Asociación para el Fomento del Espíritu y la Esencia de
las Artes Marciales y el Yoga
BOLETÍN 242 AGOSTO 2022
La vida en su ritmo y polaridad, o sea en su latido, refleja momentos de contracción y otros de expansión. Es como en una sístole y diástole de un gran corazón: el corazón de León del signo de Leo… En ese movimiento, desde la conciencia humana, podemos apreciar el equilibrio y el desequilibrio, el tiempo de los extremos y el de los términos medios. Para nuestra salud y bienestar nos agradan más los momentos de equilibrio, sin embargo, crecemos y nos fortalecemos en los extremos. Agosto es extremado: hace calor en el hemisferio norte y frío en el sur. En ambos puntos precisan resguardarse y protegerse. En España y gran parte de Europa occidental es la temporada de vacaciones, cuando un inmenso éxodo poblacional migra de las grandes urbes a
las playas y montañas. El asfalto se vacía y la campiña se llena de gente, es así casi todos los años. Las personas que se han pasado todo un año trabajando, con estrés y muchos sinsabores, buscan en el tiempo de asueto, refrescarse, viajar, cambiar de aires, distraerse y recuperarse. Esto es muy natural. Esto sucede entre el 20 ó 30 por ciento de la humanidad privilegiada, porque el otro 70 por ciento no sólo no tienen vacaciones, sino que tampoco tienen comida, agua potable y, de hecho, casi nada, en cambio tienen mucho trabajo esclavizante y miseria. Ayer me encontré con una familia corriente canaria muy ilusionada con su viaje a África, a vivir su safari en Kenia. Es un sueño hecho realidad, algo que la clase media puede lograr una vez en la vida. Allí, en viaje grupal con todo incluido y con lujos, vivirán una "aventura" de un "sueño de África" que les hará sentirse especiales. Seguramente se encontrarán con los inconvenientes del turismo masivo y de gastarse una pequeña fortuna. Ese mismo día me paran
unas chicas para pedirme colaboración con una ONG que trabaja en las hambrunas del continente negro. Me muestran fotografías y me relatan un montón de historias sobre millones de niños que se mueren de miseria… Eso es la realidad del mundo, unos nos paseamos entre elefantes, pagando precios exorbitantes, mientras, muy cerca, la pobreza devora implacable a la gente sin fortuna. Con lo que se gasta un solo turista en África ¿cuántos niños se podrían salvar? ¿Qué vale más, un león o doscientos pobres? Es difícil confrontar las contradicciones humanas. La situación del mundo desde la perspectiva humana es muy compleja y esa montaña tiene demasiadas aristas. Alimentación, economía, contaminación, superpoblación, extinción de la biodiversidad, racismo, clasismo, machismo, política, religión, tecnología, filosofía… Tantos mundos como cabezas humanas... Todo eso pienso mientras camino, y camino para generar un poco de orden y paz en mi interior.
Busco un ritmo, cuento los pasos, sincronizo movimiento y respiración y poco a poco puedo pasar del pensar al sentir. La respiración se amplía y con el aire nuevo me llega el aroma del pinar: es un bálsamo curativo que de inmediato me llena de coherencia. Poco a poco los sentidos se afinan y escucho al petirrojo, la gama de sensaciones aumenta. La vida me recibe en su seno. Como los antiguos guerreros y caminantes, me "acojo a lo sagrado" y en este caso lo sagrado no es un viejo cenobio, ni una catedral, sino la empinada senda por la crestería de la montaña. En agosto elijo encontrar parajes solitarios, donde la naturaleza me envuelve con su manto verde y fresco. Me parece mentira que todavía existan tantos portales al paraíso terrenal, aquí donde se puede escuchar el murmullo del
arroyo, la melodía del ruiseñor, el aleteo de la mariposa y la amable sombra del roble albar. Estoy buscando al lobo hermano, no al lobo feroz de los cuentos pervertidos, sino al héroe animal, proscrito y resiliente que, a pesar de las balas, venenos, trampas, odios, incendios y denostación, sigue campeando mientras evita al ojo humano. El lobo mítico que ha formado parte del imaginario del hombre paleolítico es un ejemplo de fuerza, inteligencia, nobleza, cooperación y lealtad a su clan. El hermano lobo es el espíritu salvaje e indómito que se negó a convertirse en perro o esclavo del hombre. En cada uno de nosotros conviven un perro y un lobo: lo domesticado y lo salvaje, lo adiestrado y lo libre. Y no podemos vivir nuestra salud e integridad sin incluir ambas fuerzas. Ver un lobo
en la naturaleza, salvaje y libre es uno de los retos más difíciles y se requiere de mucho tiempo, paciencia y conocimiento. “Ir a lobos”, como dicen los naturalistas del norte, es una propuesta con escasas garantías de éxito, es casi como apostar a la lotería: compras el boleto, y ahí acaba tu control. Vas, esperas, rastreas y lo demás son solo posibilidades. En eso consiste el arte del aguardo. Esperar, una oración, avistamiento y una aparición. De todos modos, el simple hecho de caminar por el bosque, la quietud, la espera, todo ello es medicamento para el alma. En un mundo como el actual, la naturaleza es el último tesoro, y el último medicamento para el alma domada. Feliz agosto TAI
ANTONIO IBORRA
En agosto el territorio del León se transita con la palabra clave OSAR. El miedo nos detiene, y la sociedad actual nos maneja y manipula a través del temor. Por ese motivo es muy importante que conectemos con nuestra Fuerza interna, aquella que emana de nuestro Ser espiritual. En el camino de la vida en busca de la Fuente original a la que estamos llamados a regresar con conciencia, nos vemos abocados a resolver el enigma de la dualidad o de las polaridades: frío, calor, bueno, malo, verdad, mentira, luz,
oscuridad, enfermedad, salud, materia, espíritu, tú y yo… Sí, desde la percepción individual todo tiene dos polos: positivo, negativo Yin y Yang. Así que el refrán "bueno o malo, ¿quién sabe?" cobra pleno sentido. Todo lo que pasa y lo que nos pasa se puede medir con la misma vara. “¿Bueno o malo?". Así son las cosas, tal como decía el Maestro José Estrada (quién era del signo de Leo, por cierto): "La Verdad es un conjunto de verdades y mentiras". Y con todo esto, uno se pregunta ¿cómo posicionarse entonces? ¿Cómo juzgar? ¿Cómo discernir? Es ahí donde tenemos una excelente área de crecimiento. En el circuito energético de los signos fijos, a veces el pensamiento único se convierte en una gran tentación. Decir: “¡Esta es la verdad!”. Y entonces la conciencia se trunca y dejamos de avanzar. Existen razones que tiene el corazón y que la razón no entiende. También hay razón en la sinrazón. El caos es un tipo de orden que
todavía no podemos comprender ni asimilar, pero también es orden. El mal uso de la Ley de Polaridad es justamente polarizarse: cerrarse al otro lado de la verdad, a la otra cara de la moneda. Lo cierto es que en la vida real no nos queda otra que elegir y tomar partido, estar a un lado de la línea o del otro. Así es en el mundo real. Sin embargo, desde la perspectiva de la conciencia, tenemos que sobreponernos al aferrarnos a la opción elegida. A veces lo que tenemos que asumir no es perfecto, pero lo juzgamos como mejor a la otra opción, y eso es lo normal y lo válido, pero no debe ser visto como la conclusión o el final de algo, sino como el principio. Es un ejemplo de fraternidad universal estudiar, empatizar y comprender la postura, opción y razón de nuestros oponentes, de los que piensan diferente, con aquellos que no podemos estar de acuerdo ni aprobar. Sí, porque no digo justificar, ni apreciar, sino tratar de comprender las motivaciones, la historia del otro, la visión distinta...
