50 Aniversario Inden

INSTITUTO NACIONAL DE DIABETES, ENDOCRINOLOGÍA Y NUTRICIÓN (INDEN) 50 AÑOS DE SERVICIO, SOLIDARIDAD, PERSEVERANCIA Y COMPROMISO

NOVIEMBRE 2022 Dr. Jorge A. Hazoury Bahlés DIRECTOR FUNDADOR Mercedes Toral de Hozoury PRESIDENTE PATRONATO CONTRA LA DIABETES Dr. Ammar Ibrahim DIRECTOR GENERAL INDEN Rochelli Subero DIRECCIÓN EDITORIAL Y COORDINACIÓN Ana Alicia De Jesús EDICIÓN Y REDACCIÓN Elyoenay Tejada Varela DIAGRAMACIÓN

FOTOGRAFÍAS Arismendy Lora Ernesto Ríos Archivo Inden

--------------------------Esta es una publicación especial gratuita, conmemorando el 50 aniversario del Inden.

Realizada por el Hospital - Escuela Jorge Abraham Hazoury Bahlés (Inden).

Revisada y aprobada por la Dirección General.

Instituto Nacional de la Diabetes (Inden).

C/ Paseo del Yaque, Los Ríos. Santo Domingo, R.D., (809) 385-0451 http://www.inden.do/ @DIABETESINDEN

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Dr. Jorge Abraham Hazoury Bahlés

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Un sueño tangible desde el día uno

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Inden impacto en números

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50 aniversario Inden

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Nace el Iden

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La lucha contra la diabetes se fortalece

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Construyendo el legado

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Cómplices en una causa de acción y corazón • Sor Eutimia Urrutia • Dr. Francisco José Valerio García

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• Dr. Víctor Manuel Perrotta • Dra. Aurea Estela Mota Brito • Voluntariado del Inden • Nozim Hazoury, el hombre volcán

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54

Inspiración para pensar en grande

Personal de enfermería

58

Dr. Ammar Ibrahim

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Atención integral para todos los diabéticos dominicanos

38

40 68 76 58 66

Servicio de Oftalmología Inden

Cambiando vidas una familia a la vez

68

86

Hospital escuela

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Acercándonos al paciente

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Expansión: Edificio Inden II Dr. Víctor Manuel Perrotta

90

84

Crecimiento y tecnología de punta al servicio de la salud

88

Investigación y divulgación científica

90

Un impacto que empieza desde adentro

84 9

“La construcción de un hospital para diabéticos es el sueño dorado de todos aquellos que se ocupan de la enfermedad que tantas bajas han causado en el mundo”.

Dr. Jorge Abraham Hazoury Bahlés Fundador del Inden

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DR. JORGE ABRAHAM HAZOURY BAHLÉS Un legado extraordinario.

El

doctor Jorge Abraham Hazoury Bahlés, fundador de la Sociedad Dominicana de Diabetes (SODODIA), del Patronato de Lucha Contra la Diabetes, del Instituto Nacional de Diabetes, Endocrinología

y Nutrición (Inden) y de la Universidad Iberoamericana (Unibe), era un hombre verdaderamente fuera de serie.

Nacido en Barahona el 20 de agosto de 1924, se graduó de Medicina en la Universidad Autónoma de Santo Domingo. Fue director del Hospital Regional del Seguro Social del Ingenio Barahona, se especializó en Endocrinología y Diabetes en España y, a su regreso, trabajó en el Hospital Salvador B. Gautier. Desarrolló los primeros estudios de genética en el país y fungió como profesor titular de Medicina Interna y Endocrinología en la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (UNPHU).

El doctor Hazoury Bahlés dedicó gran parte de su vida a luchar

contra la diabetes, a formar otros médicos, educar a la población y a trabajar para mejorar la vida de los dominicanos que viven con la enfermedad a través de un servicio de salud de calidad, humano y digno.

Visionario y determinado como era, tuvo la idea de fundar una sociedad para diabéticos y, años más tarde, el patronato, el instituto y el hospital escuela, para poder completar su obra

ciación Latinoamericana de Diabetes. La antigua Asociación

y su misión de ofrecer servicios médicos a los diabéticos más

Médica Dominicana (AMD), hoy Colegio Médico Dominicano

necesitados del país.

(CMD), lo acreditó como Maestro de la Medicina Dominicana.

Asimismo, la Fundación Dominicana de Endocrinología le otor-

Su compromiso y entrega con la causa le ganó el respeto, la

gó un reconocimiento a sus méritos y esfuerzos realizados en

admiración y valoración de todos quienes lo conocían, así

favor de los diabéticos dominicanos y la Cámara de Diputados

como diversas distinciones y reconocimientos nacionales e

del Congreso de la República Dominicana le hizo un reconoci-

internacionales. Entre estos, destacan: Honor al Mérito de la

miento póstumo como el pionero en la lucha contra la diabetes

Federación Latinoamericana de Asociaciones Lucha contra la

en el país.

Diabetes, la Medalla de Duarte, Sánchez y Mella, por parte del gobierno dominicano (1987) y Miembro Honorífico de la Aso-

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El doctor Hazoury Bahlés, falleció en marzo de 2004.

“Si logramos que tanto los casos de diabetes reconocibles, como aquellos que se descubran entre los ignorados reciban tratamiento, educación sanitaria y dietética, habremos dado un gran paso en la lucha contra esta dolencia que azota a una gran parte de la humanidad”.

Dr. Jorge Abraham Hazoury Bahlés Periódico Listin Diario 21 octubre 1966

Dr. Jorge Abraham Hazoury Bahlés Fundador del Instituto Nacional de la Diabetes, Inden, y Padre de la Diabetes en República Dominicana.

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UN SUEÑO TANGIBLE DESDE EL DÍA UNO

Es

muy difícil poder compactar lo que ha sido el recorrido de este camino, tantos años de es-

fuerzos, retos y conquistas, pues en ningún momento hubo tregua, todo fue trabajo, proyectos

a corto, a mediano o largo plazo. Al celebrarse el quincuagésimo aniversario del Inden, no puedo más que llenarme de alegría y

satisfacción, al ver que aquel ideal del doctor Jorge Abraham Hazoury Bahlés (Nozim, para mi), sembrado, cultivado y cuidado con tanto amor, esmero y sacrificios, a los 18 años de su partida física, sigue siendo un robusto árbol que cobija a tantos diabéticos necesitados en República Dominicana.

La intención siempre fue poder apoyar al diabético necesitado de ayuda, pero la gran sorpresa y el verdadero reto fue descubrir la enorme necesidad que había. Sin embargo, cuando mente y corazón se aúnan en una misma dirección, es mucha la gente que se compromete y se involucra, haciendo posible superar los retos y las dificultades. Y, como siempre decía Nozim: Dios provee.

Desde que era un sueño, mi esposo y yo hablábamos del proyecto como si ya fuese una realidad. ¡Cómo no entusiasmarse y enamorarse de aquel ideal! Nuestro diario vivir giraba en torno a la diabetes: la casa, la dinámica familiar, los hijos, las vacaciones, los paseos, todo… ¡No había lugar para otra cosa!

El Inden-Hospital Escuela DR. Jorge Abraham Hazoury Bahlés es un legado para la sociedad dominicana y, muy especialmente, para los diabéticos con recursos limitados, concebido con mucho amor y con el favor de Dios, hace ya 50 años. Ha sido de gran satisfacción y un honor el privilegio que el destino me otorgó de formar parte de esta intensa y gratificante odisea.

Mercedes Toral de Hazoury Presidenta del Patronato de Lucha contra la Diabetes

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En el año 1975 se colocó la primera piedra de lo que sería el Hospital de la Diabetes, un acto simbólico, en el que la señora Mercedes Toral de Hazoury, presidenta del Patronato de Lucha Contra Diabetes, tuvo los honores de ponerla. Entre los asistentes estuvo el entonces vicepresidente de la República, Carlos Rafael Goico Morales.

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HOSPITAL ESCUELA Número de egresados por cada especialidad

Cantidad de enfermeras

Número de médicos dando servicio en el Inden

DIABETES

75

PIE

DIABÉTICO En estos 50 años el Inden ha tenido un impacto inmenso en las personas que viven con diabetes en la República Dominicana y en sus familiares. Asimismo ha contribuido a mejorar su calidad de vida a través de la educación y atención médica oportuna, humana y de calidad.

consultas de diabetes de primera vez NUESTROS EGRESADOS INTERNACIONALES PROVIENEN DE:

• ESTADOS UNIDOS • ESPAÑA • BOLIVIA • VENEZUELA • ECUADOR • PARAGUAY • TRINIDAD Y TOBAGO • HAITÍ • LÍBANO • GUATEMALA • FRANCIA • IRÁN • HONDURAS • PAKISTÁN • EL SALVADOR • BRASIL 16

ESPECIALIDADES DISPONIBLES EN EL HOSPITAL • Cardiología • Cirugía general

82,000 consultas de diabetes

21,000 consultas de oftalmología

10,000 consultas de cardiología

• Cirugía Vascular • Dermatología • Diabetología • Diabetología Pediátrica • Endocrinología • Endocrinología Pediátrica

46,000 curas de pie diabético

1,600 cirugías de pie diabético

• Gastroenterología • Ginecología y Obstetricía • Hematología • Infectología • Nefrología • Neumología • Neurología • Neuropatía Diabética

MÁS DE 6,000 CONSULTAS DE GINECOLOGÍA Y MÁS DE 2000 PAPANICOLAU

• Nutrición • Oftalmología • Ortopedia • Otorrinolaringología • Pediatría • Psicología • Psiquiatría • Tecnología en Diabetes • Urología • Odontología • Evaluación anestésica

135,000 100,000

viales de insulina humana suministradas

lápices de insulina análoga suministradas

preoperatoria • Pie diabético

* Cifras por año.

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50 ANIVERSARIO INDEN Una historia de servicio, excelencia y compromiso con la salud de los diabéticos dominicanos.

1972 1973 1974 1975 1976

1972 - Se inaugura el 12 de noviembre El Patronato Contra la Diabetes, con el lema y misión “Lucha contra la diabetes”.

1972 - El 30 de noviembre queda fundado el Instituto Nacional de Diabetes, Endocrinología y Nutrición (Inden) con el fin de proveer los servicios a los diabéticos más necesitados.

1973 - Mediante el Decreto 4061 el Poder Ejecutivo declara agosto como Mes de la Diabetes en República Dominicana.

1973 - Se lleva a cabo el primer pesquisaje en Neveras Dominicanas (Nedoca), para detectar diabetes entre más de 100 empleados.

1974 - Se inician los telemaratones, entre ellos dos en New York, muy exitosos, en conexión con la República Dominicana.

1974 - El Inden envía por primera vez médicos dominicanos a realizar estudios de postgrado en Endocrinología y Nutrición en España, y Diabetología en Buenos Aires.

1974 -El Patronato Contra la Diabetes y la Asociación Latinoamericana realizan el Primer Simposio Interamericano en Santo Domingo, en el mes de junio.

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1974 - Se realiza un curso con prestigiosos médicos internacionales: los doctores Alexander Moable Ernesto, de la Universidad de Harvard y presidente de la Fundación Joslin; el doctor Leo Krall, profesor de la Universidad de Harvard y jefe de Educación de la Clínica Joslin, y el profesor Stuarland Soeledmer, gran investigador del páncreas artificial y del cultivo de células beta.

1975 - Se realiza el acto de colocación de la primera piedra del edificio que alojaría el Hospital de la Diabetes en su ubicación actual en Los Ríos- con la presencia del entonces vicepresidente de la República, Rafael Goico Morales.

1975 - Se lleva a cabo el Primer Simposio Internacional el 13 de junio, con la participación de los doctores Luis J. Cardonet, Ernesto Cedantes, Héctor B. Mateo y Virgilio Foglia.

1976 - Nace la Revista Inden, medio de comunicación oficial con nuestros aliados.

1976 - Inician en el Inden los servicios de cardiología y oftalmología, órganos muy afectados por la diabetes.

1977 1978 1979 1980 1981

1976 - Se realiza un pesquisaje en la Penitenciaría La Victoria, donde se analizaron 674 personas.

1978 - Contamos tres consultorios, servicio de genética, un Departamento de Medicina Nuclear para gammagrafía de tiroides, un equipo de electroforesis para investigar anticuer-

1976 - Se ofrece una recepción al Dr. Rodolfo Luft, ganador

pos anti-insulínicos.

del premio Milkowoki, el más alto galardón de la época por la investigación en la diabetes, al dictar una charla patrocinada

1979 - Se celebra el Primer Seminario para Pacientes Diabéti-

por el Inden.

cos en la Casa de Cursillos San Pablo, con la asistencia de 60 pacientes.

1976 - El Inden es reconocido oficialmente como miembro titular de la Federación Internacional de Diabetes (IDF).

1979 - Realizamos el primer curso de enfermeras graduadas de hospitales y clínicas privadas de todo el territorio nacional.

1976 - El doctor Jorge Abraham Hazoury Bahlés es nombrado miembro de honor de la Sociedad Venezolana de Diabetes.

1979 - Tiene lugar el primer campamento de niños diabéticos en el Centro Vacacional de Haina.

1976 - El Inden envía al doctor Francisco Valerio a España a realizar sus estudios en Diabetología, convirtiéndose al llegar

1980 - Se inicia la construcción del Hospital de la Diabe-

en el primer médico fijo del instituto.

tes. La primera primera etapa de la obra estuvo valorada en RD$1,700,000.

1977 - Se instala en el Inden un moderno aparato de medicina nuclear, hormonas y genética.

1981 - El 7 de agosto, la Fundación Jiménez Díaz galardona al doctor Hazoury Bahlés con la insignia de honor

1978 - Se firma un acuerdo con Joslin Clinic para hacer inter-

de la institución.

cambios y asesorías entre ambas partes.

19

1982 1983 1987 1988 1989 1991 1997 1998 2000 2002

1982 - Se firma el acuerdo de cooperación para la creación

1997 - El Inden hace un reconocimiento especial a nuestras

del Instituto de Medicina, por parte de don Manuel Del Prado

voluntarias por su labor incansable y desinteresada.

y Colón de Carvajal, presidente de la Cooperación Iberoamericana, y el doctor. Hazoury Bahlés, director del Inden y del

1997 - El instituto recibe el premio “Brugal cree en su gente”,

Comité Gestor del Instituto Universitario Iberoamericano de

por la labor realizada a favor de los diabéticos de la República

Medicina.

Dominicana.

1983 - El Hospital de la Diabetes es una realidad.

1998 - El 12 de mayo se inaugura el Inden II, en la Zona Oriental de Santo Domingo.

1987 - Inicia la Clínica de Tiroides en el Inden, con los más sofisticados servicios y un gran equipo humano.

1998 - Se inaugura el Salón para Enseñanza Leo P. Krall.

1987 - El entonces secretario de Salud Pública, doctor Rafael

1998 - Inauguramos el primer edificio de Pie Diabético.

Grateraux, revela que la insulina sería libre de impuestos en República Dominicana.

2000 - El Inden se encuentra en la vanguardia de la cirugía de cataratas, con nuevas técnicas y ultrasonido, también

1988 - Inicia la Residencia en Diabetología y Nutrición.

llamado facoemulsificación.

1989 - El equipo humano del Inden está consolidado. En esta

2001 - Se adquiere un moderno densitómetro instalado en la

fecha teníamos más de 60,000 consultas al año y 39 médicos

Unidad de Endocrinología.

de diversas especialidades.

2002 - Contamos con el edificio de Endocrinología, 1991 - Inicia la Residencia en Cirugía Oftálmica.

con el nombre Dr. José Luis Herrera Pombo,y el servicio de medicina nuclear.

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2004 2007 2011 2012 2013 2015 2017 2018 2019

2004 - Fallecimiento del doctor Jorge Abraham Hazoury Bahlés 2004 - Se nombra el hospital en honor a su fundador: Hospital-Escuela Dr.Jorge Abraham Hazoury Bahlés.

2007 - El doctor Ammar Ibrahim y la doctora Aurea Mota asumen sus nuevos cargos por mandato del patronato: director general y directora médico, respectivamente.

2015 - El doctor Ibrahim asume la presidencia de la Federación Internacional de Diabetes para la Región Centro y Sur

2007 - Se crea el área de Pediatría INSU & LINA. 2011 - Se construye la moderna clínica del Pie Diabético.

América (IDF-SACA), con duración de dos años (2015-2017) 2017 - Se moderniza el área de Hemodiálisis con la preparación física del área, al igual de un moderno sistema de osmo-

2012 - se inicia el postgrado de Pie Diabético para cirujanos,

sis y máquinas de diálisis

con el aval de la Universidad Iberoamericana (Unibe) 2018 - Publicamos los resultados del primer censo nacional 2013 - Se construye moderna Emergencia.

de diabetes, en conjunto con Unibe.

2013 - El Senado de la República Dominicana otorga un reco-

2019 Modernización del área de consulta externa,

nocimiento póstumo al doctor Jorge Abraham Hazoury Bahlés

se construyen modernos consultorios de Odontología

como el “Padre de la diabetes”

y se amplía Farmacia Inden para brindar mejor servicio a nuestros pacientes.

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El inicio de un sueño

NACE EL INDEN

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A

Pacientes esperando afuera del primer local del Inden. yudar a los diabéticos más necesitados de la Repú-

personas influyentes en la sociedad, familiares de diabéticos,

blica Dominicana era un sueño que el doctor Jorge

amigos vinculados a los medios de comunicación y pacientes

Abraham Hazoury Bahlés se tomaba muy en serio.

interesados en ayudar.

