido ser y estar.fusiona- vencer, haciend imos el ser como tres huesos y la membraen ese momento, alegría que por ahora lo que r arrepena timpánica ntido saber que a pesar si conceb r arrepe más me acerca al cielo y lo tu sensibilidad así el pecado gación de éste. mismos cristianos. Hemosambos conceptos están de las circunstancias de tu del auditiva descendeen antes, que más cosas buenas identidad, éste. El pecado por encima los vida, el peso de la provoca en mí es la música o el francés lingüístico. Muchos entiend un determina mi liberado, cada día, de incluso por sociedad, las influencias, los lo hace estar (a parte vencer como como el inglés sino nivel conflictos… decidiste espiritual que es lucha, cada día es personas que me rodean).” de Él y el amor de las del ser sino del pecado otras lenguas uen, ni se puede a un la voz de Dios llamándote oír de la de nirvana cada día como una forma a vivir junto a Él Siguiendo el hilo dad del milagro llega a un estado arrepentido dos, no se distingestar salvo; no lo ven por la eternidad. musical, los acordes el pecador es como la posibili porque se ha experiformados por tres están error, para a, ver al otro que ser salvo notas de intervalo se equivoc cada día es cera. de cuando terCristo, ¿No te parece apasionant en fren, sobre todov e? Dios le una gran importanci con la misma transformació mismo. a a la música, millaresda día para nacer uno o sino condumillares de ángeles y muere cada mentado en no juzgand de viven para dar gloria arrepentido a Dios. ¿Y nosotros y loor o en los demás,a los que forman parte El pecador como este proces clara ñando ¿Qué oyen los demás humanos? ¿Qué oímos? la esperanza sus do y acompa cuencia y acepta tiene de tido animan nosotros? do, arrepen Cristo con Recuerdas un grito ciendo, indican prójimos. El pecador que verá a de triunfo después más luterminará, un examen difícil; de es no habrá su mundo como sabe que su lucha un susurro al oído tido y que entonc diciendo: cada día, porque las nubes de los cielos de ser un pecador arrepen o en un príncipe ojos viniend ni clamor, entonces dejarárescatado por Dios; nos queda chas, ni temor, en un ser de luz y gloriapecado. Mientras tanto crecer el tirse esperanza, alguna con para conver sin relación cuenta nuestra a los otros que son junto a Cristo caída y, teniendo en s mismos y leza esta natura de soport arnos a nosotro ia en la pacienc cada día. s, como nosotro
“L
www.aula7activa.org
RUBÉN FERNÁ
GÓMEZ
¿Lo has oído alg
leza caída
www.aeguae.org
o iencia en el entorn
21 Años. de fin de do el proyecto Está finalizan ía Informática. 21 Años. carrera de Ingenier de segundo curso de estudios como s Estudia nte de un nuevo centro Técnica. empezamos en nuestras creencia Arquitectura re de ocultar A menudo cuando tenemos la costumb incertie dad, smo ros. la universi no nos va a de estrés, nerviosi nuevos compañe que la gente adelante, esa sensación a todos nuestros el motivo es que creemos s incompatiSacar el curso en la ¿Te resulta familiar bachillerato? unos principio veces de os acepten solos final te Muchas al guardam que , vive Nos sentimos deseada para somos, ya que dumbre que se de hoy en día. dad con la nota si estás preparado o no aceptar como clase con unas sociedad juvenil aprobar la selectivi no te puedes . Nadie piensa con los de la únicos en nuestra los evitar, bles quieres.. que puedes seamos que que no universidad ya que es posible encima, es algo la primera es así. Pasada complelo que se te viene creencias tales. me ha demostrado que no que sería uno de mis en la que ibas hacer; quedar parado. un cambio de una época ndo con el La experiencia lo que debes que él era a estaba conversa a la nadie te dice Dios. Resultó Te enfrenta s de estos semana de clase,cuando surgió el tema de a otra en la cual un adulto. Eso, de la noche ción. Con el paso tamente guiado ya seas mejores amigos de un grupo de confirma en la universidad que se espera que en simplemente suyos de consegu ir! comte admitirá n católico y monitor compañeros es tan sencillo cuales he podido conociendo a la nota que quieres, allí te sentirás a mañana , ¡no a vidas y con los consegu irás 3 años he ido vez estés personal de entenderde a Dios en sus Si tienes suerte mente, y una nuestra forma también tienen que tenías en en nuestro centronte opiniones sobre e? ¿O gente la universidad a irá bien. r diversas suficient todo es y no encontra partir carrera pasa si tu nota ación, pero difícilme .