Benemérita Escuela Normal ‘’Manuel Ávila Camacho’’ SITUACIONES Y TENDENCIAS EDUCATIVAS ACTUALES
Licenciatura en educación preescolar ADECUACIÓN CURRICULAR Maestra: Aneli Galván Cabral Alumnas: Gabriela Noriega Cid Arely Tiscareño Caldera Diana Susana García Ramos Cuarto semestre 14 de junio de 2018
“SITUACIONES Y TENDENCIAS EDUCATIVAS ACTUALES” El tema de este ensayo tiene como propósito conocer las pedagogías que han influido en la historia de la educación y de esta manera observar cómo es que han impactado en la educación actual, además, analizar qué podemos rescatar de ellas para llevarlo a cabo en nuestra labor docente y enriquecerla cada vez más. En este documento se presenta un análisis de la corriente pedagógica liberadora, contrapuesta con la educación actual y la política visualizada en el acuerdo de la OCDE para la mejora educativa. Todo ello con el propósito de exponer al lector un contraste entre las diversas políticas y su aplicación en la actualidad, pretendemos que con ello se visualice la influencia que impacta en el interior de las aulas y que se observe cómo el proceso trasciende hasta la sociedad. El trabajo se conforma de ésta introducción, un desarrollo en el que se presenta el análisis y se argumenta con diversos exponentes del tema tratado, como Spranger, Freire, Barriga, Meirieu, entre otros, visualizados durante el curso de “Teoría pedagógica”, también se incluye una conclusión donde se sintetiza el enfoque de nuestro documento, conjuntamente se presenta una propuesta para implementar en las aulas, todo ello aunado a la educación libertadora y asimismo enfocado a la mejora educativa. La propuesta fue diseñada con los referentes analizados, enfocada al ámbito de la lectura, debido a que el principal exponente “Paulo Freire”, la visualizaba como una herramienta para leer el mundo y obtener la libertad. Entre los conceptos centrales de nuestro análisis, se encuentran: libertad, sociedad, realidad, educador, concientización, reflexión, educación, dialogo, inclusión, educando, contexto y pensamiento. La educación y la enseñanza nos hacen ver y comprender el mundo con distintos ojos, provocan actitudes críticas y comprometidas con la realidad, generar compromisos, nos permiten tener una visión de desarrollo, ser reflexivos, generar actitudes y personalidades, practicar valores en la ciudadanía, creación y recreación de la cultura,
entre otras acciones muy importantes para el progreso de una sociedad a lo largo de toda la vida. Los individuos informados, consientes y participativos fungen un papel importante para el desarrollo de distintos ámbitos, para lograrlo se debe poner en práctica la educación formal y la informal, con el objetivo de fomentar procesos educativos graduales para la evolución constante. En las escuelas, institutos, universidades y módulos, los conocimientos y las habilidades son desarrollados en los niños, jóvenes y adultos, siempre con el objetivo de desplegar el pensamiento de los estudiantes, enseñarles a pensar sobre diferentes problemas, desarrollar la creatividad, ayudarles en el crecimiento intelectual, emocional y en la formación de ciudadanos capaces de generar cambios positivos en la sociedad. A través del tiempo, han existido autores y pedagogos interesados por favorecer el desarrollo e impulso de la educación, a través de sus propuestas centradas en diferentes puntos de vista aportando ideas y explicaciones de los procesos de enseñanza y aprendizaje, los cuales están dirigidos a distintos aspectos, pero no dejan de complementarse. Estos autores han fortalecido y reformado la praxis educativa mediante la reflexión y el análisis de distintos sucesos que acontecen en este camino de educación, con teorías, métodos, estrategias, procedimientos, etc., que van mejorando y marcando distintos caminos en la propuesta educativa. Son consideradas por Contreras (1996) como: "Los campos, corrientes o discursos que expresan, líneas de fuerza en el pensamiento y/o en la práctica educativa". Estas corrientes describen, explican, conducen y permiten la comprensión de lo pedagógico ante las exigencias del contexto y pasan a ser referentes que modifican los contextos sociales y escolares. El concepto de educación desarrollado por Briseño (2009) es idealizado como un producto afortunado y esperanzador que resulta inevitablemente de la interacción humana. Desde su perspectiva, formar ha servido para transmitir y perpetuar valores, conocimientos y creencias.
