BOLETÍN AYDO 227

Page 1

Asociación para el Fomento del Espíritu y la Esencia de las Artes Marciales y el Yoga

BOLETÍN 227 MAYO 2021


Cuando me voy lejos, me pierdo lo que hay cerca. Cuando miro a la lontananza, lo próximo desaparece. La mirada larga me hace ciego a lo más cercano. En eso pienso mientras sigo el rastro de la luz entre el ciclamor rosado y la flor del limón. Hoy decido apreciar lo cercano, partir de mí casa en un viaje a pie al barrio, al parque, al jardín... Durante la pandemia, en los momentos de la restricción dura, viajar a un kilómetro de casa fue una hazaña. Pero en esos tiempos, hace un año, encontré mucho amor y consuelo en mi familia de cernícalos comunes que, afortunadamente, sacaron tres pollos en su cárcava salvaje: en realidad fueron los alfeizares del hotel vacío, ¡sí, vacío por la misma epidemia! Cada día Robin, el petirrojo, me daba ánimo. Con su pecho escarlata me invitaba a descubrir la pasión en lo cercano. A escasos cientos de metros del hogar seguí el cortejo, la puesta y la crianza de varias parejas de mirlos, palomas torcaces y gorriones. Y vi llegar, semana a semana a los estivantes: primero uno, luego muchos.


Papamoscas Gris, alcaudón común, cerrojillos, carriceros, y hasta un torcecuellos ¡es un gran número de aves a dos manzanas de casa! Estudié la vida en el seto, las relaciones entre las especies. ¡Cuánta vida vi! En otro confinamiento del pueblo, mi sorpresa y asombro fue compartir el espacio con los pájaros carpinteros, el pito real, y el descubrimiento de alcione, el martín pescador. En el último mes, en un marzo duro y parte de abril, los reyes de la laguna me alimentaron el corazón: llegué a conectar cada día con los martines pescadores y su azul tornasolado. Aprendí de su belleza, eficiencia, biología y hasta mitología. Hoy, en mayo, regreso a contactar con uno de los regalos más importantes de la vida: la capacidad de volverte receptivo a la luz, a la armonía y a la belleza. Venus, en Astrología, representa muy bien esa facultad, esa virtud del alma humana. Afrodita, o Venus, simboliza grandes aspectos de la psiquis, pero hoy quiero resaltar uno: la capacidad de descubrir y disfrutar de la belleza en cualquiera de sus posibles manifestaciones, tales


como la música, el color, la forma, e incluso la ética, la Bondad, la estética, lo bueno, lo bello y lo auténtico. De hecho, estamos en el mes de Tauro ♉, regido por Venus ♀, el mejor momento del año para disfrutar de los dones de la vida. La primavera en mayo alcanza su esplendor: todo está florido y radiante, los días son largos, calurosos y muchos animales están en celo, u otros ya sacando a su prole adelante. Mayo y sus tradiciones culturales nos conectan con el mes de María, de la Madre de Dios, y de todas las madres del mundo. Es una época muy femenina, fértil, creativa, rica en sabor y color. También Oriente celebra el nacimiento y la iluminación de Buda, el plenilunio de mayo, con esa gran luna de escorpio ♏. Es un momento muy pasional, de vínculos y recursos compartidos. Amo mayo, amo la vida, amo a los osos cantábricos en celo, las nutrias en la laguna, el viejo gato montés, y el aullido del lobo ibérico. Es


difícil quedarse en casa en mayo, pero la enseñanza es que todo está al alcance de tu mano. Solo tienes que tener la paciencia del toro, la capacidad de ralentizar un poco la ambición y el agradecer lo que se te entrega cada día. Hay un bosque en cada jardín, un océano en tu mirada, unos castillos en el cielo. Hoy quizás el problema es tener demasiado y caminar rápido. Por eso, en mayo he de invitarte a escuchar buena música, gozar del jardín y apreciar la joya de vivir. Hay mil fuentes de belleza, de armonía, de plenitud que pueden llenar tu alma si simplemente te abres a gozar del momento. En mayo, la vida se mide por calidad y no por cantidad. Tu mejor recurso es amarte a ti mismo.

¡Feliz Mayo! TAI

ANTONIO IBORRA


Hace muchos años estudié un texto tibetano, El Yoga de la Clara Luz. En sus versos y aforismos pude entrever lo importante que es conectar con los ciclos y pulsiones de la luz. En realidad, el Yoga Tibetano es un vástago del Tantrismo medieval, dentro de la Escuela Vajrayana del Budismo y, desde su óptica filosófica, más que alcanzar algo hay que reconocerlo, percibirlo. Yoga, unión, no es algo a alcanzar grado a grado, peldaño a peldaño, con voluntad y esfuerzo; más bien es lo contrario: hay que soltar porque los pasos no son de andar, sino de desandar... Ese Yama, Niyama, Asana, etc., no es para alcanzar el Samadhi, sino para descubrir que somos la luz que buscamos. Cada día ingresamos energía en el cuerpo en forma de nutrientes o alimentos y también excretamos cosas, soltamos orina, heces y sudor. Y siempre


soltamos menos de lo que ingresamos. ¿Por qué? Porque vivir requiere energía. Hacer o simplemente estar consume vitalidad y, de hecho, el pensar es de las funciones biológicas que más energía precisa y desgasta. Entonces necesitamos cada día energía, y esa energía es en su esencia luz. Y nosotros mismos cada día producimos vitalidad y alimentamos a la vida. Todas las cadenas tróficas están conectadas. Así, somos luz, nos alimentamos de luz y generamos más luz. Y todo ello a menudo en la más absoluta oscuridad de nuestra inconsciencia. La clara luz es la CONCIENCIA del Ser que somos. No es que nosotros tengamos más o menos conciencia, es que la conciencia es el campo que nos origina y absorbe, en una pulsión rítmica que tiene como fin la claridad, el darse cuenta.


