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El taco, tendencia y tradición
LA
OPINIÓN
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Luis Urías Explorador, Desarrollador, Escritor-Artista.
CAPITALES Y SOCIALISMO
No hay nada peor No hay nada peor que explorar el mundo con miedo e inseguridad. Es algo que tenemos que aprender desde la primera infancia, antes de hablar y crear una persona mental: Presenciar el mundo con una actitud de seguridad, sin temores irracionales, que luego no se podrán controlar desde lo racional. La madre nos da ese carácter de seguridad y percepción clara, para tener tranquilidad y paz.
En el siglo 19, la formación de capitales monetarios, desarrolló la revolución burguesa, en los burgos o villas, que se hicieron ciudades. Las empresas empezaron a crecer con esos capitales económicos, y su actividad las hizo mantenerse ocupadas con su interior, considerando poco el entorno natural y el nuevo medio urbano: Las diversas empresas crecían sin mayor conciencia del conjunto nuevo que hacían en el medio ambiente natural, que se dañaba por explotaciones ciegas, y en el nuevo crecimiento que generaban entre todas: Las comunidades de poblaciones crecieron más como amontonamientos sin orden, y las buenas intenciones pronto eran una serie de conflictos distintos, por el crecimiento urbano desordenado y los conjuntos de actividades diversas sin mayores coordinaciones.
De esas dificultades, muchas personas empezaron a tener preocupaciones naturales por los amplios conjuntos de población, por las sociedades, que es la parte más importante de las nuevas ideas “socialistas” que se empiezan a generar, en donde los estudios científicos de la realidad por varios pensadores, como Marx, permitían tener visiones amplias, estadísticas, no sólo de la economía en general, más allá de las economías particulares de cada empresa, y nació la inquietud y preocupación por crear sistemas y organizaciones que atendieran estos crecimientos:
Eso generó distintas ideas de “socialismos”: Las poblaciones formaban ciudades, las ciudades regiones distintas, y los países integraban economías y organizaciones sociales, que requerían tener una consideración más amplia del Estado, como Gran Empresa de Todos, donde todos los ciudadanos son los socios, y se trata de atender las nuevas necesidades colectivas, como las naturales vialidades, comunicaciones, sistemas de redes de agua potable y drenajes, disposición de basuras, programas educativos y de capacitación, sistemas de salud más allá del médico particular, que tiene que ir a la casa de cada familia, etc.
Necesidades que ninguna empresa sola podía atender por su propia cuenta.
Pero el Estado como Empresa Social no tiene por qué ir en contra de cualquier otra empresa o persona, porque todos son sus propios socios. Y solo sucede cuando hay personajes vengativos, llenos de odio por algo o alguien, producto de sus miedos iniciales, que es la actitud infantil no resuelta. Algo que no puede darse en la empresa mayor, la Empresa Social de Todos, que a todos debe integrar y cuidar y proteger el Estado.