Prácticas internacionales de la Demarcación; una oportunidad de trabajar en el extranjero

Doce ingenieros del Programa de Becas de Internacionalización 2012 de la Demarcación de Madrid ya trabajan en prácticas en delegaciones de consultoras españolas en países como Bolivia, India, Vietnam y Ecuador.

Este programa incluye prácticas remuneradas en el exterior durante al menos 6 meses y una formación teórica impartida previamente por la Demarcación de Madrid. A través de un convenio de colaboración, los jóvenes colegiados están trabajando en relevantes empresas del sector como Ayesa, Creatividad y Tecnología, Getinsa, Idom, Ineco, OHL, Tecnoma, Técnicas Reunidas y Typsa que han decidido invertir en formar a nuevos ingenieros como valor de futuro. En total 96 colegiados se presentaron a la convocatoria de becas, de los cuales fueron elegidos 35 alumnos para realizar el curso. De éstos, las empresas han ido seleccionando a sus profesionales en prácticas que se han ido incorporando a sus puestos desde el pasado mes de julio, aunque todavía quedan algunos pendientes de selección. Los candidatos a estas becas demostraron una formación y una vocación dirigidas hacia el desarrollo de su carrera profesional en el ámbito internacional.

Cuatro de estos jóvenes colegiados que están ya trabajando fuera de España nos cuentan su experiencia desde sus países de destino: Juan Ignacio Aragonés, (Bolivia), Igal Levy (India), Rodrigo Illán (Vietnam) y Carlos Tacuri (Ecuador). Todos coinciden en la importancia que representa esta oportunidad para poder encontrar, en la mayoría de los casos, su primer empleo y en un sector al que es especialmente difícil acceder sin experiencia previa. También es un punto sobresaliente la envergadura de ciertos proyectos internacionales, especialmente en países en vía de desarrollo, de magnitudes que en España no podrían darse actualmente. Destaca, además, el componente social de algunos proyectos enmarcados dentro de “Los Objetivos del Milenio”, ocho propósitos de desarrollo humano fijados en el año 2000, que los 189 países miembros de las Naciones Unidas acordaron conseguir para 2015.

Gracias al programa de Becas Internacionales de la Demarcación de Madrid ha cumplido su sueño. Nos lo explica desde Bolivia, donde trabaja en la elaboración del Plan Maestro Metropolitano de actuaciones en potabilización y depuración para toda el área de Cochabamba.

El proyecto de cooperación internacional se enmarca en los “Objetivos del Milenio”. Se trata de mejorar la baja cobertura actual de agua potable y saneamiento y elevarla hasta conseguir cubrir toda la población. Un proyecto hidráulico en el que hay que idear soluciones técnicas ante carencias actuales y deben ser consensuadas con la población local para que sean efectivas y sostenibles en el futuro.

Para Aragonés, este programa es una gran oportunidad para iniciar una carrera profesional internacional, “algo muy difícil sin experiencia previa. Este programa es una forma muy buena de ayudar a los colegiados recién titulados y, por extensión, de fomentar el futuro de nuestra profesión”.

Igal trabaja en el DDC (Detail Design Consultant) de la fase III de la línea 8 del metro de Delhi, donde proyectan hasta 25 estaciones de esa nueva línea. Los campos en los que trabajan son Civil Works, Architectural Works y Building Services. Para este ingeniero en prácticas en India su beca, además de una posibilidad para abrirse camino en el mundo laboral, supone aprender metodologías diferentes a la hora de realizar un proyecto. El programa de becas le parece importante por dos razones: por un lado permite a los jóvenes tener unas oportunidades que, de otro modo, no se les podrían presentar y porque ha constatado que los conocimientos adquiridos en la primera fase del programa (mediante la experiencia de Ingenieros del ámbito internacional) se pueden aplicar a la práctica. “Es una gran oportunidad que en este momento difícil jóvenes con entusiasmo y capacidad puedan realizarse como Ingenieros en empresas españolas”. Por todo ello, valora como fundamental tanto el curso de proyectos internacionales como la estancia en un país extranjero.

