10 claves para acompañar la decisión del nuevo estudiante

“De mayor quiero ser…” es lo que dicen los hijos cuando son pequeños. Parece que fue ayer y ya ha llegado el momento de tomar la decisión. Sin embargo, les surgen dudas, muchas dudas. Y nos preguntamos de qué modo apoyarles sin agobiarlos, como ayudarlos sin confundirlos.

¿Podemos ayudar a los hijos en su decisión académica y profesional? ¿Por dónde empezamos? El caso es que no resulta tan fácil y sabemos que hay mucho en juego.

Hay 3 claves que pueden resultar útiles para acompañar a los hijos en el paso a la Universidad:

1. Las formas de aprender han cambiado.

2. El mercado laboral esté en constante cambio y surgen nuevos perfiles.

3. No olvidemos lo que ellos quieren, lo que les gusta y se les da bien hacer.

Estas ideas marcan el principio de un acompañamiento en la búsqueda de la decisión más acertada del futuro universitario de nuestros hijos. Además, como padres no debemos olvidarnos de algunas herra- mientas que pueden ayudarnos:

1. La información lo es todo.

Mantener una comunicación constante con el centro educativo para estar informado y participar en la orientación de los hijos. Tutores, orientadores y familia son un equipo con el mismo objetivo: sacar lo mejor de los hijos.

2. Empatía en grandes dosis.

Ser capaces como padres de ponernos en la piel de los hijos y ser conscientes de la incertidumbre, emoción, ilusión, temor… que pueden sentir ante un momento como éste, nos ayudará a acompañarles de una manera más cercana.

3. Generar confianza.

Hacer sentir a los hijos que realmente forman parte de algo, que les escuchamos, que su opinión es importante y que confiamos en ellos. Respetar sus tiempos, acompañarlos a informarse, dialogar e intercambiar impresiones son herramientas que les ayudarán y reforzarán la confianza en sí mismos.

4. Conocerse ayuda (y mucho).

Como padres debemos ayudar a nuestros hijos a que identifiquen sus habilidades y competencias para tenerlas en cuenta a la hora de realizar la elección profesional. Una carrera no sólo se elige sólo “porque me gusta”. Es importante incluir el criterio de las habilidades y ser realista para tomar una decisión acorde al perfil de cada uno.

5. Los protagonistas de su propia historia.

Ellos tienen la responsabilidad de tomar esta decisión, los padres son el apoyo. Si los padres toman la decisión o les empujan a hacerlo probablemente retrasarán su incorporación a lo que realmente quieren estudiar, cambien de opción estudios más adelante o abandonen a mitad de curso.

6. Desmitificar el momento.

Es posible que ayude a tomar la decisión saber que no es definitiva o inamovible. Que

las metas o deseos de hoy no tienen por qué ser las de mañana y que se pueden ir cons- truyendo mientras uno camina. Esto ayudará a tomar la decisión con menor presión y a reforzar nuestro vínculo con ellos.

7. El futuro se está construyendo.

Las profesiones de hoy pueden no ser las mismas que las de mañana. Cada día surgen nuevos perfiles y oportunidades y, aunque les ayudemos a identificar las distintas salidas profesionales de los oficios actuales, no hay que olvidar que la actitud de los hijos, el interés y el esfuerzo serán decisivos en su incorporación al futuro mercado laboral.

8. Compartir los aspectos económicos.

Estudiar una carrera supone para muchas familias un desembolso económico importante y los hijos tienen que ser plenamente conscientes de ese esfuerzo. Estimar un presupuesto de los gastos que puede suponer para la familia es una buena opción no sólo para poder calcular hasta dónde se puede llegar, sino también para ser consciente de la responsabilidad que han de recoger como testigo los hijos en un futuro.

9. Prepararse para el trabajo y para la vida.

La formación académica es muy importante, pero cada vez más también lo es la formación en competencias: aspectos como la flexibilidad y la capacidad de adaptación, la capacidad de aprendizaje, el trabajo en equipo, la empatía, la gestión emocional, etc., son fundamentales a la hora de buscar empleo y también en la vida cotidiana.

10. Lo más importante: Ser Feliz.

Elegir un grado que les permita dedicarse a aquello que les motiva, les ilusiona y les gusta será una decisión con una importante probabilidad de éxito.