Tan en serio, que se convirtió en su proyecto de vida

y lo llevó a crear algo mucho más grande de lo que había ima-

El siguiente paso fue uno muy trascendental y marcó el inicio

ginado, y con ello, transformar la experiencia de miles y miles

de la lucha contra la diabetes en República Dominicana. Vien-

de personas con diabetes y sus familias.

do que ya eran muchos los que compartían el entusiasmo y el compromiso de ayudar a los diabéticos más necesitados, el

Carismático, perseverante y con un liderazgo excepcional,

doctor Hazoury se atrevió a proponer la creación de un patro-

quienes lo conocieron quizá no se sorprendieron demasiado

nato. El 26 de octubre de 1972, en su casa, se reunió un grupo

con todo lo que logró gracias a estas cualidades y a su profun-

importante de personas, motivadas por ser parte de esa obra

da vocación de servicio.

humanitaria e impostergable, dejando así establecida la primera directiva del Patronato Contra la Diabetes. Esa misma noche,

Todo comenzó en 1966, poco después de su regreso al país,

uno de los miembros, Manuel Fernández, hizo una donación de

luego de realizar una especialidad en Endocrinología en Espa-

500 pesos.

ña. A su consulta privada en la capital llegaban decenas de pacientes diabéticos de todos los ámbitos sociales y económicos e, incluso, del interior del país. Muchos de ellos eran de muy

Primera directiva del Patronato Contra la Diabetes

escasos recursos, lo que no les permitía acceder a los medicamentos para combatir la enfermedad.

Mercedes Toral de Hazoury - Presidenta Alberto Jaar - Primer Vicepresidente

La creciente población de personas con diabetes en el país

Dr. Práxedes Castillo - Segundo Vicepresidente

estaba prácticamente desprotegida. En ese momento, la en-

Consuelo Mejía de Van der Linde - Secretaria

fermedad no era un tema prioritario para las instituciones esta-

Irene Dina de Alemany - Tesorera

tales. Tenía que hacer algo.

Arlina Tavárez de Van-Welie - Vocal

El primer paso del inquieto doctor Hazoury Bahlés fue convo-

Ana Luisa Nicolás de Mastrolilli - Vocal

Pilar Peña de Pellerano - Vocal car a un grupo de médicos y conformar junto a ellos la Socie-

Marilú de Rothe - Vocal

dad Dominicana de Diabetes (SODODIA), en cuyos estatutos

Mercedes Vitienes de Cabrera - Vocal

se estableció desde el principio la misión de la lucha contra la

Mary de Stern - Vocal

diabetes en el país.

Italia Ferrúa de Chotin - Vocal

Iniciaron con mucho entusiasmo y responsabilidad, trabajando día a día, involucrando y concientizando amigos y conocidos, buscando apoyo y formando voceros de esta gran necesidad. Poco a poco, se fueron uniendo a la causa otros médicos,

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El publicista Freddy Ginebra, conduciendo uno de los telemaratones organizados por el patronato para recaudar fondos para el Inden.

El 26 de octubre de 1972, en casa doctor Hazoury, se reunió un grupo importante de personas, motivadas por ser parte de esta impostergable causa:la lucha contra la diabetes.

Para iniciar de inmediato con las operaciones del patronato y las consultas médicas, decidieron buscar un local en alquiler en un sector de clase media-baja y con fácil acceso al transporte público para que fuera la sede. Buscaron y buscaron hasta dar con un lugar en la calle San Martín esquina Doctor Delgado.

Estaba en muy malas condiciones, pero tenía un salón grande y un espacio privado que resultaban perfectos para la consulta y la sala de espera. ¡Tenían local!

Aquel primer donativo sirvió para los depósitos y para pagar el primer mes de alquiler, y procedieron a acondicionarlo. ¡Toda una travesía! Pero estaban determinados. Para la limpieza profunda que necesitaba el espacio, el doctor y su esposa, Mercedes Toral de Hazoury (doña Miky) contaron con el apoyo de amigos, sus cuatro hijos, dos empleados de su casa y hasta de los bomberos, a quienes, por supuesto, el doctor Hazoury logró convencer de ayudar (aunque con la condición de hacerlo de madrugada).

Una vez resuelto ese primer desafío, para amueblarlo, solicitaron a Salud Pública, en calidad de préstamo, unos bancos largos, sillas y dos muebles con tope de formica que utilizaron como laboratorio. No eran nuevos, pero estaban encantados.

Muchos amigos también donaron asientos, y una estación de combustible que quedaba frente al local donaba el agua de uso diario. Así, en noviembre, a un mes de formarse el patronato, nace el Instituto Nacional de Diabetes, Endocrinología y Nutrición (Inden).

En los principales periódicos, emisoras de radio y en el popular programa de televisión, El gordo de la semana, de Freddy Beras Goico, se informó a la ciudadanía de la apertura de la consulta en el Inden y los detalles de su ubicación.

El primer día llegaron muy temprano, llenos de ilusión y esperanza. Las puertas del Inden se abrieron a las 7:00 de la mañana y la fila de pacientes que entró parecía interminable. Llegaron personas de todos los rincones de la geografía nacional.

Obviamente, las sillas no alcanzaron. Lo que sí sobraba era la determinación y el compromiso de hacer realidad el sueño de mejorar la vida de los diabéticos dominicanos.

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Sor Eutimia y doña Miky durante el primer pesquisaje en la cárcel La Victoria.

El Inden es una realidad El Instituto Nacional de Diabetes, Endocrinología y Nutrición (Inden) ya no era un sueño, era una realidad, y la cantidad de

En noviembre de 1972, a un mes de formarse el patronato, nace el Instituto Nacional de Diabetes, Endocrinología y Nutrición (Inden).

pacientes aumentaba de manera impresionante. Cada día era un nuevo reto y no paraban, pues día a día eran más los diabéticos que llegaban a la consulta. Se sumaron más médicos endocrinólogos y de otras especialidades relacionadas a la diabetes, así como varias señoras voluntarias con deseos de ayudar.

La educación ha sido un componente importante en los servicios del Inden desde el día uno. Los pacientes recibían orientación y eran concientizados sobre su condición y sobre cómo manejarla adecuadamente. Al principio contaban con ocho médicos, miembros de la Sociedad Dominicana de Diabetes (SODODIA), quienes rotaban para dar consultas.Lo hacían de manera gratuita y, en ocasiones, escapando de sus obligaciones privadas, movidos por el compromiso de apoyar la causa.

Sin embargo, prácticamente no daban a basto. Los requerimientos del laboratorio crecían, la administración enfrentaba grandes exigencias, el espacio era insuficiente; a los pocos meses de iniciar ya era imposible trabajar allí, así que dieron el siguiente paso. Al cumplir un año, el Inden se mudó a una

Así como cada día llegaban más pacientes, se empezaron a

casa más grande, de dos niveles, ubicada en la calle Barahona

sumar más médicos, enfermeras y voluntarias.

esquina Pablo Pina.

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El Instituto Nacional de Diabetes, Endocrinología y Nutrición (Inden) ya no era un sueño, era una realidad, y la cantidad de pacientes aumentaba cada día.

En esa época, el instituto se sostenía económicamente gracias a donaciones de amigos y con las cuotas que aportaban algunos pacientes (eran prácticamente simbólicas y a quienes no tenían recursos para pagar, se les atendía gratuitamente).

Con tenacidad, el doctor Hazoury conquistó mucha gente buena que se involucró con la causa de una forma u otra. Una de esas personas fue sor Eutimia Urrutia, monja de la Congregación de Misioneras Dominicas, quien se dedicó en cuerpo y alma a la lucha del doctor e hizo suya la causa. Se convirtió en su mano derecha, una aliada invaluable en todo lo que estaba por venir. Desde el principio se convirtió en custodia de los ingresos del instituto, pero también del sueño del doctor Hazoury hasta el último de sus días.

En 1973 se logró que el mes de agosto, que era el mes de la campaña anual del Inden para concientización sobre la diabetes, fuera instituido por el Poder Ejecutivo y el presidente Balaguer como Mes Nacional de la Diabetes. Esto fue clave para impulsar y fortalecer las acciones que ya se venían llevando a cabo por todo el territorio nacional: educación y prevención, programas de divulgación científica, etc.

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La noche en que se conformó el patronato, el señor Manuel Fernández hizo la primera donación: un cheque de 500 pesos. Fue un momento de emoción y aplausos, pues era el primer paso económico para hacer realidad la misión de ayudar a los diabéticos más necesitados.

El “Hospital de la Diabetes” Los pacientes del instituto seguían aumentando y la casa de

Tras la experiencia de ese telemaratón, se realizó otro en Nue-

la Barahona, aunque con dos pisos superaba bastante en ta-

va York y, una vez más, el éxito fue rotundo. La comunidad

maño a la anterior, pronto quedó pequeña. Inicialmente, en el

dominicana apoyó masivamente y de nuevo se sumaron per-

primer piso funcionaban las consultas, y en el segundo vivían

sonalidades. Incluso, Mario Moreno “Cantinflas”, quien se en-

tres monjas misioneras que llevaban la administración, pero en

contraba en la ciudad en ese momento, donó lo recaudado en

poco tiempo debieron ceder ese espacio para hacerle fren-

la premier de su película “El Barrendero”, recién presentada en

te a las nuevas necesidades que iban surgiendo. Se aumentó

la ciudad.

el número de colaboradores y de servicios disponibles. Salud Pública otorgó una subvención y eso ayudó con los crecientes

Fue impresionante ver cómo el pueblo dominicano, especial-

gastos, pero igual hacía falta más recursos y más espacio.

mente los más humildes, se desbordó en amor y entusiasmo por aportar, aunque fuese sólo para un block del edificio. Por

“En 1973 el doctor Hazoury lanzó la idea de un hospital para dia-

eso el doctor Hazoury siempre decía que el hospital había sido

béticos”, cuenta el doctor Herbert Stern, quien hizo su pasantía

construido a puro pueblo, y que era de los diabéticos. Gracias

de grado en el Inden unos años más tarde y luego se convirtió

al apoyo recibido, se pudieron realizar con éxito otros telema-

en pieza clave para ese nuevo plan del doctor Hazoury. “En

ratones destinados a recaudar fondos para construcción del

ese momento, en el país no existía ningún centro de salud de-

hospital y para su equipamiento.

dicado a los diabéticos y los hospitales del Estado no tenían espacios especiales para estos pacientes crónicos y tan necesitados de atenciones especializadas”, dice. Había llegado el momento de construir un hospital. El sueño seguía creciendo.

Se decidió solicitar ayuda al entonces presidente de la República, doctor Joaquín Balaguer, con la donación de un solar, y al poco tiempo se recibió la noticia de la donación de uno en el sector Los Ríos. Estaba algo lejos, el tamaño y forma del terreno no se ajustaba a las necesidades proyectadas, pero lo aceptaron con entusiasmo. El nuevo reto era el dinero para la construcción, sin embargo, hasta el momento, todos los retos habían sido conquistados. Esa no sería la excepción.

Con el objetivo de aumentar las recaudaciones, se llevaron a cabo diversas actividades promocionales, publicidad en prensa y televisión y varios telemaratones. Entre estos hay uno que, sin duda, quedará por siempre en la memoria de quienes fueron testigos de esta etapa del Inden: el telemaratón de Nueva

Hasta ese momento, en el país no había ningún centro de salud dedicado a los diabéticos.

York de 1974. A pesar de no tener experiencia organizando este tipo de eventos, el patronato y el grupo de damas voluntarias que colaboraban con el proyecto se aventuraron a darle curso.

Se llevó a cabo con gran éxito, en conexión con la República Dominicana y transmitido por Color Visión, específicamente por El Gordo de la Semana. Tuvo mucho apoyo, incluyendo el de personalidades como Freddy Beras Goico y Freddy Ginebra, quienes se comprometieron y aportaron sus ideas para la producción. La experiencia fue memorable para todo el que formó parte. Por allí pasaron deportistas, empresarios, médicos, banqueros, políticos, artistas, atendían las llamadas con entusiasmo y hasta se quedaban compartiendo pasado su turno en el maratón. Las filas de personas que querían hacer su aporte en efectivo rodeaban toda la cuadra. Restaurantes, cafeterías y reposterías enviaban comida para quienes estaban trabajando en el maratón y también llegaron donaciones de mobiliario.

La labor del Inden se da a conocer rápidamente y más personas llegan a consultarse.

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LOS PESQUISAJES

Hospital Escuela Dr. Jorge Abraham Hazoury Bahlés

En mayo de 1973 el Inden realizó su primer pesquisaje, una de las iniciativas sello del Inden, intensas jornadas para detectar diabetes en personas que no saben que tienen la enfermedad. Para esa primera, se visitó la empresa Neveras Dominicanas, Nedoca, y evaluó a sus más de 100 colaboradores para detectar quiénes eran diabéticos sin saberlo. Fue la primera vez que en la región del Caribe se realizaba algo así y todo el proceso fue dirigido por el doctor Hazoury.

Así se diseñaron y organizaron muchos otros, en empresas, como Café Santo Domingo y Plaza Naco, así como en cárceles y barrios de escasos recursos. Participaban médicos, enfermeras, laboratoristas, voluntarias y generalmente los resultados arrojaban el número de diabéticos pronosticado, los cuales eran referidos al Inden.

A la fecha continúan realizándose los pesquisajes en instituciones.

En las imágenes, algunos de los primeros años.

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El expresidente de la República, Dr. Salvador Jorge Dr. Hazoury recibe donaciones de la Embajada de Japón.

Blanco, Freddy Beras Goico y el Dr. Jorge A. Hazoury, durante la inauguración del Inden, en Los Ríos.

Con el objetivo de aumentar las recaudaciones para el Inden, se llevaron a cabo diversas actividades promocionales, publicidad en prensa y televisión y varios telemaratones.

Uno de los telemaratones que se realizaron a beneficio de la construcción del hospital de la diabetes para los dominicanos.

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“Los diabéticos dominicanos tendrán, por fin, su hospital donde recibir, no solo tratamientos médicos, sino orientación de cómo llevar una vida normal”.

Dr. Jorge Abraham Hazoury Bahlés Fundador del Inden

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Primer local del Inden, situado en la calle San Martín esquina Doctor Delgado, Santo Domingo.

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LA LUCHA CONTRA LA DIABETES SE FORTALECE

Ya

había solar y se estaban recaudando fon-

y la Sociedad Española de Diabetes, ofrecían ayuda técnica al

dos para continuar la labor de luchar contra

Inden, el cual ya gozaba de gran credibilidad. Por esta razón

la diabetes en República Dominicana, ahora

y gracias a las constantes gestiones y tenacidad del doctor

con un hospital, así que el 12 de junio de 1975,

Jorge Abraham Hazoury Bahlés, también se recibían generosas

se puso la primera piedra para la construcción del Hospital Es-

donaciones y se recibían invitaciones para participar en impor-

cuela de Diabetes. En un artículo publicado en su blog sobre

tantes encuentros internacionales.

la historia de la medicina dominicana, el doctor Herbert Stern cuenta que el patronato publicó un anuncio en la prensa que

Todo esto era el día a día del doctor Hazoury, toda su vida

decía: “Inicio construcción edificio”, invitando a posibles do-

giraba en torno a la lucha contra la diabetes. Asimismo, se con-

nantes, colaboradores, amigos y al pueblo en general a asistir

tinuaban realizando eventos para recaudar fotos para conti-

a la feliz ocasión de poner la primera piedra para el edificio que

nuar dando servicio en el Inden, seguir formando médicos y

albergaría el hospital para todos los diabéticos del país.

enfermeras para el tratamiento de la diabetes, incluyendo la especialización en el extranjero, y, por supuesto, para la cons-

Fue un acto simbólico y doña Mercedes Toral de Hazoury, pre-

trucción del hospital.

sidenta del Patronato contra la Diabetes, tuvo a su cargo la colocación de esa primera piedra. En el encuentro estuvieron

En agosto de 1975 tuvo lugar el Gran Telemaratón de Estre-

presentes amigos de la causa, el entonces vicepresidente de

llas, con la participación del famoso Leopoldo Fernández -Tres

la República, Carlos Rafael Goico Morales, y varios médicos

Patines-, quien actuó junto a Freddy Beras Goico, Julio César

destacados, tanto locales como extranjeros, ya que al día si-

Matías y Cuquín Victoria. También formaron parte del telema-

guiente, con una gran recepción en el Hotel Embajador, tam-

ratón Rafael Solano y su orquesta, Niní Caffaro, Cecilia García,

bién se le daba apertura al Primer Simposio Internacional de

Guillo Carías, Papa Molina y su orquesta, Sonia Silvestre, Luchy

Diabetes en el país, dedicado al doctor Leo P. Krall, diabetólo-

Vicioso, Rhina Ramírez, Luis José Mella, Wilfrido Vargas, Nobel

go norteamericano, director de la Joslin Clinic de Boston y, en

Alfonso, Francisco Grullón, Janet Dotel y Yaqui Nuñez del Ris-

palabras del doctor Stern, “gran amigo de los dominicanos” y

co. Los artistas dominicanos siempre apoyaron estos eventos

del doctor Hazoury Bahlés.

y la ciudadanía también se hizo presente con sus donaciones.

