6 minute read
FECUNDANDO LA TIERRA s|
Para un escéplico. que niega las influencias de la sangre derramada sobre la tierra, en la salud de la patria,
L agricultof que ve estéril sus campos: que siente fatigado el suelo y agotada, en sus energías, la tierra, piensa un día, que debe abenarlos y lleva á ellos materiales de cultivo, residuos de deshechos, vecinos á la. putrefacción, para que, en pleno período de ésta, renazcan en los dormidos átomos, energías nuevas, nuevos florecimientos de vida.
Allá. en los secretos senos de la tierra, desenvuélvese el misterioso proceso de la desintegración orgánica,-cuyas leyes parecen luego rectificarse, y de átomos y moléculas, que integraban formas inservibles, acaso muertas, surgen átomos nuevos y moléculas ¿nuevas, para dar margen á un nuevo proce$'$o vital.
¡Parece que allá, en el hondo é impenetrable misterio de las cosas, que se crean» Sienten los átomos, conmociones de fuerzas invisibles que los devuelven á la vida!
Allí, en ignorado é incierto punto de línea en la cual se desenvuelve el proceso vital, realízase el fenómeno de la transformación de lo que se apagó en los fenómenos de la muerte y de lo que vibró en los primeros resplandores de la vida....
¡Allí están el invisible, ignorado punto que cierra y el punto que$bre, el eterno círculo de la creación! * * »
Los pueblós, como los agricultores, también fitilizzn +u stelc; también labran la tierra, que Dios Jes diera por patria.
La abonan con sus lágrimas, con sus dolores cruentos y con sus torturas infinitas, Muchas veces, la sangre generosa, la que corrió por sus arterias y circuló por sus venas en ondas de vigor y de vida la vierten en holocaustode amor, sobre la tierra que los sostiene.
En los surcos, que abren la discordia y los enconos fratricidas, los egoismos y ls ambiciones, se derrama estérilmente, al parecer, sangre generosa y palpitante y esa sangre, que dejó gritos de dolor y de muerte en las almas, y que puso una gasa de tristeza en los horizontes de la patria, mézclase con la tierra, y cual savia que circulara por invisibles arterias putre y vigoriza el suelo, para que la planta de los hombres, que sobre ella luchan y trabajan, sienta los estímulos de una nueva vida: la vida del patriotismo, que es honor, y es virtud y es sacrificio.
¡Sólo á costa de eso, que es magno y sublime, es que la tierra se fecundiza, para que dé sus sazonados frutos! ¡Sólo así, yácosta de eso, verdadero engendro de potente savia, se abona latierra, para losfines tan hermosos y trascendentáles de crear una patria.
Los pueblos, que nó han arado ni removido sus tierras, sembrándolas de heroismo y sacrificio, no pueden aspirar á -que sus hijos recojan frutu de bendición y de amor para inmortalizarlos en la paz.
¡Cuántas veces, la sangre vertida sobre los sedientos surcos de la tierra, vió crecer robasto y fuerte el árbol de la Libertad!
¡Surcos abiertos, pero secos, sin ese riego bienhechur, son lechos, donde se reclina, para dormir sueño de muerte, el alma de los pueblos domeñados!
¡Que aren los pueblos con fe y virilid:d y "que remuevan la tierra con persistencia y el árbol de la Libertad siempre crecerá frondoso allí donde la sangre se derrame con generosidad y heroismo!
¡Fatal ensezanza de 'a Historia!
QUEVEDO BAEZ.
Vió usted, Doctor, que con la incorporación no sacamos los pies de plato?
Pues con esta cajetilla de cigarrillos. sabiéndole sacar partido, se puede derrotar en toda la línea á la Unión de Puerto Rico.
¿Echando humo?
No señor: echando pestes de labor de la Cámara.
Parrafo brillante
Del discurso del señor de Diego, que ha impresionado profundamente á los comisionados democratas, reproducimos este párrafo verdaderamente brillansIsimo.
«<Esta es la vez primera que nuestra Cámara celebra una Sesión de Honor, en homenaje a persona alguna, y lo hacemos ahora con íntima delectaoión. porque vemos en vosotros, no los atributos del poder militar y de la conquista, no una delegación burocrática,sino una parte sustancial de la genuina representación de vuestra República, de la magestad en vuestra Censtitución, de la hermauda de vuestros Estados, de la grandeza y de la gloria del pueblo americano....iSed bienvenidos y que el aire y la luz de muestro cielo los acaricien, q.os arrullen el ritmo de nuestros mares y nuestras selvas q. toda nuestra tierraos rinda el perfume de sus flores y la miej de sus frutos, y que llegue también á vuestros oídos el clamor de nuestro pueblo triste y somcrío en medio. de la poesía y la hermosura luminosas y alegres de tan rica maturaleza!» imbécil bueno solo para que huela, perro hu-
Lo malo es que estos americanos, llamense republicanos ó demócratas, no entienden mucho de poesía.
