Maribel Verdú

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• OBRA • DOSSIER • MANIFIESTO • EN ESCENA • SOBRE PLANOS

MARIBEL Verdú

DESDE QUE PROTAGONIZÓ Y tu mamá también, en 2001, bajo la dirección de Alfonso Cuarón, el mercado latino no tiene secretos para esta irreverente actriz ibérica. (Madrid, 1970); Argentina, México y Chile son países en los que ha trabajado y en Colombia presentó la Muestra de Cine Español hace dos años. Es claro que en el continente suramericano se siente como en casa, a pesar de haber un océano de por medio, y por eso no dudó en regresar para la realización de Sin hijos, su más reciente cinta, dirigida por el argentino Ariel Winograd.

Foto: Getty Images

Por Galo Martín Aparicio

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MARIBEL

ué se siente hacer todo ‘dos veces’, primero en el cine y luego en la vida real?

Lo que haces en la vida real es lo que vale por encima de todo. En el cine lo único que haces es mentir divinamente.

Verdú

La cinta Sin hijos está rodada en Buenos Aires y es su cuarta película en Argentina. ¿Qué significa ese país para usted?

Es un país que me encanta. Me siento como si estuviera en mi casa cuando estoy allí y no a 12.000 kilómetros de distancia.

Creo que a los argentinos les pasa un poco lo mismo con España. Es recíproco. Además, el cine que se hace allí a mí me gusta muchísimo. Tengo la suerte de tener el mercado latino abierto desde hace años.

Cuando me ofrecen películas como Sin hijos, que me gustó mucho el guion, además de tener al productor como un buen amigo, no puedo decir que no. ¿Cómo la convencen los directores de interpretar un papel?

A mí no se me convence. A mí, directamente, me gusta o no me gusta. Que te intenten convencer de algo en lo que tú no crees es un trabajo perdido. Y, sobre todo, es algo que va en detrimento de la película. Me ha pasado, a veces, que me han dicho que “tal director está haciendo una película, ¿por qué no hablas con él?”.

Vamos a ver, que los directores saben que existo, yo no voy andar detrás de ellos.

Por Galo Martín Aparicio

DESDE QUE PROTAGONIZÓ Y tu mamá también, en 2001, bajo la dirección de Alfonso Cuarón, el mercado latino no tiene secretos para esta irreverente actriz ibérica. (Madrid, 1970); Argentina, México y Chile son países en los que ha trabajado y en Colombia presentó la Muestra de Cine Español hace dos años. Es claro que en el continente suramericano se siente como en casa, a pesar de haber un océano de por medio, y por eso no dudó en regresar para la realización de Sin hijos, su más reciente cinta, dirigida por el argentino Ariel Winograd.

4 Esenciales de Maribel

Foto: AFP

• Belle Epoque (1992), de Fernando Trueba.

• Y tu mamá también (2001), de Alfonso Cuarón.

• El laberinto del Fauno (2006), de Guillermo del Toro.

• Blancanieves (2012), de Pablo Berger.

A propósito de su nueva película, ¿por qué no se entiende que haya mujeres que deciden no tener hijos? ¿Sabes qué pasa? Que no voy a perder ni medio minuto en comentarlo. La gente que no entiende mi postura no me importa lo más mínimo. Ojalá todos fuéramos tolerantes con las decisiones de cada uno que, además, no hacen daño a los demás. Mientras haya gente intolerante, cerrada y retrógrada, yo no voy a invertir tiempo en preguntarme por qué o en darle explicaciones. Creo que una mujer no debería, jamás, dar explicaciones de por qué no quiere tener hijos. Igual que las que los tienen no las dan. ¿Cómo interpretan la comedia los argentinos para hacer que algo muy serio se convierta en simpático? ¿Verdad? Es que a mí me parece que los argentinos hacen la comedia un poco como los ingleses; absolutamente en serio. Son cero obvios. Igual que como escribía las comedias el gran Rafael Azcona. A mí me da terror cuando me llega un guion de una comedia de esas superligeras. No me gusta hacerlas porque no me gustaría verlas. Intento hacer el cine que a mí me gustaría ver.

El problema es que las comedias no dan premios…

Ah, ya, pero a mí eso me da igual. Para mí la comedia es lo más importante y lo más difícil que hay. Y qué decir de la tragicomedia, el cine de Willy Wilder. Haces Con faldas y a lo loco, no te dan ningún premio, y ¿qué más da? Es curioso saber que cuando haces una comedia no te van a premiar por ello, es como si fuera un género menor. ¡Ay! el mundo, qué equivocado está…

Para una actriz, el hecho de que no suene el teléfono, ¿es una película de suspenso o de miedo? ¡De terror! Eso es una película de terror y de angustia. Y lo peor, la incertidumbre que es tan mala. Al comenzar o a mitad de año, saber que ya tienes tus proyectos, tu ‘futurito’ –a corto plazo, planteártelo a largo plazo es absurdo– da mucha tranquilidad y satisfacción. ¿Es cierto que en una época no la llamaban por tener el pelo corto?

Eso es una peli que me armé yo. De repente me corté el pelo y estrené Y tu mamá también, que fue como la bomba, pero coincidió con que empezaron a llamarme solo para hacer cosas horrorosas, que no me gustaba ninguna. ¿Qué fue lo último que le dijeron y le dejó sin palabras?

Fue hace poco. (Lo piensa) ¡Ah, si! Algo precioso (en tono irónico).

Precisamente a colación de Sin hijos. Me dice un periodista: “Bueno, Maribel, tú no tienes hijos, y claro, no tenerlos es como tener un jardín sin flores”, y no supe qué responder, para qué.

Ugia coriore ndusanti solorerro vitas quat.

Ximendi cuptatiam liate as earum faces.