Manning
T E X T O :
D A V I D
M O R E U
¡Menudo currículo el de este músico a la sombra! Desde Bobby Fuller a Isaac Hayes, de Big Star a Staple Singers, de Steve Cropper a Lenny Kravitz, de Jimmy Page a Leon Russell… ¡Sin olvidar a Shakira! Pura historia del rhythm and blues…
una estrella EN LA SO MBRA a historia del rock’n’roll es muy caprichosa y está repleta de acontecimientos fortuitos que pueden convertir a un artista en una gran estrella o en una figura de culto en el breve suspiro que dura un single de 45 rpm. Es el caso de Terry Manning, un guitarrista apasionado por el R&B que se trasladó a la ciudad de Memphis a mediados de la década de los sesenta y logró cumplir su sueño de entrar en Stax Records como ingeniero de sonido sin apenas experiencia. Aquella oportunidad le abrió las puertas de los recién inaugurados Ardent Studios y no tardó en dar el salto a la producción gracias a un talento innato en la mesa de mezclas. Aquella posición privilegiada le permitió entablar amistad con algunas de las mayores figuras del rock, del pop y del soul de aquella época tan marcada por la segregación racial, dando lugar a colaboraciones que podrían haber cambiado su vida por completo… si no fuera porque él prefería seguir con su trabajo en la sombra y experimentar con nuevas tecnologías de grabación. ¿Qué habría sucedido si Terry Manning hubiera permanecido en Big Star o hubiera aceptado la invitación de unirse a The New Yardbirds? Es fácil dejarse llevar por la mitomanía, pero los amantes de la música salieron ganando con la consolidación de un profesional que nunca ha perdido la pasión por aportar su magia en todos los proyectos donde ha participado, desde Isaac Hayes y los Staple Singers, hasta ZZ Top, Led Zeppelin o Lenny Kravitz. Después de esta presentación frenética, lo mejor será que el propio Terry Manning nos desvele los entresijos de su carrera y anécdotas de su faceta como fotógrafo que inmortalizó un período irrepetible. Tu aventura musical empezó en El Paso, Texas, pero acabaste trabajando en Memphis, Tennessee, la capital del rock’n’roll. ¿Cómo era esa ciudad a mediados de los sesenta? Siendo adolescente tocaba con mi banda, Terry Manning & The Wild Ones, en El Paso. Aunque mi familia se mudó a Memphis y yo estaba emocionado con el cambio de ciudad porque tenía varios singles de sellos locales como Satellite y Stax Records. Cuando llegamos no me di cuenta, pero allí se vivía una época muy agitada por culpa de la segregación racial, puesto que blancos y negros no iban a las mismas escuelas y apenas se relacionaban entre ellos. Sin embargo, nada de eso me importaba y, tan pronto me surgió la oportunidad, hice dos cosas: primero me uní a una banda llamada Bobby & The Originals y después fui en autobús al estudio de Stax con mi guitarra a cuestas. Estaba convencido de que conseguiría un trabajo, un contrato discográfico o meter un pie en el negocio musical. Aquella banda tenía cierta fama en la ciudad y yo sustituí a su teclista, además de tocar la guitarra rítmica y hacer coros. Actuamos por los clubes de Memphis y, al cabo de un tiempo, nos fichó John Fry para su sello Ardent Records. Entonces pasamos a llamarnos Lawson And Four More, Jim Dickinson produjo nuestros singles y nos hicimos bastante famosos en el circuito de Tennessee, Mississippi y Arkansas. Steve Cropper te ayudó a entrar en Stax como asistente de 76 | RUTA 66
Terry Manning, guitarrista y productor, es también fotógrafo; trabajó para NME y ha publicado libros fotográficos y protagonizado exposiciones
ingeniero de sonido. ¿Qué atmósfera se respiraba en el famoso Studio A donde se grabaron tantos éxitos del soul? Al llegar a Stax me encontré con Deanie Parker, una chica que trabajaba en recepción y me dejó pasar unos minutos. Pero cuando ya estaba a punto de marcharme, entró Steve Cropper, me vio allí plantado con la guitarra y nos sentamos a hablar. Supongo que conectamos y le dije que estaba interesado en trabajar en el estudio, ya fuera cantando, tocando, componiendo, haciendo de ingeniero de sonido o produciendo. Como puedes imaginar, apenas tenía experiencia, aunque estaba convencido de que podía hacerlo bien. Steve me llevó dentro, me mostró la sala donde hacían las copias de las cintas y me preguntó si quería ayudarles en esa tarea después del instituto. ¡Evidentemente acepté! Al cabo de unas cuantas semanas, alguien no se presentó para hacer de ingeniero en una sesión y me arrastraron dentro de la cabina de control para que lo intentara. Toqué los botones suficientes para que el sonido entrara y así empecé una nueva carrera profesional. Por las mismas fechas entraste a trabajar en Ardent Studios como primer empleado y viviste su consolidación como uno de los estudios más legendarios de Memphis… John Fry era una gran persona y se convirtió en un amigo durante toda su vida. Él siempre se preocupaba por todo, me ayudaba mucho y le encantaba enseñar las cosas que había aprendido sobre técnicas de grabación. Era un ingeniero de sonido excelente, a pesar de que abandonó esa faceta profesional para dedicarse a la vertiente empresarial. Ten en cuenta que John empezó a grabar en un pequeño estudio en su casa, yo