Empléate

por Carlos Llerena Al buen entendedor pocas palabras?

No solo en México sino en Latinoamérica, he podido escuchar este refrán muchas veces, tanto a nivel personal como industrial o empresarial.

A primera vista lo referimos para denotar ?algo obvio? sobre alguna cosa o algún tema, o que es? ?por todos conocido?, ?que su explicación sobra? o que no tiene caso perder el tiempo explicando, por ser algo de alto uso en la audiencia? pero su aplicación en la mayoría de las ocasiones demuestra una pretensión de superioridad por parte del interlocutor, desinterés por compartir con los demás ciertos temas específicos y una pseudo-protección en el rebaño, en la pertenencia a un grupo bajo el mensaje de ?no son bienvenidos los extraños? Sin embargo, lo que denota es un intento fallido de cubrir el miedo por abordar algún tema y ocultarse detrás de la creencia popular que? ?si no entiendes? es porque no eres buen entendedor?, así como aquel cuento de Hans Christian Andersen por allá del año 1837, en el ?Traje del Rey? donde engañado por aduladores, un Rey egocéntrico y narcisista, hace un desfile desnudo supuestamente ataviado por una tela finísima... pero solo visible por los más inteligentes del reino, dejando en entredicho a cualquiera que quisiera refutar la existencia de dicha tela y de paso poniendo en ridículo al Rey, y fue hasta que un inocente niño, tuvo la honestidad de señalar que ?el rey va desnudo? y al final aunque hubo reflexión, no hubo aprendizaje, en fin, habrá que leerlo nuevamente, pues

tiene muchas versiones y traducciones. Así que no hay pregunta inútil ni aclaración tardía, la comunicación es de quienes comunican, y aunque se diga

que estos rufianes comunicaron con gran efecto su trampa, lo que más importa en la comunicación que nos interesa desarrollar es la intensión de aportar, de tolerar, de ser claro, pero sobre todo? de ser respetuoso, eso se llama: ASERTIVIDAD. Lo otro se llama engaño y manipulación, lo cual es todo lo contrario.

La comunicación asertiva es un estilo de comunicación con un inmenso impacto en las relaciones (tanto emocionales, como profesionales y laborales), a continuación, les presento 7 características, que me parecen fundamentales para tener una comunicación asertiva efectiva:

7. Cuando miramos a nuestro interlocutor estamos mostrando interés y, esta actitud aumenta sustancialmente la confianza y cercanía. 6. Tener una postura corporal abierta y que use todo el espacio que tiene disponible, si es en una silla, sentarse bien, adueñarse de su espacio, ya que nuestra comunicación no verbal demuestra interés y sinceridad. 5. Observar nuestros gestos y aprender a controlarlos, ya que los gestos adecuados nos ayudan a dar énfasis a los mensajes que deseamos reforzar y con ello el mensaje se vuelve mucho más poderoso, a mi mente viene un gran orador, pero sin los motivos adecuados: Adolf Hitler. 4. Fijarnos en nuestros niveles de voz, ya que al modularla de una manera adecuada somos más convincentes, una voz pausada y menos aguda, promueve la escucha. 3. Analizar cuánto tiempo escuchamos y cuánto tiempo somos escuchados para aumentar la receptividad y el impacto. 2. Identificar cuánto, cómo, cuándo y dónde intervenimos, además observar la calidad de nuestras intervenciones en las conversaciones, y por último, 1. Utilizar el tiempo de interlocución con expresiones positivas acerca del tema, en vez de descalificativos y generalidades negativas, creando un ambiente seguro y para compartir.

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CREAMOS ESCRITORES JOVENES

Una verdadera am ist ad

Luis Angel. (4to año) Primaria Pública General Adalberto Tejeda. CDMX

Una vez un niño llamado Santiago iba corriendo en la calle,de pronto tropezó y cayó al suelo lastimándose el brazo y la pierna, su mamá que iba con él, lo levantó con cuidado y se lo llevó al hospital, pero Santiago no reaccionaba pues el golpe había sido ¡muy fuerte!, cuando por fin reaccionó, se quedó sorprendido al ver que su brazo y su pierna estaban enyesados, pues nunca había tenido esta experiencia tan dolorosa.

Tres días después los médicos lo dieron de alta; su mamá lo llevó a casa y siguió en recuperación. Mientras tanto, sus amigos de la escuela lo visitaban al salir todas las tardes, y le enseñaban lo que aprendían en la escuela, le platicaban cada una de las aventuras que vivían en el patio y pasaban tardes muy divertidas. Le dedicaban dibujos hechos por ellos mismos y le llevaban dulces que compraban en la escuela, gracias a eso, la recuperación de Santiago fue muy rápida. El día que fue a que le quitaran el yeso; sus amigos sabían que era su cumpleaños, por lo que lo esperaron con una fiesta sorpresa, invitaron a todos los compañeros del salón para festejarlo y darle muchos regalos y así le demostraron que cuando tienes buenos amigos todos los momentos por difíciles que sean, se vuelven menos dolorosos.

Y así, Santiago, gracias a su accidente pudo descubrir la grandeza de un verdadera amistad.