BOLETÍN AYDO 207

Page 1


Las nubes pasan por delante de los riscos. Esto, en realidad, es lo único que pasa en la hora que llevo aquí mirando piedras y árboles. No es poco. Cada nube es una obra de arte, y en sus trazos vaporosos veo castillos y dragones, ciudades perdidas y reinos de cristal. Así es la imaginación, y ésta se dispara cuando te cansas de mirar y no ver. Sé que hay más de un oso en el robledal. A ratos me parece que algunas ramas de árbol se han movido. Entonces me recuerdo a mí mismo, una vez más, que no se trata tanto de mirar sino de contemplar. Me relajo, y en ese justo momento un águila ratonera se posa en las ramas altas de un cerezo. No está lejos y con los prismáticos puedo deleitarme de ese regalo. Su figura hierática y estilizada es digna de aparecer en cualquier bandera estatal. La rapaz otea atentamente todo lo que se mueve en un prado cercano. Mirar cansa, contemplar regenera y nutre el alma. En la mirada uno busca algo, trata, intenta, se esfuerza y fácilmente se frustra. A María y a mí nos gusta contemplar; es decir, volverse receptivo al momento, conectar con la apreciación de lo que simplemente llega, aparece o se deja ver. El contacto con la naturaleza es así: nunca busques el ayer en el hoy. Aquí viste y gozaste de una manada de lobos, hoy solo hay hierba pajiza y calor. En aquella roca mamá osa paseaba a sus retoños, ahora las piedras sigue ahí. A menudo hay infinidad de lugares en el mismo lugar: depende de la hora, del mes, del clima, de los frutos de las plantas, de la luz, de la capacidad del observador. Sin embargo, la contemplación de animales vivos en libertad y de fauna salvaje en su medio ambiente natural es un arte de vida, y también es un puente hacia lo sagrado. Cuando nos detenemos a observar un cuadro vivo y real, un paisaje de bosques, montañas, selvas o marismas, hay un marco más permanente que establece la geología y otro más sutil que es la botánica. Ésta última está modificada por el clima y las estaciones, pero además están los animales, esos seres animados que aparecen y desaparecen, que se mueven y cambian rápido, quienes expresan el alma del lugar.


Entre lo visible y lo invisible, un animal salvaje siempre nos llama la atención, nos despierta y nos transmite algo. Un pájaro, un insecto, un mamífero, un reptil, un anfibio o un pez. Sobre todo esto medito mientras voy bajando ya por el sendero. Es septiembre, y el final del verano siempre juega con matices de calor y de vez en cuando hay un frescor repentino. Se avecina ya el otoño, el cambio estacional, el nuevo equinoccio. En este caso la paridad entre noche y día abre siempre la puerta hacia los adentros. Todavía hay quien se empeña en estirar el verano, el que aprovecha para salir de vacaciones tardías. Por otra parte, los frutos rojos ya están aquí, los madroños, escuernacabras, y las primeras setas de la próxima estación aparecen, aunque todo depende de los climas y micro climas. Los ciervos berrean su amor y las ardillas guardan bellotas: toda la vida que durmió su tórrido verano se activa poco a poco. El gato montés caza ratas toperas y los humanos ya están de nuevo en nuestro ecosistema de asfalto y luces de neón. Los niños van al colegio, a empezar todo de nuevo, por lo que las carreteras urbanas están saturadas. En fin, volvemos a lo cotidiano. Sea dicho de paso: regresamos a lo que cuesta adaptarse y volver. Pero así es la vida. El elemento Tierra nos exige centro, cumplir con la materia, producir y cosechar. En definitiva, ponerse las pilas. Es un momento muy interesante porque es y no es verano, es y no es otoño. Queremos y no queremos volver a la rutina. Pero el cosmos es implacable, así que toca poner actitud, mejores empeños, usar la sabiduría acumulada y hacerlo todo un poco mejor. Son tiempos para establecerse en el centro y el sentido común, valorar lo vivido, orientar el camino y encontrar el paso adecuado para que la armonía sea siempre nuestra canción. Septiembre es el antiguo mes séptimo romano, el fin de una etapa y el principio de la otra. Equinoccio es una nueva invitación a vivir lo eterno, lo sagrado en cada instante. La frase "momento a momento" cobra pleno sentido. Lo más importante es saber que no hay tiempo perdido: todo tiene su oportunidad y su regalo porque todo sirve si nuestra actitud es buena. Hay para todo, incluso para buscar un poco de belleza y compartirla con el mundo. ¡Feliz Equinoccio!

TAI AIM

ANTONIO IBORRA


Yug-Do es arte de Marte, arte marcial y arte de Venus, arte de vida. Para el Yug-Do, el Yoga es detenerse, asimilar, valorar y observar cómo la energía se reorganiza y la claridad se establece en la mente. Antes del movimiento voluntario, del hacer dirigido por la intención, el ASANA propicia el encuentro interior con uno mismo y el afinamiento con la Unidad. La clave para que el ASANA despliegue todo su potencial está en la receptividad. Por eso, más que hacer posturas, hay que dejar que se "hagan". Una posición es una oportunidad para descubrirse a sí mismo desde una determinada forma y estudiar lo que ocurre. Desde hace cientos y probablemente miles de años, algunos seres humanos descubrieron que simplemente permanecer en algunas posiciones producía una serie de cambios internos, percepciones, sensaciones, mutaciones y cambios muy profundos. Hoy sabemos que, en parte, eso se debe a que la simple posición física sostenida durante unos minutos, produce cambios hormonales. Sin embargo, más allá de las hormonas y de los estados emocionales que propician, las ASANAS mueven estados profundos de la psiquis. Es común que aparezcan percepciones extrañas, visiones y vivencias que pueden cambiarte sin saber cómo ha ocurrido. Esto es debido a que el ASANA es una situación distinta y extraordinaria. Normalmente no estamos cabeza abajo y, menos aún, nos quedamos ahí, detenidos, sin hacer nada y observándolo todo. Si quieres algo extraordinario debes crear condiciones extraordinarias. El ASANA es siempre una experiencia profundamente singular, requiere plena


presencia y no continuar con las tendencias mentales; más bien, crear una brecha hacia lo desconocido. Dicen que la mente es como un paracaídas: solo sirve cuando ésta se abre. De igual modo no hay ASANAS sin una apertura total de la conciencia en presente. Hay un aspecto sanador en la práctica. En el nivel superficial encontrarás relajación y respiración, luego elasticidad y flexibilidad; pero a un nivel más profundo se produce una reorganización de la energía vital que activa el propio sistema sanador.