le ayudé a dar el salto comercial con los nuevos Ardent Studios y pasé a ser el primer empleado. Entonces Stax se convirtió en uno de nuestros clientes principales porque necesitaban un estudio alternativo donde grabar a sus artistas. Tuve la suerte de trabajar al mismo tiempo en Stax y en Ardent. Realmente era una relación que beneficiaba a todos los implicados y eso me permitió colaborar con gente increíble. En 1972 construimos un nuevo edificio para Ardent en el otro extremo de la ciudad y en aquellos días pasé a ser socio y copropietario junto a John Fry. En los años ochenta le vendí mis acciones y me establecí por mi cuenta. Tu otra gran pasión ha sido la fotografía y tuviste la oportunidad de retratar a Martin Luther King el día antes de que lo asesinaran en el Lorraine Motel. ¿Cómo recuerdas esa jornada tan trágica? Participé en las marchas de «I Am a Man» que se organizaron en Memphis los días antes de la tragedia. El Dr. King se había involucrado en la causa a favor de los basureros de la ciudad que no recibían un trato decente por parte de las autoridades. Él era amigo de Al Bell, vicepresidente de Stax, por este motivo su figura estaba muy presente entre los empleados del sello. Yo acababa de comprarme un precioso Ford Fairlane y, la misma mañana que el Dr. King tenía que llegar a la ciudad para retomar las manifestaciones, Al Bell me telefoneó para pedirme que fuera a recogerlo al aeropuerto junto a su equipaje y su séquito. Me encontré con él justo cuando bajaba del avión y empezaba a andar por los pasillos de la terminal. Lo seguí RUTA 66 | 77
Manning
T E X T O :
D A V I D
M O R E U
¡Menudo currículo el de este músico a la sombra! Desde Bobby Fuller a Isaac Hayes, de Big Star a Staple Singers, de Steve Cropper a Lenny Kravitz, de Jimmy Page a Leon Russell… ¡Sin olvidar a Shakira! Pura historia del rhythm and blues…
una estrella EN LA SO MBRA a historia del rock’n’roll es muy caprichosa y está repleta de acontecimientos fortuitos que pueden convertir a un artista en una gran estrella o en una figura de culto en el breve suspiro que dura un single de 45 rpm. Es el caso de Terry Manning, un guitarrista apasionado por el R&B que se trasladó a la ciudad de Memphis a mediados de la década de los sesenta y logró cumplir su sueño de entrar en Stax Records como ingeniero de sonido sin apenas experiencia. Aquella oportunidad le abrió las puertas de los recién inaugurados Ardent Studios y no tardó en dar el salto a la producción gracias a un talento innato en la mesa de mezclas. Aquella posición privilegiada le permitió entablar amistad con algunas de las mayores figuras del rock, del pop y del soul de aquella época tan marcada por la segregación racial, dando lugar a colaboraciones que podrían haber cambiado su vida por completo… si no fuera porque él prefería seguir con su trabajo en la sombra y experimentar con nuevas tecnologías de grabación. ¿Qué habría sucedido si Terry Manning hubiera permanecido en Big Star o hubiera aceptado la invitación de unirse a The New Yardbirds? Es fácil dejarse llevar por la mitomanía, pero los amantes de la música salieron ganando con la consolidación de un profesional que nunca ha perdido la pasión por aportar su magia en todos los proyectos donde ha participado, desde Isaac Hayes y los Staple Singers, hasta ZZ Top, Led Zeppelin o Lenny Kravitz. Después de esta presentación frenética, lo mejor será que el propio Terry Manning nos desvele los entresijos de su carrera y anécdotas de su faceta como fotógrafo que inmortalizó un período irrepetible. Tu aventura musical empezó en El Paso, Texas, pero acabaste trabajando en Memphis, Tennessee, la capital del rock’n’roll. ¿Cómo era esa ciudad a mediados de los sesenta? Siendo adolescente tocaba con mi banda, Terry Manning & The Wild Ones, en El Paso. Aunque mi familia se mudó a Memphis y yo estaba emocionado con el cambio de ciudad porque tenía varios singles de sellos locales como Satellite y Stax Records. Cuando llegamos no me di cuenta, pero allí se vivía una época muy agitada por culpa de la segregación racial, puesto que blancos y negros no iban a las mismas escuelas y apenas se relacionaban entre ellos. Sin embargo, nada de eso me importaba y, tan pronto me surgió la oportunidad, hice dos cosas: primero me uní a una banda llamada Bobby & The Originals y después fui en autobús al estudio de Stax con mi guitarra a cuestas. Estaba convencido de que conseguiría un trabajo, un contrato discográfico o meter un pie en el negocio musical. Aquella banda tenía cierta fama en la ciudad y yo sustituí a su teclista, además de tocar la guitarra rítmica y hacer coros. Actuamos por los clubes de Memphis y, al cabo de un tiempo, nos fichó John Fry para su sello Ardent Records. Entonces pasamos a llamarnos Lawson And Four More, Jim Dickinson produjo nuestros singles y nos hicimos bastante famosos en el circuito de Tennessee, Mississippi y Arkansas. Steve Cropper te ayudó a entrar en Stax como asistente de 76 | RUTA 66
Terry Manning, guitarrista y productor, es también fotógrafo; trabajó para NME y ha publicado libros fotográficos y protagonizado exposiciones