Seguramente no todo lo que nos presenta el oponente es malo o erróneo, quizás haya matices correctos, por muy reprobable que sea el resultado global. Ponerse por encima de la polaridad es asumirla en nosotros mismos. Todos manifestamos dos polos, y a menudo están enfrentados y en lucha. Esa es la causa de tanta neurosis, culpabilidad y auto agresión. Cada vez que nos afirmamos en un polo personal y negamos el otro, éste es relegado al inconsciente, y desde ahí esa "sombra" se proyecta en los demás o se somatiza como enfermedad. Así que está claro: la vida desde la individualidad no es fácil. Tenemos dos lados y múltiples facetas, podemos ser buenos y a la vez malos, compasivos y también crueles, nadie es solo una cosa. El Tao, el Camino del Iniciado Real, exige manejar la Ley de Polaridad, asumir el Yin y el Yang, la enfermedad y la salud, la bondad y la maldad. El
perfeccionismo, como todo “ismo", es peligroso porque nos polariza y nos hace fanáticos, fundamentalistas, crueles y nos roba el humor. Así que cuidado con el espiritualismo, el capitalismo, el comunismo, el partidismo, el machismo, el feminismo, el humanismo, el naturalismo, y con todos los “ismos”. Procuremos integrar más puntos de vista, más opciones, más posibilidades. Abramos el corazón y la mente, abramos los sentidos y abracemos la totalidad de la vida. Quizás la vida no sea contradictoria, sino complementaria, quizás el caos solo sea nuestra miopía como personas. Caminemos hacia lo desconocido, con valor, con entusiasmo, con confianza en el misterio de la vida.
TAI AIM
La práctica radical de la espiritualidad es el silencio. Las palabras y su origen —o sea la mente— son duales. En cambio, el silencio es uno, el silencio es Yoga. Nada se opone al silencio, el ruido no es su opuesto, ni siquiera la palabra, porque sencillamente el silencio es "el uno permanente", el substrato que contiene todo movimiento y vibración. El tiempo, la mente y el espacio emanan del silencio y son como burbujas sostenidas por la quietud eterna del océano de la existencia. Toda vibración, todo sonido, toda experiencia sensorial, toda emoción y pensamiento aparece y desaparece en el Silencio. El silencio no está en otro lugar, ni en otro tiempo, todo lugar y todo tiempo se superponen al silencio. Para tomar contacto con el silencio que somos basta con empezar con la quietud. Y para entrar en el corazón de toda disciplina trascendente es imperativo convertirse en discípulo, es decir
reunir la humildad, la entrega y la receptividad. De este modo la quietud es accesible desde el aquietamiento. Nos sentamos con la espalda erguida en el suelo, o lo más cerca de él. Si nos es imposible podemos recurrir a una silla, pero si lo alcanzamos bajar a tierra es mucho mejor, por incómodo que pueda ser al principio. Nos sentamos y vamos abandonando todo movimiento voluntario, simplemente estamos aquí, quietos, inmóviles y en silencio. Nos convertimos en una estatua que respira, no hacemos nada, solo permanecemos, sentimos y experimentamos plenamente este instante. Todo, absolutamente todo, forma parte, nada se rechaza, nada se intenta, nada se busca, todo lo que hay ahora es plenamente recibido. Solo permanecemos, estamos, eso es todo. La quietud nos transporta al silencio, y el silencio lo absorbe todo, lo contiene todo. Nada queda fuera del silencio. Si hay pensamientos, ¡estupendo!, si no los hay, es lo mismo. Lo que siento, lo que noto, lo interno, lo externo, toda
frontera se diluye: el silencio lo acoge todo como el amor de una madre. La palabra silencio se disuelve en el silencio, no hay nada que elegir, ni lograr, no hay suma ni resta, a veces hay inspiración y otras veces expiración. De repente solo hay pausa: todo es espontáneo. No necesito la voluntad ni el deseo, solo la entrega. Nada está fuera del silencio, la existencia entera forma parte, el cambio y la inmutabilidad son lo mismo. El silencio habla consigo mismo en la conciencia, luego calla, baila y se aquieta. Cuando me levanto y sigo con mis cosas, con la vida, el silencio habla en voz baja, pero sigue ahí, siempre sigue ahí. El amado nunca te abandona.
TAI AIM
El mundo se echó a perder con la producción descabellada en serie. La revolución industrial fue un momento crucial que catapultó el consumo hacia una ola exponencial, lo que además aceleró la reproducción humana y la demografía descontrolada. La industrialización, la producción masiva y el consumo voraz de la súper población humana han acelerado el cambio climático, la contaminación de la tierra y las consecuencias que tenemos a las puertas en un futuro incierto y amenazante. Además de todo, con la producción exagerada también se sacrifica nuestra humanidad. Hoy vemos al ser humano alineado con la realidad, cada uno con un móvil en la mano, absortos en las redes sociales. Lo que más notamos en la calle es que la gente ha dejado de escuchar, de sentir y de empatizar. Todo el mundo va más rápido, más distraído, más
acelerado, y no es por querer pintar un cuadro derrotista, es solo para que despertemos a un recuerdo... Un mundo mejor está en nuestras manos, y me refiero a algo literal, no sólo simbólico. Volver a simplificar nuestra vida, caminar, hacer las cosas con las manos, ir más lentos o aplicar más conciencia. Todo lo tenemos hoy a la distancia de un clic, de un copiar, cortar y pegar. Pero también podemos hacerlo de otra manera, a la antigua usanza. Por ejemplo, exprimir las naranjas a mano, escribir a mano, limpiar con nuestras manos, curar a los demás con nuestro masaje, acariciar, tocar, oler, sentir, observar, esperar, subir sin ascensor, darse un paseo en vez de tomar el coche, darle cuerda al reloj en vez de usar pilas, elevar las persianas con manivela en vez de con mando a distancia. O pegar y arreglar las cosas con nuestras manos en vez de comprar otras nuevas... Las manos no solo agarran, toman, hacen, estrujan o aprietan, las manos también hablan,
acarician, tocan, sienten y escuchan. Las manos son la expresión visible de nuestro corazón y mente. ¿Dónde están ahora mismo tus manos? ¿Qué hacen? ¿Sabías que existen grandes áreas sensoriales en el cerebro solo destinadas a las manos, y en especial a los dedos pulgares? Se puede aplicar una Acupuntura con la presión de nuestros dedos, la digitopuntura, y en cada mano existe un microsistema reflejo de todo el cuerpo, por eso, a través de la manopuntura coreana se puede tratar los desórdenes energéticos de todo el organismo. La antigua quirología es capaz de ver en la forma y diseño de las manos toda una proyección de la personalidad. En Asia se desarrolló todo un Yoga de las manos a través de los Mudras, también llamados sellos energéticos. Por eso la artesanía hecha a mano cobra un valor humano especial, se diría que va más allá de lo físico porque contiene el alma, la intención y los sentimientos del que la realiza.