Todo el potencial del ASANA se despliega cuando tú no la haces, sino que te vuelves receptivo y relajado, y dejas que suceda. Así que podemos acceder al mundo interno del Yug-Do cada vez que nos relajamos un poco más en nuestro presente, en la postura en la que estamos en este preciso momento.

TAI AIM


PRIMER CHAKRA El símbolo del 1 Chakra, con sus cuatro pétalos, te recuerda que hay cuatro razones para estancarte en tu proceso evolutivo. Primero está la economía: manejar mal los recursos y producir escaso dinero te impide avanzar y te preocupa. Segundo: la falta de salud y la enfermedad física y mental te limitan y no te dejan seguir creciendo. Tercero, la mala gestión del tiempo hace que no dispongas de él para ocuparte de lo que verdaderamente importa y te permite evolucionar. Y cuarto, los conflictos que se derivan de un manejo erróneo de las relaciones humanas hacen que no dispongas de energía y vitalidad para cultivar la paz. Saturno te muestra todo aquello que te obstruye y frena. Estas son las cuatro cosas básicas a superar. El color rojo te indica que solo la energía de Marte, el Guerrero interior, la voluntad inteligente y la determinación te permitirán levantar esa pesada losa que te da acceso a una vida mejor. SEGUNDO CHAKRA El segundo Chakra es un símbolo de las relaciones humanas. Sus seis pétalos nos muestran que en el mundo humano nuestras conexiones son siempre trinas, tienen tres aspectos: físico, emocional y mental. Una relación real incluye un encuentro físico de dos seres, a la vez emocional y al mismo tiempo mental. Seis pétalos son dos triángulos entrelazados. Si solo nos conectamos físicamente, la relación


no es completa; lo mismo sucede si es emotiva o meramente mental. Sin embargo, cuando hay una conexión trina por ambas partes las posibilidades trascendentes son posibles, y mediante estos encuentros podemos realizar todo nuestro potencial y al mismo tiempo despertar a estados de conciencia más elevados. El color naranja de este centro sintetiza el rojo del primero y el amarillo del tercero. Este tono estimula la creatividad y las ganas de compartir. El segundo Chakra estimula las ganas de conectarnos con la vida y permitirnos expresar lo mejor de nosotros mismos. Su reto es la generosidad y la expansión. Júpiter rige esta parte de nuestra naturaleza, y necesitamos honrarlo dando lo mejor de nosotros mismos al mejorar nuestras conexiones con los demás. Todos somos uno, pero hay que realizarlo uno a uno. TERCER CHAKRA Este es el símbolo de la Dirección en la vida. Sin dirección iremos de objetivo en objetivo, dando vueltas en círculo. La vida pasará y sólo quedará vacío, tenor y sin sentido. Si nuestros objetivos son materiales, emocionales o mentales, siempre estaremos girando en torno a la ilusión del ego. Cuando nos demos cuenta de que el ego es sólo una pompa de jabón, toda nuestra vida quedará en la nada, en una oportunidad desperdiciada. La Dirección que indica el Tercer Chakra es el descubrimiento de la esencia, o del sentido de la vida. No me refiero al sentido que cada ego quiera darle a su vida, sino a las preguntas verdaderas: “¿qué es esta realidad?, ¿quién pregunta todo esto?, ¿qué es el yo?, ¿qué está más allá de la información y del pensamiento?”. El amarillo de sus diez pétalos es un indicador de atención. También de la necesidad de abrirse y descubrir a qué prestamos atención. Ver a ese que ve y opina sobre todo, lo que parece un sujeto captando un objeto, pero que en realidad es un objeto captando otro objeto.


En la existencia el sujeto es una ilusión... Solo la Unidad es Verdad: de ella emanan objetos que interactúan entre sí. Algunos de estos objetos se arrogan un centro y se creen un sujeto. La existencia es el Centro de Todo, un infinito sin centro. CUARTO CHAKRA Este es el más enigmático de los centros del Ser humano. En realidad, el Chakra del corazón no tiene nada de romántico. Su punto estratégico es una frontera entre lo humano animal y lo humano vinculado al Ser. Y esa perspectiva ofrece la posibilidad de que todo cambie, dependiendo hacia donde se dirija la atención-energía. Si va hacia arriba, el Camino alumbra ecuanimidad, serenidad, certeza, confianza e imparcialidad. Sabe que el mundo se arregla solo y todo siempre está en su lugar, y con respecto a la individualidad basta con estar orientado hacia lo alto y cumplir con la parte correspondiente, aunque en ello vaya la propia vida personal. En cambio, si la mirada o atención-energía se orienta hacia lo humano, puede convertirse en un espejo del segundo Chakra y caer en el sentimentalismo, el apego y un aferramiento hacia una bondad falsa, amanerada, salvadora y manipuladora, que mediante la justificación de los demás trata de salvar la propia auto imagen. Los 12 pétalos de este centro hablan de las 12 tendencias de distorsión de la Verdad: los 12 puntos de vista arquetípicos que establece el zodiaco mental. El Iniciado en lo sagrado debe ver eso en sí mismo, ver su tendencia y no luchar con ella, tampoco obedecerla. Más bien ver al objeto visto, y al objeto que ve, opina y sus argumentos y tendencias. En esa doble visión, sin nadie más que vea, solo en el silencio, el desprendimiento de lo egótico permite el encuentro con la totalidad.

TAI AIM


He conocido al Hombre de Sal. De hecho, he visto a muchos hombres y mujeres de sal. Éste es un ser humano que se ha pasado toda la vida en el trabajo, en la lucha y en la súper vivencia, incluso cuando ya no necesitaba luchar, trabajar o sobrevivir. El miedo se instaló en ellos desde la niñez. Después de 50 o 60 años se han vuelto de piedra, su cuerpo maltrecho es como una coraza o un enorme caparazón de tortuga. Ahora sufren, no pueden dormir ni descansar, no les duele el brazo, la cadera o la espalda: les duele la vida. Como grandes adolescentes ya no escuchan a nadie, solo necesitan hablar de su dolor, sus cuitas. Por ejemplo, que empezaron a trabajar a los ocho años o que han cargado sacos desde siempre. Y todavía los cargan y ya no pueden soltarlos porque forman parte de ellos. La vida les ha enseñado mucho, y nada a la vez, porque solo han aprendido que hay que protegerse y no fiarse de nadie. La desconfianza es su modo de vida. No se pueden relajar, viven en tensión crónica y alerta permanente. Su discurso es negativo, alarmista, egocéntrico, centrado en el mal tiempo y las memorias perennes de dolor. Buscan ayuda y algún alivio, pero no se fían porque no saben confiar. Se escudan una y otra vez en su caparazón. Estas características son el resultado de vidas mal vividas. Los hijos de la sal del mundo, de aquellos que lucharon pero se resignaron, de los que aceptaron lo que les había tocado y creen firmemente en que la vida es así. Se quejan, se quejan siempre, su rostro es una mueca congelada, ya olvidaron reír, se sienten ridículos si lo intentan. Cuando, en alguna ocasión, ríen también lloran, como si disolver la careta les ocasionara algún dolor o los volviera vulnerables, les robara su argumento de vida, su dolor, temor y espanto. Porque sin crítica no son nada. Se quedan ahí sufriendo en un dolor congelado, salobre, sin valor para vivir, luego esperan y temen la muerte. El Hombre de Sal es siempre un futuro posible, está ahí, en todas partes como un indicador para saber por dónde es el fracaso existencial. Al Hombre de Sal se le puede acompañar, asistir y escuchar, pero éste no va a cambiar. Es una rendición andante o casi siempre sentada o apoltronada