Cuando acabó los estudios viajó a Inglaterra para perfeccionar su inglés mientras trabajaba limpiando en hoteles. Optó a puestos de trabajo en el sector de la construcción, pero sin experiencia no encontró una oportunidad laboral. Entonces decidió hacer las pruebas para las Becas internacionales de la Demarcación y… “¡en dos días lo dejé todo!” afirma satisfecho Rodrigo desde Vietnam. “Me lo jugué todo a una carta, con las prácticas podía conseguir un puesto de trabajo en Ingeniería o tener que hacer maletas de nuevo y empezar mi vida en otro país. Tuve suerte”. Ahora trabaja en la construcción de una autovía de 244 km entre Noi Bai en el Suburbio de Hanoi, capital de Vietnam, y Lao Cai, en la frontera con China. Su trabajo es proporcionar soporte técnico a los 4 tramos de las obras, además de publicar informes periódicos. Desde su primer día en prácticas ha trabajado codo con codo con profesionales que tienen 15 años de experiencia en el sector. “Nunca he tenido dudas de a qué me quería dedicar, la ingeniería me apasiona, pero me he dado cuenta que realmente esto es lo que quiero hacer durante toda mi vida”.

Como otros compañeros, Carlos pensó que el programa de becas de la Demarcación “suponía una buena posibilidad de insertarse por primera vez en el mercado laboral y además en un entorno muy enriquecedor”.

Trabaja en la provincia de El Oro en el litoral sur de Ecuador en el Proyecto Multipropósito Taquín donde estudian la posibilidad de optimizar los recursos hídricos disponibles y el uso el agua para riego, generación hidroeléctrica y abastecimiento humano.

La presa Tahuín se construyó hace tres décadas, “pero ahora se quiere aprovechar mejor”. Nos envía una foto tomada desde lo alto de la presa, en la que se puede ver la zona del embalse en que trabaja. Su labor allí consiste en coordinar los equipos de trabajo de Ecuador y España proporcionando, además, la información técnica que se requiera e informando a las administraciones ecuatorianas de las labores realizadas en cada fase del proyecto. •

Lleva trabajando en la Demarcación desde 2007, primero como Jefe del Departamento de Atención al Colegiado, y más tarde, como Jefe del Departamento de Servicios Profesionales, de Certificación y Visados. Miguel García Erviti, nuevo Secretario de la Demarcación, está volcado en generar oportunidades laborales en los colegiados.

Miguel García Erviti es Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos. En Unión Fenosa fue el adjunto al ingeniero residente durante la construcción de la central Nuclear de Trillo, responsable de sistemas de recursos humanos y director comercial de administraciones públicas, desde donde impulsó la liberalización comercial del sector eléctrico. Máster en Dirección y Gestión de Empresas por el IESE, Erviti defiende una gestión eficaz, creativa y en equipo.

¿Qué retos se ha planteado desde la Secretaría de la Demarcación?

Mi principal objetivo es la continuidad del proyecto que planteó la Junta Rectora en su programa electoral y por el cual fue elegida. Ese programa empezó hace casi dos años y mi intención es consolidarlo e intentar aportar mejoras al proceso. El presupuesto de la Demarcación es contable y no de gestión.

Estamos cambiando los sistemas de información de tesorería, de presupuestos, de seguimiento y de control. También apostamos por implicar a todos los empleados de la Demarcación para que se responsabilicen de la gestión más eficaz del presupuesto de cada área. La situación económica es delicada y tenemos que implicarnos todos en la gestión presupuestaria.

¿Cuál es el objetivo más urgente?

Me parece prioritaria la formalización de los procedimientos de gestión, que no están institucionalizados, especialmente en aquellos que tengan incidencia económica, que es uno de los aspectos que más nos preocupa ahora.

Lamentablemente hemos reducido la plantilla y no en personal administrativo, sino en personal de dirección, de control y de gestión. Nos faltan personas y con menos profesionales tenemos que cumplir los ambiciosos proyectos de la Junta Rectora.

La coyuntura actual nos exige además la optimización de los procesos económicos y la búsqueda de soluciones imaginativas.

En materia de empleo, ¿en qué líneas se está trabajando?

La Demarcación de Madrid está muy sensibilizada con el problema del desempleo que afecta a nuestro colectivo y gran parte de nuestras actividades están orientadas a fomentar el empleo y a diversificar el punto de mira de los colegiados hacia otros sectores.

Para el colectivo más joven, se fomenta el empleo mediante acuerdos con empresas constructoras y de ingeniería, consiguiendo prácticas en empresas en el mundo internacional. Con el colectivo en paro de mayor edad, hay actuaciones a través del grupo de emprendedores que impulsa la Demarcación para buscar un trabajo alternativo.