¿Qué que no solemos gusto con la Dios. Es cierto de nuestra misma denomin equivocas? ¿Qué te sientes bien en ese entorno? vida el amor Pero, ¿y si te presente en su si no que sea tenga NADA. estudios gusta?¿O que te pasa a alguien si la carrera no o no das la talla? Pues no que más nos a más no encontra remos es he conocido y escoger el camino pasa si suspend r la carrera, donde Dios. podemos probar es el comienzo de tu futuro. de termina estar cuando para puede mes Es ahora solamente A falta de un me han demostrado que Dios paciencia e insistir. son fracasos, do tu que que tener mucha convenza. No de no de 9 personas de verdad, hay no hayas encontra pensamos o Si quieres algo hacerlo. se tuerza, que de decir lo que menos te lo esperas. ser capaz de la primera todo a todas partes. que no vas a tengamos miedo Puede que a su lado? Eso y su amor llega Así pues no que te parezca Dios está de s. Dios es grande el principio. para ti. lugar aún, incluso puede consegu ir algo si sentirnos aceptado s y universidades son solo qué es lo mejor ¿Pero quién no te de todo: que Dios sabe indicará el Escuelas, instituto lo pongas, te desde el es lo más importano, por muy difícil que se hacerle caso Y tarde o tempranAhora bien, ¡más nos valdría Porque si perseveras . camino correcto escúcha le y deja que te guíe. estar. s que adonde necesita principio! Así Dios te llevará y no te rindes,
La natura
¡ACCEdE AhorA!
exper hablan de su
lo rojo? ser un glóbu ¿Quieres the end CREATIVO: ARISE in • made in AMiCUS 2011: • Congreso ita... : se neces • Aula7activa
a de Dios [...] ión olvidad to moral La dimens E: El laberin • Has leído: ción AEGUA • XXXVI Conven
EL LAODICENSE QUE LO TENÍA TODO Cuento radiográfico inspirado en hechos reales Sarai de la Fuente Gelabert Médico de familia y pediatra de at. primaria. Vocal de AEGUAE
É
rase una vez… un joven universitario que lo tenía todo.
por completo, sus amigos, su familia, sus antepasados, toda su historia tenía por núcleo esa vida de iglesia.
Vivía felizmente una iglesia activa. Compartía vivencias y proyectos junto con su grupo de jóvenes, algunos también universitarios, francamente implicados en la misma iglesia. Acudía a tantas actividades del departamento de jóvenes de su Unión como le era posible y ocasionalmente acudía a eventos internacionales –ahorraba y planificaba sus gastos para ello–. Estaba implicado en AEGUAE desde tiempo atrás, promoviendo el estudio de la Biblia y el diálogo reflexivo espiritual. Realizaba actividades solidarias con ADRA y visitas a la residencia de ancianos. Servía como monitor en el Club de Exploradores de su iglesia y en los campamentos y camporés nacionales. Colaboraba como maestro de escuela sabática. Lideraba un grupo pequeño de oración en su hogar. Participaba en el grupo de alabanza musical. Ofrecía charlas y organizaba ciclos de conferencias en la iglesia. Organizaba programas lúdicos y salidas de convivencia –siempre con espíritu misionero–. Escribía artículos para la revista Aula7 y la Revista Adventista. Cada día seguía sus lecturas devocionales, oración y estudio de la Biblia personal. En definitiva, tenía una vida comprometida en la iglesia al doscientos por ciento.
No por ello era ajeno a su entorno social y cultural. Era un estudiante modélico desde siempre. Estaba terminando una carrera de éxito y a las puertas de comenzar una profesión altamente reconocida y retribuida decentemente. Su vocación profesional le llenaba de satisfacción. Gozaba también de amistades y un nutrido círculo de confianza «fuera» de la iglesia. Se implicaba en el voluntariado comunitario y en donaciones a causas justas y solidarias. Sus impuestos, al día. No debía nada y ahorraba bastante. Vivía confortablemente y hacía planes de futuro prometedores… familia, casa, hijos… ¿quién sabe? Fiel a comer sano, hacer deporte, cuidar el descanso y la salud mental, disfrutar y pasarlo bien... Lo tenía todo. «Entonces el reino de los cielos será semejante a diez vírgenes que tomando sus lámparas, salieron a recibir al esposo. Cinco de ellas eran prudentes y cinco insensatas. Las insensatas, tomando sus lámparas, no tomaron consigo aceite; mas las prudentes tomaron aceite en sus vasijas, juntamente con sus lámparas. Y tardándose el esposo, cabecearon todas y se durmieron. Y a la medianoche se oyó un clamor: ¡Aquí viene el esposo; salid a recibirle!» (Mateo 25:1-6).