ingeniero de sonido. ¿Qué atmósfera se respiraba en el famoso Studio A donde se grabaron tantos éxitos del soul? Al llegar a Stax me encontré con Deanie Parker, una chica que trabajaba en recepción y me dejó pasar unos minutos. Pero cuando ya estaba a punto de marcharme, entró Steve Cropper, me vio allí plantado con la guitarra y nos sentamos a hablar. Supongo que conectamos y le dije que estaba interesado en trabajar en el estudio, ya fuera cantando, tocando, componiendo, haciendo de ingeniero de sonido o produciendo. Como puedes imaginar, apenas tenía experiencia, aunque estaba convencido de que podía hacerlo bien. Steve me llevó dentro, me mostró la sala donde hacían las copias de las cintas y me preguntó si quería ayudarles en esa tarea después del instituto. ¡Evidentemente acepté! Al cabo de unas cuantas semanas, alguien no se presentó para hacer de ingeniero en una sesión y me arrastraron dentro de la cabina de control para que lo intentara. Toqué los botones suficientes para que el sonido entrara y así empecé una nueva carrera profesional. Por las mismas fechas entraste a trabajar en Ardent Studios como primer empleado y viviste su consolidación como uno de los estudios más legendarios de Memphis… John Fry era una gran persona y se convirtió en un amigo durante toda su vida. Él siempre se preocupaba por todo, me ayudaba mucho y le encantaba enseñar las cosas que había aprendido sobre técnicas de grabación. Era un ingeniero de sonido excelente, a pesar de que abandonó esa faceta profesional para dedicarse a la vertiente empresarial. Ten en cuenta que John empezó a grabar en un pequeño estudio en su casa, yo le ayudé a dar el salto comercial con los nuevos Ardent Studios y pasé a ser el primer empleado. Entonces Stax se convirtió en uno de nuestros clientes principales porque necesitaban un estudio alternativo donde grabar a sus artistas. Tuve la suerte de trabajar al mismo tiempo en Stax y en Ardent. Realmente era una relación que beneficiaba a todos los implicados y eso me permitió colaborar con gente increíble. En 1972 construimos un nuevo edificio para Ardent en el otro extremo de la ciudad y en aquellos días pasé a ser socio y copropietario junto a John Fry. En los años ochenta le vendí mis acciones y me establecí por mi cuenta. Tu otra gran pasión ha sido la fotografía y tuviste la oportunidad de retratar a Martin Luther King el día antes de que lo asesinaran en el Lorraine Motel. ¿Cómo recuerdas esa jornada tan trágica? Participé en las marchas de «I Am a Man» que se organizaron en Memphis los días antes de la tragedia. El Dr. King se había involucrado en la causa a favor de los basureros de la ciudad que no recibían un trato decente por parte de las autoridades. Él era amigo de Al Bell, vicepresidente de Stax, por este motivo su figura estaba muy presente entre los empleados del sello. Yo acababa de comprarme un precioso Ford Fairlane y, la misma mañana que el Dr. King tenía que llegar a la ciudad para retomar las manifestaciones, Al Bell me telefoneó para pedirme que fuera a recogerlo al aeropuerto junto a su equipaje y su séquito. Me encontré con él justo cuando bajaba del avión y empezaba a andar por los pasillos de la terminal. Lo seguí RUTA 66 | 77
junto al resto de la gente y, aprovechando que llevaba mi cámara, hice trece fotos del Dr. King y de sus ayudantes. Después llevé en mi coche a un par de personas y las maletas hasta el Lorraine Motel. Aquella tarde presencié su último discurso en una iglesia y al día siguiente lo asesinaron. Me afectó mucho, igual que a los empleados de Stax y al resto del mundo. Por curiosidad, ¿cuándo descubriste la magia del blues y cómo surgió tu estrecha amistad con el legendario Furry Lewis? Entonces ya era fan del blues auténtico y tuve la suerte de vivir en la zona donde había nacido ese género. Justo al llegar a Memphis, mi banda actuó en varios clubes y conocí a Furry Lewis, un artista asombroso que manejaba al público como si lo tuviera en la palma de su mano. Él era un habitual de la escena local, sobre todo desde
referencia. Luego llevábamos las cintas a Ardent para grabar las voces, los vientos, los instrumentos adicionales y hacer las mezclas. Yo acabé tocando la marimba, la armónica, las percusiones, los teclados y algunas partes de guitarra. Incluso compuse varios arreglos para vientos y cuerdas. Al Bell me dejaba solo por las noches en el estudio y yo me dedicaba a hacer pruebas. Él regresaba al día siguiente, escuchaba lo que había hecho y se quedaba con lo que funcionaba. Todo lo demás se descartaba. La canción «I’ll Take You There» fue un intento de aportar aires caribeños a una composición de R&B. Al Bell había viajado a Jamaica y a las Bahamas, donde había descubierto aquellos sonidos y quería incorporarlos. También compuse un tema titulado «Heaven» para The Staple Singers que apareció en el disco Be What You Are. ¡Qué emoción escuchar a Mavis cantar tu canción! Más tarde produje Era fan del blues auténtico y tuve la suerte de vivir en la zona donde había ese mismo tema para Joe Cocker y fue otro éxito. nacido ese género. Justo al llegar a Memphis, mi banda actuó en varios clubes gran En 1970 Stax Records se atrevió a editar y conocí a Furry Lewis, un artista