Valencia, Venezuela
Número 1, Marzo 2007
En este número Página 2: Editorial, Autoridades de la UC, Comité de Redacción, varios
Página 3 Despacio, Sancho, que tenemos prisa (a propósito de la LOCTI) Nelson Acosta
Página 4: Gerencia en acción: La Ley Orgánica de Ciencia, Tecnología e Innovación, una gran oportunidad para las empresas y universidades Chichí Páez, El Carabobeño
Página 5: Entrevista a Pedro Villaroel, Secretario de la UC
Páginas 6 y 7: Artículo 42 de la Ley Orgánica de Ciencia, Tecnología en Innovación.
Página 8: Tecnología: en el limbo $900 millones para ciencia y Tecnología William Peña, diario Tal Cual
Página 9 Algunas interrogantes no resueltas sobre la aplicación de la LOCTI, Miguel A. Megias
Páginas 10 y 11: Preocupa el desconocimiento de la LOCTI, Entrevista a Mario Petrizzelli, Alfredo Fermín, el Carabobeño
Página 12: Wladimir Zabaleta, símbolo de nuestros tiempos
En este primer número de Cuadernos de la Secretaría, destacamos la labor incansable del artista valenciano Wladimir Zabaleta, cuyas obras están expuestas en los mas importantes museos del mundo.
Cuadernos de la Secretaría -- Número 1, marzo, 2007
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Editorial on este primer número de Cuadernos de la Secretaría, entregamos a la comunidad universitaria y a la comunidad científica y académica nacional, un nuevo medio de comunicación plural, abierto a todas las corrientes del pensamiento, donde se puedan debatir ideas, conceptos, formulaciones y temas tanto de actualidad como otros que consideremos relevantes, y donde tengan cabida las más diversas opiniones, aún cuando algunas de ellas sean críticas a la propia autoridad. Presentamos a nuestros lectores y amigos, en este primer número, nuestro aporte a la discusión y el debate sobre la Ley Orgánica de Ciencia y Tecnología (LOCTI), que es de gran importancia para las universidades. Destacamos as implicaciones de esta Ley, que aunque fue promulgada por la Asamblea Nacional el 12 de julio de 2005, es apenas ahora que se ha iniciado su análisis y discusión. Al divulgar diversos aspectos del impacto y consecuencias de esta legislación, esperamos ayudar a aclarar ideas, definir las acciones de los diversos actores y contribuir al debate. En definitiva, la intención que anima estos cuadernos es abordar temas de coyuntura, analizarlos, y exponerlos al escrutinio del público universitario. Asumimos esta tarea desde nuestra condición de autoridad universitaria y, desde luego, como una exigencia que el país formula a sus instituciones de educación superior.
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Pedro Villaroel, Secretario
La danza de los millones REDACCION.- Las cifras que se manejan en referencia a los aportes a que están obligadas las empresas por la LOCTI son tan enormes que se prestan a reflexión. Según los datos del Ministerio del Poder Popular para la Ciencia y Tecnología, los aportes que deben entregar las empresas antes del 31 de marzo ascienden, aproximadamente, a dos billones de bolívares. Si a Carabobo se le aporta siquiera el 1% de ese total, estaríamos hablando de un ingreso, para el desarrollo en nuestra universidad, de alrededor de 20 millardos. Esta cantidad de recursos es algo nunca antes visto en nuestro entor-
no. Si tomamos en cuenta que la suma de todos los proyectos que se reflejan en la página Web de la UC apenas llega a unos 7 millardos vemos que, incluso, las mas optimistas expectativas pudieran ser rebasadas. Tendremos que esperar al 1º de abril para ver el resultado final de los aportes. Por el bien de nuestra institución, ojalá se materialicen suficientes recursos para impulsar en forma definitiva la investigación y el desarrollo tecnológico en nuestra universidad y que tengamos el talento de usarlos sabiamente. Sabremos, después del 30 de marzo, a cuanto ascienden los aportes.
Autoridades de la Universidad de Carabobo María Luisa Aguilar de Maldonado Rectora Jessy Divo de Romero Vicerrectora Académica Victor Reyes Lanza Vicerrectror Administrativo Pedro Villaroel Secretario
Secretaría de la Universidad de Carabobo Revista Cuadernos Comité de Redacción Miguel A. Megias, Editor miguelangelmegias@gmail.com Nelson Acosta Espinoza ancosta@cantv.net Freddy Carquez carquezf@yahoo.es Ciro Vargas cirovargas@hotmail.com Orlando Arciniegas oarciniegas@cantv.net Faver Páez faver2112@hotmail.com Asistente de diagramación: Dayana Salazar dayana.salazar@gmail.com Envíe sus comentarios y artículos a: cuadernosdelasecretaria@gmail.com Impreso en Publicaciones de la Secretaría Universidad de Carabobo 0241-824 0081 Tiraje: 1.000 ejemplares
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Despacio, Sancho, que tenemos prisa. (A propósito de la LOCTI) Contrariamente a lo que algunos están suponiendo, el mundo no finaliza el 30 de marzo. Ni el industrial ni el académico. Por lo tanto abordemos la novísima Ley de Ciencia, Tecnología e Innovación con la debida calma. Lo que si se agota ese día es el período de gracia que ha otorgado el estado para que se efectúen los aportes de las grandes empresas al sector de ciencia y tecnología Pareciera oportuno, entonces, iniciar a partir de esta fecha, y por los años venideros, una profunda reflexión sobre estos temas: industria, ciencia, tecnología, desarrollo tecnológico, aplicación del conocimiento, formación de recursos humanos y muchos otros tópicos relacionados. Deberíamos, en consecuencia, intentar diseñar una política que permita a las universidades y centros de investigación alcanzar los objetivos que le establece la ley. Vale decir, investigar, aportar y generar desarrollos tecnológicos a fin de adecuar o mejorar los procesos productivos del sector industrial. Con este nuevo ordenamiento legal, la reiterada excusa “no hay fondos para eso”, pareciera que llega a su fin. Si lo anterior es cierto, dispondríamos por muchos años de importantes recursos financieros. En consecuencia, deberíamos posar la mirada sobre los actores involucrados en la producción y transferencia de ciencia y tecnología ¿Y cuáles son esos actores? Veamos: recursos financieros, humanos, entorno (laboratorios, centros, bibliotecas, otros), y necesidades o problemas a resolver Con la finalidad de articularlos efectivamente, se hace indispensable la formulación de una política que los enlace en su totalidad. Desafortunadamente, a pesar de los diversos debates que en torno a esta materia se han llevado a cabo en los últimos 40 años, aún no disponemos de esta formulación institucional. Sin embargo, la aplicación de esta ley generará una oportunidad única para iniciar una discusión sobre las formas eficientes, apropiadas y coherentes, de utilización de estos recursos en el marco de una política para este sector. El dinero, bueno es señalarlo, por sí sólo no garantiza la producción de conocimiento. En consecuencia, parece apropiado advertir sobre la elaboración de proyectos con la única finalidad de responder a la oferta de financiamiento que se desprende de la aplicación de esta ley. De producirse esta coyuntura, se generarían resultados similares a los que tradicionalmente han caracterizado la investigación en nuestras universidades. Por ejemplo, de los cien y tantos proyectos indicados en la base de datos de la Universidad de Carabobo, la mayoría no responde a las necesidades del sector industrial. Dato peculiar éste, habida cuenta que los recursos provendrían de las grandes y pequeñas empresas ubicadas en la ciudad de Valencia. Entonces, parece válido preguntarse ¿Qué es lo que se requiere? ¿Qué debemos hacer?