Podría pensarse que era la antítesis de otra historia no infrecuentemente contada: aquel no era el caso de quien tuvo una vida desgraciada, delincuente, marginada, rodeada de mal, problemas y otros vicios, que luego fue rescatado y regresó al Padre. Él no era el hijo pródigo. Quizá era más bien el hermano «pijo» afianzado en la casa del Padre. Estaba ahí a tiempo completo. La realidad de su vida, era la realidad con su iglesia. Todo él
Su lámpara, la de las ‘prudentes’, también se apagó. El sistema había caído.
35
rAula7
EL LAODICENSE QUE LO TENÍA TODO
Como en cualquier buen guion que se precie, aquí llega el punto de inflexión, el giro de guion. Y sabemos qué sigue a continuación: nada. Nuestro sistema ha caído. El último año de la segunda década del tercer milenio d.C., se paró el relato. Nada siguió como hasta entonces. ¿Qué pasa cuando lo tenías todo? Sería un error pensar que la pregunta equivale a: ¿qué para cuando ahora no tienes nada? Porque si te paras a pensar y valorar, sigues teniendo ese todo. Sería más bien plantear ¿qué pasa con tu compromiso cuando no lo puedes ejercer como antes? ¿Cómo mantienes tu todo cuando el guion gira?
Para Pablo, también pudo ser una realidad el plantearse qué hacer cuando lo había tenido todo. A pesar de su curriculum vitae envidiable para la época (Filipenses 3:3-6), escribió a los hermanos de la iglesia en Filipos: «…cuantas cosas eran para mí ganancia, las he estimado como pérdida por amor de Cristo. Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida
La vida que has construido junto al Señor, al lado de tus hermanos/as de iglesia, sigue. Debe seguir. Los dones que Dios te ha concedido están, fueron invertidos, no los dejaste enterrados (Mateo 25:14-30). «Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron, y arreglaron sus lámparas. Pero mientras ellas iban a comprar, vino el esposo; y las que estaban preparadas entraron con él a las bodas; y se cerró la puerta» (Mateo 25:7).
¿Qué pasa cuando lo tenías todo? ¿Qué pasa con tu iglesia, tus jóvenes, tu AEGUAE, tu JAE, tu escuela sabática, tu club, tu grupo pequeño… tu todo? Quizá, que no puedas tenerlo igual, no quiere decir que no esté. La lámpara se rellena. El talento se invierte. Porque no es lo tuyo, no es lo que tú tienes. Es lo que Dios te presta, lo que Dios te regala para usarlo, disfrutarlo y compartirlo para su honra y gloria, para servir al prójimo, para amar. El amor no dado es amor perdido. El único amor perdido es el que no das. Hablar de lo que teníamos en modo pretérito, es no terminar de entender y darnos cuenta que aun disponemos de ello si seguimos teniéndolo con Dios. «Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la vergüenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para que veas» (Apocalipsis 3:18).
Reequiparse, reinventarse, giro de guion. Para un cristiano convencido, un creyente honesto y sincero, que desea hacer la voluntad del Señor, aquello que hace o tiene para compartir es lo que queda en esencia: amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza… es el Fruto del Espíritu (Gálatas 5:22). Pablo también nos sugiere reequiparnos con una vestidura que no pasa de moda desde el primer siglo d.C.: cinto de verdad, coraza de justicia, calzado de evangelio de paz, escudo de fe, yelmo de salvación, espada del Espíritu que es la Palabra de Dios (Efesios 6:10), junto con la oración y la misma perseverancia en velar que Jesús insistió al referirse a las diez vírgenes. PHOTO BY JOANNA KOSINSKA ON UNSPLASH
rAula7
36
SARAI DE LA FUENTE GELABERT
por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo, y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe…» (Filipenses 3:7-9).