en la prisión de la resignación, del aguante estoico y estúpido del dolor. No aceptan mejoras, ni ayudas reales, si acaso pequeñas cosas para mantener su bandera de víctimas. En su presencia se absorbe algo que resta vida, mueve la compasión pero resta energía. No te puedes quedar demasiado tiempo ahí, o tú mismo empezarás a notar el dolor salobre en tus articulaciones. La vida es movimiento, y se requiere osadía y valor constante, adaptación, aceptación e innovación para vivirla. Además, salirse de las actitudes recalcitrantes y probar cosas nuevas es el único modo de no encerrarse en el inmovilismo. Ciertamente, no todo lo nuevo es mejor que lo antiguo, pero hay que tomar lo bueno de todo, del pasado, del presente y del porvenir. Tiempos pasados no fueron siempre mejores ni tan malos, los tiempos pasados son simplemente pasados, y cuando fueron presentes fueron como ahora: duales, con cosas buenas y otras malas. Recuerda que en ese presente tuvimos que elegir y asumir los pros y contras, equivocarnos y rectificar siempre ante la constante incertidumbre. Pero también siempre ante la posibilidad de reconsiderar, cambiar y dar pasos atrás para poder seguir adelante, deshaciendo ovillos, desatascando malos aprendizajes, volviendo a la sencillez y la humildad verdadera, la de la tierra y disponernos una y otra vez a arriesgarnos a lanzarnos a nuevas exploraciones y aventuras. ¡Tenemos que trascender al cerebro viejo, a la mente cerrada y recuperar el asombro, el entusiasmo, la ilusión, la búsqueda y la inocencia! No hay mejor crema para estirar la piel y rejuvenecer. La sal se deshace cuando nos reímos más y dejamos de inundar la vida de seriedad. Después de todo, la vida es sueño y los sueños vida son. De ti depende el color, o quedarte con la sal. ¡Buen viaje!

TAI AIM


"

Como dice Víctor Kuppers, en la vida hay dificultades y luego están los dramas. El verdadero problema es convertir cada pequeña o gran dificultad en un drama. Que se te rompa el coche es una dificultad, pero que se te muera un hijo es un drama. No dramaticemos por todo, y dejemos el vicio de la queja. Hay que solucionar y punto. El cerebro humano, en su gran capacidad, ha desarrollado enormemente la memoria y la imaginación, y esto es muy bueno y muy malo para nosotros. Sin un buen uso de estas posibilidades vivimos amargados por el caos que nosotros mismos creamos. En África, una cebra está pastando tranquilamente. Una enorme leona la acecha. De repente la descubre y sale corriendo a toda velocidad, la leona la sigue detrás de ella. Es sin duda un momento dramático, en la que su vida está en juego, y de gran estrés. En esta ocasión la leona falla el lance, y a los diez minutos nuestra cebra está pastando de nuevo tranquilamente, probablemente sus indicadores de estrés han menguado. Una semilla libera el brote de una nueva planta, y éste debe cruzar centímetros de tierra en busca de la luz, luego a su alrededor se tiene que enfrentar con el caos: falta de agua y nutrientes, climas extremos o animales que se lo quieren comer. Pero nuestro brote se las arregla para seguir creciendo y salir adelante. No hace otra cosa que gestionar el caos. En cambio, el ser humano guarda memoria de cada trauma, y lo peor es que se la pasa en estado hiperalerta porque ve en su imaginación leonas y dificultades por todas partes.


Las plantas, animales y humanos vivimos dentro del caos, fuerzas de desintegración, y a través del instinto, la razón y la intuición vamos creando orden a nuestro alrededor para facilitar nuestra supervivencia. A esto le llamo gestionar el caos. Una casa, un coche, un objeto cualquiera, incluso sin utilizarlo, se va llenando de polvo y se degrada. En general se oxida antes la bicicleta que no usamos que la que utilizamos regularmente, lo mismo pasa con una vivienda vacía. Por eso, el caos hay que darlo por sentado. Cada día entra el polvo, las cosas se ensucian, rompen u obstruyen, y hay que limpiar, engrasar y arreglar nuestro entorno para poder fluir bien. Por eso cada mañana toca lavarse, hacer gimnasia, lubricar las articulaciones y ponerse en forma. Los niños sacan los juguetes, crean un montón de desorden y luego buscan otro lugar para sentirse mejor, dejando todo desparramado. Los papás están detrás guardando juguetes y tratando de enseñar al niño a hacer lo mismo, pero el niño ya está generando caos en otro sitio. Los adolescentes huyen de su propio caos, dejan todo desordenado, sucio y luego negados a ordenar su propio caos se van para otra parte de la casa, solo cuando son molestados por los pesados de sus padres, y su insistencia en que limpien y ordenen se esconden en su leonera, pero siguen sin limpiar ni ordenar... Hace falta ser adulto para entender la magia del orden, la eficiencia y bienestar que produce la limpieza a nuestro alrededor. Sin embargo, esto cuesta trabajo y mucho tiempo y esfuerzo, y el adolescente no está dispuesto a hacerlo, quizás porque vive demasiado inmerso en su egocentrismo y caos emocional. Cada día pasan cosas, se rompen objetos, se deterioran otros, surgen problemas. Hay que disponerse a gestionar el caos y volver a crear orden. De hecho, el orden es la expresión directa de la conciencia. Y el caos la dinámica del inconsciente. Cuando intentamos interpretar un sueño ponemos conciencia en el inconsciente y creamos un orden, una comprensión a partir del caos. La salud es orden y la enfermedad desorden. Y si actuamos solo de forma inconsciente nos llenamos de suciedad y enfermedades.