Nelson Acosta Espinoza, ancosta@cantv.net*
Litografía de Pablo Picasso, "Don Quijote y Sancho" Primero, identificar las necesidades del sector productivo; y segundo, articularlas armoniosamente con los recursos de investigación y centros de producción de ciencia y tecnología. Desafortunadamente, este acoplamiento no se ha producido, ni por parte del demandante (las empresas), ni del oferente (las universidades). El pragmatismo, bueno es señalarlo, constituye una política errónea. Esta práctica, como lo anotamos anteriormente, está conduciendo a generar centenares de proyectos orientados a satisfacer urgencias de financiamiento, y necesidades internas de investigación académica. Sin embargo, este estilo no proporciona respuestas a demandas concretas que pudieran producirse de parte del sector industrial. Se hace indispensable, entonces, promover un debate en torno a estas materias, con la finalidad de formular las políticas que pudieran garantizar el uso óptimo de estos recursos. En pocas palabras, producir las condiciones institucionales que faciliten la generación de conocimientos y su transferencia al entorno público y privado. Es válido, en consecuencia, seguir la conseja de Don Quijote: “despacio, Sancho, que tenemos prisa…” *Investigador acreditado en el programa PPI
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Artículo reproducido de la sección Finanzas de El Carabobeño, domingo 11 de marzo de 2007
Gerencia en Acción
La Ley Orgánica de Ciencia, Tecnología e Innovación, una gran oportunidad para las empresas y universidades (*) Chichí Páez ¿Por qué esta magnífica tecnología, que ahorra trabajo y nos hace la vida más fácil, nos aporta tan poca felicidad? Simplemente, porque aún no hemos aprendido a usarla con tino A. Einstein Esta nueva Ley Orgánica de Ciencia, Tecnología e Innovación (LOCTI) está en vigencia desde el 1° de enero de 2006 y su reglamento desde el 17 de octubre del año pasado. El propósito fundamental de dicho instrumento legal es estimular el progreso tecnológico de Venezuela, tendente a fortalecer el impulso endógeno promovido por el actual régimen; así como también reafirmar la innovación, la creatividad, el avance de la gestión social del conocimiento, por medio del desarrollo del talento humano con una extraordinaria participación activa tanto del sector empresarial como del académico. A pesar de las grandes oportunidades para el avance tecnológico que conlleva la aplicación de esta Ley, en los actores principales de estos escenarios se había hablado muy poco y se conoce muy poco sobre el contenido de la misma. Y -como suele suceder con el comportamiento del venezolano, que deja todo para última hora-, de acuerdo con la declaración del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, las empresas tienen la obligación de presentar antes del 30 de los corrientes su Plan de Inversiones y Aportes, el cual debe tener mucha coherencia con los planes estratégicos de las organizaciones; de igual manera, debe ir acompañado por el Informe Anual Consolidado. En el sector industrial están en ese corricorri. La LOCTI identifica las empresas grandes como aquellas que obtuvieron durante el ejercicio de 2005 ingresos anuales de 100 mil unidades tributarias o más, es decir Bs. 2.940 millones, recordando que para dicho año la unidad tributaria era de Bs. 29.400,00 y esta nor-
mativa prevé que la contribución (CCTI) de dichas organizaciones es de 0,5% de sus ingresos brutos anuales, y las empresas que estén dentro de este parámetro de ingresos deben presentar antes del 30-03-2007 su proyecto de inversión. Se calcula que en esta primera oportunidad las grandes empresas deberán hacer un aporte, antes de la fecha indicada anteriormente, de 1,5 billones de bolívares. En caso de no hacerlo tendrán una multa de 1,5 veces del CCTI. Los organismos del Estado responsables de la fiscalización y control de este nuevo instrumento legal, son el Seniat y el Ministerio de Ciencia y Tecnología. Esta nueva Ley representa una gran oportunidad para el personal de investigación de las universidades, por cuanto desde el pasado mes de diciembre, está abierto el portal del Obser vatorio Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (ONCTI), para publicitar proyectos a ser financiados con los aportes de las empresas. Esta cifra significativa de las aportaciones de las empresas grandes, debería estimular a los investigadores universitarios a publicitar sus trabajos de investigación en el portal ONCTI. ¿Cuáles proyectos de investigación serán financiados por este organismo? En general, todos los que puedan ser considerados, en criterio del MCTI, como inversión en ciencia, tecnología e innovación (CTI) y sus aplicaciones. Muchos de estos temas de investigación están desplegados en el artículo 42 de la LOCTI. De acuerdo a dicho artículo, las contribuciones están enmarcadas dentro de las siguientes áreas: 1) Inversiones en proyectos de innovación relacionados con la actividad de la empresa; 2) Inversiones en actividades de Investigación y Desarrollo (ID); 3) Inversiones en fortalecimiento de talento humano nacional; y 4) Cualquier otra actividad que a criterio del MCTI, pueda ser considerada inversión en CTI y sus aplicaciones. Para el sector industrial también representa una gran oportunidad, por cuanto