Pero la misma lección para Pablo entonces: «Bástate mi gracia, porque mi poder se perfecciona en la debilidad» (2ª Corintios 12:9), sigue siéndonos de utilidad ahora, al decir como el apóstol, que con y por Cristo: «cuando soy débil, entonces soy fuerte» (2ª Corintios 12:10). De la nada al todo.
Además, la experiencia incomparable de ser «arrebatado al paraíso» que vivió catorce años antes de escribir la segunda carta a los Corintios, pudo haberle hecho vivir ese todo anhelado de permanecer en presencia de Dios. Él mismo sugería que si hubiera de gloriarse de algo, sería de aquella visión (2ª Corintios 12:1-10).
Más personajes que conocemos por la Biblia pudieron plantearse qué hacer cuando lo habían tenido todo. Y el Señor, en su infinita y pedagógica misericordia, permitió que conociéramos sus historias para que la acción divina en sus vidas pudiera inspirar las nuestras, pero, sobre todo, que tuviéramos la seguridad en
37
rAula7
EL LAODICENSE QUE LO TENÍA TODO
la fidelidad inquebrantable de Dios a pesar de todos los pesares: > Adán y Eva: del todo en el Paraíso, al exilio con sudor de frente y dolor de parto. Supieron de primera mano el futuro de la victoria. > Abraham y Sara: el gran y rico líder tribal sin descendencia, cuando por fin tiene a su heredero de todo, le toca aprender a confiar que solo Dios proveerá el cordero. > Jacob: acumulando éxito a base de engaños, combate con Dios creyendo que es su hermano quien se lo puede arrebatar todo, y el mismo Dios desmonta su cadera y el nombre que lo definía. > Moisés: de una vida total en palacio, a desaprenderlo todo en el desierto para encontrarse cara a cara con Dios. > Job: el más rico e influyente en su tiempo, al que su vida se desmorona por completo. Con su historia vislumbramos algo de lo que hay más allá de nuestra propia y limitada realidad a este lado del cielo: el conflicto cósmico entre el bien y el mal, que fue entonces y sigue ahora. > Salomón: como monarca oriental, añadido a la sabiduría concedida por Dios, posee absolutamente todo lo que desea, con disfrute hasta las máximas consecuencias. Pero en su reflexión final de concluye: «Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud, antes que vengan los días malos, y lleguen los años de los cuales digas: No tengo en ellos contentamiento. […] El fin de todo discurso oído es este: Teme a Dios y guarda sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre» (Eclesiastés 12:1,10). Otro personaje bíblico que anima a encontrar ciertos paralelismos con la actualidad es Jeremías. El profeta vive en un contexto político en que el poder del
rAula7
Imperio Asirio (s. X-VII a.C.) está llegando a su fin. El Imperio Babilónico se va a convertir pronto en la megapotencia de cabeza dorada sobre Mesopotamia, Asiria y Asia Menor. Jeremías nació a mediados del s. VII a.C., en una familia de sacerdotes; y, siendo joven, Dios lo llamó a su servicio. Una muestra de implicación ciento por ciento en la vida de «iglesia» entonces. Fue contemporáneo del rey Josías, quien promovió en Judá una reforma religiosa extraordinaria y llevó a cabo una política de nación independiente. El ministerio de Jeremías se extendió desde el tiempo de Josías, siguiendo durante los últimos cuatro reyes de Judá, hasta que ocurrió la deportación de Jerusalén hacia Babilonia, y el remanente que quedó se exilió a Egipto. Vivió situaciones nefastas encerrado en una cisterna nauseabunda y seguidamente en la cárcel. Estando en el patio de esa prisión fue testigo de la entrada del ejército de Nabucodonosor en Jerusalén; y allí, las órdenes expresas del temido emperador a su capitán de la guardia Nabuzaradán fueron de respetarle la vida y permitirle decidir si emigrar con su corte a Babilonia o quedarse sirviendo a los que se quedaran en la tierra recién conquistada (Jeremías 39:11-12, 40:1-6). Jeremías se quedó con los que quedaron tras el desastre y caída del sistema. En tiempos de Jeremías, el pueblo de Israel, que había sido fundado, guiado y prosperado por Dios, tenía potencialmente todo aquello que una nación en esta Tierra podía poseer, sumado a la protección del Señor. Lo ignoró por completo. Lo vendió todo al paganismo. No cargó aceite. Enterró su talento. En lugar de seguir encabezando su misión como pueblo de ser «luz a las naciones», se empeñó en regodearse en la oscuridad y la confusión. Sus profetas, como Jeremías, transmitían
38
mensajes no solo al pueblo, sino también a las naciones vecinas que necesitaban recibir la oportunidad de conocer al verdadero Dios y Creador. El sentido de ser del pueblo de Israel era mostrar el carácter de Dios al resto de la humanidad. El sentido de la iglesia hoy no puede dejar de ser el mismo por el que Jesús nos reveló toda razón de ser: «Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén» (Mateo 28:18-20).