El cuidado de nosotros mismos en alimentación, ejercicio, hábitos y actitudes es la aplicación directa del orden. En realidad los problemas no existen, solo hay circunstancias y realidades. Si nuestra mente no es usada con orden y conciencia será ella misma la que genere los problemas. Una mente ordenada genera soluciones; una mente inconsciente crea problemas. Gestionar el caos debe partir de un cierto conocimiento de cómo funcionamos, de algo de conocimiento de nosotros mismos. La memoria debe ser usada correctamente porque hay cosas para olvidar y otras a recordar. Podemos usar la imaginación para crear, en vez de vivir temores constantes y paranoias. ¿Cuál es tu problema?, ¿dinero?, ¿afectos?, o ¿salud? No, el problema es la mente que convierte las circunstancias en dificultades. No se puede pensar de cualquier modo, de igual forma que no puedes limpiar un cristal con un paño sucio y mugriento. Lo primero es gestionar al gestor. Ordenar el mecanismo que debe crear orden. Hay magia en el orden, pero también la magia tiene su propio orden. Así que antes que precipitarse conviene sentarse un rato y observar el caos mental. La contemplación tranquila y distanciada de la mente es como una luz en la oscuridad, un rayo de orden en el caos. Recuerda que la observación distanciada no tiene juicios ni críticas, simplemente es claridad para darse cuenta del estado de las cosas y captar el orden, lo cual nos hará ver por dónde empezar. Por ejemplo si limpias el polvo de la mesa y el sofá, y luego barres, quizás los vuelvas a llenar de polvo. Empieza por el suelo. Si no limpias el paño con el que vas e limpiar, quizás extiendas la suciedad. Poner orden en el caos no ha de ser un acto compulsivo, sino reflexivo y la calma te pondrá en contacto con el primer principio del orden: la prioridad. Hay muchas cosas que hacer y muchas son importantes, pero ¿cuál va primero y cuál va después? Eso debe ser actualizado momento a momento, sino simplemente nos dejaremos llevar por el desorden "ordenado" de las manías y hábitos inconscientes. Que no te asuste el caos. Sólo tienes que detenerte y empezar a trabajar en un sentido gradual y coherente con la totalidad.

TAI AIM


Sí, el alma nunca vence, pero del mismo modo nunca fracasa. Es el ego, la perspectiva individual sujeta a la dualidad, el que constantemente vive en la idea de éxito y fracaso. La vida una, global y total, sabe que tras toda subida viene una bajada, y tras toda bajada, una subida. Todo en el mundo de la forma es impermanente y cambiante, se mueve por ciclos y ritmos. Para el alma, que simplemente es la memoria y el propósito del Ser, ganar o perder es indiferente. Lo único relevante para ella es la dirección correcta. El norte. La brújula del Alma apunta siempre al norte, que es nuestro Ser Esencial. De este modo, desde el punto de vista individual del ego, existe una tensión continua, un intento y un tratar de ser. Para ello se plantea objetivos y metas ficticias, focales que distraen y buscan alcanzar algún tipo de propósito. Por eso el ego se enfrenta a las elecciones continuas, a la conquista de logros, y todo ello movido por impulsos inconscientes, poder, prestigio y seguridad. Todo ello son ficciones porque a través de los logros nunca se alcanza la completitud, ni la seguridad estable. Más bien lleva a que el personaje viva en la idea de triunfos y fracasos: “¡lo conseguí!”, o “¡no lo conseguí!”. ¿Y después de eso, qué? Clama el alma en atronador silencio... ¿Y después, qué? Pues está claro: tras una cima hay una nueva bajada;


tras la expansión viene la contracción; tras la salud llega la enfermedad; tras la vida está la muerte... Por eso, el ego puede tener éxito, pero el alma no lo busca ni lo considera importante. Para el alma lo único esencial es no perder el norte, no desviarse ni un ápice de lo que es correcto, seguir adelante en la dirección adecuada, indiferente a éxitos y fracasos siempre temporales. El ego cree que si logra algo se sentirá realmente bien, que todo será perfecto. Pero el alma sabe que no hay tal lugar donde detenerse. El ego se agota y desgasta porque cada éxito requiere media vida, y luego la satisfacción no es estable ni duradera. Por eso, el alma sugiere descansar a cada paso, ya que no hay final. Establecerse en la paz y no buscarla al final de un supuesto camino. Yug-Do es encontrar el Yug, o el final, en cada instante. En el paso presente, en seguir la dirección del alma. El Guerrero de la Luz no lo tiene todo claro, no busca meta alguna: solo aprende a mantenerse receptivo a su propia alma, el conector entre su persona humana diferenciada y la totalidad. Saber por dónde caminar y mantenerse alumbrado por el encuentro de dos corazones vivos: el de un Maestro y un Discípulo. Con estos bastan para que el Oriente siga siendo la fuente de la luz y la dirección y el camino sean irrefutables, sin seguridades, promesas o porqués. La confianza y la conciencia son las columnas en el portal del Ser. Si estás interesado en la eternidad, en la verdad sobre ti mismo, olvídate de logros, éxitos y fracasos y céntrate tan sólo en la dirección correcta de seguir, aunque nadie lo comprenda, ni siquiera tú mismo. La paz no es para después, la conciencia de Ser llega a tu conciencia personal bajo el aroma de lo que es correcto y toca vivir, sin premios, ni castigos, ni éxitos, ni fracasos. Solo es una senda abierta a la pasión y al misterio.

TAI AIM


Hay muchas cosas que hacer antes de que amanezca. Yogui Ram me solía venir a despertar sobre las 4.30 de la mañana, y ahí empezaba toda una preparación higiénica y mental con el fin de estar bien despierto y preparando para el amanecer. El Yogui insistía en que cada día es un acontecimiento único y singular, y que con él tenemos la posibilidad de recibir grandes dones y regalos, pero hay que estar bien atentos, dispuestos y preparados. Con mi Maestro don José Marcelli, cuando estábamos haciendo vida de Ashram ocurría algo parecido: Nos levantábamos todavía oscuro, y bajo las estrellas escuchábamos un concierto de música que el Maestro tenía a bien seleccionar para ese momento. Así, bajo la bóveda celeste, al aire libre y bien tapados con abrigos y capuchas, escuchábamos una orquesta de música sinfónica, grillos, mirlos y muchas sensaciones únicas. Todo hasta que el Maestro pronunciaba estas palabras: “Wu Shu”, y entonces tomábamos el Bambú y empezaba la gimnasia oriental de movimientos felinos. Eso sí, esto sucedía con música de Kitaro y otros autores de la nueva era. En estos días celebro mi amanecer a un nuevo año. Tengo la costumbre de celebrar una semana antes o más de mi cumpleaños, que es un nuevo ciclo solar, una nueva vuelta del sol


