Una vez concluido el periodo de campañas 2010, el domingo 4 de julio se perfila como una jornada intensa, compleja y de grandes retos para la militancia panista, que tendrá ahora el reto de supervisar el desarrollo de los comicios locales con la esperanza de que la equidad, la justicia y el óptimo desarrollo de los procesos sean las máximas bajo las cuales se desempeñen las diversas fuerzas políticas que solicitan el voto ciudadano, para bien de nuestra democracia y del país en conjunto.