Érase una vez… un joven universitario que lo tenía todo… o eso creía. Y era influencer con su cuenta @laodicea donde hacía de todo en la nueva iglesia online… o eso creía. Y recibió un whatsapp de @testigofielyverdadero que decía conocerle y conocer lo que hacía y las actividades que colgaba en sus redes, seguido de los emoticonos «hielo», «fuego», «más/menos» y «carita vomitando». Y que replicó con otro whatsapp con un «fajo de euros», la «bolsa de dólares» y el «brazo forzudo con puño cerrado». A lo que recibió el segundo whatsapp: «no sabes k eres 1 desventurado miserable pobre ciego + desnudo» (ya así con
PHOTO BY NADIA VALKO ON UNSPLASH
SARAI DE LA FUENTE GELABERT
letras –aunque sin comas– para que no hubiera confusión de iconos) que lo dejó descolocadísimo. Y tardó tanto en contestar que recibió el tercer whatsapp seguido, esta vez como mensaje de voz en todo amable y conciliador: «Yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la vergüenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para que veas…» Y que no terminando el audio completo porque le interrumpieron misteriosos golpes en la puerta… Y temeroso porque él cumplía a rajatabla todas las normas de confinamiento… Abrió… Y cené con él y él conmigo. Para siempre. //
39
rAula7
ALZA TU VOZ Alza Tu Voz es una iniciativa que promueve la participación activa de los jóvenes universitarios como ponentes principales en los cultos de Iglesia. El público al que va destinado es toda la membresía: (Adultos, jóvenes y niños.) AEGUAE apoya, fomenta e invita a las iglesias a que impartan ATV.
LEER LA BIBLIA CON PAUL RICOEUR José Álvaro Martín Profesor de Filosofía en Secundaria
¿P
científicas sobre cómo es el mundo o cómo funcionan las cosas, sino posibilidades de darle un sentido a la vida, de comprender experiencias como la injusticia, el dolor del inocente (Job), la enfermedad, la culpa o la muerte.1 Al hacerlo, retoma algo ya sugerido por Kant: el hombre no solo quiere conocer científicamente la naturaleza, sino entender una vida donde parece triunfar la injusticia. En la misma línea de crítica al monopolio asumido por los métodos o saberes científicos, Heidegger y Gadamer nos recuerdan que, antes de hacer ciencia, el hombre debe interpretar lo que quiere llegar a ser, desarrollar sus posibilidades, comprender su existencia. Por ello, ha de construir un sentido previo a toda actividad artística, científica, industrial, laboral, familiar o lúdica. El lenguaje religioso aborda estas cuestiones, «¿por qué el sufrimiento y la muerte, el carácter penoso del trabajo y del parto, en una palabra, la ‘dureza de la existencia’?»,2 mediante comparaciones metafóricas y a través de símbolos. De este modo, por ejemplo, si trazamos una equivalencia entre nuestra pandemia y una guerra mundial (las metáforas no son más que comparaciones innovadoras),3 entenderemos nuestra lucha como la de soldados contra un peligroso enemigo (el fatídico coronavirus), la captaremos de forma nueva, mucho más vital y urgente, mejor que si nos limitamos a describirla como simple epidemia. Las metáforas, para Ricoeur, nos ayudan a interpretar
odemos creer en un relato como el del Génesis donde una serpiente habla? ¿Ocupa la tierra el centro del Universo y está asentada firmemente sobre columnas, como parecen sugerir los Salmos? ¿Puede alguien efectivamente andar sobre el agua o resucitar tal y como afirman los evangelios? ¿Deberíamos eliminar del mensaje bíblico todo aquello que no parece compatible con las afirmaciones demostradas por la ciencia o hay otra forma de entender la Escritura? Bultmann (1884-1976) lo tendría claro: el texto evangélico transmite informaciones propias de una visión científica y cultural, trasnochada. Actualmente esos conocimientos han sido ampliamente superados y no podrían ser creídos de la misma forma. Por ello se trataría de desmitificar la Biblia: es decir de abandonar esa comprensión del mundo falsa y supersticiosa que ha sido derribada por la ciencia moderna. No existe ningún tipo de potencia sobrehumana: ni Dios y sus ángeles habitan el cielo, ni hay un poder maligno rodeado de diablillos que pueblan un infierno subterráneo. Si estamos enfermos, vamos al médico y explicamos la naturaleza comprobando qué causas producen qué efectos. Prescindiendo de estos elementos falseadores, habría que reinterpretar los textos bíblicos. En ellos se nos invitaría a comprender la existencia humana de un modo nuevo: somos lo que decidimos hacer con nuestras vidas y debemos aceptar la muerte como última e ineludible posibilidad. Bultmann propondría, así, dejar de lado estos relatos bíblicos ingenuos (mitos) y traducirlos al lenguaje filosófico con el que Heidegger describe nuestro existir (vivimos desarrollando proyectos que chocan con la certeza de la muerte).