por el zodiaco y, en cierto modo, un nuevo gran día de 360 amaneceres. Cada año tiene su número, su misterio y su enseñanza. Así que antes de cumplir y entrar en el nuevo ciclo ya me preparo y miro de hacer todo lo que no he conseguido o podido en la última etapa. Para mí, más que un final es la prevención para un nuevo principio. En el juego de la vida cada instante cuenta y es como si cada año fuera un día cósmico. Si una persona vive 90 años son solo 90 días, noventa primaveras, noventa inviernos, noventa pasos para hacerse más consciente y ahondar en el misterio. La vida es corta y está llena de posibilidades y regalos, pero no hay que dar por sentado el mañana. Así, al final de mi año 57 (que es el Arquetipo 12) se prepara para entrar al ciclo 58 (Arquetipo 13), y todo apunta a que estará llena de transformaciones externas y transmutaciones internas. Como es el final del Arquetipo 12, me abro a la Otra Mirada, a considerar lo que no veo, pero sé que existe; a no perder el detalle de la conciencia que soy y percibe amorosamente al personaje temporal. Y me voy preparando para el Arquetipo de la Muerte, el trece, número mágico que invita a profundizar y saborear el néctar de cada instante. La Muerte es una enseñanza maravillosa que te dice: lo que vas a vivir hoy es único, la existencia jamás se repite y estar atento es descubrir cómo se mueven los hilos entre bambalinas. La mente y la memoria te impiden saborear las cosas tal y como son porque se establecen comparaciones, opiniones y recuerdos.


Pero hoy este día y este año es algo completamente nuevo y único. Todo es lo mismo y nada es igual, es la paradoja y la esencia del universo. Hay un Campo permanente, eterno, unitario, sin principio ni fin, y de él emanan burbujas de tiempo y espacio para fabricar conciencia. Así, la eternidad que soy experimenta con la identificación con una forma humana durante un lapsus de noventa días-años para crear conciencia despierta. Hay que aprender el juego de la dualidad, del ritmo, de la correspondencia, de la vibración, etc., de las Leyes que los sabios nos transmitieron hace miles de años. El objetivo es simple: no estás aquí para sufrir ni pagar karma, aunque haya que hacerlo. El sentido es generar un tipo de frecuencia que podemos llamar alegría, paz, tranquilidad y plenitud: los mejores sentimientos posibles. Y todo ello a pesar de la realidad cambiante. Eso es imposible sin el adiestramiento de la mente, y en eso consiste el Yoga y el Yug-Do. La mente sin entrenar opina, juzga, prefiere, compara y se llena fácil de mal humor, prejuicios y frustraciones. Hay que vaciarla y renovarla como si se tratara de un espacio con aguas negras. La negatividad, como el polvo, hay que darla por sentado, como algo natural, pero hay que limpiar y renovar cada día. Por eso, antes de hacer fotos limpio los lentes, y antes de cada amanecer limpio mi mente. Te deseo claridad y acción correcta. ¡Buen día!

TAI AIM


He mirado mucho, he buscado hasta la saciedad. He mirado y he visto, y también he visto que he sido visto, y entonces la vida se esconde, se escabulle y desaparece discretamente. La vida real, la vida salvaje, es siempre discreta, sencilla y humilde. En general, los animales solo llaman la atención de sus congéneres en contados momentos. Lo normal es que las presas intenten pasar inadvertidas, los depredadores aún más. Solo el humano genera ruido sin sentido. Hoy he sido visto. Es algo distinto, nuevo e indescriptible. Cuando la mirada de lo salvaje te encuentra y tú te encuentras con ella, todo queda a merced del ánimo. Si eres un cazador o un depredador humano, el animal huira de inmediato. Sin embargo, si estás tranquilo, si tu curiosidad es amistosa, abierta, sin miedo, ni tensión, entonces la mirada salvaje se verá en el espejo, sentirá curiosidad también por ti, no habrá prisas, ni agobios. Dos mundos se descubrirán en un espacio sin tiempo. Los antiguos decían que si te encontrabas con la mirada directa del tigre, vuestros espíritus se fusionarían. Lo mismo le


ocurre al que se encuentra con el lobo, el lince o el oso, cara e cara, sin temor, sin excitación ni acecho, sin perseguir, ni huir y sin desafío: el espíritu Salvaje se reconoce en ti, con respeto, salvando las distancias y sin cruzar barreras invisibles. Así fue que un leopardo cambió mi vida. Hoy, del río vivo y del alma del río, la bella pescadora ha surgido del agua y me ha hipnotizado con su mirada limpia, pura, sin intención. No se ha ido, como era de esperar, nos hemos contemplado lo suficiente, hasta saber algo más sobre el mundo secreto de aguas y tierras, humanos y animales, personas de todas clases.

El Kodami del río, la nutria viva, salvaje y libre me ha hablado hoy de la tranquilidad, la fluidez y la alegría. ¡Gracias!

TAI

AIM


Mis apreciados Cintos, Los temores son memorias, Nada tienen realidad.

que

ver

con

la

Mi ser y el tuyo es el mismo ser, así que ese es nuestro principio. Desde allí ya solo queda adaptar y adaptarse a las circunstancias. No hay problemas, solo pruebas a superar. Y como dijo el Maestro, tenemos que ponernos manos a la obra y crecer con ellas. Tienes muchas capacidades, así que resuelve como es lo que toca. En esta vida y la que sigue, hay que seguir adelante. Eso te hará fuerte: de eso se trata. Las pruebas se las pone uno. Mira hacia delante con confianza. Pregunta a la divinidad qué te habita, si en todo lo que él crea hay algo que no es suficiente o no apropiado. Yo no soy nada más que una servidora que tiene una función: “ayudarte”. Así que no te cohíbas: Eres como eres, como los demás seres de este planeta. Luminoso y extraordinario cuando encuentra su lugar. Mi querido cinto: eso depende de ti. No tiene que ver con que los demás o alguien te quiera, Sino de que tú te quieras. Cualquier acto que no te eleve está fuera de sitio,


Por eso surge tu incomodidad; Procura que no te arrastre. Todos estamos para superarnos y esforzarnos. De momento, todo lo veo muy bien. Me gustas como eres y encuentro que el Yug-Do te sirve porque le sirves. Así que adelante: no prestes atención si algo te niega, Si le das atención es porque tienes que aprender a mirar a donde debes. El deseo de pertenencia es lógico, Pero cuando renuncias a él esto se acaba convirtiendo en algo liberador para ti y para todos. Eres fuerte, así que no aceptes bajo ningún concepto que no estás a la altura. Si eres hija de Dios, es que lo estás. Como decía mi Maestro “O todos somos hijos/as de Dios, o no lo es ninguno/a”. Seguir la senda es encontrar lo que te vincula a ti, al grupo y a la guía. Al Maestro. Todo es muy sencillo, O complicado. Pero da igual: siempre que tú seas la parte más importante de la solución. Gracias por el vínculo sagrado que estamos creando entre todos. Gracias a todos mis hermanos, y a mi Maestro. A nuestro Maestro.