Otro ejemplo es el lenguaje con las manos de los sordomudos, que es internacional. Una comida hecha a mano, que contenga la "buena mano" del cocinero, no tiene nada que ver con una producción industrial, lo mismo que una agricultura tradicional, aquella sin máquinas ni abonos químicos... Lo que se hace a mano contiene más cuidado, conciencia y amor. Me gustaría poner en tus manos un futuro más tranquilo, más amable, más humilde y simple. Solo tienes que observar tus manos, cuidarlas, agradecerlas, relajarlas y cambiar tu mundo cercano con ellas. Las manos son los apéndices de tu corazón, ellas son las alas de tu ángel guardián... Para un poco, respira con tus manos, relájalas, escúchalas y crea con ellas.
Te ofrezco mi mano. TAI AIM
Hoy entra Mercurio en Leo, el signo del Sol. Y si bien hay días buenos, otros excelentes, también están los excepcionales, como hoy. Un halcón peregrino (Falco peregrinus) se me ha posado para mirarme a los ojos. Este halcón de mediano tamaño es de los más bonitos que surcan los cielos de Iberia. En invierno viajan a sus cuarteles de Sudáfrica, pero ahora en verano lo podemos ver con su mirada de Horus escrutado en busca de sus presas habituales. Para los egipcios Thot era representado con la esfinge de un halcón, siempre al lado del sol, símbolo de agudeza, inteligencia activa y atención plena. Es un privilegio enorme encontrarse con la mirada libre y salvaje de tan hermosa ave.
TAI AIM
Nuestra perra Nina se muere. Ella llegó a nuestra vida hace 13 años, para un ser de su raza y especie, era una anciana venerable, pero siempre, siempre, tuvo cara de niña. Por eso la llamamos así: Nina, que significa muñeca en catalán, niña, en español, por ser la más diminuta y vulnerable de su clan. Llegó a nuestras manos en ésta misma época, en la que suelen nacer los lobos, zorros y otros parientes cánidos, y cabía en la palma de mi mano. Ha sido hija y hermana menor de nuestra familia, un miembro más, y llegó a nosotros a través de nuestra hija Lorena, la más pequeña de nuestro clan. Nina era amiga de los humanos, pero estaba reñida con los perros. Esto fue así porque de pequeña, en Tenerife, un presa canario la atacó mientras paseábamos con ella, y desde entonces nunca se acercó a sus semejantes de cuatro patas.
Me di cuenta pronto que Nina era una perra terapéutica, y con esa sensibilidad de algunos miembros de su especie, que le hacían estar siempre al lado del miembro de la familia que estuviera enfermo o vulnerable. Fue la perra de David, que hoy se llama Kyva, y durmió con él en todos los inviernos fríos. No era un animal problemático a pesar de tener sus manías y traumas como todos los tenemos. Su vida era la casa y nunca quería estar sola. Como buena nacida en Cáncer le perdía el estómago y hubiera comido hasta reventar, sino fuera porque le tocó una familia disciplinada que siempre le racionó y cuidó su alimentación. Nunca estuvo enferma, pero al final fue el vómito lo que delató, como en algunas otras ocasiones, que se había tragado algo demasiado pesado. Su vida fue acompañar, alegrar y curar, y su muerte ha seguido esta misma pauta. Muchas veces me pregunté cómo sería la
muerte de Nina, un ser alegre y siempre sano, y ahora a las dos de la mañana, mientras la acompaño en la distancia, lo sé. Ha muerto de improviso, sin larga enfermedad, sin dolor, y nos ha dejado el vacío necesario para la regeneración. Esta madrugada me despertó entre el sueño y la vigilia para mostrarme un camino y un significado. Fuimos Kyva, María y yo, con Nina, a Igualada, al entierro de mi querida suegra, la abuela de mis hijos y la mamá de mi esposa. La perra estaba bien tras el funeral, yo partí para Tenerife a cumplir con mi misión, y mi familia regresó a Los Alcázares. Al poco de llegar empezó a vomitar y en dos días ya emprendió su viaje más allá de la Estigia. Los antiguos dicen que cuando uno muere debe de cruzar un río, hay que pagar un óbolo a Caronte, el barquero, para poder
cruzar y no ser devorado por Cancerbero, el perro diabólico. Nina se fue al otro lado para ayudar a cruzar a la matriarca, la abuela Antonia, así que se enfrentó al perro y se sacrificó para ayudar a sanar al clan. En el Tarot, la carta de la Luna, tiene un perro y un lobo enfrentados, en medio del camino que mediante las lágrimas nos limpia y purifica. Es la esencia del Sauce Llorón. Nina se comió y absorbió un veneno familiar y antiguo, hecho de resentimientos y resabios, desencuentros y heridas. Se lo tragó, como todo lo que hacía ella, con gusto, y se entregó para, como dos ancianas venerables, dadas de la mano, una humana y otra animal, cruzar el abismo entre los mundos. Nina nació entre géminis, el signo de los hermanos y Cáncer, el de la madre y el clan familiar, y aprovechando la luna nueva con Lilith, reclamó su independencia para disolver las desavenencias, los rencores y los venenos de las viejas aguas. La perra sabia
absorbió el veneno, como Sócrates la cicuta, con la sabiduría del instinto. "Ya he cumplido mi ciclo: me voy para estar, me entrego para ser en vosotros, me doy para que os perdonéis”. Nina sufrió muy poco en su vida. Su ejemplo de pequeña Buda fue estar alegre, comer y descansar, pero sobre todo saber acompañar. Hoy se cierra un ciclo para poder abrir otro. Neptuno purifica las aguas y disuelve las memorias rancias, deja el agua del recuerdo limpia para que se bañe el pinzón azul y el pájaro carpintero. Los pájaros siempre han estado ahí, prestando alas, ofreciendo canciones. Hoy lloro y canto, y Nina sigue a mi lado. TAI AIM
Salí a correr a las 4.30 de la mañana, como de costumbre, y la temperatura tenía 26 grados de calor: era el momento menos caluroso del día. Hay llamaradas solares muy potentes, y el Sol entra en su territorio natural, el signo de Leo. Estamos viviendo momentos de mucho fuego, y así vemos incendios en media Europa, devastación y mucha gente que muere por golpes de calor. Y todo ese despliegue de energía está creando una transformación en el mundo. En otoño, cuando la gente vuelva de vacaciones, empezaremos a ver otro tipo de reacciones: tormentas, inundaciones, pandemia y debacle energética y económica. Estos son los signos de nuestro tiempo. No pretendo ser alarmista, pero tampoco ciego. Hace tiempo que les vengo hablando de la gran transformación global que nos viene. Simplemente es momento de aprender. La clave más importante es observar en qué invertimos nuestro tiempo, dinero y energía. Es el momento de poner más conciencia y cambiar la escala de valores.
