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Las plataformas OTT: la kryptonita de los piratas digitales

A PESAR DE QUE TODAVÍA QUEDA UN LARGO CAMINO POR RECORRER EN LA LUCHA CONTRA LA PIRATERÍA, LA LLEGADA DE LAS PLATAFORMAS OTT Y LA DIVERSIDAD DE OFERTAS LEGALES A PRECIOS ASEQUIBLES EN INTERNET ESTÁN CONTRIBUYENDO DE FORMA DECISIVA A FRENAR ESTE TIPO DE PRÁCTICAS EN LA UNIÓN EUROPEA.

Tras el nacimiento de internet el mundo conoció una nueva forma de piratería, adaptada al nuevo siglo. Una práctica sigilosa, al alcance de cualquiera y difícil de rastrear, a través de la cual los consumidores accedieron durante años e ilícitamente a millones de horas de contenido. Con el paso de los años, se fue enquistando como una costumbre más de todo usuario de la red, hasta tal punto en que dejó de verse como nociva, a pesar de que supuso un impacto negativo enorme para millones de artistas, que vieron como los piratas que ofrecían sus contenidos de forma fraudulenta se lucraban a costa de un “tesoro” que no les pertenecía.

A pesar de que la mayoría de países han lanzado innumerables herramientas e iniciativas para combatir la piratería, lo cierto es que hasta hace muy poco parecía impensable que apareciera en juego un factor que consiguiera frenar decisivamente su avance. Y por los datos de los últimos años parece que así ha sido: la piratería está cayendo en picado.

Según el último informe de la Oficina de la Propiedad Intelectual de la UE (EUIPO), referido al período 2017- 2020, la piratería decreció en Europa durante el 2020 un 34%, a pesar de que durante los meses de confinamiento domiciliario (marzo y abril) se produjo un crecimiento notable. Una vez que los ciudadanos pudieron volver a salir de sus casas, el consumo pirata cayó drásticamente hasta caer a mínimos históricos a final de año.

Este descenso, el más grande desde que se contabilizan registros por parte de la institución europea, confirma la tendencia que ya se venía esbozando en años anteriores, desde la llegada de las plataformas de streaming al continente europeo. El acceso a webs ilegales ya había descendido un 6% en 2019, un 20% en 2018 y un 11% en 2017, dando lugar a una disminución de más de la mitad del consumo ilegal en apenas cuatro años.

Una dinámica que se aplica a todos los tipos de contenidos: la piratería cinematográfica cayó un 51%, la musical un 41% y la televisiva un 27%. Aún así, los contenidos de la televisión siguen siendo los más pirateados con un 70%, especialmente la emisión de retransmisiones deportivas, seguidos por el cine (20%) y la música (10%).

Sin embargo, no conviene bajar la guardia y pensar que se trata de una lucha ya ganada. Se han obtenido grandes avances, sí. Pero las cifras todavía son alarmantes: los ciudadanos europeos todavía piratearon contenidos una media de seis veces al mes durante 2020. Una cifra que en España (donde la piratería cayó un 7%) fue ligeramente menor, con 5,7 pirateos mensuales, mientras que los más activos en este tipo de prácticas fueron los ciudadanos letones, con más de 14. Los más legales, en este sentido, los polacos, accedieron menos de cuatro veces al mes a contenidos ilícitos. Como decíamos, el sector de las industrias culturales todavía se encuentra enormemente perjudicado en términos económicos por la piratería. Así, el Observatorio de la piratería y hábitos de consumo de contenidos digitales 2020 elaborado por la Coalición de Creadores, cifró el impacto nocivo ocasionado por la piratería en España en ese año fue de 30.892 millones de euros, derivados de un total de 5.239 accesos ilegales. ImpaCtO de las platafOrmas

Según explica el belga Christian archambeau, director ejecutivo de la EUIPO, “el acceso generalizado a internet en toda Europa es una bendición para el acceso de los ciudadanos a contenidos culturales. La disponibilidad en la red de mayor variedad de ofertas legales y la concienciación de los ciudadanos respecto a dichas ofertas, repercute positivamente en la reducción de la piratería” . Tanto es así que la entidad ha desarrollado durante los últimos tiempos el directorio online “agorateka” para informar a los ciudadanos europeos de la oferta legal de contenidos a la que pueden acceder en su propio país. Resulta inevitable encontrar la correlación entre la irrupción de los servicios de streaming Over The Top en europa y este descenso en las prácticas piratas. Precisamente desde 2017, fecha en la que EUIPO arranca su estudio, la suscripción a este tipo de servicios ha sido exponencial e inversamente proporcional al consumo de contenidos piratas. Mientras que en 2017 en España apenas un 36% de la población pagaba por alguna de plataforma de streaming, el año pasado este porcentaje se elevó por encima del 58%, ligeramente por encima de la media de la población mundial, que está en un 56% según el data center Finder. Un 22% más de la población accedía a contenidos legales, mientras se redujo a la mitad el consumo de los ilegales. Así pues, parece acertado exponer que las plataformas no solo han resultado un inesperado aliado a la hora de impulsar la producción audiovisual en los países e incentivar el consumo audiovisual por parte de los espectadores. El aumento de la oferta legal, a un precio

LA COALICIÓN DE CREADORES CIFRÓ EN 2020 EL al alcance de todos los bolsi-

IMPACTO NOCIVO OCASIONADO POR LA PIRATERÍA EN llos, ha resultado ser la ESPAÑA EN 30.892 MILLONES DE EUROS, DERIVADOS DE Kryptonita de unos piratas de UN TOTAL DE 5.239 ACCESOS ILEGALES. los que parecía prácticamente imposible defenderse hace apenas unos años. A medida que el consumo desciende, también lo hacen los contenidos ilegales al resultar menos lucrativos. Falta por ver si esta dinámica continúa en los próximos años -la tendencia alcista de las suscripciones a plataformas así lo parece preconizar- y permite erradicar definitivamente estas prácticas dañinas para la Cultura o si, paradójicamente, se produce un efecto rebote debido a un exceso de oferta legal inabarcable para los bolsillos de los consumidores. También resultará interesante comprobar si las retransmisiones deportivas, las más perjudicadas en este sentido, adoptan en algún momento un sistema de reparto de derechos más diverso y segmentado entre diferentes plataformas para combatir a los piratas, dado el éxito que ha supuesto este modelo para las películas y las series. t

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