TAI

MARÍA ARRABAL


“Por cada minuto que estás enojado, pierdes sesenta segundos de felicidad”. Ralf Waldo Emerson “El éxito es conseguir lo que se quiere… La Felicidad querer lo que obtienes”.

“El amor es la condición en que la felicidad de otra persona es esencial para ti”.

Dale Carnegie

Robert A. Heinlein “Muy poco se necesita para hacer una vida feliz; está todo dentro de ti mismo en tu forma de pensar”.

“Es más apropiado para un hombre reírse de la vida que lamentarse de ella”. Séneca

Marco Aurelio

“Los niños son felices porque no tienen un archivo en sus mentes llamado <<todas las cosas que podrían salir mal>>”.Marianne Willamson “No te mires en el agua que corre, sino en el agua tranquila, porque solamente lo que en sí es tranquilo puede dar tranquilidad a los otros”. Confucio “No te dejes impresionar por lo primero que veas, puede ser un motín de hormonas, profundiza para buscar en lo simple lo eterno”. María Arrabal

La felicidad depende de nosotros mismos.

Aristóteles

La gente feliz planifica acciones, no los resultados del plan. Denis Waitley

MARÍA ARRABAL


CLAVE DEL MES: RENOVACIÓN.

PARA VER: Never look away (La sombra del pasado). Dirección: Florian Henckel von Donnersmarck. Alemania 188 min.

FRASE DEL MES: " RENOVARSE O MORIR”

PARA LEER: La frontera del lobo. Autor: Sarah Hall. Ediciones Tao 1996 Colección: Los siete sabios del bosque.


Como si mirase un cuadro, ajeno a mí mismo, contemplo la vida. El día a día con sus relaciones humanas, y esa rutina que ya no me atrapa en el estrés de antaño. Procuro respirar cada momento sin dejar de experimentar cómo me siento. Atrás queda la maravillosa experiencia de la Convivencia que nos transportó a una mayor comprensión de nuestro Dharma, y de cómo con el encuentro, el compartir y la Sabiduría y orientación de nuestros Maestros generamos esa Luz que expande nuestra conciencia más allá de los límites del razonamiento, y más allá de la influencia cultural y educacional de la que muchas veces nos hemos sentido impregnados. Este encuentro internacional con mis compañeros de senda, hermanos y guerreros de Tenerife, México, Ecuador e Inglaterra, me ha enseñado la importancia de trabajar desde la unidad, desde el compartir y contribuir a la obra del Maestro. Los días se suceden uno detrás del otro, y con ellos sueños, esperanzas y anhelos. Para la conciencia inmortal sólo existe un único momento: "el ahora". Esa eternidad que se palpa cuando por fin comprendo que todo lo que me rodea, todo lo que existe dentro y fuera de mi es un reflejo de mí mismo.


Me siento un inconformista en una sociedad anestesiada por los medios de desinformación y Reality Shows del tres al cuarto que dilapidan toda inteligencia humana. Inhalo el aroma de la presencia de lo inexplicable: la frescura del parque atrapa mis sentidos. Me relajo y me entregó al momento. Desde mis entrañas se aviva un fuego que me impulsa a vencer mis propios límites y así disfrutar de la esencia que se encuentra oculta en la sencillez, en lo genuino, en la autenticidad de las palabras y del acto consciente que emana de un corazón limpio. La vida siempre es generosa y siempre me da la oportunidad de retribuir con humildad, confianza y amor.

La convivencia consciente siempre es una oportunidad para la renovación y un nuevo impulso para el desarrollo de la conciencia. TAI

Raúl Villar


Agosto siempre me ha parecido algo muy especial. Sobre todo porque en ese mes es la parte culminante del verano, en donde el sol expresa su gran luz a su máxima expresión. Recuerdo que el Sol, en astrología, rige al signo del León. Precisamente es en estas fechas cuando llevamos a cabo este festival de Luz, alegría y convivencia alquímica los guerreros/as del Yug-Do junto a los Maestro Antonio y María, en la gran isla del Dragón en Tenerife, Islas Canarias, España. Siempre la vida me ha parecido que es una gran oportunidad para despertar e ir desde la inconsciencia hacia la consciencia bajo la guía del Maestro. Con su inspirador ejemplo me abro paso en mi laberinto inconsciente. Ahora recuerdo las palabras que, en cierta ocasión, nos compartió el maestro: Un guerrero sigue un código. A éste los japoneses llamaron Bushido, las órdenes de caballería, reglas y los yoguis, yamas. El mandamiento de todo guerrero/a de la luz es el siguiente: "Cumple tu sagrado deber". Esta enseñanza me señala la senda con claridad y sabiduría. Para cumplirla es necesaria la disciplina consciente, como preparación al discipulado. En Tenerife fue maravilloso vivir el presente experimental


hacia lo desconocido, con toda esa diversidad maravillosa que me rodeaba, cada momento me sorprendía, me hacía reír y me sintonizaba con lo nuevo, las bromas con las risas abrían mi corazón, y me unía en el ambiente de fraternidad y paz que lo llenaba todo. Tenerife me transformaba de nuevo, con su singularidad y belleza. Tenerife es un lugar de vacaciones, pero para mí es un lugar para descubrirme en cada rostro, en el de mis hermanos, con sus prisas y con su obediencia consciente hacia la sabiduría. Compartir sin pedir fue la máxima del instante. Mis hermanas canarias, con su entrega y calidad humana, me recordaban la humildad viva. Por eso, muchas gracias. Y mis hermanos guerreros son ejemplos de grandes ejecutores en la senda. El gran trabajo de equipo con madurez y soluciones para lo que fuera necesario fueron experiencias que son joyas a la vista sin que nada pueda empañar. A mis Maestros solo tengo una palabra: GRACIAS por todo. TAI