1
Ricoeur desarrolla su crítica en «Prefacio a Bultmann». En El conflicto de las interpretaciones. Ensayos de hermenéutica. Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica, 2003, pp. 343-360.
2
RICOEUR, Paul. Mitos de la salvación y razón en hermenéutica. Escritos y conferencias 2. Madrid: Trotta, 2017, pp. 191.
Aun valorando este esfuerzo de Bultmann por no ser engañados, Paul Ricoeur (1913-2005), filósofo protestante francés, nos recuerda que el lenguaje religioso no transmite tanto afirmaciones
3
RICOEUR, Paul. «Acerca de la interpretación». En Del texto a la acción. Ensayos de hermenéutica II. Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica, 2001, p. 23.
41
rAula7
LEER LA BIBLIA CON PAUL RICOEUR
También los símbolos nos permiten entender las cosas de forma novedosa. En ellos, las expresiones lingüísticas tienen un primer sentido literal y otro figurado: ‘paloma’ apunta a un ave y a la paz. El lenguaje religioso está plagado de esos símbolos para sugerir nuevas formas de comprender aquellas experiencias humanas básicas donde el dolor nos desgarra. Nuestro autor sintetiza todo esto con la expresión kantiana: el símbolo da que pensar.5 Y es que es el propio símbolo quien ofrece nuevas perspectivas para captar significativamente nuestro existir. Por ello, los lenguajes religiosos, no engañan o resultan incomprobables. En realidad, no describen fenómenos presentes en la naturaleza (por ejemplo, los mecanismos por los que se transmite el Covid-19), sino que sugieren nuevas posibilidades para interpretar la experiencia de vivir (¿por qué hay pandemias?, ¿por qué los enfermos que las sufren mueren en soledad?). Al considerar esas formas de expresión religiosa como falsas o inverificables, nuestra civilización científico-técnica olvida que vivir humanamente en el mundo requiere entenderlo o interpretarlo significativamente. Y no es otra la función de estas metáforas simbólicas.6
la realidad y nos abren posibilidades distintas de acción o comprensión –es lo que llama redescribir lo real–. 4
«Al considerar esas formas de expresión religiosa como falsas o inverificables, nuestra civilización científico-técnica olvida que vivir humanamente en el mundo requiere entenderlo o interpretarlo significativamente».
Examinemos algún ejemplo. En los relatos babilónicos sobre el origen, lo malo (caos) existe en el mundo desde el principio, como algo que forma parte natural de la realidad. En los griegos, el mal 5
RICOEUR, Paul. Finitud y culpabilidad. Madrid: Trotta, 2011 (2ª ed.), pp. 481-490.
6 La Pontificia Comisión Bíblica Vaticana, en su documento titulado Interpretación de la Biblia en la Iglesia (1994) reconoce a Ricoeur como propulsor de una hermenéutica imprescindible para entender la exégesis católica. Pero atribuye al protestantismo una lectura literalista o fundamentalista de la Escritura, que concibe la inspiración como un dictado del Espíritu palabra por palabra, ignorando la participación de los autores humanos, en el proceso de revelación (ver el apartado 19F). Estamos ante una caracterización muy sesgada, pues olvida que, gran parte de ese protestantismo no compartiría la citada inspiración verbal, distinguiría claramente los diferentes géneros bíblicos (proféticos, sapienciales, narrativos, prescriptivos, hímnicos), permanecería cuidadosamente atenta a identificar convenientemente los símbo-
PHOTO BY ARTURO RUIZ ON UNSPLASH
los o metáforas y se mostraría siempre receptiva a las propuestas de sentido transmitidas en esos textos, sin descalificarlos por su 4
En su opinión las parábolas son un género original, que establece
ausencia de cientificidad. (Para los géneros bíblicos puede con-
una comparación metafórica entre la historia contada (plagada
sultarse: RICOEUR, Paul. «Hermenéutica de la idea de revelación».