En paralelo, la Junta Rectora está estableciendo contactos con todo tipo de organismos nacionales e internacionales para llegar a acuerdos en búsqueda de empleo para Ingenieros de Caminos en sectores tradicionales y alternativos.

¿Qué actuaciones se están realizando en relación a la nueva ley de Servicios Profesionales?

La Junta Rectora está sensibilizando a los poderes públicos e impulsando distintas acciones con la Unión Interprofesional de la Comunidad de Madrid (UICM). Nuestro Decano es vicepresidente de la UICM y presidente de la Comisión de Servicios Profesionales y está participando muy activamente en todas las actuaciones ante la Administración autonómica y nacional.

La nueva Ley de Servicios Profesionales podría llevar a pensar que los colectivos profesionales no son necesarios y que el libre mercado permite que cualquiera pueda llevar a cabo cualquier tipo de actividad. Sin embargo, eso llevaría a una sociedad desregulada. El desarrollo y los colegios profesionales implican una regulación que aportan garantías a la sociedad de que los procesos y servicios tienen unos requisitos y unos profesionales que los avalan. La colegiación garantiza y avala la calidad de los servicios que ofrecen los ingenieros de caminos. Eliminar esos mecanismos de apoyo técnico causaría un grave perjuicio.

Por otro lado, estamos manteniendo reuniones con los responsables de las administraciones de Madrid para sensibilizarles de la importancia de la supervisión de proyectos y de todo el sistema de garantía de seguros de responsabilidad civil que aporta la Demarcación a sus colegiados.

¿Qué actuaciones están realizando para divulgar las ventajas de la colegiación?

Tenemos firmados convenios de colaboración con las tres universidades privadas para que cuando los alumnos acaben sus estudios y se incorporen al mundo profesional conozcan ya las actuaciones de la Demarcación y los servicios de los que pueden beneficiarse como colegiados.

Además, en la Semana de la Ingeniería desde las universidades participarán voluntarios para colaborar en las actividades. Es una forma de que los estudiantes de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos se sientan incorporados al colectivo antes de acabar la carrera.

¿Cómo se está desarrollando la organización de la Semana de la Ingeniería?

Estamos trabajando con mucha intensidad, esfuerzo e ilusión de todo el equipo, muchas veces superando incluso nuestras propias capacidades.

Apostamos por implicar a todo el sector, empresas colaboradoras, universidades, y estudiantes. Buscamos la complicidad de toda la sociedad. El objetivo es transmitir cuáles son los logros y el trabajo decisivo de los Ingenieros de Caminos en Madrid. La Demarcación ha iniciado contactos con empresas del sector, ¿cuál es el objetivo?

Se trata de detectar qué problemas les afectan y qué puede aportar la Demarcación al sector en la situación de crisis que viven los colegiados y sus propias empresas. A través de entrevistas con los presidentes y directores generales de las principales empresas queremos fomentar el empleo de los Ingenieros de Caminos y detectar cuáles son los requisitos del sector para ayudar a nuestro colectivo.

¿Qué opiniones se están extrayendo de esos contactos?

Todos nos transmiten la importancia de la formación multidisciplinar en distintos idiomas. Por eso desde la Demarcación estamos potenciando la formación con cursos en idiomas extranjeros sobre técnicas de negociación, mercados, presentaciones y gestión de contratos. Queremos enfocarlos a la aplicación práctica del idioma para el ingeniero en su día a día profesional. En concreto estamos empezando cursos en portugués para todos los colegiados y las empresas que están trabajando con Brasil, que ahora mismo es uno de los grandes focos de demanda de la ingeniería. También estamos haciendo gestiones para detectar al colectivo que domina el alemán y promover cursos en alemán, que es otro mercado demandante de ingenieros.

En esta nueva etapa también han intensificado el contacto con ayuntamientos

Sí, el contacto de los ayuntamientos es importante para la Junta Rectora. Se están potenciando prácticas en los ayuntamientos para que se conozcan las capacidades de nuestro colectivo en la gestión municipal y, a su vez, permita a los colegiados conocer el mundo laboral y empresarial que gira a su alrededor. Ya hemos firmado convenios con 9 ayuntamientos y un acuerdo con la FMM (Federación de Municipios de Madrid) con el objetivo de generar empleo.

¿Cómo es su estilo de gestión?