El simposio se llevó a cabo con gran éxito. En esa época se

En 1976, el Inden fue reconocido oficialmente como miembro

realizaban con frecuencia en el país cursos de diabetes, como

titular de la Federación Internacional de Diabetes y el doctor

parte de las acciones para concientizar y educar a la ciudada-

Hazoury fue nombrado miembro de honor de la Sociedad Ve-

nía y al personal de salud, así como seminarios, congresos y

nezolana de Diabetes. A estos le siguieron numerosos recono-

conferencias impartidas por brillantes especialistas de Esta-

cimientos por su trabajo incansable con la causa.

dos Unidos, España, Argentina, Colombia, Venezuela, Puerto Rico, entre otros, con gran participación de los médicos del

Un par de años más tarde, continuaba nuestra labor, dando

país. Asistían de todas las provincias.

servicio en el instituto, educando a la población, preparándonos para la construcción del hospital y nuestro personal parti-

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Prestigiosas instituciones internacionales, como la Asociación

cipando en convenciones y actividades internacionales repre-

Alemana de Diabetes, la Federación Internacional de Diabetes

sentando al país y, en ocasiones, a Latinoamérica. Se firmó en

Al instituto llegaban pacientes provenientes de todo el país.

33

Dr. Leo Krall en el año 1974.

Dr. Rodolfo Luft en el año 1976

el local del patronato un importantísimo acuerdo de trabajo del instituto con Joslin Clinic, que permitió la realización de intercambios y proyectos conjuntos.

Mientras, tuvimos que ocupar una casa contigua al instituto para tener más espacio para atender a los pacientes, pues la consulta había aumentado muchísimo.Ya contábamos con servicio de genética, un departamento de medicina nuclear y se habían habilitado varios consultorios.

En 1979, el gobierno donó otro terreno para la construcción del hospital, el cual también serviría para el campamento para niños diabéticos que ya se estaba gestando y en sus primeros años se llevó a cabo en otras locaciones. El senado aprobó el traspaso del terreno al Inden: 7,177 metros cuadrados en la urbanización, Los Ríos, de Santo Domingo. Finalmente iniciaron los trabajos de construcción del Hospital Escuela de la Diabetes. En todos esos años se había logrado recaudar más de un millón de pesos y, aunque se necesitaría otro medio millón para concluir la obra, no faltaron las actividades e iniciativas, los telemaratones y las donaciones generosas.

El doctor Hazoury Bahlés, a pesar de haber atravesado diversas situaciones difíciles de salud, incluyendo dos infartos, seguía constante en su lucha. No paraba. Su compromiso y entrega le ganó el respeto de todo el que, como él, trabajaba para mejorar la vida de las personas con diabetes. En 1981 la prestigiosa Fundación Jiménez Díaz, de España, lo distinguió con su insignia de honor.

En 1982 el doctor fundó y fue elegido rector de la Universidad Iberoemericana (Unibe) y se cumple el décimo aniversario del Patronato de Lucha contra la Diabetes y del Instituto Nacional de Diabetes, Endocrinología y Nutrición.

Dr. Jorge A. Hazoury Bahlés en el terreno El 28 de mayo de 1983, se inauguró el edificio del Hospital de la Diabetes, el gran sueño logrado a base de pasión, trabajo y tenacidad por Jorge Abraham Hazoury Bahlés, con el apoyo

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donde se construiría su sueño, el Inden.

El 28 de mayo de 1983 se inauguró el edificio del Hospital de la Diabetes, legado de amor de un pueblo comandado por un soñador que puso alma y corazón para lograrlo.

del patronato, todas las instituciones y empresas que contribuyeron con la causa, medios de comunicación, artistas, amigos, pero sobre todo, el pueblo dominicano. Al acto asistió el entonces presidente de la República, Salvador Jorge Blanco, entre otras autoridades del país.

Durante su discurso, el doctor Hazoury agradeció este invaluable respaldo y dijo que aunque al hospital aún le faltaban los equipos, estaba convencido de que el pueblo dominicano que lo construyó, lo llenaría, y que todos los diabéticos del país serían atendidos en ese hospital escuela. “Los pacientes que puedan hacerlo pagarán por sus hermanos dominicanos y así este hospital servirá para los fines que fue creado. Creemos que el futuro de esta institución es muy prometedor. Será algo muy grande: será escuela, enseñanza a los diabéticos, pero también a los médicos”, manifestó.

“Nuestros diabéticos encontrarán siempre refugio en esta, su casa, la que siempre pensamos era una necesidad impostergable para nuestro país”.

35

CONSTRUYENDO EL LEGADO La lucha contra la diabetes continúa.

Dr. Ezequiel Acosta, Dr. Víctor Perrota, Mercedes Toral de Hazoury, Dr. Ammar Ibrahim y Dr. Aurea Mota.

G

racias al trabajo arduo y tenaz del patronato, en-

mostraron mucho interés en conocer el nuevo hospital del In-

cabezado por doña Mercedes Toral de Hazoury; el

den. Muchos de estos cursos se llevan a cabo con los esfuer-

doctor Hazoury Bahlés y el equipo que con tanto

zos aunados de la SODODIA, la Asociación Médica Dominicana

esmero y pasión había logrado conformar para darlo

(AMD), el Inden y Unibe, y los invitados y ponentes eran siem-

todo juntos en beneficio de los diabéticos de República Domi-

pre del más alto nivel.

nicana, y con el apoyo en forma de generosas donaciones de

amigos de la causa, empresas, fundaciones e instituciones, el

Mientras, crecía el reconocimiento a la labor del patronato, el

hospital logró equiparse y funcionar en su totalidad. Pronto se

instituto y el doctor Hazoury, quien recibió en los años siguien-

convirtió en el hospital más grande y actualizado de América

tes el premio “El gordo del año”, galardón institucionalizado por

Latina y el Caribe para el cuidado de los pacientes diabéticos,

Freddy Beras Goico, con su programa, El Gordo de la Semana.

con especialistas de primera y reconocido por su trato humano.

Años más tarde, el patronato recibió el prestigioso premio “Bru-

Se había logrado muchísimo, pero la lucha apenas empezaba.

gal cree en su gente”. También recibió, en 1984, el reconoci-

Había mucho trabajo que hacer y el hospital era el canal. La

miento como Hijo Distinguido de Barahona, por el Ayuntamien-

educación era uno de los principales recursos, un arma contra

to Municipal de la ciudad.

la diabetes y una garantía para un futuro más claro para quienes viven con la enfermedad. Así, que continuaron los encuen-

Los niños diabéticos seguían siendo una de las causas más

tros profesionales.

cercanas al doctor Hazoury y su pequeño ejército, así que todos los años, en el verano, desde hacía ya algunos años, se

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Ese mismo año se llevaron a cabo un simposio y varios cursos,

llevaba a cabo el campamento para niños diabéticos. Estos en-

que atrajeron a reconocidos médicos internacionales, quienes

cuentros incluyen actividades educativas y de concientización

El reconocimiento a la labor del patronato, el instituto y el doctor Hazoury aumentaba, conforme a crecían los esfuerzos y avances del Inden en pro de la lucha contra la diabetes. Entre algunos de los galardones recibidos por su labor, destaca el prestigioso premio “Brugal cree en su gente”.

El Inden recibe premio “Brugal cree en su gente”.

sobre la enfermedad, así como de otras recreativas y la opor-

tanto internacionales como locales, el doctor Hazoury lle-

tunidad de compartir con niños en su misma situación. Ya para

gó a ser reconocido por su encomiable labor al servicio de

1986 en el nuevo hospital se había podido desarrollar todo lo

los diabéticos más necesitados.

programado relacionado a la diabetes, la endocrinología y la nutrición. El siguiente paso era extender o ampliar la sombrilla:

Se iban logrando muchas cosas en la lucha contra la dia-

empezar a generalizar los servicios médicos de la institución.

betes, y el Inden casi siempre estaba detrás de esas vic-

Al año siguiente se inauguró la clínica de la Tiroides en el hos-

torias. Se hizo el primer trasplante de riñón a una paciente

pital escuela, así como una clínica universitaria con sede en el

del Inden, gracias a un acuerdo interinstitucional con el

Inden para pacientes de escasos recursos. Un año más tarde,

hospital del doctor Salvador B. Gautier. Se consiguió que

se inició la residencia de Diabetes y Nutrición y, más adelante,

la insulina fuera libre de impuestos en el país… La labor del

la de Oftalmología.

Inden era fructífera, sin duda, y era dirigida por un equipo que era, más bien, una gran familia.

Las actividades para recaudar fondos (telemaratones, espectáculos, etc.) se continuaban realizando periódicamente y las

Las consultas en el Inden aumentaban como la espuma.

orientadas a la formación tampoco cesaban (de hecho no han

Afortunadamente el hospital tenía todas las condiciones

cesado). Congresos, charlas, seminarios, simposios, pesqui-

para hacerle frente, en cuanto a equipos, tecnología e in-

sajes, caminatas, jornadas y campamentos eran constantes y

fraestructura, y contábamos con los mejores especialistas.

una manera de abarcar y educar a los distintos públicos que se

Ya teníamos el Inden II, con los mismos servicios del hos-

habían identificado: los pacientes de diabetes y sus familiares,

pital, pero en la zona oriental, el edificio de Endocrinología,

las personas con riesgo de padecer diabetes, la sociedad en

Departamento de Neurología, Unidad de Pie Diabético y

general y el personal de salud. En varios de estos encuentros,

una nueva y moderna unidad de Cuidados Intensivos.

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El Senado de la República nombra al Dr. Hazoury “Padre de la Diabetes”.

En 2004, luego de una larga enfermedad, el doctor Hazoury Bahlés falleció. Su partida dejó un gran vacío, sin embargo, también levantó numerosas demostraciones de admiración, cariño y respeto. Las innumerables manifestaciones de solidaridad y condolencias abrazaron a la familia Hazoury Toral, a sus amigos, allegados y a todo el personal del Inden.

Se designó al doctor Víctor Perrotta en la Dirección General del hospital, quien puso toda su experiencia y empeño para su

Dr. Herbert Stern participa en el Congreso Dominicano de Diabetes.

buen funcionamiento. La obra del doctor Hazoury continuó y sigue creciendo, porque contagió a mucha gente de la pasión y lucha contra la diabetes. Su legado de amor y entrega vive,

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es grande y firme. De hecho, como símbolo de esto, poco des-

En 2008 fallece doctor Perrota. El doctor Ammar Ibrahim

pués de su fallecimiento, se nombró al hospital escuela en su

quedó a cargo de la dirección general y la doctora Aurea

honor: Hospital-Escuela Dr. Jorge Abraham Hazoury Bahlés.

Mota, a cargo de la dirección médica. Posiciones que am-

Después de todo, su misión de multiplicar el conocimiento y

bos continúan desempeñando con los más altos estándares

formar médicos especialistas en diabetes para continuar y ex-

de calidad, compromiso con el servicio y el trato humano

pandir su obra, era una realidad. Ya se habían graduado varias

a todos los pacientes, así como con la mística que se creó

promociones de las especialidades del Inden.

bajo el liderazgo del doctor Hazoury.

Denominación del Hospital Escuela Doctor Jorge Abraham Hazoury Bahlés

Dr. Ezequiel Acosta

Freddy Beras-Goico

Cardenal Nicolás De Jesús López Rodríguez

Dr. Rubén Andújar, Dr. Luis Scheker,

Dr. Víctor Perrotta , Francia de Subero, Dr. Jorge Subero,

Dra. Aura Fernández y Dr. Guillermo Moreno

Dr. Práxedes Castillo y Tania de Castillo

Mercedes Toral de Hazoury

Dr. Victor Perrotta

Sor Eutimia Urrutia 39

CÓMPLICES EN UNA CAUSA DE ACCIÓN Y CORAZÓN Colaboradores del hospital nos cuentan su experiencia siendo parte de la familia Inden.

Con su compromiso, pasión y visión, el doctor Jorge Abraham Hazoury Bahlés logró que muchas personas nobles y entusiastas se unieran a su causa: luchar contra la diabetes y mejorar la calidad de vida de las personas con esta condición de salud en la República Dominicana.

Su aliada y cómplice número uno fue su esposa, Mercedes Toral de Hazoury, doña Miky, quien no dudó ni un segundo para hacer suyo el proyecto de este tenaz visionario y, durante todo este tiempo, se ha entregado a la misión del Inden. Como presidenta del Patronato de Lucha contra la Diabetes, ha sido una trabajadora incansable y perseverante por la causa durante estos 50 años.

Sin embargo, como decíamos al principio y nos explica la misma doña Miky, el doctor “logró aunar un ejército”. A algunos de los militantes clave de ese ejército dedicaremos las próximas páginas.

Celebramos en este aniversario a todos los que de una manera u otra, han apoyado y ayudado a convertir en una exitosa realidad el sueño que un día fue el Inden. ¡Gracias por tanto!

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41

SOR EUTIMIA URRUTIA Un torbellino de energía, amor y servicio.

Sor

Eutimia Urrutia, nacida en la región

vasca, España, el 20 de enero de

1918, llegó a la República Dominicana en 1969. Sus hermanas de la congre-

gación Misioneras Dominicas del Rosario prestaban servicio en la Maternidad de la Altagracia a miles de madres dominicanas,

en una entrega llena de amor y dedicación.

Un día de 1973 participó en un curso de actualización acerca de la Diabetes que impartía el doctor Hazoury Bahlés y al que se convocó a médicos y enfermeras de todo el país.Cuentan que Sor Eutimia maravilló con su conversación y simpatía a muchos de los presentes en el curso, sin duda, una de las encantadas con su carisma fue Mercedes Toral de Hazoury.

En su libro “Sentir de mis recuerdos“, doña Miky relata ese primer encuentro, durante el receso del curso. Narra que tuvo tan buena impresión de ella que esa noche, al volver a casa con el

La familia Inden agasajó a Sor Eutimia en su cumpleaños número 100.

doctor Hazoury, le habló de ella, y que al día siguiente, también en el receso, volvieron a coincidir. El doctor se acercó a ella y a Sor Eutimia para saludarla y mientras charlaban de la labor del Inden, medio en broma, él le pidió que se uniera a su proyecto de lucha contra la diabetes. Ella le explicó que, como religiosa, no podía tomar esa decisión, así que sin decir mucho más, el domingo siguiente el doctor Hazoury llamó a la Maternidad La Altagracia, donde aún trabajaba Sor Eutimia, y solicitó a la

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Monja Provincial, que se encontraba presente de causalidad, el

final de sus días. “Sor Eutimia Urrutia fue para Nozim más que

permiso para que Sor Eutimia se integrara a su causa. Le habló

una hermana de afecto, de mentalidad, de fuerzas, de determi-

con tanto entusiasmo y seguridad de todo lo que entendía la

nación y de compromiso”, asegura doña Miky. “Sirvió a los pa-

religiosa podía aportar al proyecto, que el consejo de la con-

cientes diabéticos del instituto por más de 45 años, con amor y

gregación autorizó que fuera a ayudarle por 15 días.

devoción, prácticamente hasta el día de su partida física”.

Esos 15 días se convirtieron en más de 45 años. Sor Eutimia

Nada se hacía en el Inden sin la aprobación del doctor Hazoury

jamás volvió a separarse del lado del doctor Hazoury en su pro-

o Sor Eutimia. Fungió como tesorera del patronato y era la pul-

yecto del Inden, y se convirtió en la segunda al mando, la copi-

critud administrativa personificada, pues cuidaba cada centa-

loto eficiente, perseverante, entregada e incondicional hasta el

vo, así como cuidaba a los pacientes.

Con entusiasmo y entrega, sor Eutimia formó parte de cada iniciativa del instituto. El nuevo edificio de Pie Diabético lleva su nombre como un merecido homenaje.

Contando 100 años de edad, asistía al hospital todos los días con el mismo entusiasmo y el compromiso de siempre. Llegaba a las 7:30 de la mañana y visitaba a los enfermos hospitalizados, dejando en cada uno de ellos un agradable aliento de bienestar. Visitaba, además, la cocina, la lavandería, el cuarto de costura, para asegurarse de que todo estuviera en orden y disponiendo lo que se debía eje-

El mes de marzo de 1972 nos parecía soñar con la apertura de un pequeño apartamento en muy malas condiciones para los comienzos de lo que algún día sería el Hospital de la Diabetes.

cutar. A esa edad aún recorría las áreas de consulta, las de espera, así como las administrativas. Saludaba y escuchaba con atención a todo el que se le acercaba. ¡Qué clase de energía!

Sor Eutimia sabía absolutamente todos los pasos que se daban cada día en el hospital. Durante sus años de servicio jugó muchos roles y en todos aportó gran valor. Todos los departamentos del Inden la vieron presente durante los más de 45 años que estuvo en el proyecto, apoyando, estimulando, dando seguimiento a cada situación, manteniendo el contacto necesario con el personal médico y de apoyo, y mostrándose realmente interesada y preocupada en los momentos de necesidades y situaciones difíciles.

Por muchos años, cada mes, coordinó el ofrecimiento de una misa en el mismo hospital, con presencia de empleados, pacientes y familiares; un encuentro abierto a la espiritualidad y a la unión.

Hasta su muerte en 2019, Sor Eutimia Urrutia vivió dedicada al servicio, al amor y la entrega por los más desfavorecidos. Sin duda, todo un lujo haber contado con el liderazgo y la presencia de un ser humano tan excepcional.

43

DR. FRANCISCO JOSÉ VALERIO GARCÍA “Al hablar de la lucha contra la diabetes en la República Dominicana el Inden debe escribirse con letra dorada”.