asombroso que trabajaba como barrendero Home Sweet Home, tu álbum de debut repleto de temas vanguardistas y distorsionaque lo habían redescubierto porque ya quedaba lejos su carrera de dos. ¿Qué reacción tuvo Al Bell al escucharlo por primera vez? bluesman en los años treinta y cuarenta. En aquellos días trabajaba Ese disco empezó como una broma mientras grababa con The en el anonimato como barrendero en las calles. En 1969 fui a su Box Tops un tema titulado «Choo Choo Train». Una noche, para apartamento cerca de Beale Street y lo grabé mientras cantaba y divertirme con mi amigo Eddie Hinton, compositor de la canción, la tocaba la guitarra en su cama. De ahí salieron dos álbumes que se versioné a mi manera de un modo muy psicodélico y estruendoso. han editado en todo el mundo y espero que aporten algo nuevo a su Al día siguiente puse mi versión en lugar de la suya y Alex Chilton gran legado como músico. dijo que le parecía hilarante. Sin embargo, tanto Eddie como el proUna de tus colaboraciones más destacadas fue con The Staple ductor Dan Penn no pensaron lo mismo. Después le mostré el tema Singers. ¿Qué historia se esconde detrás de la grabación del a Al Bell y, a pesar de que sabía que era una broma, le gustó cómo himno «I’ll Take You There» en los estudios de Muscle Shoals? sonaba y me ofreció un contrato discográfico si hacía un álbum enSteve Cropper llevó el primer disco que los Staple Singers hicie- tero con ese mismo estilo. Entonces grabé unas canciones que paroron para Stax a los estudios de Ardent para hacer las mezclas y algu- diaban varios géneros musicales de Memphis y, de algún modo, nos overdubs. Hacía tiempo que me gustaba su música y tuve la Home Sweet Home se ha convertido en un clásico underground. oportunidad de trabajar con ellos desde el principio. Después Al Bell Toqué todos los instrumentos, excepto la batería, y Chris Bell de Big se encargó de producirlos y me pidió que lo ayudara como ingeniero Star añadió varias guitarras. de sonido y coproductor. Las pistas principales de sus temas se graCuando fundasteis Ardent Records en 1971, una de las primebaban en Muscle Shoals, con Mavis cantando una pista vocal de ras bandas que pisó el estudio fue precisamente Big Star. Aunque tú ya habías tocado con sus miembros en otros grupos… Nuestra primera banda se llamaba Cargoe y Big Star fue la segunda. Asimismo, Chris Bell, Tom Eubanks, Jody Stephens y yo teníamos otro grupo llamado Rock City con el que grabamos un disco que se editó mucho más tarde. Cuando Alex Chilton regresó de Nueva York, donde había pasado una temporada después de la separación de los SOUL LIMBO Box Tops, estaba disponible para unirse a una nueva banda. Entonces Booker T. & The MG’s (Stax, 1968) ayudé a Alex y a Chris a grabar el primer trabajo de Big Star. Ellos El primer álbum que la banda de estudio de Stax Records grabó después de compusieron la mayoría de canciones, tocaban las guitarras y cantala trágica muerte de Otis Redding en un accidente de avión. Se acercaba el ban, mientras Jody se encargaba de la batería. Yo compartí tareas vofinal de una década muy convulsa en Memphis y su sonido instrumental cales con Alex en «When My Baby’s Beside Me», que fue el primer empezó a dar un giro más arriesgado, incorporando nuevas texturas, la single, y entre los tres hicimos los coros. También toqué los teclados versión de una banda sonora de spaghetti western y homenajes explícitos a y algunas partes de bajo, aunque en seguida vino Andy Hummel para estrellas como los Beatles, Aretha Franklin y Jimi Hendrix. Curiosamente, Terry Manning tocó la tocar el resto de pistas de bajo y se unió al grupo. Decidí no formar icónica marimba en el tema homónimo. parte de los directos porque en aquellos días estaba muy ocupado en el estudio. Recuerdo que Chris y yo queríamos que el sonido se pareciera al de los Beatles, pero al estilo de Memphis. Su madre era ingleJAMMED TOGETHER sa y él se sentía muy cercano a la British Invasion. Escuchamos todos Albert King, Steve Cropper & Pop Staples (Stax, 1969) los discos de los Beatles y nos dimos cuenta de que solamente los En 1968 Atlantic Records se quedó con los masters de Stax y entonces Al cuatro miembros aparecían acreditados, a pesar de que otra gente haBell tuvo la brillante idea de lanzar 28 álbumes en un año para volver a bía participado en sus canciones. Tanto la banda como John Fry deciposicionar el sello en el mercado. Uno de los recursos fue grabar varios dieron que debían ser cuatro miembros en las fotos promocionales y duetos y juntar a sus tres guitarristas más emblemáticos en un mismo que nadie más apareciera en los créditos. trabajo (Albert King, Steve Cropper y Pop Staples). Terry Manning compuso En el verano de 1972 fuiste el ingeniero de sonido en la grabay produjo la canción «Trashy Dog», que ya había aparecido en su debut. La leyenda cuenta que la ción del concierto de Wattstax. ¿Cómo viviste ese evento tan pista musical es exactamente la misma y que solo hicieron overdubs de las guitarras. multitudinario que acabó siendo un exitoso documental? Fue un día muy especial, pero se organizó en una época muy agitada. Yo era el director musical de la