la LOCTI les brinda la oportunidad de hacer inversiones en proyectos de innovación relacionados con la actividad de la empresa. Entre dichos proyectos se pueden mencionar los siguientes: 1) Sustitución de la materia prima; 2) Creación de redes de cooperación productivas con empresas nacionales; 3) Utilización de nuevas tecnologías para aumentar la calidad productiva; 4) Participación en actividades de investigación y desarrollo en universidades y otras instituciones de educación del país, para la introducción de nuevos procesos tecnológicos, organizacionales y gerenciales; nuevos productos, exploración de nuevos mercados y en general, procesos de innovación con miras a mejorar la competitividad y calidad productiva; 5) Formación del talento humano en normativa, técnicas, procesos y procedimientos de calidad; 6) Financiamiento de patentes nacionales; y 7) Participación o creación de viveros o incubadoras de las Empresas Nuevas de Base Tecnológica (ENBT). Se termina el espacio de esta semana con la siguiente frase de Goethe: ¡No basta saber, se debe también aplicar! No es suficiente querer, se debe también hacer. (*) Muchas de las ideas y conceptos desarrollados en este escrito son el resumen de la entrevista sostenida en el programa Gerencia en Acción por NCTV, con el Dr. A. Ardón y el Lic. Luis M. Martínez, presidente de Fundacite y consultor empresarial de Door Training, respectivamente. gerencia_en_accion@cantv.net
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Cuadernos de la Secretaría: razón de ser REDACCIÓN. El Profesor Pedro Villarroel, Secretario de la Universidad de Carabobo, nos ha atendido en su oficina para dar a conocer a través de este medio y para todos nuestros lectores la razón de ser y objetivo de esta nueva publicación universitaria "Cuadernos de la Secretaría".
—¿Cómo se origina esta idea? —La Secretaría ha venido realizando, con el apoyo de un equipo de profesores de la Universidad de Carabobo, un conjunto de actividades especiales. Por ejemplo, simposios, coloquios, foros y seminarios donde se han analizado temas de interés colectivo; finalizadas y evaluadas estas actividades, en un espacio de discusión académica, entre el equipo de profesores, que me acompañan en esta labor, entre ellos Nelson Acosta Espinoza, Gustavo Miranda, Ciro Vargas, Freddy Cárquez y Miguel Megias, ha surgido la idea de compartir con la comunidad universitaria temas de actualidad, analizados desde diferentes perspectivas. De esta manera, nace la idea de editar lo que hemos denominado “Cuadernos de la Secretaría”. Posteriormente, se integraron al equipo los profesores Faver Páez, Orlando Arciniegas y Julio Mórquez.
—¿Realizar estas ediciones es labor de la Secretaría? —Por supuesto, la actividad académica no tiene límites establecidos; y desde cualquier tribuna universitaria se pueden realizar acciones que favorezcan la relación Universidad-Sociedad. Además, esta iniciativa se enmarca dentro de un “Proyecto de Plataforma Comunicacional”, que aspira producir insumos intelectuales que enriquezcan el debate intelectual y académico. Igualmente, incidir en la discusión de temas de relevancia en el acontecer nacional e internacional.
—¿Cuál es el objetivo de este “Proyecto de plataforma comunicacional”? —Su objetivo general es institucionalizar una plataforma de comunicación permanente y actualizada que permita difundir las actividades, procesos y proyectos realizados por la Secretaría. Entre sus objetivos específicos, puedo mencionar: 1.- Editar folletos institucionales en relación con nuestro acer vo histórico universitario; temas educativos de interés; gestión universitaria, entre otros. 2.- Institucionalizar como una política novedosa de la Secretaría, la realización de simposios, coloquios, seminarios, entre otros, que propicien espacios de reflexión, sobre temas de interés para la comunidad, que fortalezcan los vínculos universidad-sociedad.
El Secretario de la UC, Pedro Villarroel mientras conversa con el periodista.
—¿Este Cuaderno es la primera publicación de la Secretaría? —Es importante acotar que paralelamente a este primer Cuaderno, se publicó el 1er folleto institucional "Soy UCISTA”, con la “Historia y Símbolos de la Universidad de Carabobo”; con lo cual se concreta esta política novedosa de extensión universitaria, adscrita a la Secretaría de nuestra Alma Mater.
—¿Cuál es el alcance de la misma? —Como la versión también se publicará en la Web, considero que al ser evaluada su receptividad, estaremos en capacidad de establecer sus alcances; ahora bien, si la audiencia universitaria y en general apoya esta iniciativa, como lo ha hecho con los simposios, coloquios y seminarios realizados por este Despacho; estos Cuadernos de la Secretaría tienen el éxito garantizado; puedo afirmar, que es una labor realizada con mucha mística y profesionalidad. Para finalizar, quiero decir, que constituyen un aporte para la gestión del cambio y la mejora de la educación superior, acorde con las exigencias sociales y por ende, la modesta contribución de este equipo en la firme convicción de repensar nuestra Universidad y la relación con su entorno.
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Cuadernos de la Secretaría, Nº 1 Dada su importancia, transcribimos a continuación, como un servicio a nuestros lectores, este importante artículo de la Ley Orgánica de Ciencia, Tecnología e Innovación.