+ 4 SO era lo que nos faltaba!
Para el pobre diablo á quien le da la N real gana de no ser actor de la bachata social; para el que quiere tener el derecho de no formar comparsa en el perpetuo carnaval de la vida,para el q: no desea ver continuamente r caretas que rien en caras de vegigantes de h todo el año; para el insensato que gasta su dií nero en libros en vez de emplearlo en acciones, ó darlo cristianamente á un interés del 46 5 por cieuto como hace hoy too pájaro; para el que busca un rincón tranquilo donde estudiar en paz sin que los necios le molesten, ni laturba multa le irrite, esta bendita ciudad de San Juan resulta poco menos que un infierno.
Rico, status q. siempre se resolverá el día de juicio por la tarde, pero sí le habrá importado mucho Haber vendido aquí todossus pitos, por que lo que es á alcagiieles nadie nos gana. Ya puede usted resolver la cuadratura del círculo, ódejar atrás á losaereoplanos, ó inventa una máquina de hacer dinero, ó demostrar que basta soplar para hacer botellas........ en cuanto sepan que es puertorriqueño......
Pero que se pare en la plaza nn eminente, extranjero y diga cuatro paparruchas y saque media docena de engaña bobos, y esla mar. !Hasta go/etás!
No era bastante que los muchachos callejeros hayan convertido las calles de la capitál en perpetuo juego de pelota, nierasuficiente el tormento que es preciso soportar donde 'quiera que viva usted si esto es vivir donde le arrancan á uno los cuartos sin derecho á quejarse, considerado unicamente como un milde, el recibo de fin de mes.
¡Tenía tambien que venir á quemarnos el resto de hígado que nos queda. el maihacado hombre de los pitos!
Y 'esto es una cosa horrible. americano nos ha reveu.tado de la humanidad.,
El dichoso .en 20mbre
- Mire usted que venir á traer pitos á un país en el cual salvo los dueños de centrales, los que dicho sea de paso están que no les llegalacamisa alcuerpo, todo elmundo se pasa aquí la vida pitando la Borinqueña en lo profundo del eminente silencio de ios bolsillos.
No se puede con esta lata. Al americano ese, le importará poco el s/atus de Puerto
Pedro R. de Diego
Desde el dia 15 del actual dejó de pertenecer ála redacción del «Pto. Rico Progress,» este amigo estimadísimo, á quien no tenemos que elogiar por ser harto conocido en el país por su labor periodistica.
El Director del colega se disgustó porque de Diego, en su afan de informar al público, acompañó, en unión de otros periodistas, á la
Vaya, vaya. La verdad es que semos asina. Pero así y -todo no se le -ocurra á usted ir á la plaza de Baldorioty en cuanto anochece, sobre todo en noche de retreta. Es una delicia. -Los muchachos desarrapados corren entre las piernas de los pobres viandantes; hay una de gritos, de patadas, de chusma (la chusma y el relajo nacieron en Puerto Rico) y para colmo de fiesta todo un pueblo se pára éomo idiota. como indíjenas con levitas, á ver el desarrollo dela película gratis. en el cine anunciador. Y amenizando el eminente acto, los pitos, los pitos del americano.
Verdad es que aguí no fodíamos pitar sino con fitos de lata...... americana.
¿Creían ustedes que yo iba á pedir al alcalde Todd, y al capitán de policía Fernández Nater que nos quiten de la plaza á tanto chiquillo malcriado, y nos supriman los pitos! No, hombre nó. Verá 'usted como eso no se acaba en buen rato. Por algodijobien quien dijo: esta tierra es el infierno de los - puerto rriqueños, y el paraiso de los extranjeros.
¡De clavo fpasao!
FASTIDIATE ISLEÑO.
Comistón demócrata que vino á Puer o Rico.
Verdaderamente, en los tiempos que corremos, es un gran delito acompañar.á los demócratas, aunque tengo para mí que ese sería el pretexto para colocar algún americano, que asi es como se elabora en ciertas oficinas por el progreso de Plo. Rico.
Pero sepa el «Progress» que no se encuentran todos los dias empleados como de Diego.