de elementos sorpresivos) y el reino de Dios [vid. RICOEUR, Paul.
En Hermenéutica. Escritos y conferencias 2. Madrid: Trotta, 2017, pp.
L’herméneutique biblique. Paris: Cerf, 2001, pp. 147-255].
141-188).
rAula7
42
PHOTO BY JOANNA NIX-WALKUP ON UNSPLASH
JOSÉ ÁLVARO MARTÍN
procede de los dioses, que envidian, ciegan y extravían al ser humano, sin plantearse ninguna posibilidad de superar esa malignidad (por ejemplo, la Caja de Pandora). En el Génesis el mal está presente como posibilidad, pero es el hombre quien lo introduce al usar erróneamente su libertad. Además, resulta erradicable al final de la historia (aparece la esperanza escatológica), pues el propio Yahveh se compromete en plantarle cara (Génesis 3:15). Para Ricoeur, no podemos renunciar a las interpretaciones que estas narraciones –plagadas de elementos metafóricos o simbólicos– transmiten. Porque no podemos vivir sin comprender el mundo y no toda cosmovisión plantea interpretaciones equivalentes –considerar lo negativo como necesario, no es lo mismo que asumirlo como erradicable–.7 Incluso los propios símbolos o metáforas no pueden separarse de sus contenidos. Porque si una paloma representa la paz, no podría hacer lo mismo un dogo argentino o un pit bull americano. Hay, pues, una relación estrecha entre el símbolo y lo simbolizado. La desmitificación bultmaniana intenta prescindir del elemento simbólico, para reinterpretar lo simbolizado. Pero esto es imposible y resulta empobrecedor. No deberíamos prescindir del lenguaje bíblico, por considerarlo poco científico. Como venimos señalando, su función no es informarnos sobre procesos observables en el mundo físico, sino proponernos maneras de interpretar la existencia. Por eso, para Ricoeur, en lugar de desmitificar, deberíamos desmitologizar:8 ser críticos con todas aquellas afirmaciones 7
del lenguaje religioso que falsean la auténtica fe, pero ser muy receptivos hacia todas aquellas propuestas de sentido que ese lenguaje sugiere. Porque, terminando con un ejemplo familiar, no solo necesitamos explicar cómo se contagia este maldito virus exterminador, sino qué significa vivir en un mundo donde cualquier pandemia puede acabar aniquilándolo todo. Devastación, esta, que incluiría las vidas de aquellos seres tan absolutamente vulnerables cuyo palpitar se apagaría sin, ni siquiera, poder disfrutar de la insustituible compañía aportada por un famélico respirador. //
Curiosamente Bultmann le reconoce al relato del Génesis un poder desmitificador respecto a la narración babilónica (vid. RICOEUR, Paul. «Prefacio a Bultmann», p. 353).
8
RICOEUR, Paul. Finitud y culpabilidad, p. 486.