Artículo 42 de la LOCTI, en que se fundamentan los proyectos. Actividades Consideradas Aporte e Inversión en Ciencia, Tecnología, e Innovación y sus Aplicaciones Artículo 42. A objeto del aporte que deben realizar los integrantes del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación y las empresas, de acuerdo con lo establecido en los artículos 34, 35, 36, 37 y 38 de la presente Ley, las siguientes actividades serán consideradas por el órgano rector como inversión en ciencia, tecnología, innovación y sus aplicaciones:
1. Aportes financieros en programas y proyectos contemplados en el Plan Nacional de Ciencia Tecnología e Innovación, ejecutados a través de acuerdos con el Ministerio de Ciencia y Tecnología o con los entes adscritos. 2. Aportes a fondos dependientes del Ministerio de Ciencia y Tecnología. 3. Aportes a organismos adscritos al Ministerio de Ciencia y Tecnología. 4. Inversión en proyectos de innovación relacionados con las actividades de la empresa, que involucren la obtención de nuevos conocimientos o tecnologías en el país, con participación nacional en los derechos de propiedad intelectual, entre otras:
a) Sustitución de materias primas o componentes para disminuir importaciones o dependencia tecnológica. b) Creación de redes de cooperación productivas con empresas nacionales. c) Utilización de nuevas tecnologías para incrementar calidad productiva de las empresas. d) Participación, Investigación y Desarrollo de las universidades y centros país en la introducción de nuevos procesos tecnológicos, esquemas gerenciales y organizativos, obtención de nuevos productos o de los procedimientos, exploración de nuevos mercados y en general procesos de innovación en el ámbito de las actividades y fines de las empresas, con miras a mejorar su competitividad y calidad productiva.
e) Formación del talento humano en normativa, técnicas, procesos y procedimientos de calidad, relativos a las empresas nacionales. 5. Financiamiento de patentes nacionales. 6. La creación o participación en incubadoras o viveros de empresas nacionales de base tecnológica. 7. Participación en fondos de garantías o de capital de riesgo para proyectos de innovación o investigación y desarrollo. 8. Inversión en actividades de investigación y desarrollo que incluyan: a) Financiamiento a proyectos de investigación y desarrollo de carácter individual o realizados con participación de Universidades o Centros de Investigación y Desarrollo a través de convenios o contratos. b) Creación de unidades o Centros de Investigación y Desarrollo en el país que se incorporen al Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación. Continúa en la página siguiente
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Cuadernos de la Secretaría, Nº 1 Artículo 42...Viene de la página anterior c) Creación de bases y sistemas de información de libre acceso, que contribuyan con el fortalecimiento de las actividades de la ciencia, la tecnoogía, la innovación y sus aplicaciones. d) Promoción y divulgación de las actividades de ciencia, tecnología, innovación y sus aplicaciones, realizadas en el país. e) Creación de premios o estímulos de programas de fomento a la investigación, el desarrollo o la innovación. f) Financiamiento para la organización de reuniones o eventos científicos. g) Consolidación de redes de cooperación científica, tecnológicas y de innovación a nivel nacional e internacional. h) Formación de unidades de vinculación entre Centros de Investigación y Desarrollo y las empresas, para procesos de transferencia tecnológica. 9. Inversión en actividades de fortalecimiento de talento humano nacional que incluyan: a) Organización y financiamiento de cursos y eventos de formación, actualización y capacitación tecnológica en el país. b) Fortalecimiento de Centros de Investigación y Desarrollo, así como a post grados, maestrías, doctorados o equivalentes, relativos a actividades reguladas por esta Ley, en universidades o instituciones de educación superior en el país.
c) Financiamiento de becas para estudios a nivel técnico, de mejoramiento, capacitación, actualización y de post grado para el personal que labora o sea incorporado en la empresa o en una red de empresas nacionales. d) Programas permanentes de actualización del personal de la empresa con participación de Universidades u otras instituciones de educación superior del país. e) Financiamiento de programas o convenios empresariales de inserción laboral de personal venezolano desempleado altamente capacitado. f) Financiamiento a programas de movilización de investigadores, creación de post grados integrados a nivel nacional, de redes de investigación nacionales e internacionales.
g) Programas para fortalecer la capacidad de la gestión nacional pública y privada en ciencia tecnología e innovación. h) Financiamiento de tesis de post grado y pasantía de investigación de estudiantes de educación superior en Universidades, o en el seno de la empresa o en centros de investigación y desarrollo.
i) Promoción y divulgación de las actividades de los centros de formación, actualización y capacitación tecnológica del país, a nivel nacional e internacional.
j) Creación de centros nacionales de capacitación técnica en nuevas tecnologías o apoyo a las existentes. 10. Cualquier otra actividad que en criterio del Ministerio de Ciencia y Tecnología pueda ser considerada inversión en ciencia, tecnología, innovación y sus aplicaciones.
Parágrafo Único: El Reglamento de la presente Ley establecerá los mecanismos, modalidades y formas en que los sujetos señalados en este Título realizarán los aportes a que están obligados, así como también los lapsos y trámites que se deberán realizar ante el Ministerio de Ciencia y Tecnología para la determinación de las actividades que serán consideradas a los efectos de los aportes.