Me atrae aportar cosas nuevas. En el Colegio he vivido una renovación de todos los procesos y de la gestión de la Demarcación de Madrid. Siempre he trabajado en equipo, por lo que concibo trabajar con una organización en la que la información se comparte.

Mi idea es aportar cambios en la gestión del equipo, incentivando a todos a sentirse parte activa y protagonistas de este apasionante proyecto. •

De izda a dcha (de pie): Ángel Zarabozo, TECNIBERIA; Pedro Canalejo, ASICMA; Alejandro Llorente, AERCO; José María Izard, AERCO, y Carlos Gasca Cuota, SEOPAN. De izda a dcha (sentados): José Escribano, AECOM, y Santiago Eguiagaray, SEOPAN.

El café de redacción de la Demarcación de Madrid reunió a las principales asociaciones sectoriales de la ingeniería para analizar el sector de la ingeniería civil. Con un diagnóstico compartido de que el sector “está en la UVI” el Decano de la Demarcación de Madrid, Miguel Ángel Carrillo, junto con el Vicedecano, Carlos Gasca, Allué y el Secretario Miguel García Erviti, anunciaron que promoverán, en colaboración con las asociaciones, la elaboración de un informe sobre el relevante desarrollo económico y social que genera el sector de la ingeniería. El informe en defensa del sector será una herramienta de influencia ante las administraciones y servirá para influir en la opinión pública.

José Escribano, presidente de AECOM, abrió el Café de Redacción con una afirmación rotunda: “las infraestructuras y las obras públicas son imprescindibles”. Aseguró con preocupación que la falta de inversiones aparejada a la crisis económica actual no sólo está llevando a que las empresas no tengan trabajo sino que “estamos destruyendo lo que tenemos. La curva de deterioro es una parábola que cae rápidamente en cuanto dejas de invertir y aquí se está deteriorando la red de carreteras a marchas forzadas”.

También Carlos Gasca Cuota, Director de Estudios y de Contratación de SEOPAN, coincidía en que “la situación es dramática, estamos destruyendo trabajos y seguiremos perdiéndolos”. Para resucitar al sector apuesta por emular lo que se está haciendo en Francia en donde “se está invirtiendo en construcción de obra civil el doble de lo que nosotros invertimos en función de su PIB”. Asegura que en otros países donde también hay problemas de déficit como en España “están apostando por el pago por uso, invirtiendo en infraestructuras, creando actividad y empleo”.

Alejandro Llorente AERCO Santiago Eguiagaray ANCI

El Gerente de ANCI, Santiago Eguiagaray, afirmó gráficamente que “el sector está en la UVI y demonizado”. Asegura que “para evitar el paro hay que invertir en obra pública que es la que produce ocupación”. Una afirmación que compartió Carlos Gasca Allué, Vicedecano de la Demarcación de Madrid quien recordó que el “retorno inmediato de la inversión en infraestructuras es del 62%”.

Santiago Eguiagaray explicó que España ha pasado de estar a la cola de Europa en infraestructuras a ser un ejemplo y “ahora nos castigan por haber hecho obras que son monumentos”. En su opinión “estamos matando un sector que ha sido ejemplo de cómo se utilizan los fondos europeos”. Eguiagaray auguró que en los dos próximos años cerrarán muchas empresas y las que “tengan actividad internacional tendrán menos dificultades”.

Por su parte, el Presidente en funciones de AERCO, Alejandro Llorente, indicó que “la construcción no es el ladrillo sino un sector de excelencia”. Afirmó que “la construcción ha sido una necesidad real para el país y con ella hemos construido una clase media. La construcción es necesaria como cualquier otra actividad imprescindible como la agricultura o la minería”. En opinión de Llorente, España necesita animación económica, pero “no se está construyendo, sino destruyendo”. Afirmó que animar e impulsar el desarrollo de la construcción “genera consumo” en España.

Pedro Canalejo, Presidente de ASICMA, señaló que “es falso que no hagan falta infraestructuras “. Advirtió que en la Comunidad de Madrid hay desequilibrio en la dotación de infraestructuras de agua y “si se prolonga la sequía podemos quedarnos sin agua. No se invierte en mantenimiento ni en gestión de la explotación”. Canalejo defendió también que la financiación de las obras “no solo sea público -privada”. Lamentó también la actual política de ahorro predominante y lo obsoleto de los modelos de contratación que necesitan una revisión.