película y me encargaba de HOT BUTTERED SOUL la grabación de los conciertos, eso me llevó a aparecer como coproIsaac Hayes (Enterprise–Stax, 1969) ductor de la banda sonora. Recuerdo que alquilamos un enorme caCuando este álbum salió a la venta, un chico robó una copia en una tienda mión con el equipo de grabación y me pasé el día corriendo desde de discos de Detroit. La policía lo alcanzó en la calle y el álbum cayó al los escenarios a la sala de control para supervisar el sonido. Era un suelo. Un fotógrafo inmortalizó el momento y la noticia apareció en la montaje muy complejo, con muchas bandas, muchos cambios de prensa, generando el rumor de que Hot Buttered Soul era tan bueno que la micrófonos y podría haber sido una gran confusión. El evento se gente incluso lo robaba para escucharlo. El disco vendió más de un millón organizó para mostrar cómo habían cambiado las cosas desde los de copias y cambió para siempre la historia del soul. Sus cuatro extensas canciones se grabaron en disturbios en el barrio de Watts unos años antes. La anécdota más Ardent con la sección rítmica de The Bar-Kays y Terry Manning fue el ingeniero de sonido. divertida sucedió cuando un sector del público saltó al césped del estadio y Rufus Thomas logró calmarlos, los mandó de vuelta a sus
Entresijos del Memphis Sound
78 | RUTA 66
Manning en los estudios Ardent con Chris Bell a los controles. El productor ha trabajado con artistas tan dispares como Iron Maiden y Shaina Twain, Bryan Adams y Joe Cocker
asientos y los hizo bailar. Fue un gran éxito y, una vez terminó, me encerré en diversos estudios de Los Ángeles para hacer las mezclas y grabar un par de temas con los Staple Singers y Little Milton. Tengo entendido que conociste a Leon Russell gracias a un interés mutuo por el sintetizador Moog. ¿Colaborasteis en alguna canción mediante ese instrumento tan icónico? En 1968 visité la fábrica de sintetizadores Moog en Trumansburg, Nueva York, donde conocí y trabajé junto a Bob Moog, su inventor. Él me enseñó a utilizar el instrumento y a apreciar mejor la música electrónica. Al regresar a Memphis con un Moog bajo el brazo, fuimos de los pocos estudios que disponían de uno. ¡Sin duda, éramos los primeros en el profundo Sur! Leon Russell se había enterado y, como era un amante de los nuevos sonidos, decidió visitarme para que lo ayudara en un nuevo tema titulado «Stranger in a Strange Land». Era un músico y compositor con gran talento. Trabajar con él fue muy especial e incluso hicimos otros overdubs. Después, John Fry y yo mezclamos su álbum Leon Russell and the Shelter People y tuvo bastante éxito. Tu amistad con Jimmy Page se remonta a sus días con The Yardbirds e incluso os planteasteis montar un nuevo grupo. Sin embargo, tú decidiste seguir con tu carrera en Memphis y él acabó formando Led Zeppelin… Cuando mi banda participó en la gira de Dick Clark Caravan of Stars, conocí a uno de mis grupos favoritos: The Yardbirds. Me hice muy amigo de Jimmy Page y acabamos viajando en mi coche desde Kentucky hasta Memphis. Fuimos a Ardent y pasamos la noche hablando de guitarras, de amplificadores y de equipos de grabación. Incluso nos intercambiamos las chaquetas y también lo intentó con las guitarras, Telecaster por Esquire, pero no acepté porque me gustaba más la mía que la suya. Entonces me contó que estaba planeando montar una nueva banda, que seguramente se llamaría The New Yardbirds, y me preguntó si quería tocar los teclados con ellos. Le di varias vueltas a la idea, aunque estaba muy contento con mi trabajo en Stax y con las oportunidades que tenía en Memphis, así que no acepté. Como todo el mundo sabe, formó The New Yardbirds y más tarde el grupo pasó a ser Led Zeppelin. Nunca fue una invita-
ción formal, solo conversaciones sobre el nuevo proyecto. Como es lógico, sin alguno de sus miembros increíbles, esa banda nunca habría sido lo que fue. En Ardent Studios grabasteis la mayor parte del álbum Led Zeppelin III. ¿Cómo recuerdas aquella experiencia tan exitosa? Recuerdo que Jimmy me mandó los dos primeros discos de Led Zeppelin en casete antes de que los editaran y hablamos mucho sobre música y temas filosóficos por teléfono y por carta. Entonces me pidió que lo ayudara a terminar su tercer álbum en los estudios de Ardent, porque ya habían empezado a grabarlo, pero no lo habían terminado antes de la gira norteamericana. De este modo, Jimmy, el mánager Peter Grant y cualquiera de los otros miembros de la banda se trasladaba a Memphis en avión entre conciertos para trabajar uno o dos días. Después se marchaban y el proceso se fue repitiendo durante la gira. Me encargué de grabar algunos overdubs y mezclé el disco junto a Jimmy. Una vez terminamos, lo llevamos a una empresa de masterización local donde el ingeniero de sonido y yo lo transferimos a vinilo para editarlo. Por último, me encargué de llevar el máster del acetato en el maletero de mi coche hasta Nashville para entregarlo a Peter Grant y que lo mandara a prensar. En los últimos años has trabajado con estrellas de la talla de Lenny Kravitz y Shakira. ¿Crees que estaban interesados en arriesgar con su sonido o en acercarse a la manera de grabar de artistas