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Artículo reproducido del periódico Tal Cual del 9 de marzo de 2007 Especial Viernes 09 de Marzo de 2007
TECNOLOGÍA En el limbo $900 millones para ciencia y tecnología La Ley de Ciencia, Tecnología e Innovación recibirá su primera gran masa de bolívares, unos dos billones, pero las empresas privadas ven en el aporte de entre 0,5% y 2% de sus ingresos brutos, un tributo más a pagar que un aporte real para el mejoramiento del país en el tema del desarrollo Coordinado por: William Peña, williampm@intercable.net.ve Las empresas no saben que hacer y pareciera que el Ministerio de Ciencia y Tecnología tampoco. El 31 de este mes, vence el plazo para la declaración del Impuesto Sobre la Renta y con ello, también vence el tiempo que tienen las empresas venezolanas para declarar sus aportes a la Ley de Ciencia, Tecnología e Innovación durante 2006. Sin embargo, muchas de ellas, por no decir el 100%, aún no saben que hacer, no tienen idea de cómo se manejarán los recursos que cancelarán en el ISLR este año y, por ende, una gran mayoría no ha colocado hasta ahora un bolívar en proyecto alguno en el país. Desde los bancos, petroleras, empresas mineras, hasta todas aquellas compañías que generen más de 100 mil unidades tributarias en ingresos anualmente (unos 3,7 millardos de bolívares tasados a unidad tributaria de hoy día), tienen la obligación, desde este año, contando sus ingresos del 2006 y la publicación en Gaceta Oficial de la Ley y el decreto el año pasado, de aportar entre el 0,5% de sus ingresos brutos (empresas privadas que operan en el país), hasta el 2% (empresas del sector hidrocarburos y energética). Las empresas que obtienen recursos del Estado también deberán hacer un aporte, pero éste estará ubicado entre el 0,1 y 05% de sus ingresos brutos. En total, se estima que el Estado recibirá unos 900 millones de dólares (casi dos billones de bolívares) que servirán para comenzar el proceso de asignación
de recursos para el desarrollo del país en materia tecnológica. Pero el camino es largo y tortuoso. Hasta hoy día, poco se sabe de la Ley y su aporte al desarrollo del país, no existe un sistema de educación al respecto y en la gran mayoría de las empresas saben muy poco acerca de lo que deben hacer. Es tal el nivel de desinformación que, en muchos casos, compañías de gran importancia han procurado la contratación de personal para asimilar lo que tendrán que hacer desde ya, además de la búsqueda de proyectos para financiar. Unas cinco mil empresas tendrán que declarar este año y aportar un poco de sus ingresos para el inicio de lo que podría denominarse como una oportunidad para que el país avance en temas de desarrollo tecnológico, aunque lamentablemente, en el propio Gobierno, aún no saben que hacer con esos recursos. Es importante aclarar que las empresas que hayan destinado alguna parte de sus recursos al desarrollo tecnológico interno o que hayan apoyado algún tipo de despliegue o concretado alguna inversión en el tema de la ciencia, tecnología e innovación, tendrán que declararlo en su ISLR, pues ello les repercutirá en una disminución del pago total.
NO ES UN IMPUESTO El constante cerco que tienen las empresas privadas en el país, las ha llevado a pensar que el aporte de sus ingresos brutos a la Ley de Ciencia, Tecnología e
Innovación es un impuesto camuflado más que el Estado les pechará, pues muchas de ellas no confían en el verdadero espliegue de esos montos para lograr aumentar el desarrollo tecnológico de la nación. Un ejecutivo empresarial del sector que prefiere reservar su identidad comenta que en otros países las empresas no sólo desarrollan aplicaciones de negocios y proyectos para el crecimiento interno y para mejorar su relación con la sociedad, sus clientes y entorno, sino que también contribuyen con la sociedad a través de programas de incentivos para incrementar la investigación en temas como la ciencia, tecnología e innovación apoyando proyectos específicos que benefician al país. “Pero en Venezuela es casi seguro que los aportes se destinarán a proyectos progobierno y que poco aportarán al desarrollo que se busca a través de la Ley. Aquí todo es político y lo que las empresas tendrán que hacer, desde ahora, será desarrollar proyectos propios de mejoras en su negocio y buscar financiar proyectos relacionados, para que su aporte realmente sea efectivo dentro del objetivo de la Ley. Es lamentable, pero no hay confianza en quien impulsa la Ley: El Estado”. Las universidades e institutos de investigación, podrían ser los grandes beneficiarios de la Ley, pero en el interno, muy poco hacen para desarrollar y dar a conocer lo que están haciendo sus alumnos e investigadores.
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Algunas interrogantes sobre la aplicación de la LOCTI Miguel A. Megias, miguelangelmegias@gmail.com* Una lectura detenida de la Ley Orgánica de Ciencia, Tecnología e Innovación (LOCTI) y su reglamento nos lleva a hacernos algunas interrogantes. En el artículo 4 del Reglamento, tenemos: "Las universidades o instituciones de educación superior, unidades, institutos o centros de investigación y desarrollo, y cualquier otra institución, pública o privada que deseen ser beneficiarias de los aportes e inversiones que realicen las Grandes Empresas, deberán inscribirse por ante el Obser vatorio Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación..." Al decir, “cualquier otra institución, pública o privada" está claro que cualquiera (universidad, persona, empresa, cooperativa, fundación, etc.) puede acceder a los aportes a que se refiere el reglamento. Solo se requiere la inscripción en el Obser vatorio... y lograr convencer a las empresas aportantes que la inversión es beneficiosa para ellas. El Ministerio de Ciencia y Tecnología, en este caso, solo actúa de mediador o árbitro. Más adelante, el reglamento, en su artículo 7 dice: "Los aportes e inversiones a que se refiere el Título III de la Ley... podrán ser efectuados, según convenga a los obligados, bajo las siguientes modalidades: a) ... b) Transferencia de cantidades líquidas de dinero a otros organismos, organizaciones, entes o instituciones públicos o privados, que serán los encargados de su ejecución." Es decir, las empresas pueden aportar dinero a los encargados de la ejecución de los proyectos y estos pueden ser entes públicos o privados. Tal parece que el dinero puede fluir , directamente y sin tra-
bas, desde la empresa hacia el responsable del proyecto. Y aquí surje la primera gran interrogante: ¿Estaremos en una situación donde los propios investigadores pueden obtener fondos, directamente, sin inter vención de la universidad? Da la impresión que si un investigador sale, maletín en mano, a promover su proyecto y obtiene recursos, tales recursos serán administrados por el responsable del proyecto. ¿Como queda, en ese caso la universidad? ¿Le alquilará los laboratorios a los profesores? ¿Les cargará los gastos generales de luz, teléfono, etc., a los investigadores? ¿Y podrán estos investigadores, u otros profesores adjuntos al proyecto, cobrar por sus ser vicios?¿Se han percatado las autoridades sobre el problema que hay para pagar a los investigadores? Otras universidades han resuelto esto mediante la contratación con fundaciones. Más adelante, en el artículo 9, el reglamento dice: "En el caso que el aporte se realice a un organismo, órgano o ente público, no será necesario que los recursos estén destinados a la ejecución de un programa, proyecto o actividad concreta..." Lo que nos lleva a la más interrogantes: ¿los recursos obtenidos se pueden usar, arbitrariamente, para financiar cualquiera de los proyectos enunciados en la página Web de la Universidad? Si es así, ¿quien establece la viabilidad, las prioridades, el seguimiento, la revisión, la pertinencia, el uso de equipos, reactivos y suministros y otros aspectos de los proyectos? ¿Podrá la administración universitaria, con su estructura actual acometer estas novísimas tareas? ¿Con que recursos humanos se cuenta para la formulación y desarrollo de los proyectos? Hasta ahora, estos interrogantes no han sido contestados por ninguna autoridad aunque sabemos que el tema está latente y que, sin duda, se debatirá.