Por otro lado, Paulo Freire define la educación como ‘’un proceso de conocimiento, formación política, manifestación ética, búsqueda de belleza, capacitación científica y técnica’’. Este autor es reconocido como uno de los pedagogos más influyentes de América Latina. Promovió una educación humanista dirigida a integrar al individuo a la realidad nacional. Freire en su definición de la educación en libertad, visualiza a esta como un proceso que está dispuesto a formar al hombre libre, así como al desarrollo de conciencia crítica, analítica y reflexiva. "La gran tarea humanista e histórica de los oprimidos: liberarse a sí mismo y liberar a los opresores" (Freire). Esto permite al hombre tomar una postura de acción y concientización. Este autor fue uno de los mayores y más significativos pedagogos del siglo XX. Con su principio del diálogo, enseñó un nuevo camino para la relación entre profesores y alumnos. Sus ideas influenciaron e influencian los procesos democráticos por todo el mundo. Fue el pedagogo de los oprimidos y en su trabajo transmitió la pedagogía de la esperanza. Esta corriente pedagógica en la que nos centraremos, surge en el contexto histórico matizado por las ideas nuevas y revolucionarias que conmueven América Latina en los años sesentas. Esta década constituyó un momento importante en la vida de Freire, dado por las transformaciones económicas del país, las que a su vez provocaron aumento en las tensiones sociales, culturales y toda una serie de expresiones sociales de resistencia y oposición. Fue precisamente este contexto de movimientos ideológicamente diversos lo que llevó a Freire a su teoría basada en una educación liberadora, que permitiera un contacto directo entre el educando y el medio ambiente. Esta corriente se centra en generar bases para una nueva pedagogía oponiéndose a la tradicional, a través de técnicas para la enseñanza de la lectura y escritura, busca la reflexión, el pensamiento, cambio del individuo con la naturaleza y sociedad. El objetivo primordial es liberar a la persona, no encerrarla ni someterla en un sistema tradicional. Visualizamos la pedagogía liberadora como el cambio, siendo una de las finalidades esenciales, la de transformar el mundo donde se contempla el acto educativo como acto
del conocimiento. Otras de las características que rescatamos del método de Freire son su movilidad y capacidad de inclusión. Por ser una pedagogía basada en la práctica, está sometida constantemente al cambio, a la evolución dinámica y reformulación. Si el hombre es un ser inacabado, y este ser inacabado es el centro y motor de esta pedagogía, es obvio que el método tendrá que seguir su ritmo de dinamicidad y desarrollo como una constante reformulación. El educador y el educando se educan mutuamente mediante la interacción, el diálogo y el aprendizaje grupal, a partir de esto, se produce el conocimiento que le permite al individuo reflexionar y descubrir la realidad mediante el aprendizaje significativo y permanente. Consideramos importante el diálogo porque actúa como una esencia de la educación y práctica de la libertad. Compartir ideas y reflexionar en conjunto, nos permite cambiar nuestro pensar y estructura mental al enfrentarnos con pensamientos y diálogos críticos. Esto es algo que esta permeado en el modelo actual, sin embargo, no todos los docentes lo llevan a cabo en su práctica educativa. El educando mediante la interacción, el aprendizaje y la práctica se convierte en un sujeto capaz, en un investigador que busca sus propias herramientas y por consiguiente, su propio aprendizaje, un ser cooperador y participativo en la práctica activa que mientras aprende-enseña. Por otro lado, el rol del educador es ser un guía o facilitador de herramientas donde ambos sujetos actúan como compañeros. El saber siempre será compartido entre ambos y nunca debe pretender ser impuesto por el docente. “Inculcar las nuevas actitudes sin pasar por la reflexión, por el análisis, sin pasar por la conciencia, sin someterla a una libre elección, es transferencia de información.” (Kaplún, 1998). Cabe destacar también la importancia que tienen las familias como uno de los principales agentes de la educación, quienes en ocasiones no ponen verdadero interés por la educación de sus hijos, descuidándolos, haciéndolos prisioneros de vicios y antivalores que degeneran personalidades y sociedades. ‘’Etimológicamente el pedagogo es aquel que acompaña al niño, y me parece que lo que hoy en día les hace falta a algunos niños es estar acompañados, no dejarlos ahí donde están, sino escuchar sus dificultades,
