«En algún lugar de España de cuyo nombre no quiero acordarme, se llamaba a los Adventistas del Séptimo Día: “los del cielo”. La razón se encontraba en que en aquella congregación tenían un himno favorito que cantaban con muchísima frecuencia y que tiene un estribillo que comienza con las palabras: “Voy al cielo, soy peregrino...” […] Y así ha pasado el tiempo, así se escribió su historia. La historia de una esperanza, mirando al cielo…»
Adventistas del Séptimo Día - España - Historia - Siglo 20