Por lógica, el Consejo de Desarrollo Científico y Humanístico (CDCH), creado precisamente para el manejo de proyectos de investigación y la Estación de Promoción y Desarrollo Tecnológico, de la facultad de ingeniería parecieran ser los entes mas adecuados para el desarrollo de los proyectos.. Y nos preguntamos: ¿porque el CDCH no ha tenido actuación en referencia a la LOCTI? ¿Qué papel juega el CDCH o la Estación en todo esto? Creemos que estos son los organismos naturales para administrar y ejecutar proyectos: disponen de infraestructura, personal, reglamentos, y tradición cultural, pero hasta el momento no hemos escuchado su voz. ¿Estaremos en los umbrales de la creación de un CDCH rectoral o, pero aún, de siete CDCHs de las facultades? Hay todavía muchas interrogantes no resueltas; y a medida que indagamos en los detalles de la implantación de la Ley surgen más preguntas. Desde el rectorado la LOCTI se ha manejado, hasta el momento, para captar recursos líquidos y para promocionar los proyectos en la págia Web. Por la premura, tal vez, se han soslayado muchos otros aspectos que después del 30 de marzo tendrán que ser debatidos y aclarados. Por último, es obligante comentar que no en balde la vocación primigenia de nuestras universidades ha sido, por muchos años, la docencia y no la investigación o la extensión. Tenemos la esperanza de que a partir de ahora cambie el esquema, se de un debate profundo y las universidades se puedan convertir, principalmente, en grandes centros de desarrollo. Así, la docencia será una consecuencia natural de la investigación. * Premio Nacional al Desarrollo Tecnológico (CONICIT, 1982
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Lecturas Dominicales, diario El Carabobeño, marzo 18, 2007
Preocupa el desconocimiento de la LOCTI Estamos experimentando un replanteamiento de la Ciencia Alfredo Fermín El profesor Mario Petrizzelli, director fundador de la Escuela de Ingeniería de Telecomunicaciones de la Universidad de Carabobo, considera que la LOCTI representa una alternativa interesante para dinamizar todos los procesos de mejoramiento de la calidad de vida de la sociedad, porque impacta el mundo científico, tecnológico, académico, la empresa y su entorno. Petrizzelli confiesa que está preocupado por el desconocimiento que existe para la aplicación de esta ley (promulgada el 3 de agosto de 2005 y reglamentada en octubre de 2006) porque la considera un instrumento que tiene por objetivos elevar la capacidad científico, tecnológica y de innovación de todos los sectores productivos del país: las instituciones que hacen ciencia, tecnología, docencia a nivel superior y las empresas que desarrollan y producen tecnología. No obstante, esta ley ha sido recibida como un nuevo impuesto que deben pagar los empresarios. - La ley es vista como un tributo. Pero se trata de un tributo que deber ser invertido en instituciones que hacen desarrollo científico tecnológico para el sustento de las empresas y hacerlas más competitivas, más eficientes y para mejorar el nivel cualitativo de los productos, el ambiente y otros aspectos, que impactan al sector productivo, directa o indirectamente. - La ley tiene una limitación en cuanto a los aportantes, que son todas aquellas instituciones definidas como grandes empresas que tienen ingresos brutos por encima de cien mil unidades tributarias. - Esto significa que en 2005 correspondieron casi a 3 millardos de bolívares; en 2006 tres millardos y medio y, este año, serán casi cuatro millardos de bolívares. ¿Cómo será distribuido ese dinero? - Existen los aportantes y los beneficiarios. Dentro del Ministerio de Ciencia y Tecnología hay el Obser vatorio Nacional de Ciencia y Tecnología en el cual, los que quieren ser beneficiarios, sean públi-
cos o privados, tienen que inscribir sus proyectos cuyos objetivos fundamentales sean el desarrollo de la ciencia, la tecnología y la innovación. - Los aportantes deben dirigir los recursos a los proyectos inscritos. Por ejemplo, la Universidad de Carabobo ha inscrito una cantidad de proyectos. La Fundación de Ciencia y Tecnología ha inscrito una cantidad de proyectos al igual que instituciones privadas. El aportante puede, a través de Internet, visualizar y considerar un proyecto específico que le parezca importante o que pueda repercutir en los procesos de su organización. - Las empresas pueden constituir planes de inversión en tecnología. En estos casos, en vez de hacer el aporte a terceros, pueden, a través de un plan de inversión, inscribir sus proyectos en el Obser vatorio, para que en un plazo de sesenta días lo aprueben o descarten. Pero, si hay silencio administrativo, se da por aprobado. Si no es aprobado se puede apelar para una reconsideración. - Si el proyecto se aprueba se pasa a la fase de inversión. Con esto se trata de dinamizar todo lo que es la mesa de negociación de ciencia y tecnología e innovación, para, por un lado, hacer que las universidades participen en la solución de problemas específicos junto con institutos tecnológicos, centros de investigación y desarrollo y la empresa. ¿Las empresas comerciales también deben hacer aportes de acuerdo a la ley? - Muchas empresas están viendo esto como un tributo, argumentando que una empresa comercial tiene poco que innovar. Pero la innovación no es nada más a nivel de equipamiento sino de organización .El software tiene que tener una propiedad intelectual nacional que va, de alguna manera, en beneficio de las instituciones públicas o privadas que desarrollan tecnologías. ¿Cuáles otras bondades encuentra en la Ley de Ciencia y Tecnología? - La ley prevé que no sólo la empresa puede sustituir equipamientos, sino que tiene que haber transferencia tecnológica, lo que significa formación de recursos humanos, por lo cual ese fortalecimiento