El

Instituto Nacional de Diabetes es mi segundo hogar.

instituto para ser evaluados más profundamente. Todo esto

Participé en el primer curso de Diabetes que se dic-

sin costo alguno.

tó en Salud Pública, auspiciado por el doctor Jorge

Abraham Hazoury y otros jefes de Medicina Interna

de los diferentes hospitales de Santo Domingo. Este curso tuvo

Al hablar de la lucha contra la diabetes en la República Dominicana el Inden debe escribirse con letra dorada, porque en

una duración de seis meses y fuimos invitados médicos de casi

aquellos años nadie hablaba de diabetes. Solo el doctor Jorge

todos los hospitales del país. Entre los profesores estuvieron el

Abraham Hazoury Bahlés se atrevió a elevar su voz en favor

doctor Hazoury y el doctor Víctor M. Perrotta.

de la lucha contra la diabetes, cuando se hizo acompañar de un equipo de médicos que ya habían formado la sociedad do-

Cuando finalizó el curso, el doctor Perrotta me informa que el

minicana de diabetes. El doctor Hazoury, era un trabajador in-

doctor Hazoury me había seleccionado entre los médicos par-

cansable, un caballero, un consejero, un visionario, inteligente,

ticipantes para ofrecerme una beca para realizar estudios de

educado y culto, y para mí fue un honor estar al lado de este

diabetes más amplios en Madrid, España, y para dar la consul-

maestro que siempre trataba de enseñarte.

ta de diabetes que se iniciaba en la segunda planta de un edificio ubicado en la avenida San Martín, esquina Doctor Delgado,

Mantener la formación de nuevos médicos y graduarlos con

al lado del restaurante Vizcaya. En esa misma ocasión obtuve

el título de médico diabetólogo para entregarlos al país con la

también una beca de Salud Pública para realizar estudios de

finalidad de que cumplan el objetivo para el cual se formaron

endocrinología en la misma ciudad.

ha sido un desafío y un gran logro. Otros aportes del Inden en la lucha contra la diabetes han sido la creación de la clínica de

Pertenezco al Inden desde esa época, 1973. Los primeros

oftalmología, pie diabético y nefrología.

meses de consulta en el Inden, para mí fueron de enseñanza, y es ahí donde nace en mí el amor por nuestros pacientes y

Mi mayor satisfacción es haber estado presente en esta lucha

por la institución. El Inden, desde un principio, ha sido el pro-

y formar parte de ella, ver crecer al Inden y compartir con un

pulsor de la lucha contra la diabetes en República Dominicana.

personal capacitado y responsable del deber. El amor hacia la

Ha contribuido formando profesionales en diabetes (médicos

institución que vi nacer, el trato amigable de la familia Hazoury

diabetólogos), realizando pesquisajes en parques, centros

y de su director, Ammar Ibrahim, y la calidad del servicio que se

comerciales, oficinas públicas, etc., en diferentes sectores de

brinda en el Inden, es lo que me ha permitido permanecer en

la ciudad, con la finalidad de encontrar personas que pudie-

la institución todos estos años brindando mi servicio a todos

ran tener la enfermedad y no lo supieran. Si se encontraban

esos pacientes.

personas con glucosa elevada se citaban para que fueran al

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De cerca

Desde mi adolescencia, le dije a mis padres que iba a ser médico, para curar las enfermedades de las personas mayores.

PARA FORTALECER LA LUCHA CONTRA LA DIABETES EN REPÚBLICA DOMINICANA Y MEJORAR LA VIDA DE LAS PERSONAS QUE VIVEN CON LA ENFERMEDAD SE NECESITA… Apoyo de Salud Pública. La salud del pueblo es responsabilidad del Estado. Hay que proteger a los pacientes diabéticos donándoles los medicamentos, en especial la insulina a los niños diabéticos, colocar médicos especialistas en diabetes en todos los hospitales públicos, para que con todo esto se disminuya la ceguera, las amputaciones de miembros inferiores, diálisis renal, etc. También se debe mantener un personal dispuesto a laborar en las boticas populares en los fines de semana y días feriados, abiertas hasta las 10 de la noche, para que de esta manera el paciente pueda conseguir su medicamento con mayor facilidad. Así estaríamos ayudando a la lucha contra este flagelo que se llama diabetes mellitus.

DE SER MÉDICO DISFRUTO… Todo, para eso fui formado, respetando siempre el juramento de Hipócrates, en especial trabajar, aconsejar y guiar a los pacientes diabéticos en el manejo de su enfermedad.

UN DÍA DE TRABAJO PARA USTED ES… Muy ocupado, para un médico todos los días se presentan casos diferentes. Cada paciente que nos visita viene por una necesidad y nuestro deber es ayudarle a solucionar esa condición.

El Dr. Francisco Valerio ha sido parte importante del Inden desde sus inicios.

En la foto, junto a prominentes médicos colaboradores.

45

46

DR. VÍCTOR MANUEL PERROTTA Una vida dedicada al servicio.

V

íctor Manuel Perrota fue un gran médico que dedicó su vida al servicio a los demás y al bien común.

Cuando el doctor Jorge Abraham Hazoury Bahlés fundó la Sociedad Dominicana de Diabetes (SODO-

DIA) en 1966, estuvo entre los médicos que se integraron de inmediato. Estuvo en la primera directiva de SODODIA, y fue

su presidente, además, fue un aliado invaluable del doctor Hazoury en toda la historia del Inden.

El doctor Perrotta fue uno de los fundadores del Patronato de Lucha contra la Diabetes, junto al doctor Hazoury, fue subdirector del Inden, desde 1979 y, a partir de 2003, su director.

Nació en Puerto Plata en 1923. Tras graduarse de Medicina en la Universidad Autónoma de Santo Domingo y realizar sus estudios prácticos de la mano de los mejores médicos de la época, el Hospital Padre Billini, dedicó sus primeros años de ejercicio a dar servicio en diversos centros de salud del país.

Compartió con el doctor Hazoury la vocación de formar a otros profesionales de la medicina y por la labor social. Gracias a su capacidad y disposición para la enseñanza fue nombrado primer coordinador de la Residencia en Medicina Interna en el Hospital Dr. Francisco Moscoso Puello, del que fue fundador.

También fue también profesor de la Escuela de Enfermeras de Santo Domingo y fundador del Consultorio de las Siervas de María en el 1969, donde por más de 30 años dio consultas totalmente gratuitas.

El doctor Perrotta estuvo presente en todos los estamentos del Patronato de Lucha Contra la Diabetes y del Inden. Su presencia es recordada por los pacientes, empleados y médicos con gran cariño y respeto. Además de ser parte de la Sociedad Dominicana de Diabetes, perteneció a a la Sociedad Dominicana de Endocrinología y a la Asociación Latinoamericana de Diabetes. Asimismo, fue miembro del Consejo Regente de la Universidad Iberoamericana, Unibe.

El Doctor Perrotta, Mercedes Toral de Hazoury, Sor Eutimia Urrutia, Falleció en Santo Domingo en el 2008.

Consuelo Van Der linde y voluntarias durante uno de los campamentos de los niños diabéticos.

Basado en el artículo del doctor Herbert Stern, publicado originalmente en el Periódico El Caribe, 2014.

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DIRECTORA MÉDICO DEL INDEN

Dra. Aurea Estela Mota Brito “El Inden ha sido y es el rector de la lucha contra la diabetes en República Dominicana”.

La

doctora Aurea Mota es médico por vocación.

Desde pequeña, soñaba con ayudar a los en-

fermos con sus problemas de salud, “soñaba

con una bata blanca y un estetoscopio”, ase-

gura. Trabajó arduamente para hacer ese sueño realidad y desde 1988 los pacientes del Inden se benefician de su entre-

ga, compromiso y pasión por el servicio.

En su trayectoria en el hospital se ha desempeñado en distintas funciones: ha sido encargada de la tanda vespertina de consulta de diabetes, de la tanda sabatina en Inden II, coordinadora de la residencia de Diabetología, jefa de Enseñanza, y ha pasado prácticamente por todos los departamentos médicos y administrativos del Inden. Hoy día es la directora médico, un rol que lleva a cabo con amor y responsabilidad. Tal y como aprendió de su mentor, el doctor Hazoury. ¿Cómo se dio su entrada al Inden? En julio de 1989, una persona amiga me llamó a la casa un domingo y me dijo que buscara el periódico, que Inden llamaba a concurso para comenzar con el segundo grupo la residencia de Diabetes y Nutrición. Esa persona amiga me envió donde el doctor Hebert Stein, quien en ese entonces era el director. Tomé el examen, la entrevista y me aceptaron. Fuimos el segundo grupo, pero presentamos la tesis primero y realizamos la graduación. El Inden y Unibe nos hicieron una bonita y emotiva graduación. En los periódicos de circulación nacional se anunció con letras grandes que el Inden graduaba las tres primeras diabetólogas del país. La radio y la tv de esa época se hicieron eco de la noticia. ¿Cómo describiría esa época del hospital, cómo estaban las cosas en ese tiempo? En la época de mi entrada al Inden encontré una gran familia, donde todos tenían un solo norte: servir a los pacientes diabéticos siguiendo la mística del centro. Nuestros profesores eran muy entregados a la docencia. El hospital contaba con lo último en medicamentos y equipos, había una gran biblioteca con libros, revistas y artículos actualizados.

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Usted ha formado parte clave en la historia del Inden, ¿cuáles han sido los aportes más trascendentales del hospital para la lucha contra la diabetes en República Dominicana?

Desde su inicio, allá en la Delgado con San Martín, el Inden ha sido y es el rector de la lucha contra la diabetes en República Dominicana. Se ha dedicado a enseñar a médicos y pacientes sobre la diabetes y sus complicaciones, proporcionando a los pacientes diabéticos sus medicamentos a precios económicos y donando estos medicamentos a los que no tienen recursos, especialmente a los niños la insulina. Ha tenido en las consultas de diabetes médicos especializados que brindan un servicio humano y de calidad. Si hoy en República Dominicana se habla de Diabetes se debe al doctor Hazoury y al trabajo que

“En el Inden encontré una gran familia, donde todos tenían un solo norte: servir a los pacientes diabéticos siguiendo la mística del centro”.

durante estos 50 años ha realizado el Inden. ¿Cuáles han sido las mayores satisfacciones para usted, en lo personal, de formar parte de esta historia? Mi satisfacción más grande es formar parte del equipo directivo del Inden y participar en la formación de diabetólogos que hoy están brindando su servicio a la población dominicana de norte a sur y de este a oeste, bien preparados académicamente, con calidad humana y siguiendo la mística del Inden de servicio al paciente diabético . ¿Cuáles han sido los principales desafíos? Mi principal desafió es conmigo misma: corresponder a la confianza que puso en mí el doctor Hazoury. Mantener la calidad de los servicios, que ningún diabético salga del Inden sin sus medicamentos.

Seguir brindando a los pacientes de escasos recursos los medicamentos a precios económicos y dando a los niños diabéticos las insulinas. Continuar resolviendo las emergencias de los diabéticos en el Inden, que las madres diabéticas tengan su bebé en el hospital, con servicio de calidad. Brindar el servicio de oftalmología al paciente diabetico oportunamente y continuar con la calidad de Pie Diabético, evitando en lo posible las amputaciones. Mi otro desafío es la enseñanza, que cada vez la residencia de Diabetología y Nutrición, esté a la altura de las mejores, dentro y fuera del país. Que el diabetólogo que salga de la residencia sea cada vez más humano y con capacidad académica de altura.

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Dr. Ammar Ibrahim, Dra. Ivette Aybar, Dra. Aurea Mota, Dra. Juana Reynoso y el Dr. Marcos Nuñez.

¿Qué caracteriza a los especialistas del Inden? Su humildad,

¿Cuáles son los sacrificios más retadores de sortear? Ser

su dedicación a los pacientes diabéticos, su preparación aca-

médico es ya una carrera llena de sacrificios. Para dedicar

démica y algo muy importante: su calidad humana.

tiempo a los pacientes hay que restarlo a la familia.

¿Cuál ha sido la razón o la clave para dedicarle todos es-

¿Cómo fue trabajar de la mano del Dr. Hazoury Bahles? La

tos años al Inden y sus pacientes? Mi amor al trabajo y a los

experiencia de trabajar con el doctor Hazoury fue maravillosa.

pacientes diabéticos, quienes tienen una enfermedad que se

Un visionario, filántropo, un hombre recto, de corazón bonda-

controla, pero hasta ahora no se cura. Me siento su compañera

doso. Fue mi maestro, fue mi guía, me moldeó como un alfa-

de viaje en ese proceso. Otra razón han sido las enseñanzas

rero. Me enseñó paso a paso el manejo del Inden,me puso en

que me transmitieron el doctor Hazoury, el doctor Perrotta y

manos de doctor Perrota y sor Eutimia para que me enseñaran

Sor Eutimia.

el desenvolvimiento de la institución y su mística.

¿Qué se necesita en el país para fortalecer la lucha contra

¿Cómo describiría la experiencia de ser directora médico

la diabetes y mejorar la vida de las personas que viven con

de un hospital de tanta relevancia e impacto social como el

la enfermedad? Que el gobierno y el Ministerio de Salud, de

Inden? Es un reto muy grande y de mucha responsabilidad. El

acuerdo a las leyes, donen a los niños diabéticos las insulina

Inden es conocido nacional e internacionalmente por su dedi-

en todo el país y a los diabéticos de escasos recursos le den

cación y defensa a los pacientes diabéticos, por la calidad de

los medicamentos a precio económico. Que se nombre a los

sus servicios y por la formación de médicos especialistas. Me

diabetólogos en los hospitales del país y se formen más edu-

siento muy agradecida y orgullosa de haber llegado a la direc-

cadores en diabetes.

ción médica de esta institución de la mano de tres grandes: el doctor Hazoury, el doctor Perrotta y Sor Eutimia, quienes

¿Qué es lo que más disfruta de ser médico? Mi trabajo al

50

me formaron y dirigieron. Agradezco enormemente al doctor

servicio del paciente diabetico y participar en la formación y

Hazoruy mi formación y su confianza, e igual le tengo un agra-

educación de los diabetólogos.

decimiento muy grande al patronato.

CONSUELO VAN DER LINDE Entrega más allá de un rol.

C

Consuelo Van Der Linde, el Dr. Victor Perrotta y el Dr. Jorge A. Hazoury junto a colaboradores del patronato. onsuelo Van Der Linde fue parte del proyecto de lucha contra la diabetes desde sus inicios. Formó parte de la directiva del patronato, en el cual fungía como secretaria, y siempre trabajó en pro de la

meta con entrega y compromiso. Fueron continuos sus esfuer-

zos por lograr todos los objetivos que se trazaban y representó siempre el Instituto de la Diabetes.

Estuvo a cargo de la revista Inden desde que fue creada y, en todo momento, estuvo dispuesta a dar mucho más de la misión que representaba. Fue siempre, junto al doctor Hazoury, el doctor Perrotta y Sor Eutimia, un pilar de la Institución. Estuvo presente en el Inden hasta los últimos días de su vida. Siempre fue muy admirada por toda la familia Inden.

“El Instituto Nacional de Diabetes será la entidad que hará las investigaciones sobre esta enfermedad en el país siguiendo las normas que internacionalmente han sido recomendadas por la Federación Internacional de Diabetes” Consuelo Van Der Linde 1972

51

VOLUNTARIADO DEL INDEN Más de cuatro décadas de amor y solidaridad.

Milagros Peña, presidenta del Voluntariado, toma la glicemia de los pacienes en la Clínica de Pie Diabético.

P

ara Milagros Peña, presidenta del Voluntariado del

que no se sienta solo”, dice. “En los momentos difíciles nece-

Instituto Nacional de Diabetes, Endocrinología y Nu-

sitamos de alguien y esa es la esencia del Voluntariado del

trición (Inden), ser voluntaria es una misión, y la realiza

Inden”, asegura.

con dedicación y esmero. Sus visitas al hospital son

esperadas, todos la aprecian y valoran su labor.

En la actualidad hay alrededor de 30 voluntarias, pero han llegado a ser 50, pues siempre aparecen personas solidarias que

El Voluntariado del Inden inició sus labores en 1979, de la mano

quieren unirse y aportar su granito de arena a la causa. Algu-

de la señora Rosita Estrada, su primera presidenta y, desde

nos voluntarios aportan de manera económica, y otros donan

entonces, la organización ha sido un gran apoyo, tanto para el

su tiempo y su presencia en el hospital. Este último grupo suele

patronato y el hospital, como para sus pacientes. “Este volun-

dividirse las tareas, y colaboran en todas las áreas. Sin embar-

tariado inició prácticamente de la nada. Se necesitaban per-

go, para Milagros el mayor aporte del Voluntariado va dirigido

sonas que sirvieran de apoyo y ayuda para los pacientes y sus

a ofrecer apoyo emocional a los pacientes y a los allegados

familiares”, explica Milagros Peña, y eso es lo que han hecho

que los acompañan en sus visitas al hospital, orientarlos en

las damas del voluntariado durante más de 40 años.

el funcionamiento de los distintos procesos y servicios. Igualmente,en ocasiones ayudan con el pago de consultas, medica-

“Cuando una persona viene, con sus problemas de salud, es

mentos, estudios médicos o internamiento.

bueno que encuentre una mano amiga que desinteresadamen-

52

te lo ayude, ya sea en los procesos del hospital, acompañán-

Doña Milagros nos cuenta que el voluntariado nunca se detie-

dolo en sus consultas o simplemente estando a su lado, para

ne, es un trabajo de 24 horas, así que toda la ayuda es bienve-

El Voluntariado del Inden ha sido un gran soporte para el instituto y sus pacientes desde 1979.

Primeras voluntarias Inden nida. No importa el tiempo, la frecuencia con la que puedan involucrarse, si puedes aportar mucho o poco dinero; se le abren las puertas a todo el que de corazón desee tender su mano a los pacientes diabéticos.

