Bullying Colegio Hispanoamericano Departamento de PsicologĂa 2013- 2014
PREGUNTAS PARA PARTICIPAR EN EL FORO VIRTUAL ¿Qué entiende por Bullying? ¿Cómo hago para diferenciar una situación de Bullying de
una que no lo es? ¿Podría hablarse de acoso escolar en niños de primera infancia? ¿Qué posiciones favorecen la repetición de episodios de Bullying? ¿Considera que en la institución existen situaciones de Bullying? ¿Cómo se pueden detectar? ¿Cuál sería el conducto regular para el manejo de estos casos? ¿Desde su lugar como maestro qué puede hacer para prevenir estas situaciones?
“El acoso escolar es una especie de tortura, metódica y sistemática, en la que el agresor sume a la víctima; a menudo con el silencio, la indiferencia o la complicidad de otros compañeros”. José Sanmartín, "Violencia y acoso escolar"
Ubicación En los últimos años los problemas de convivencia en la escuela han atraído
la preocupación de la comunidad educativa y actualmente trasciende ya a la sociedad en general al convertirse en centro de atención de los medios de comunicación de masas, que, posiblemente, han contribuido a magnificar el problema. Si bien, la intimidación o violencia entre iguales es un problema presente con alguna frecuencia en los centros educativos, también, hay que tener en cuenta que el manejo del tema en los medios tiende a ser exagerado y a plantear generalizaciones. Las causas de esta violencia son múltiples, pero hay que resaltar que
reproducen inconscientemente ciertos valores de la misma sociedad que los jóvenes en algunas ocasiones rechazan. Son los valores de una sociedad que privilegia la ley del más fuerte, donde el diálogo no existe, no se solucionan los problemas con la negociación y el pacto, sino con posturas intransigentes.
Al ser la escuela una de las instituciones principales de socialización se
hace prioritario identificar si la violencia está presente en ella, y las distintas formas en que se puede manifestar el denominado fenómeno Bullying o acoso escolar, en el cual se mantiene una conducta agresiva intencional y perjudicial, protagonizada por jóvenes escolares, que asumen el rol de agresores frente a otros que se asumen como víctimas. Es importante entonces que los
docentes estén en capacidad de reconocer las características indicadoras de acoso escolar diferenciándolas de otras formas de intercambios entre iguales: Problemas de relación interpersonal, competencia social, manipulaciones de los adolescentes propias de esta etapa de vida en la que se generan cambios de comportamiento, inestabilidad emocional, aumento de la fuerza y de la energía, frente a un incipiente aprendizaje de control de impulsos. Los futuros comportamientos y el proceso de identidad dependerán en alguna medida de cómo se manejan todos estos cambios.
¿Qué es acoso escolar? Es una conducta violenta que se manifiesta entre escolares, también conocida como hostigamiento aunque últimamente se ha publicitado más por su término inglés: Bullying. Consiste en una agresión mantenida en el ámbito escolar, dirigida por un menor (o por un grupo de menores) hacia otro que no es capaz de defenderse por sí mismo. Para distinguir el acoso escolar de otras acciones violentas es necesario reconocer:
1. La existencia, visible o no, de una relación de poder (dominio-sumisión) que tiene el agresor sobre quien es el agredido o acosado. El menor agresor que se presenta como bravucón trata de forma tiránica a un compañero al que hostiga, segrega o atemoriza, hasta el punto de convertirlo en su víctima habitual. 2. La segunda es que en el acoso, las situaciones de agresión se presentan de forma reiterada. No se trata de episodios esporádicos, sino persistentes y pueden durar meses e incluso años. 3. La continuidad de estas relaciones provoca en las víctimas efectos claramente negativos: Descenso de la autoestima, estados de ansiedad e incluso cuadros depresivos, lo que podría traducirse en dificultad de integración al medio escolar, ausentismo escolar, percepción del maltrato intimidatorio a tal punto que puede llevarlas a consecuencias devastadoras como el suicidio.
Formas de acoso escolar Físico: Golpes, tiradas de cabello , agresión con objetos, daño de materiales personales, hurtos.
