Agosto 2009
Congreso europeo de jóvenes en Munich 5-9 agosto 2009
En este número 1
Congreso
europeo
de
jóvenes en Munich 4
Próximos acontecimientos
Casi la 1 de la madrugada, metro de Munich. Estruendo en forma de “worship” en los vagones. Más de un centenar de voces alaban a Dios en sus idiomas. Las escaleras mecánicas de la estación forman una ola. Alegría. Hemos revolucionado, en pocas horas, la capital bavaresa. Los autóctonos nos miran sorprendidos. Bienvenidos al congreso de jóvenes adventistas. Barcelona, Madrid, Zaragoza, Valencia, Mallorca, Girona, Santiago, Albacete, Castellón. Jóvenes estudiantes de instituto, monitores de campamentos, abogados, cantantes que graban CDs, directores de jóvenes, etc. Cada uno de los 83 españoles y de los 3500 europeos asistentes al congreso trae una mochila distinta llena de diferentes sueños y anhelos, problemas y preocupaciones. Sin embargo, a todos nos une lo básico, nuestra fe, una forma similar de entender a Dios, y por eso estamos todos juntos, y en Alemania. El Congreso fue enérgico, con charlas emocionales, en las que los ponentes quisieron transmitir la preocupación de la Iglesia porque muchos jóvenes la abandonan, y que debemos poner nuestra parte para que esa gran Verdad que poseemos no quede en un mero discurso teológico. “It’s your turn” era el lema del Congreso: es tu turno, es mi turno, es nuestro turno de hacer las cosas bien. Es emocionante vivir un Congreso y estar con tantos jóvenes de tu misma religión, pero esas emociones deben convertir en acción local. Como dice una famosa pegatina de la tienda Natura: “Piensa globalmente, actúa localmente”.
Isaac Llopis Doctor en Física Barcelona
Somos jóvenes, poseemos mucha energía. Muchos tenemos ganas de hacer Iglesia, de ofrecer nuestros talentos, pero quizás no nos acabamos de sentir identificados con nuestra Iglesia local, y simplemente vamos allí sin implicarnos. Pero debemos luchar, no contra el sistema, sino poniendo de nuestra parte para sentirnos como en casa, para que nuestros amigos vean la Iglesia como un lugar agradable y en el que el mensaje es verdadero y además consecuente. No