Para resolver problemas grandes, busca pequeñas victorias En lugar de llevar a cabo cambios audaces y radicales, la mejor forma de generar cambios organizacionales es a través de cambios pequeños, graduales y persistentes en el tiempo, conocidas como Pequeñas Victorias o “Small Wins”.
Está demostrado que esta práctica de liderazgo genera mayor alegría, mayor engagement y aumenta la creatividad en los espacios de trabajo. Para iniciarte en el camino de las pequeñas victorias, te recomendamos buscar una acción concreta, que se pueda llevar completa a término y cuya implementación genere un cambio de moderada importancia dentro de tu equipo. Por ejemplo, puedes convertir hoy la entrega de feedback en algo periódico ¡Los resultados pueden sorprenderte!