mejora la calidad de vida de las personas que allí trabajan. - Por otra parte, está previsto que esa información no debe quedar en las empresas, porque éstas deben buscar alianzas con instituciones educativas para
Una amplia trayectoria Mario Petrizzelli nació en Barinas el 15-9-1956. Estudió en la Escuela Técnica de Valencia, donde obtuvo el título de Técnico Electricista. En la Universidad de Turín (Italia) estudió y se graduó en Física Aplicada. En el Politécnico de Turín se especializó en Técnicas de Calidad Total. En el Instituto Eletrotecnico Nacionale Galileo Ferraris, de aquella misma ciudad, obtuvo el posdoctorado en el área de Metrología Electromagnética en Alta Frecuencia. Es profesor jubilado de la facultad de Ingeniería de la UC, donde entre otros cargos ha sido director de la Estación de Promoción y Desarrollo Tecnológico y director de extensión donde creó el programa de formación de técnicos medios para el desarrollo de emprendedores populares.
transferirlas a través de charlas, convenios y seminarios orientados a dar conocimientos de las tecnologías que se están aplicando. A su juicio ¿cómo está la ciencia en Venezuela? - La situación de la ciencia y la tecnología tiene actualmente una fase interesante. En los años 90, las instituciones universitarias y los institutos de investigaciones (Ivic, Instituto de Ingeniería, Idea) sufrieron una depresión significativa, porque era mucho más fácil invertir importando tecnología sin transferencia, lo cual hizo que muchas instituciones se deprimieran desde el punto de vista intelectual. - El Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas, Ivic, sufrió esa situación por el poco impacto que tenían los estudios que realizaba dentro de los procesos productivos. En los dos últimos años ha habido un replanteamiento de la Ciencia, no sólo en términos del Estado, sino en términos de instituciones públicas y privadas. - Las empresas han constituido en su seno centros de desarrollo de investiga-
Marzo, 2007 ción y tecnología, porque han reconocido la necesidad de invertir en ellas. Desde el punto de vista público es obvio que ha habido un cambio. - El Instituto de Ingeniería tiene una alianza con empresas norteamericanas, alemanas y francesas para el mantenimiento de los submarinos. Esto significa que el Estado ha promovido que, si una empresa extranjera va hacer actividades de innovación, tiene que buscar una contrapartida nacional que permita la transferencia tecnológica. Esto le da fuerza a las instituciones. - La Universidad Central ha participado activamente, el Ivic, el Instituto de Ingeniería muestran que ha habido un replanteamiento de cómo debe afrontarse todo lo que tiene que ver con ciencia y tecnología. - Pienso que, dentro de los procesos de implantación de nuevas tecnologías, el punto fundamental es la transferencia tecnológica. Porque nosotros no vamos a ganar nada comprando un equipo e implantándolo en un proceso productivo -enchufándolo- si no existe una contrapartida nacional que pueda dar un asesoramiento para cuando ese equipo se paralice. - Por eso, creo que la ley será un motor dinamizador que permitirá a las universidades nacionales como la UCV, Carabobo, ULA, mecanismos de financiamiento, no necesariamente del Estado, sino a través de alianzas con instituciones privadas. Lo mismo ocurrirá con instituciones del Estado que van a establecer alianzas con las empresas públicas y privadas para darle solución tecnológica y sustentabilidad al desarrollo de las mismas. - Es una oportunidad interesante porque, al mismo tiempo, pondrá en marcha un mecanismo para autoridades y profesores universitarios, para utilizar el recurso que está en las empresas que requieren soluciones para poder invertir. Pero seguimos dependiendo de la tecnología extranjera. - Definitivamente existe una fuerte dependencia, porque hubo una depresión muy fuerte de diez años que nos ha dejado muy marcados, con una cultura per versa de comprar todo hecho, sin un mínimo de esfuerzo para saber como están hechas las cosas, para poder reponerlas cuando se dañen o repontenciarlas. - Hay una dependencia extraordinaria, pero esto nos ha hecho entender que no
Cuadernos de la Secretaría, Nº 1 podemos seguir en este camino, por lo cual hay que revertirlo. ¿Cómo revertir ese camino? - Con una disposición por parte de las instituciones con talento en ofrecer sus capacidades. Pero, además, a través del mecanismo de financiamiento las empresas van a tener, dentro de ese talento, la posibilidad de resolver sus problemas. ¿Usted cree que en un régimen en el que sólo se favorece a quienes lo apoyan, puedan beneficiarse de la ley opositores que presenten proyectos? - En esto debo decir la verdad. El Obser vatorio Nacional de Ciencia y Tecnología ha manejado esto con transparencia, desde el punto de vista científico y tecnológico. - Si una institución pública o privada somete un proyecto al Obser vatorio para que a través del mecanismo de recepción de aportes, puede hacerlo porque el Estado no tiene intermediación. Aquí es el aportante el que tiene que declarar el aporte y buscar entre los proyectos ofertados los que le sir van al Estado, a la empresa o a la sociedad. - De tal manera que hay un ente que oferta y un ente que demanda. El aporte de recursos es directo. Existen posiciones políticas encontradas entre universidades; por ejemplo, la Simón Bolívar hasta el 15 de febrero había recibido dos millardos de bolívares como aportes de instituciones públicas y privadas, entre