Hay un pasado que ya no volverá, y un futuro muy incierto. Todo nos indica que es necesario hacer cambios en nuestros hábitos y costumbres, nuestra alimentación, la disciplina y el trabajo de conciencia sobre nuestro Ser. Lo que viene no es bueno ni malo, pero cosecharemos lo que hemos sembrado. Ahora, más que nunca, es momento de trabajar en nuestro interior e invertir bien nuestra energía. Por fuera veremos miedo, ansiedad, depresión e incertidumbre, pero desde el Camino, estos serán los mejores tiempos. Ahora ya no depende del gobierno, ni de la religión, ni de la política, todo depende de la madurez y responsabilidad de cada uno. Es momento de crecer y meditar. Todo lo que puedes perder, lo perderás, más tarde o más temprano. ¿Qué es lo que no puedes perder? ¿Qué es lo que no te pueden quitar? En el Sendero aprenderás a vivir sin miedo. El amor nos hará libres, y la libertad será con todos, con amor.
TAI AIM
La Yoga es lo único en el mundo que puede eliminar cualquier tipo de idolatría porque carece de obligaciones sociales, de prácticas de culto y fija el pensamiento en un Dios Único, le da vida a esa imagen, la trasciende y entonces el Yoghi se sitúa a sí mismo en Dios, sin límite y sin forma interior ni forma exterior. Finalmente, el Yoghi se identifica así mismo interpenetrado a Dios, no constituye sino UNO, es YUG… Una vez que existe suficiente familiarización con el tema de los chakras, así como con el de los 8 elementos de práctica que hay que seguir (los cuales no se refieren a los 8 siddhis, cumplimientos) se procederá entonces a familiarizarse con el método mecánico, si así se puede llamar o, mejor dicho, se emprenderá la técnica interna antes de hacerlo con la externa, o sea las asanas.
Los ocho elementos de la Yoga ya han sido definidos con detalle al principio de este libro: YAMA, que implica la sinceridad, la continencia, la abstención del hurto o del deseo mismo de poseer (Yoga Darshana II-30). NIYAMA, la limpieza interna y externa; es también el periodo de estudio y de adoración, son las reglas de vida (Yoga Darshana II-32). ASANAS o posiciones del cuerpo, que no solamente son aplicadas como medidas terapéuticas (metabolismo) existiendo posturas que pueden llegar a curar, por ejemplo, hasta la lepra o la epilepsia (con la Sarvangasana), sino también para facilitar la concentración por medio del relajamiento completo del sistema nervioso y del desarrollo de determinados centros neurofluídicos en el aspecto físico-psíquico. La mejor posición para cada quien es la que se pueda conservar el mayor tiempo posible sin ningún movimiento, aunque dos posturas deben ser ejecutadas por todos los estudiantes: Siddhasana (posición del cumplimiento, es la postura del Triángulo o de la figura perfecta) y Padmasana (postura del loto). PRANAYAMA, que constituye el control respiratorio, el ritmo para proporcionar el impulso de la energía,
el control de los nervios, la maestría de las vibraciones, el movimiento interno producido por la maestría del Prana. PRATYAHARA, el control de las percepciones sensoriales, la restricción de los sentidos. Este control de las sensaciones es muy importante y se adquiere muy difícilmente mediante un arte de lo más minucioso. DHARANA o Meditación, es el sistema de fijarse en un objeto con posibilidad de ver sus emanaciones, sus vibraciones, su exteriorización que escapa a la vista ordinaria. DHAR puede entenderse por un contacto al mismo tiempo que significa dar el sentido de ver alrededor. Por ejemplo, Dharshana es la bendición de un Santo, los discípulos frecuentemente acuden a pedir al Maestro el Darshan (un instante de examen, un punto de vista, una contemplación a su persona, que permite al mismo tiempo una verdadera bendición de la emanación sagrada). DHYANA, la Concentración (Yoga Darshana III-2), es el mantenimiento del consciente fijado sobre el objeto, esa contemplación que implica casi la supresión del objeto mismo por estar tan estrechamente ligada “la vista” con el objeto, y
cuando digo “la vista” me refiero a la visualidad interna, a la interpenetración de la mirada por comprensión de la Esencia del objeto. SAMADHI, la Identificación, la cual se opera cuando la individualidad desaparece, es decir, cuando la forma individual, de aquel que medita y se concentra hasta el punto de ser absorbida por el objeto mismo, llega a la percepción de la Súper-Consciencia. Es necesario distinguir dos clases de samadhi (¡textualmente significa “muerto”, paralizado, que no existe más en el sentido de la vida!): el primer estadio, Savikalpa-samadhi, confiere la posibilidad de retornar al mundo físico y, finalmente, el Nirvikalpa-samadhi es la fusión en el infinito, el Absoluto, el Nirguna. El Savikalpa es un periodo que se ha decidido antes de proceder a la experiencia samadhica con el fin de no perder, en cierto modo, la completa individualidad, pero teniendo la posibilidad, sin embargo, de fundirse en la Consciencia Universal. El Yoghi recobra enseguida su carácter individual al retornar del estado de éxtasis, como se ha calificado frecuentemente, aunque yo mismo no apruebo la palabra, pues propiamente no es cuestión de éxtasis que corresponde simplemente a una evasión de la
consciencia del anterior estado, sino más bien se trata de un estado alcanzado conscientemente por medio de una operación psíquica y no simplemente mental. Yo establezco una enorme diferencia entre un médium que alcanza un plano terrestre, así sea el más elevado, y un Yoghi que suscita la Unión con el UNO. El Yoghi se decide al Nirvikalpa cuando quiere gozar definitivamente de la sublime paz, del completo samadhi, sin restricción o deseo de retornar al plano físico, en la fusión final para la reintegración en el Gran Todo con la pérdida completa de la individualidad. Cuando el estudiante Yoghi ha desatado las ligaduras del consciente, cuando ha realizado lo iluso de la materia que lo encadena a este mundo, en fin, cuando es capaz de producir facultades diferentes a las reacciones mecánicas del ser en general, es cuando realiza los ocho poderes (Siddhis) que constituyen los medios fundamentales de investigación y permiten conocimientos más allá del saber científico de nuestra época. Sirviéndose de estos medios los Sabios de la Antigüedad poseían conocimientos de ciencia de los cuales estamos hoy todavía intentando darnos una explicación. La estructura planetaria fue descrita
mucho tiempo antes de la invención de los telescopios, y los Gurús de la India conocían la conformación de los átomos sin tener microscopios, y describieron la naturaleza de los órganos y su funcionamiento sin poseer el recurso de la disección. Los métodos empleados fueron completamente diferentes de los conocidos actualmente por nosotros; nuestro análisis está hecho siempre sobre un plano limitado porque solo observamos el exterior y aun cuando “recortamos” algo para ver el centro miramos únicamente el exterior de este “¡interior”! Los Yoghis se interpenetran en la cosa misma, no se conforman con visualizar el objeto, sino que se identifican a él. Págs. 272 a 274 del Yug Yoga Yoghismo.