a los que admiraban? La experiencia con Lenny y Shakira no fue solo gratificante y divertida, sino que también dio pie a una buena amistad. Creo que ambos estaban emocionados porque yo había participado en muchos discos icónicos y esperaban que pudiera aportar parte de ese ‘’mojo’’ a sus proyectos. ¡Y creo que lo logramos! Con el paso del tiempo me he dado cuenta de que los grandes artistas tienen ciertas cosas en común y la principal es su motivación. Confían en su talento y sienten que nada puede pararlos. Por este motivo trabajan muy duro y constantemente se adentran en nuevos territorios. Siempre hay una razón por la que llegan a la cumbre, además de su talento innato. Para terminar la entrevista, ¿qué puedes contarnos sobre tus proyectos recientes, tanto musicales como fotográficos? Recientemente he vuelto a lo que soñaba cuando entré en la industria musical: hacer mi propia música. A finales de 2013 edité West Texas Skyline, mi primer álbum en muchos años, un homenaje a mi mentor y amigo Bobby Fuller. Nos conocimos en El Paso cuando yo era un adolescente y él, muy amable, me ayudó a empezar a tocar. A principios de 2015 grabé un disco titulado Heaven Knows con mis propias composiciones. Ambos trabajos funcionaron bastante bien en la radio norteamericana. En marzo de 2016 presenté Planets, el álbum de mi banda instrumental, 3@Sea, con diez temas cercanos al jazz. Por lo que se refiere a fotografía, he organizado exposiciones en galerías de todo el mundo y he editado tres libros, uno de ellos con retratos de Lenny Kravitz. * RUTA 66 | 79
junto al resto de la gente y, aprovechando que llevaba mi cámara, hice trece fotos del Dr. King y de sus ayudantes. Después llevé en mi coche a un par de personas y las maletas hasta el Lorraine Motel. Aquella tarde presencié su último discurso en una iglesia y al día siguiente lo asesinaron. Me afectó mucho, igual que a los empleados de Stax y al resto del mundo. Por curiosidad, ¿cuándo descubriste la magia del blues y cómo surgió tu estrecha amistad con el legendario Furry Lewis? Entonces ya era fan del blues auténtico y tuve la suerte de vivir en la zona donde había nacido ese género. Justo al llegar a Memphis, mi banda actuó en varios clubes y conocí a Furry Lewis, un artista asombroso que manejaba al público como si lo tuviera en la palma de su mano. Él era un habitual de la escena local, sobre todo desde
referencia. Luego llevábamos las cintas a Ardent para grabar las voces, los vientos, los instrumentos adicionales y hacer las mezclas. Yo acabé tocando la marimba, la armónica, las percusiones, los teclados y algunas partes de guitarra. Incluso compuse varios arreglos para vientos y cuerdas. Al Bell me dejaba solo por las noches en el estudio y yo me dedicaba a hacer pruebas. Él regresaba al día siguiente, escuchaba lo que había hecho y se quedaba con lo que funcionaba. Todo lo demás se descartaba. La canción «I’ll Take You There» fue un intento de aportar aires caribeños a una composición de R&B. Al Bell había viajado a Jamaica y a las Bahamas, donde había descubierto aquellos sonidos y quería incorporarlos. También compuse un tema titulado «Heaven» para The Staple Singers que apareció en el disco Be What You Are. ¡Qué emoción escuchar a Mavis cantar tu canción! Más tarde produje Era fan del blues auténtico y tuve la suerte de vivir en la zona donde había ese mismo tema para Joe Cocker y fue otro éxito. nacido ese género. Justo al llegar a Memphis, mi banda actuó en varios clubes gran En 1970 Stax Records se atrevió a editar y conocí a Furry Lewis, un artista asombroso que trabajaba como barrendero Home Sweet Home, tu álbum de debut repleto de temas vanguardistas y distorsionaque lo habían redescubierto porque ya quedaba lejos su carrera de dos. ¿Qué reacción tuvo Al Bell al escucharlo por primera vez? bluesman en los años treinta y cuarenta. En aquellos días trabajaba Ese disco empezó como una broma mientras grababa con The en el anonimato como barrendero en las calles. En 1969 fui a su Box Tops un tema titulado «Choo Choo Train». Una noche, para apartamento cerca de Beale Street y lo grabé mientras cantaba y divertirme con mi amigo Eddie Hinton, compositor de la canción, la tocaba la guitarra en su cama. De ahí salieron dos álbumes que se versioné a mi manera de un modo muy psicodélico y estruendoso. han editado en todo el mundo y espero que aporten algo nuevo a su Al día siguiente puse mi versión en lugar de la suya y Alex Chilton gran legado como músico. dijo que le parecía hilarante. Sin embargo, tanto Eddie como el proUna de tus colaboraciones más destacadas fue con The Staple ductor Dan Penn no pensaron lo mismo. Después le mostré el tema Singers. ¿Qué historia se esconde detrás de la grabación del a Al Bell y, a pesar de que sabía que era una broma, le gustó cómo himno «I’ll Take You There» en los estudios de Muscle Shoals? sonaba y me ofreció un contrato discográfico si hacía un álbum enSteve Cropper llevó el primer disco que los Staple Singers hicie- tero con ese mismo estilo. Entonces grabé unas canciones que paroron para Stax a los estudios de Ardent para hacer las mezclas y algu- diaban varios géneros musicales de Memphis