Un pez puede pasarse la vida buscando el agua, quizás esté interesado en eso que ha escuchado: “¿el océano? ¿Dónde está el océano? ¿En todas partes? ¡Qué cosa tan rara y metafísica!”. El Yoga de la Clara Luz nos ofrece siete pasos para desandar la ignorancia. Yama: deja toda ofensa. Niyama: disponte a vivir agradecimiento lo inevitable.

con

amor

y

Asana: permanece con el cuerpo, habítalo, siéntelo, déjalo ser. Pranayama: libera toda intención, ya que en este momento se está produciendo un intercambio de energía, obsérvalo, conócelo, acompáñalo. Prathiahara: no hay bien, ni mal, solo cambio. Desde la quietud nace la confianza. Dharana: abre la mente, porque más allá de lo que piensas está la vida, el universo, y un universo de universos.


Dyana: no hay acto más revolucionario que detenerse, esperar, pausar, aguardar, no te reprimas, ni te aceleres. Disminuye para hacerte grande. La luz no se alcanza: te alcanza y te ilumina cuando confías. Cuando lo hayas intentado y probado todo, cuando no haya salida, resígnate, entra en la limitación y ámala. Solo eres un latido, disfrútalo. Los grandes hombres son polvo, los grandes imperios, polvo, los grandes logros, olvido. Resígnate. No lo podrás aceptar, no lo querrás aceptar: patalearás, lucharás, intentarás, esperarás... Tú eres el pozo del que pretendes escapar. Todo está en su sitio. Despierta.

TAI AIM


El Yug-Do es difícil porque es demasiado fácil. Lo sencillo no es atractivo para la mente. La mente enferma ama la complejidad, lo complicado, lo difícil y adora lo imposible. Así se nutre y hace fuerte el ego: con la gran ilusión. Pero el Yug-Do, que no es Yoga, ni Tai Chi y que, en esencia, tampoco es otra cosa, es el arte de aflojar los nudos, de caminar rápido y correr lento. Paradoja si, lo que es y no es al mismo tiempo, humano y ser, ser y humano. Un bambú, una mano. El kata del sentir, del notar, del mover, hasta ser movido y conmoverse. 22 movimientos, 22 pasos, 22 formas de 22. ¿Por qué 22? ¿Por qué no? Dos, siempre 2, porque para descubrir al uno hacen falta 2. Y el uno, sin dos, es incapaz de saberse, de reconocerse, por eso no hay conciencia sin dos, no hay energía sin dos, no hay vida sin dos. Pero ese dos en mí, necesita los otros dos, en ti. Y por eso, sumar dos y dos produce la cruz de la vida, el hijo del Yin y del Yang que, por cierto, también es dos. Pero 22 es 4, y es solo en


la forma, en los puntos cardinales, las estaciones y las encrucijadas que el dolor se convierte en Luz. Yug-Do es fácil, puedes preguntar. Toma el Bambú y ahí tienes la respuesta. Muchos toman un bambú, tratan de imitar, de copiar, de plagiar, porque algo parece tener el Yug-Do, pero se les desaparece, y no lo pueden retener. Necesitas al Maestro, al Maestro Vivo, al Maestro amigo. Sin esa conexión, tú y una caña no producen Yug-Do. Entonces es sencillo: quieras entrar, entra. Quieres salir, sal. Pero si entras descálzate, vuélvete receptivo, confía. No esperes, responde, no reacciones, déjate llevar, pero permanece consciente. Yug-Do es un Dojo, dos caminantes. Una mano y un bambú. El Sol y La Luna. El ayer y el mañana, pero siempre en este momento. Los grados de Yug-Do no son los que se alcanzan, sino de los que te desprendes. Un cinto dorado es


menos que un cinto rojo, un cinto rojo es menos que un plateado, un plateado, menos que un negro, y un negro, menos que un alumno, porque simplemente sabe que está para servir, para ofrecerse, para entregar su bondad. Yug-Do aparece cuando el movimiento apacigua la mente y la quietud, al cuerpo. Solo, de pie, en silencio, sentado, como una piedra más, la paz de las piedras. ¡Qué belleza! ¿Quieres complicación? Ve a otro sitio. El Yug-Do es demasiado simple: solo consiste en practicar los ejercicios. Estar ahí con los compañeros, participar de los movimientos, con la luz, con el cuerpo, con el corazón y con la mente, estar ahí, simplemente. ¡Buen camino!

TAI AIM


"Usted es un libro que debe ser corregido", Maestro Estrada. Podríamos decir que de esta vida no nos vamos a llevar nada. También sería común la idea de la vida como una escuela, que venimos a aprender. Quizás considerar que el universo es una fábrica de conciencia tampoco sería tan descabellado. Pero para alejarnos un poco de las frases hechas y los lugares comunes, me gustaría invitarte a indagar un poco más... Estamos aquí, ahora, en un cuerpo, en un cerebro, con manos, piernas y corazón, con los que respiramos y pensamos. Cada uno de nosotros tiene ideas y creencias sobre la naturaleza de la vida y de nosotros mismos, pero estamos cambiando. Sí, todo cambia. Una vida es un código genético modificándose por las experiencias y la relación con el medio ambiente, otros vínculos y sucesos.


Nuestro yo personal, lo que llamamos el ego, está compuesto por una autopercepción, una imagen de uno mismo, unas ideas y concepto sobre uno mismo. Además, hay un conjunto de fuerzas inconscientes, sensaciones, emociones, sentimientos, instintos y un centro de opinión. Uno mismo también cambia y evoluciona según se percibe en lo que capta de los demás. ¿Cómo crees que te ven los otros? Pareja, hijos, padres, hermanos, amigos, vecinos, los otros. Cada una de nuestras relaciones nos devuelve una imagen de nosotros mismos. Una persona me hace sentir bello, inteligente y buena persona; otro me hace sentir vulgar, despreciable e incapaz. Una persona me devuelve una imagen de mí mismo positiva; otra, negativa. Todo ello me influye, me talla, como si fuera una figura de madera. Todos somos influenciables y moldeables, en mayor o en menor medida. Si la gente te prejuzga por ser gordo, flaco, alto, bajo, negro, blanco, mujer, hombre, guapo, feo, rico, pobre, musulmán, cristiano, joven, viejo, de un cierto nivel y condición social, estudios o país. ¿Cuántas cosas me condicionan? ¿Cuántas cosas me definen? Al final, ¿quién soy yo? ¿Soy bueno?, ¿malo?, ¿listo?, ¿tonto?, ¿especial?, o ¿vulgar? Sea como