TAI AIM
Hay cosas que hacemos que carecen de sentido y que claramente nos perjudican. -Señalo, "me perjudico". Son arraigos, afectos hacia esos actos que menoscaban nuestra estima, ya que no te dan autonomía; al contrario te someten. Cuando estás en un camino de conciencia, tu alma pide a gritos que sean resueltos, pero hacemos lo contrario, ¡por un deber mal entendido! -Dejamos sin darnos cuenta, que se mantengan en el tiempo, opacando anulando y ahogando nuestra ya maltrecha voluntad. Permitimos sin saberlo que “nuestro amor”, las circunstancias, la cultura, los demás o alguien, se confunda y nos confunda…, en fin... Sin darnos cuenta nosotros mismos nos pusimos un bonito collar con los consabidos deberías; confundiendo el arraigo y la pertenencia, en derechos que los demás tienen sobre nosotros.
Son en estas relaciones, donde tendríamos que tener una atención neutra, aunque los demás crean que les pertenecemos, ya que les prestamos una asistencia y ayuda que atrapa, perjudica, y está ligada a una mente vieja, caduca, y arraigada en muchos de nosotros. Pensamos que el obsequiar a los demás es nuestro deber, y todos, -eso te incluye-, lo toman y entienden como algo legítimo que les pertenece y tienen el derecho a disfrutar, como si les perteneciéramos. Es una relación insana que se da frecuentemente en la relación: - de padres a hijos, - de marido a mujer, - de jefe a empleado, etc... Todo lo que no te regresa como amor y libertad está ligado a todo esto. Ser autónoma es pagar lo justo por lo que te ofrecen y que los demás, paguen lo justo por lo que les ofreces. No hay promesas, premios, ni castigos; y menos privilegios, que te sitúen o que sitúen a
nadie por encima de lo que, se merece o te mereces. Si NO ES, - LUCHA POR ELLO, - Y CÁMBIALO. "TU TE LO MERECES TODO" Despierta al guerrer@ que está en ti. - EL YUG-DO. - EL GRUPO. - EL MAESTRO. TE AYUDARÁN EN ESTE TRÁNSITO.
Gracias Maestro. TAI MAS
MARÍA ARRABAL
No puedes ir atrás y cambiar el comienzo, pero puedes comenzar donde estás ahora, y cambiar el final. C. S. Lewis
Todo aquello que el hombre ignora no existe para él. Por eso el universo de cada uno se resume al tamaño de su saber. Albert Einstein
El único problema que existe es el que solo se puede ver desde una sola perspectiva. Dalai Lama
Un hombre con valor exterior se atreve a morir; un hombre con coraje interior se atreve a vivir. Lao Tse
Sólo se vive una vez, pero si lo haces bien, con una vez es suficiente. Mae West
Es mejor ser odiado por lo que eres, que ser amado por lo que no eres. André Gide Buenos amigos, buenos libros y tener una conciencia tranquila: esta es la vida ideal. Mark Twain La vida no se trata de encontrarse a sí mismo. La vida trata sobre crearse a sí mismo. George Bernard Shaw La vida es como andar en bicicleta. Para mantener el equilibrio, debe estar en movimiento. Albert Einstein La única manera de salir del laberinto del sufrimiento es perdonar. John Green
MARÍA ARRABAL
CLAVE DEL MES:
“CELEBRAR”
PARA VER: “El Triunfo” Dirección: Emmanuel Courcol. 105 min. 2020
FRASE DEL MES: "Celebrar la vida momento a momento es parte del arte de vivir” PARA LEER: “La esperanza del Tíbet” Autor: José Vicente Alfaro Editorial: Círculo rojo.
ACEITE DE ALOE INGREDIENTES: *Medio litro de aceite de oliva (yo utilizo ecológico). *1 hoja de Aloe (intentar conseguirla de un espacio libre de contaminación, va a ir a nuestra piel). *Aceite esencial (lavanda, manzanilla mandarina…éstos son relajantes).
romana,
PREPARACIÓN: La hoja de aloe primero tenerla toda la noche en remojo, para que expulse la aloína. Después quitarle los pinchos laterales con un cuchillo, lavarla y trocearla. Ponerla durante 40 minutos al baño María a un fuego débil (que caliente pero que no hierva). Dejar enfriar para después colarlo. Añadir unas gotas del aceite esencial elegido. Guardarlo en un bote de cristal. Mejor a la sombra para que el aceite no se rancie. El Aloe en uso tópico se utiliza directamente sobre la piel (sobre la piel húmeda o seca). Es hidratante, regenerante si te has quemado con el sol, cicatriza heridas, bueno para el acné… ¡¡SALUD Y QUE APROVECHE!!
Maite Belaza
Desde niño he tenido experiencia con la disciplina. Primero fue en la instancia escolar con la maestra de primer grado de primaria, ya que ella era dura de carácter, exigente y gritona al hablarnos, comprensible por estar ante un grupo de 35 alumnos. Después viví la disciplina del deporte: desde muy temprano me atraía el atletismo con las carreras de velocidad en 100 y 200 metros planos, el fútbol, el básquetbol y la natación. Años después encontré el yoga en la Gran Fraternidad Universal, Línea Solar, y con ello conocí a los Maestres De la Ferriere, Estrada y Marcelli. Posteriormente llegué al Yug-Do con el maestro Antonio Iborra. De cierta forma conocí las diversas formas y niveles de la disciplina, sin hacer a un lado la
rígida disciplina acuartelada del ejército o la rígida disciplina religiosa. En el Yug-Do, la disciplina no es rígida, extrema, dura, ni de obediencia ciega, pero tampoco lo es relajada, demasiada complaciente y facilita. La tónica en la Senda del Yug-Do de la disciplina es libremente consentida por el practicante, donde la firmeza, la entrega, la constancia y la alegría son la señal de que todo va bien. Eso sucede bajo la guía del Maestro, quien es el primero en vivirla, además del equipo de compañeros con que se comparte. Cada vez vivo con mayor profundidad la disciplina y comprendo el instante al hacerlo. Antes me fijaba mucho en el qué dirán de los demás, sin tomar en cuenta la alegría y la felicidad que me produce en mi interior tocar el bambú y sentir la calidad, la bondad y el amor en los 22 movimientos, por ejemplo.