comprender sus problemas y estar a su lado a lo largo de toda su escolaridad. Algunas familias lo hacían con sus hijos, y lo sigue haciendo, pero hay muchos alumnos para quienes este acompañamiento familiar no existe y para quienes me parece totalmente necesario que la escuela acometa esta tarea’’. (Philippe, 2007). Es por ello que mencionamos entonces, que la acción de educar no solo le corresponde a la escuela, sino también desde casa. Acompañar y guiar a los jóvenes para formarlos tanto en crecimiento intelectual como en el emocional, en la formación de ciudadanos participativos, con visiones para la mejora de la actual educación y sociedad, es trabajo colaborativo. En el documento de la OCDE (2010) se mencionan algunas recomendaciones para la mejora educativa en nuestro país. Entre ellas de manera general se aborda el propósito de reducir la desigualdad escolar “La desigualdad económica lleva a la desigualdad social, lo que conlleva a una trasmisión generacional de idénticas situaciones perpetuadas en el tiempo. No se tiene o se tiene educación de baja calidad porque se es pobre” (Camejo, 2018).
Si tomamos como referente a la pedagogía liberadora
encontramos que esta reducción hace referencia a la transformación, ruptura y cambio del ser humano, al decir que con ello se propicia que el individuo tenga acceso a una educación digna, con igualdad en derechos. Creemos que esto es muy importante, el hecho de brindar una educación inclusiva en la que todo ser humano tenga la oportunidad de ser educado, pues no hay que omitir que las condiciones socioeconómicas no deben ser un impedimento o ventaja para cualquiera que desee estudiar. Al ocurrir esta ruptura el ser humano regresa a su condición natural, y adquiere igualdad ante el acto educativo. En la actualidad; las leyes nacionales e internacionales protegen al individuo; todos tienen derecho a la educación, sin excepción alguna de religión, sexo, raza, entre otros. Freire desde ‘’Las cartas a quien pretende enseñar’’ (2004) dice que los seres humanos debemos aprender a leer no solamente la palabra, sino también leer el mundo, esto implica el desarrollo del conocimiento crítico, potenciar el pensamiento, favorecer la reflexión del individuo; actualmente es algo que se busca en los planes y programas de estudio, hacer que el niño sea consciente, no sólo brindar al alumno contenido cognitivo,
“Que la educadora haga que las niñas y los niños aprendan más de lo que saben acerca del mundo y sean personas cada vez más seguras, autónomas, creativas y participativas” (Sep, 2011). La forma en que algunos de los docentes lo ponen en práctica es a través del diseño de situaciones didácticas, proyectos, rincones, talleres, donde les impliquen desafíos, que formulen hipótesis, las comprueben, comuniquen información, expresen su opinión, propongan soluciones a problemáticas de su vida cotidiana, distingan, clasifiquen, expliquen, cuestionen el por qué y para qué de las cosas, comparen, trabajen en equipo, manifiesten actitudes favorables hacia el trabajo y la convivencia. Una parte indispensable que debemos conocer para ser personas críticas y formar alumnos críticos, conocedores y reflexivos, como lo menciona Freire ‘’es la preparación del sujeto para aprender, estudiar es en primer lugar un quehacer crítico, creador, recreador, no importa si yo me comprometo con él a través de la lectura de un texto que trata o discute un cierto contenido que me ha sido propuesto por la escuela o si lo realizo partiendo de una reflexión crítica sobre cierto suceso social o natural, y que como necesidad de la propia reflexión me conduce a la lectura de textos que mi curiosidad y mi experiencia intelectual me sugieren o que me son sugeridos por otros’’ (Freire, 2004) en ocasiones se pretende formar alumnos conscientes de lo que ocurre a su alrededor, sin embargo, nos