sea, esta persona, moldeada por la genética, la educación, las experiencias y vivencias, por sus relaciones, tiene una conciencia individual. Una capacidad para distinguir lo correcto y lo incorrecto, lo que está bien y lo que está mal. Más allá de las apariencias, disfraces sociales, actitudes, ocultamientos y exhibiciones, ¿podemos cambiar? ¿Podemos mejorar? ¿Podemos intentar hacer mejor las cosas? ¿Podemos reconocer las virtudes? ¿Podemos desarrollarlas? A través de los errores humanos, de los vicios y apegos, pagamos karma y sufrimos. Saturno nos pasa la factura. En ese caso, y si nuestro programa es muy exigente, podemos sentirnos indignos, menospreciarnos o culparnos. Y si nuestra consideración es laxa, también podemos consentirlo todo o negar nuestras responsabilidades. Te invito a buscar una nueva mirada hacia ti mismo: ni perfecto, ni imperfecto, todos somos mejorables. Mientras vivimos podemos seguir aprendiendo, superándonos, evaluar nuestros errores y poner más atención, quitarnos vicios y soltar apegos. Sí, no tiene porqué ser fácil. Pero hay que avanzar: si no nos gusta sufrir entonces es mejor aprender, y aprender es modificarnos.


Aceptarnos está bien, es un concepto general, pero dentro de la aceptación de nuestra falibilidad humanidad, hay que cambiar, corregirse, enmendarse, superarse, y sí, seguiremos teniendo lapsus, errores y fallos. Todo ello forma parte del camino, pero hay que seguir con la tarea, mejorando, cambiando, trabajando y disfrutando. Ante lo inevitable, lo que no podemos cambiar, ni elegir, aún podemos vivirlo de un modo distinto, tocar otra canción o resignificarlo. Siempre podemos hacer un esfuerzo por poner algo más, y algo mejor desde el nosotros mismos. La vida al final, no es ni fácil, ni difícil; no todo es trabajo, ni lucha, pero tampoco podemos negar que hay subidas y bajadas, esfuerzos necesarios y batallas a librar. Cada día hay que revisarse, sobre todo cuando la interacción con los otros o la vida nos devuelve la cara menos amable. Hay que avanzar y eso implica corregirse. ¡Buen viaje!

TAI AIM


La terapia con Esencias Florales es un regreso a la fuente, y a la auto curación. Entre los años 1993 y 1995 desarrollé una enorme actividad en el mundo floral. Tras una etapa de gran transformación personal, conocí al señor Raff y sus esencias florales en Argentina, luego empecé a elaborar un nuevo sistema floral, las Esencias Florales de Árboles. Las llamé Flores de AIM, por las iniciales de mi nombre, y porque AIM, es el mantram raíz de la diosa Sarasvati, la consorte de Brahma, el Dios Creador. Ella, Sarasvati, es la madre naturaleza, la creación de las mil formas de la diversidad natural, la biodiversidad. Mis flores representaron un proceso de sanación personal, y fueron apareciendo en mi vida en


sincronía con lo que iba curando en mí propio interior. Después de muchos años, casi toda mi vida anterior, de profundizar en los Arquetipos, la naturaleza y el Yoga, estos medicamentos para el alma se desarrollaron con características únicas y muy especiales. Se trata de preparados florales alquímicos, que surgen de algunos árboles que expresan la vibración, la frecuencia, de cada uno de los 22 Arquetipos Universales. Para su elaboración, se trabajó desde un principio con flores vivas, sin cortarlas, con árboles sanos y en todo su esplendor. Se utilizó un sistema acorde a cada energía, es decir tomando en cuenta las horas y las lunaciones, con ayuda de geodas y cristales en sintonía con la energía a sintetizar. Trabajé con colores, sonidos, olores, y demás aspectos afines a cada arquetipo. De este modo fueron no uno, sino 22 métodos distintos de elaboración. Pero lo más importante fue la conexión con la naturaleza, las horas abrazando, escuchando y meditando en cada árbol. De algún modo, la propia energía del árbol me transmitía el método de elaboración necesario para respetar la


sinergia con el arquetipo y la planta. Experimenté muchas crisis curativas, depuré mi pasado y me abrí a frecuencias muy profundas y sutiles. Todo fue una experiencia mágica, sanadora, transformadora y evolutiva. Justo ese es el sentido de trabajar con las esencias de las flores... Mi principal laboratorio fue el campo, el bosque y la montaña, en las horas de comunión silenciosa en quietud y receptividad. Podría decir que las flores me condujeron al poder de lo simple. Hoy, casi treinta años después, me sigo maravillando del poder sanador de las Esencias Florales de AIM. Y mayo fue el gran tiempo de sanar especialmente en los años 1994 y 1995. En cierto modo me siento muy feliz y honrado de haber sido un medio para que estos maravillosos remedios florales llegaran a la humanidad. Hoy, paseando por el jardín, la maravillosa flor del ciclamor, vuelve a resonar en mí alma: Arcano diez (X), La Rueda de la Fortuna, la energía benéfica de Zeus, Júpiter, el hígado, el elemento Madera, el tiempo y el kata del Dragón.


Este árbol originario de la Tierra Santa, florece en la pascua de resurrección, ayuda a sanar los miedos, a recuperar la esperanza y perdonar las culpas. Su alta vibración conecta los meridianos cortados, cura las cicatrices, tanto del cuerpo, como del alma. Es una fuerza re-conectiva, asociada al tercer y cuarto chakras, así mismo depura el cuerpo emocional. En fin siempre que aparece nos ayuda a regresar al amor, a volver a lo sencillo y a confiar en la vida. Te deseo toda la energía reparadora regeneradora. ¡Feliz primavera!

