Jazz en Colombia

Page 1

<$$US1>EL_TIEMPO - NACIONAL-2 - 2 - 07/12/07 - Composite - ARCHIVO - 07/12/07 07:47 <$$CP09>EL_TIEMPO - NACIONAL-2 - 2 - 07/12/07

*20071207-4-1-2-NACIONAL-2* 12/07/07-4-2

VIERNES 7 DE DICIEMBRE DE 2007

2-2 CULTURA & GENTE

El jazz CARTAGENA TUVO SU MOULIN ROUGE

llegó

en piragua

Un libro de Enrique Muñoz reconstruye la caprichosa ruta del género en el país. CARLOS SOLANO

REDACTOR DE EL TIEMPO

Cuentan los abuelos que en el Moulin Rouge cartagenero, en el barrio Getsemaní, las familias prestantes de la ciudad interactuaban con los altos oficiales europeos y estadounidenses que llegaban al puerto. Algunos de los músicos colombianos que tocaban en este salón fueron los que escribieron, con sus bandas de jazz, las bases de la música popular del país. Eso es lo que sostiene Enrique Muñoz, un filósofo y musicólogo, autor del libro Jazz en Colombia: Desde los alegres años 20 hasta nuestros días. El texto, en el que ilustra con datos, imágenes insólitas y documentos las rutas del género por todo el país, es un viaje desEl libro es el resultado de 20 de la primera años de investigación. década del siglo XX, cuando se trataba de una moda de élites, hasta el momento actual, en el que el autor destaca a los músicos que están haciendo un jazz completamente original. El primer antecedente del jazz en nuestro país, según Muñoz, “es la aparición de un músico llamado Nick de Zubiría Stevenson, en el siglo XIX, cuyo padre era un comerciante naviero que comerciaba con Nueva Orleans”. De las memorias de ese recinto llamado Moulin Rouge, Muñoz destaca un documento clave. Se trata de una revistilla titulada Guía turística de Cartagena, editada por Enrique Saldaña

Andrés Fortich era un músico que viajaba en vapores por el río Magdalena, en 1938.

La Jazz Band Lorduy (1923, una de las primeras bandas dedicadas al género.

‘‘

La Jazz Pasos Band, de Medellín (1927).

Cartagena fue puerto de embarque y asiento de la raza negra, y con la presencia de una música de los Estados Unidos, creada por negros, era fácil encontrar el parentesco”. Enrique Muñoz, investigador musical y autor del libro sobre la historia del jazz en Colombia.

en inglés y en español para atraer a los viajeros italianos y franceses. “Las élites se identificaban con Occidente y no con nosotros. Para ellos era una ofensa que los identificaran con los ritmos de la tierra”, cuenta Muñoz. Para el autor es clave el encuentro de las influencias africa-

nas con los sonidos que traían las navales y esas hordas de músicos nómadas desde Panamá y Cuba. “Venimos de una tradición africana muy fuerte. Cartagena fue puerto de embarque y asiento de la raza negra, y con la presencia de una música de los Estados Unidos creada por los ne-

gros, era fácil encontrar el parentesco, y eso se dio en dos variantes, el bullerengue y el porro, más que en la cumbia”, explica el investigador. Al libro, de 234 páginas, aportaron el escritor Miguel Iriarte y el periodista Juan Carlos Garay. Además, incluye un inserto de 18 hojas con fotografías que Mu-

ñoz rescató de periódicos viejos y colecciones particulares abandonadas en cajones de chécheres. Dichas imágenes son los únicos registros de la existencia de las bandas como la Jazz Band Lorduy (1923), dirigida por el compositor Adolfo Mejía, que tenía banjo, saxofón, trombón de pistón, clarinete, contrabajo y batería. La obra también rememora a los clásicos compositores y artistas Edy Martínez, Joe Madrid, Francisco Zumaqué, Álvaro Escobar, Justo Almario y el mismo Lucho Bermúdez, en su aporte al jazz. “Ellos fueron los pioneros, y su valor es fundamental, pero hacían un jazz de ornamentación para abrir los conciertos de las fiestas”, afirma. Tal vez por eso, este autor, que se hundió 20 años en las huellas del género, cree que la época más brillante para esta música es la actual: “No tengo duda, tenemos a Tico Arnedo, Antonio Arnedo, Juan Sebastián Monsalve, Gabriel Rondón, una generación de músicos que hacen jazz con grupos alternativos y originales, música para escuchar y no para bailar”. El libro, publicado por la editorial La Iguana Ciega y la Fundación Cultural Nueva Música, puede conseguirse en las principales librerías del país.


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.