“Una de las grandes satisfacciones en mi vida personal me la ha brindado mi trabajo en el Voluntariado Inden. Tener conciencia de que ha podido ofrecer una ayuda, por mínima que sea, a una persona necesitada, es de gran complacencia espiritual y nos hace cumplir con uno de los valores que debe poseer todo ser humano, que es la solidaridad”, nos dice Milagros. “Cuando se

Voluntarias

trabaja en forma voluntaria para el bien de los demás, no solo

participan en el

gana quien recibe el servicio; quien más gana es el que lo da,

carpamento

pues se cumple el enunciado: ‘Nos ganamos la vida con lo que

de niños.

recibimos, pero hacemos la vida con lo que damos’ “.

53

NOZIM HAZOURY, EL HOMBRE VOLCÁN El doctor Hazoury desde la mirada de su amigo y aliado, Freddy Ginebra.

Por Freddy Ginebra

No

recuerdo cómo ni dónde nos conocimos.

esperando tu llamada!” y de inmediato, me dictaba: “apunta,

Lo que sí sé es que desde el primer día

para que no se te olvide”. Y yo, obediente, me dejaba llevar.

hicimos clic. Nozim era un hombre carismático que contagiaba a quien se le acer-

Carácter fuerte, no doblegaba sus principios; hombre humilde,

cara. Un día me habló de su sueño: quería construir un hospital

con una capacidad impresionante de servir a los demás. Yo

donde todos los diabéticos del país, sin importar su condición

me reía mucho, pues cuando quería algo, se me hacía el viejito

económica, tuvieran las mejores atenciones.

enfermo para que le cogiera pena e hiciera lo que había planificado. ¡Un manipulador profesional!

Cuando hablaba de ese hospital que solo existía en su imaginación se le aguaban los ojos. Nozim era un romántico y soña-

Una vez me hizo una de sus célebres llamadas a muy tempra-

dor profesional. “Freddy -me dijo, entrecerrando los ojos,- será

nas horas de la mañana y me dijo: “¡Prepárate, que vas para

el mejor de toda Latinoamérica. Quiero que los barahoneros

Nueva York!” No preguntaba, me daba órdenes y, como buen

y dominicanos se sientan orgullosos de este hospital”. Doctor

hijo, no tenía más alternativa que obedecer. Miky, su compañe-

orgulloso de su ciudad natal.

ra inseparable, solo me miraba con pena. “¡Necesitamos dóla-

Ese era su sueño y me invitó a hacerlo realidad. El dinero está

allá! Hay que comprar muchos aparatos y todo es en dólares y

ahí, me decía, solo hay que buscarlo. “Hagamos un telema-

no los tenemos”.

res y nadie más que tú puede conseguirlos con los médicos de

ratón”, dijo una noche, “es la única manera de reunir dinero y hacer que la ciudadanía participe, total, este hospital es para

Comencé a viajar casi todos los meses a reuniones con la co-

el pueblo”. Dicho y hecho. Implementamos unos telemaratones

munidad de médicos y amigos, para armar un telemaratón en

anuales donde la gente más valiosa y comprometida del país

el Madison Square Garden. Confieso que el susto se instaló

se sumó a la causa.

en mí, pero Nozim me animaba diciéndome: “el dominicano es

El doctor, como lo llamaban, era un volcán en erupción perma-

tistas, Beras Goico sería la estrella, y pusimos fecha. Al inicio

nente y su lava de amor contagiaba a todos y nos motivaba a

del telemaratón vi poca gente y los nervios no me dejaban ni

trabajar. Freddy Beras, el hombre más importante y sobresa-

respirar. Habíamos arriesgado mucho y los costos eran muy

muy generoso y no nos van a abandonar”. Convocamos a ar-

liente de la televisión dominicana, decidió aportar su talento y

altos, aunque ninguno de nosotros cobró nunca un centavo.

con él y sin miedo, nos lanzamos a la calle. Para Nozim la pa-

Según fue subiendo el día, llegó un momento en que la poli-

labra “imposible” era inexistente; eso nos obligaba a todos los

cía tuvo que acordonar la zona porque miles de dominicanos

que lo rodeábamos a trabajar más y en familia. Sor Eutimia, su

habían acudido a hacer su aporte. Esa noche nos abrazamos

brazo derecho, era los pies en la tierra y tremenda organizadora,

agotados y nos pusimos a llorar.

además de incansable… trabajaba las 24 horas sin pestañear.

Nozim, con su actitud y su pasión, nos demostró que eran poMuchas son las historias que pude vivir a lado de este gran hombre, a quien admiré desde el primer día. Él decía que yo era

betes era un clásico y ya no solo el pueblo lo esperaba, sino

como su hijo y así me trataba. Sus llamadas fuera de hora eran

que los artistas más importantes se sumaban y los grandes

ya parte de mi horario cotidiano. Si él se despertaba a las 4:00

nombres y empresarios se encargaban de tomar las llamadas

a.m., no dudaba en llamarme y preguntarme “¿te desperté?” A

con sumas que cada vez nos sorprendían más.

lo que yo, muerto de sueño, contestaba: “¡Para nada, estaba

54

sibles los milagros. Durante 10 años, el telemaratón de la dia-

Don Freddy Ginebra en la inauguracion del Inden junto a ex presidente de la República dr. Jorge Blanco y esposa.

“Nozim fue un gran maestro, un supermán de verdad, un soñador que no le temía a nada”.

Otra historia fue cuando trajimos a las estrellas de la Fania All Star al Estadio Olímpico. Sucedió lo mismo, solo que esta vez el éxito fue tan grande que el público rompió las puertas y se metió al lugar. Ya sé que no moriré de un infarto. En un momento, el manager de las Estrellas me pidió le pagara antes de subir al escenario y le dije que yo no andaba con ese dinero, que se lo daría más tarde. Me amenazó con no subir al escenario y, cosa rara en mí, perdí la paciencia, estaba agotado de todo el trabajo y además muy tenso. Entonces lo amenacé y le dije: “¡Si usted no sube, no sale vivo de aquí!”. Al ver mi cara de loco dispuesto a todo, subió al escenario. Luego me pidió disculpas y yo le dije: “Ya veo que usted no está acostumbrado a trabajar César Sánchez para Santo Domingo Times

con gente decente”. Nozim, en ese momento, estaba hospitalizado y yo tenía una gran responsabilidad.

El día que inauguraron el hospital se me llenaron los ojos de lágrimas. Me sentí tan feliz y orgulloso de ser parte de esta familia que había logrado lo imposible.

Nozim fue un gran maestro, un supermán de verdad, un soñador que no le temía a nada. Con su ejemplo nos motivó a todos y estoy seguro que su legado lo hace inmortal. Cada vez que lo pienso, y lo hago muy a menudo, sonrío. Dios debe de estar muy contento con su regreso.

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DR. HAZOURY, INSPIRACIÓN PARA PENSAR EN GRANDE La Dra. Corina De Jesús comparte parte de su experiencia trabajando de la mano de nuestro fundador.

H

ablar del Inden para mi, es sin lugar a dudas, hablar de nuestro querido doctor Hazoury. Quiero hacerlo desde el punto de vista personal, por lo profundamente que desde su inicio me tocó y aun me tocan

los años vividos junto a él, y la forma en que impactaron mi

vida. Lo conocí en aquel lejano 1966, recién llegado de hacer su especialidad en Madrid, con la Fundación Jiménez Díaz. De ahí surge su famoso apodo de El Fajao, porque cuando le preguntaban en las salas de pacientes de la fundación qué estaba haciendo, invariablemente respondía: “Aquí, fajao”. Fui su primera practicante, yo aún no era médico.

Es en esa época, por primera vez se diagnosticaba en la República Dominicana, y bajo su dirección, diferentes síndromes endocrinos: Sheehan, Turner, Klinefelter, y se hace por vez primera determinación de cariotipos.

Con una práctica privada envidiable, el doctor decide dedicarse por entero a la fundación del Patronato Contra la Diabetes en 1972 y el Instituto Contra la Diabetes, en 1974. Durante todos esos años, el doctor Hazoury, que sabía que yo estaba cursando la especialidad de Diabetes y Endocrinología, me llamaba para recordarme que a mi regreso vendría a trabajar junto a él. Es así como inició esta aventura junto a ese ser que

una semana, para iniciar los campamentos de niños diabéti-

tenía la capacidad de inventarse y planear cosas que a mi me

cos. Y cuando me dijo: “Corina, vamos a hacer una revista”, le

impresionaban y me parecían descabelladas.

contesté: “Pero doctor, ni usted ni yo somos periodistas”. Sin embargo, ya él tenía el grupo de profesionales que nos ase-

Sufrió un infarto agudo al miocardio en 1976. Todos, incluyen-

sorarían. Las cosas llegaron a su cénit cuando me citó en su

do su querida esposa, creímos verlo en sus últimas horas. Les

oficina para que iniciáramos Unibe.

aseguro que de ahí fue que renació, y con fuerzas renovadas.

No se aún de dónde inventó los pesquisajes. Íbamos a dife-

Podría seguir enumerando mis vivencias y llenar páginas en-

rentes empresas a diagnosticar diabetes y nos levantábamos

teras... aprendí del doctor Hazoury tantas cosas. Sin duda, fue

prácticamente de madrugada para estar en diferentes barrios,

mi fuente de inspiración para pensar en grande. Por eso mi

previamente avisados, para hacer glicemias. Nada qué hablar

corazón siempre estará junto al Instituto, a Unibe y a su familia,

de aquellos maratones interminables cada agosto y el famoso

a la que veo como parte muy mía.

maratón que decidió hacer en pleno Manhattan.

Le doy gracias al Señor por haberme puesto en su camino y a

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En una ocasión, el doctor Hazoury me envió a la Clínica Joslin

ese titán que tanto me enseñó para crecer y convertirme en lo

de Boston, junto a nuestro entrañable Leo P. Krall, donde pasé

que soy hoy.

“Mi corazón siempre estará junto al Instituto, a Unibe y a la familia Hazoury”.

Dr. Leo Krall y la Dra. Corina de Jesús.

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PERSONAL DE ENFERMERÍA Jugadores clave en el cuidado y la atención integral de nuestros pacientes.

El

personal de enfermería es esencial en el cuidado

“Las enfermeras del Inden somos diferentes porque cuidamos

de un paciente hospitalizado. En el Inden desde

de los pacientes y les brindamos atención de calidad y hu-

el día uno nos hemos asegurado de que las enfer-

mana.”, asegura. Esto se logra identificándose y llevando a la

meras que apoyan el proceso de recuperación de

práctica una serie de valores que la licenciada Sena tiene muy

quienes reciben atenciones en el hospital sean conscientes de

claros, como la ética, la empatía, el respeto, la confiabilidad, el

su papel tan fundamental. Escolástica Sena, jefa de Enfermería,

compromiso y el trabajo en equipo. “Nuestros pacientes pue-

sabe que su rol es tan valioso e importante porque además de

den contar con nuestro apoyo emocional, que administramos

atenciones médicas, tienen dentro de su misión educar al pa-

sus medicaciones a tiempo y daremos seguimiento de su evo-

ciente diabético en el manejo de su enfermedad, la alimenta-

lución”, dice.

ción, el tratamiento y los controles que se requieren para evitar complicaciones. Esto, a la vez que dan apoyo emocional, tanto

Como ella, Isabel Guzmán es otra veterana enfermera con la

al paciente como a sus familiares y allegados.

filosofía de dar siempre lo mejor. Para la Lic. Guzmán entiende que, por su condición, el paciente diabético requiere de un cui-

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Las enfermeras juegan un papel esencial en el cuidado de los pacientes diabéticos, pues tienen dentro de su misión educar al paciente en el manejo de su enfermedad y ser un apoyo emocional para ellos.

Lic. Escolástica Sena

dado particular e integral, y ser estándar no es suficiente. “Se necesita estar dispuesto a darlo todo por el todo, tenemos que ser diferentes en comparación con otros hospitales”, explica, y pone como ejemplo que parte de su trabajo es ayudarles a tener un plan de vida, a trazarse metas de acuerdo a sus posibilidades y su salud, que les sirva de motivación y contribuyan a mejorar su estilo de vida.

Escolástica e Isabel no están solas en su compromiso con los pacientes del Inden. El personal de Enfermería del Inden cumple con los mismos estándares y se guía por los mismos valores institucionales.

Lic Isabel Guzmán

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DIRECTOR GENERAL DEL INDEN

DR. AMMAR IBRAHIM “Mi sueño es que ningún paciente o ninguna persona que tenga diabetes tenga una complicación por falta de atención o de medicamentos”.

PRESENTE Y FUTURO DEL INDEN

El

doctor Ammar Ibrahim sabía desde muy joven que quería ser médico, pero admite que no tenía ni idea de en lo que se estaba metiendo. Sin embargo, esa decisión que le pareció tan natural que ni siquiera

necesitó pensarla, fue la correcta, pues le regaló una carrera

que ama, con la que se identifica totalmente y que le ha permitido mejorar la vida de muchas personas y contribuir a la noble

causa de la lucha contra la diabetes.

Nacido en Siria, donde se graduó de Medicina, es el actual director general de nuestro Hospital Escuela Dr. Jorge Abraham Hazoury Bahlés, donde tiene una trayectoria de 25 años que le ha permitido crecer como ser humano y como médico, pero también aportar y sumar en esta misión de dar un servicio de calidad y humano a los pacientes de diabetes.

¿Cómo se ha desarrollado su carrera en el hospital? Comencé como cirujano y creo que no habían pasado

Conoce el Inden como la palma de su mano, lleva la mitad de

seis meses cuando la directora de entonces me nombró jefe

su vida aquí, y la mitad de la vida del instituto, así que es la per-

de Cirugía. Un año después, me nombró jefe de Pie Diabético y

sona perfecta para hablarnos del presente y futuro del hospital.

en 2007, el patronato me nombró director. Hasta el día de hoy.

El sueño del doctor Hazoury sigue desarrollándose y el doctor

¿Cómo se dio su entrada al Inden?

¿Cómo describiría usted el Inden y el rol que ha jugado en la prevención y lucha contra la diabetes en República Dominicana? Antes del Inden no ha-

Recién graduado de cirugía, a finales de 1996, estaba traba-

bía algo que pudiera llamarse lucha. Había quizá algunos médi-

Ibrahim es uno de los que están escribiendo la historia.

60

jando con quien me enseñó en la carrera, el doctor Andújar Pi-

cos privados, muy pocos, que trataban pacientes con diabetes,

mentel. Le estaba asistiendo en su consultorio cuando recibió

pero una institución formal, un patronato o un hospital, que

una llamada, habló varios minutos con algún amigo, y luego me

empezara con el paciente desde el momento del diagnóstico

dice: “¿usted quiere trabajar en el Inden como cirujano?”. Yo le

para darle seguimiento en todo, no. Por eso creo que el Inden

dije que sí, sin saber mucho lo que era el Inden. Me dijo que

es una institución única. Ahora, gracias a Dios, en los últimos

fuera al día siguiente y pregunte por el doctor Hazoury, que le

años han surgido varias instituciones y centros públicos y pri-

diga que el doctor Andújar me envió. Al otro día en la mañana

vados que se están uniendo a la lucha contra la diabetes, pero

fui, y cuando su asistente me hizo pasar, el doctor me hizo

el hospital duró estos 50 años prácticamente solo. Por eso,

dos o tres preguntas, una de ellas fue: “¿Usted va a trabajar

cada vez que se menciona la diabetes en República Dominica-

con gusto aquí?”, le dije que sí, y me respondió: “pues mañana

na, hay que hablar obligatoriamente del Hospital de la Diabetes

comienza”.

y del doctor Jorge Abraham Hazoury.

“No sé si podemos ganarle la batalla a la diabetes, lo importante es no dejar que nos gane”.

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A propósito de esto, para usted, ¿cuál es el legado del doctor Hazoury? El doctor Hazoury tiene dos legados muy importantes, aparte de su familia, claro: la educación y la salud. Esos son los dos ejes principales para el éxito de cualquier sociedad. En educación, su legado es la Universidad Iberoamericana, no hace falta hablar mucho de lo que representa, y en salud, el Instituto Nacional de la Diabetes. Dos legados que cualquier ser humano soñaría dejar cuando desaparezca físicamente, y el doctor los hizo ambos.

¿Qué es lo más satisfactorio de trabajar aquí para usted? Cualquier médico te hablará del impacto que uno tiene en la vida de los pacientes, no es algo particular mío, pero yo tengo la dicha de que, además de ser cirujano de pie diabético y tener contacto directo con los pacientes, tener esta función administrativa, que me permite percibir otras cosas también. No hay algo más grande que caminar por el hospital y oír un paciente decir: “¡Ese es el médico que me operó, ese es el mejor médico!”. Que no es verdad (risas), no soy el mejor, pero es lo más grande escuchar algo así mientras vas por un pasillo. Una vez me pasó que me encontré con una paciente que me dijo: “Director, yo nunca olvido lo que usted hizo conmigo”.

Yo pensé que la había operado o había operado a su familiar y estaba agradecida. Pero lo que yo había hecho tan grande por ella es que una vez, en una marcha por el Día Mundial de la Diabetes, habían dado gorras, yo tenía la mía y ella se acercó a decirme que no le habían dado ninguna. Yo me quité la mía y se la di. Yo no iba a recordar eso, pero ese gesto tan sencillo y para mi insignificante, ella lo percibió diferente, era algo tan grande para ella. Lo mismo pasa cuando alguien me dice: “Doctor, me quiero tomar una foto con usted”. Y quién soy yo para tomarme fotos con la gente, pero ellos ven eso grande y eso es la mayor satisfacción. Imagínate cómo se habrá sentido el doctor Hazoury, en aquel tiempo, como fundador.

¿Cuáles son los principales proyectos actuales y planes a corto plazo del hospital?