TAI AIM

y


Tengo el placer de conocer a zorros lustrosos, de buen pelaje y constitución, normalmente habitantes de zonas con suficientes recursos alimentarios, buena caza y tranquilidad. El raposo es capaz de vivir en casi cualquier sitio, incluido los arrabales de la ciudad, comer basura o, mejor dicho, desperdicios humanos alimentarios, insectos, fruta, conejos, ratones, pequeños reptiles, ¡lo que sea! En algunos parques naturales mendigan en la carretera a los turistas de paso, o en los merenderos toman unas papas fritas, ganchitos, ya que para ellos no hay comida basura. Pero hoy he encontrado a otro Foxi. Nació en este año, tiene un par de meses, orejas grandes. Está muy escuálido porque los papás lo han dejado de alimentar, probablemente ellos están muertos, porque mi Foxi de hoy vive en zona de guerra. Los cartuchos contaminan la tierra, los escopeteros le tiran a todo lo que se mueve, así que


cada día con vida es un éxito, un logro increíble. Los conejos están escasos, y muy asustadizos. Foxi tiene hambre y paciencia, mucha paciencia, para quedarse oculto en la maleza cuando huele o ve a las alimañas armadas de fusil. En mí paseo por la vida y la muerte de viernes santo, veo a los alcaudones comunes, con su bonete rojo, quienes están recién llegados de África. La pareja de collalba negra, tan elegantes y con su cola blanca. Un mochuelo también me sale al paso y, como siempre, los cernícalos. En la estepa los escribanos trigueros se desgallitan con sus cantos de amor, mientras los pu puput, las abubillas, no dejan de marcar su territorio con su característico pu, pu, pu... Aprovechando cualquier prominencia canta la cogujada común, siempre tan briosa y simpática. Todavía no veo a los abejarucos y las carracas que, en pocos días o semanas, pintarán el campo de azules y verdes. Los aviones se afanan en construir


sus nidos de adobe, mientras cazan mosquitos con sus interminables maniobras aéreas. La naturaleza llega hasta mí casa cada madrugada. Aún de noche el Mirlo me llama desde la ventana, así también lo hacen los gorriones, los verdecillos y los verderones. Es una maravilla vivir con el reloj de la naturaleza y disfrutar de cada luz, cada sombra y su paleta de colores. Ayer mientras escuchaba un concierto de ranas, me pasó rasando una lechuza, coruja, como le dicen en Canarias. Hoy la vida y la muerte se saludan y cruzo los dedos para que mi zorro sobreviva y aprenda a vivir en un mundo tan peligroso. En su misma rambla el búho real lo puede matar cada noche. Así que réquiem por los que sobreviven, los que hacen de cada día una conquista única e implacable. Mañana seguiremos explorando.

TAI AIM


Para los antiguos pigmeos el origen de la vida fue el Sol, fecundado los mares. Sus ideas están llenas de sentido, y no muy lejos de la percepción científica actual. Yo camino entre el Sol y el mar, veo pocas aves, y a cambio pago mi tributo de barro y picaduras de mosquito. Es un tiempo extraño: muchas aves de invierno se han ido, y quizás las de primavera, todavía no han llegado. Sin embargo, aquí y allá unos ojos de luz me miran. Cada ser vivo cuenta: cuanto menos hay, más valor tiene lo que hay. Los paisajes de la quietud también sosiegan el alma atribulada. A veces mirar los espacios abiertos, entre carrizos y mar rizado por la brisa, te aportan el bálsamo de la normalidad. Busco en los puntos en los que el pájaro azul suele aparecer, pero de momento no hay suerte. Al final, como siempre, la vida se va desplegando paso a paso. Un grupo de tarros


blancos, las bailarinas del ballet acuático, las cigüeñuelas y las avocetas, con sus picos curiosos y patas largas. Entre nada y nada, un chorlito gris, los elegantes flamencos, las gaviotas, y las garzas reales, blancas y toda suerte de bellezas, hijas del agua y del viento. Paso media hora buscando a Atis (llamo así al macho de martín pescador, a diferencia de Alcione, la hembra). Y al final aparece, sí, digo bien, aparece, porque esa es la impresión que me dan los animales, y en especial algunas aves míticas... Atis me regala cinco minutos, espléndidos por cierto, pescando, lanzándose como un arpón azul de 30 gramos de peso. Su número de aciertos es espectacular. ¿De dónde ha venido? ¿Dónde estaba oculto? Mientras aprovecho todos los segundos de esos contados minutos. Parece que su presencia, su color, su energía, lo copan todo. Cuando Atis aparece el mundo se vacía de dolor. Luego, simplemente alza un vuelo rápido y desaparece de mí ángulo visual. Lo busco por una hora más en cada posadero, cada punto donde alguna vez


lo he visto, ya que guardo cada foto en mi memoria. Nada. He de aceptar el regalo de la luz de su mirada, estoy satisfecho, no puedo pedir más, y no es que no tenga nunca bastante, es que me intriga el misterio. Todo el tiempo que lo he tenido ante mí, Atis, estaba rodeado de gente, pero nadie lo vio. Me parece increíble que tanta gente alrededor, y nadie repara en su presencia. De este modo me doy cuenta de que cada ser humano vive en su burbuja, y hay muchos mundos que están en este. Me parece curioso que simultáneamente al ruido humano, la charla en la mesa del bar, hay otro mundo que habla en voz baja, queda, silenciosa, en un universo paralelo. El mundo natural es la matriz del mundo espiritual.


Jim Corbett fue un cazador profesional de devoradores de hombres, de tigres aficionados a la carne humana. En el siglo XX esa era una profesión para especialistas. Corbett había matado a cientos de tigres, no todos devoradores de hombres. Solo era un técnico. En esa ocasión, tras un largo rececho, apareció el tigre más bonito que había visto en su vida. En propias palabras de Corbett, era tan magnífico, tan elegante, tan increíble que, por primera vez en su vida, fue incapaz de disparar. Y no solo eso. En ese “no disparo”, su vida cambió para siempre. Tomó conciencia de que el tigre estaba desapareciendo en la India, y fue el promotor del primer parque nacional del subcontinente dedicado a su estricta


protección. La belleza había vencido, la hermosura salvaje había cazado el corazón del cazador. Conocí a Vincent Munier en Asturias, mientras rodaba un documental sobre la vida salvaje. Él me preguntó si era naturalista, a lo que respondí afirmativamente. Ese día corrimos juntos detrás de las nutrias. Hay momentos en la vida en la que reconocer un alma gemela es instantáneo. No tuve el placer de conocer en persona a Félix Rodríguez de la Fuente, aunque he vivido contemplando su obra casi toda mi vida. Me siento ligado a gente como Attenborough, Humboldt, Cuvier, Walas, Thomson, Darwin o Aristóteles y tantos otros naturalistas, apasionados de lo libre y salvaje. En medio de una ciudad, en el cementerio de cemento, me maravillo con la margarita que nace en el asfalto, miro una nube entre los edificios y, si no hay otra cosa, la luna será la naturaleza indómita. Hoy Atis me ha devuelto la mirada azul. La luz que somos me utiliza como espejo para mostrar algo de cordura en la locura. Apago el televisor y


todo el veneno de la política, la pandemia, las manipulaciones, el consumismo y la estupidez se neutraliza con los movimientos espontáneos de un gorrión en mi terraza. En el bosque, en la pradera, junto al mar o en la montaña, no preciso de religión, ni dioses, ni filosofías, ni sentido. Puedo sentir el inmenso amor que me acoge y observa desde las copas de los pinos, el pájaro que se me aparece, la mantis religiosa, una lubina saltando fuera del agua, la vida que comparto en una foto, una palabra para entregar la luz que nos ve, la luz de tu mirada.