y, de algún modo, nos overdubs. Hacía tiempo que me gustaba su música y tuve la Home Sweet Home se ha convertido en un clásico underground. oportunidad de trabajar con ellos desde el principio. Después Al Bell Toqué todos los instrumentos, excepto la batería, y Chris Bell de Big se encargó de producirlos y me pidió que lo ayudara como ingeniero Star añadió varias guitarras. de sonido y coproductor. Las pistas principales de sus temas se graCuando fundasteis Ardent Records en 1971, una de las primebaban en Muscle Shoals, con Mavis cantando una pista vocal de ras bandas que pisó el estudio fue precisamente Big Star. Aunque tú ya habías tocado con sus miembros en otros grupos… Nuestra primera banda se llamaba Cargoe y Big Star fue la segunda. Asimismo, Chris Bell, Tom Eubanks, Jody Stephens y yo teníamos otro grupo llamado Rock City con el que grabamos un disco que se editó mucho más tarde. Cuando Alex Chilton regresó de Nueva York, donde había pasado una temporada después de la separación de los SOUL LIMBO Box Tops, estaba disponible para unirse a una nueva banda. Entonces Booker T. & The MG’s (Stax, 1968) ayudé a Alex y a Chris a grabar el primer trabajo de Big Star. Ellos El primer álbum que la banda de estudio de Stax Records grabó después de compusieron la mayoría de canciones, tocaban las guitarras y cantala trágica muerte de Otis Redding en un accidente de avión. Se acercaba el ban, mientras Jody se encargaba de la batería. Yo compartí tareas vofinal de una década muy convulsa en Memphis y su sonido instrumental cales con Alex en «When My Baby’s Beside Me», que fue el primer empezó a dar un giro más arriesgado, incorporando nuevas texturas, la single, y entre los tres hicimos los coros. También toqué los teclados versión de una banda sonora de spaghetti western y homenajes explícitos a y algunas partes de bajo, aunque en seguida vino Andy Hummel para estrellas como los Beatles, Aretha Franklin y Jimi Hendrix. Curiosamente, Terry Manning tocó la tocar el resto de pistas de bajo y se unió al grupo. Decidí no formar icónica marimba en el tema homónimo. parte de los directos porque en aquellos días estaba muy ocupado en el estudio. Recuerdo que Chris y yo queríamos que el sonido se pareciera al de los Beatles, pero al estilo de Memphis. Su madre era ingleJAMMED TOGETHER sa y él se sentía muy cercano a la British Invasion. Escuchamos todos Albert King, Steve Cropper & Pop Staples (Stax, 1969) los discos de los Beatles y nos dimos cuenta de que solamente los En 1968 Atlantic Records se quedó con los masters de Stax y entonces Al cuatro miembros aparecían acreditados, a pesar de que otra gente haBell tuvo la brillante idea de lanzar 28 álbumes en un año para volver a bía participado en sus canciones. Tanto la banda como John Fry deciposicionar el sello en el mercado. Uno de los recursos fue grabar varios dieron que debían ser cuatro miembros en las fotos promocionales y duetos y juntar a sus tres guitarristas más emblemáticos en un mismo que nadie más apareciera en los créditos. trabajo (Albert King, Steve Cropper y Pop Staples). Terry Manning compuso En el verano de 1972 fuiste el ingeniero de sonido en la grabay produjo la canción «Trashy Dog», que ya había aparecido en su debut. La leyenda cuenta que la ción del concierto de Wattstax. ¿Cómo viviste ese evento tan pista musical es exactamente la misma y que solo hicieron overdubs de las guitarras. multitudinario que acabó siendo un exitoso documental? Fue un día muy especial, pero se organizó en una época muy agitada. Yo era el director musical de la película y me encargaba de HOT BUTTERED SOUL la grabación de los conciertos, eso me llevó a aparecer como coproIsaac Hayes (Enterprise–Stax, 1969) ductor de la banda sonora. Recuerdo que alquilamos un enorme caCuando este álbum salió a la venta, un chico robó una copia en una tienda mión con el equipo de grabación y me pasé el día corriendo desde de discos de Detroit. La policía lo alcanzó en la calle y el álbum cayó al los escenarios a la sala de control para supervisar el sonido. Era un suelo. Un fotógrafo inmortalizó el momento y la noticia apareció en la montaje muy complejo, con muchas bandas, muchos cambios de prensa, generando el rumor de que Hot Buttered Soul era tan bueno que la micrófonos y podría haber sido una gran confusión. El evento se gente incluso lo robaba para escucharlo. El disco vendió más de un millón organizó para mostrar cómo habían cambiado las cosas desde los de copias y cambió para siempre la historia del soul. Sus cuatro extensas canciones se grabaron en disturbios en el barrio de Watts unos años antes. La anécdota más Ardent con la sección rítmica de The Bar-Kays y Terry Manning fue el ingeniero de sonido. divertida sucedió cuando un sector del público saltó al césped del estadio y Rufus Thomas logró calmarlos, los mandó de vuelta a sus
Entresijos del Memphis Sound
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Manning en los estudios Ardent con Chris Bell a los controles. El productor ha trabajado con artistas tan dispares como Iron Maiden y Shaina Twain, Bryan Adams y Joe Cocker