El hospital inició aquí, en este local de Los Ríos, en 1983, hace 40 años, estaba perfecto para ese momento, pero ya son 40 años. Hemos cambiado mucho, hemos ampliado y mejorado, pero ya está muy apretado para lo que se necesita. Como hay mucho espacio en el terreno, tenemos el proyecto de hacer una torre, el patronato está dando toques logísticos para ver cómo se puede hacer, y para buscar los recursos. La idea es que la torre acoja todo lo moderno, y el hospital quede para algunos servicios, así mantener desahogado todo. También hay que hacer parqueos. Cuando comenzamos o yo empecé aquí eran muy pocos los médicos que tenían carro, no existía ningún empleado ni ninguna enfermera con carro y tampoco tenían los pacientes. Hoy día no hay médicos ni enfermeras que no lo tengan, muy rara vez. Los pacientes también tienen o los traen en carros. Si antes venían 30 carros al día, era mucho Ahora, si recibimos 700 pacientes y hay 300 empleados, son mil carros. Esa es una de las prioridades para el patronato.

También hay proyectos en la parte educativa. Queremos seguir creciendo en la capacitación de médicos, incluir más especialidades y subespecialidades relacionadas a la diabetes para seguir contribuyendo a la sociedad con médicos capacitados.

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¿Cuál es su mayor fuente de inspiración o motivación para venir al Inden cada día? El amor al trabajo.

Yo no sé si el amor ya llegó al nivel de adicción (risas), pero es un gran amor. Para cualquier ser humano, identificarse con el trabajo que hace es uno de los mayores secretos del éxito. El éxito no se mide ni con dinero, ni con logros que se puedan contar. Se trata de integrarse al trabajo, sentirlo, hacerlo como se debe y con gusto, no solo por la recompensa económica, que claro, es necesaria, es el primer motivo por el que trabajamos, pero para mí, identificarme con lo que estoy haciendo es la inspiración más grande.

“Cada vez que se menciona la diabetes en República Dominicana, hay que hablar obligatoriamente del Hospital de la Diabetes y del doctor Jorge Abraham Hazoury”.

¿Cómo enfrentan los retos y desafíos que surgen el día a día en el hospital? No todo es color de rosa, no

dice: ¡Qué traidora! Porque se quedó, no cumplió. La mata, mira

puede serlo, hay muchas cosas que pasan y con las que lidia-

a la misma hoja que se quedó y piensa: ¡qué fiel!. Y el otoño

mos, pero como las autoridades del momento, lo mejor que po-

también la mira, y dice: “¡qué desafiante!”. Mi reflexión, con esta

demos hacer es convertir todos inconvenientes en oportunida-

experiencia de tratar a mucha gente, de distintas realidades, es

des. No podemos verlo como un problema o como un fracaso.

que no hay ni verdad absoluta ni error absoluto. Uno debe mirar

Si hay una queja de un paciente, aunque no tenga toda la razón,

también desde la perspectiva del otro. Si todos logramos mirar

hay que ver la oportunidad de utilizar esa información para me-

cada cosa desde distintos puntos de vista, fijarnos en varios

jorar lo que sea que haya salido mal. Uno no se puede mejorar si

aspectos, pienso que podríamos lograr mucho

no surgen esas oportunidades.

¿Cómo ha sido la experiencia de ser testigo y jugador clave de esta historia? ¿Tiene alguna reflexión de estos 25 años que tiene en el Inden?

¿Qué se necesita en nuestro país para ganarle la batalla a la diabetes? No sé si podemos ganarle la batalla, lo importante es no dejar que nos gane. Es una enfermedad de crecimiento muy rápido y que está muy relacionada

¡Wow, qué dura pregunta! Creo que fue Sócrates, quien miró

con la vida moderna, es uno de los precios que pagamos por la

un árbol en otoño. En otoño caen algunas hojas y otras quedan

modernidad. Pero no podemos dejar que nos gane y para eso

en el árbol. La hoja que está en el piso mira a la que se quedó y

necesitamos muchos hombres y mujeres comprometidos con

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la causa, que trabajen a favor de las personas con diabetes y continuar educando. Educar, educar, educar… a los que tienen diabetes, para que sepan cuidarse, y a los que no tienen, para que no lleguen a desarrollar la enfermedad. Ese no es trabajo de una institución, de una persona ni de un grupo, ese compromiso debe ser de toda la sociedad.

¿Algún sueño importante por cumplir como director del hospital? ¡Son muchos! Siempre hay muchos sueños, no tener sueños es como que no estar vivo. Uno es que ningún paciente o ninguna persona que tenga diabetes tenga una complicación por falta de atención o por falta de medicamentos.

Ese es el sueño más grande, porque todavía pasa. Cuando digo por falta de atención, no me refiero a que los médicos no sepan atender, es que muchas veces la familia no tiene la información o la educación para manejar la situación y a veces espera a que haya un problema grande para pedir ayuda. Con todo el trabajo que se está haciendo en el Inden, con todo el esfuerzo que hace nuestro equipo y todos los que trabajamos por la diabetes, no queremos que pase algo así por falta de atención, de recursos o de medicamentos. Quizá no podamos eliminar la diabetes, pero podemos eliminar su complicación.

¿Dónde cree usted que está el secreto de estos 50 años de éxito y aportes a la sociedad? Son dos claves, y creo que desde que se fundó el Inden esa mística siempre ha estado y seguirá siempre. Creer en lo que se está haciendo y el manejo con honestidad. Esto no se hizo como una fuente de ingreso, sino por creer en la causa, y luego se manejó el proyecto durante estos 50 años con honestidad. Esas han sido las claves.

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“El doctor Hazoury tiene dos legados muy importantes, aparte de su familia: la educación y la salud. Dos legados que cualquier ser humano soñaría dejar cuando desaparezca físicamente”.

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ATENCIÓN INTEGRAL PARA TODOS LOS DIABÉTICOS DOMINICANOS Los pacientes del Inden cuentan con servicio de salud de alta calidad en todas las especialidades.

U

na vez se pudieron desarrollar en el hospital todos

Esta responde a nuestra misión de proporcionar servicios de

los servicios esenciales relacionados a la diabetes, la

salud de alta calidad en todas las especialidades con los equi-

endocrinología y la nutrición, empezamos a integrar

pos, medicamentos y facilidades adecuados.

más especialidades, tomando en cuenta que la dia-

betes puede causar otras complicaciones de salud. La primera

Apostamos por una oferta médica integral que permita poten-

especialidad en sumarse fue la de oftalmología y hoy el hospital

ciar las distintas áreas sanitarias, dando respuestas ágiles a las

tiene habilitadas y equipadas con tecnología de punta las áreas

demandas sanitarias de nuestro entorno, especialmente de los

de Ginecología y Obstetricía, Neurología, Cardiología, Gastroen-

pacientes de escasos recursos, que son nuestra razón de ser.

terología, Nefrología, Pediatría, Endocrinología y Psicología.

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ESPECIALIDADES DISPONIBLES EN EL HOSPITAL • Cardiología • Cirugía general • Cirugía Vascular • Dermatología • Diabetología • Diabetología Pediátrica • Endocrinología • Endocrinología Pediátrica • Gastroenterología • Ginecología y Obstetricía • Hematología • Infectología • Nefrología • Neumología • Neurología • Neuropatía diabética • Nutrición • Oftalmología • Ortopedia • Otorrinolaringología • Pediatría • Psicología • Psiquiatría • Tecnología en Diabetes • Urología • Odontología • Evaluación anestésica preoperatoria • Pie diabético

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SERVICIO DE OFTALMOLOGÍA INDEN Referente de calidad, tecnología y servicio.

Por Dr. Herbert Stern

En

la década de 1980, el Instituto Nacional de la Diabetes ofrecía servicios de oftalmología en el local de la avenida Barahona. La doctora

Ángela Inés González realizó una gran labor

de organización de este servicio. Luego, para el año 1985, y

gracias a los desvelos del doctor Jorge Abraham Hazoury, se logró que la Fundación Rotaria Internacional considerara el proyecto de equipar completamente el Servicio de Oftalmología del recién inaugurado Hospital Escuela para Diabéticos.

Esa donación se consiguió bajo el seguimiento y la perseverancia del doctor Hazoury, con la ayuda de los rotarios dominicanos y del doctor Carlos Canseco, insigne rotario mexicano.

Los rotarios dominicanos estuvieron representados por personas como Eligio Mella, Eudad Feria, Armando Rosenberg y César de Windt.

La persona escogida por la Fundación Rotaria para verificar la

viabilidad de ese proyecto, fue el doctor Leo P. Krall, prestigioso diabetólogo de la Clínica Joslin y la Universidad de Harvard y presidente honorario de la Federación Mundial de Diabetes.

El doctor Juan Batlle fue el encargado de elegir y adquirir los equipos necesarios, y quedó como oftalmóloga la doctora Kenia Suárez. En 1988, a mi regreso de España, luego de especializarme en Oftalmología en la Fundación Jiménez Díaz, el doctor Hazoury me pide que ingrese a dicho servicio a trabajar como médico. tiene en la oftalmología dominicana son: Cristóbal Fernández, Siempre bajo su guía y orientación, logramos llevarlo al nivel de

Belkys Angomás, Manuel Madera, Alfredo Mota, Tomás Vargas,

ofrecer cerca de 15,000 consultas por año. En 1995, al evaluar

Margarita Arbaje, Víctor Valette y Cynthia Cunillera. Junto a

los diez años transcurridos tras la donación, la Fundación Ro-

otros doctores. Todos ellos dedicaron grandes esfuerzos para

taria Internacional señaló que la donación al Inden era la que

que el servicio fuera creciendo.

había sido más provechosa en América Latina, por la cantidad de pacientes atendidos. Ese reconocimiento fue un gran orgu-

En la actualidad, el Servicio de Oftalmología del Inden ha inau-

llo para nosotros.

gurado nuevos espacios físicos, magníficamente equipados, al servicio de nuestro país. Además, ofrece hoy en día formación

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En 1990, y con el aval de la Universidad Iberoamericana (Uni-

en tres sub especialidades en Oftalmología: Oculoplastia, Glau-

be), nos tocó al doctor Cristóbal Fernández y a mí, fundar la

coma, y la de Estrabología. Aparte de los servicios menciona-

residencia de Oftalmología, que hasta la fecha ha graduado

dos y de la consulta general, el Inden tiene los departamentos

numerosos especialistas, destacados por ser excelentes pro-

de Córnea, Neurooftalmologia, y Retina, con servicio de prime-

fesionales. Algunos de los oftalmólogos que estuvieron en

ra calidad. Es un hermoso homenaje al doctor Hazoury, quien

esos primeros años, en que trabajamos arduamente para que

creó y dirigió el instituto bajo el ideal de servir a los demás y,

el Servicio de Oftalmología del Inden ocupe el lugar que hoy

sobre todo, a los más necesitados.

El Dr. Herbert Stern es un prominente oftalmólogo y abanderado de la lucha contra la diabetes. Ha sido parte clave del Patronato de Lucha Contra la Diabetes y vicepresidente del Consejo Ejecutivo del Hospital Escuela de Diabetes Dr. Jorge A. Hazoury, de quien fue un gran amigo. En la actualidad es presidente de la Academia Dominicana de Medicina.

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HOSPITAL ESCUELA La educación como pilar para salvar vidas.

Promoción de especialistas de Diabetes y Nutrición, Oftalmologia y Pie Diabético 2022.

D

esde los inicios del Instituto de Diabetes, Endocrinolo-

ye todo lo relacionado a la diabetes y sus complicaciones, desde

gía y Nutrición (Inden), su fundador, el doctor Hazoury

la base bioquímica de dicha enfermedad hasta los recursos más

Bahlés, tuvo la visión de brindar los servicios médicos

avanzados y de punta para manejarla.

a las personas que padecen diabetes, algo que era

muy novedoso en aquel tiempo. Pero, además, de capacitar a la

Por el gran volumen de pacientes que acuden a nuestro hospi-

clase médica en materia de diabetes y sus complicaciones. Así,

tal (más de 5,000 consultas de diabetes al mes) y los pacientes

en 1988, nace la primera y, hasta hace poco, la única residencia

ingresados, el programa práctico de esta residencia es único, ya

médica de Diabetología y Nutrición”, explica Yinette Read, jefa

que los médicos que están en formación tienen la oportunidad

de Enseñanza del Inden.

de manejar un volumen muy grande de casos. Este es un factor que ayuda a adquirir la destreza y experiencia necesaria para su

Con esta residencia se ha graduado un gran número de especia-

futuro profesional.

listas nacionales e internacionales que han ocupado casi todo el territorio nacional para ofrecer atenciones médicas altamente

Otro elemento diferenciador, de acuerdo a la doctora Read, es

especializadas y con las herramientas educativas necesarias

que el programa académico cuenta con profesores altamente

para todas las personas que padecen esta enfermedad. “De

capacitados y expertos en el manejo de la enfermedad, lo que

esta manera el Dr. Hazoury cumple una de sus metas, basada

completa el binomio de enseñanza a los residentes. “Los egre-

en su filosofía de que el saber debe ser compartido”, asegura.

sados del Inden son profesionales capacitados, de alta calidad y capaces de tratar de forma integral y oportuna a los pacientes

El programa académico de la Residencia de Diabetes y Nutrición, avalada por la Universidad Iberoamericana (UNIBE), inclu-

70

con diabetes y sus complicaciones”, manifiesta.

El poder de multiplicar el conocimiento “Somos una escuela donde prima la academia, sin dejar de ver al médico como individuo, y donde el paciente se convierte en el motor de cada actividad. Nuestra escuela se caracteriza por forjar en las mentes de los doctores nacientes el concepto de familia, somos la familia Inden”, asegura Elizabeth Cuevas, coordinadora de la Residencia de Diabetología y Nutrición. “El médico residente es más que un número, es la fuerza motriz de la academia, nos esforzamos por inculcar en los futuros especialistas pasión por la lucha contra la diabetes y el mejoramiento continuo”, dice.

Desde que surgió el programa de residencias avalado por Unibe, el Inden ofrece educación médica continua a médicos y enfermeras. Donde llegan, estos profesionales cambian la perspectiva y la visión de la diabetes. Son profesionales no sólo capaces de tratar bien la diabetes sino “con la misión de cambiarle la vida a sus pacientes”, dice.

Dra. Elizabeth Cuevas

Dra. Juana Reynoso

Dra. Yinette Read

71

Residencias de Oftalmología Además de la Residencia de Diabetes y Nutrición, desde 1991 el Inden cuenta con la Residencia de Oftalmología, fundada por los doctores Herbert Stern y Cristóbal Fernández, para formar especialistas en esta área que pueden atender las complicaciones oftálmicas de las personas con diabetes. Desde entonces se han graduado decenas de promociones con profesionales de varios países.

“A la fecha, el Departamento de Oftalmología y la residencia cuentan con todas las especialidades clínicas y quirúrgicas y los médicos especialistas que las avalan, tales como Retina, Oculoplastia, Glaucoma, Estrabismo y Oftalmología Pediátrica, Segmento anterior, Procedimientos, Neurooftalmologia, Uveitis, Oncologia e Investigación”, afirma la doctora Rosa Fernández, coordinadora de la residencia en Oftalmología . La doctora Fernández explica que posee una óptica moderna a disposición de nuestros pacientes y realiza numerosas actividades sociales para prevención y educación del paciente diabético ocular en diferentes zonas locales y rurales del país, colaborando así con la detección de personas no conocidas como diabéticas y la prevención de la retinopatía diabética y todas las afecciones oculares que la diabetes ocasiona.

Dra. Rosa Fernández

“El Departamento de Oftalmología y la residencia cuentan con todas las especialidades clínicas y quirúrgicas y los médicos especialistas que las avalan”.

Dra Rosa Fernández, Coordinadora de la Residencia de Oftalmología

72

Residencia de Pie Diabético En 2011 se creó la especialidad de Cirugía de Pie Diabético, dirigida a cirujanos generales y diseñada para desarrollar los conocimientos necesarios para realizar un diagnóstico adecuado y tratamiento correcto en las personas que padecen de pie diabético. También incluye todas las medidas de prevención y educación dirigidas a personas con diabetes, con el objetivo de impedir el desarrollo de dicha complicación.

El pie diabético es una de las complicaciones más temidas por los pacientes diabéticos, porque en muchas ocasiones puede terminar con amputaciones en forma parcial o total en los miembros inferiores. Por la importancia de esta patología el Inden le ha dedicado atenciones especiales desde su fundación.

73

“Trabajamos para formar profesionales no sólo capaces de tratar bien la diabetes sino también con la misión de cambiarles la vida a sus pacientes”.

Dra. Elizabeth Cuevas, coordinadora de la Residencia de Diabetología

Jornada de residentes Con el objetivo de contribuir con la educación médica del país, los residentes del Instituto Nacional de Diabetes, Endocrinología y Nutrición (Inden) organizan la Jornada de Residentes. Se trata de encuentros con un completo y actualizado programa académico con el aval de la Federación Internacional de Diabetes, Sociedad Dominicana de Diabetes, Colegio Médico Dominicano, la Universidad Autónoma de Santo Domingo y la Universidad Iberoamericana, Unibe.

Las jornadas incluyen conferencias magistrales a cargo de los médicos más experimentados del Inden, como nuestro director, el doctor Ammar Ibrahim. Se tocan siempre temas de tendencia en el sector salud y de gran relevancia para su práctica médica.

El evento está dirigido a residentes del área clínica, como medicina interna, cuidados intensivos, médicos generales, internos, médicos familiares, estudiantes, enfermeras y otras áreas afines de todo el territorio nacional.

Clínica de Pie Diabético En noviembre de 1999 se inauguró la primera etapa de la Clínica de Pie Diabético y, gracias a los esfuerzos de un grupo de profesionales multidisciplinarios, se logró reducir las amputaciones mayores de un 50-60 % a una cifra de un 7-8 % en sus primeros 12 años de servicio.