TAI AIM


Toda experiencia, todo lo que puedes percibir, es sólo un sueño. Cuando estás dormido y tienes un sueño, en ese momento para ti es real. Puedes estar soñando, y quien te observe te verá angustiado, con el rostro apretado, puedes estar sudando, cansarte, sufrir o gozar. Esto será real para el cuerpo, pero luego cuando despiertas, te das cuenta de que todo ha sido un simple sueño. En realidad, la vida es un sueño para el ser eterno. Primero date cuenta de que todo lo que se puede experimentar, todo fenómeno, es sólo un sueño. Luego te darás cuenta que la experiencia de ti mismo, la del soñador del sueño, no es más que otra experiencia, otro fenómeno y una parte más del sueño. Yo, mi cuerpo, mi mente, mi sentir, mi opinión, todo eso es fenómeno, es sueño... En la noche hay periodos de sueño con sueños, y otros de dormir sin sueño. Este último es lo más profundo, lo que más renueva, recarga y


regenera. psíquica.

Los

sueños

son

solo

digestión

Así que permanece en la conciencia, como si estuvieras profundamente dormido, pero totalmente despierto. Quédate en esa nada. Todo lo que se puede percibir es sueño, tómalo en cuenta. Lo que percibes como "yo", cuerpo, sensación o pensamiento, también es una fantasía... Así que déjalo ir. Considera que toda esa película ocurre en una pantalla invisible. Es como cuando vas al cine, y mientras no empieza la proyección ves la pantalla, pero en cuanto empieza la película, la pantalla desaparece. Tienes que darte cuenta de que hay tres mundos: el físico, el mental y la conciencia. El físico, lo llamamos real, y es ahí donde empieza el problema. No es lo mismo la realidad que la verdad. La realidad es siempre relativa, es una percepción particular, un punto de vista. Los sentidos te pueden engañar, hay muchos espejismos, por no hablar de lo limitado de la capacidad sensorial.


De esta forma uno lo ve azul, otro, verde. Pero ahí, en lo físico, nos parece estar en la verdad. No: es solo realidad, es una realidad consensuada, un sueño compartido, ponemos nombres y nos ponemos de acuerdo. Parece verdad, no lo es. Es sólo relatividad, lo real es relativo, quizás sí, quizás no, quizás un poco, quizás hasta cierto punto, quizás según yo, quizás según tú, depende del sueño... El otro nivel es todavía más confuso, es la realidad mental. El mundo de las creencias, ideas e interpretaciones, mi fe, mi creencia, mi opinión y mi fantasía. Y cuando superponemos lo mental a lo físico y sensorial, el sueño es todavía más profundo y engañoso. Eso es lo que hacemos cuándo nos enamoramos: le pones toda tu fantasía, idealización y creencia a otra persona. Te enamoras de lo que proyectas, de tu


propia proyección. Luego viene el dolor y el sufrimiento, y eso está bien, ya que son despertadores. Físico y mental son el ámbito del sueño, de la película vital en la que estamos inmersos. Pero más allá, está el tercer plano, y no se trata ni tan solo de un plano, ni de una dimensión, es la verdad, la conciencia misma. No es la película, los objetos o sujetos que se proyectan en ella. Así que permanece impasible ante los fenómenos. Son solo sueños. Ante tú, yo y sus circunstancias, son solo sueños: asiéntate en la conciencia. Estás sentado en el cine, pero la película, con su constante juego de luces, su cambio y acción, te impiden darte cuenta que detrás hay una pantalla en blanco, que es inmutable. Primero, simplemente considera esto: al dejar de alimentar el sueño, de prestar atención a los fenómenos físicos y mentales, ocurrirá algo. De repente estarás en una nada, y digo estarás, para que me entiendas, porque en verdad solo será nada, solo silencio, quietud, detención y paz...


Permanece ahí, asiéntate en tu propio ser. No habrá ni un yo, ni un experimentar, no habrá fenómenos. Al principio durará poco, al momento te implicaras en una nueva proyección, otra película. Pero te habrás dado cuenta de que más allá de lo físico y lo mental, hay algo... Ahora solo siéntate en silencio, deja que el cuerpo duerma, que la mente duerma, sin sueños y ábrete a la lucidez. Despierto, sin estímulo, sin movimiento mental ni físico, una nueva sinapsis ocurrirá en tu cerebro, una nueva inteligencia, bodhicitta, la conciencia consciente... Es algo a desarrollar. Mientras tanto, considera cada vez más que estás dentro de un sueño, dentro de una película, pregúntate de vez en cuando sobre el trasfondo, la pantalla en blanco, detecta la conciencia pura, no los objetos que aparecen en ella, no de lo que eres consciente, sino de la conciencia misma. Bodhicitta.

TAI AIM


Disfrutar de momentos llenos de amor y esperanza El tiempo pasa, y es prioritario rodearte cada vez más de seres queridos. Entre todos hay que teñir los momentos de más “amor y esperanza”. ¡Cuánto tiempo perdido en lo que no es! ¡Cuántas puertas cerradas en conversaciones que solo evidencian lo alejado que ellas están de poder abrirse! ¡Cuántos actos llenos de costumbres que no te llevan al acercamiento, sino a la repetición, perpetuadas en costumbres que acomoda un roce distante, que no satisface a nadie y solo repite el cansancio que ya conoces! El amor y la esperanza siempre están deseando que te des cuenta, de que te canses de lo que no te hace feliz.