Sobre la internacionalización afirmó que las empresas de ingeniería necesitan realizar una inversión y que otros sectores se han reestructurado con ayuda. Explicó que las grandes ya se han internacionalizado y de las que quedan, el 98% son microempresas. Canalelo dejó una pregunta en el aire: “¿de dónde sacan los recursos las pymes para internacionalizarse?”.

Influencia en la opinión pública

Desde TECNIBERIA, Ángel Zarabozo destacó la falta de reconocimiento social de la profesión y del sector, una idea compartida por los asistentes. En su opinión, es fundamental la capacidad de cambio, “identificar y proponer las relaciones entre empresa y sociedad es una de las principales facetas a resolver”, quizás no las más urgente, pero sí importante.

Para lograrlo Zarabozo abogó por tres vías de actuación: recuperar reconocimiento, crear un entorno legislativo favorable para una gestión eficaz y cambiar la cultura de los representantes políticos. • este en Navas de San Juan su actitud y su mente abierta. Casado y padre de cinco hijos, Manuel Manrique comenzó en Sacyr en 1987 como Delegado de Andalucía. Desde octubre de 2011 es Presidente y Consejero Delegado de Sacyr Vallehermoso. En su despacho sobrio y luminoso, una enorme planta evoca la selva panameña donde la empresa desarrolla ahora su mayor proyecto, la ampliación del Canal de Panamá.

Este jienense no pierde sus raíces pero aboga por “abrir la mente, aprender idiomas y mirar al exterior” como pasos imprescindibles para crecer y evolucionar. Con sonrisa fácil y trato afable, Manuel Manrique recibe a Miguel Ángel Carrillo, Decano de la Demarcación de Madrid, para reflexionar sobre la situación y el futuro del sector y de la profesión.

Miguel Ángel Carrillo: ¿Cuál es su diagnóstico sobre la situación del sector de las empresas constructoras en España en este momento?

Manuel Manrique: El sector de la construcción está muy complicado, como todos los ámbitos económicos, pero yo diría que la etapa de la construcción tal y como la hemos conocido se ha acabado. Creo que vamos hacia una etapa de transformación en la que los grupos cambiarán, habrá otro tipo de financiación... Cada uno de los principales grupos que estamos en el sector nos hemos decantado por un perfil diferenciado, pero siempre vinculados a la internacionalización y a la diversificación desde la construcción. Del mismo modo, el sector inmobiliario tal y como lo entendíamos también se ha acabado y ahora la actividad se hará con otras bases. Hoy no veo ningún tipo de operación corporativa en el horizonte, pero cada uno buscaremos nuevas áreas de negocio para ser productivos. Habrá transformaciones producto de esta crisis en el sector, hacia un menor volumen y hacia otro tipo de estructuras financieras.

M.A.C. ¿Qué representa para el empleo y el desarrollo de España la paralización de la inversión en infraestructuras y obra pública?

M.M. Soy optimista, lo que me gustaría que fuera -y creo que seráes que entre finales de 2012 y el primer trimestre de 2013 toquemos fondo, lo que quiere decir que percibiremos que no habrá más deterioro. Ése es el punto vital, que empresas, administraciones y particulares tengamos esa impresión: entonces no habrá miedo a invertir o a comprar y habrá facilidades para ello. Espero que en ese momento haya suficiente confianza de Europa hacia España y nos faciliten algún tipo de instrumento de ayuda para reactivar la economía, lo cual provocará un estímulo en el consumo y una disminución del paro.

M.A.C. ¿Cuál es su opinión sobre el “banco malo” que se está definiendo?

M.M. Tengo muchas esperanzas en el “banco malo”: si se hace de un modo adecuado, el año que viene empezará a haber grúas de nuevo, no en la misma cantidad que años atrás, pero las habrá. Y eso será también otro motor de generación de empleo, consumo, etc. Tengo una sensación razonable de que puede ser una oportunidad para sacar al sector de la crisis, pero para ello es necesario que todos los créditos y activos de los bancos intervenidos o a punto de serlo -todos- vayan al “banco malo” y que se trasladen a la economía real las provisiones realizadas por las entidades financieras mediante una quita de deuda o préstamos participativos. Y, por otro lado, que en los “bancos buenos” el crédito inmobiliario sano se quede en el balance del banco. El Gobierno tiene también que incentivar que estas entidades trasladen a la economía real, a los promotores inmobiliarios, esas provisiones mediante préstamos participativos u otros mecanismos. Si eso se hace, el suelo estará en a un valor del 15-20% de su valor actual y eso contribuirá a que se reactive el sector inmobiliario.