Psicológico: Intimidación, amenazas, exigencia de dinero, bienes materiales o servicios, asignación de apodos o sobrenombres, utilización de lenguaje sexualmente ofensivo, ridiculización y humillación. A continuación se describen las principales formas de acoso psicológico.
El acoso psicológico se manifiesta a través de la exclusión y aislamiento en las actividades escolares y sociales, lo cual se denomina Bloqueo social. Agrupa acciones encaminadas a bloquear socialmente a la víctima.
Son ejemplos: El “tú no”, tratar al menor como si no existiera, aislándolo e impidiendo su expresión y participación en juegos. Las prohibiciones de jugar, de hablar con otros, o de que nadie hable o se relacione con él, son indicadores que apuntan un intento de quebrar la red social de apoyo del menor. Se incluye dentro de este grupo de acciones el meterse con la víctima para hacerle llorar, buscando presentar al menor entre el grupo de iguales, como alguien flojo, indigno y débil. De todas las modalidades de acoso escolar la más difícil de combatir es el bloqueo social, en la medida que es una actuación frecuentemente invisible (No deja huella). El propio menor no identifica más que el hecho de que nadie le habla o de que nadie quiere estar con él o de que los demás le excluyen sistemáticamente.
Hostigamiento: Agrupa aquellas conductas de acoso escolar que persiguen amilanar, amedrentar, apocar o consumir emocionalmente al menor mediante una acción intimidatoria. Quien o quienes acosan buscan inducir el miedo en el menor. Sus indicadores son acciones de intimidación, amenaza, hostigamiento físico intimidatorio, acoso a la salida del centro escolar, expresiones de desprecio, falta de respeto y desconsideración por la dignidad del otro. La ridiculización, la burla, el menosprecio, los apodos, la crueldad, la imitación burlesca son también indicadores de este tipo de abuso.
Forman parte del acoso psicológico la expansión de rumores tendientes a generar malestar a los estudiantes acosados. Esto se conoce con el nombre de manipulación social. Agrupa aquellas conductas de acoso escolar que pretenden distorsionar la imagen social del menor y “envenenar” a otros contra él. Con ellas se trata de presentar una imagen negativa y distorsionada de la víctima. Se cargan las tintas contra todo cuanto hace o dice la víctima, o contra todo lo que no ha dicho ni ha hecho. No importa lo que haga, todo es utilizado y sirve para inducir el rechazo de otros. A causa de esta manipulación de la imagen social de la víctima acosada, muchos otros niños se suman al grupo de acoso de manera involuntaria, percibiendo que el acosado merece el acoso que recibe.
El acoso Psicológico también puede buscar que la víctima realice acciones en contra de su voluntad: Coacción. Mediante estas conductas quienes acosan al menor pretenden ejercer un dominio y un sometimiento total de su voluntad. El que la víctima haga cosas contra su voluntad proporciona a los que le fuerzan diferentes beneficios, pero sobre todo poder social. Los que acosan son percibidos como poderosos, por los que presencian el doblegamiento de la víctima. Con frecuencia las coacciones implican que el menor sea víctima de abusos como entregar su dinero o su lonchera, prestar algún servicio e incluso puede llegar a ser víctima de abusos en el campo sexual haciendo o recibiendo conductas sexuales no deseadas, que debe silenciar por miedo a las represalias.
Amenaza a la integridad: Agrupa las conductas de acoso escolar que buscan amilanar mediante amenazas contra la integridad física del niño o de su familia, o mediante la extorsión. Los medios tecnológicos han favorecido otro tipo de acoso Psicológico. El Cyberbullying, que consiste en el uso de tecnologías para agredir, maltratar, intimidar o amedrentar a estudiantes por parte de sus compañeros.
Dos de las características que hacen más agresiva la conducta de Cyberbullying son: a) la posibilidad del anonimato (Johns, 2008) y b) el hecho de actuar sobre espacios escolares y extraescolares (Maidel, 2009). Este tipo de acoso se da, por ejemplo, a través de las redes sociales, e-mails, mensajes de texto en los celulares, sitios web personales, comunidades virtuales, entre otros, y desde estos ámbitos se extiende al entorno extraescolar.