asientos y los hizo bailar. Fue un gran éxito y, una vez terminó, me encerré en diversos estudios de Los Ángeles para hacer las mezclas y grabar un par de temas con los Staple Singers y Little Milton. Tengo entendido que conociste a Leon Russell gracias a un interés mutuo por el sintetizador Moog. ¿Colaborasteis en alguna canción mediante ese instrumento tan icónico? En 1968 visité la fábrica de sintetizadores Moog en Trumansburg, Nueva York, donde conocí y trabajé junto a Bob Moog, su inventor. Él me enseñó a utilizar el instrumento y a apreciar mejor la música electrónica. Al regresar a Memphis con un Moog bajo el brazo, fuimos de los pocos estudios que disponían de uno. ¡Sin duda, éramos los primeros en el profundo Sur! Leon Russell se había enterado y, como era un amante de los nuevos sonidos, decidió visitarme para que lo ayudara en un nuevo tema titulado «Stranger in a Strange Land». Era un músico y compositor con gran talento. Trabajar con él fue muy especial e incluso hicimos otros overdubs. Después, John Fry y yo mezclamos su álbum Leon Russell and the Shelter People y tuvo bastante éxito. Tu amistad con Jimmy Page se remonta a sus días con The Yardbirds e incluso os planteasteis montar un nuevo grupo. Sin embargo, tú decidiste seguir con tu carrera en Memphis y él acabó formando Led Zeppelin… Cuando mi banda participó en la gira de Dick Clark Caravan of Stars, conocí a uno de mis grupos favoritos: The Yardbirds. Me hice muy amigo de Jimmy Page y acabamos viajando en mi coche desde Kentucky hasta Memphis. Fuimos a Ardent y pasamos la noche hablando de guitarras, de amplificadores y de equipos de grabación. Incluso nos intercambiamos las chaquetas y también lo intentó con las guitarras, Telecaster por Esquire, pero no acepté porque me gustaba más la mía que la suya. Entonces me contó que estaba planeando montar una nueva banda, que seguramente se llamaría The New Yardbirds, y me preguntó si quería tocar los teclados con ellos. Le di varias vueltas a la idea, aunque estaba muy contento con mi trabajo en Stax y con las oportunidades que tenía en Memphis, así que no acepté. Como todo el mundo sabe, formó The New Yardbirds y más tarde el grupo pasó a ser Led Zeppelin. Nunca fue una invita-
ción formal, solo conversaciones sobre el nuevo proyecto. Como es lógico, sin alguno de sus miembros increíbles, esa banda nunca habría sido lo que fue. En Ardent Studios grabasteis la mayor parte del álbum Led Zeppelin III. ¿Cómo recuerdas aquella experiencia tan exitosa? Recuerdo que Jimmy me mandó los dos primeros discos de Led Zeppelin en casete antes de que los editaran y hablamos mucho sobre música y temas filosóficos por teléfono y por carta. Entonces me pidió que lo ayudara a terminar su tercer álbum en los estudios de Ardent, porque ya habían empezado a grabarlo, pero no lo habían terminado antes de la gira norteamericana. De este modo, Jimmy, el mánager Peter Grant y cualquiera de los otros miembros de la banda se trasladaba a Memphis en avión entre conciertos para trabajar uno o dos días. Después se marchaban y el proceso se fue repitiendo durante la gira. Me encargué de grabar algunos overdubs y mezclé el disco junto a Jimmy. Una vez terminamos, lo llevamos a una empresa de masterización local donde el ingeniero de sonido y yo lo transferimos a vinilo para editarlo. Por último, me encargué de llevar el máster del acetato en el maletero de mi coche hasta Nashville para entregarlo a Peter Grant y que lo mandara a prensar. En los últimos años has trabajado con estrellas de la talla de Lenny Kravitz y Shakira. ¿Crees que estaban interesados en arriesgar con su sonido o en acercarse a la manera de grabar de artistas a los que admiraban? La experiencia con Lenny y Shakira no fue solo gratificante y divertida, sino que también dio pie a una buena amistad. Creo que ambos estaban emocionados porque yo había participado en muchos discos icónicos y esperaban que pudiera aportar parte de ese ‘’mojo’’ a sus proyectos. ¡Y creo que lo logramos! Con el paso del tiempo me he dado cuenta de que los grandes artistas tienen ciertas cosas en común y la principal es su motivación. Confían en su talento y sienten que nada puede pararlos. Por este motivo trabajan muy duro y constantemente se adentran en nuevos territorios. Siempre hay una razón por la que llegan a la cumbre, además de su talento innato. Para terminar la entrevista, ¿qué puedes contarnos sobre tus proyectos recientes, tanto musicales como fotográficos? Recientemente he vuelto a lo que soñaba cuando entré en la industria musical: hacer mi propia música. A finales de 2013 edité West Texas Skyline, mi primer álbum en muchos años, un homenaje a mi mentor y amigo Bobby Fuller. Nos conocimos en El Paso cuando yo era un adolescente y él, muy amable, me ayudó a empezar a tocar. A principios de 2015 grabé un disco titulado Heaven Knows con mis propias composiciones. Ambos trabajos funcionaron bastante bien en la radio norteamericana. En marzo de 2016 presenté Planets, el álbum de mi banda instrumental, 3@Sea, con diez temas cercanos al jazz. Por lo que se refiere a fotografía, he organizado exposiciones en galerías de todo el mundo y he editado tres libros, uno de ellos con retratos de Lenny Kravitz. * RUTA 66 | 79