M.A.C. ¿En qué dirección cree que debería el Gobierno reorientar su política en materia de infraestructuras y obra civil?

M.M. En este momento tenemos la presión y la obligación de luchar contra el déficit público y para alcanzar ese objetivo se entienden los recortes en los Presupuestos. Pero pensando en el futuro hay que buscar entre el Gobierno y el sector privado una solución, en primer lugar, al sistema concesional vigente. Es imprescindible para desarrollar después una política activa de colaboración público-privada, que debe ser la mayor fuente de iniciativas de inversión en infraestructuras durante el próximo quinquenio. Creo que el Gobierno conoce la problemática y que actuará bien, y el sector privado invertirá. Y por supuesto que el sistema financiero concluya sus reformas y empiece a financiar de nuevo.

M.A.C. Entre enero y junio de este año la licitación de obra pública en España se redujo un 42% en relación al año anterior. ¿Hacia qué modelo prevé que evolucionará el sector de las constructoras? (fusiones, absorciones).

M.M. En el campo de las grandes constructoras, la internacionalización es la clave. En mi opinión, la transformación del sector de las constructoras pequeñas y medianas quizás debería haber llegado antes, habrá que modernizar el modelo: hacer grupos mayores y mirar hacia el exterior o hacia otros sectores (energía, concesiones, redes eléctricas) El sector está muy atomizado y así es difícil que sea sostenible. Como solución parece lógica una diversificación de actividades y una concentración del sector.

M.A.C. ¿Qué le parece la fórmula de inversión público-privada para las obras públicas?

M.M. Es nuestro futuro como empresa y también el de la Administración. Me parece la única posibilidad. Lo que me atrevería a pedir es que se desarrolle una fórmula que mitigue el efecto del límite en la deducción de los gastos financieros al 30% y hacerla compatible con la política económica y financiera de ajuste. Esta armonización, junto con la culminación de la reforma financiera, puede dar buenos resultados para la activación de la inversión público-privada. La regulación con efectos retroactivos no atrae inversión. Tampoco ayuda que la Administración deje que las concesiones vayan a concurso de acreedores y que los bancos no colaboren en la inversión. La única condición para que triunfe un CPP es que sea financiable, pero de forma real, tiene que tener algún tipo de seguridad.

M.A.C. ¿Cómo afectará la falta de inversión al mantenimiento de las obras civiles españolas?

M.M. El mantenimiento necesita menos esfuerzo financiero y es más social, hay más consenso y lo veo menos problemático. Las carreteras, casi todas, tienen el mantenimiento ordinario contratado. Haría falta agilizar las operaciones de reposición de firme y de otros elementos de mejora, y para estas actuaciones creo que hay que contar también con fórmulas de colaboración público-privada.

M.A.C. ¿De qué manera influye que las constructoras españolas dejen de realizar obras en nuestro país a la hora de participar en concursos internacionales?

M.M. Nos perjudica, claro, pero no hay que dramatizar. Hemos hecho mucho y somos muy competitivos en alta velocidad, carreteras, metro, desaladoras, puertos… que lo somos porque hemos hecho mucho en España. Y lo seguiremos haciendo mediante colaboración público-privada, por eso es tan importante hacer atractiva esta fórmula en España aunando la voluntad política, las reformas fiscales y el apoyo financiero. Pero es más dramático en lo que afecta al empleo: las obras en el exterior dan mucho menos empleo en el país de origen porque no se exportan todos los trabajadores, sólo el personal más sensible, lo que a las empresas nos obliga a reducir puestos de trabajo.

M.A.C. ¿Qué papel podría realizar la Demarcación de Madrid o el Colegio para mejorar la situación de la profesión?

M.M. En el sector público ahora predominan los técnicos de la Administración Civil (TAC) y abogados del Estado. La labor a medio plazo es integrar en la Administración a técnicos muy cualificados, buscando una colaboración entre el Colegio y las empresas. La mayor eficacia de la Demarcación es la interrelación con las compañías, lo que ya estáis haciendo, transmitir a la sociedad la necesidad de que cuenten con los Ingenieros. También hay que modernizarse y abrir la mente. Los idiomas son imprescindibles, hay que salir fuera y también dar formación financiera a los ingenieros: másters que abran nuevos campos de competencias profesionales. Un ingeniero de Caminos con formación adicional puede ser un gran director financiero, por ejemplo, pero también otras muchas cosas…

M.A.C. ¿Y para mejorar la situación del sector?

