3 minute read
Chule
La cantautora charló con Santi Torres en la primera edición de Billboard Live Radio en KFC Argentina sobre el poder de las canciones y su expansión desde Instagram a la industria de la música.
Advertisement
¿Qué podés decir de este 2019? - Musicalmente, fue un año de mucho crecimiento y descubrimiento para mí. Viví un encuentro como artista: buscar mi música, sentirme cada vez más cómoda al componer. Estoy contenta con todos los lanzamientos y ansiosa por lo que se viene. Para mí, es un nuevo paso y camino que estoy investigando.
Tu reciente single, “Juego de cartas”, es bastante acústico - Ser una artista de covers me permitió ver recursos y ver cuáles me caracterizan. En una canción mía tiene que estar presente la voz al frente y la guitarra. No tiene que ser una canción de guitarra y voz, pero tiene que estar. “Juego de cartas” es una baladita y tiene un beat mínimo. Las canciones que estoy por sacar son un poco más up tempo, pero siempre con guitarra y voz como protagonistas.
¿2020 es el año de tu álbum? - Sería increíble, me encantaría, pero no tengo ganas de sacar un par de temas más y decir: “Bueno, le agrego cuatro más y este es mi álbum”. No lo tengo muy pensado, pero me gustaría un álbum con un concepto y que el orden de las canciones sea por algo. Que esté bien pensado, no juntar canciones que ya lancé. Que cuente una historia.
¿Qué lugar ocupa “Qué tal que sí” en el resto de tus temas? - Es la primera que salió dentro de ese conjunto de canciones en las que me encontré mucho más como artista. Participé en su composición desde cero. En Vaivenes había pasado también, pero estaba recién arrancando a componer. Ahora me siento mucho más cómoda en un estudio, es más, me encanta. Arranqué haciendo covers porque me gustaba, pero el crecimiento me hizo dar cuenta que lo que más disfruto es cantar en vivo, y más ahora que son mis canciones.
¿Qué pensás de las colaboraciones? - Me encantan, pero quería tener mi material e identidad marcada antes de aparecer en canciones con otros. Sacar mis canciones, decir: “Esto esto es Chule”, y recién ahí empezar a colaborar y jugar.
¿Te vinculás en el concepto de los videos? - Mando la canción, espero que el director me tire una idea y más o menos digo por dónde me lo imagino, pero delego bastante lo visual. Le presto atención, pero lo que más me interesa es el audio, la canción. Soy muy meticulosa e insoportable a la hora de crear las canciones porque me gusta y es mi fuerte. Puedo estar mil horas dentro de un estudio grabando y produciendo canciones.
¿Cómo viviste la experiencia de la Latin Billboard Music Week? - Estuvo increíble codearse con artistas y productores tan zarpados. Es increíble llamar su atención y charlar con ellos. Me terminé juntando, teniendo reuniones y armando sesiones con un montón. Siento que fue una buena iniciativa ir para allá, a conocer, mostrarme, generar que la gente sepa mi nombre. Ya había ido a los Latin Grammy’s y me sentía más cómoda.
¿Cómo es hoy para vos encarar un contrato discográfico? - Creo que aprendí mucho del mundo y del mundo de la música. Me junté con productores artísticos, armé sesiones para escribir canciones y me ayudó mucho. Hoy en día, tenés muchos recursos para trabajar de forma independiente. Me siento muy bien así. Siento que hay muchos pasos que podés dar solo y todavía me quedan cosas para hacer sola antes de estar con una discográfica. Ver orgánicamente cómo fluyen las cosas, no empezar a delegar de una.
¿Te ves produciendo a otros artistas en el futuro? - Me imagino, me junto mucho con Bruno (Yagûe, guitarrista) y Franco (Masotto, baterista) en el home studio de Bruno a probar cosas y ayudar otros artistas. Hablamos de que nos encantaría ayudar a artistas nuevos a encontrar su música. Medio que nuestro sueño es ser productores, me encanta cantar en vivo y además producir.