En conclusión la violencia psicológica no es una forma de conducta, sino un conjunto heterogéneo de comportamientos, en los cuales se produce una forma de agresión que causa un perjuicio a la víctima. Estas acciones van encaminadas a minar la autoestima del individuo, incrementándole una sensación de inseguridad y temor.
Todas las formas de acoso psicológico dejan sus secuelas. Cuanto más tiempo persista este tipo de acoso , mayor y más sólido será el daño.
¿Quiénes participan en el acoso? El(los) agresor: Es el que ejerce su dominio sobre la víctima a través del
acoso y la persecución. La víctima: Es la persona que sufre los malos tratos y se siente incapaz de
acabar por sí misma con el maltrato. El coro: Son personas que prefieren ponerse al lado del agresor porque así
se sienten fuertes, también puede ocurrir que tengan miedo de que el agresor arremeta contra ellos. Los observadores pasivos: Inhibidos al contemplar episodios de Bullying.
Consideran que aunque informen de la situación no va a servir de nada. Los adultos: Cuando dejan pasar por alto señales de maltrato o irrespeto, o
cuando por falta de cercanía y comunicación con los menores no se enteran de la situación.
¿Qué hacer para prevenir el acoso escolar? o “Según Enrique Chaux, especialista e investigador de la Universidad de
los Andes, la problemática del bullying en las aulas de clase es de bastante cuidado y no sólo afecta a la víctima del abuso sino también al agresor, quien corre el riesgo de desarrollar aún más sus actitudes violentas e incluso una trayectoria criminal. Al ser el bullying una dinámica de grupo, sólo se logra mejorar si se trabaja en grupo. Los cambios más profundos ocurren cuando los que están alrededor reconocen que eso no está bien y deciden frenarlo, explica Chaux, líder del proyecto Aulas en Paz que trabaja esta problemática en varios colegios del país”.
Se recomienda a los docentes, estar atentos en la detección de estudiantes que presenten características de víctima tales como: Falta con frecuencia a las actividades escolares. Disminución del rendimiento escolar. No asistencia a las actividades de tipo social que se desarrollen en la
institución. Ausencia de amigos o pasar mucho tiempo sólo. Presencia de lesiones físicas. Pérdida o rotura de sus pertenencias. Introversión. Escasa autoestima, entre otras.
Igualmente es importante detectar los agresores o posibles agresores que pueden presentar características como: Carencia de empatía e insensibilidad ante el sufrimiento del otro. Fuerte impulsividad y emotividad con poco control sobre la ira. Fanfarronería y arrogancia.
Capacidad exculpatoria y conductas agresivas con otros sin ningún
remordimiento. Esto último tiene lugar quizás porque razonan desde la creencia inadecuada de que el otro se lo ha ganado o se lo merece (este perfil se encuentra presente en el 70% de los acosadores).
Para evitar que un menor participe como agresor o sea víctima de Bullying
o cyberbullying, a los padres, educadores y demás miembros de las comunidades educativas les corresponde la tarea de sensibilizarlos en cuanto a las consecuencias de sus actos, reales o virtuales, generando posibilidades de discusión sobre el tema y permaneciendo alerta ante cualquier situación que pueda indicar la práctica de esta conducta. (Maidel, 2009)
Ruta de atenci贸n cuando se detecta un caso de Bullying
Para ampliar información: Referencias o Monografía: “Perfil psicosocial del agresor y de la víctima en la violencia escolar” o “Herramientas para la prevención y el manejo de la intimidación escolar”. Universidad de los Andes –kit papaz o “Acoso escolar: Caracterización, consecuencias y prevención” Edilberto Cepeda-
Cuervo Ph. D. en Matemáticas Universidad Nacional de Colombia Departamento de Estadística; Gloria Caicedo Sánchez, Ministerio de Educación de Colombia, Viceministerio de Educación Preescolar, Básica y Media, Asesora mineducación. o Ley 1620 del 15 de marzo de 2013 o Administrador Documental Colegio Hispanoamericano: I-DI-05 Comité de Convivencia y Ruta de Atención Integral para la Convivencia.pdf o Cibergrafía: o
o
www.nolopermitasactua.com http://www.acosoescolar.info