BMAT

“Yo quiero pegar en la radio”

Muchos artistas sueñan con escuchar sus canciones en la radio, uno de los medios que sigue manteniéndose como el indicador o termómetro del éxito, a pesar del reciente avance de las plataformas digitales. Implica llegar a un público amplio, y gozar de reconocimiento y fama. Pero, ¿se gana dinero sonando en la radio?

rotundamente sí. las radios tienen la obligaciónde pagar por el uso de música a los creadores de esta - esto son los compositores, los artistas, los intérpretes, las discográficas y las editoriales musicales. Igual que pagan al proveedor de luz o agua, también han de pagar al proveedor de música.

La música no es solo los ritmos que nos hacen bailar. La música es también todo aquello que suena al principio o al final de un programa. Y todas las melodías que suenan por debajo de la voz del locutor. Y además, todo lo que se utiliza en los anuncios para difundir su mensaje.

Pero entonces, ¿las emisoras pagan a los creadores de música? No exactamente. Una radio no tiene la obligación de conocer quiénes son los creadores de las canciones que emite. Al mismo tiempo, sí tiene la obligación de reportar toda la música que emite a las entidades de gestión de derechos que son las que precisamente representan a los compositores. Esas últimas organizaciones recaudan el dinero de las radios del territorio donde operan y lo reparten proporcionalmente entre los compositores siguiendo los datos de los reportes provistos. La información que pueda faltar en estos informes es rellenada con la de sus propias bases de datos donde los compositores están asignados a sus respectivas canciones.

Resumiendo, las radios están obligadas, por un lado, a pagar por el uso de la música, y por el otro lado, a declarar cuáles son las canciones que emiten. Hace unos años, la declaración de ésta música emitida se hacía de forma manual, con todas las faltas de identificación que esto puede conllevar. Y estos errores al final repercutían en la remuneración de los creadores: puede que algunos terminen ganando más de lo merecido, mientras otros, menos de lo que les corresponde.

Afortunadamente, ya existen maneras automáticas de hacer esta tarea.

La empresa barcelonesa BMAT, que brinda soluciones de monitorización de música, ofrece reportes en los que precisa la emisión de cualquier difusora. Su herramienta de monitoreo de más de 6 mil canales de radio, más de 1000 canales de televisión y centenares de salas de música de todo el mundo genera reportes detallados que contienen los metadatos de la música emitida. Así las radios por fin se pueden despreocupar de tener que apuntar cada obra musical que utilizan y empezar a contar con los informes que se generan en tiempo real para que el dinero que están pagando por el uso de esta música llegue al creador de cada canción.

En los países donde se está utilizando BMAT, el número de obras remuneradas ha incrementado, en algunos casos hasta por 5 veces. Los que nunca pudieron aspirar a “ganar [su] primer millón”, ahora tienen posibilidades reales de hacerlo. Y además tienen a su disposición los reportes de BMAT donde pueden comprobar por sí mismos todas las veces que han sonado sus temas.