Ahora comprendo que para conseguir saborear el ABC del Yug-Do, no basta conocer al dedillo los 22 movimientos y hacerlos en un instante de su ejecución, sino que hay que penetrar en su interior, en el espíritu del mismo, y poder transmitir desde el alma algo. Desde este enfoque no existe nada tan importante para el guerrero/a cómo cultivar el amor y la libertad, por tanto, de ser uno mismo. El Bambú interno es aquel conformado por 4 Bambús en “UNO": el bambú material, el energético, el mental y el espiritual. Porque cuando estoy en Dojo vivo, tengo la necesidad de practicar la creatividad de cantar y bailar con amor en Silencio en cada movimiento con mi bambú interno.
Un abrazo. TAI
Serafín Mendoza
Hace muchos, muchos años vivieron los “Finas”, quienes eran un grupo de guerreros que vivían en Irlanda. Su misión era proteger aquella isla de los invasores. No cualquiera podía ser un guerrero "Fina". Los candidatos tenían que ser fuertes, saber luchar, tener honor y caballerosidad, además tenían que ser muy cultos, porque cuando no estaban batallando los "Finas" componían poemas y canciones, y se dedicaban a ayudar a las gentes mediante la transmisión de su cultura y sus tradiciones. Fión, jefe de los “Fina", tenía un hijo llamado Oshin, quien era también un gran poeta.
Un día después de una gran cacería, los "Finas" decidieron descansar en lo alto de una colina. Siempre lo hacían así porque tenían una completa vista sobre el mar y, de esta manera, podían seguir controlando el territorio por si llegaban
nuevos invasores. Entonces estaban descansando cuando vieron que algo se acercaba por el océano, pero mientras se acercaban más y más, se dieron cuenta de que no era una barca. Era un caballo blanco galopando sobre las aguas y había una mujer subida en ese caballo blanco, una mujer de cabellos largos y dorados que flotaban en el viento. La mujer llegó a la orilla y siguió montada en el caballo; luego subió colina arriba en donde estaban los “Finas" y allí se presentó. Era Nirf, hija de Mananu, Dios de las aguas. Todos se pusieron muy contentos porque sabían que venía de la isla "Turnanok". En esa isla nadie envejece nunca, es la isla de la eterna juventud. Los “Finas” le preguntaron qué hacía allí. Ella confesó que había estado espiando a Oshin, que se había enamorado y por eso venía en su búsqueda. Le preguntó si aceptaba irse con ella. Oshin aceptó encantado. Se subió detrás de Nirf en la grupa del caballo. Los "Finas" lo despidieron, y si bien estaban contentos pensando en el porvenir que le esperaba, también estaban tristes porque sabían que nunca más volverían a verle. Él se iría a aquella isla maravillosa donde nadie envejece. Pero con el paso del tiempo Oshin, que era humano, empezó a sentir nostalgia. Le preguntó a Nirf si podía ir a visitar a su familia. Ella aceptó y le regaló un caballo blanco, y le puso una condición: “¡Nunca, bajo ninguna circunstancia, bajes del caballo!, ¡nunca pongas el pie en la tierra! ¡Acuérdate que yo nunca me bajé del caballo cuando fui a buscarte!”. Se despidieron y fue así que Oshin llegó a Irlanda nuevamente. Cuando llegó al lugar donde había nacido, lo encontró muy
cambiado: las casas estaban derruidas, habían pueblos abandonados. Empezó a preguntar a la gente del lugar por su familia, pero todos habían muerto hacía mucho tiempo. Los "Finas" y su padre eran un recuerdo lejano, casi una leyenda y entonces comprendió Oshim que no habían pasado tres años como pensaba sino que eran trescientos. Comenzó a sentirse tan abatido que, sin darse cuenta, tocó el suelo y en ese instante se convirtió en un anciano ciego. Los habitantes del lugar tuvieron piedad de él y lo llevaron con el sabio. Aquel sabio escuchó toda su historia. Más tarde, ese mismo sabio se la contó a otro, y ese a otro más y luego a otro. De este modo nos llegó la noticia de la maravillosa isla de la juventud: aquella donde nadie muere ni envejece. “Turnanok”.
TAI
Raúl Villar
El amanecer del verano en Canadá inicia muy temprano. A las 5:40 el sol aparece en el horizonte y desaparece a las 21:30. La salida es al oriente, y debido a la cercanía con el polo, el atardecer es el norte. ¡Esto es tan extraño para una chica tropical como yo! Desde mi llegada a Nueva Escocia, decidí levantarme temprano y entrenar. Mi suegra me compró una larga vara de bambú, así que me uniformé cada día para ver el sol y realizar los movimientos de la disciplina. El frío era soportable, y después de una hora de
movimiento y disfrute, mi cuerpo generaba una nueva tonalidad de calor: más energético y saludable. Hice Yug-Do en Truro, en Halifax y en la Isla Principe Edward. En algunas ocasiones me acompañó Tara, una bella texana que vive en Canadá y habla muy bien español, y siempre estuvieron conmigo los cuervos, las águilas, los mirlos y otros pajaritos hermosos. Los maples, pinos y robles me rodearon y
cantaban con el susurro del viento. Esos momentos de entrenamiento me permitieron silenciarme, escucharme y equilibrarme. Pude abrir los ojos a mis lados
ocultos, a mis reacciones y pensamientos. La observación que ejecuté en esos quince días fue importante para conocer la totalidad de Ilihutsy. Y en esa oportunidad de verme completa encontré que yo también estoy integrada por muchas otras personas que ahora son mi familia y son mis amigos, que son los venados y águilas vecinos, que son los paisajes impresionante s por su sencillez y belleza… me di cuenta que yo soy parte del todo, y que todo es maravilloso. ¡GRACIAS!
TAI
Ilihutsy Monroy
16- SENTIRSE EN PLENO VUELO Lo voy a decir así de crudo: hoy me he dado cuenta de que cuanto menos estoy cumpliendo con mi responsabilidad más me molesta el que los demás incumplan la suya. Y aunque patalee para que los demás cumplan, e incluso lo consiga, por más que quiera no me siento mejor. Lo único que me permite realizar este “sentirme mejor” es meterle mano a mi responsabilidad. Sé que esto debiera estar claro ya. El maestro nos lo comenta: “no puedes cambiar al mundo” “no puedes cambiar a los demás” “solo puedes cambiarte a ti, y en líneas generales, en cierto modo o nivel”. Y es muy difícil, pero cuando lo consigues cambia el mundo, porque cambia tu visión y tu forma de crear. Claro, pero hay que vivirlo en propias carnes continuamente, para tener la experiencia y poder darle solución. Y el aprendizaje o prueba es de por vida. De nada que te despistes, vuelves a caer. Así que sé, que la vida me ha hecho un gran regalo hoy. Porque me he dado cuenta como paulatinamente mi ira se ha ido reduciendo y disolviendo. Así que puedo resolver mi ira y no ser manejado por ella. Y depende de mí sacarle partido a esta enseñanza. Reprogramarme para convertirla en
rutina y luego en hábito. Este regalo ya se me ha hecho muchas veces antes. Sólo que ando algo disperso y olvidado. Soy yo quien decide darle de comer a uno u otro perro. Pero…, ¡qué paciente que es la vida…!