estancamos en los mismos métodos, estrategias y técnicas de enseñanza que se utilizaban desde hace años, no planeamos actividades que sean significativas, en las que los niños investiguen, exploren, argumenten, formulen hipótesis, inclusive piensen más allá de lo banal, nos conformamos con actividades de pizarrón en las que el alumno sólo repite, más no interioriza o entiende en que situaciones puede utilizar este conocimiento, la tarea que se nos confiere actualmente, exige una forma crítica de actuar con la que desafiemos a nuestros alumnos día a día “forma disciplinada que tiene que ver, por un lado, con la competencia que la maestra va revelando a sus educandos, discreta y humildemente, sin alharacas arrogantes, y por el otro con el equilibrio con el que la educadora ejerce su autoridad segura, lúcida, determinada” (Freire, 2004) Se acentúa la importancia de que se ayude al educando a ser un crítico de su realidad, por lo tanto es más que indispensable que el docente sea un individuo capacitado, la OCDE destaca la importancia de que el educador se especialicé y se
prepare auténticamente para lograr una verdadera mejora en la educación actual. Al cumplir con ello el docente garantiza tener una formación que satisfaga las necesidades según el contexto “son precisamente los contextos cercanos a la experiencia cotidiana los que tienen sentido para él, los que despiertan su interés, los que favorecen una disposición positiva hacia el aprendizaje” (Rioseco, 2011) para realmente posibilitar que el alumnado reciba una educación basada en condiciones reales, las cuales visualiza fuera del aula y son significativas para él. Consideramos que como docentes es nuestro deber brindar experiencias relacionadas con la vida cotidiana del alumno, “el conocimiento es situado, es parte y producto de la actividad, del contexto y de la cultura en que se desarrolla y utiliza” (Barriga, 2006) . Es decir que las personas que practican el acto educativo necesitan brindar una enseñanza situada que realmente sea de relevancia social para el educando “contribuyen a la formación critica, responsable y participativa de los estudiantes en la sociedad” (SEP, 2011) además de que con ello se favorecen conocimientos actitudinales. El desarrollo del pensamiento nos permite a los seres humanos cuestionar la naturaleza de su situación histórica y social, para leer su mundo, para poder interpretarlo desde su realidad, no sólo dejarse llevar por las opiniones de las demás personas, por falsa información o como suele suceder al defender y opinar sin conocer, creen todo lo que se dice. El pensamiento nos permite relacionar toda la información que tenemos, reflexionar y actuar adecuadamente, Freire habla sobre ello desde una postura social y política “Sólo la conciencia crítica de nuestra responsabilidad social y política en cuanto miembros de una sociedad civil, no para sustituir las tareas del Estado dejándolo dormir en paz, sino aprendiendo a movilizarnos y a organizarnos para fiscalizar mejor el cumplimiento o incumplimiento, por parte del Estado, de sus deberes constitucionales, podrá llevarnos a buen término en el enfrentamiento de este problema. Sólo así podremos caminar en el sentido de un amplio diálogo en el seno de la sociedad civil, juntando sus legítimas representaciones y los partidos, progresistas y conservadores, con la idea de establecer cuáles serían los límites mínimos que podrían conciliarse con los intereses contradictorios de los diferentes segmentos de la sociedad” (Freire, 2004) actualmente los temas sociales, son vistos desde la educación no pretendiendo que los
alumnos tomen la misma postura del docente, sino que ellos comiencen a ser quienes tomen sus decisiones, con plena conciencia, sin dejarse llevar por la influencia del medio, el educador puede llevar a cabo distintas actividades en las que los alumnos tomen decisiones por ellos mismos, tomando en cuenta información que se les proporcione, cuando las niñas y los niños se enfrentan a situaciones que les imponen retos y demandan
que
colaboren
entre
sí,
conversen,
busquen,
prueben
distintos