Serafín Mendoza


Esta mañana me trasladaba al trabajo, y en el trayecto me percaté de las conexiones intermitentes que hay en el proceso de la vida. Después de un largo periodo vacacional, hoy los niños entraron a la escuela. El retorno a la dinámica laboral y escolar desencadenó que esta sobrepoblada ciudad estuviera más desordenada, casi caótica. Aún dentro de esa confusión, advertí la permanencia, el inicio y el cierre sucesivo de ciclos. Por ejemplo, cumplí otro año al lado de mi Bamboo gris, esa perrita que me acompaña y protege: me hace feliz. Recientemente he visto a amigas con las que he compartido muchas anécdotas y vivencias que nos llevan a hacer cuentas del pasado y del porvenir. Pienso en los felices años que llevo en mi trabajo o en mi domicilio. También celebro el proceso de elaboración de mi tesis: todo se conjuga para que yo tenga uno de los dos exámenes solicitados, y luego pueda concluir mi investigación. También siento los nuevos aires en el dojo en donde entreno cada tercer día. Rostros diferentes se acercan a esta práctica desde la cual respiro y contemplo el devenir. El Yug-Do se convierte en la ventana que me permite poner atención en la belleza del paso del tiempo.

TAI

Illihutsy Monroy


Una gran padre...

montaña.

Un

buen

Ayer de paseo por el Teide recordé que un gran edificio volcánico obra de la naturaleza consigue una mayor envergadura gracias a la diversidad de materiales de los que está compuesto. Así siento la obra del Yugdo, que es la obra del Maestro. Se hace más grande en base a la diversidad de materiales y elementos de la que se va construyendo. Cada uno desde sus posibilidades, desde lo que puede aportar según su utilidad y ubicación en ella, y desde el respeto profundo hacia su propia naturaleza. Por eso hoy me siento en la necesidad del reconocimiento a la diversidad y a la singularidad de la que participamos cada uno. Gracias por lo que aportamos, por nuestro pequeño grano de arena en la magna obra que supone el desarrollo del ser humano Conciente. Gracias al esfuerzo y voluntad de los hermanos de México y Ecuador por estar y compartir para Ser. Gracias a los Estimados hermanos de Tenerife por dar lo mejor de sí a cada momento y apoyar para seguir creciendo con altura. Gracias a los Maestros por la posibilidad y guía en esta gran obra que, aunque puede aparentar no serlo tanto hacia fuera de momento, sin


duda es bien grande hacia dentro... La gran obra de construirnos cada uno, y de construir un conjunto. Gracias a la vida que lo hace posible, y recuerdo; "las generaciones del mañana agradecerán nuestros esfuerzos de hoy". Gracias al karma grupal que generamos, un poco más conscientes y receptivos a cada paso. PD: Hoy medito en la importancia de desacelerar y detenerme para descubrir qué es lo que toca, para volverme receptivo al mensaje de la vida, regalo que me brindo a mí mismo al realizar la práctica regular.

Un abrazo a todos y cada uno de los Guerreros. Nadie sobra, y nadie falta.

TAI

Eugenio Pareja


Fue maravilloso poder abrazar a los hermanos americanos, y sentir la presencia de los que parecía que no habían venido. Ellos estaban también entre nosotros. La convivencia fue un gran festín alegre, colorido y profundamente sagrado. Primero contentamos el cuerpo disfrutando de un lugar apacible y muy cómodo en un pueblo canario llamado Tegueste. Disfrutamos de sabrosas, nutritivas y variadas comidas que compartimos en una gran mesa todos juntos. El aire puro nos fortaleció los pulmones, el calor nos abrió todos los poros, la lluvia nos inundó la piel y la belleza del lugar nos unificó con el paisaje. Después, el Maestro nos guió en la mente, compartió su sabiduría en los talleres diarios de Fuego, Aire, Agua y Tierra. Hicimos diariamente la práctica del Yug-Do antes de salir el sol, tomamos baños en el mar, aprendimos en el taller de masajes, entrenamos yoga, meditación, nos reunimos con juegos divertidos y música maravillosa. El salto a la conexión con el alma lo dio cada uno de forma individual. Me iluminó la prueba del árbol; todos fuimos firmes y flexibles como el bambú, formamos un círculo poderoso y sagrado. La voz del Maestro nos fortalecía, y el blanco color de las camisetas en la oscuridad iluminaba todo el espacio como si se tratara de un enorme foco luminoso en la noche. Es un gran viaje hacia el interior de uno mismo que te hace fundirte con el Todo y con la Nada. La entrega de cinturones fue emocionante. Era uno de cada color: negro para María, plateado para Emily, rojo para Juanita y dorado para Serafín. La ceremonia de reconocimiento de mayor entrega después de superar todas las pruebas terminó en abrazos y alegría de compartir. La sabiduría del Maestro, con su gran aceptación y comprensión de nuestra diversidad, favorece un entorno fraternal, firme, amoroso y sincero. Sobre la maravillosa Maestra María, quiero que sepa que cuando digo “Maestro” la incluyo a ella, y cuando digo “Maestra” le incluyo a Él.


Agradezco también el esfuerzo de los cinturones soberanos, hacedores de toda la organización y logística que hizo posible disfrutar de los pequeños detalles. A los hermanos de México, Ecuador e Inglaterra, quiero decirles que me llena de entusiasmo saber que detrás de un cinturón hay siempre una profunda voluntad de evolucionar, entender la vida y sentirse parte sagrada sin principio ni fin.

Y a mis queridos cintos negros, los que fueron y los que no, decirles que el Yug-Do no es una prueba fácil, pero si te mantienes a pesar de la adversidad que te enfrenta a tu ego, lo miras de frente y te comprometes contigo mismo, te ayuda a convertirte un poquito cada día en lo que somos: SERES DE LUZ.

TAI

Maite Belaza


Queridos compañeros de Yug–Do: Los saludo, y me alegro de coincidir con ustedes en la práctica y el camino de Yug–Do. Hace unos meses me encontraba en la cuerda floja, sin saber qué camino debía tomar ya que ninguno de los establecidos me convencía del todo. Mi familia me había enseñado muchas veces los caminos posibles, conocidos y seguros, en los cuales si obedecías y te adaptabas te iría bien. Contaban anécdotas tanto de ellos como de conocidos, de decisiones que habían tomado y los resultados de éstos. Pero eso no solo era contado: también lo llevábamos a la práctica en el bosque, ya que al caminar siempre tomábamos los senderos establecidos, aquellas rutas que nos llevarían a un lugar famoso. Me sentía segura con la certeza de lo que pasaría después, hasta que un día vi hacia otro lado y me di cuenta de que había algo más y quería encontrarlo. En ese momento cambié de camino, ahí donde mi papá me dijo que girara decidí seguir de frente, tenía incertidumbre y estaba desconcertada, pero me sentía más yo. Meses después conocí a Emily, quien llegó como un arcoíris después de llover, el cual sabes que aparecerá pero no sabes cuándo o del cual muchos hablan pero tú no lo ves. Hasta que un día, sin esperarlo, observas al


horizonte y ahĂ­ estĂĄ, iluminando el paisaje y alegrando el momento, lleno de color y una chispa que te atrae y te hace sentir mejor.