43
rAula7
CONVENCIONES
Año
Lugar
Tema
Oradores
Presidente
1974
Sta. Cecília de Montserrat Creación o evolución
J. Flori y otros
Ferran Sabaté
1975 1976 1977
Sagunt
El joven adventista en la sociedad actual
varios
Antolín Diestre
S. Lorenzo del Escorial
La no violencia
G. Stéveny y otros
Conrad Recha
Jaca
La filosofía cristiana de la historia
S. Schwantes y otros
Félix Valtueña
1978
Salou
Los determinantes históricos del nacimiento de la Iglesia Adventista
C. Puyol y otros
Ferran Sabaté
1979 1980 1981
Peníscola
Filosofía de la educación cristiana
P. Copiz, J. Navarro
Joan Sabate
S. Lorenzo del Escorial
Antropología bíblica
J. Zurcher
Roberto Ouro
Gilet
Psicología y religión
M. Fernández y otros
1982
Cervera
El significado del derramamiento y los dones del Espíritu Santo
J. Mager
1983 1985 1986 1987 1988
Poio
La cruz fuente de vida
G. Stéveny
Ramon C. Gelabert
Benidorm
El santuario
J. Zurcher
Luis González
Navacerrada
La función de la ley en la teología de la gracia
R. Badenas
Ferran Sabaté
St. Feliu de Guixols
El espíritu de profecía
R. W. Olson
Pilas
La justificación por la fe en mi vida diaria
R. Badenas
1989
Laredo
La naturaleza de Cristo
J. Zurcher
Antonio Polo
1990
Guardamar del Segura
Las parábolas: Una clave para vivir la fe
R. Badenas
Raquel Aguasca
1991 1992 1993
Lloret de Mar
El sufrimiento humano y el silencio de Dios
R. Badenas
Guardamar del Segura
El sábado
S. Bacchiocchi
Guardamar del Segura
Nueva Era
M. Fernández
1994
Palma de Mallorca
La esperanza adventista: 150 años de historia, R. Pöhler 1844-1994
1995
Arnedo
El diluvio
C. F. Steger y otros
1996 1997 1998 1999 2000
Baños de Montemayor
Sexualidad: Una perspectiva cristiana
M. Fernández y otros
Alcossebre
La seguridad personal de la salvación
M, Venden
Oropesa de Mar
El evangelio de los últimos días
C. Goldstein
Lloret de Mar
La Biblia y la cultura mediterránea
varios
S. Lorenzo del Escorial
La mujer y la iglesia. El racismo en la iglesia
F. Guy, H. Williams
Miguel A. Roig
Pedro Aguerri
Alfred Quiles
Ferran Sabaté
Alfred Quiles Ferran Sabaté Joel Amigó
Año
Lugar
Tema
Oradores
Presidente
2001 2002 2003 2004 2005 2006
Tarragona
El postmodernismo y el cristiano
V. Fantoni y otros
Oropesa de Mar
Adventismo: ¿Iglesia, denominación, secta...?
J. Gallagher
Tortosa
El cristiano ante el cine
F. Henriot y otros
L’Ametlla de Mar
Bioética
varios
Lekarotz
Creer en Dios después de Auschwitz
J. Doukhan
Los Yébenes
¿Vale la pena esperar la Segunda Venida?
V. Fantoni, J. A. Martín
2007
Tortosa
El Sello de Dios para un nuevo orden mundial
M. Fernández y G. Sánchez.
2008
Gandía
¿Y qué hay más allá de todo esto?
A. López, J. A. Martín
2009
Alborache
La música en la vida del cristiano
W. Bucknor, A. Calvo, A. Perera
2010
Alborache
El laberinto moral: Afrontando los dilemas éticos del s. XXI
J. A. Álvarez, J. Gil
2011
Benicàssim
Amor en tiempos de tregua
V. Armenteros, C. Chimpén
2012
Sant Salvador, El Vendrell
El cristiano ante el sufrimiento
R. Badenas y otros
2013
Sant Salvador, El Vendrell
Cristianismo hoy, ¿qué importa y qué aporta?
M. Pearson y otros
2014
Alborache, Valencia
Hablando se entiende la gente. Diálogo interreligioso en el siglo XXI.
R. Elofer y otros
2015
Benicàssim, Valencia
Cristianismo y homosexualidad: Perspectiva bíblica y pastoral contemporánea
R. Davidson y otros
2016
Benicàssim, Valencia
Yes He Can: Cristianismo y política a debate
J. Graz y R. Pöhler
2017
Alborache, Valencia
Cristianismo y consumismo
V. Armenteros, S. Gil y J. A. Martín
Silvia Palos
2018
Entrepeñas, Castilla la Mancha
¿En qué momento pasamos de ser movimiento a ser institución?
J. de Oliveira y otros
Isaac Llopis
2019
Entrepeñas, Castilla la Mancha
El clamor de la creación: Cristianismo y ecología
J. A. Álvarez
2020
Online
La iglesia en estado de alarma: ¿Crisis u oportunidad?
I. Martín, D. Bosqued, S. Albu, S. Gil y J. Á. Martín
Antonio Polo
Eva Basterra
Isaac Llopis
Sarai de la Fuente
Ferran Elavoko Sabaté
Alexandra Mora
Narcis Dragomir Manel López