MM. Extender e impulsar las ventajas de la colaboración público-privada y también la necesidad de que el “banco malo” se articule de tal manera que pueda ser un revulsivo para la actividad de construcción.

M.A.C. La Ley de Servicios Profesionales parece que va a ser promulgada a corto plazo por el ejecutivo, ¿cuál es su opinión sobre el tema? ¿Podría ayudar las empresas de nuestro sector a su reconsideración?

M.M. Yo no tendría miedo, el ingeniero de Caminos puede superarlo si sale fuera.

M.A.C. El 62% de la cartera de Sacyr proviene del exterior. Este año preveían presentarse a concursos en el exterior por valor de 10.000 millones de euros, ¿Cuál es el balance a esta altura del ejercicio?

M.M. En cifra de negocio va según lo previsto, en construcción quizás un poco retrasado pero pensamos que se recuperará a lo largo del ejercicio; en global se cumplirán las previsiones a final de año.

M.A.C. ¿Cuál es la obra de mayor complejidad que están realizando?

M.M. Sin duda, la ampliación del Canal de Panamá. Es una obra magnífica tanto por su complejidad técnica, como por su simbolismo histórico y geográfico, como por la repercusión económica que tendrá.

M.A.C. ¿Suele visitar las obras?

M.M. Visito algunas obras, a Panamá por ejemplo voy cada mes y medio o dos meses. También viajo bastante a Chile donde tenemos una fuerte implantación. Allí tenemos actualmente cuatro concesiones de autopistas, una desaladora, tres contratos mineros y 800 millones de euros de inversión. Suelo visitar los tres principales países en los que estamos: Italia, Portugal y Chile.

M.A.C. ¿Hacia dónde abrirá mercado Sacyr, cuáles son las claves de su expansión internacional?

M.M. En América hacia México, Panamá, Colombia, Perú y Chile. También son claves Italia, Portugal y Angola, Mozam- bique, Cabo Verde. Tenemos delegación en India y Australia y como próximo país apuntamos hacia Turquía. Además miramos algunos proyectos específicos en Estados Unidos y Canadá, pero es un mercado complicado, sería a medio plazo.

M.A.C. Sacyr (Valoriza Servicios Medioambientales) se ha adjudicado los primeros contratos de movilidad integral de España, ¿la movilidad urbana supone una nueva oportunidad laboral para los ingenieros de Caminos?

M.M. En principio, faltan recursos para la sostenibilidad del sistema, es difícil plantear la movilidad si no hay recursos: habría que estudiar cómo funcionaría de manera rentable y eficaz. ¿Cómo podría ser sostenible? ¿Formando mancomunidades de servicios? Hay una reflexión pendiente sobre la organización de la Administración, hay que ir al fondo: necesitamos una reestructuración, un replanteamiento de atribuciones y que sea sostenible con la nueva realidad. Mientras no hagamos un modelo sostenible es muy difícil soñar. Y por supuesto que el campo de la movilidad urbana supone una oportunidad para los ingenieros de Caminos. En Valoriza, que es nuestra filial de servicios, la mayoría de los directivos son ingenieros de Caminos, empezando por el consejero delegado. También en Vallehermoso hemos puesto más ingenieros de Caminos, incluido el consejero delegado. De hecho, todas las divisiones de Sacyr están encabezadas por ingenieros de Caminos.

M.A.C. ¿Qué recomendación le daría a un ingeniero de Caminos recién licenciado?

M.M. El potencial de los ingenieros de Caminos es tan grande que hay que adaptarse a cada momento. Les recomendaría fundamentalmente 5 cosas: aprender idiomas, saber hablar en público, adquirir formación financiera, tener experiencias en el exterior y también en las start-up. Lo mismo vale también para los no tan jóvenes: en una situación tan difícil de empleo los ingenieros tienen algo de ventaja, son privilegiados dentro de una situación nefasta, que no se desanimen. Y un último consejo para los ingenieros de Caminos: ¡que no cierren la mente, hay que “regarla” cada día! •