Hoy me levanté temprano aunque no tanto como para hacer una práctica completa de Yugdo. Así que dejando el trabajo abierto (la práctica) cogí las llaves del 4x4 y me fui a terminar la disciplina en la naturaleza. A las 8:00h de la mañana ya había subido medio Peñón de Algámitas vuelto a bajar, y vuelto a subir hasta la cumbre. La razón fue dejarme las luces del coche encendidas y la enseñanza estar más atento a lo que hago y no dejar que mis prisas rompan mi calma y desplacen mi centro. Aunque mi anhelo es ver cabras montesas hoy, sé que en esta época es francamente complicado, por lo que vengo abierto a lo que se de. Muchos excursionistas suben temprano y los calores hacen que las cabras rompan la manada en grupo reducidos y se escondan en sierras cercanas, en lugares más bajos o altos, según el día
que haga, y queden bien ocultos. Y así es, no vi ni una cabra en todo el recorrido, sin embargo la vida me fue regalando muchas cosas interesantes por todo el trayecto: parejas de collalbas negras alejándome de sus rocas y nidos, el gracioso canto de las cogujadas posándose en la tierra de más arriba, el dulce jugueteo de los carboneros y currucas en las retamas, el hermoso canto de los jilgueros, el continuo chirriar quejicoso de una rapaz de mediano tamaño, el vuelo fugaz de un herrerillo africano, el rudo caminar de un escarabajo pelotero, el inquieto sesear de las moscas, que siempre me recuerdan a la divinidad debido a las palabras del maestro. Pero, por encima de todo, la mirada atenta, silenciosa y serena de los buitres en los roquedales. Observando todo. Sin perder detalle. Una vez en la cumbre, se sentía una gran paz y se daba paso a una espectacular vista, que invitaba a la meditación. Nada más lejos de la realidad, al ir a observar en la otra vertiente lo primero que me llegan es un vocerío de adultos y niños, a punto de llegar, que lo espantaba todo. Eran padres e hijos que subían por la vertiente contraria y que en apenas un minuto estaban junto a mí, sorprendidos de verme. ¡Qué
importante es cómo nos acercamos a la naturaleza! ¡Cuánto nos perdemos por la falta de escucha! Nos saludamos y hablamos afablemente, momento que aproveché para preguntas relevantes sobre el camino y la zona, puesto que eran del pueblo de Algámitas… la verdad es que, agradeciendo la información, me sentí afortunado cuando siguieron su trayecto. Me hablaron de una fuente y de una degollada a la que llamaban la ventana, “la ventana del cielo”, pensé yo, que la veo siempre de lejos, y he querido acercarme más de una vez. Me surgió acercarme a la fuente que era en realidad un bebedero para buitres y aves del lugar situada en un naciente con una imponente vista. Me surgió luego asomarme a la ventana, y eso es exactamente lo que hice. Subiendo una peña que quedaba a mi derecha me encuentro de repente en lo alto de una cima observando los roquedos de enfrente llenos de buitres… En un momento en el que me doy cuenta de que un buitre está acercándose a los roquedos volando a mi algura y por mi lado, me giro para sacarle una foto y en ese momento cambia el vuelo y toda la parbada que se encontraba
posada emprende el vuelo. La verdad es que fue algo espectacular cómo se levantaron a cámara lenta. Creía que eran menos, pero se montaron de repente cerca de cien buitres leonados en el aire. A mi altura, y de ahí hacia arriba. Los movimientos que hacían, la energía que se desplegaba, ascendiendo como en una inmensa espiral en el cielo. Fue algo magestuoso, casi diría divino. Estuve cerca de media hora disfrutando de los buitres, junto a ellos. En algunos momentos daban ganas de volar. Mas bien me sentía volando con ellos, unidos en su planear, con sus pequeños movimientos de alas para conseguir amplios y sinuosos giros sin romper con la armonía y la fluidez del instante. La sensación de la meditación en el aire y el silencio profundo de la observación, amenizada por una ligera brisa. Una auténtica gozada y un gran regalo de vida. A pesar de que los buitres parezcan representar todo lo contrario (la muerte), lo cual también es un gran mensaje de vida. De aprovechar la vida. Y me pregunto: ¿y todo esto por qué se ha dado? Porque decidí aventurarme y salir de casa temprano al encuentro conmigo mismo en la naturaleza. Algo que estoy haciendo todos estos días y que me está recargando profundamente. Cada día un aventura. Pero bueno, estas son otras historias, historias del cada día, algunas para contar, y otras que no deben ser contadas, historias que espero y me
propongo seguir realizando asiduamente allá donde esté. Por hoy la cosa ha estado hermosa, y sin querer darle más emoción al asunto, recojo unas plumas de buitre para mis sobrinos e hijos y me llevo lo más importante, una sonrisa en el alma de vuelta a casa. Por el camino de regreso me doy cuenta que dispongo de tiempo, así que me siento bajo una encina a meditar con el buen y natural olor a boñiga de vaca de la Sierra. PD: El mensaje que me ha llegado es; más que que la cosa de más de sí, debo trabajar para que la cosa cada vez de menos. Un abrazo Guerrero de la aventura, Guerrero de Leo y Marte y un deseo, que Júpiter amplifique el profundo anhelo que llevamos dentro.