Con el tiempo y por la excelencia en el servicio brindado, el espacio resultó limitado, así que para poder seguir garantizando un servicio de calidad se inauguró en agosto de 2011 el nuevo centro de especialidades Pie Diabético, el único en América Latina dedicado al manejo integral de esta patología. El centro está compuesto por un moderno edificio de tres niveles, en un área de 2,000 metros cuadrados. Cuenta con varios consultorios y la Unidad de Pie Preventivo, donde se tratan las afecciones menores y no infectadas.

En 2018, y a propósito de celebrarse el cumpleaños número 100 de la tesorera del Patronato Contra la Diabetes y eterna colaboradora del doctor Hazoury, Sor Eutimia Urrutia, fue nombrada la clínica de Pie Diabético “Sor Eutimia”, como una manera de honrar su labor y su invaluable aporte.

74

Cada año, los residentes de Diabetes, Nutrición, Oftalmología y Pie Diabético organizan jornadas académicas para capacitar colegas y estudiantes.

75

Nuestros egresados:

profesionales que hacen la diferencia

Los especialistas egresados de las residencias del Inden dejan huellas a su paso y marcan la diferencia en las instituciones en las que dan servicio, al igual que en la vida de sus pacientes.

Nuestros egresados destacan por su elevada calidad profesional y humana.

DIABETES Y NUTRICIÓN Dr. José Rodríguez Despradel. “Al entrar a la Residencia Médica en Diabetología y Nutrición pude encontrar no solo una profesión, sino una pasión que día a día se fue consolidando. Al terminar mi tiempo de formación el hospital me dio la oportunidad de permanecer en la institución, ahora en calidad de Médico Ayudante (MA). Como Residente y como MA siempre tuve la oportunidad de expresar mis dudas, encontrar respuestas y en algunos casos proponer soluciones. El Inden como mi Alma Máter ha sido y sigue siendo una fuente de aprendizaje con la cual he podido crecer profesionalmente”.

Dr. Erick Alberto Reyes Vílchez. “Para mí ha sido de mucha satisfacción haber sido formado como médico especialista en el Instituto Nacional de Diabetes, Endocrinología y Nutrición (Inden) y luego formar parte del personal médico de esa institución, en la cual permanecí durante 15 años ininterrumpidos.

En mi formación como especialista tuve la oportunidad de recibir enseñanza de un grupo de profesionales excelentes de diferentes especialidades a los cuales estaré eternamente agradecido De igual manera, agradezco al Dr. Hazoury, del cual recibí apoyo en mi desempeño en el hospital, al personal paramédico, administrativo y demás áreas. Todavía me siento parte de esa institución, deseando que siga creciendo en el tiempo, dando cada vez más mejores frutos y protegiendo con sus servicios a esa gran masa de pacientes diabéticos”.

Dr. William Matías Jouk. Mi experiencia en el Inden siempre quedará plasmada en mi vida, promoviendo en mi persona un sinnúmero Dra. Jessica Espinoza (Bolivia).

de valores que sería muy extenso describir. El aprendizaje que con

“El Inden marcó mi vida personal

mayor alegría y motivación pude adquirir, fue el de siempre man-

y profesional, allí encontré un

tener un alto nivel de empatía con nuestros pacientes, los cuales

hogar donde no solo me enseña-

diariamente acuden, no solo solicitando un servicio, el cual debe

ron la maravilla de trabajar con la

de ser entregado con la mayor eficiencia, sino también recibir una

medicina basada en la evidencia,

atención humana, que les permita entender que su condición no

donde lo más importante es el

les limita tener una vida productiva, alegre y con un alto nivel de

bienestar del paciente; sino que

empoderamiento.

me enseñaron a ser líder y dirigir un trabajo en equipo. No sería la

Mi paso por el hospital en el desarrollo de mi carrera ha sido extrema-

profesional que soy, de no haber

damente positivo, ya que el solo hecho de ser egresado del Inden, me

pasado por el Inden”.

cataloga como un profesional competitivo y de altos estándares. Esto por la gran trayectoria nacional e internacional de la institución, que es la referencia para todos los pacientes de diabetes.

76

OFTALMOLOGÍA

Dr. Foroche Melgen “El Inden me enseñó la parte humana de la medicina, que los pacientes no son clientes, saber manejar a los diabéticos y tiroideos y, sobre todo, a servir a los más necesitados”.

Dra. Carolina Sardí (Venezuela). “Mi paso por el Inden, a parte de formarme como Oftalmólogo, me enseñó 5 importantes

PIE DIABÉTICO

aprendizajes que atesoro y valoro cada vez más con el paso del tiempo: 1) La formación integral en la atención del paciente diabético que obtuve durante mi residencia me ha ayudado a entender que cuando trato a un paciente diabético por un tema oftalmológico, siempre debo ir más allá del ojo.

2) La ética profesional, el colegaje, la excelencia y el trabajo en equipo que fue inculcado por mis profesores y compañeros durante mi residencia, trazó el camino que he seguido a lo largo de mi vida profesional.

3) Como tuve el privilegio de contar con profesores comprometidos, a la vanguardia en temas de oftalmología y de gran reconocimiento en el medio, eso se convirtió en una motivación a seguir sus pasos y a trabajar cada día para ofrecer una atención de calidad y humanizada, no solo a nuestros pacientes, sino a todas las personas que trabajan con nosotros.

Dra. Jazmiris Ortiz. “Recibir formación profesional en el cen4) Admiro y aprecio profundamente a mis compañeros de resi-

tro con más años de experiencia y eficacia comprobada en la

dencia, a pesar de los kilómetros que nos separan y los 15 años

comunidad diabética, es una experiencia inigualable y excep-

que han transcurrido desde que salí del Inden.

cional. El impacto en mi desarrollo, es doble, porque me ha capacitado para afrontar una de las patologías que más afecta a la

5) Finalmente y quizás lo más importante, es que tuve el honor

población en sentido general y, además, me estimula a educar

de haber sido formada por mujeres oftalmólogas excepciona-

a otros médicos, pacientes, familiares y relacionados al sector

les, todas muy diferentes, pero todas brillantes. Su ejemplo me

salud, en la prevención y detección temprana del pie diabético”.

inspiró durante mi formación y sigue siendo referencia para mi no solo a nivel laboral sino también a nivel personal”.

77

ACERCÁNDONOS AL PACIENTE Campamentos, convivencias y caminatas para educar sobre la diabetes y crear un sentido de comunidad.

78

D

esde el principio, ha sido una meta del Instituto Na-

permitido mejorar la vida de muchos pacientes, tanto adultos

cional de Diabetes, Endocrinología y Nutrición la

como niños, y sus familiares. “La diabetes es una condición de

educación del diabético y de su ambiente familiar y

salud de autogestión, en la cual el paciente tiene que hacer-

social. Dentro de las acciones que se han llevado a

se responsable del cuidado de su salud para mantenerla bajo

cabo para cumplir con este compromiso desde nuestros prime-

control. Conociendo esta realidad el hospital asume la educa-

ros años de servicio fueron los seminarios y convivencias para

ción del paciente desde que es diagnosticado, con diferentes

diabéticos, así como los campamentos para niños diabéticos.

estrategias que lo ayudan a conocer su condición y cuidar de sí mismo, tanto física como mentalmente”, explica Vilma Cape-

Aunque desde 1980 se empezaron a organizar algunos en-

llán, psicóloga del Inden.

cuentros con este concepto, el proyecto del campamento para niños diabéticos cobró más carácter y formalidad a los pocos

En la actualidad, los campamentos se realizan una o dos veces

años de abrir sus puertas el hospital. El enfoque del programa

al año y tienen una duración de tres días, durante los cuales los

y las actividades es orientar a los niños sobre la diabetes, la

pacientes pediátricos participan de actividades recreativas, jue-

gestión de la enfermedad, cómo alimentarse adecuadamente,

gos, piscina, deportes, manualidades y espectáculos artísticos,

el uso de la insulina, entre otros temas, mientras comparten

alternados con charlas y conferencias sobre todos los aspectos

con otros niños con la misma condición y disfrutan jugando y

relacionados con la diabetes, sus cuidados y las posibles com-

practicando deporte.

plicaciones. También se involucran sus familiares, quienes reciben las herramientas que les permiten tomar un rol con mayor

Desde el principio, todas las actividades del campamento se

responsabilidad en el cuidado del niño diabético.

han llevado a cabo bajo la coordinación y supervisión de pediatras especialistas, dietistas, psicólogos, enfermeras, perso-

“Esta es una actividad importante para el hospital, por lo que se

nal de apoyo y de entretenimiento, y con la participación activa

involucra el personal administrativo, el área médica, el área de

de madres de niños pacientes del instituto.

nutrición, el personal de enfermería, el patronato, el departamento de cocina y departamento de mantenimiento”, cuenta la

Durante los primeros años el campamento se realizó en loca-

doctora Adonise Rosario, jefa del Departamento de Pediatría

ciones diversas, pero para diciembre de 1994, ya teníamos un

del Inden.

lugar propio para realizar el campamento, con habitaciones separadas para niños y niñas, una amplia y fresca terraza, juegos

Entre todas las iniciativas educativas y de sensibilización que

de patio, dos canchas y una piscina. A la actividad de inaugu-

coordina y ejecuta el Iden, los campamentos tienen un impacto

ración de la nueva casa del campamento, organizada por el

especial por estar dirigidos a niños. Recibir toda esta informa-

patronato y encabezada por ella misma, como su presidenta,

ción y herramientas a temprana edad los pone en una posición

asistió el entonces vicepresidente de la República, licenciado

mucho más favorable ante la enfermedad, además de permitir-

Jacinto Peynado; el secretario de Salud Pública, el fiscal del

les conectar con otros niños en las mismas circunstancias. Es

Distrito Nacional, Freddy Beras-Goico, Freddy Ginebra, entre

muy diferente lidiar con cualquier situación cuando tienes la in-

otras autoridades y personalidades. Era el primer campamento

formación necesaria para enfrentarla y, además, sabes que no

de su clase en toda Latinoamérica

estás solo. La licenciada Capellán explica que los participantes en el campamento al final “saben que cuentan con otras per-

Estos encuentros se siguen llevando a cabo y decenas de ni-

sonas que al igual que ellos van caminando con esta condición

ños se benefician de esta experiencia cada año. El compromi-

de salud, que representa retos, pero que con disciplina y una

so del patronato, el instituto y el hospital con la educación ha

buena red de apoyo es más fácil transitar”.

79

Departamento de Pediatría

Insu

Lina

Insu y Lina El Departamento de Pediatría del Inden, nombrado Insu y Lina, tiene a disposición del público en general la Clínica de Atención al Niño con Diabetes, la consulta de pediatría general y consulta de Endocrinología Pediátrica. Aquí se ofrece atención integral por parte del personal médico, atención psicológica personalizada, así como orientación y asesoría nutricional y de actividad física, en una ambiente acogedor, creado especialmente para los niños. Un gran logro es que, hasta los 18 años de edad, niños y adolescentes pueden obtener su tratamiento de insulina totalmente subsidiado por el Patronato de Lucha Contra la Diabetes.

Otra modalidad de encuentro con los pacientes son los grupos de apoyo para adolescentes diabéticos. En ellos el equipo de salud mental y los especialistas trabajan tanto con los jovenes como con sus padres, proporcionándoles la información que necesitan para poder gestionar de una mejor manera la enfermedad, así como el cuidado de la salud mental.

80

Dra. Adonise Rosario

Dra. Noris Solano

Lic. Vilma Capellán

81

Primera convivencia del Inden

Las convivencias Otra de las iniciativas constantes para concientizar y educar sobre la diabetes que lleva a cabo el patronato y el Inden son las convivencias. Nacieron como encuentros informales para personas con diabetes en los que podían compartir sus experiencias, pero sobre todo, donde podían aprender a entender la enfermedad, su cuidado y cómo mantenerla controlada. Todo esto con la guía de médicos especialistas. La primera actividad de este tipo se realizó incluso antes de haber inaugurado el hospital y no se tiene referencia de un evento igual en Latinoamérica con pacientes de diabetes.

Hoy día funcionan como encuentros de día completo donde se llevan a cabo actividades educativas, de socialización, actividades físicas y dinámicas psicoafectivas. “El objetivo es educar, fortalecer la relación médico-paciente y la integración del paciente y su familia”, afirma la doctora Rosario.

“En condiciones crónicas como la diabetes donde no se vislumbra una cura definitiva y en donde la educación es vital para un buen control metabólico, estas actividades favorecen a que el paciente se mantenga actualizado en cómo debe cuidar su salud, conocer sus números, mantener los conceptos de alimentación equilibrada, ejercicio de forma regular”, dice. “En general, nos permite ayudar a los pacientes y su entorno a hacer más llevadera la condición”.

82

“La educación siempre ha sido un pilar clave en el Inden y su visión de lucha contra la diabetes”.

Dr. Jorge Abraham Hazoury Bahlés Fundador del Inden

83

EXPANSIÓN: EDIFICIO INDEN II DR. VÍCTOR MANUEL PERROTTA Para facilitar el traslado a los pacientes del este de la capital y ampliar la capacidad de servicio, en 1998 se inauguró un segundo edificio del instituto en la zona oriental.

Con

la finalidad de aligerar la carga

Perrotta M., en honor al pasado director del hospital, amigo

económica que representaba el

entrañable y aliado del doctor Hazoury en todas las etapas de

traslado de los pacientes del In-

su proyecto de lucha contra la diabetes.

den que vivían en la zona oriental

de la capital hasta las instalaciones de Los Ríos, y aumentar el

Hoy día, en el Inden II

alcance de los servicios, en 1999 se inauguró en Santo Domingo

se ofrecen los servicios de:

Este el Inden II. Situado en la Carretera Mella, con fácil acceso al transporte público, abrió al público para ofrecer los servicios

• Diabetología

de emergencias, rayos X, tomografía, laboratorio, cardiología; y

• Endocrinología

claro, las consultas médicas especializadas en diabetes y nu-

• Oftalmología

trición. Sólo si se necesita un internamiento o se encuentra en

• Sala de cura para pie diabético

estado crítico son referidos a la sede central del Inden.

• Laboratorio • Sonografía

84

Al cumplirse 10 años de su apertura, el 3 de junio de 2009, se

• Farmacia

reinauguró el edificio y bautizó con el nombre del Dr. Víctor M.

• Trabajo social

En el Inden II los pacientes de la zona oriental de la capital pueden acceder a diversos servicios u especialidades.

85

CAMBIANDO VIDAS UNA FAMILIA A LA VEZ Dos pacientes nos cuentan su experiencia en el Inden.

Dar

un servicio de salud de calidad con un trato humano es parte de nuestra

visión y de nuestros valores institucionales. Tanto el patronato, como el ins-

tituto y el hospital nacieron como respuesta a una necesidad

de proteger a las personas diabéticas de escasos recursos y

garantizar que la enfermedad sea compatible con mantener calidad de vida, tanto para ellos como para sus familiares. Por esta razón, el trato digno y empático a nuestros pacientes, mientras les damos las herramientas y el cuidado que requiere la enfermedad, es parte esencial de lo que hacemos cada día.

Conversamos con algunos de nuestros pacientes, quienes compartieron para esta feliz ocasión de celebrar 50 años, su experiencia en el Inden. Esto fue lo que nos contaron:

86

“En el Inden somos más que simples pacientes, somos familia”.

Carmen Luisa Blanche Suriel

“En el Inden me han ayudado en mi vida cotidiana, haciéndola más normal y sencilla”.

Mario Miguel Fernández Tremols Carmen Luisa Blanche Suriel 74 años Llegué al Inden por recomendación de mi hermana Ana Blanche, a raíz de que me detectaron ser diabética en otro centro médico. Mi experiencia es muy satisfactoria, gracias a las atenciones de cada uno de los médicos diabetólogos, cardiólogos, gastro, cirujanos, ortopedas, y la oportuna intervención del director general. También soy sobreviviente de cáncer de mama, tuve complicaciones durante ese proceso, fui llevada vía la Emergencia del Inden y fui tratada por el personal médico de maravilla, quienes me estabilizaron. Agradezco el apoyo y oraciones durante todo el proceso.

Mi salud ha evolucionado de forma satisfactoria, claro, dentro de mi edad y mis enfermedades base. Recuerdo que a raíz de mi visita al cardiólogo, el doctor Cadena, me refirió al doctor Ibrahim, director general, quien mediante una evaluación profunda determinó que tenía una obstrucción circulatoria en la pierna derecha. Al día siguiente estaba operada y dada de alta en mi casa, en franca mejoría y sin costo alguno. Esa es una de las tantas experiencias que he vivido en todo estos años que tengo visitando a mis médicos en el Inden.

Agradezco el buen trato brindado a familiares, entre ellos a uno de mis hermanos, quien por muchos años fue paciente del centro, y mi hijo, quien pasó por un proceso de pie diabético con amenaza de amputación de un dedo, lo que gracias a Dios, el conocimiento y la dedicación de los médicos, no se produjo.

Mario Miguel Fernández Tremols 18 años Llegué al Inden gracias a mi doctora Sabrina Mejía, quien me recomendó el hospital y me manifestó que en caso de emergencia no me llevaran a ningún otro sitio, pues el personal del Inden está capacitado para ese tipo de situaciones. Cuando llegué, no estaba estable, ya que mi familia y yo no teníamos mucho conocimiento de esta condición y habíamos visitado varios médicos diabetólogos y endocrinólogos.