procedimientos y tomen decisiones, ponen en práctica la reflexión, el diálogo y la argumentación, capacidades que contribuyen al desarrollo cognitivo y del lenguaje. En estas oportunidades, los alumnos encuentran grandes posibilidades de apoyarse, compartir lo que saben y aprender a trabajar de forma colaborativa. La participación del maestro consistirá en propiciar estas experiencias, Freire denota un intercambio dialogal entre educadores y estudiantes, en el cual ambos aprenden, cuestionan, reflexionan y participan en la búsqueda de significados. “Al incluir el enseñar del educador, incluye también por un lado el aprendizaje anterior y concomitante de quien enseña y el aprendizaje del principiante que se prepara para enseñar en el mañana o rehace su saber para enseñar mejor hoy, y por otro lado el aprendizaje de quien, aún niño, se encuentra en los comienzos de su educación” (Freire, 2004). Los planteamientos de Freire relacionados con el desarrollo del pensamiento están aún vigentes, para contar con seres humanos críticos, reflexivos y creativos. El acuerdo de la OCDE se enfoca centralmente en el docente y su formación, todas estas mejoras influyen en el proceso de aprendizaje del educando, no hay que olvidar que al educar con base a la realidad se pretende que el alumno sea un ser crítico y reflexivo, capaz de entender y transformar su entorno, no sin antes llegar a la concientización denominada por Freire como la transformación de las estructuras mentales, lo cual puesto en práctica favorece la transformación en sí mismo y por ende en la sociedad. Si bien, ahora tenemos avance en la educación, gracias al desarrollo de la ciencia y la tecnología, esto ha exigido la formación de un nuevo ser humano que sea mucho más crítico y reflexivo, poder tomar lo más benéfico, que los alumnos conozcan cómo funciona la tecnología. ‘’La misión principal de la escuela ya no es enseñar cosas, eso lo hace mejor la TV o Internet. La escuela debe ser el lugar donde los chicos aprendan a manejar
y usar bien las nuevas tecnologías, donde se transmita un método de trabajo e investigación científica, se fomente el conocimiento crítico y se aprenda a cooperar y trabajar en equipo‘’ (Tonucci, 2014). Esta herramienta es de gran utilidad para ser utilizada en el aprendizaje, clasificación de información y para poder comprender la realidad emergente, crear cosas y hacer planteamientos destinados a mejorar el entorno. En el documento analizado no se localiza al docente como único responsable para lograr un cambio, se enfatiza la importancia de cada uno de los actores educativos, líderes políticos y universitarios, incluso a los líderes del sector privado y de la sociedad civil con el propósito de crear una coalición orientadora, para que el país realmente tenga un incremento en condiciones económicas y sociales guiadas por docentes motivados y calificados. Freire también subraya la importancia de la sociedad por el simple hecho de que el educando forma parte de ella, y al cambiar su realidad también trasciende a la de los otros individuos. El ser humano indaga constantemente acerca de su realidad, examina con el pensamiento todo lo que lo rodea, y en consecuencia interviene su contexto y propone mejoras. Cada vez se hace más necesario contar con individuos críticos y creativos que comprendan su mundo, lo cuestionen y persigan lo perfectible, es indispensable la reflexión crítica sobre los condicionamientos que el contexto cultural ejerce sobre nosotros, sobre nuestro modo de actuar, sobre nuestros valores. La influencia que practica sobre nosotros, nuestras dificultades económicas, cómo pueden obstaculizar nuestra capacidad de aprender aunque carezcan de poder para "aborricarnos". (Freire, 2004) Pensar hace libres a los seres humanos para opinar, criticar constructivamente, proponer, crear; en definitiva, el pensamiento es la reafirmación de la existencia de los individuos. Tanto la postura del acuerdo de la OCDE como la postura de esta pedagogía, hacen alusión a un docente que es vital para que el alumno aprenda, sin embargo, hace hincapié en un docente que actúa como un mediador o facilitador de aprendizaje que debe de encontrarse totalmente preparado, es decir, necesita conocer los intereses y necesidades de sus alumnos, con una tarea tan compleja “enseñar a pensar a los alumnos”.
