Una Esperanza de Vida

Por Claudia Silva

En México sólo nos convertimos en donadores en potencia cuando algún ser querido lo necesita. El problema es que seguir bajo está cultura complica la posibilidad de salvar vidas, sin hablar de los costos económicos que representan para el país. De acuerdo con el doctor Arturo Dib Kuri, director el proceso de asignación. Primero se establece si no existe algún caso de urgencia nacional, sobre todo en el caso de pacientes que están a punto de morir y necesitan un trasplante. Si no es el caso y el hospital no tiene convenios con alguna institución, la ley señala que se comunique al CENATRA, que tiene una línea de urgencias nacional exclusiva para médicos, para coordinar la asignación de los órganos en algún otro hospital. Al final del procedimiento, si no se presenta ninguna de estas opciones, se recurre a la lista de espera. “Con mucha frecuencia la gente piensa que la lista de espera es el elemento número uno, pero casi nunca se llega a ella, porque existen otras variables”, acotó. negativo y nos ha tomado mucho tiempo concientizar a la población acerca de la donación”, comentó. general del Centro Nacional de Trasplantes, “entre más pobre sea un país más obligado está en invertir en trasplantes; gastar en ello no es un lujo”, comentó en entrevista para Concientización Humana.

Por ejemplo, “es 7 veces más caro no hacer un trasplante a un paciente con problema de riñón, quien requiere diálisis”, señaló. La hemodiálisis o los tratamientos para atender afecciones del corazón o del hígado son muy caros, en cambio en costo de un trasplante, aunque es variable, puede ser, en el caso del riñón, de 15 mil dólares.

Asignación de órganos y tejidos

Se calcula que 100 mil personas están en espera de un órgano para seguir viviendo. Por lo que la asignación de órganos y tejidos debe ser un proceso equitativo y transparente, justo y sin ánimos de lucro. La donación de órganos es la única área de la medicina en la que no se puede comprar el insumo, porque el proveedor es otro ser humano. Por ello, el director del CENATRA considera que “es una de las partes más complicadas del proceso”.

Cuando no hay receptor en el hospital, donde murió el donador, el CENATRA y la Secretaría de Salud establecen los lineamientos para que se realice

La ley señala que deben prevalecer los criterios médicos. “Esto es lo más importante, ya que los médicos de cada hospital son los que conocen al enfermo que lo necesita más, al que es compatible…, todas estás variables de decisión están en manos de los médicos, no de un funcionario”.

Es importante mencionar que todos los receptores están en la lista de espera. “Hay personas que piensan que si están en primer lugar les toca mañana, pero no tiene que ver con la antigüedad, sino con la compatibilidad del donante. Estamos proponiendo que en la legislación se le cambie el nombre, puede ser un registro o una base de datos, para evitar estás confusiones”.

Tráfico ilegal de órganos

Para el director del CENATRA es extremadamente difícil, aunque no imposible, tomar un órgano de una persona que murió y trasplantárselo a otra de manera clandestina, “es tan complicado que para que tenga éxito requiere hospitales, médicos, enfermeras, equipos de laboratorio, análisis. Además, el trasplante no termina con la operación, requiere mucho tiempo de observación, de consultas Todo este proceso en forma clandestina sería muy difícil”. Lo importante es estar muy pendientes de que no vaya a haber nada ilegal. “Si algo sucede de verdad, puede crear un impacto muy

Di sí a la vida

La salud es el regalo más preciado de la vida, sin ésta no podríamos disfrutar todos los momentos especiales. Para quien goza de buena salud es casi imposible percibir el dolor, ansiedad, depresión e impotencia que padece un enfermo; lo increíble es que existiendo la manera de salvar múltiples vidas, se desperdicie por falta de información o desconfianza. Si nos negamos a donar nuestros órganos a nuestra muerte o a la de algún familiar, condenamos nuestra propia historia a un futuro incierto. La donación de órganos y tejidos es un acto de amor; si eres un ejemplo de vida, comparte tu historia con nosotros; sino regístrate como donador y cuéntanos tu experiencia.

Siempre estaré agradecida con la familia de mi donante, porque a pesar de su dolor me dieron una segunda oportunidad. He vuelto a trabajar como enfermera y ahora disfruto de una vida plena con mis amigos y mi nieta, lo cual pensé no podría volver a hacer, ya que me habían pronosticado dos años de vida, si no conseguía un trasplante de corazón. Las personas que me dieron este regalo de vida son verdaderos héroes, Dios los bendiga.

Mary Carmen González Receptora de trasplante de corazón Fundación ALE

Cultura de donación

Según encuestas realizadas en México, más del 80 por ciento de la población está dispuesta a donar sus órganos, al respecto el doctor Dib Kuri nos comentó, “yo no creo en las encuestas de intención, sino en las cifras de las instituciones donde suceden las defunciones. Hace 10 años, de cada diez personas que morían y se solicitaba a la familia la donación, sólo accedían tres. Actualmente es al revés, de cada diez se logran siete. En algunos estados ya están en nueve de cada diez”.

Hacer un acto de reflexión antes? ¿En qué mundo vivía?, ¿por qué tanta gente en espera? ¿En dónde están los órganos de las personas, quienes teniendo conciencia, donaron y prepararon a la familia para que al momento de su muerte hicieran los trámites necesarios? Descubrí que no nos importa en realidad. Pues aunque no la vemos existe muchísima gente con la vida en un hilo, y siempre pensamos, ya habrá otras personas que les donarán.

1. Cualquier persona puede necesitar un trasplante en un momento determinado y si no existe una preparación como sociedad va a ser muy difícil que suceda. Expresar la decisión.

2. Sí o no, pero comunicarlo a los familiares y amigos. Existen casos en los que la familia dice que no, porque su ser querido nunca expresó su deseo y ellos no quieren tomar esa decisión. Si tres de cada 10 se pierden por esa causa hay que trabajar ahí”, concluyó.

Pareciera que todo esto no existe hasta que nos sucede MiriamOrtizDelgado México, D.F. 2000FundaciónAtepac a nosotros...”.