A veces, solo a veces, la cima está muy lejos y la cuesta empinada puede animarte a desistir. Dices: “ya no puedo más”. Prácticas y entrenas, mientras alejas las quejas, alejas las miradas airadas y alejas el sufrimiento. Te alejas para hacer tiempo, y recuperar esa cima llamada “esperanza”. El guerrero no teme a la lucha, pero sí a la sombra del desamor, porque este tiñe de gris hasta las sonrisas. Como ser humano aceptaste alcanzar tu corazón y llenarlo de amor y esperanza. El guerrero practica a la salida del sol, y divisa el horizonte que se abre a diario dándole y dándose la oportunidad. Aceptaste no desistir en el empeño de alcanzar la cima de luz perenne, la cual ilumina el camino y a todos los que transitan por el sendero.


“TU TE LO MERECES TODO” A través de la experiencia desarrollar la conciencia.

se

puede

El maestro Antonio Iborra te recuerda que el paso siguiente siempre es el importante, ese que mira hacia el horizonte por donde sale la luz. Gracias, maestro. TAI MAS

MARÍA ARRABAL


Estamos condenados a repetir todo aquello de lo que no somos plenamente conscientes. C. G. Jung El arte como función espiritual no se manifiesta plenamente si no se comparte lo apreciado. Antonio Iborra En la vida algunas veces se gana, otras veces se aprende. John Maxwell No midas tu riqueza por el dinero que tienes, mídela por aquellas cosas que tienes y que no cambiarías por dinero. Paulo Coelho Pedir perdón es de inteligentes, perdonar es de nobles y perdonarse es de sabios. Anónimo Pedir perdón es de inteligentes, perdonar es de nobles y perdonarse es de sabios. Anónimo El que busca un amigo sin defectos se queda sin amigos Proverbio turco No encuentres la falta, encuentra el remedio. Henry Ford No importa lo lejos que vayas, siempre y cuando no te detengas. Confucio Solo existe un bien: el conocimiento. Solo existe un mal: la ignorancia. Sócrates Los ejemplos corrigen mejor que las reprimendas. Voltaire No es que tengamos poco tiempo, es que perdemos mucho tiempo. Séneca Pueden haber más bellos tiempos, pero éste es el nuestro. Jean-Paul Sartre

MARÍA ARRABAL


CLAVE DEL MES:

“APRECIAR” PARA VER: “HOY EMPIEZA TODO” Dirección: Netflix 107 min. 1999 Francia

FRASE DEL MES: " LA MIRADA APRECIATIVA SANA AL QUE VE Y A LO VISTO”

PARA LEER: “ IYENGAR, LA ESENCIA DEL YOGA” Autor: B.K.S. Iyengar Editorial: Kairós


MILANESA DE SEMILLAS Desde tiempos ancestrales, las semillas han sido parte fundamental de la cosmovisión e identidad de pueblos originarios. Incluso en algunos relatos mitológicos de la creación, el ser humano depende de la semilla sagrada. La semilla contiene el fruto de nuestro alimento, es una potencia latente que se realiza cuando “muere” en la oscuridad de la tierra; por eso, desde el origen de los tiempos el hombre ha visto en ella un poderoso símbolo de su propio renacimiento espiritual. Se sabe que las semillas son excelente fuente de grasas saludables, benéficas para el corazón; son proteína, que da saciedad y favorece el sistema de defensa del cuerpo; son fibra para favorecer la salud digestiva y potentes antioxidantes que contribuyen a combatir los radicales libres, responsables del envejecimiento prematuro y diversas enfermedades degenerativas. También aportan minerales esenciales, como calcio, zinc, cobre y magnesio que favorecen la salud ósea. Si consideramos que son la unidad de reproducción de las plantas, hay miles y sus fuentes son tan diversas como sus tamaños y colores. Por eso, te proponemos que prepares esta semillas:

milanesa de


INGREDIENTES: •

1/2 taza de quinoa o semilla de amaranto

Manojo de perejil fresco. También puede utilizarse cilantro, hierbabuena o albahaca

1/2 cebolla blanca

1/2 taza de amaranto natural (inflado)

2 cucharadas de linaza en polvo

1 cucharada de ajo en polvo. También se puede ocupar ajo finamente picado

1/2 taza de harina de garbanzo

Pimienta negra molida

Sal

Aceite de oliva

Agua

PREPARACIÓN: 1. Primero se pondrá a cocer la quinoa o semilla de amaranto. 2. Aparte se sofríe la cebolla y el ajo, en caso de no utilizarlo en polvo. 3. Se cuela y escurre perfectamente la quinoa y se pone en un recipiente. 4. Se añade el perejil picado, la cebolla ya sofreída, el amaranto, la linaza, pimienta, sal y el aceite de oliva (estos últimos tres ingredientes se añaden al gusto). 5. Mezclamos todo perfectamente y vamos añadiendo poco a poco la harina de garbanzo, así como el agua hasta


obtener una pasta que pueda ser manejable para formar “bolitas”. 6. En una bolsa de plástico partida a la mitad, colocamos la bolita de la masa y presionamos con una tabla. 7. Tomamos la masa (ya en forma de tortilla) y la ponemos a freír en el sartén. 8. Para voltearla, esperamos a que esté bien frita para evitar que pueda romperse. 9. Finalmente la sirves, acompañándola de tu ensalada y/o guarnición favorita. ¡¡¡BUEN PROVECHO!!!

Sagrario Evangelista


Lo que se resiste al cambio muere y perece. Lo que se adapta y fluye con el cambio avanza y se transforma, se renueva. Como bien dijo el Maestro es el momento de cambiar nuestra mente, de soltar la rigidez y de ser más permeables y flexibles en el devenir de la vida. Cuanto mayor plasticidad de la mente, mayor es la capacidad de flujo y de fluir con los cambios. La vida me somete a prueba en cada momento para que suelte viejas estructuras, ideas, creencias y, como no, diversos automatismos. Liberarme de esa carga me permite transitar el camino con mayor conciencia y disposición a lo que realmente importa.