TAI
17- LA LUZ DE TU MIRADA Tan solo he escrito cinco palabras y ya mi cuerpo ha reaccionado. ¡Qué frase tan profunda! Ahora mismo me invade una sensación de alegría y agradecimiento muy intensa, a la vez parece haberse desplegado un abanico de emociones y unas tímidas lágrimas bajan por mi mejilla izquierda (*tomo nota), las cuales son pausadas aunque no cesan. Mi cuerpo está relajado y permite que aflore lo que se tenga que dar, permanezco en la observación y la escucha. Siento una tristeza alegre: sí, de esa curativa que nos llega tras haber resuelto o sanado algo, acompañada de una paz profunda. Es un momento impregnado de magia que todos reconocemos, porque es la fusión de ambas cosas. Cuando esto ocurre se da todo,
permitiéndonos abrazar nuestra luz y nuestra sombra, sin tener que pensar detalladamente en cada cosa. No hace falta porque en ese momento sólo hay una: el Ser. En ese instante me reconozco y me disfruto, al mismo tiempo que agradezco por tanto y por todo. Me siento, me tengo… soy dichosa pues no me tenía hacía muchísimo tiempo y además ¡ahora sé por dónde! Todo esfuerzo, como ya sabemos, tiene una recompensa. ¡Qué curioso!, desde mi experiencia ya en mi niñez no creía en ella. Asocié el estudio con el premio y ya con anterioridad pensaba que el estudio era una esclavitud, entonces me preguntaba ¿para qué quería yo el premio?, ya que lo que realmente quería era mi libertad. Que me liberaran de aquel tipo de estudio… (*Tomo nota). Es ahora que entiendo, al escribir estas frases, pues se ve que en parte ha sido para ello: recién me doy cuenta que ya
está roto este acuerdo. Me acompañaba un sentimiento profundo de agradecimiento, se había producido un cambio al respecto y ni me había percatado hasta este preciso momento y sí, parece que he permanecido apegada a la vivencia y no había revisado mis creencias. (*Tomo nota). Esto se sale de lo cotidiano, rompe cualquier esquema. Al mismo tiempo que comparto me nutro y aprendo, tengo mis propios mensajes también. Sólo he requerido de mi tiempo, mi cuerpo y mi mente, los cuales han sido puestos al servicio, sin expectativas y con total entrega. Magia es la palabra “clave” con que describiría estar en el proceso. Gracias a esto y a la oportunidad que aquí en Yug-Do se nos brinda hoy podemos una vez más compartir, nutrirse y crecer para poder avanzar, nos demos cuenta o no.
Gracias al linaje de los maestros que han estado: José Marcelli Noli, a su maestro Serge Raynaud de la Ferrière y a todos los ancestros. Gracias a los maestros que están: Antonio Iborra Montells y sus hermanos de linaje. Y gracias a los que estarán. Es para mí un honor poder estar aquí. No sé bien por qué, aunque tenga una ligera idea, pero no importa, aquí estoy para lo que haga falta, y ya lo sabré cuando esté preparada.
TAI
Cristi Gaspar
18- DOS CORDONES Te acompañé emocionada cuando te cortaron el primer cordón, aquel que te había unido a mí. El segundo lo has cortado tú solita. Intentamos enseñarte a usar las herramientas para que, cuando llegara el momento oportuno, el corte fuera limpio. Es un salto a la libertad que te has ganado. Ansias de volar son las que te subirán alto. Siempre avanzando… No olvides lo que dejas detrás: los orígenes son la clave. Serán mis propias alas las que te recogerán en cualquier momento que decaigas. Confía en la vida: ella te protege. Ahora, ¡vuela alto, mi amor! Beti Aurrera. (Siempre Adelante en Euskera). TAI
Maite Belaza
19- COMO CAMBIAN LAS COSAS Voy a empezar contando cómo hasta la naturaleza ha cambiado. En verano hace tiempo de invierno y viceversa, en invierno hay tiempo de verano; igual con el otoño: llega y todavía los árboles tienen hojas y frutos. Se ha trastocado todo, pero es lo que toca y hay que aceptarlo. Otra cosa alucinante es lo que pasa con los gallos: antes cantaban al amanecer y quizá otro canto, pero más pequeño cuando se iban a dormir. Ahora resulta que cantan a cualquier hora, ¡qué curioso, pero es cierto! El otro día hablé de esto con un amigo, y él se quedó diciendo lo siguiente: “¡Ñossss! Santi, ¡es verdad! ¡Yo no le había puesto asunto!”. Yo le respondí: “Ya sabes, observa y verás cosas que con el correcorre no nos damos cuenta”.
También sucedió en otra ocasión con un cliente, quien me contó que unos chicos, no tan jóvenes, se peleaban por una tontería, y yo le dije: “pero si ya ni los perros se pelean como antes por las calles… ¿por qué lo hacemos nosotros?”. Fue después de hablar sobre los perros que aluciné al ver como uno estaba detrás de una perra en celo, ella por un lado, él detrás y así se la pasaron un buen rato. Recuerdo que antes acababan haciendo lo que tenían que hacer en cualquier sitio de la calle, delante de todo el mundo, ya que es una cosa natural en el mundo animal. Ahora no pasa eso: la perra va pendiente de que el perro estuviese detrás de ella, con el hocico huele que te huele, y va a la señorita y lo coge por el rabo y se lo lleva a un sitio escondido donde supuestamente nadie los veía, excepto yo que estaba mirando la película. Entonces me dije para mí mismo: “si no lo veo no me lo creo, una perrita con
vergüenza y discreta, ¡cómo cambia el tema!”. Estas anécdotas son poco en comparación con esto que les voy a comentar. Nos pasó a Maite, a Cristi y a mí el sábado a las 5:45 de la mañana. Íbamos en coche a la playa de la Nea para hacer nuestra práctica de Yug-Do, que solemos compartir los fines de semana. Cuando íbamos por la bajada del Draguillo (Barranco Grande) en el Toyota nuestro, conduciendo yo, a media bajada observo un gato negro corriendo embalado como si fuese el atleta Usain Bolt haciendo los 100 m lisos, y por eso aflojé la velocidad pensando que se me echaba encima. Pero ¿qué hace el gato? Se para en un paso de peatones y espera a que yo pase. ¡La sorpresa fue grande! Pasé y seguidamente me reí. Entonces yo le digo a las chicas: “¿se dieron cuenta del detalle? El gato iba corriendo veloz y yo pensando que iba a cruzar”. Es común decir que cuando se te cruza un gato
negro por el camino es mala suerte, pero en este caso el minino va y se para, y espera a que pasemos nosotros primero, mirándonos con esos ojos verdes como diciéndonos “pasen ustedes primero y después yo, que no quiero darles mala suerte”. Nos reímos y reímos casi hasta llegar a la playa. ¡Qué curioso! ¡Cómo cambian los cuentos! TAI
Santi Yánez
Tras la pasada época de pandemia, continuamos desde hace unos meses con los talleres presenciales del Maestro, y tanto estos como la Escuela Internacional de Yug-do continúan también sus actividades vía ON LINE. Esto ha supuesto un avance tecnológico gracias a Urano, y una Gran Oportunidad para que otras regiones, grupos y yugdokas del mundo se puedan integrar a las Actividades de Formación con el Maestro; Yugdo, Yoga, Acupuntura, Astrología, Charlas y otras actividades en red, como Terapias o Consultas con el M. Antonio Iborra, ahora también de forma Online desde México, Ecuador, España y otras regiones. Contacta, y no te pierdas especialmente para Agosto el: ¡GRAN ENCUENTRO Y CONVIVENCIA DE VERANO CON LOS MAESTROS EN TENERIFE! ¡SERÁ MARAVILLOSO, ESPECIALMENTE ESTE 2022! ¡RESERVA TU PLAZA Y VENTE!
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