BENEMÉRITA ESCUELA NORMAL “MANUEL ÁVILA CAMACHO”
OBSERVACIÓN Y ANÁLISIS DE LA PRÁCTICA EDUCATIVA
MI PRIMER ACERCAMIENTO A LA PRÁCTICA EDUCATIVA
CLAUDIA JANET RAMÍREZ ROBLES
MARGIL DE JESÚS ROMO RIVERA
PRIMER SEMESTRE
LIC. EDUCACIÓN PREESCOLAR
ZACATECAS, ZAC. 13 DE ENERO DEL 2016 1
MI PRIMER ACERCAMIENTO A LA PRÁCTICA EDUCATIVA El presente ensayo tiene el objetivo de que, yo como alumna, dé a conocer lo que he logrado aprender conforme a lo que es un Jardín de Niños hasta el momento, en lo que se ha presenciado en mi curso inicial de futura docente en preescolar. Así mismo, durante el desarrollo daré mi punto de vista de lo que es un Jardín de Niños y sobre algunos aspectos que se presentaron en los acercamientos que tuve en la institución durante la primera y segunda jornada de observación que se llevaron a cabo durante el curso. Todo esto tomando en cuenta las diferentes lecturas que se revisaron durante el semestre, de las diferentes materias que me son impartidas. Primeramente, fue Friedrich Frobel pedagogo alemán quien acuño el término “Jardín de niños”, en alemán Kindergarten, centrando su actividad en animar el desarrollo natural de los pequeños atreves de la actividad y el juego. Esta idea nació de la relación que él le da a los niños con las plantas, en el preescolar estos son como una semilla que si se cuida y se le da lo necesario para su desarrollo crecerá con fortaleza e independiente de lo demás. Antes de comenzar el curso, antes de realizar la lectura de los diversos documentos, tenía una idea muy diferente de lo que es un Jardín de Niños y de la forma en que se trabaja en ellos. Conforme ha sido mi transcurso en la carrera me he podido dar cuenta que es algo distinto, muchas de las veces pensé de forma errónea sobre esta labor, asimismo me di cuenta que soy una más de las personas que se creó una idea diferente del Jardín de niños, cayendo así en lo que son mitos de esta carrera. Podemos definir mitos como: “relatos supratemporales y permanentes, y por lo tanto, valen para todos los tiempos… los mitos son creencias colectivas de buena fe, que trascurren entre la realidad y la ficción” (Harf, et al, 2002, 26) Durante mi estancia en el Jardín de niños también me pude dar cuenta de muchas cosas relacionadas con las educadoras, por ejemplo, durante el primer día que estuve platicando con el docente de mi salón me pude dar cuenta de varias cosas, entre las cueles me llamo mucho la atención, que como lo menciona Tenti en “El oficio del maestro contradicciones iniciales”, la vocación es algo esencial para el 2
trabajo y no solo en una institución, sino en cualquier labor que se realice, tomando en cuenta que vocación “no es material de elección racional. Es, al igual que el concepto teológico, un llamado, una predisposición que se define como innata, no adquirida.” (Castellanos, 1905, 94), ya que durante nuestras pláticas el profesor mencionaba que no estudio para impartir clases en el preescolar, tiene su licenciatura en el nivel primaria, y también me hizo muy notorio sus ganas por terminar sus labores como docente, espera ansiosamente el poder jubilarse, y, aunque el mismo lo menciono, “la labor en el preescolar es algo muy bello y te llena de satisfacciones pero llega un momento en el que el trabajo y lo mismo de siempre te cansa”. Es aquí donde puedo retomar el relato de Sísifo. “Los dioses condenaron a Sísifo a rodar una roca a la cima de una montaña desde donde la piedra volvería a caer por su propio peso; se pensaba, que no habría un castigo más terrible que el trabajo inútil y sin esperanza. La
sentencia estaba dictada, tocaba a Sísifo emprender el
viaje cuesta arriba, cada vez que la piedra llegara a la montaña ésta caería siempre par repetir por toda la eternidad su condena” (Mercado, 2007, 105)
En el cual nos podemos dar cuenta que si no hay una pisca de vocación dentro de la docencia esto solo se vuelve una carga, con la cual en el transcurso del tiempo lo único que queremos es liberarnos de ella, es de ahí donde surgen algunas cuestiones, ¿qué es lo que lleva a docentes, como en este caso, a tomar la elección de impartir su labor en un lugar que no le corresponde?, ¿existe algo de vocación en su labor o solo lo realizar por tener un sueldo estable?, ¿por qué su interés por la docencia, si al final lo que quiere es retirarse? Este punto me lleva entonces a cuestionarme ¿en sí, que es una educadora?, para lo cual cuestione a varias personas sobre ¿qué cree usted que es una educadora? A lo cual tuve diferente respuestas como: 3
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Es una persona que educa, cuya profesión es enseñar a otros por medio de distintas técnicas a cambio de un salario.