Liberarme de toda creencia e influencia social y educacional me ayuda a estar más atento hacia el encuento de mi propio ser, comprendiendo de forma definitiva como los acontecimientos estan entrelazados, como la experiencia vivida se convierte en un atanor alquímico para la transformación, recordando mi verdadera esencia, conectando con ese vacío que me hace estar consciente en este sueño que es la vida. Una vez más la Unidad se hace tangible desde la diversidad. TAI

Raúl Villar


La primavera es el primer ciclo estacional del año, con signo adorno de rigor Aries, porque no es otro. Aries es el iniciador de un grupo de 12 signos astrológicos, que conforman el año. Es aquí donde el tiempo es ideal para cambiar, crecer, iniciar cosas, proyectos y abrir nuevos horizontes. El tiempo de la aventura ya es aquí con todas sus sorpresas. Y es hasta ahora cuando me entero que el lobo es un animal ariano: el lobo no sólo es un animal salvaje maravilloso, sino que es el arquetipo del espíritu salvaje. La primavera es cuando la vida está llena de maravillas. Y entonces me maravillo. El caso es despertar a la mirada apreciativa, lo que sucede cuando estamos contentos, abiertos y dispuestos. Las indicaciones del maestro Antonio Iborra para la primavera son: que en la primavera la sangre se altera, y por eso surgen las crisis curativas


con erupciones, alergias, problemas en piel, ojos o vías urinarias. Por ello hay que beber agua viva, pura o de la fuente, subir a las montañas, respirar aire limpio, caminar descalzo, conectar con la tierra, bañarse en un río o ir a la playa, hacer ayunos, limpiezas hepáticas, del colon y purificar los filtros: riñones, hígado y pulmones. Pero sobre todo limpiar la sangre. Para ello es adecuado tomar infusión de Bardana, Diente de León, Fumaria, Ortiga, así como comer caldo de Apio y cebolla, sopa de miso y alga Wakame. Y hay que descubrir lo que más crea mala sangre: ¡el odio! Los enfados, sentirse molesto por los demás, las relaciones tóxicas, la ira, la rabia, la frustración, el resentimiento, la vergüenza, la culpa, la tristeza, la ansiedad, la angustia, las mil preocupaciones, la envidia, los celos y el competir con los demás, eso es la mala gestión de tu cuerpo emocional y de tus relaciones. Aquí está la respuesta a los problemas diarios emocionales. A las personas que no saben el porqué les sucede esto, la respuesta es muy sencilla: elije sentirte bien y hacer lo correcto,


haz las cosas tú mismo, renuncia a la ayuda de los demás, y si llega, pues dile: “¡Muchas gracias!”. Si no, te toca hacerlas a ti, toma la escoba y barre, pero hazlo cantando, con gusto, con todo tu poder recuperado. Estamos a punto de entrar a la etapa culminante de la primavera, hay que salir a la vida y disfrutarla, y descubrir que a cada instante todo es nuevo, en cada respirar. Feliz Tauro, feliz Venus, culminación de la primavera y de la vida. Un abrazo nuevo siempre desde lo verde de Venus.

TAI

Serafín Mendoza


En mi casa, mi padre siempre ha sido el gran trabajador. Él tenía dos empleos y trabajaba de 10 a12 horas, ¡qué sé yo!, para sacar siete hijos adelante. Y mi madre, que es profesora, se animó también a trabajar desde que los hijos la dejaron. Pero la autoridad oficial de la familia ha sido mi padre. Yo lo recuerdo de pequeño cuando llegaba a casa del trabajo, que era justo en la puerta de al lado, para volverse a ir después de comer a seguir trabajando. Cuando regresaba luego, al descanso, a mí me gustaba sentarme a su lado en el sofá con mis dos manos puestas en mi cuello a ver la tele. Era una costumbre que yo tenía. Me sentía seguro y tranquilo estando con él. Siempre me ha gustado estar a su lado. Recuerdo cuando nos íbamos de excursión en San Miguel al Barranco la Orchilla, con mi hermano Mauricio, al Barranco del Infierno, al Teide, o de acampada a La Tejita, al Paisaje Lunar, o cuando íbamos a la playa del Médano, a los Cristianos, o cuando estuvimos en Tenbel. Son grandes las vivencias de la infancia. Evoco ir caminando con él por atajeas, jugando y riendo con un perro chico que


teníamos, que no sé si era el que llamábamos Gofio. También rememoro los interminables viajes de la familia numerosa en el Peugeot largo blanco desde el sur hasta La Laguna para quedarnos de fin de semana en casa de mis abuelos, y ver y jugar con todos los primos. ¡Qué viajes y qué aventuras! Desde aquel entonces siempre me ha gustado viajar. También lo recuerdo a veces enfadado e iracundo, momentos en los que yo me apartaba un poco por miedo, y me evadía de la situación, aunque después sabía también que todo eso pasaba y volvía a la normalidad. Ahora que soy adulto, padre de familia y trabajador me doy cuenta y comprendo mejor el porqué se daban aquellas situaciones, a las que a veces también tiendo yo, y a las que procuro poner remedio. A veces incluso antes de que pasen, otras inmediatamente después, aunque sé que de una manera u otra han sido necesarias cuando se han dado, incluso para darme cuenta de que puedo funcionar mejor de otra manera. Mi padre en mi casa ha sido más que la autoridad, ha sido la personificación de la responsabilidad y del compromiso. Ha sido la protección, mi madre también, y la confianza y la seguridad sobre todo en uno mismo. Siempre ha sido un apoyo para todos pero especialmente para mí, para que confiara más en mí y


luchara por lo que quería. Por hacer realidad mis empresas y sueños. Los de todos sus hijos, que se han ido haciendo poco a poco realidad. Si dijera un lugar de mi cuerpo dónde está o reside mi padre, diría sin dudarlo que en mi tronco, es decir, en mi eje corporal y vertebral, pues es ahí donde se aguanta todo. También en los pies y las piernas como apoyo, sujeción y raíz también para encontrar el sustento, para encontrar la dignidad para buscar el propio desarrollo, el crecimiento y el avance. A mi padre le debo mucho: para empezar, la oportunidad de estar aquí, de que se hubieran animado a tenerme después incluso de haber tenido y bregar con los seis hijos restantes. Y por habernos querido y demostrarlo. Le debo las gracias por apoyarme siempre que lo he necesitado. Siempre ha estado ahí. Con su apoyo, a veces económico, otras moral y psicológico, con un consejo, con una charla madura o tan solo con su presencia. Tratándome como un adulto desde que recuerdo y hablando desde la experiencia propia, en primera persona. Con su ejemplo. Si mi madre representa el Querer y el Callar, mi padre representa el Osar, también el Saber y el indagar, el poder analítico, pero sobre todo el osar. El valor de enfrentarse a la vida, o a lo que esta nos depare. A


perfeccionarme y buscar la excelencia. A veces un poco en exceso. Y a creer y confiar en mí mismo, para cumplir con mis obligaciones y atraer a la vida los sueños. Con sus cuentos, con sus libros y con sus historias y ejemplos, mi padre ha conseguido hacer realidad su sueño, su pasión, que era escribir, aún a pesar de la gran carga, entrega y esfuerzo que la vida le ha exigido. Por todo ello, y por mucho más que ahora no encuentro forma de expresar con palabras, solo puedo sentir gratitud e irradiar agradecimiento. Gracias, padre, gracias por ayudarme a confiar en mí, por ayudar a nuestra familia a confiar en la vida y a ser más nosotros mismos y dejarme ser cada día un poquito más. Siempre estarás conmigo. Te quiero y te llevo bien adentro, padre.