Junto a ella he experimentado el bosque de muchas maneras: hemos construido y descubierto nuevos caminos, hemos ido rĂĄpido y lento, al amanecer y por la noche, hemos estado en movimiento y detenidas escuchando las aves del firmamento, nos hemos perdido y hemos encontrado zarzamoras. En algunos momentos vamos conversando y otros permanecemos en silencio, cada vez que vamos al bosque es una aventura diferente. Incluso cuando voy sola recuerdo las experiencias en el


bosque con Emily y me motivan a explorar y conocer nuevos caminos. Recuerdo el invierno del 2018. Era una mañana en que Matías, Emily y yo fuimos a practicar Yug – Do al bosque, y de regreso a casa, Emily trataba de explicarle a Matías que no siempre estaría con él ya que algún día se separarían. A ello, Matías respondió: “siempre estarás conmigo, porque estás en mi corazón”. Esa frase me marcó y la recuerdo constantemente, ya que el amor es dejar ser a las demás personas, dejar que se expresen y fluyan según su tiempo y espacio para conectarse con su esencia y compartirla con el mundo. Emily me acercó con Yug-Do y se lo agradezco, ya que ha sido un puente para llegar al lugar en el que puedo encontrar aquello que sentía que podía ser posible, en donde a través de la disciplina, constancia y voluntad puedo conectar con mi interior, escuchando mi voz y la guía del maestro Antonio Iborra, la maestra María y todos mis hermanos de Yug-Do. Gracias.

TAI

Nancy González


La vida se vuelve armonía y música, fuera de ellas. La práctica de Yug-Do se vuelve consciente, fuera de ti. Las oportunidades de cambio frecuencial se presentan cuando estás fuera de ti. La conexión se da fuera de ti. Lo más simple y bello, lejos de logros, se ve fuera de ti. Con la técnica de danza y otras disciplinas pienso con el cuerpo, y no ocurre nada. El ego se perfecciona. Todo ocurre fuera de mí. Cuando en el Arte se trasciende la emoción, motor del ego, todo ocurre. Fuera de ti. Todo comienza fuera de ti. Y al mismo tiempo, todo ocurre a través de ti. La frecuencia al dar y al recibir la práctica de Yug-Do, lejos ya de la etapa de enamoramiento, se fusionan. Estás fuera y dentro de ti. Dar y recibir, se vuelve lo mismo. Fuera de ti, aparece todo. Me dejo impregnar por lo Divino trascendiendo, fuera de mí. La Paz se vuelve neutra, algo que la mente no consigue describir. Experimento el Vacío, Yug-Do cuando abandono la lucha y empieza la danza. Así lo describió el Maestro. Esa afirmación traspasó todas mis formas, las capas blandas y también las más duras.


Sólo veo Belleza, si salgo de mí. Dejo de creer esto y aquello, y todo ocurre fuera de mí. El escrito de este boletín es una oportunidad para cada cinto, para desenfocar el ego y seguir el camino hacia lo más auténtico. Sin la necesidad de aprobación, de perfección en las palabras, fuera de sí mismo. La construcción de un ego espiritualcomercial es muy rentable, encontrarás cursos de todo. Una Disneylandia egoica, creada para que te ahogues cada vez más dentro ti. Cuando filtro consciente lo que percibo, estoy fuera de mí. Se abre la puerta a un nuevo entendimiento. Aprendo a moverme en las cuatro direcciones, cuando salgo fuera de mí. Ya nada es, todo empieza a existir fuera de mí.

TAI

Candy Vera


RECETA DE CEBICHE VEGANO Ingredientes • Setas de ostra: 1 ½ tazas, cortadas en dados medianos • Cebolla morada: ½, cortada en dados • Tomate: 2, cortados en dados • Aguacate: 1, cortado a dados • Mango: ½, cortado a dados • Zumo de lima: 2 cucharadas soperas (c.s) + 2 c.s • Cilantro fresco: 3 c.s, cortado finamente • Copos de nori (opcional): 2 c. pequeña (c.p) • Sal: pizca • Pimienta negra: pizca • Pimienta de cayena (opcional): pizca Cómo hacer ceviche vegano: 1. Marinar las setas: Disponer las setas cortadas en un bol, añadir una pizca de sal y 2 c.s de zumo de lima. Masajear con las manos y dejar reposar mientras preparamos el resto de los ingredientes. 2. Preparar la cebolla: En caso de que haya problemas para digerir la cebolla, disponer la cebolla cortada en un bol pequeño, añadir ¼ c.p de sal,


mezclar muy bien y dejar reposar durante 2 horas. Pasado este tiempo, lavar la cebolla muy bien y escurrir. 3. Mezclar: En un bol mezclar las setas marinadas, la cebolla, el tomate, el aguacate, el mango, el zumo de lima, el cilantro fresco, los copos de nori, la sal, la pimienta negra y la pimienta de cayena. Mezclar muy bien todos los ingredientes. 4. Servir: Se puede servir inmediatamente, pero es mejor taparlo y dejar que repose dentro de la nevera durante una par de horas para que todos los sabores se homogenicen.

‌BUEN PROVECHO!! TAI


Curso de Yoga, Formaciรณn de Yugdo, Curso de Acupuntura Cuรกntica, y de Reflexoterapia Podal. Seminario y prรกcticas en la Naturaleza. Terapias personales, Prรกcticas diarias de Yugdo y Compartir con la Escuela de Cintos Negros de YugDo.

Terapias personales en Barcelona, Pineda de Mar y Vich.

n


Continuan las actividades habituales; clases, talleres, Escuela de C. Negros, difusión y prácticas regulares de Yug-do. Se prepara el próximo Encuentro para noviembre con el Maestro.

Viaje de aventuras y formación con el Maestro del 17 al 29 de septiembre. Una experiencia directa con el Maestro. Siguen las clases, talleres y demás formaciones y actividades de Yugdo… Ahora

es el momento. Anímense a Venir!! ADELANTE LA GRAN AVENTURA DE VIVIR EL YUGDO!!

Para bajar ésta y anteriores publicaciones:

https://issuucom/search?q=yugdo


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.