Centro de Investigación Aplicada • 20 de Noviembre de 2015 • No. 65
Las tablas de mortalidad: ¿Son el verdadero problema? Eduardo Monsefú Ramirez Universidad Nacional de Ingeniería eduardo.monsefu@gmail.com l pasado viernes 30 de octubre, la SBS publicó una nueva tabla de mortalidad para el cálculo de las pensiones de los afiliados. Esta medida fue muy criticada por los parlamentarios, debido a que consideraban que la expectativa de vida de las personas era muy elevada y también porque no tenían un sustento técnico que los respalde.
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dad que opera desde el 2004 no es propia del Perú, sino que más bien es una copia ajustada de la tabla de mortalidad chilena.
En este artículo pretendemos explicar, de una manera idónea y respaldándonos de fundamentos técnicos; como funciona en realidad las tablas de mortalidad, como se relaciona esta con las pensiones de los jubilados y si son las tablas de mortalidad el verdadero dolor de cabeza de los afiliados.
Segundo porque, con el pasar del tiempo, la ciencia ha mejorado. Es así que hoy en día existen curas para enfermedades que antes no existían. Además, existen programas sociales que luchan contra la desnutrición y la pobreza en el país. Debido a esta y muchas otras razones, la calidad de vida de las personas en el Perú puede haber mejorado en términos relativos, ocasionando que existan mayores expectativas de vida de las personas1 .
Antes de discutir sobre el tema, es necesario definir lo que es la tabla de mortalidad. La tabla de mortalidad es un instrumento que permite medir las probabilidades de vida y de muerte de una población en función de la edad, estas son utilizadas por las AFPs para realizar sus estimaciones del pago de pensiones.
“Las tablas de mortalidad no toman a toda la población para su realización, sino toman a un grupo más selecto que son los actuales y potenciales pensionistas.”
¿Es necesario que se actualicen las tablas de mortalidad? ¿Qué factores se toman en cuenta para que se den estos cambios en las tablas? Efectivamente, es necesario que estas tablas de mortalidad se actualicen por dos razones principalmente:
Pero hay que tener en cuenta que las tablas de mortalidad no toman a toda la población para su realización, sino que toman a un grupo más selecto que son los actuales y los potenciales pensionistas. Por lo tanto, esto hace que las expectativas de vida de las personas que pertenecen al SPP sean diferente a las expectativas de vida de toda la población.
Primero porque la actual tabla de mortali-
Cabe destacar que la esperanza de vida
1 Tengamos en cuenta que no estamos aseverando que se haya incrementado las expectativas de vida, sino que es una hipótesis debido a factores positivos que analizamos. Para poder aseverar algo más concreto sobre la esperanza de vida, se tiene que hacer un estudio más riguroso del tema y analizar todos los factores que influyen en la esperanza de vida de las personas.
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de las personas (85 años) es diferente que el tope de la tabla de mortalidad (110 años). La tabla de mortalidad considera el tope de 110 años debido a que pueden existir personas que sí lleguen a esa edad, mas no se afirma que todas llegarán, dado que son probabilidades de sobrevivencia. En cambio, la esperanza de vida mide el promedio de la cantidad de años que vive una determinada población en un cierto periodo de tiempo. ¿Cómo funciona la tabla de mortalidad y las pensiones? Alberto Frydman explica este tema utilizando la trayectoria del fondo, suponiendo que la esperanza de vida es de 83 años:
La línea roja nos muestra que el pensionista a los 83 años (esperanza de vida de las personas) ha hecho uso solo del 37 % del total de sus fondos. Es decir que si una persona vive hasta los 83 años, a esta edad todavía no ha hecho uso del total de sus fondos quedándole aún el 63 % del total de su fondo. Aquí podemos notar una gran preocupación por parte de los afiliados ya que no podrán hacer uso del total de sus fondos si no viven hasta los 110 años. Lo cual es bastante irreal ya que las personas viven en promedio hasta los 83 años. El verdadero problema Según todo este análisis hecho al Sistema Privado de Pensiones (SPP), podemos decir que el verdadero problema no está en las tablas de mortalidad o en el aumento de la esperanza de vida, sino el verdadero problema es que las personas no pueden disponer libremente de su fondo cuando se jubilan (65 años) con el actual sistema.
“Se debe promover la cultura financiera en los pensionistas.” Fuente: SBS Elaboración: Alberto Frydman Prizant
La pensión que recibe el afiliado se calcula principalmente en función a las tablas de mortalidad. De esta manera el fondo se reparte de tal manera que deba alcanzar para que el afiliado reciba pensión entre 65 y 110 años.
“La pensión que recibe el afiliado se calcula en función a las tablas de mortalidad: el fondo se reparte para que el afiliado reciba pensión entre los 65 y 110 años.” La línea azul muestra lo que va quedando del fondo con el pasar de los años.
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El principal problema se enfoca en que el sistema provisional de pensiones no beneficia al afiliado, sino más bien genera malestar para él, ya que, en mi opinión, lo obligan a ahorrar a una tasa muy exagerada que reduce su capacidad adquisitiva. Además, no le permite utilizar su dinero que él ha ahorrado a lo largo de toda su vida laboral, evidenciándose que muchos de los afiliados no podrán disfrutar de su fondo por completo. Recomendaciones Se debería disponer a partir de los 65 años de todo su fondo. De esta manera, una persona podría tener la capacidad de elegir si lo deja en una AFP o si lo pasa a una entidad financiera. A su vez, estaríamos promoviendo la libre competencia y el pensionista estaría más conforme. Si
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se diera este caso, las personas tendrían otra oportunidad muy atractiva que es la inversión en fondos mutuos, el cual en el último periodo ha estado generando rentabilidades considerables. Que toda persona que tenga la capacidad de pagar una pensión mínima, pueda retirar el exceso del fondo. Es decir, si el fondo es lo suficientemente grande para pagar por sí mismo una pensión de 750 soles por el resto de vida del pensionista,
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este pueda retirar el exceso del fondo2 . Reformar el sistema de tal manera que se promueva la libre competencia, dándole a las entidades financieras la posibilidad de brindar este tipo de productos a los pensionistas. Promover la cultura financiera en los pensionistas, brindándole la suficiente y más comprensible información de cómo funciona los sistemas privados de pensiones.
es una propuesta otorgada a la SBS el año 2014 por parte de Alfredo Frydman (consultor en temas de pensiones).
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