TAI

Eugenio Pareja


16- YUG-DO EN ZIPOLITE, 2021 Estoy en el paraíso que me he forjado con trabajo, amor, entrega y pasión. Por eso, para saberme en un círculo virtuoso, le ofrendo cotidianamente mi alegría y tranquilidad. Un día decidí trascender ese espacio de individualidad hacia los otros, y aproveché las ventajas que he cultivado por años para llegar con Yug-Do al mejor dojo del área, a La Loma Linda. Inicié con las prácticas abiertas de Yug-Do hace un mes. Una vez por semana no es suficiente, pero es algo, es una semilla, es un bello parpadeo… Los martes, días de los artistas marciales, me reúno con los asistentes, y veo sus rostros sonreír, sus cuerpos descansar y sus emociones equilibrarse. La participación ha sido sorprendente, y cada vez que llega uno, o dos, agradezco profundamente a mi maestro Antonio Iborra, a la disciplina, al mar, a mí misma. También sonrío, descanso y me equilibro. C. R. Ilihutsy Monroy Yug-Do in Zipolite, 2021 I´m in the Paradise. I´m building this place with work, love, offerings, and passion. For this reason, I offer


daily my happiness and peace. I feel I´m in a virtuous circle. And I decided to give my experience of years doing Yug-Do training to others at the best dojo location in this area, La Loma Linda. I started offering my Yug-Do training open to everyone a month ago. Once per week is not enough, but it is something, it´s like a seed… Tuesday is Mars´ day, martial art day. I meet with the people, and I see their faces smile, their bodies rest, and their emotions balanced. I´m excited because they are unbelievable, and when somebody comes in, I deeply thank my master Antonio Iborra, Yug-Do, the sea, and myself. I smile, rest and balance also.

TAI

Ilihutsy Monroy


Así, con este título, les comparto mi sentir de hoy. Uno piensa que la mejor educación que le podemos dar a nuestros hijos es mediante la palabra y así, durante años, tanto la madre de mis hijos como yo nos movimos en esa energía. Sin embargo, con el tiempo te vas dando cuenta que no es fácil llegar a ellos por esta vía. Ellos, como dice el maestro Antonio Iborra, escuchan más a los amigos que a sus padres. Había momentos en que eso generaba en mí mucha tensión. Con el tiempo lo vas meditando y observando y, de repente, dices: “bueno, pues lo mejor es que yo cambie mi modo de llegar y trasmitirles”. Así es que comencé a comprender que la mejor manera era a través de los hechos. Tanto su madre como yo hemos emprendido un viaje de adquirir conocimientos mediante el estudio de aquellas asignaturas de vida que mejorarán la de ambos. Sinceramente, desde ese momento nuestras vidas han cambiado, gracias a nuestra


formación en cursos con el Maestro y muchos otros que cada uno ha sentido integrar, los cuales nos aportan grandes vivencias y experiencias. Justo ahí, y después de unos años, nuestros hijos han conectado. Ellos ven la transformación y esfuerzo de sus padres en evolucionar siguiendo formándose en aquello que les apasiona y en lo que les siente bien. Esta observación les está llevando a ellos a tomar ese camino de conocimiento. Mi hija Miranda finaliza este mes su formación profesional como quiromasajista. Está muy ilusionada, y yo estoy muy contento porque sentí que podría ser una gran sanadora y así la animé a que hiciera esa formación. Creo que es una gran oportunidad para ella. Mi hijo Alejandro, por su parte, se está interesando por la tecnología y le apasiona el mundo de transmitir mediante videos de la naturaleza, de diferentes disciplinas y lugares. Los comparte por YouTube. Aunque, ¡eso sí!, su pasión es ir al mundo. Nuevamente se va a ir a experimentar el trabajo de la vendimia, pero en este caso a Suiza, donde


tiene amigos allí ya trabajando, y siente que ese es su lugar. Le encanta compartir en la naturaleza con gente de diferentes países. Yo así le expresé y animé a que fuera a por lo que le apasiona. Y por último, mi hijo Daniel, ya siente que también tiene que estudiar. Él no se ve toda la vida, como así me manifestó, dando asada todo el día en el monte, aunque es un bello trabajo, pero él no se ve ahí en futuro. Es un apasionado de la Arqueología y sería un gran guía de senderismo. Todo esto me pone feliz. Me he dado cuenta que la mejor educación que se les puede dar a unos hijos son, como dice el Maestro, hechos bien hechos. Gracias, maestros, por hacérmelo ver. Un abrazo.

TAI

J. Antonio Jorge


Continuando con las circunstancias actuales de estado de alarma general, y esperando la pronta vuelta a los talleres presenciales con el Maestro y, esperando su pronta recuperación para mayo, la Escuela Internacional de Yugdo continúa sus actividades vía ON LINE. Finalmente esto ha resultado ser una Gran Oportunidad para que en otras regiones y lugares del mundo se puedan integrar más personas a las Actividades de Formación y Cursos, Prácticas de Día de Ashram y ahora con nuevas prácticas de Dojo Digital, Clases en el Dojo de Tenerife, y días de Ashram y Terapias con el Maestro (también ahora de forma Online). No te pierdas para verano la:

¡GRAN CONVIVENCIA DE VERANO EN AGOSTO EN TENERIFE. RESERVA TU PLAZA YA!




Para bajar ésta y anteriores publicaciones: https://issuucom/search?q=yugdo


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.