Freire le da énfasis a la lectura para ser crítico de nuestra realidad, que es algo que en los últimos años, se le da importancia pues existen muchas campañas de lectura en las escuelas, para que los alumnos penetren en el mundo de la lectura por mero gusto, pero algunos de los alumnos no se interesan por los libros que se les dan por el hecho de que lo ven como una obligación más que por interés de conocer, de recreación, de aprender, debemos empezar por adquirir el gusto desde nosotros como docentes para después promoverlo entre nuestros alumnos, pues la lectura es una actividad que nos brindará oportunidades nuevas e interesantes para nuestra vida, leer es una opción inteligente, difícil, exigente, pero gratificante. Nadie lee o estudia auténticamente si no asume, frente al texto o al objeto de la curiosidad, la forma crítica de ser o de estar siendo sujeto de la curiosidad, sujeto de lectura, sujeto del proceso de conocer en el que se encuentra. Leer es procurar o buscar crear la comprensión de lo leído; de ahí la importancia de la enseñanza correcta de la lectura y de la escritura, entre otros puntos fundamentales. Enseñar a leer es comprometerse con una experiencia creativa alrededor de la comprensión. Y la comprensión será tanto más profunda cuanto más capaces seamos de asociar en ella los conceptos que emergen en la experiencia escolar procedentes del mundo de lo cotidiano. (Freire, 2004) Un ejercicio crítico siempre exigido por la lectura y necesariamente por la escritura es el de como pasar fácilmente el pasaje de la experiencia sensorial, característica de lo cotidiano, a la generalización que se opera en el lenguaje escolar, la lectura de la palabra, haciéndose también búsqueda de la comprensión del texto y por lo tanto de los objetos referidos en él, si leemos solo por leer será lo mismo que no leer ningún texto. Proponemos que cuando el docente haya adquirido el gusto por la lectura comience a promoverlo con sus alumnos dentro de su salón de clases, no sirve que haya campañas de lectura con libros previamente seleccionados que sean impuestos y que el docente ni los alumnos los lean o la lectura que se realice sea meramente mecánica, de acuerdo con esta pedagogía el niño guiado por el docente puede ser capaz de pensar y decidir qué es lo que le interesa leer, con el paso del tiempo el niño se comenzará a interesar más por diferentes tipos de lecturas, entenderlas poco a poco, el lector puede pensar
críticamente sobre un texto únicamente si lo ha entendido, debemos lograr que nuestros estudiantes aprendan a leer críticamente. Formar personas con una actitud crítica frente a la vida y al mundo es el reto en la sociedad de la información y del conocimiento. La lectura crítica y el pensamiento crítico son construcciones culturales que necesitan educación, esfuerzo y cultivo, la lectura crítica nos permite acceder al pensamiento crítico, el cual cumple un papel fundamental en la formación de ciudadanos conscientes y responsables. Además de la lectura las aulas debieran convertirse en espacios de diálogo, descubrimiento y reflexión más que en espacios en los que el docente habla sin permitir que los alumnos intervengan o en los que se desarrollan actividades que no promueven la participación o pensamiento de los alumnos, se debe retar a los estudiantes, guiarlos al conocimiento que les permita descubrir el punto de vista de discursos que pretenden reflejar la realidad, el alumno crítico debe ser capaz de construir su