Desde entonces, mi salud ha mejorado. El Inden me ha ayudado con mi condición de diabético y en mi vida cotidiana, haciéndola más normal y sencilla. Para mí lo mejor es el grandioso servicio que te ofrecen, te brindan toda su ayuda y apoyo, haciendo que todo sea menos estresante. Me han hecho entender que no estoy solo y que puedo contar con ellos.

87

CRECIMIENTO Y TECNOLOGÍA DE PUNTA AL SERVICIO DE LA SALUD Desde su fundación, el Inden no ha parado de crecer y modernizarse para ofrecer atenciones de primera y servicios de vanguardia a todos nuestros pacientes, especialmente a los más necesitados.

D

urante estos 50 años, el Inden ha venido creciendo

ese primer diagnóstico. También se han desarrollado las áreas

en su infraestructura con pasos muy firmes y en for-

de Consulta Externa de Diabetes, Pediatría Insu y Lina, toma

ma ascendente, hasta tener todo lo que tenemos a

de muestra de laboratorio, el auditorio con capacidad de más

la vista hoy día. Aunque el edificio actual se inauguró

de 280 personas, farmacia, así como el Edificio Inden II Dr. Víc-

en 1983, desde entonces ha ido evolucionando, ampliando y

tor Perrota, entre otros.

mejorando según la necesidad y adelantándose a las que pue-

dan surgir.

Actualmente se le está dando los toques finales a un gran proyecto que permitirá eficientizar los servicios y seguir crecien-

88

Algunos ejemplos son la creación de la Clínica de Pie Diabéti-

do para beneficio de todos nuestros pacientes y la sociedad

co, el área de Emergencia, las áreas de Odontología, Diálisis,

dominicana. Se trata de la construcción de una moderna torre

la de Recepción y Facturación. Asimismo, la innovadora área

en donde se agruparán, por piso, todas las necesidades de los

de Consulta de Diabetes de Primera Vez, pensada y diseñada

pacientes, contando con todos los servicios y recursos huma-

para acoger y acompañar a las personas que se enfrentan a

nos y tecnológicos que permitan una atención superior.

La tecnología ha jugado un rol clave en el crecimiento del Inden y su aporte a la sociedad. Desde su fundación, el Inden está comprometido con la adquisición de todas las tecnologías necesarias para ofrecer un servicio de salud óptimo a las per-

La tecnología en salud es una rueda que nunca se detiene; en el Inden tampoco nos detenemos.

sonas con diabetes. de pacientes diabéticos, tales como monitoreo continuo El hospital cuenta la tecnología esencial y necesaria para la

de glucosa, ecógrafos de última generación (sonografía

correcta atención a nuestros pacientes, iniciando con sistema

normal, doppler y eco cardíaco), tomógrafos, mamógrafos,

de turnos automatizado, según el área a donde se solicita el

densitometría, tomografía maxilar y panorámica. Asimismo,

servicio y un sistema de facturación enlazado con el récord

contamos con equipos de cirugía laparoscópica y oftál-

electrónico en donde se registran todos los eventos médicos

mica con tecnología de punta. La tecnología en salud es

de dicho paciente. Para diagnóstico y tratamientos tenemos

una rueda que nunca se detiene; en el Inden tampoco nos

todos los equipos que se necesitan para la atención integral

detenemos en este sentido.

89

90

INVESTIGACIÓN Y DIVULGACIÓN CIENTÍFICA Inden y Unibe realizaron importante investigación sobre la diabetes en la población dominicana.

En

el año 2019, presentamos junto a la Universidad Iberoamericana (Unibe) nuestra línea de investigación con el estudio “Caracterización de la diabetes mellitus tipo 2 en República

Dominicana”, el cual nos permitió determinar importantes es-

tadísticas sobre la situación de pacientes diabéticos en la población dominicana.

La investigación, presentada en el auditorio del Inden por nuestro director general, el doctor Ammar Ibrahim, tuvo como objetivo general determinar las características clínicas, antropométricas y sociodemográficas para documentar la frecuencia de

diabetes de la población adulta en la República Dominicana.

En su intervención, el doctor Ammar Ibrahim dio a conocer importantes resultados del estudio para la cual fueron evaluadas más de 10,500 personas de todas las provincias del país, determinando que 13.45 % de los participantes tienen diabetes, de estos 11.10 % sabían que tienen diabetes (ya su diabetes está diagnosticada) y 2.35 % desconocían que tienen diabetes. Ade-

Aida Mencia-Ripley, Julio Amado Castaños Guzmán, Mercedes Toral

más, 9.3 % de la muestra tiene pre-diabetes. Otro aspecto im-

de Hazoury , Ammar Ibrahim y Sor Eutimia Urrutia

portante que se determinó fue que el 25 % de la muestra sabe que tienen hipertensión arterial, y 58 % de las personas con diabetes tienen hipertensión arterial. La investigación estuvo liderada por investigadores y médicos de ambas instituciones.

Datos arrojados por la investigación resaltan que el 13.4% de la población dominicana padece de diabetes y 9.3% padece pre-diabetes.

91

UN IMPACTO QUE EMPIEZA DESDE ADENTRO Colaboradores del hospital nos cuentan su experiencia siendo parte de la familia Inden.

El Inden ha podido cumplir con su misión de proveer un servicio de salud humano y de calidad a los diabéticos de República Dominicana gracias a la labor de una gran cantidad de personas que desde el inicio hasta hoy han hecho suyo ese compromiso, apoyando con su trabajo la visión original del doctor Hazoury Bahlés.

Llegamos a estos 50 años porque la unión hace la fuerza y hemos contado con profesionales valiosos que cada día ponen capacidad, corazón y sentido de servicio cada día a lo que hacen.

Sin ellos no habría celebración.

Algunos de esos valiosos colaboradores de la familia Inden cuentan su experiencia siendo parte de este sueño realizado.

92

DRA. CARMEN MÉNDEZ RISK DIRECTORA DEL DEPARTAMENTO DE ENDOCRINOLOGÍA 30 años en el Inden Mi experiencia en el Inden ha sido una excelente oportunidad de hacer un trabajo médico decente. Me ha permitido servir con mi ejercicio profesional a pacientes de todos los niveles socioeconómicos. En el servicio de endocrinología hemos podido ver y atender casi todas las patologías endocrinas, los pacientes suelen asistir por recomendaciones de otros pacientes agradecidos por el servicio. El Inden se caracteriza por la calidad en la asistencia médica, ese es su principal aporte a la sociedad.

LIC. ANA MERCEDES SANTOS GERENTE FINANCIERO 25 años en el Inden Al inicio de este largo trayecto tuve un gran maestro: el doctor Jorge Abraham Hazoury.

Puedo decir que tengo toda una vida en el Inden, aprendiendo que cada día trae sus propios afanes y que debemos dar lo mejor de nosotros mismos en cada cosa que realicemos.

El hospital ha impactado de manera trascendental el ejercicio de mi profesión, permitiénDRA. JUANA REYNOSO

dome la formación acorde a los tiempos y se-

MÉDICO DIABETÓLOGO NUTRICIONISTA

gún las necesidades de una sociedad que se

25 años en el Inden

mantiene en constante cambio. Esta es una

Haber realizado la especialidad y crecido de la mano del Inden fue un peldaño importante en mi

día tras día.

Institución que se va renovando y creciendo carrera y una gran satisfacción. El doctor Hazoury me nombró encargada de Internamiento en enero de 1997, posición que ocupé hasta 2018. En 2003 me nombra coordinadora de la Residencia

El principal aporte de Inden en la sociedad está

Médica de Diabetes y Nutrición, y ostenté ese cargo hasta junio de 2020. El mismo doctor me

en el servicio de salud con calidad que ofrece

nombró presidenta de la Sociedad Dominicana de Diabetes, y estuve en la posición por dos perio-

a los pacientes diabéticos de escasos recursos,

dos. También me desempeñé como encargada de Emergencia del Inden por un año.

proporcionándoles medicamentos a bajo costo, y en la formación de profesionales a través

Desde 1994, participé en todos los comités de organización para la celebración del mes de

de las residencias en Diabetes y Nutrición y en

agosto y Día Mundial de la Diabetes. Mi paso por el Inden ha sido gratificante y satisfactorio.

Oftalmología, así como la especialidad en Pie Diabético.

93

LIC. GLORIS MOQUETE ENCARGADA DE LABORATORIO 39 años en el Inden En el Inden he tenido la oportunidad de crecer como profesional, aprender y ayudar. Me siento a gusto en la institución. Me he dedicado siempre con lealtad y profesionalidad al trabajo, lo hago con dignidad y amor hacia los demás. ¡Cuán agradecida estoy de Dios y de este hospital por mantenerme aquí colaborando con el mismo respeto desde el primer día!

El hospital aporta todo para el paciente, en cuanto a consultas, estudios y medicamentos. Nadie se va sin su insulina o el medicamento que necesite. Lo principal para el Inden es asistir al paciente, con o sin dinero, por lo que tengo la satisfacción de decir que lo que el Inden aporta no tiene límites. Quien llega al hospital, se identifica con nuestro personal administrativo, siente el trato humano y eso se extiende en nuestros médicos. ¡Son tantos los esfuerzos que hace el hospital para mejorar la atención integral del paciente!

LIC. GUARIONEX BRITO HERNÁNDEZ AUDITOR GENERAL 25 años en el Inden Como institución de bien social, el Inden tiene un gran valor que radica, básicamente, en la humanización legada por cada uno de sus fundadores a los pacientes que asisten a nuestro hospital.

Al momento de ser elegido para trabajar en el Inden pensé que quizás lo haría por unos pocos años, pero al conocer el equipo que conformaDRA. DANIANA PERDOMO

ban sus fundadores - el doctor Jorge Abraham

ENCARGADA DEL ÁREA DE CONSULTA DE DIABETES.

Hazoury Bahlés, doña Mercedes Toral de Ha-

8 años en el Inden

zoury, el doctor Víctor Perrotta, Sor Eutimia Urrutia y doña Consuelo Mejia de Van Der Lin-

El Inden es como la vida misma, existen experiencias nuevas cada día, un aprendizaje constante. Es un lugar

de - mi vida cambió para bien, sobre la base de

donde la humanidad existe, la vida del paciente importa. Amo la obra que se realiza en el Inden, dirigida a todos,

vivir para servir.

especialmente a los más necesitados, la educación constante del paciente con diabetes y su entorno.

Agradezco a Dios el privilegio de laborar por El Inden es mi casa, donde me formé para tratar y/o prevenir la diabetes y prevenir sus complicaciones. Como

todos estos años con un equipo de seres hu-

el aprendizaje nunca termina, aún continúo aprendiendo, ahora desde el ámbito de la enseñanza, porque el que

manos profesionales de todas las áreas que

enseña aprende dos veces. Desde que estoy en el Inden llevo una vida más saludable para prevenir la diabetes en

me ha permitido crecer profesional y personal-

mi y también para poder ayudar más al paciente predicando con el ejemplo.

mente. He colaborado también con ellos para que cada día, cada centavo que ingresa a esta

El valor del hospital para la sociedad radica en su rol de ayudar a los más necesitados y en la lucha contra la diabetes, educando a la población, tanto diabética como aquella que tiene riesgo de padecer diabetes.

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institución sea bien administrado.

MARIO FLORIMÓN ROSARIO MENSAJERO - SECRETARIO 38 años en el Inden En 1984 fui contratado por el ingeniero Abraham Hazoury para trabajar con quien fuera nuestro fundador, el doctor Jorge Abraham Hazoury, del cual aprendí mucho, cada día nos enseñaba algo. El Inden ha sido parte de mi vida, al igual que para muchos pacientes.

Después de muchos años trabajando como mensajero con el doctor Hazoury tuve un accidente en el cual se me fracturó una pierna en siete partes. Estando en un hospital de San Francisco de Macorís, el doctor Hazoury me mandó a buscar en una ambulancia, no sé cómo se enteró. Me trasladaron al Centro Medico UCE y allí me esperaba su hijo, el doctor Ricardo, quien me dijo que su papá le había encargado ayudarme en lo que pudiera. Al otro día, el doctor Hazoury fue a verme y me dijo: ´Ponte a comer que pronto te operarán´. Cada vez que recuerdo esas palabras no puedo contener las lágrimas”.

MATILDE TIBURCIO CONSERJE 14 años en el Inden Me siento muy bien en el Inden, agradecida de Dios y los jefes que me han permitido trabajar aquí todo este tiempo. Hago mi trabajo con gusto y con amor. El hospital es muy valorado por la buena atención que le dan a los pacientes y ninguna persona se va sin que le atiendan, aunque no tenga dinero. Nunca olvidaré que el mejor de los tratos lo recibí de ese gran ser

“Nunca olvidaré el trato de nuestra Sor Eutimia Urrutia” .

humano, nuestra Sor Eutimia Urrutia.

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CLARA ESTELA OZUNA ENCARGADA DE AUTORIZACIÓN DE INSULINA 30 años en el Inden Mi experiencia en el Inden ha sido de mucho conocimiento. A través de los años he podido relacionarme con personas de diferentes estratos sociales, me ha motivado a ser mejor colaboradora y más empática con los pacientes que se acercan a mi ventanilla a facturar sus tratamientos. Este hospital fue la institución en donde empecé a laborar y me ha enseñado a ser más responsable, y a mantener en el día a día el compromiso con la atención a las personas, tanto los de afuera como mis compañeros.

“El Inden me ha motivado a ser mejor colaboradora, más empática”.

DRA. CYNTHIA CUNILLERA MÉDICO ADJUNTO DEL DEPARTAMENTO DE OFTALMOLOGÍA 29 años en el Inden Soy parte del Hospital de la Diabetes desde sus inicios. Soy hermana mayor de una paciente diabética tipo 1, a la que llevo 9 años, y que debutó a los 2 años de edad. Su primer médico fue el doctor Hazoury. El Inden tenía de nacido lo que mi hermanita tenía de diabética, ella cumple 52 este año, a Dios gracias, en maravilloso estado de salud. Muchas veces, antes de iniciar mis estudios de medicina, iba con mi mamá a llevar a mi hermanita a consulta.

Siempre quise ser médico.Inicié mis estudios en la Universidad Pedro Henriquez Ureña y tan pronto terminé y concluí mi pasantía de ley, me fui a España a hacer Oftalmología en la Clínica Nuestra Señora de la Concepción/ Fundación Jiménez Díaz, gracias al doctor Stern quien venía de vuelta y me abrió puertas para poder acceder a la residencia como becaria.

Una vez de vuelta, fui reclutada para trabajar en el departamento de Oftalmología, a la vez que se iniciaba el programa de residencia en Oftalmología y allí recibimos la primera generación de Oftalmólogos Inden.

DR. ALFREDO POLANCO DEL ORBE JEFE DEL DEPARTAMENTO DE NEFROLOGÍA

El Inden ha sido una gran escuela para mí, tan-

17 años en el Inden

to de ciencia como de vivencias. He conocido grandes personas, he visto la fidelidad de mu-

El Inden es un centro donde se ve a todos los estratos sociales sin dis-

chos: doña Consuelito Van der Linde, el doctor

tinción, con el objetivo único de resolver el problema de quien lo requie-

Víctor Perrotta, Sor Euritmia Urrutia, ya en el

ra. Trabajar aquí ha sido fenomenal, mi mejor experiencia. He adquirido

cielo con el doctor Hazoury y, sabrá Dios, ar-

muchos conocimientos en el ámbito de la diabetes, la enfermedad renal

mando algún centro para ángeles diabéticos

diabética y la vida misma.

allí en el Paraíso. He visto evolucionar el Inden desde los primeros telemaratones hasta el día

Al llegar a este centro, que me recibió con los brazos abiertos, sentí que

de hoy. Me siento honrada y orgullosa de for-

había llegado a mi casa. Me siento tan agradecido por eso que no tengo

mar parte de esta gran familia.

como describirlo.

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DR. EDGAR DANILO CADENA BARRANCO JEFE DEL DEPARTAMENTO DE CARDIOLOGÍA 7 años en el Inden Mi experiencia a lo largo de mis años en el hospital la describo como una de las mejores oportunidades de crecimiento, en un ambiente familiar, rodeado de personas con muy buenos valores. Ha impactado mi ejercicio profesional y mi vida personal en forma de lealtad, compromiso y dedicación. El principal valor del Inden es tratar a cada ser humano, sin importar clase social o etnia.

DR. JESÚS ROSARIO PAULINO JEFE DEL DEPARTAMENTO DE GINECOLOGÍA Y OBSTETRICIA 19 años en el Inden Mi experiencia en el Inden ha sido muy gratificante, de mucha satisfacción. Me ha dado las herramientas necesarias para desarrollar mi capacidad como profesional de la ginecología y obstetricia.

Aquí en el Inden me di cuenta de que, por ser diabético, un paciente quirúrgico no tiene necesariamente que infectarse. Si está bien controlado y manejado los pacientes evolucionan igual, sea diabético o no diabético.

El hospital también ha hecho un gran aporte al dotar al paciente de conocimiento, educación y DR. FEDERICO GÓMEZ

manejo de la patología.

CIRUJANO OFTALMÓLOGO 30 años en el Inden Mi experiencia en Inden ha sido gratificante, tanto en el sentido personal, como en lo profesional. He podido compartir con compañeros de trabajo con una alta calidad humana y de servicio, brindando nuestro trabajo a las personas más necesitadas. Esto nos ha hecho crecer como personas y nos ha

“Una experiencia gratificante”.

dado experiencia para tratar las enfermedades tanto a nivel hospitalario, como privado.

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La obra del doctor Jorge Abraham Hazoury Bahlés continúa y sigue creciendo, porque contagió a mucha gente de la pasión y lucha contra la diabetes.

Su legado de amor y entrega vive, es grande y firme.