ellas Sidor, Pdvsa, Siemens. - La ley es transparente, es una de las pocas leyes en la que el estado sir ve de modulador entre una demanda y una oferta. En la página web del Obser vatorio Nacional está el registro de los proyectos para recibir aportes. Además tiene el control de las empresas que deben aportar por su facturación. Allí están personas naturales que tienen proyectos de ciencia y tecnología. Una empresa que hace aportes, también puede hacerlo, argumentando que se trata de un proyecto estratégico para su desarrollo. Eso me parece extraordinario. ¿Cuál es el futuro de la información y las comunicaciones cuando pareciera que todo está inventado? - El futuro de las comunicaciones y de la informatización es el desarrollo de lo que existe, la aplicación. Aquí entra la innovación que significa mejorar procesos. - Los procesos de comunicación mejoran de manera increíble. De ahora en
Pág. 11 adelante, no vamos a necesitar, para conectarnos con Internet, de la línea telefónica, porque tendremos las redes hiper que permiten conectarse desde cualquier parte. Ya existen sitios que ofrecen ese ser vicio. - Hay un proyecto de Internet social para que las comunidades organizadas, los consejos comunales, a través de la red, puedan poner toda la información sobre sus actividades. - El Internet social dará la posibilidad de pagar impuestos, hacer una solicitud, por ejemplo, de la partida de nacimiento, pues habrá una firma electrónica. Existirán mecanismos de comunicación muy abiertos que obligarán al Estado a ser más eficiente. Ciencia en la UC ¿Qué se está haciendo en la Universidad de Carabobo en materia de Ciencia y Tecnología? - La Universidad de Carabobo tiene muchas actividades tecnológicas cuando los estudiantes presentan sus tesis y cuando los profesores hacen investigaciones. Eso queda en forma embrional porque no hay inversión tecnológica que lo respalde, ni la transferencia a las empresas. - Con la nueva ley, esos embriones pueden transformarse en proyectos que entren en la cadena productiva, que impacten a la sociedad en las áreas de ingeniería, medicina, organizaciones empresariales y estudios sociales. - La Universidad de Carabobo cuenta con potencialidad enorme. Pero tiene la limitante del ordenamiento burocrático para dar respuesta a las empresas. Las universidades tienen que dinamizarse sin esperar que el rector y la consultoría Jurídica decidan lo que se va a hacer con un proyecto, cuando hay una contrapartida que son empresarios y sociedad que demandan solución en tiempo real, inmediato. - Tienen que buscar mecanismos para dinamizarse porque los recursos van a ser asociados a los proyectos específicos y, las autoridades universitarias no podrán jamás utilizar esos recursos para cosas distintas a proyectos que deben ser financiados por la ley. - Por eso, hago un llamado a que nos preparemos como universitarios para dar respuesta, en los tiempos que requiere la sociedad.
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Cuadernos de la Secretaría, Nº 1
Marzo, 2007
Wladimir Zabaleta cincuenta años de vida artística Conversación con el artista REDACCION. Nos encontramos en el estudio de Zabaleta, rodeados de bellas obras de arte, papeles, pinceles y todo tipo de objetos del oficio. Mientras hablamos, Wladimir sigue dibujando, dibujando, esbozando lo que, tal vez, sea otra gran obra mas adelante —¿Cómo ves la relación entre ciencia y artes visuales? —En principio toda creación plástica se encuentra sustentada sobre una base técnica. Ello es así, porque de lo contrario esta propuesta se transformaría en una comunicación mente-mente, la cual no existe. —En cierto sentido podríamos afirmar que toda civilización se sustenta en torno a dos principios: la subsistencia, por un lado y, por el otro, el sistema ideográfico de representación. Por esta razón el arte se anticipa al desarrollo tecnológico a la ciencia y el lenguaje. —A su juicio ¿el lenguaje pictórico antecede al fonético y al escrito? Es decir, ¿al inicio pensábamos en imágenes? —Desde luego, al principio de la vida cultural no se podía hablar de pensamiento en sentido lógico matemático. Sin embargo, existía comunicación en otro sentido. A través de imágenes que describían tecnologías y estrategias. Por ejemplo, el lugar donde debía ser herido el animal al momento de la caza (cuevas de Altamira, en España); estrategias de cómo atraparlo, como rodearlo. En otras palabras, esta representación implicaba un discurso lógico que revelaba el naci-
El artista Zabaleta, trabajando en su estudio miento de la imaginación aplicada a un lenguaje. Esta ruptura, en si misma, constituye un ejemplo del nacimiento del mundo tecnológico —Un resumen de tus cincuenta años de vida pictórica: —Lo mejor que he hecho en estos 50 años es haber vivido como artista. Ser artista —¿Es fácil ser artista hoy? —Nunca es fácil. Cuando hay mucho apoyo aumenta sensiblemente la competencia y cuando no lo hay, aumenta la subsistencia. El problema es poder subsistir y crear finalmente un poema.
Boceto de una obra de arte, Wladimir Zabaleta
Algunos datos biográficos Nació en mayo de 1944. Se graduó en la Escuela de Artes Plásticas Arturo Michelena, donde se destacó por ser el mejor alumno de su promoción, y gracias a ello ganó una beca para estudiar en París. Ha cosechado mucho éxitos; ha expuesto en Europa, Estados Unidos y, desde luego, en las salas más importantes de Venezuela. La temática de sus obras en los últimos años constituye una reflexión estética sobre las propuestas de artistas de Velásquez, Goya y EL Greco. Se encuentra residenciado en Valencia después de 50 años de vida artística ininterrumpida.