interpretación y formar un punto de vista cada vez más crítico de su realidad, que sea transformador y constructor de su conocimiento, se liberare de las supersticiones y creencias que lo atan a la ignorancia. En conclusión, esta visión pedagógica tiene muchos aciertos a rescatar, en primer lugar, busca crear una sociedad que sepa dialogar, pensar, reflexionar, saber lo que hace y trabajar libremente y en conjunto, aunque actualmente se enfrentan grandes retos y desafíos tanto para docentes, alumnos y sociedad en general. En la búsqueda de desarrollar el pensamiento de los seres humanos, los esfuerzos se dirigen hacia una educación liberadora que los oriente a una mejor comprensión entre ellos mismos, a expresar sus ideas, opiniones y reflexiones consideradas como importantes para la solución de diversos problemas, se persigue la incorporación activa de los ciudadanos en el devenir de su sociedad como promotores de su propio bienestar. Es importante recordar que para que exista desarrollo del pensamiento, todos los seres humanos han de tener la oportunidad, la libertad de expresar sus ideas, opiniones, propuestas y que a pesar del disenso que pueda surgir, se les respete su pensamiento.
La educación liberadora es un ejercicio de desarrollo del pensamiento. Implica criticar la forma de pensar de los seres humanos, de cómo reflexionan, procesan información, relacionan contenidos, resuelven problemas y crean cosas nuevas. En este orden de ideas, ha de existir un nuevo tipo de educador más humano y receptivo a los planteamientos e ideas de los educandos. El educador ya no es sólo el que educa sino aquel que, en tanto educa, es educado a través del diálogo con el educando, quien, al ser educado, también educa. Así, ambos se transforman en sujetos del proceso en que crecen juntos y en el cual “los argumentos de la autoridad” ya no rigen. Proceso en el que ser funcionalmente autoridad, requiere el estar creciendo con las libertades y no contra ellas. Por lo tanto, analizamos que en ambos documentos se encuentra permeado el propósito de educar a un alumno que sea capaz de pensar y actuar por sí mismo ante cualquier circunstancia, al emplear su concientización y criticidad para que antes de formarse como un sujeto académico lo haga como ser humano capaz de actuar ante cualquier situación.
Bibliografía Barriga, F. D. (2006). Enseñanza situada. México: McGraw-Hill. Camejo, R. R. (11 de Junio de 2018). La educación: elemento clave en la reducción de la pobreza y la desigualdad. Obtenido de http://www.unescoetxea.org/dokumentuak/CursoODS2015_18_educacionreduccionpobreza.pd f Freire, P. (2004). Cartas a quien pretende enseñar. Buenos Aires: Siglo veintiuno. Kaplún, M. (1998). Una Pedagogia de la comunicacion. Madrid: EDICIONES DE LA TORRE. OCDE. (2010). Acuerdo de cooperación México-OCDE para mejorar la calidad de la educación de las escuelas mexicanas. : OCDE. Philippe, M. (2007). Entrevista “Es responsabilidad del educador provocar el deseo de aprender”. Rioseco, M. (2011). La contextualización de la enseñanza como elemento facilitador. SEP. (2011). PLAN DE ESTUDIOS 2011. México: SEP . Sep. (2011). Programa de educación preescolar, guia de la educadora. México: Secretaría de educación pública. Tonucci, F. (2014). "La misión principal de la escuela ya no es enseñar cosas". Italia. Otros recursos: Paulo Freire: el legado del pedagogo brasileño http://www.resumenlatinoamericano.org/2016/05/04/pensamiento-paulo-freire-el-legado-delpedagogo-brasileno/