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Una persona que cuida a un pequeño, es decir un tipo niñera. Esta respuesta nos lleva a retomar el mito acerca de la maestra jardinera donde nos plantea que: “la primera representación de la maestra jardinera es como la segunda madre” (Harf, et al, 2002, 40).
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Una persona capacitada para desempeñar la función de educar a otras personas, ya sea escolarmente o moralmente.
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Persona que ayuda a aprender a otras personas.
Mediante fui obteniendo estas respuestas de cada uno de mis entrevistados me pude dar cuenta que cada persona se crea un concepto totalmente diferente a los demás y que, como ya se mencionó, se llega a caer en los mitos que se tienen de la docencia en el nivel preescolar. Asimismo, recordando comentarios de profesores y compañeros me pude dar cuenta que en sí, una educadora debe ser más intelectual que manual, ya que lo que se quiere lograr en el jardín de niños es que ellos aprendan y no solo que sepan armar o desarmas cosas, lo cual se logra mediante la realización de estrategias que tengan un aprendizaje significativo. También, durante el tiempo que tuve de acercamiento en el jardín de niños, me pude dar cuenta que, al momento de realizar diferentes actividades, los docentes caen en lo que nos maneja Tonucci (2002, 10) “pensando en ese niño pequeño, que no sabe, la escuela infantil puede permitirse, el proponer actividades banales y humillantes”, ya que muchas de las actividades que realizaba el docente en el aula eran muy repetitivas, durante mi primer semana de observación el único tema que se abordó durante las clases fueron las figuras, y si, al principio el docente tenía la atención de los niños, pero conforme trascurrió la semana se les volvió algo enfadoso a los niños estar con lo mismo. También pude apreciar de lo que nos menciona de “trabajitos estereotipados”, ya que a mi regreso, en la segunda semana, me pude dar cuenta de el sin fin de adornos y dibujos que se tenían en conmemoración a la Revolución Mexicana, incluso se realizó una actividad fuera de la institución que consistió en un concurso de decoración de bicicletas, conmemorativas a la fecha, y una carrera ciclista, la cual lo único que favoreció en los niños es la convivencia social y familiar. 4
Así, conforme el paso del tiempo, en mi estancia en la Normal, me he podido dar cuenta que nada de esto sirve para el aprendizaje significativo de los alumnos, así como también aprendí que para que los niños aprendan es necesario dejarlos que ellos mismos creen su forma de aprender, para que así se logre el conocimiento de las cosas y puedan recordarlo cuando se requiera hacer uso de ese aprendizaje, es decir que ellos mismo aprendan a aprender. Para concluir, puedo decir que todo esto que se observó y que se ha ido trabajando durante este periodo, me sirve para tener una noción más amplia y realista sobre lo que es la educación en preescolar, ya que es una etapa muy delicada en el desarrollo de los niños, donde se requiere de mucha responsabilidad y dedicación para poder estar al pendiente de ellos para lograr que aprendan y desempeñen sus conocimientos, así, también, poder demostrar a las personas que no se trata de una segunda madre que va a cuidar a los pequeños mientas los padres no pueden estar con ellos por su trabajo, o que la educadora solo hace trabajos manuales para divertir a los niños. Aunque aún existen educadoras con estas traducciones de poner a los niños a dibujar y colorear, el estar en este y los demás cursos en la Normal me hacen darme cuenta que ahora ya no es lo que se necesita, porque los niños ahora son nuevas generaciones, que, como lo hemos visto, nacen con muchas ventajas las cuales antes no se tenían, nacen junto con la tecnología lo cual nos lleva, a mí y a mis compañeras como futuras educadoras, a actualizarnos y tener nuevas visiones sobre el preescolar, para así poder emplear nuevas técnicas al realizar las actividades correspondientes para lograr que los niños creen conocimientos que no sean temporales, que sean conocimientos que recuerden y de los cuales puedan hacer uso para poner en práctica en su vida cotidiana, ya que me pude dar cuenta que se debe preparar a los niños para su vida cotidiana fuera de un salón de clases. Referencias bibliográficas: Tonucci, F. (2002). La reforma de la escuela infantil. SEP. México. Harf, R. Et Al (2002). Rices, tradiciones y mitos en el Nivel Inicial. Dimensión historiográfico-pedagógica. SEP. México.
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Tenti, E. (1999). El arte del buen maestro. México: Pax. Capítulo 2, contradicciones iniciales. (pp.181-239) Mercado, E. (2008). El oficio de ser maestro: Relatos y reflexiones breves. Edo. De México: ISCEEM.
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